Capítulo 1: Time is on my side

El sudor corriendo por mi frente lentamente, cayendo constantemente al suelo,

Afrodita junto con casi todos sus hijos hicieron muecas de asco ante lo dicho por el libro, mientras que Piper y Silena ponían los ojos en blanco ante la actitud de su madre y hermanos/as.

humedeciendo aún más la tierra tras la torrencial tormenta que hay en este momento. Una tormenta provocada por el dolor, la pérdida, la desesperación, y mi locura.

—Oh eso es profundo— Apolo no pudo evitar comentar.

Mi pelo, negro como lo tenía mi padre, meciéndose violentamente con los desaforados vientos. Como si hubiese tomado vida propia.
Este comentario hizo que algunos voltearan a ver los dioses masculino con cabello negro, reduciendo así la lista de quién podría ser el padre de chico.
El pelo con el cual ellas sabían jugar y burlarse de mí, ya que era indomable. Llegando fácilmente hasta mi cintura ahora. Descuidado y sucio. Ya no hay nadie que juegue con él.

Artemisa dio un bufido ante esto.— No es más que un asqueroso mujeriego.— dijo lo que gano la atención de todos presentes.

—No lo escucharon, dijo "ellas" en plural, por lo tanto está con más de una mujer.— Aclaró la diosa de la luna, a lo cual sus cazadoras(Exepto Thalia la Cual tenía los ojos entrecerrados, llámalo instinto pero algo dentro de ella le decía que algo muy malo va a pasar) estuvieron de acuerdo con su diosa patrona, Y al igual que ella estaban indignadas de que un cerdo asqueroso jugará con el corazón de unas doncellas.

Mi piel, la que alguna vez fue de un color bronceado natural, ahora es pálida. Las cicatrices recibidas por mis enemigos a través de los años se mezclan con las auto infringidas que me hice para despertar de esta eterna pesadilla. De más está decir que fue en vano, pues no funcionó, aún sigo aquí. Tranquilamente uno puede ver que mi cuerpo no tiene cicatrices, sino que las cicatrices tienen un cuerpo.

—El cuerpo de un Guerrero— sentenció Ares/Marte con un raro gesto de respeto hacia el protagonista del libro, gesto que fue imitando por hijos ya sean griegos o romanos.

Mis ojos verdes, has perdido su brillo, ya no hay diversión o felicidad en ellos. La expresividad que cuando joven una vez mostraban, han muerto. El verde en el que ellas se perdían por largos minutos, ha palidecido. El dolor se puede divisar en ellos. La pérdida es lo único que reflejan ahora.

Ante esa descripción Poseidón no pude evitar palidecer, tenía una cierta idea de quién era el protagonista de este libro, y esperaba que su suposición sea equivocada de lo contrario es muy probable que Tritón este tomando su lugar cómo Dios del mar,dentro de poco debido al infarto que está por tener.

—Por favor que no sea quien creo que es— Internamente Poseidón rezo a cualquiera divinidad superior existente, algo irónico teniendo en cuenta que el era un dios.

Los labios con los que besaba sus frentes, sus mejillas coloradas, sus narices respingonas, sus bocas suaves y sus estómagos, se han vuelto secos. No tengo a nadie con quien usarlos para demostrar mi amor. El cariño de un novio, un amante, un esposo o un padre.

—¡Cómo alguien puede escribir una historia de Amor tan trágica!—La diosa del amor exclamó con lágrimas en los ojos, junto con sus hijos/as,(Incluso Piper y Silena tenía lágrimas bajando por sus hermosos ojos caleidoscopio y azul cielo respectivamente) tanto Griegos como Romanos.

Mientras que el resto simplemente rodó los ojos y pensaron que la diosa del amor junto con sus hijos estaban siendo muy dramáticos.

Mis manos que una vez fueron fuertes, ahora son prácticamente un mísero reflejo de ello. Mis delgados y largos dedos que acariciaban sus caras, jugaban con sus cabellos para fastidiarlas a mi diversión, sentían las pataditas que mis hijos daban en los ombligos de sus madres, ahora están quemadas por el fuego y roídas por los monstruos con los que he peleado.

Artemisa tuvo que morderse la lengua para no comentar, "Se lo merece", incluso si era cierto, algo dentro de ella le decía que no debía juzgar a este muchacho antes de tiempo.

A la vez que se tomaba la cabeza para frenar el dolor del cual padecía desde la llegada del libro, lo que la deidad lunar desconocía era el hecho que no era la única que padecía de dicho dolor.

Los músculos de mi cuerpo, que hace tiempo eran nervudos por no tan grotescos, brindándome la anatomía estilizada de un nadador profesional,

Listo! Solo eso bastó para que piel de Poseidón fuera tan pálida como la de su hermano mayor, mientras trataba de sujetarse con fuerza a los apoya brazos de su trono en un intento de no caer de este, y a la ves se tomaba en pecho cuando sintió que se corazón se detuvo por unos milisegundos.

están cansados, duelen, arden, piden a gritos que descanse, sin fuerzas se aferran a mi espada, en un último esfuerzo para acabar con ella.

—Vamos! Hazlo, acabala, quiero ver sangre!— Ares exclamó, esperando ver una escena sangrienta. Honestamente ya se estaba aburriendo, de todo este drama, el quería acción.

Los dioses en cuestión soltaron un gemido de exasperación ante el comentario del dios de la guerra, miéntras Hera se tapaba la cara con vergüenza mientras se preguntaba en que se había equivocado con Ares.

Talvez debí ser más estricta en el pasado— la reina de los cielos pensó recordando toda la libertad que le concedió al dios de la Guerra en el pasado.

La sensación de metal en el interior de mi boca, me indica el sobreesfuerzo al que he forzado a mi cuerpo. Mis pulmones lloran, quieren aire que yo no puedo darles, Desangrándose desde adentro, empeorando mi estado de salud. Siento como el pecho me oprime, la sangre sube por mi garganta y escapa a borbotones por mi boca. Mi enfermedad se agrava, me he dejado estar

Apolo con sus hijos no perdieron tiempo y comenzaron a realizar notaciones sobre los distintos síntomas de esta enfermedad.

Mientras tanto el dios del mar ya comenzaba a formular distintos planes para proteger a su hijo; dichos planes iban desde, arrastrar a Percy hacía una cueva en el momento que entre al mar, hasta de encerrar a su hijo semidiós en el calabozo de su palacio sin importarle los reclamos de su esposa e hijo Tritón.

, la tristeza me comía, el odio no ayudaba tampoco. Pero no tengo a nadie que me espere y me reciba con una sonrisa y los brazos abiertos en casa.

La diosa del hogar Ahora mismo se encontraba derramando lágrimas de tristeza, no podía creer que él no tuviera a nadie quien lo recibes en casa, Hestia ahora mismo quería entrar en el libro solo para abrazar al protagonista del libro y decirle que ella está ahí para el... Cuando la diosa de la familia se dió cuenta de su línea de pensamientos su rostro adquirió un lindo color rosa en sus mejillas, mientras que las llamas de la hoguera en la sala del trono se pintaron de un suave color carmín.

Q-Que es este sentimiento, se siente tan cálido y doloroso a la vez— Hestia pensó para sí misma mientras una se sus manos se colocaba cerca de su corazón, mientras que la otra fue directo a su cabeza para calmar el repentino dolor de cabeza que padecía.

La persona que tengo frente a mí, de rodillas ha ayudado en eso. Y ahora lo pagará.

Ares prácticamente estaba saltando en su trono como un niño pequeño en dulceria haciendo ver por fin una escena sangrienta.

-Sabes, por mí podrías haber matado a quien se te hubiese dado las ganas. Podrías haber torturado, manipulado, jugado, y asesinado a quien tu corazón indicase. Pero nunca tendrías que haber tocado un pelo a mi familia-

—Es leal a su familia... Me agrada— para sorpresa de todos la reina de los dioses dijo, obteniendo un asentimiento de Hestia.

-Eres un estúpido, cabeza de algas,

¡PUM!

Fue el sonoro golpe que se escuchó en la sala del trono, producto de que el dios del mar se desmayara, miéntras si tono de piel estaba tan pálida como la de Hades.

(El pobre dios del mar todavía tenía la esperanza que el protagonista de este libro no sea su hijo... Para su desgracia no fue el caso.)

Mientras tanto los mestizos al escuchar ese apodo inconscientemente centraron su mirada cierta hija de Athena la cual se removía con incomodidad.

podrías haber sido lo que quisieras, pero elegiste a esas perras-

-Esas "perras" como tú dices, eran mis amores, amores que tú te encargaste de eliminar una a una-

-Y orgullosa de ello. Ahora qué me harás Jackson?

— ¡¿QUE?!— gritaron todos los amigos del dueño de ese apellido, más de uno de veía bastante preocupado y uno que otro ya había desplegado su arma inconscientemente.

Estoy a tu merced. Has los que quieras, total nadie te espera en tu casa. Eres un perdedor, siempre lo fuiste y siempre lo serás-

-Puede que lo sea, pero tú también lo eres ahora. Desde el primer momento que comenzaste todo este teatro. Realmente estás loca. Eres como un animal que quería que le presten atención a cualquier precio-

El dios de la poesía nego con la cabeza —no incluso los animales tienen más clase que ella— comentó antes de volver a sus notas sobre la enfermedad del protagonista.

-Y si así era? Logre lo que buscaba. Los olímpicos han caído

Esa declaración hizo que todos se congelarán en estado de shock, mientras que dos personas tenían sonrisas de satisfacción.

, los semidioses también.

Todo en la sala del trono se volvió un caos los semidioses tanto Griegos como Romanos estaban pálidos y temblando de miedo, los mayores trataban de calmar a sus hermanos menores los cuales eran los más aterrados.

Mientras tanto, todos los dioses con hijos en ambos campamentos los miraban con preocupación, Afrodita sin dudarlo dos veces bajo de su trono y abrazo a todos sus hijos sin excepción ocasionalmente les decía palabras de aliento como: "todo estará bien", "lo solucionaremos" o "yo me encargaré que nadie le haga daño".

Está acciones fue imitada por Apolo, Hermes, Deméter, Hefesto y Athena (para sorpresa de algunos)

Pero lo más importante, tus preciadas esposas fueron asesinadas felizmente por mi mano. Y tú no pudiste hacer nada para impedirlo. Sus caras cuando las apuñalaba por detrás eran de comedia. Y el llanto de esos molestos niños, como disfruté en hacerlos silenciar-

Inconscientemente todas las mujeres presentes empezaron la liberar una gran cantidad de instinto asesino haciendo que el resto temblarán de miedo, incluso los dioses se vieron intimidados por el aura de muerte la cual era comparable a la del mismo Hades o incluso al maldito tártaro.

-Perdí a mis primeros amores por "rescatarte", perdí a mis novias por una guerra en la cual ideaste y fuiste parte, y perdí a mis esposas e hijos porque no soportaste el hecho de perder. Me das lástima. Y es por eso que no te estoy matando Chase. Te estoy sacrificando. Adiós, chica sabia- declaré en un susurro.

...

...

...

...

...

...

Silencio.

Eso era lo único que había en la sala del trono ante lo leído en el libro.

Lentamente y en sincronía todas las miradas fueron dirigidas hacia la actual líder de la cabaña 6, notando levemente como su piel bronceada había palidecido considerablemente y una mirada de miedo y horror cruzó sus facciones.

—A-Annabeth a-acaso tu...?— con la voz entrecortada y controlando sé A sí misma para no cometer una locura Thalia Grace miro a la chica a la cual consideraba su hermana menor, ya la cual se encargó de proteger durante todo su viaje hacia el campamento mestizo, y por la cual había entregado su vida.

—...— la hija de la sabiduría simplemente desvío la mirada, mientras te seguía removiendo incómoda en su asiento, gran parte de ella quiso simplemente levantarse y comenzar a defenderse diciendo que eso no era cierto, y que todo eso era mentira, pero algo la detenía.

No sabía qué demonios le estaba pasando era como si su cuerpo o la mayoría de este no le respondiera, a lo cual lo único que puedo hacer es desviar la mirada Aunque sintió una leve punzada de dolor al ver la traición en los ojos de Thalia.

Mientras bajaba mi espada en un arco mortal hacia la corona de su cabeza. Hundiéndose suavemente, separándola en dos. La sangre saliendo a chorros, sus ojos desorbitados, y su boca moviéndose erráticamente. Levantando mi pie izquierdo hacia su pecho, usándolo a modo de palanca para retirar mi espada de ella.

—Buen movimiento— habiéndose recuperado del shock al igual que algunos el dios de la guerra comento en señal de aprobación.

Mientras tanto los semidioses aún no salían de su sorpresa ante lo revelado, y comenzaron a ver con cautela a la Chase, pero aún así permanecieron en silencio sin querer realizar una escena dramática... Aún.

Ha terminado, ella pagó, pero yo aún estoy aquí. Realmente soy un perdedor. Las extraño mucho. Me decido a ir a verlas por última vez, antes de reunirme con ellas.

Ante esta última línea algunas de las féminas presentes en la sala del trono se llevaron inconscientemente una mano en directo a sus corazones, sintiendo como el miedo invadía estos sin saber el porqué.

Me siento cansadamente en el barro, solo, rodeado de placas de cemento y flores. El silencio me envuelve como lo hace una telaraña a su víctima.

Los hijos de la diosa de la sabiduría y la propia diosa se estremecieron ante la mención de los malditos arácnidos.

La paz del lugar me inunda, haciéndome suspirar. Las veo allí, tiesas, aguantando todo lo que el clima les manda. No se inmutan, siguen firmes, como guardias siempre alertas. Alcanzo mi mano a una de ellas y la acaricio, el último guardián incorporado de este lugar. Sus flores recién depositadas, adornando su vigilancia eterna. Mirándome pacíficamente en su descanso temprano. Inconscientemente dejo escapar un sonido rasposo de mi garganta.

-Les he fallado a ustedes también. No pude llegar a tiempo. Y por eso, las he perdido. Espero que cuando nos volvamos a ver, me puedan perdonar. Thalia, Andrómeda-

Los ojos azules pertenecientes a la hija de Zeus se abrieron cómicamente al mismo tiempo qué la sangre se disparó inmediatamente hace sus mejillas teniendo las de un lindo color rosa.

La reacción del resto fue un tanto interesante por decir lo menos.

Artemisa y sus cazadora se habían quedado hechas piedra.

El rostro de Zeus se puso completamente rojo de la furia, no era un secreto de que el sobreprotegida demasiado a sus hijas Aunque El Dios del trueno lo negara.

Jason miro a su hermana con los ojos muy abiertos, mientras el shock la incredulidad eran notables en su rostro.

Los semidioses en sí no sabían cómo reaccionar, acaban de enterarse no solo que un hijo de Poseidón y una hija de Zeus estaban en una relación sino que también estos habían tenido descendencia.

Por lo cual lo único que pudieron hacer es quedarse mirando a la pelinegra con los ojos muy abiertos.

Bueno... Con la excepción de el hijo de Hermes, el cual no pudo evitar que una expresión de celos y Furia se presentará en su rostro, después de todo él también estaba enamorado de Thalía, Por lo cual ya estaba comenzando hacer planes en contra del protagonista del libro.

(Pobre iluso.)

No me responden. Me lo merezco. Les he fallado a todas ellas. Pero no me impide que me levante y alcance a cada una de ellas. Demostrándoles que aún sino me responden, estoy aquí. Amándolas.

—Yo también te amo cabeza de algas— en un suave murmullo comentó la hija de Zeus aún sonrojada por lo leído anteriormente, pero para nada disgustada más bien ella estaba extasiada y muy feliz.

Pasos resuenan detrás de mí. Que se acercan lentamente en mi dirección. Su presencia etérea me revela a esa persona. Sé que no tengo chances contras ella, pero no me importa. Me aferro a mi espada, y giro rápidamente para depositarla en su cuello. Un movimiento arriesgado, pues estoy agotado, mi respiración está frenética, mi vista se nubla.

—Como todo un guerrero, sí ha de morir mejor que sea en el calor de la batalla, Incluso si las posibilidades están en tu contra— comentó el Dios Marte quién había cambiado temporalmente con su contraparte griega, al mismo tiempo que hacía un gesto en señal de respeto Por el semidiós qué rara vez mostraba.

-Que quieres…Caos-

Los gritos y exclamaciones de horror nos hicieron esperar ante el hecho de que el hijo del mar le hablara tan groseramente a la creadora de todo, siendo el más notorio el de Poseidón quién una vez más se había puesto tan pálido como Hades y estaba a nada de convertirse en el primer Dios que moría de un ataque cardíaco.

-Nada Perseo. Solo vengo a verte. Así que baja la espada por favor-

-Tch! Está bien. Qué buscas? Vienes a burlarte de mí? – digo mientras envaino mi katana.

-No…yo quiero ayudarte. Se suponía que nada de esto sucedería. Tu debías tener un "final feliz". Tu más que nadie merecía ser alegre-

Más de uno quedó en estado de shock ante lo dicho por Caos, Y ante el hecho de que quisiera ayudar al Jackson a obtener su final feliz, algo que era muy raro para los héroes siendo el tocayo del actual protagonista uno de los pocos que lo obtuvo.

-Y como podrías ayudarme ahora? Por si no te has dado cuenta, nada me aferra a este mundo. Un solo movimiento de mi espada, y me uniré a ellas-

—LO JURO POR OLIMPO PERCY, SI LLEGAS A HACER ESA ESTUPIDEZ YO MISMA TE MATARÉ!— ante la locura que estaba por cometer su enamorado en el libro la hija de Zeus dejó ver a la luz su característico temperamento.

-Puedo hacerte volver Perseo. Podrás impedir todas estas pérdidas innecesarias. Nada tendrá que repetirse. Volverás al momento en que todo comenzó. Por favor acepta…Percy-

-Por qué?... por qué lo haces? –

La misma pregunta eso estaban haciendo todos los presentes en la sala del trono, porque la creadora estaba haciendo todo esto por el hijo de Poseidón?

-No me gusta verte así. Mereces amor, cariño, caricias. Por favor déjame hacer esto. Déjame que te ayude-

-Y qué ventajas tendría? A parte del conocimiento de los hechos. Sabes que me estoy muriendo por dentro. Es solo cuestión de tiempo para que mi corazón se detenga-

Un estremecimiento recorrió los cuerpos de todos los amigos y conocidos de Percy Jackson y la posibilidad de que esa misteriosa enfermedad lo terminara matando.

Las más afectadas en esto eran las chicas que tenían sentimientos por él Jackson Incluso si ellas mismas no lo sabían, junto con el padre del mencionado en cuál murmuraba como loco los posibles planes de contingencia para mantener a su hijo a salvo, y hacer de Apolo su médico personal así lo quiere El Dios del sol o no.

-Te haré un dios. Serás el décimo quinto olímpico. El dios de las mareas, la esgrima, la caza, la lealtad y el tiempo. Pero tendrás que ocultar tu poder. Camuflarlo hasta el nivel de un semidiós. Para no alertar a los demás-

—CÓMO QUE LO HARÁ UN DIOS SIN SIQUIERA INFORMARNOS A NOSOTROS!— un furioso indignado Zeus no pudo evitar gritar mientras el trueno se escuchaba a la distancia debido a las emociones descontroladas del hijo menor de Cronos y Rea.

La mayoría simplemente rodó los ojos mientras que Hades y Poseidón murmuraban al unísono "reina del drama" conociendo muy bien la personalidad de su hermano menor.

-Y mi salud? –

-Retrocederé los síntomas, lo siento, pero no puedo curarte-

—Una enfermedad que ni el Caos mismo puede curar, qué demonios tiene ese semidiós?!— dejando caer su libreta de apuntes en estado de shock el dios de la música cuestionó sin esperar tener una respuesta.

-Está bien. Con eso es suficiente. Aceptaré tu oferta. Ellas no merecían este destino. Ellas debían ser felices-

-Percy…por favor piensa en ti también-

—Ese Idiota— Clarisse La Rue gruñó por lo bajo ante los pensamientos desinteresados del hijo del mar, a la vez que una punzada de dolor invadía su corazón, mientras que a su vez repetía la misma acción que habían realizado tanto Artemisa cómo Hestia con llevarse una mano a la cabeza sintiendo un dolor en esta.

-Ya lo veré Caos. Fueron mis errores los que les costaron la vida-

-Idiota! Ellas murieron amándote! Nunca más te culpes me oíste!? Fue esa hija de Atenea quien tuvo la culpa! –

Las miradas volvieron a recaer en la mencionada, haciendo que está tuviera que retener otro escalofrío y no se atrevió a levantar la mirada porque sabía que se encontraría únicamente con expresiones de furia, odio, decepción y traición, Por lo cual simplemente enfoco su vista en el suelo como si fuera lo más interesante del mundo, Aunque por breves instantes volví a ver hacia el hijo de Hermes poseedor de la cicatriz hecha por Ladon.

-Lo siento…pero es difícil-

-Maldición, eres tan terco! –

-Mmph! –

-Qué es tan gracioso?!-

-Nada, es que me hiciste recordar a como ellas me decían. Ja ja ja ja! Lo siento. Ja ja ja ja! No quise ofenderte-

—Cómo es que si quiere puede reír en un momento como ese?— la belleza cherroke hija de Afrodita no pudo evitar comentar.

—Bueno como mi madre siempre decía a los problemas siempre dales una sonrisa reina de belleza— Leo respondió a la duda hecha por Piper.

-Geez… está bien, al menos pude hacerte reír un poco. Entonces, aceptas el trato? –

-Si. Si así puedo evitar todo este caos. Entonces lo haré-

-Bien, puedo hacerte volver con esa espada, ya que Riptide fue destruida durante la pelea contra Tartarus. Pero puedes decirme por qué elegiste ese diseño? –

Ante la versión de Tartarus todos sin ninguna excepción palidecieron enormemente.

Mientras los que eran cercanos al hijo de Poseidón sintieron que sus corazones se habían detenido por unos segundos, y algunos estaban considerando unirse a Poseidón en sus planes de encerrar a su hijo en un lugar seguro mientras varios de ellos hacían de guardias solo por precaución.

Aunque la actual lugarteniente de Artemisa, Zoe Nightshade se estremeció ante el nombre de la espada que representaba uno de los mayores errores de su vida.

-Porque representa a Susanoo, el dios sintoísta de las tempestades. Porque me siento más ligero con ella. En armonía. Y porque Clar me dijo que con ella le recordaba a un dibujo que ella veía de joven. Es más, una vez me hizo ponerme contactos de color rojo solo para verme como quedaba. Nunca entendí por qué-

Los que se hacían una idea de quién podría pertenecer le el nombre o apodo mencionado en la lectura, centraron rápidamente sus miradas en la hija de Ares la cual se había congelado en estado de shock... Antes que su mejor amiga Silena Beauregard comenzar a burlarse de ella, haciendo que la sangre corriera a sus mejillas, sorprendiendo aún más a los semidioses del campamento mestizo albera la ruda y orgullosa Clarisse La Rue sonrojada.

-Umh…realmente un nombre acorde para esa espada. Para evitar que la gente la vea, la transformaré en un pendiente. Póntelo en tu oreja izquierda. Ya que te volverán a dar a Anaklusmos. A pesar de que sé lo que harás con ella-

-Si… debe volver a su dueña. Nunca debió perderla-

La sorpresa, el shock, la incredulidad y la esperanza comenzaron a plasmarse en el rostro de la hija de Atlas ante la posibilidad de recuperar la espada que alguna vez le fue entregada por su madre, a la vez que pensaba que tal vez y solo tal vez podría darle el sentimiento de la duda al hombre que responde al nombre de Perseo Jackson.

-Bien. Creo que es hora de que vuelvas. Cuídate por favor. No te lastimes. Y encuentra la felicidad-

Dijo en un susurro mientras depositaba un suave y cálido beso en mi frente. Comenzando así un cántico, envolviéndome en su poder. Sintiendo como mi cuerpo rejuvenecía, y mi enfermedad retrocedía. Antes de unirme a la oscuridad, hecho un último vistazo, memorizando el hecho de que no las volveré a fallar. Que no sufrirán. Aunque por ello tenga que morir en el proceso.

-Adiós, mis amores-

—ME NIEGO A LEER ESTÁ SEMEJANTE CALUMNIA!— La diosa de la sabiduría prácticamente chillo mientras un rubor cubría todo su rostro.

—Hija, Qué sucede?, Por qué no continuas?— Zeus le preguntó a su hija.

—Porque esto simplemente es imposible, no hay forma en el nombre del maldito tártaro que esto sea real!— habiéndose recuperado en su rubor La diosa de la guerra le dijo a su padre mientras fulminaba con la mirada el libro que había en sus manos.

—Psh para mí que solo está siendo dramática hermana no puede ser tan malo— el Dios de las carreteras soltó un leve bufido antes de contestarle a su hermana creyendo que solo estaba siendo dramática.

En respuesta la pelinegra de ojos grises fulminó con la mirada a su medio hermano ladrón antes de estamparle el libro en la cara de lleno obteniendo un quejido de dolor de Hermes ante la repentina acción de Athena.

—Bueno si te parece que estoy siendo dramática entonces por qué no lo lees tú— siseo Athena mandándole una mirada de muerte al hijo de Maya.

En lugar de volverle a responder a su hermana, este simplemente se volvió hacia el libro con el que anteriormente lo habían golpeado y busco exactamente dónde su hermana se había detenido abruptamente.

Cuando finalmente lo encontró sus ojos se abrieron enormemente mientras una expresión de incredulidad cruzaba sus rasgos.

—Mierda ahora me hago una idea del porque reaccionó así— murmuro por lo bajo el dios de los ladrones antes de aclararse la garganta, para posteriormente reanudar la lectura que su hermana sabía había dejado inconclusa.

-Adiós, mis amores-

Thalia Grace- Jackson / Andrómeda Joanne Jackson

La hija de Zeus sintió como la sangre le subía a la cabeza nuevamente debido al sonrrojo monumental que cubría sus mejillas, pero a pesar de eso tenía una sonrisa radiante ante el recordatorio de que ella tuvo una hija con el único amor en su vida.(aunque ella sentía que iba a tener que encerrar a su cabeza de algas en su propia cabaña y tenerlo envuelto en papel burbuja solo para que no haga ninguna estupidez)

Mientras tanto nadie noto el pequeño tic que Zeus tenía en su ceja izquierda, mientras apretaba levemente su Master Bolt.

Piper McLean- Jackson / Tristán Jackson

Afrodita, dió un fuerte chillido, mientras la chica en cuestión se sonrojó hasta las orejas, mi tanto Leo fruncido levemente el seño mientras su sonrisa se convirtió en una delgada linea, oficialmente había entrado en modo "hermano sobreprotector".

Hazel Levesque- Jackson

Los rostros de Hazel, Nico y Hades se puesto completamente rojos, la primera por vergüenza y los dos últimos por ira pura, mientras adquirían expresiones sombrías.

"Si le rompes el corazón, estás más que muerto Jackson!" Pensaron en conjunto tanto el rey del Inframundo como el rey fantasma.

Reyna Avila Ramírez-Arellano- Jackson / Salina Ana Jackson

La hija de Bellona se quedó boquiabierta al igual que casi todos los romanos ante el hecho que su Prectora no sólo estuviera casado con un griego, sino que también habían tenido un hijo.

Clarisse LaRue- Jackson / Christian Jackson

La Castaña hija de Ares se sonrojó hasta la raíz de su cabello, ante lo leído, y las contantes burlas de Silena solo ayudaban a qué su sonrojo aumentase.

Bianca Di Angelo

El rostro de Nico se volvió sombrío ante la mención de su otra hermana, mientras ya estaba planeando más de 1000 formas de cómo castrar a su primo ante el hecho de enamorarse no solo de una sino de sus dos hermanas, aunque también el sentimiento de esperanzas comenzó a formarse en el corazón de Nico Di Angelo, si su primo realmente regreso al pasado eso significa que podría enviar que Bianca muriera en esa maldita búsqueda.

Y en el caso de la hija de Hades bueno su rostro parecía prácticamente un tomate debido al sonrojo qué se había apoderado de toda su cara.

Zoe Nightshade

La hija de atlas así como su patrona y sus hermanas cazadoras quedaron hechas de piedra,

Pallas Atenea- Jackson / Icaro Jackson

La diosa de la sabiduría se había vuelto a sonrojar levemente, mientras sus hijos e hijas la miraban boquiabiertos, incluso algunos parecían al borde del desmayó.

Phoebe Artemis- Jackson / Zoe Jackson / Ethan Jackson

Artemisa abría los ojos en estado de shock, no sólo se había casado son un hombre, sino que también había perdido su virginidad y había dado a luz a un par de gemelos. A pesar de que debería estar furiosa por dejar de ser doncella, en el fondo de su mente y corazón, algo le decía que ser esposa de Perseo Jackson no era tan malo, y más con la bendición que se le dió.

"Mis pequeños gemelos"

Pensó mientras una diminuta sonrisa tiro de los labios de la diosa de luna, uno de sus más grande anhelos era el experimentar la dicha de ser madre pero debido a su voto de castidad (junto con el hecho que casi todos los hombres a sus ojos no eran más que unos simples cerdos) le habían impedido hacer eso... Pero entonces la realidad la golpeó de lleno, y recordó lo que se leyó anteriormente.

"Y el llanto de esos molestos niños, como disfruté en hacerlos silenciar"

De repente el cuerpo de Artemisa comenzó a temblar de ira, esa... ¡Esa pequeña perra le había quitado a sus pequeños, esa desgraciada había matado a SUS hijos!

De repente los ojos de Artemisa admitieron un pequeño brillo en sus ojos mientras unas cuantas imágenes llegaron a su mente.

"Mami, vamos a jugar con papá"la voz infantil de un niño resonó en la mente de la diosa.

"Mira mami, Phoebe y el tío Apolo me están ayudando en el tiro con arco"una infantil voz ahora femenina se volvió a escuchar en la mente de Artemisa.

En ese momento algo dentro de Artemisa se rompió... Y entonces el Hades se desató.

—AHHHH— una más que furiosa diosa de la caza exclamó, mientras su cuerpo era envuelto en una potente luz plateada, estába lista para matar a Chase de no ser por su hermano gemelo el cual coloco una mano en su hombro mientras que con una rara expresión de seriedad en su rostro negaba con la cabeza diciendo silenciosamente que no valía la pena.

En respuesta La diosa de la casa lo vio con Furia por unos segundos, antes de sorprender a casi todos en la sala cuando simplemente abrazo a su hermano gemelo mientras sollozaba.

—Mis pequeños Apolo *snif*, Ella mi quitó a mis bebés*snif*— Artemisa sollozo, Mientras que el Dios de las artes se dedicaba a darle palmaditas en la espalda y a tratar de calmarla.

A pesar que Apolo estuviera furioso por dos razones (1- alguien le había quitado la inocencia a su querida hermanita.
2- recientemente se está enterando que era tío, y que sus sobrinos habían sido asesinados, a pesar de haberle dicho a su hermana que se tranquilizara honestamente el dios de la verdad no quería otra cosa qué incinerar a esa hija de Athena hasta que no quedará ni las cenizas.) Tuvo que contener su rabia, y simplemente consolar a su hermana, así como ella lo había hecho con el cuando eran dioses bebés.

Afrodita Jackson

La diosa del amor se sorprendió por esa declaración, y no era la única ya que todo el consejo Olímpico sin exepcion tenía la quijada desencajada. Siendo Ares el que sobresalia del resto (más que nada porque muy probablemente perdería sus días de sexo sin compromiso)

Calipso Jackson / Teseo Jackson

La teniente de Artemisa volvió a congelarse en su lugar al ver que su hermana también estaba incluida entre las parejas/esposas del hijo de Poseidón.

Rachel Elizabeth Dare- Jackson / Jean Paul Jackson

Los dioses y semidioses del pasado inclinaron levemente la cabeza y ya que desconocía a la chica, mientras que los del futuro agrandaron enormemente los ojos, y miraron disimuladamente al dios del sol, El cuál luego de haber calmado a Artemisa volvió a quejarse y enfurruñarse porque alguien le quitó la inocencia a su hermanita.(a pesar de que una parte dentro de él seguía estando feliz por el hecho de ser tío)

Hylla Avila Ramírez-Arellano- Jackson / Hipólita Jackson

Sí antes la prectora de Roma se había quedado en estado de shock, ahora mismo estaba teniendo dificultades para levantar su mandíbula del suelo ante el hecho de que no solo ella sino que también su hermana está casado con este chico, y a la vez que tuvo una hija con él... Sinceramente Reyna no sabía que pensar al respecto.

Hestia Jackson / Reah Jackson

PUM!

PUM!

PUM!

PUM!

PUM!

PUM!

Cómo si hubiese estado ensayado los seis hijos de Cronos y Rea se desmayaron en sincronía, mientras que la diosa del hogar fue con una enorme sonrojo y más de uno podría jurar haber visto vapor saliendo de sus orejas.

En cambio sus otros 5 hermanos, tenían una cara de shock incredulidad, mientras que los restantes dioses en la sala del trono simplemente se habían quedado hechos de piedra.

Cuatro Diosas...

Perseo Jackson había no solo enamorado a cuatro diosas sino que se había casado con ellas.

Pero lo más impactante es que el Hijo de Poseidón pudo enamorar a las TRES DIOSAS VIRGENES!

Aquellas diosas que habían renunciado ante la posibilidad de haber tenido alguna pareja debido a sus juramentos de castidad, Por lo cual le será imposible creer que solo un semidiós logrará conquistarlas a las tres.

Lo cual hizo que algunos hombres presentes pensarán en pedirle consejos al hijo de Poseidón en el momento que esté se ha traído.

Fin del capítulo.

Espero que les haya gustado el capítulo, los que tengan dudas acerca de él porque algunas de las mujeres presentes están teniendo dolores de cabeza sin razón alguna.

Es porque sin que ellas mismas lo sepan están recibiendo tanto los recuerdos como emociones de sus versiones futuras.

De ahí vino la reacción que tuvo Artemisa y el leve flashback acerca de sus hijos, junto con las emociones qué está sentía hacia el hijo de Poseidón en el futuro, pero aún así a ella junto con el resto que son esposas de Percy les tomara un tiempo en aceptar al 100% sus sentimientos por el hijo de Poseidón.

Teniendo en cuenta que se confundirán aún más por los repentinos sentimientos que lleguen a ellas, debido a la influencia que tienen los recuerdos de sus versiones futuras.

Desde mi punto de vista siento que lo hace más interesante de esta forma, ustedes que piensan?

Les gustaría ver nuevamente leves flashback pertenecientes a las versiones futuras de las esposas y todas aquellas personas que son cercanas a Percy?

Cuándo creen que debería llegar el hijo del mar para presenciar la lectura junto a su familia y amigos?

Varias de estas preguntas serán respondidas a lo largo que avanza la historia.

En fin creo que eso sería todo, una vez más mis agradecimientos al autor de esta historia por darme su autorización para realizar este leyendo.

Y sin nada más que comentar nos vemos en el siguiente capítulo.

Bye.