Sigue la Competición
Amber y Lucia seguían en la competición donde ambos dragones pensaban dar lo mejor de sí para llegar a lo más alto.
Ignorados por éstos, Star White y compañía estaban buscando a los traficantes de joyas. Silver Cloud se quedó asistiendo como espectador para vigilar la competición, ya que como él no tenía formación de guerrero sino diplomático, evidentemente no podía estar por si surgía alguna pelea.
Presentador: ¡La siguiente prueba es la de puntería! La prueba consiste en dar el máximo número de blancos como sea posible mediante bolas de fuego.
Hablaba el presentador mientras se veían a unos jóvenes dragones volando donde colgados mediante cuerdas largas unas dianas móviles.
Presentador: ¡El que de más dianas, ganará la competición! ¡Que empiece la prueba!
Ahí varios competidores, incluyendo Amber y Lucia, salieron volando para ir a por el mayor número de dianas posibles.
Amber y Lucia lanzaban bolas de fuego, logrando dar a varias dianas de pleno.
El Gran K volando y realizando varios movimientos chulescos, acertaba con sus bolas de fuego las dianas.
Silver: Vaya presumido es ese dragón.
Comentaba el hipogrifo donde no le gustaba nada la actitud del Gran K.
Mientras tanto, el grupo se había dividido para abarcar más terreno y ver si entre todos encontraban a los traficantes.
Por un lado iban Archer y Wild Burst por unos pasillos del coliseo.
Archer: Bien. Si los traficantes están por aquí ¿Dónde irían?
Wild: Espero que los encontremos pronto. Tengo ganas de machacar.
Archer: ¿Es que siempre piensas en golpear al primero que pase?
Preguntaba el unicornio a su compañero donde el kirin con actitud decidida, le contestó.
Wild: ¡Por supuesto! Si no atacas primero, le das al enemigo la oportunidad de atacarte a traición.
Archer: Bueno...Algo de lógica parece tener.
Ambos ponis caminaban hasta que vieron a dos dragones conversar entre ellos.
¿?: Sí, sí. Debes llevártelo e irte bien lejos.
Decía uno de los dragones entregando una bolsa al otro donde este último asintiendo dijo.
Dragón: Por supuesto.
El dragón tomaba la bolsa y se marchaba de allí mientras que el otro dragón hacía lo mismo. Archer y Wild Burst viendo eso, comentaron.
Archer: ¿Que estarían haciendo esos?
Wild: ¡Son los traficantes! Sin duda le habrá entregado una bolsa con los diamantes y que los lleve bien lejos. Voy a pararlo.
Archer: ¡Espera! ¡No vayas...!
Por desgracia el kirin no le escuchó y se fue directo hacia el dragón que llevaba la bolsa.
Wild: ¡Alto ahí!
Dragón: ¿Qué...?
No pudo siquiera preguntar porque el kirin le lanzó un directo que lo mandó a volar contra la pared y luego caer al suelo con espirales en los ojos.
Wild: Ja, ja, ja. Ya te tengo.
Celebraba el kirin mientras su compañero se acercó corriendo hacia este. El otro dragón apareció donde sorprendido por ver a su compañero, preguntó.
Dragón2: ¡Carai! ¿Qué le ha pasado a mi compañero?
Wild: ¡Lo que te va a pasar a ti por los diamantes de contrabando que le has entregado en la bolsa!
Le acusaba el kirin al dragón donde este confundido, respondió.
Dragón2: ¿Qué diamantes? Lo que llevaba son trozos de carbón.
Archer: ¿Trozos de carbón?
Dragón2: Así es. Debe llevarlos a las piras lejanas para prenderlas cuando se haga de noche.
Explicaba el dragón mostrando que la bolsa en su interior tenía efectivamente carbón. Archer y Wild Burst se dieron cuenta de que habían metido la pata.
Ambos: Oh, oh...
Dijeron éstos cuando de repente apareció un guardia que era un dragón azul con partes claras en el vientre y cuernos negros. Con traje de policía.
Policía: ¿Qué ocurre aquí?
Sin dar explicaciones, Archer y Wild Burst salieron corriendo de allí.
Más tarde estaban ambos dragones siguiendo al guardia.
Dragón: Sí. Me atizaron bien fuerte.
Dragón2: Y a mí se me pusieron en plan acusica...
Guardia: No se preocupen. Los encontraremos y cuando los haga.
Respondía el guardia con tono amenazante con la porra sujeto en su garra.
Cuando éstos pasaron por delante de unas estatuas, dos de ellas que tenían forma de kirin y unicornio se movieron, revelando ser Wild Burst y Archer que se habían echado harina para parecer estatuas.
Archer: Tú y tus prisas. Ahora nos hemos metido en un lío con la policía.
Decía a modo de reproche el unicornio a su compañero donde ahí este contestó.
Wild: Bueno. Metí un poco la pata. Pero seguro que la próxima daremos con ellos.
Archer: Lo que tú digas. Solo procuremos no toparnos con el guardia ese.
Silver Cloud seguía la competición hasta que aparecieron Clear Water y Albar III.
Clear: ¿Cómo van a Lucia y a Amber?
Silver: De momento van bien. Hasta ahora van atinando bien en los blancos.
Respondía el hipogrifo donde efectivamente, Lucia y Amber habían logrado dar en bastante blancos, siendo seguidos por el Gran K.
Mientras a nivel del subsuelo, estaban Wild Burst y Archer. Éstos observaron una especie de trampilla atornillada en el techo.
Archer: Mmm...Esa trampilla parece muy sospechosa. Sería un buen escondite para joyas o cosas de valor.
Decía esto Archer mirando con sospecha la trampilla. Wild Burst con una llave inglesa, dijo.
Wild: Vamos a abrirla pues. Quédate quieto.
Dijo esto subiéndose a la espalda del unicornio para molestia de este último y desde ahí empezó a aflojar las tuercas con la llave inglesa.
Mientras tanto el Gran K se dirigía hacia un blanco móvil que pasaba al lado de una farola.
Gran K: ¡Ahí va otro punto para el Gran K!
Estuvo a punto de lanzar su bola de fuego justo cuando estuvo a punto de pasar por la farola. En ese momento la farola se cayó, golpeando en la cabeza del dragón.
Al final el Gran K cayó al suelo con espirales en los ojos bajo las atentas miradas del público.
Wild: ¡Vaya! Parece que no era una trampilla después de todo.
Decía el kirin al ver que dicha trampilla en realidad era una sujeción de la farola.
En ese momento apareció el guardia para problema de éstos.
Guardia: ¡Vosotros!
Archer: Oh, oh. A correr.
Guardia: ¡Volved aquí! ¡Os vais a enterar!
Gritaba furioso el guardia armado con su porra más que dispuesto a atizar al kirin y al unicornio donde no tuvieron más remedio que huir de este. Tras un rato el guardia los perdió de vista tras pasar una sala con toneles.
Dos de los toneles se movieron y de ellos emergieron Wild Burst y Archer.
Archer: Lo perdimos de vista.
Wild: No sé por qué simplemente zurramos a ese guardia y ya está.
Archer: No podemos pegar a la autoridad así como así. Ya tenemos bastantes problemas. Ahora sigamos.
Mientras en otra parte, Light Nova y Will iban caminando cerca del almacén donde se guardaban elementos de la competición.
Dawn: Oye, Light Nova ¿Ese almacén no sería un lugar perfecto para esconder contrabando?
Preguntaba la fénix a su compañera donde esta asintiendo, contestó.
Light: No estaría mal pensado. Echemos un vistazo.
Light Nova y Will se introdujeron por la puerta del almacén, siendo observados por alguien que los estaba vigilando.
Light Nova: Mmm...Que raro.
Will: ¿Qué pasa, Nova?
Light Nova: Yo esperaba que el almacén estuviera cerrado, por lo que me resulta muy raro encontrar la puerta abierta.
Will: Ahora que lo dices...
El joven grifo comprendía a lo que se refería la alicornio, ya que lo normal es que dicho almacén estuviera cerrado para que gente ajena no pudiese entrar.
Will: ¿Crees que se habrán olvidado cerrar la puerta?
Light Nova: No lo sé, pero aprovechemos para echar un vistazo mientras podamos.
La alicornio y el grifo se pusieron a investigar entre las múltiples cajas que había en el almacén, sin darse cuenta de que quien los estaba espiando se acercaba por fuera a la entrada y de golpe cerró la puerta. Aquello no pasó desapercibido para Light Nova y Will.
Light Nova: ¿Qué ha sido eso?
Dawn: Creo que han cerrado la puerta.
Éstos fueron a la puerta y Will intentó abrir la puerta sin éxito.
Will: La puerta está cerrada ¡Estamos encerrados aquí!
Exclamaba alarmado el grifo por el hecho se estar encerrados. Light Nova procurando no perder la calma, le dijo al grifo.
Light Nova: Aparta, Will. Voy a intentar derribar la puerta.
El grifo haciendo caso, se apartó. Ahí Light Nova concentró su poder y lanzó un potente rayo mágico contra la puerta, pero dicho rayo fue neutralizado antes de siquiera tocara la puerta. Aquello los desconcertó.
Will: ¿Qué pasa?
Light Nova: Debe tener algún tipo de protección mágica.
Dawn: En tal caso, con magia no vamos a salir aquí.
Will: Ay, no ¿Me vas a decir que vamos a quedarnos aquí atrapados para siempre?
Preguntó preocupado el grifo por el hecho de no poder salir del almacén por donde estaban atrapados. Light Nova sin perder la calma, le contestó.
Light Nova: No te preocupes. Aun tengo otros recursos a mi disposición.
Mientras tanto en otro lugar, Wild Burst y Archer seguían buscando por su lado a los traficantes.
Archer: Esta vez no debemos meter la pata. Bastantes problemas tenemos ya con el guardia ese.
Wild: Sí, sí. Lo que tú digas.
En ese momento vieron pasar a un dragón sospechoso que llevaba una bolsa y miraba por todos lados por si había alguien.
Wild: Mira tú. Puede que tengamos suerte ¡Eh, tú!
Alzó la voz el kirin, llamando así la atención del dragón donde al ver a éstos, salió corriendo.
Archer: ¡Está huyendo!
Wild: ¡A por él entonces!
Ambos sementales salieron raudos y veloces persiguiendo al dragón que huía con la bolsa.
Archer: ¡Hay que pararlo!
Wild: ¡De eso me ocupo yo!
Wild sin parar de correr, concentró poder en su cuerno y lanzó una potente bola de fuego contra el dragón, pero en el último momento el dragón torció para meterse en un pasillo y la bola de fuego siguió su camino.
Un grupo de de dragones que eran parte de los que organizaban los juegos de la competencia, al final les alcanzó la bola de fuego, provocando así una gran explosión de fuego.
Cuando todo terminó, los dragones estaban tendidos en el suelo bastante quemados y con espirales en los ojos. Wild Burst sintió que había metido la pata.
Wild: Ay, madre...
Archer: Has vuelto a fallar como un cronómetro comprado en los chicos.
Lo regañaba el semental a su compañero y para complicar aun más las cosas, apareció el guardia de antes para ver el desastre y luego mirar a ambos sementales con expresión de pocos amigos donde ahí les gritó a estos.
Guardia: ¡Vosotros!
Archer: ¡Ay, madre! ¡El guardia!
Una vez más Wild Burst y Archer tuvieron que salir huyendo del guardia, donde éste los perseguía montado en un tractor con trilladora por delante.
Guardia: ¡Os atraparé, los trituraré, os haré servir de abono para plantas!
Gritaba completamente furioso el guardia sin dejar de perseguir al kirin y al unicornio.
Una vez más los dos sementales lograron dar esquinazo al guardia, donde este último caminaba al exterior armado con una enorme hacha y expresión furiosa.
Guardia: ¿Dónde están? ¡Quiero matar! ¡Want to kill! ¡Quiero sangreeee!
Gritaba verdaderamente furioso el guardia con unas calaveras en vez de pupilas en sus ojos y con grandes ansias de matar.
Mientras tanto, el dragón que tenía la bolsa, seguía corriendo por los pasillos mirando para atrás por si aun le seguían, hasta que se chocó de frente contra Carl por detrás. El minotauro apenas notó el choque, pero para el dragón fue como chocar contra un muro de hormigón y cayó al suelo con espirales en los ojos.
Carl: ¡Uy! ¿Está bien?
Preguntaba el minotauro mirando si el dragón estaba bien. Black Cat observando que la bolsa que llevaba el dragón había caído al suelo y de él sobresalían unos diamantes.
Black Cat: ¡Carl! ¡Mira! Diamantes.
Advertía la gata viendo los diamantes que estaban en la bolsa.
Más tarde, con el dragón aun inconsciente atado a un gran tubo que colgaba en la pared, Carl y Black Cat sentados sobre unas cajas, tenían los diamantes sobre una caja más grande que servía de mesa.
Black Cat: Vaya golpe de suerte, nunca mejor dicho en este caso je, je, je. Encontramos a uno de los traficantes.
Comentaba sonriente la gata. Carl examinando los diamantes, comentó.
Carl: Eso parece. Habrá que avisar a los chicos que hemos pillado a uno.
Black Cat: Esto ¿Y sí al menos tomamos aunque sea unos pocos diamantes?
Preguntaba con una sonrisa la gata donde quería echarle la garra encima de los diamantes. Carl mirando a la gata con actitud severa, la dijo a ésta.
Carl: ¡No! Esto debe ser entregado a las autoridades.
Black Cat: Oh, vamos. Solo unos pocos diamantes, por fi...
Rogaba la gata poniendo su mejor expresión de ojos de cachorro, pero aun así Carl negando con la cabeza, la contestó.
Carl: Para nada, Black Cat. No vamos a mangar estos diamantes.
Black Cat: Vale. Lo que digas.
Decía molesta la gata mientras se ponía de pie hasta que Carl la llamó la atención.
Carl: ¿A dónde vas?
Black Cat: Al baño.
Carl: No necesitas los diamantes para ir al baño.
Respondía el minotauro extendiendo la mano. Black Cat gruñendo por lo bajo, le colocó unos diamantes que mango de la bolsa en la mano. El minotauro agitando un poco la mano donde tenía los diamantes, le volvió a llamar la atención a la gata.
Carl: Esto no es un juego, Black Cat. El resto también.
La gata volvió a gruñir molesta y le dio el resto de diamantes donde los depositó en su mano.
Black Cat: En serio. Solo por unos pocos diamantes de nada.
Carl: Es lo primero que dices y antes de que uno se de cuenta, ya te has llevado todas.
Contestaba serio el minotauro conociendo bien las actitudes de la gata mientras esta última gruñía molesta porque su amigo la conocía demasiado bien.
Mientras tanto, Lucia y Amber seguían en la competición donde ahora mismo se iba a disputar una última prueba. Esta vez serían todos los participantes de la competición.
Presentador: ¡Atención todos! ¡La última prueba será la gran carrera! ¡Los participantes volaran hasta cruzar los barrancos de la desesperación, llegar hasta una meta intermedia y volver a la línea de salida.
Anunciaba el presentador donde era escuchado por todo el mundo.
Lucia: Bien, Amber. La última prueba. Hay que emplearse a fondo.
Decía la dragona queriendo animar a su joven aprendiz. Amber sonriendo, respondió.
Amber: Por supuesto, maestra. Lo daré todo.
Lucia sonrió ante la respuesta dada por Amber.
K: ¡El Gran K ganará esta carrera y se llevará el oro por todo lo alto! Ja, ja, ja.
Hablaba con gran actitud presumida el dragón mientras tocaba una guitarra imaginara. Hasta ahora el dragón había ganado múltiples pruebas, la mayoría haciéndolo de forma chulesca y arrogante. Pero Lucia lograba estar a su altura en todo momento, demostrando ser una dura rival aunque el dragón nunca lo reconocería.
Amber: Espero que al menos tú logres bajarle los humos a ese tipo, maestra.
Comentaba Amber donde no le gustaba en absoluto la actitud del Gran K. Lucia pasando en el hombro del joven dragón con su garra, con una sonrisa le contestó.
Lucia: Olvídate de ese presumido y centrémonos en dar al máximo.
Amber: Sí, maestra.
El juez de salida iba a dar pronto la señal de inicio de la carrera. Todos los participantes, incluyendo Amber y Lucia, se preparaban para salir lo más rápido y lejos posible.
El juez tomó aire y finalmente lanzó una bola de fuego al cielo. En cuando explotó, dio ahí la señal de inicio.
Ahí todos los dragones salieron disparados a toda velocidad.
Presentador: ¡Y ahí van todos los dragones! ¡Saliendo en perfecto orden, camarería y jugando limpio!...Más o menos...
Hablaba el presentador mientras observaba como algunos dragones se daban algún codazo a otro dragón, alguna patada, mordiendo la cola, lanzando una llamarada a la rabadilla, alguno pisoteando a otro dragón en la cabeza. Casi los únicos que parecían jugar limpio eran Amber y Lucia donde solo se centraban en ir lo más rápido posible.
Wild Burst y Archer pasaban entre un grupo de personas hasta que Archer vio a dos dragones sospechosos pasándose una bolsa.
Archer: ¡Por ahí!
Wild: ¡Esta vez son míos!
Wild Burst lanzó dos bolas de fuego en dirección hacia los dos dragones. El primero de ellos dio de lleno a dichos traficantes a su vez que se quemaban la bolsa, revelando unos diamantes.
Wild: ¡Toma ya! En el blanco.
Celebraba el kirin por haber dado a dichos mercenarios, así hasta que Archer con actitud seria, preguntó.
Archer: Bien por ti, pero ¿Te has fijado donde va la segunda bola de fuego que has lanzado?
Wild: ¿Qué?
La segunda bola de fuego seguía volando hasta impactar en el soporte central de la plataforma donde estaban subidos el rey Ceniza, sus consejeros y varios guardias. El soporte que acabó quemándose y rompiéndose donde la final la plataforma cayó con todos encima.
Una gran conmoción se formó en el público al ver como el rey Ceniza y los demás estaban medio sepultados entre las ruinas de la plataforma, todos ellos con espirales en los ojos.
Wild Burst y Archer al ver que se había vuelto a liar, se escondieron entre el público. Mientras caminaban, Archer con actitud molesta miró a su compañero donde le iba echando en cara su metedura de pata.
Archer: Anda la que has liado. Anda la que se armó. Anda que si llegar a estar aquí el guardia. Anda...
No pudo continuar hablando porque para su horror apareció el guardia entre la gente clavando una mirada asesina a los dos ponis.
Guardia: ¡Anda que no andáis nada! ¡Vosotros sí que no andaréis cuando os coja, malditos!
Gritaba furioso el guardia donde ahora perseguía motando en un enorme submarino a los dos ponis que huían a nado en un ancho río, disparando contra estos varios torpedos.
Guardia: ¡Torpedo cinco y cuatro fallados! ¡Disparando tercer torpedo! ¡El segundo un grado más a la derecha!
Por otro lado, caminaban Night Ray y Moon Light que pasaban justo al lado del almacén donde estaban encerrados Light Nova y Will. El unicornio y la alicornio sombría se detuvieron al escuchar unos golpes.
Moon: ¿Qué son esos golpes?
Cosmo: Como no sea el resonar de los tambores en la competencia de los dragones.
Night: Voy a ver.
El unicornio se acercó a la puerta del almacén, pero antes de que pudiera posar su casco en el pomo de la puerta, ésta salió volando a causa de un potente puñetazo lanzado por Light Nova con la armadura Bankai puesta.
La puerta pilló al unicornio por medio donde lo llevó volando y estamparlo contra una pared de puro cemento.
Moon: ¿Qué rayos?
Terra: ¡Night Ray!
Exclamó el fénix preocupado por su compañero donde fue volando para ayudarlo. La puerta cayó pudiendo ver a un aplastado unicornio contra la pared donde cayó flotando como una hoja y luego recobrar su estado de 3D.
Light Nova: ¡Por fin libres! He tenido que aporrear la puerta a lo bestia...¿Moon Light? ¿Night Ray? ¿Sois vosotros?
Preguntaba curiosa la alicornio celeste mientras Will salía y pudiendo ver a Moon Light ayudando a un aturdido unicornio ponerse de pie. La alicornio sombría mirando a éstos, les preguntó.
Moon: ¿Se puede saber qué hacíais ahí dentro?
Will: Estábamos inspeccionando el interior de este almacén de pinta sospechosa y alguien nos encerró dentro.
Light Nova: La magia no funcionaba bien dentro, por lo que tuve que derribar la puerta a lo bestia.
Night: Ya lo he notado...
Contestaba el unicornio algo mejor y recordando como le pilló a este la puerta por medio.
Cosmo: ¿Seguro que no os han encerrado por error?
Preguntaba ahora la fénix de Moon Light donde ahí Dawn negando con la cabeza contestó.
Dawn: No lo creo. Quizás les preocupaba que encontráramos esto.
Will: Lo encontramos por casualidad cuando sin querer rompí una caja.
Completaba el grifo mostrando una bolsa donde contenía varios frascos con un extraño líquido amarillo dentro.
Moon: ¿Qué es eso?
Light Nova: Lo recuerdo de las clases de química de Eye Fox y Eye Falcon. Son sustancias para doparse. Algo completamente ilegal y prohibido en pruebas y competiciones.
Night: ¿Insinúas que algunos se han estado dopando para la competición?
Light Nova: Es probable.
Dawn: Y tenemos una ligera idea de quién podría pertenecer esto.
Light Nova: Solo que no tenemos pruebas de si las usa alguien o no.
Night Ray se quedó pensativo por un momento mientras decía.
Night: Esto me recuerda. Clear Water y Albar hablaron de un dragón que tenía grandes dotes físicas incluso para uno de su especie. Pero ahora no tenemos tiempo para eso, debemos centrarnos en nuestro trabajo de encontrar a los traficantes.
Todos estaban de acuerdo y volvieron a su misión original de buscar a los traficantes.
Amber y Lucia seguían en la carrera aérea. Amber se iba quedando un poco atrás hasta que Lucia notando eso, bajó la velocidad para que éste pudiera alcanzarla.
Lucia: ¿Estás bien, Amber?
Preguntaba Lucia preocupada por su alumno donde este la contestó.
Amber: Estoy bien, maestra Lucia. No se preocupe por mí. Usted trate de llegar a la meta.
Lucia: No te preocupes. Aun queda mucho para la meta.
Respondía Lucia con una sonrisa hasta que de repente apareció volando el gran K.
K: ¡Paso para el Gran K! Ja, ja, ja.
Decía el dragón donde pasó volando justo en medio de ambos y golpeando por un lado a Amber donde lo hizo perder el equilibrio.
Lucia: ¡Amber!
Amber: ¡Maestra!
Amber caía al vacío donde amenazaba con estrellarse contra las rocas. Por fortuna Lucia que voló veloz a su rescate lo salvó y lo llevó de nuevo al cielo.
Lucia: ¿Estás bien, Amber?
Amber: Sí. Pero ese maldito no lo estará cuando le alcance.
Contestaba enfadado el dragón con el Gran K.
Lucia: Reconozco que hasta yo estoy tentada de darle lo suyo con el martillo más gordo que tengo en la herrería, pero centrémonos en la carrera.
Amber: De acuerdo. Aunque aun queda en pie lo de zurrar a ese tipo ¿Verdad?
Lucia: Por supuesto. De esta no pasa.
Ambos sonrieron en señal de complicidad y siguieron con la carrera.
Finalmente llegaban hasta la zona de los barrancos antes mencionados.
Todo iba con normalidad salvo que por tierra había unas criaturas parecidas a dragones terrestre sin alas, donde empleaban sus colas para lanzar rocas a los participantes. Algunos lograban esquivarlos mientras otros eran alcanzados por las rocas.
Amber: Esos condenados reptiles. Me cuesta creer que esos bichos primitivos sean en parte dragones.
Comentaba Amber mientras esquivaba rocas lanzadas por éstos. Lucia también esquivando rocas, le contestó a su alumno.
Lucia: En este mundo tiene que haber de todo. Mejor concéntrate en evitar cualquier tipo de ataque de piedra en el riñón. Je, je, je.
Amber: No se ofenda, maestra. Pero ese chiste le ha salido bastante malo.
Contestaba el joven dragón ante el intento de chiste hecho por la dragona. Lucia no dijo nada, sino que simplemente se rió un poco. Ahí ambos vieron que el camino llevaba al interior de una gruta. Lucia señalando con su garra dicha gruta, le dijo a Amber.
Lucia: Ahí podremos evitar el bombardeo por parte de nuestros primos no tan evolucionados.
Ambos dragones lograron meterse en la cueva al igual que otros dragones.
Los dragones tenían que esquivar un momento de columnas de piedra para evitar chocar contra estas. Algunos dragones no podían evitar chocarse contra dichas columnas. Lucia y Amber en cambio lograban esquivar con agilidad todas las columnas.
Así por un rato hasta que finalmente salieron de la gruta. Amber sintió un gran alivio de poder salir de ahí.
Amber: Por fin fuera.
Lucia: No te acomodes demasiado rápido, Amber. Ahora nos toca sortear un nuevo obstáculo.
Contestaba Lucia señalando que ahora en el recorrido había varios volcanes soltando fuertes chorros de lava. Amber no pudo evitar sentir que sus ánimos descender hasta sus pies.
Amber: Ay, madre...
Aunque los dragones no les afectaba la lava caliente, aquellos chorros podían mandarles bien lejos si les acertaban. Por lo que tenían que pasar con cuidado.
Lucia y Amber volando con cuidado, esquivaban los chorros de lava. Uno le dio en un ala de Amber haciendo que perdiera el equilibrio, pero por fortuna Lucia lo agarró a tiempo y le ayudó a recobrar el equilibrio.
Lucia: Con cuidado, Amber. O si no, acabarás como los que se confían demasiado.
Le decía Lucia a Amber observando como algunos dragones les pillaba por debajo el chorro de lava y los mandaba a volar muy alto y lejos.
Amber: Lo tendré, descuide.
Ambos dragones siguieron volando hasta salir por fin de la zona de volcanes. Ahora el recorrido los llevó a lo largo de una enorme pared de rocas.
Todo iba con normalidad hasta que ocurrió algo inesperado. Una parte de la pared de roca explotó, provocando un fuerte desprendimiento.
Aquello sobresaltó tanto al público como los dragones participantes que aun seguían en la carrera. Todos los dragones participantes tratando de quitarse de en medio para evitar que les pillara alguna de las grandes rocas que caían.
Amber y Lucia esquivaban como podían las rocas. Algunos golpearon a Amber donde le hicieron perder el equilibrio.
Lucia: ¡Amber!
Amber: ¡Socorrooo!
Gritaba Amber donde había perdido por completo el control del vuelo y amenazaba con estrellarse. Lucia voló hacia el dragón y logró atraparlo, pero a su vez vio como una gran roca caía sobre ellos sin tener tiempo a esquivarla.
Amber: ¡Lucia! ¡Cuidado!
Gritaba Amber avisando a Lucia. Lucia viendo que no había tiempo para esquivar la roca, le dijo a Amber.
Lucia: ¡Amber! ¡Sálvate tú y continua la carrera!
Amber: ¿Qué?
Lucia apoyó los brazos en el pecho del dragón y acto seguido salieron ambos brazos a modo de cohetes, que empujaron bien lejos al dragón.
Amber sorprendido y alarmado, no pudo hacer otra cosa que ver como la gran roca atrapaba a Lucia y la aplastaba contra el duro suelo de piedra.
Amber: ¡Maestraaaa...!
El público humedeció al ver lo que le había pasado a Lucia. Ceniza también miró preocupado la escena, mientras que algunos consejeros sonreían con malicia hasta que se acordaron de una cualidad especial de Lucia, una muy molesta para los que querían ver desaparecer a la dragona para siempre.
Cuando el desprendimiento terminó, Amber asustado y alarmado descendió hasta donde había sido aplastada Lucia, donde solo podía ver parte de su cola medio aplastada de ésta. El dragón intentó apartar la roca con todas sus fuerzas, pero no podía.
Amber: ¡No, maestra! ¡No puede morir! ¡No puede pasar esto! ¡No me haga esto!
Gritaba el dragón donde intentaba con todas sus fuerzas de apartar sin demasiado éxito la roca. Así hasta que su comunicador que tenía en el brazo comenzó a funcionar. Amber se puso con dicho comunicador.
Silver: ¡Amber! ¿Estás bien? ¿Estás herido?
Se escuchaba la voz preocupada de Silver Cloud. Amber rápidamente le contestó con tono de amargura y pérdida.
Amber: No, estoy bien. Pero Lucia no. La han aplastado. No puedo creer que mi maestra...
Silver: ¡Amber! ¡Cálmate! Recuerda que Lucia es una robot purificador. Aunque su cuerpo sea destruido, ella vuelve completamente reconstruida.
Aquellas palabras impactaron fuerte en el dragón. Amber recordó que Lucia no era una dragona normal. Se acordó que cuando el cuerpo de Lucia era destruido por accidente (en ocasiones por causa suya), ella volvía en un cuerpo nuevo reconstruido gracias a la cámara de reconstrucción y descarga que tenía en su taller.
Amber: Es verdad...No me acordaba de eso ya. Estaba tan asustado por lo que pudo pasarle a mi maestra, que me había olvidado completamente de ello.
Silver: Lucia está bien. Es mejor que te concentres ahora en la carrera.
Amber: Tiene razón. Debo terminarla, por ella.
Silver: Buena suerte.
Amber: Gracias.
Amber ahora sabiendo que su maestra estaba bien, el dragón alzó el vuelo para continuar en la carrera.
En otra parte, había un grupo de dragones escondidos en un pasillo bastante apartado del interior del coliseo.
Dragón: ¿Cómo va todo?
Dragón2: Estupendamente. La explosión de la roca volcánica logró distraer al público para que pasáramos algunos del contrabando. También la otra explosión que usamos en la pared de piedra distrajo bien a todo el mundo.
Dragón3: Lo que me preocupa son el pony y el grifo que husmeaban en el almacén. Tuve que encerrarlos para que no salieran y causasen problemas. Aunque me preocupa lo que encuentren ahí dentro.
Dragón4: No te preocupes. Ahí dentro no había nuestro contrabando.
Dragón3: Pero está los estimulantes proteínico hipernucleico muscular con extra de azúcar para doparse.
Dragón2: No te preocupes por eso. Nadie sabrá que lo usamos en ese idiota que contratamos para que participase en la competición y atrajera la atención de todo el mundo para que nadie se centrara en nosotros.
Star: Con que era eso.
Los dragones se sobresaltaron al ver a nada menos que a Star White, Heart Fire, Night Ray, Light Nova, Will y Moon Light.
Dragón: ¡Rayos! ¡Nos han descubierto!
Exclamó alarmado uno de los dragones al ver a los jóvenes delante de ellos, siendo Light Nova y Will mirando muy molestos a éstos.
Light Nova: Con que fuisteis vosotros lo de encerrarnos dentro.
Will: Eso no ha estado nada bien.
Night: En nombre de la Patrulla Harmony, entregaos.
Decía Night Ray con actitud autoritaria y esperando que los traficantes se entregasen, cosa que estos últimos no estaban dispuestos a aceptar.
Dragón: ¡Malditos! ¡No podemos dejar testigos!
Dragón2: ¡Acabemos con ellos!
Los dragones cargaron contra el grupo donde por supuesto estos los estaban esperando.
Volviendo en la carrera, Amber dando el máximo de sí mismo, iba a toda velocidad por todo el recorrido ya logrando pasar por la meta intermedia y regresar hacia donde empezó la carrera.
Amber tenía que volar deprisa ya que había perdido mucho tiempo. Finalmente había logrado divisar a lo lejos al Gran K.
Amber: El Gran K ese. A por él.
Amber aceleró de nuevo hasta lograr alcanzar al Gran K. Éste al ver a Amber, le dijo.
K: Mira a quién tenemos aquí. Si es el aprendiz de esa imitación barata de dragona. Ja, ja, ja.
Hablaba con tono burlón el dragón, molestando así a Amber donde le contestó.
Amber: ¡Cierra el pico, payaso!
K: ¡Intenta alcanzarme!
El Gran K aumentó su velocidad. Amber tuvo que acelerar también para poder seguirle el ritmo y alcanzarlo.
K: ¿Sabes? Tiene gracia que esa maestra tuya intente ser una dragona, cuando en el fondo no es más que una máquina que se cree dragona.
Hablaba con tono burlón el dragón haciendo mención de Lucia. Amber le ponía furioso como hablaba el Gran K de su maestra y furioso le contestó.
Amber: ¡No te burles de mi maestra! ¡Ella es mucho más dragona que un guitarrista ridículo como tú!
Dijo esto último donde dando un aceleró logro superar al Gran K y tomar la delantera para sorpresa de este último.
K: ¡De eso nada! ¡A mí no me gana un crío!
Dijo molesto el dragón también aumentando la velocidad.
El público tenía toda la atención puesta en Amber y el Gran K al estar cada vez más cerca de llegar a la meta. Silver Cloud tampoco perdía detalle y rogando que ganara su compañero.
Ambos dragones iban igualados donde tan pronto iba uno en cabeza para luego queda atrás.
Ya solo faltaban unos pocos kilómetros para llegar a la meta. Ahí Amber logró acelerar y tomar la delantera al Gran K donde lo estaba dejando prácticamente atrás.
K: ¡Condenado crío! ¡Del Gran K no se burla nadie!
Dijo esto el dragón donde inexplicablemente había logrado obtener un acelerón nada corriente en un dragón.
Amber estuvo a punto de alcanzar la meta y sentía que estuvo a punto de ganar en nombre de su maestra. Por desgracia en el último momento el Gran K pasó a una velocidad antinatural a su lado y cruzar primero la meta.
Amber: ¡Noooo...!
Gritó Amber al ver que el Gran K había cruzado la meta y ganar así la carrera.
Gran K: ¡Ja, ja, ja! ¡Nadie puede con el Gran K! Ja, ja, ja.
Celebraba el dragón emulando que tocaba una guitarra eléctrica. Amber finalmente deteniéndose sintió que había fallado. Así hasta que de repente aparecieron Star White y compañía con caras de pocos amigos.
Star: ¡Tú no has ganado nada, maldito!
Felia: ¡Sabemos que has hecho trampas!
Decían el alifénix y la gata con tono acusador hacia el Gran K. Aquello captó la atención del público y del propio rey Ceniza.
K: ¿Qué decís, niñatos? ¡He ganado con todas las de la ley!
Contestaba molesto el dragón. Light Nova mirando molesta al dragón, le contestó.
Light Nova: Es inútil que lo niegues. Hemos atrapado a los traficantes donde lo han confesado todo.
Will: Dijeron que había contratado a un dragón idiota donde le han dado objetos dopantes para así ganar la competición...
Night: O al menos distraer a todo el mundo mientras éstos traficaban con diamantes.
El público estaba sorprendido ante lo que decían los jóvenes. El rey Ceniza se bajó de la plataforma donde estaba presidiendo todo y llegando hasta el grupo, les comentó a éstos.
Ceniza: Los traficantes seguramente, pero estáis haciendo una acusación muy grave contra un competidor.
K: ¡Ellos no tienen nada y no pueden demostrarlo!
Exclamaba el dragón donde negaba haberse dopado con actitud presumida. Así hasta que Albar III dijo.
Albar: Es fácil confirmarlo si se le somete a una prueba antidoping.
En el momento que el octopy dijo esto, el Gran K comenzó a preocuparse y sobre todo cuando vio que Ceniza estaba de acuerdo.
Ceniza: Me parece bien. Que el llamado Gran K se someta a una prueba antidopaje.
K: ¿Qué rayos? ¡De eso nada! ¡No tengo por qué hacer eso!
Decía el dragón donde empezó a sudar de nerviosismo. Ceniza escuchando eso en parte sorprendido, le dijo al dragón.
Ceniza: Pero, señor Gran K. Negarse a hacerse la prueba es como si admitiera que realmente se dopó.
Ante esas palabras el dragón comenzó a sudar más de nerviosismo. Amber molesto le llamó la atención.
Amber: ¡Tramposo! Ya sospechaba yo que no eras trigo limpio.
El Gran K de improviso salió volando hasta donde estaba el trofeo donde apartando bruscamente a los guardias, tomó la copa y alzándola en alto para mostrarla, gritó.
K: ¡Solo yo merezco la copa! ¡Nadie más la puede tener en sus garras más que un servidor!
Black Cat: ¡La copa! ¡La tiene ese idiota!
El grupo de inmediato se dispuso a enfrentarse al Gran K donde este al verlos, les dijo.
K: ¡Atrás u os sacudo!
Moon: Por si no te has dado cuenta, te superamos en número.
Wild Burst: Y tú no tienes pinta de ser guerrero como nosotros.
Decían la alicornio sombría y el kirin donde este último hacía crujir sus cascos en señal de querer atizar al dragón. El Gran K lejos de preocuparse, contestó.
K: ¡No creáis que no tengo un seguro para estos casos!
El dragón sacó de su cazadora una especie de botella con un extraño líquido verde en él. Aquello captó la atención del grupo.
Heart: ¿Qué es eso?
El dragón se bebió de un trago la botella y luego la tiró por ahí. En ese momento algo inesperado ocurrió.
El Gran K comenzó a crecer y a crecer hasta convertirse en un dragón monstruoso gigante.
Falta decir que el público se alarmó por ello y salieron huyendo rápido de ahí.
K: Ja, ja, ja ¡Eso! ¡Huid del Enorme Gran K! Ja, ja, ja.
Se jactaba el dragón monstruoso donde hizo aparecer una guitarra eléctrica con forma de garra y comenzó a tocar a todo volumen la música.
Star: ¡Arrea!
Will: ¿Qué ha pasado? ¡Se ha vuelto un gigante!
Moon: ¡Y más ruidoso! ¡Que música más insoportable!
En ese momento apareció Rex salido de la nada corriendo hacia el grupo.
Heart: ¡Rex!
Light Nova: ¿De dónde vienes, chico?
Star: ¡Esto ahora no importa! Nos viene de perlas para lo que viene ¿Estás listo, Rex?
El pequeño dinosaurio hizo además con la cabeza con una sonrisa y luego lanzó la daga hacia Star White donde no tardó en tomarla con su garra.
Star: ¡Adelante, Rex!
Rex adoptó su forma gigante. Star White empleó la daga donde Rex adoptó su forma de dinosaurio robot. Star White no tardó en subirse a la cabina.
Star: Adelante, Rex. A por ese tipo con música tan mala.
El dinosaurio robot avanzaba hacia el Gran K.
K: ¿Creéis que podéis parar mi música? Ja, ja, ja.
El Gran K tocó su guitarra a tope, produciendo ondas sonoras que golpearon al dinosaurio robot, ocasionando daños así.
Star: ¡Ahhh! ¡Ya basta!
Star White colocó la daga en la ranura marrón, pasando los cuernos del dinosaurio a marrones. El dinosaurio rugió y dio un fuerte pisotón que creó varias explosiones de tierra que avanzaban hacia el Gran K y cuando lo tuvo a su alcance, produjo una explosión aun mayor que golpeó al Gran K.
Star: Basta de bromas ¡Modo Emperor Rex!
Gritó Star White colocando la daga en la ranura dorada. Nada más hacerlo, Rex adoptó su forma de guerrero robot.
K: ¡Vosotros no podéis parar mi música!
Gritaba el Gran K donde empleó su guitarra a modo de garrote donde intentó golpear a Rex. El robot se defendió con su Espada de Cola donde desvió el arma y luego golpeó con ella al dragón.
Star White colocando la daga en la ranura roja, hizo que ahora el robot tuviera propiedades de fuego.
Star: ¡Toma Flama!
Rex lanzó desde su garra libre una llamarada contra el Gran K.
K: ¡Ni lo sueñes!
Dijo esto el dragón aleteando sus alas con tanta fuerza que lograron detener las flamas. Luego saltó y con su guitarra golpeó el pecho del robot donde lo hizo retroceder.
Star: ¡No fastidies!
Exclamó molesto el alifénix mientras veía al Gran K atacar de nuevo, hasta que unos disparos impactaron en su cuerpo, deteniendo así su ataque.
Adelia: Desde luego. Mira en que líos os metéis.
Hablaba Adelia subida en su Meca Lince Speed Blade en su forma gigante y con las ametralladoras gattling activas.
Star: ¡Adelia!
Exclamó el alifénix alegrándose de ver aparecer a Adelia con su meca. El lince saltó hacia el Gran K y desde ahí le dio varios zarpazos.
K: ¡Ahhh..! ¡Quitadme a este gato rabioso de encima!
Gritaba furioso el dragón logrando apartar al meca lince de encima donde este último aterrizó de pie.
Adelia: Bien, Star White. Prepárate para una combinación Meca.
Star: De acuerdo, Adelia.
El meca lince saltó y se acopló en el brazo de Rex. Con sus patas se agarraba al brazo y la cabeza cubrió la mano del robot a modo de puño y las ametralladoras se colocaron en la espalda.
Star: Hora de practicar el tiro al proyecto fallido de estrella de rock.
Decía con una sonrisa burlona el alifénix mientras Rex con el arma lince, comenzó a disparar centenares de balas contra el dragón.
K: ¡Ay, ay, ay!
Luego Rex lanzó un fuerte puñetazo lince contra el rostro del dragón donde lo hizo retroceder aun más.
K: ¡Cuidado con mi cara! ¡Que es de una autentica estrella del rock!
Adelia: Ya me está fastidiando el tipo este. Star White, mandemos a la lista de rechazados a este proyecto fallido de estrella del rock.
Star: ¡Será un placer!
Ambos: ¡Carga de Victoria! ¡Ataque Definitivo Lince!
Música Finisher
Rex alzando su brazo armado, iba cargando de energía las ametralladoras donde en la punta surgían unas bolas de energía
Star: Lo siento, Gran K. Pero aquí acaba tu carrera de la música.
Decía con un tono burlón el alifénix.
Star: ¡Por eso te borramos de nuestra lista de reproducción!
Dijo Star White con tono burlón y finalmente disparó el arma a plena potencia un gran rayo de energía marrón que adoptó forma de lince corriendo hacia el Gran K.
K: Definitivamente no me gustan los gatos.
Decía el Gran K estando este preocupado ante lo que iba a pasarle y finalmente fue alcanzado por el rayo.
K: ¡Ahhhh...! ¡Todo el mundo se cree un crítico!
Gritaba el Gran K mientras su cuerpo echaba chispas y cuando cayó al suelo, explotó.
Adelia: ¡Tarjeta de captura!
Gritaba Adelia lanzando desde su meca una tarjeta de captura, atrapando en su interior al Gran K para horror de este.
K: ¡Ay, no! Mucho me temo que no voy a tener un bis.
Star: Patrulla. Esto es una Mega Victoria.
Celebraba Star White mientras Adelia sonreía y sus amigos lo celebraban.
Finalmente con todo ya calmado y tras arreglarlo un poco todo, el grupo pudo disfrutar por fin del resto del día libre, aunque la competición tuvo que suspenderse debido al lío montado por culpa del Gran K.
Ya llegó el momento de que el grupo volviera al Imperio Celeste en una nave de transporte donde había venido antes Adelia.
Lucia: Vuelve a visitarme algún día. Y si tus amigos vienen, mejor.
Amber: Lo haré, maestra. Je, je, je.
Contestaba sonriendo el dragón ya queriendo volver a ver a su maestra en el futuro.
Black Cat ahí estaba en un rincón llorando al estilo anime, ya que a causa de que la competición se suspendió, no pudo echarle el guante a la copa, sobre todo porque por culpa del Gran K, dicho trofeo fue destruido. Carl intentaba consolarla.
Carl: Vamos, amiga. Hay muchos diamantes por el mundo.
Clear: Chicos ¿Dónde están Archer y Wild Burst?
Light Nova: Es verdad. No les hemos visto en mucho rato.
Comentaban éstas hasta que vieron aparecer corriendo a los mencionados antes, donde ambos ponis parecían asustados y entraron corriendo en la nave.
Star: ¿Chicos?
Archer: ¡Si alguien pregunta, no nos habéis visto para nada!
Le contestó Archer con actitud alarmada y preocupada el semental antes de entrar junto con el kirin en el interior de la nave. Ahí el grupo no entendía nada hasta que vieron aparecer a alguien más.
Guardia: ¿Dónde están esos dos? ¡Los cazaré aunque sea lo último que haga en la vida!
Alzaba la voz el guardia con actitud verdaderamente enfadada, buscando con unos prismáticos a Archer y a Wild Burst. Dicho dragón los buscaba montando en un enorme tanque lleno hasta arriba de todo tipo de cañones destructivos.
El grupo no entendía nada de lo que pasaba, pero prefirieron no preguntar nada.
Más tarde de vuelta en el Imperio Celeste, Star White tenía una charla con su padre en la sala del trono.
Mike: Y dices que esto lo volvió gigante.
Comentaba con actitud seria el alicornio examinando la botella con restos del líquido verde que le había entregado su hijo. Star White asintiendo, respondió.
Star: Así es. Nada más beberse eso, se convirtió en un gigante monstruoso.
Mike guardó silencio por un momento mientras seguía examinando la botella. Star White no pudo evitar preguntarle a su padre.
Star: ¿Sabes lo qué es, padre?
Mike: Algo sí. Parece que alguien está suministrando este extraño brebaje en algunos criminales o fuera de ley donde nada más beberse esto, se convierten en monstruos, obligando a emplear mucho los mecas contra éstos. Por desgracia no sabemos quién se los proporciona.
Star: Vaya. Entonces la cosa debe ser muy chunga.
Mike: Por desgracia así es. Os recomiendo que tengáis cuidado por si os topáis con los que tienen estos brebajes.
Aconsejaba el alicornio a su hijo donde este último asintió.
Star: Lo tendré, padre. No te preocupes.
El alifénix se despidió de su padre, dejando al alicornio solo en la sala mientras este examinaba el brebaje.
Mike: ¿De dónde rayos has salido tú?
Preguntaba Mike mientras centraba su mirada en el líquido verde.
Continuara.
No olvidéis comentar.
