En efecto, Liza había despertado, y la esperaba.

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"¡Rose!, ven acá y apapachame, porfi. ¿Sí?", Oh. Se estaba regresando a la etapa de cachorrito, al parecer.

Pero de Dragón.

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"Necesito un favor. ¿Podrás?. Tiene que ver con esto que está pasando".

"Dime".

"Mis memorias de Rusia fueron bloqueadas por algún usuario de Espíritu. Y sólo tú puedes... ayudarme. Soy tu enlazada, pero esta vez.. necesito esto de tí. ¿Puedes ayudarme?".

"¿Son importantes?".

"He... ido recordando cosas. Palabras, imágenes. Y todo se relaciona. Necesito saber. Necesito recordar. Necesito... entender por qué fue St. Vlad y no St. Basil".

"Yap. pero después no te quejes. No creo que lo pueda reversar, ¿sí?".

"Y también lo de MIss Karp. Era de tu tipo de magia. Y huyó, usando su conocimiento de la academia".

"Esto se está poniendo turbio", y procedió a acercarse. "¿Y cómo?".

"Toma mi rostro, y mira dentro de mis ojos. Parte así".

"Y allá vamos, que resulte".

Tomando el rostro de Rose en sus manos, miró en la profundidad de sus ojos, en dónde parecía bailar la sombra perpetua de su muerte inconclusa.

Y muy en el fondo, notó algo, como una cerradura mágica.

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Un bloqueo de espíritu.

Fuerte, pero ya debilitado por los años.

No había sido reforzado por mucho tiempo.

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"Libera los recuerdos", susurró Liza a la cerradura, "libera sus recuerdos de Rusia. Y libera los recuerdos de Miss Sonya Karp. Libera sus recuerdos. Le pertenecen".

Y la cerradura comenzó a resquebrajarse, y Liza fue empujada hacia atrás, al sentir el influjo mágico saliendo del cuerpo de Rose.

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"Miss Karp... sabía lo que eras", le susurró Rose, como en trance hipnótico. "Temía lo que podía pasarte. Decía que ya vendrían por ella. Pero que no los dejaría tener su magia. Pero la tuya estaba incompleta. Que debías irte. Que debía sacarte, antes de que fuera demasiado tarde para tí".

"¿Miss Karp... te compelió para que huyeramos?".

"Sí. Me dijo que... no mirara nunca atrás. Pero algo debe haber fallado. En alguna, o en ambas. Quizás su compulsión se liberó".

"Aún la tenías. Débil, pero se sujetaba con la otra. Que era muy antigua, pero muy poderosa. Era una cerradura mágica. Nunca había oído de eso. Muy muy adentro, había una niñita muy parecida a Roza. Pero supongo eras tú. Siempre encerrada, como en un capullo o en un botoncito de rosa... ¿y recuerdas algo que nos sirva?".

"No sé si sira, pero recuerdo a Galina y a Galeana. Hermanas rusas. Las vi entrenar. Eran letales. Mi madre parecía ser una muñeca de trapo en sus manos. Era... muy joven. Recuerdo palabras. Galina las decía en ruso, y luego en inglés. Y de ahí las oía yo. Y había alguien. Como tú. Siempre en las sombras. Una mujer. Rusa. Ella puso en mí la... Debe ser la Oksana de la que Dimitri me habló. Ella debe saber de mí..".

"¿Y, por qué lo ocultó?".

"Supongo porque era un entrenamiento superior. Conocimientos que sólo pasan a los guardianes de alto nivel, como Dimitri. Pero yo entraría con ventaja, de saberlos o de recordarlos... primero debía aprender a pelear como todos, luego a diferenciar mi estilo... Pero algo cambió después del accidente. Me volví tu SK. Tu magia sobrepasó las salvaguardas".

"Y comenzaste a recordar sin saber, y afuera... lo usaste como si fuera... normal. Tenías toda la teoría contigo, y en lucha libre y esas cosas; salió la verdadera tú, la que no tiene barreras mentales impidiendo ser... bueno, tú. Entonces, te frustrabas; porque ya lo sabías y lo habías olvidado, ¿sí?. Desde el día uno. Porque no recordabas las letras. O los números. O nada. Pero ahí estaba eso... Espera. ¿dijiste SK?, como Anna de St. Vlad. ¿Esa SK?".

"Él...la... trajo de las sombras. De la peri muerte, por decirlo así. Eso es ser SK. Son sólo los moroi con tu magia. Por eso no fue... replicado. Se olvidó y luego se borró; volviéndolo herejía para los moroi comunes, pero santidad para Vlad y los otros que la tenían... los otros 12. Los padres de ustedes los royal, Liza. Sus descendientes resultantes del apareo entre morois, y con los morois que llamaron Santos".

"Los moroi con esa magia, entonces; trajeron a otros de la muerte... como yo lo hice contigo. ¿Y a esos otros salvados SK, los llamaron guardianes?".

"Porque guardaban sus pensamientos y sus emociones, sí. Probablemente, de ahí surge el término. NO eran soldados, eran gente común. Mira", y le mostró el diario de Anna, "ella era humana. Una niñita según nosotros. Apenas mayor que Roza".

"Alguien lo volvió leyenda, para que no intentaran recrear las acciones de esos 12... hombres santos", dijo Liza. "Nos ocultaron, y no nos llamaron santos. Locos, tal vez".

"Lo llamaron royal, por alguna razón que no entiendo. Es decir, pasa por la sangre. Pero es algo más. Quizás la magia pasó de generación en generación, y los Príncipes no eran los mayores entre ellos. Eran los senior. Los que sí tenían la magia. Y para eso, debes meterte tú en los anales reales; acá mismo, Princesa. A mi no me dejarán siquiera asomar, dhampir y todo eso".

"Pero a mí sí... ¿pero a título de qué?".

"Los Dragomir. Debes rastrearlos y contactarlos. Tener tu quórum listo para tus 18 años... Semi hermanos de tu padre, de tu abuelo, de... etc. Primos, segundo y terceros y eternos. Los que te permitan las reglas. Eres la Senior porque eres la única Dragomir de línea directa. Pero antes... ¿sería por tu magia?".

"Tú averigua más de St. Vlad y de Rusia. Coquetea a Dimitri. Ten citas con él, o te saldrán telas de araña allá abajo, si no lo mantienes hidratado. Tu implante debería aguantarte hasta final de año. Recuerda, para el amor es mejor con globo. No queremos otra mini Rosi después de la mini Roza, ¿o sí?".

"Somos dhampir, Liza. Creo que deberé publicarlo en alguna parte, porque ya es mucho".

"Y eres SK. Ni idea que te hizo... capaz que seas más moroi o más humana. Es decir... tu madre es dhampir, pero tienes un abuelo moroi por ahí, por su lado. Así que tienes 3 abuelos moroi y una abuela dhampir, de la que también tienes otro ancestro moroi y otros dos más... Sip, ustedes son casi moroi. Eso asusta, ¿si?, y capaz que haya dhampirs Dragomir pululando por el mundo. Y conoces las reglas. Si son dhampir, necesitas 4 de esos para tener la misma sangre moroi. O algo así. Quizás mi padre tenga hermanas y hermanos... ¿y si soy tía?, ¿puedes averiguar si alguna dhampir de la clase de André...?".

"Yo veré por los dhampir. Tú por los moroi. Pero Liza... si irás por ese camino... no debes saltarte a tu padre. Lo sabes, ¿cierto?".

"Cuándo llegue a ese puente, lo cruzaré con los ojos abiertos. Rose".

"Pero por ahora, debes dormir. Y yo conversaré un poco con Anna, a ver si consigo algo más que blablablá de ella".

"No trasnoches mucho".

"Ya amaneció, Su Alteza. Afuera el sol brilla. Y creo... que no será encerrada, que voy a dormir".

"Hay una cabaña en las cercanías del lago, ¿recuerdas?, quizás está en pie. Ahí podríamos ir ocultando nuestros... descubrimientos. Nos van a vigilar mucho más, a partir de hoy".

"Pero ya tenemos un motivo para quedarnos, tú y yo. Al menos, hasta que el misterio se resuelva o estemos por el buen camino".
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Así que Rose secuestró algunas cosas de varias cafeterías, una manta de alguna parte, cojines de otra; y se fue a buscar la cabaña.

Que afortunadamente se mantenía en pie.

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"OK, Anna. Vamos a ver qué más quieres decirme", y se instaló a leer.