El Saqueador de la Galaxia
En un lejano planeta deshabitado donde no había vida inteligente, más bien vida salvaje. Donde su superficie había múltiples zonas pantanosas como algunos géiseres de agua.
Alguien aparecía caminando en medio de una acumulación rocosa. Era un ser canino (no confundirlo con un Diamand Dog) como los que hay en el reino de Caninia (del comic de la 10 Tº de MLP), tipo husky siberiano de pelaje marrón con blanco, que llevaba una cazadora roja de saqueador y pantalones del mismo color. Portando unas botas metálicas.
Dicho perro mientras caminaba, estaba a su vez como bailando y cantando mientras escuchaba la música producida por un radiocasete antiguo a través de unos auriculares.
"Insertar música de Guardianes de la Galaxia música Come And Get Your Love"
Sin dejar de cantar ni bailar, el perro pasaba por un camino, saltando entre roca y roca de una zona con agua. Ahí le vieron unas pequeñas criaturas parecidas a ratas sin pelo que se dirigían hacia el perro con intención de atacarlo (el tamaño no siempre importa XD).
Pese a la presencia de las alimañas, el perro no dejaba de cantar ni de bailar. Algunas intentaron atacarlo por los pies, pero el perro a base de patadas mientras bailaba los quitaba de en medio.
Una subida desde una roca saltó para atacarle al rostro, pero el perro la atrapó con la mano y cantaba sobre esta a modo de micrófono imaginario. La alimaña chillaba enfadada mientras el perro seguía cantando sobre ella. Así por un rato hasta que el perro la tiró lejos de allí.
El perro seguía caminando entre cantos y bailes hacia el interior de una gruta donde lo llevó hacia una enorme compuerta que parecía enormemente antigua, como si hubiese sido construida por una civilización enormemente antigua.
El perro se acercó a ella y sacó de su cazadora una varilla plateada donde de ella surgió como una especie de ganzúa o llave. Ahí la introdujo en lo que parecía la cerradura donde no tardó demasiado en abrirla.
Una vez abierta, el perro empujó los dos portones donde lo llevó al interior de lo que parecía una sala abandonada. En el centro había una plataforma de diseño tecnológico antigua donde en su parte superior había como un campo de fuerza, rodeando lo que parecía una gema morada brillante.
Perro: ¡Premio!
Exclamó el perro con una sonrisa mientras se acercaba a la plataforma. El perro tomó la misma herramienta de antes donde luego de abrir un compartimento con varios circuitos, hurgó con la herramienta varios componentes. Aquello le duró un poco más debido a la complejidad de los circuitos internos, pero finalmente logró desactivar los sistemas haciendo que la barrera desapareciera.
El perro tras guardar la herramienta, sacó ahora un aparato circular donde se abrió por el centro quedando un gran hueco abierto. La colocó con cuidado sobre la gema procurando no tocarla directamente con sus garras y acto seguido la cerró con la gema dentro.
Perro: Genial. La tengo. Es increíble la cantidad de dinero que voy a conseguir solo por traer esta gema.
El perro se disponía a marcharse hasta que de repente llegó visita inesperada.
¿?: ¡No te muevas!
El perro al escuchar aquella gruesa voz casi siseante, vio que en la puerta a un especie de hombre lagarto de piel blanca con marcas moradas. Portando una especie de armadura que le cubría el cuerpo entero color negra. Junto a él había dos seres humanoides alienígenas con armaduras de combate y empuñando unos rifles al canino.
Perro: ¿Qué queréis? Si es por la gema, he llegado yo antes.
Respondía el perro ante la presencia de los tres individuos. El hombre lagarto mirando al perro con sus ojos de lagartos penetrante, le respondió a la vez que le apuntaba con un especie de centro con punta láser.
Hombre lagarto: Por órdenes de el Juez Ronan, esa gema nos la llevamos nosotros.
Perro: ¡Para el carro! No sé quién es ese juez Ronan del que hablas, pero yo he encontrado la gema antes y me la voy a llevar yo.
Se quejaba el perro por el hecho de que pretendiesen quitarle la gema que tanto trabajo le costó conseguirla.
Hombre Lagarto: ¿Y quién eres tú acaso?
Perro: ¿Yo? Soy un buscador de tesoros. Nada más.
Hombre lagarto: A mí no me engañas. Eres un saqueador. Tu cazadora te delata.
Perro: Vaya...Supongo que debí haberme puesto otra cazadora. Pues si no sabes quién soy, te lo diré. Me llamo Quill.
El hombre lagarto y quienes estaban con él, no parecían que les sonase de nada el nombre mencionado por el perro.
Hombre lagarto: No me suena de nada ese nombre, pero me da igual ¡A por él!
Sus hombres iban a apresar al perro hasta que este último alzó alarmado sus brazos y de inmediato les dijo a estos.
Quill: ¡Vale, vale! Quizás el nombre de Quill no os suene, pero estoy seguro de que me conoceréis por este otro nombre.
El perro se puso firme y serio para presentarse con su otro nombre.
Quill: Mi otro nombre es...
"Pausa dramática."
Quill: Star Riders...
Un intenso silencio se formó en el momento que el perro mencionó dicho nombre. El lagarto y sus hombres miraron confundidos al perro en el momento que mencionó dicho nombre.
Lagarto: ¿Quién...?
Quill: ¡Star Riders! El gran aventurero de la galaxia ¿En serio no sabéis quién soy yo?
Contestaba sorprendido y en parte enfadado por el hecho de que no le reconocieran con el nombre.
Lagarto: Ya basta de tonterías ¡Prendedlo!
Ordenaba el lagarto ya impaciente donde sus hombres estuvieron a punto de acatar la orden hasta que Quill dijo.
Quill: ¡Esperad! Una última cosa ¿Cómo habéis desactivado las trampas?
Aquella última pregunta dejó confuso al lagarto y sus hombres donde no se pudo evitar preguntar.
Lagarto: ¿Qué trampas?
Quill sonrió con cierta malicia donde ahí dijo.
Quill: ¿En serio? Que pena. Yo tampoco lo he hecho.
Dijo el perro donde con la misma varilla, la lanzó contra el pedestal donde activó algo. De las paredes surgieron unos cañones láser donde empezaron a disparar incesante al centro de la sala.
Lagarto: ¿Qué demonios?
El lagarto y sus hombres tuvieron que esquivar como pudieron los láseres. Quill activando sus botas donde tenía unos reactores a la vez que su cabeza fue envuelta en un casco gris con visor rojo, voló hacia ellos y agarró de uno de estos una especie de granada de energía.
Lagarto: ¡No dejéis que escape!
Gritaba el lagarto mientras este y sus hombres disparaban contra el perro. Ahí Quill logró salir por poco de la puerta y girando hacia atrás, dijo.
Quill: Siento marcharme, pero me esperan unos negocios importantes y una bonita suma de dinero.
Decía con una actitud burlona el perro para lanzar la granada hacia la parte superior de la puerta y esta explotar, provocando un derrumbe que bloqueó la entrada, dejando atrapados al lagarto y sus hombres.
Quill: Hora de largarse de aquí.
El perro se fue corriendo como si le hubieran puesto un cohete bajo la cola. Cruzando varios caminos rocosos llegó a lo que parecía su nave en una zona llena de géiseres. Una nave grande de alas extensas y una cabina amplia donde podían caber varios tripulantes.
Entrando por la compuerta de atrás, Quill pasó por un pasillo para luego subir por una escalera de mano y llegar a la cabina, donde se sentó a los mandos y despegó la nave.
Quill: Hora de largarse de aquí.
La nave iba volando tratando de ganar altura, pero un geiser lo golpeó en un ala haciendo que perdiera el equilibrio.
Quill: ¡Venga ya!
Mientras la nave caía dando vueltas, Quill intentaba recobrar el control. Justo en el último momento cuando la nave miraba hacia arriba, los motores se reactivaron y salió volando.
Quill emitió un grito de victoria mientras la nave abandonaba el planeta.
Quill: Muy bien. Directos a Nova Prime.
Decía el perro con una sonrisa en los labios hasta que escuchó una voz femenina detrás de él.
¿?: Quill ¿Qué es ese ruido?
El perro se giró y vio emerger del hueco del suelo a una medio adormilada gata anthro de pelaje rosa con detalles amarillos y ojos verdes, llevando únicamente una camisa de un famoso equipo de Equestria del planeta Armonía. El perro como si dudara, respondió.
Quill: Esto...¿Zamora...?
Gata: Krakora.
Corrigió la gata aún un tanto adormilada todavía. Quill ahí trató de responder.
Quill: Esto...¿Me creerías si te dijera que me había olvidado por completo que estabas tú aquí?
Más tarde en lo que parecía una sala de descanso de la nave, estaba Krakora sentada en un amplio sofá tomando unas tortitas mientras Quill estaba en el cuarto de baño arreglándose un poco. En la mesa de la sala empezó a sonar un aparato que captó la atención de la gata y dijo.
Krakora: Alguien te llama, Quill ¿Quieres que conteste?
Quill: ¡No!
Intentó el perro detenerla, pero ya fue tarde. La gata activó el aparato y al rato se activó una pantalla holográfica donde en ella aparecía alguien. Un ser que parecía un especie de hombre ave azul con una gran cresta roja metálica, ojos amarillos. Llevaba una larga cazadora con el mismo logo de saqueador de Quill.
Ave: ¡¿Dónde rayos estás, Quill?!
Habló molesto el hombre ave con tono molesto.
Quill: (¡Porras! Que momento) Hola, Ugul. Cuanto tiempo ¿Qué tal la vida?
Trató de hablar el hombre perro con actitud amable. El hombre ave mirando a Quill con actitud molesta, le dirigió una mirada enojada mientras le empezaba a gritar.
Ugul: ¡Quill! ¡Maldito saqueador de medio pelo! ¿Dónde rayos está mi dinero que me debes?
Quill: Tranquilo, Ugul. Te pagaré. Estoy cerca de conseguir una buena suma.
Ugul: Eso ya lo dijiste el mes pasado, y el anterior, y el anterior del anterior, y el año pasado. No sé por qué no te he matado todavía. Después de lo que hice por ti cuando eras un cachorro.
Quill: Me secuéstrate cuando era un cachorro.
Contestó cruzado de brazos y actitud molesta ante lo que dijo el hombre ave.
Ugul: ¡Te salvé de vivir una vida miserable y aburrida en tu planeta después de que muriese tu madre por ese tumor cerebral! Mis hombres querían devorarte ya que les encantaba la carne canina del planeta armonía, pero yo se los impedí, salvándote así la vida. Y es hora de que me lo pagues como se debe.
Hablaba el hombre ave echando en cara al perro donde este último con expresión aburrida le dijo.
Quill: Sí...Sí...Me lo llevas echándome en cara desde donde puedo acordar. Pero esta vez voy a conseguir una buena suma.
Ugul: Eso ya lo he oído antes.
Quill: Pero te lo puedo asegurar que lo voy a conseguir.
Ugul: Eso también lo he oído.
Quill: Estoy al 100% de conseguirlo.
Ugul: También oí eso montones de veces.
Quill: Perdona, Ugul. Apenas te oigo. Debo estar perdiendo la señal.
Decía el perro donde escuchaba unos ruidos raros.
Ugul: ¿Estás de nuevo arrugando papel mientras hablamos por pantalla?
Ante la pregunta, el perro un tanto perplejo, miró hacia abajo para efectivamente con sus garras estaba arrugando papel.
Quill: Esto...Luego hablamos.
Ugul: ¡No te atrevas a colgarme!
Gritaba el ave para al final Quill colgarlo disimuladamente.
Krakora: Parece enfadado.
Quill: No te preocupes. No es la primera vez que se molesta de esa manera.
Krakora: ¿No te preocupa que le de por poner una recompensa por tu cabeza?
Preguntaba preocupada por el perro donde este último alzándose de hombros, contestó.
Quill: ¡Bab! Siempre está gritando y actuando como si estuviera de malauva. Pero nunca al punto de mandar a un cazarecompensas a por mí. Ja, ja, ja.
Mientras tanto en una amplia nave de saqueadores, Ugul tras ser colgado por Quill, miró hacia sus hombres donde estaban compuesto por varios alienígenas y les dijo a estos.
Ugul: ¡Hasta aquí hemos llegado! ¡Ahora mismo pongo una recompensa por quien me traiga a Quill vivo!
Mientras tanto en otro lugar, en el interior de una gran nave estaba el hombre lagarto de rodillas con expresión de preocupación y miedo. Delante de él sobre un gran trono estaba un ser humanoide de piel azul con tatuajes extraños en su rostro. Llevaba un traje negro en forma de abrigo y pantalones negros. En su mano derecha sujetaba un enorme martillo rectangular metálico bastante grande.
A ambos lados del ser humanoide, había otras dos seres. Una era una coneja antromorfica de pelaje verde. Larga cabellera roja. Ojos rojos. Llevaba una cazadora sin mangas negra muy ajustada como también unos pantalones color marrón oscuro y botas rojas. La otra era una zorra anthro de pelaje gris con detalles blancos. Cazadora amarilla como pantalones rojos. Lo curioso de esta última es que tenía partes cibernéticas sustituyendo parte de su ojos derecho como alrededor, un brazo cibernético en el derecho y una pierna cibernética en la izquierda.
Hombre de azul: Así que has fallado en conseguir la gema ¿No es así?
Lagarto: Lo siento, Juez Ronan...Intentamos conseguir la gema, pero ese saqueador...
Ronan: ¡Silencio!
Interrumpió golpeando bruscamente el asta de su martillo, haciendo callar así al lagarto.
Ronan: Era muy sencillo. Solo teníais que conseguir esa gema. Y vais y dejáis que un simple saqueador os lo arróbate ante vuestras propias narices.
Hablaba con tono molesto el llamado juez, haciendo que el hombre lagarto tragara saliva. En ese momento la mujer coneja habló
Coneja: Debiste haber dejado que yo me ocupara de recuperar la gema.
Ronan: Paciencia, Mara. A ti y tu hermana Galaga os necesitaban en otra parte.
Contestaba el juez ante lo que dijo la coneja. Por un momento la zorra parecía mirar molesta a Mara y dijo.
Galaga: No podemos perder más tiempo. Nuestro padre, Xanathos quiere esa gema.
Ronan: Lo sé. No hace falta que me recordéis que vuestro padre quiere hacerse con las gemas por encima de todo.
Ronan miró a Mara donde la dio a esta las siguientes órdenes.
Ronan: Mara. Nuestros agentes nos han informado que la nave saqueadora con la gema se dirigen a Nova Prime. Irás a ese planeta para recuperar la gema.
Mara: Como ordenes, Juez Ronan.
Galaga: ¡Deberías dejarme a mí esa misión!
Protestaba la zorra donde el juez mirándola muy seriamente, la dijo a ésta.
Ronan: No hay discusión. Mara se ocupará de la misión.
Galaga gruñó molesta porque dejaran a Mara en vez de a ella hacer la misión. Mara sin decir palabra alguna, se marchó a cumplir la misión.
La acción ahora trascurre en el planeta Nova Prime. Un avanzado planeta, perteneciente a la Liga de Planetas, donde existe la guardia Nova, un grupo de agentes que se encargan de asegurar la paz en su sector.
Dicho planeta era muy avanzado y moderno donde en sus calles circulaban toda clase de seres alienígenas, incluyendo los del planeta Armonía como ponis, grifos, dragones y otras razas.
Alguien estaba en cierto modo espiando a la gente mediante unos prismáticos tecnológicos muy avanzados.
La visión se centraba en una pequeña niña humanoide de piel amarilla donde la costaba subir un bordillo.
¿?: ¿Qué pasa, acaso no sabes subir tú sola sin ayuda? Vaya parasito.
Decía una molesta voz y maleducada para luego centrar la vista en un lobo plateado que estaba alegremente hablando con una chica canina sobre un puente.
¿?: ¿Y dónde está tu parienta? Viejo verde.
Por último se centró en un hombre gorila con traje de guardia que estaba tranquilamente sentado en una mesa tomando algo para beber mientras se rascaba el trasero.
¿?: ¿Acaso no tienes turno de guardia? Menudo vago ¡Sacúdete las pulgas, mono estúpido!
Dejando de mirar se revelaba que era un hámster, pero mucho más grande que uno normal de pelaje gris con partes oscuras por su cuerpo. Ojos negros. Su tamaño era algo mayor que un potro. Con una simple cazadora gris en su cuerpo. Una pequeña pieza metálica sobre su cabeza que le llega hasta la frente. Un ojo ciborg en su ojos izquierdo.
Hámster: ¡Rocky! Deja de mirar embobado la fuente y escúchame.
Llamaba el roedor a un hombre de piedra de dos metros que miraba tranquilamente una hermosa fuente de agua donde se dibujaban diversas figuras con los chorros de agua. El ser de piedra mirando al roedor, le contestó tranquilamente de forma educada.
Rocky: ¿Querías algo, Stuar?
Stuar: ¡Pues claro que sí, hombre mineral! Estamos aquí para ver si le echamos el guante a algún chorizo donde ofrezcan una buena recompensa por él ¿Tienes algún cacharro que nos pueda servir?
Rocky: Pues mira. Tengo un invento que cree recientemente y que nos puede servir.
Contestaba sonriente el hombre de roca mientras una parte de su cuerpo se abría, meter su gran mano en ella y sacar como una tableta tecnológica con pantalla transparente.
Rocky: Este dispositivo está conectado a la red de la galaxia donde nos permitirá averiguar si ofrecen alguna recompensa por alguien.
Stuar: Oh, sí. Me gusta como suena eso.
Respondía el roedor tomando el aparato en sus manos.
Rocky: Solo tienes que apuntar la pantalla en alguien sospechoso y si ofrecen alguna recompensa, te lo dirá la pantalla misma.
Explicaba el hombre de roca mientras el roedor se puso a mirar por todas partes con el aparato en busca de alguna jugosa recompensa.
De momento no parecía encontrar nada hasta que finalmente su vista se centró en nada menos que Quill que iba caminando por las calles.
Stuar: Vaya, vaya. Parece que tenemos algo ¿Cuánto ofrecen por ti?
Centrando el aparato en Quill, vio en ella la suma que ofrecían por éste, haciendo que soltara un silbido y todo contento comentara.
Stuar: ¿500.000 por ese tipo? Parece que nos ha tocado el gordo, amigo.
Rocky: ¿Vamos allí y le pedimos amablemente que se entregue?
Preguntaba el hombre roca con actitud amable. El roedor alzando una mano en señal de silencio, dijo.
Stuar: No. Mejor prepara el saco para meterlo dentro una vez que lo tengamos a nuestro alcance.
Mientras tanto, Quill estaba dentro de una tienda llena de objetos caros como joyas o esculturas diversas, hablando con el dueño que era una alienígena de tres ojos vestido de forma elegante.
Joyero: No hay duda. Es una gema de la Creación.
Hablaba el joyero examinando la gema procurando no tocarla directamente, como si de algún modo le diera miedo entrar en contacto con ella más que por la esfera protectora abierta que tenía.
Quill: Pues sí, amigo. No te imaginas la de problemas que he tenido para conseguirla. Unos tipos intentaron quitármela para dársela a alguien llamado Juez Ronan.
Hablaba el canino donde el joyero al escuchar las últimas palabras, se puso pálido donde ahí preguntó.
Joyero: ¿El Juez Ronan has dicho?
Quill no entendía el repentino miedo del joyero donde este último cerró la esfera para encerrar la gema y se la devolvió al canino.
Joyero: ¡Fuera! ¡No quiero tener nada que ver con el Juez Ronan!
Quill: ¡Pero...! ¡Oiga...!
El canino intentó protestar, pero al final el joyero lo empujó hasta echarlo de la tienda.
Joyero: ¡Y no vuelva a traerme esa gema a mi tienda nunca más!
Dijo esto último el joyero para de inmediato cerrar la puerta automática.
Quill: ¡Eh! ¡Hicimos un trato! ¡Abra la puerta!
Alzaba fuerte la voz el canino golpeando la puerta. Al no obtener respuesta se rindió y frustro a la vez que estaba muy molesto.
Mara: ¿Negocio difícil?
Le preguntaba la coneja donde estaba tranquilamente apoyada contra la pared de brazos cruzados con una mirada casi burlona. Quill viendo a ésta con el objeto aún en la mano, la contestó.
Quill: Pues sí. Ese tipo me había prometido un montón de dinero por esta gema, pero al final no cumplió el trato. Si algo me fastidia más son las personas que no cumplen con un trato. A ver dónde encuentro yo a alguien para deshacerme de esa gema.
Mara: Deja que yo te ayude con eso último.
Sin previo aviso la coneja con un veloz movimiento de brazo, le quitó la esfera con la gema para sorpresa de Quill y luego salió corriendo veloz de ahí.
Quill: ¡Eh! ¡Eso es mío! ¡Al menos haberla pagado!
Quill se puso a perseguir a la coneja ladrona pasando entre la gente. Quill sacó lo que parecían unas boleadoras y tomando impulso, las lanzó donde atrapó las piernas de la coneja haciendo que se cayera de bruces contra el suelo.
Quill: Lo siento, bonita. Pero esta gema es mía.
Decía el canino con actitud burlona mientras recuperaba la esfera, pero antes de tener tiempo de disfrutar su premio, fue agarrado por Rocky donde este llevaba un saco.
Quill: ¿Pero qué...?
Rocky: Usted perdone.
Se disculpaba el hombre de roca mientras introducía a Quill en el saco.
Stuar: ¡Muy bien, rocoso! Ya es nuestro.
Celebraba el roedor por la captura fácil mientras Rocky cargaba el saco en el hombro.
Stuar: Ahora vámonos.
Ambos se marchaban para ir a cobrar su recompensa, pero Mara que se había liberado de las boleadoras, corrió rápido donde pegando un gran salto, se agarró al cuello de hombro roca donde el sobresalto hizo que soltara el saco.
Quill logró liberarse del saco e intentó aprovechar la confusión para escapar.
Stuar: ¡No tan rápido!
El roedor sacó un rifle donde se extendió la punta siendo casi el doble de largo que él y disparó, haciendo que Quill se agachara para esquivar el disparo.
Rocky: Usted perdone.
Se disculpaba el hombre rocosa agarrando a Mara y apartándola por ahí.
Quill escondiéndose de detrás de un banco, sacó una pistola de doble cañón y disparó balas de agua a los pies del roedor y el hombre roca donde se resbalaron y cayeron al suelo.
Quill se puso a reír de forma burlona hasta que recibió en su costado una patada por parte de Mara donde lo tiró al suelo. Cuando Quill intentó levantarse, sintió que la coneja le estaba apuntando con una afilada espada
Mara: ¡Entrégame esa gema y no te pasará nada malo!
Le ordenaba con actitud autoritaria al perro donde este con actitud desafiante la contestó.
Quill: Nunca renuncio a una buena suma de dinero.
Con sus patas, atrapó por los pies a la coneja donde la hizo perder el equilibrio y que esta cayera al suelo.
Rápidamente Quill se levantó y se fue corriendo hasta que se le cruzó un gran muro de rocas que le cortó el camino. Ahí se giró y vio que era el hombre roca donde introduciendo una mano por el suelo, hacía emerger las piedras mientras el roedor apuntaba al canino con su arma.
Stuar: Tú no vas a ningún lado.
Mara se levantó y empuñó su espada mientras Quill mantenía su pistola y Stuar su arma.
La gente que pasaba por ahí miraban con miedo la escena de lucha entre los cuatro individuos donde nadie se atrevía a acercarse lo más mínimo.
Quill: ¿No podríamos hacer esto de forma civilizada en vez de pelearnos sin más? Aunque si preferís pelearos entre vosotros, esperad a que al menos yo me haya ido por otro lado.
Stuar: Tú no te vas a ningún lado, te vienes con nosotros para cobrar la recompensa.
Mara: Llevaos a ese idiota si queréis, pero la gema se queda conmigo.
Quill: Yo preferiría irme de aquí, a ser posible de una pieza y con la gema en mano.
Rocky: ¿No podríamos resolver esto de forma civilizada?
Parecía que no se iba a solucionar de forma pacífica el conflicto. Una brizna de viento pasaba entre ellos hasta que ocurrió algo.
Sin previo aviso, de golpe y sin que nada ni nadie pudiera ver lo que pasaba, algo pasó a gran velocidad sin percatarse de lo que pasó. Poco después los cuatro salieron volando para luego caer duro contra el suelo.
Quill: ¡Qué rayos...!
Exclamó el perro y al poco instante reapareció el responsable del repentino ataque. Era nada menos que Light Sun.
Quill: ¿Light Sun?
Preguntó Quill donde parecía reconocer al alicornio. Stuar molesto se levantó y apuntando con su arma al alicornio, dijo.
Stuar: ¡Come láser, amigo!
Stuar comenzó a disparar una y otra vez contra el alicornio. Light Sun simplemente con la Soul Calibur, desviaba cada uno de los disparos procurando que no diera a nadie del público. Luego a la velocidad del rayo se desplazó hacia el roedor donde de un tajo, partió en dos el arma para sobresalto de Stuar donde no se esperaba eso.
Rocky generó una enorme roca desde su mano para lanzarlo contra Light Sun. Light Sun simplemente lanzó un puñetazo contra la roca donde la destrozó en pedazos como si fuese de papel.
Rocky: Carai...No esperé que pudiera haber alguien que resultase ser tan fuerte.
Mara atacó a Light Sun con su espada mientras este se defendía con la suya. Pese a la gran habilidad con la espada de la coneja, Light Sun demostraba ser superior y con unos movimientos desarmó a la coneja y con una patada la tiró al suelo.
Antes de que tuvieran tiempo de hacer algo más, el alicornio empleó su magia para atar mediante aros mágicos a los cuatro.
Stuar: ¿Qué porquería es ésta? No me puedo mover ¡Rocky! ¡Haz algo!
Exclamaba el roedor intentando liberarse de los agarres mágicos. Rocky lo intentó con su fuerza, pero no pudo y ahí contestó.
Rocky: Lo siento, pero ni siquiera con mi fuerza puedo librarme de estos agarres.
Al poco rato aparecieron unos drones flotantes que aparecieron alrededor del grupo donde de inmediato los apuntaron con unos cañones.
dron: ¡Guardia nova! ¡No se muevan! ¡Están bajo arresto!
Quill intentaba liberarse hasta que el alicornio se dirigió hacia éste donde comenzó a hablarle.
Light Sun: Veo que sigues metiéndote en problemas, Quill.
Quill: Bueno. Para no perder las buenas costumbres ¿Y tú? ¿Acaso no tienes malotes que ocuparte en tu planeta?
Contestaba el perro donde parecía conocer a Light Sun de antes. Al poco rato apareció Reachell donde se apeó en la grupa del alicornio y viendo a Quill, exclamó.
Reachell: ¡Mira tú! Si es el grande y glorioso Star Riders. O más bien "Star Lerdo". Ja, ja, ja.
Decía con tono burlón la fénix haciendo que el canino la mirase molesta y la respondiera.
Quill: Anda ¿Por qué no vas a que se hagan con un plumero con tus plumas ridículas, pajarraca?
Al poco rato llegaron la guardia Nova, donde eran todo tipo de razas alienígenas, todos con trajes azules y cascos dorados que le tapaban por completo la cabeza a excepción de la boca y los ojos, donde tomaron a los cuatro problemáticos.
Light Sun: En serio, Quill. Deberías cambiar de vida. Esto de saqueador no te va a llevar a ningún lado.
Trataba el alicornio de convencer a Quill de que dejara sus actividades ilegales, donde este último le contestó de mala gana.
Quill: Que fácil es para ti decirlo. Tú tienes una excelente vida donde no tienes que preocuparte de estas cosas, mientras que yo tengo que estar todos los días sobreviviendo como puedo como quien quiere la cosa.
Light Sun: Entiendo que no sea fácil para ti, pero nunca es demasiado tarde para cambiar de vida a una mejor. Recuerda, que lo único que te impide lograr eso, eres tú mismo.
Hablaba el alicornio donde sentía que había algo bueno en Quill y trataba de ayudarlo a cambiar de vida, al fin y al cabo el alicornio sabía lo que era tener un comienzo difícil para luego de forma inesperada cambiar de vida.
Pese a las palabras del alicornio, el canino no parecía importarle demasiado. Para él fue un día fatal para hacer negocios mientras la guardia Nova le llevaban a él como a los otros.
Una vez ocupado del asunto, Light Sun se dirigió hacia una zona de la ciudad donde le esperaban nada menos que su hermano Star White en compañía de Pyra y Mythra. Éstos le saludaron al verlo.
Star: Hola, hermano.
Pyra: ¿Dónde has estado?
Light Sun: Estuve ocupado...en viejos asuntos.
Contestaba el alicornio no muy seguro de sí contarles a éstos sobre su encuentro con Quill.
Mythra: ¿Viejos asuntos?
Light Sun: Nada importante. Ahora vamos.
Terminó tajante el alicornio sin querer hablar del asunto y todos se marcharon de allí.
Mientras tanto, Quill y los otros fueron llevados al centro Nova donde se les iba a tomar sus datos como fotos de cada uno de ellos. Dos guardias de la fuerza Nova al otro lado del cristal, estaban conversando entre ellos mientras tomaban los datos.
Guardia: Bueno ¿Qué tenemos aquí?
Guardia2: El primero de ellos es Quill.
Hablaba el otro guardia mientras Quill en la pared con unas medidas para indicar la altura, miró a cámara y con un dedo se tiró del párpado mientras sacaba la lengua de forma burlona.
Guardia2: Se llama Quill, alias Star Riders, o como le llaman en algunos sitios, Star Lerdo. Ja, ja, ja. Un saqueador donde acaba metiéndose en los mayores líos que uno pueda imaginarse y acaba pifiándola lo grande. Ja, ja, ja.
Bromeaba el guardia al mencionar a Quill. Luego llegaba el turno de Mara.
Guardia2: Esa es Mara. La hija de Xanathos.
Guardia: ¿Xanathos tiene una hija?
Preguntaba confundido el guardia donde ahí su compañero le respondió ahora con un tono más serio.
Guardia2: Hija adoptiva en realidad. No sé cómo acabó bajo su cuidado. Tiene un largo historial de asesinatos y se ha ganado el odio de mucha gente.
Luego llegó al turno de Stuar siendo el más chiquito de todos (XD).
Guardia2: Stuar. Un rodinius donde fue modificado tanto genéticamente como cibernéticamente, con intención de convertirlo en un arma viviente. Escapó del laboratorio donde fue creado asesinando a todos los científicos implicados y haciendo estallar la estación donde se encontraba. Experto en armas y demoliciones, con un largo historial de destrucción a la propiedad ajena. Pequeño, pero matón.
Finalmente llego al turno de Rocky donde el hombre roca se tuvo que agachar ya que la cámara no llegaba a enfocarlo del todo.
Guardia2: Rocky. Un Petroniano del lejano planeta rocoso Petrus IV. Compañero de Stuar donde suele ser el músculo, pero no te dejes engañar. Tras su aspecto de tipo duro se esconde una autentica mente inteligente con grandes conocimientos científicos.
Tras terminar la explicación el guardia, su compañero mirando con cierto desprecio a los cuatro individuos que estaban en la pared, comentó.
Guardia: ¿Sabes qué veo yo? Un atajo de pringaos.
Tras tomarle fotos de los cuatro para tenerlos registrados, los cuatro fueron llevados a una nave donde les llevaría a estos como sus pertenencias al que sería su nuevo hogar. A la lejana estación Prisión Lost Hope, conocida porque hasta ahora nadie había logrado escapar de dicha prisión...de momento.
En la mente de Quill se le pasaba una sola idea en la cabeza.
Quill: Debí haber buscado a otro comprador que no hiciese preguntas...Así estaría forrado y lejos de problemas.
Mientras tanto, en la misma joyería de antes, estaba Ugul mirando algunos objetos de cristal en forma de figuritas de animales.
Ugul: Nada mal. Creo que compraré una colección completa para colocarlo en el salpicadero de mi nave.
Joyero: ¿Está acaso bromeando?
Preguntaba el joyero donde pensaba que el hombre ave le estaba jugando una mala broma. Ugul mirando al joyero, le dijo a éste.
Ugul: Creo que un saqueador llamado Quill intentó venderte algo ¿Hacia dónde se ha ido?
El joyeron con actitud profesional, se negó en redondo a dar dicha información y le contestó.
Joyero: Lo siento. Pero nuestra política nos prohíbe hablar ...
Ugul: ¡Bubububu!
Hablaba Ugul con actitud burlona mientras el joyero seguía hablando.
Joyero: De nuestro clientes porque...
Ugul: ¡Bubububu!
Joyero: Sería quebrantar la privacidad de...
Ugul de repente silbó y una pequeña varilla de metal terminado en punta le brilló en dicha punta con una luz roja y volando con gran velocidad mientras dejaba una estela roja, se colocó justo enfrente del sobresaltado joyero.
Ugul: Más te vale que hables o te voy a hacer un buen piercing en la frente, amigo.
Decía a modo de amenazaba mientras silbaba levemente acercando aún más la varilla cada vez más al asustado joyero, donde este último ya presa del miedo decidió hablar por fin.
Joyero: Está bien, está bien...Por lo que sé, fue arrestado por la guardia Nova y que se lo van a llevar a la prisión Last Hope.
Ugul: Ya veo. Gracias. Es un placer hacer negocios con usted.
Decía con forma burlona el ave mientras silbaba de nuevo donde la varilla voló hasta colocarse en su cinturón para alivio del joyero.
Ahora solo faltaría saber qué pasaría con Quill y la gema que le acababan de requisar con el resto de sus cosas.
Continuará.
No olvidéis comentar.
