La Esfinge Destructora 1º Parte
Inexplicablemente, en el Imperio Celeste había aparecido una esfinge gigante, que había empezado a destruir todo cuanto se encontraba. El pánico general se había extendido por alrededor donde todo el mundo trataba de huir del lugar de donde se ocasionaba la destrucción.
Esfinge: Ja, ja, ja ¡Como había echado de menos toda esta destrucción! ¡Será un estupendo modo de celebrar mi regreso!
Hablaba la esfinge donde lanzaba más y más bolas de fuego contra los edificios, ocasionando múltiples destrozos.
Star White junto con Sirius, Archer, Silver Cloud y Black Cat, observaban con gran sorpresa la enorme esfinge que había aparecido atacando la ciudad.
Archer: ¿De dónde rayos ha salido esa cosa?
Sirius: Apareció primero destrozando el tejado del centro comercial.
Star: ¡Black Cat! ¿Dónde está Bastet?
Black Cat: La había visto por última vez en los probadores de la tienda hace varios minutos.
Contestaba la gata, donde un confundido Silver Cloud la respondió.
Silver: ¿Hace unos minutos, dices? Precisamente vimos a Bastet aparecer por el centro, donde parecía estar muy malhumorada.
Black Cat: La verdad….me resultó raro verla fuera de los probadores sin que yo la fuera verla salir o algo así.
Sirius: Lo de ver a Bastet en dos sitios es extraño, pero creo que esa esfinge es Bastet.
Decía el unicornio sorprendiendo al grupo de su insinuación.
Star: ¿Qué insinúas? No irás decirnos que esa bestia que está destruyendo la ciudad es Bastet.
Sirius: Es una posibilidad. Porque además ¿Cuántas esfinges conocemos actualmente? Y según la declaración de Black Cat, esa esfinge apareció más o menos donde estaba antes Bastet.
Al grupo le costaba creer que aquella esfinge destructora fuera realmente Bastet.
Black Cat: No puede ser. Si Bastet era muy buena pony. No puede ser ese monstruo.
Star: Bastet o no, tenemos que detenerla a ser posible sin hacerla daño ¡Silver Cloud! Regresa a la academia e informa a los profesores. Puede que los necesitemos.
Silver: ¡Entendido!
Silver Cloud regresaba volando a la academia para pedir ayudar. Los demás se preparaban para combatir a la esfinge.
Star: Ventus ¿Preparado?
Ventus: ¡Por supuesto!
Star: ¡Bankai Fénix!
El fénix se fusionó con Star White adoptando su forma avanzada del Bankai.
Star: ¡Perceval!
Convocaba Star White al Blade de oscuridad.
Perceval: ¡Listo para combatir al mal!
El Blade se fusionó con Star White y este último empuñó la espada, listo para combatir. Archer empuñó su arco mientras decía.
Archer: Menos mal que me traje mi arco y mis flechas conmigo.
Black Cat: Y yo mi látigo y mi cinturón con utensilios.
Sirius: Y yo mi lanza.
Star White y compañeros se dirigían hacia la esfinge.
Archer: Bueno, Star White ¿Cuál es el plan?
Star: Debemos alejarla de la gente inocente, tratando de detenerla a ser posible sin hacerla daño.
Contestaba Star White explicando el plan.
Sirius: Sobre detenerla, puede ser complicado. Esa esfinge es enorme. Por no mencionar que llevarla a un sitio donde no haya nadie precisamente en una de las ciudades más pobladas del planeta.
Black Cat: Debemos salvarla. No quiero que la pase nada malo a nuestra amiga.
Comentaba la gata preocupada por Bastet y por encima de todo quería salvarla.
La esfinge avanzaba por las calles, siguiendo a paso lento a varias personas que huían asustados de ella. Aquello parecía satisfacer a la enorme esfinge al ver como la gente huía de ella y con una sonrisa malvada, dijo.
Esfinge: Ver a la gente huir de mi gran poder. Como había echado de menos esto. Ja, ja, ja.
Decía la esfinge generando una bola de fuego y lanzarla contra el grupo de personas. En el último momento apareció al instante Star White y con un golpe de su espada, neutralizó el ataque de bola de fuego de la esfinge.
Esfinge: ¿Quién osa interrumpir mi ansia de destrucción?
Preguntaba enojada la esfinge porque la interrumpieran. Star White blandiendo la espada, la contestó desafiante.
Star: Soy yo. Star White.
Esfinge: Star White….Sí. Ese nombre me suena. Lo vi en sus recuerdos recientes.
Unas flechas salidas de la nada se clavaron en diversas partes de su cuerpo donde estas se quedaron parcialmente congeladas. Archer con otra flecha congelante en su arco, habló bromeando.
Archer: Aunque admito que me gustan las chicas ardientes, tú prácticamente estás incendiando y no solo tú, gran parte de la ciudad. Hay que rebajar las temperaturas.
Sirius: Lo que mi compañero trata de decir es que pares de destruir cosas.
Decía ahora Sirius apareciendo con su lanza junto con Black Cat.
La esfinge miraba a los recién llegados, donde veía algo familiar en ellos.
Esfinge: Archer….Sirius….Black Cat. Sí. Me parece que los conozco.
Black Cat: ¡Bastet! ¿Eres tú? Dime la verdad, por favor.
Rogaba la gata a la esfinge donde una parte de ella no quería creer que aquel monstruo fuera su amiga Bastet. La esfinge mirando a la gata con una expresión de desprecio, la respondió.
Esfinge: ¡Eso a ti no te importa! ¡Muere!
La esfinge disparó desde un dedo un rayo que iba directo hacia la gata. Sirius la agarró para apartarla de la trayectoria del rayo y ahí decir.
Sirius: ¡Star White! ¡Creo que hablar no sirve de nada! ¡Habrá que combatir!
Star: Supongo que no queda más remedio.
Star White corría por tierra mientras la esfinge disparaba rayos contra éste. Star White esquivando los rayos, saltó y desde ahí trató de atacarla. Ahí los ojos de la esfinge brillaron con intensidad, cegando a Star White.
Star: ¡Ah! ¡Mis ojos!
Gritó el alifénix cegado por la luz. La esfinge sonriendo con maldad intentó atrapar al alifénix con sus dientes con intención de devorarlo, pero Archer disparó una flecha que al impactar, cubrió el rostro de la esfinge con una gran masa tapando así su boca y sus ojos.
Esfinge: ¡Ahhhh! ¿Qué es esta porquería? ¡Quitádmela inmediatamente!
Rugía enfadada la esfinge tratando de quitarse la masa de encima. Sirius ahí preparó su ataque.
Sirius: ¡Lanza Meteoro!
Sirius saltó y su cuerpo brilló con fuerza para luego descender a toda velocidad e impactar a los pies de la esfinge, provocando una gran explosión mágica que hizo retroceder a la yegua.
Star: ¡Rayo Fénix!
Star White lanzó un rayo contra la esfinge donde la dio de lleno y la hizo retroceder un poco más.
La esfinge logró quitarse la masa de encima donde ahora su rostro reflejaba una intensa ira. Ahí dio un fuerte pisotón en el momento que el grupo iba a por ella, provocando una onda de impacto que tiró a todos al suelo.
Black Cat estaba tendida por el suelo. Cuando alzó la mirada, observaba con horror como la esfinge estaba enfrente de ella alzando su garra en alto.
Esfinge: Tú serás mi primera victima.
Black Cat cerró los ojos temiendo su final. La esfinge bajó su zarpa con intención de aplastar a la gata hasta que en el último momento se detuvo sintiendo que algo iba mal.
Esfinge: ¡No! ¡Ahora no!
El cuerpo de la esfinge comenzó a brillar mientras esta gritaba.
Esfinge: ¡Nooooo…!
Finalmente la esfinge desapareció. Lo extraño es que dos luces surgieron de ella, una de luz blanca y otra oscura, yendo en direcciones opuestas. Aquello último fue captado por Star White.
Star: ¿Qué son esas dos luces?
El grupo se reunió con Black Cat para ayudarla a levantarse y comprobar que estaba esta bien.
Archer: ¿Estás bien, minina?
Black Cat: Sí. Estoy bien, gracias.
Agradecía la gata mientras Archer la ayudaba a ponerse de pie. Ahí la gata preguntó.
Black Cat: ¿Qué ha pasado? Parecía que iba a aplastarme, pero de repente desapareció.
Star: Ni idea. Esa esfinge desapareció tan pronto como apareció.
Black Cat: De todos modos, no estaréis pensando que esa era Bastet ¿Verdad?
Preguntaba con cierto temor la gata sobre si la esfinge maléfica era realmente Bastet.
Sirius: No sabríamos decirte.
No pudieron continuar hablando porque en ese momento llegaron la patrulla.
Vulcania: No nos digáis que hemos llegado tarde a la fiesta.
Falcon: Chicos ¿Qué ha pasado aquí?
Star White y compañía les explicaron a la patrulla lo sucedido, desde que apareció y desapareció aquella misteriosa esfinge destructora.
Star: Y eso es lo que pasó.
Adelia: Parece que habéis pasado por un gran apuro.
Archer: Usted lo ha dicho.
Respondía el arquero mientras revisaba la cuerda de su arco. Medic pensativa, comentó.
Medic: Lo que me llama más la atención es lo que dijo Star White, sobre las dos luces que surgieron en direcciones opuestas.
Star: Es lo último que vi cuando la esfinge estuvo a punto de atacar a Black Cat, pero en el último momento se detuvo.
Contestaba el alifénix al comentario de Medic.
Ardeth: ¿Os convencéis ya que dejarla viva a esa esfinge es un gran peligro?
Hablaba de repente Ardeth que había aparecido junto con su grupo de Medjais. El grupo dirigió la mirada a éstos.
Camaleón: Vaya. Los tipos raros esos con ropas aún más raras.
Comentaba Camaleón disfrazado ahora como uno de los medjais.
Red: ¿Qué queréis ahora vosotros?
Preguntó la alicornio no demasiado contenta de ver de nuevo a los medjais, ya que recordaba perfectamente como éstos intentaron asesinar a Bastet.
Ardeth: Lo que habéis visto es solo una muestra de su poder real. Si hubiera querido, habría arrasado el imperio entero. Por eso hay que destruirla de inmediato.
Black Cat: ¡Ella es nuestra amiga! ¡No la vamos a matar!
Contestó enojada la gata por lo que decía el semental.
Ardeth: Era vuestra amiga porque ella no recordaba nada de su pasado. Cuando recobre todos sus recuerdos, se volverá contra vosotros.
Trataba de advertir el semental al grupo sobre el peligro de Bastet, pero éstos no quisieron siquiera considerarlo.
Red: Primero buscaremos a Bastet para averiguar qué está pasando y luego decidimos. No vamos a matar a una de nuestras mejores alumnas por culpa de una paranoia.
Ardeth: No entendéis la amenaza que supone esa esfinge.
Red: Eso lo decidiremos nosotros. Vamos, amigos. Debemos buscar a Bastet.
Bit: Sugiero dividirnos para abarcar más terreno.
Sugería Bit donde el grupo estaba de acuerdo.
Mistic: Me parece una buena idea.
Red: Bien entonces. Partamos.
El grupo partió para buscar a Bastet, dejando solos a Ardeth y sus medjais.
Medjai: ¿Qué hacemos, líder?
Ardeth: La patrulla no es consciente de la amenaza que es Bastet en realidad. Lo que presenciaron solo es una pequeña muestra de su poder. No nos queda más remedio que buscarla y encontrarla antes que ellos para así poder matarla. Así que ¡Moveos todos!
Ordenaba Ardeth donde este y sus seguidores empezaron a buscar por su cuenta a Bastet.
La patrulla estaba dividida en grupos, donde se les unieron también los alumnos para que los ayudaran. Tenían que encontrar a Bastet antes que los medjais, ya que temían que éstos no tuvieran la más mínima duda en querer matar a Bastet en cuando la vieran.
Star White y su grupo inicial, iban buscando a Bastet por las calles del imperio. Con ellos estaban Camaleón y Bit.
Black Cat: Espero que encontremos a Bastet. Me preocupa que la vaya a pasar algo malo.
Comentaba la gata preocupada por su amiga. Camaleón ahí comentó.
Camaleón: Lo que me preocupa es que estalle como antes y cause algún alboroto de los grandes ¿Cómo ocurrió exactamente?
Sirius: No lo sabemos. Fue muy de repente.
Contestaba el unicornio a la pregunta de Camaleón. Star White estaba muy pensativo por lo de las dos luces. Presentía que tenía algo que ver con lo ocurrido.
Camaleón: ¡Un momento!
Todo el mundo se detuvo en el momento que Camaleón alzó la voz. El changeling ahora adoptando forma de una antena para ultrasonidos, dijo.
Camaleón: Detecto una respiración intensa por esa calle.
Decía el changeling señalando una calle del lugar.
Star: Mejor echar un vistazo por si acaso.
El grupo entró con cuidado en el callejón, esperando éstos cualquier cosa.
Todos estaban en máxima alerta por si ocurría algo. Todo estaba en un intenso silencio hasta que la caída de una lata sobresaltó a todos.
Camaleón: ¡Quieto! ¡Que nadie se mueva!
Gritó Camaleón disfrazado de Rambo y aparte de una ametralladora gigante, sacaba un montón de armas de fuego, punzantes e incluso un cañón sobresaliendo por arriba, apuntando con todas ellas en el origen del ruido.
Archer: Solo es una lata, profesor.
Decía Archer restando importante a la lata caída, hasta que Sirius comentó.
Sirius: La cuestión es ¿Quién tiró esa lata?
Aquello llamó la atención al grupo donde efectivamente, una lata no cae sin ningún motivo. Star White se acercó con cuidado por detrás del contenedor de donde provino la lata y ahí es donde la vio.
Star: ¡Bastet!
Exclamó el alifénix para su sorpresa encontrarse a Bastet. La esfinge estaba recogida sobre sí misma a modo de ovillo donde también parecía enormemente asustada. Los demás rápidamente se reunieron con el alifénix para ver que efectivamente era ella.
Black Cat: ¡Bastet! ¿Eres tú?
Bastet no respondió. Temblando de miedo como si estuviera aterrada de algo, miró por un momento al grupo. Ahí pudieron verla a los ojos donde la esfinge estaba bastante asustada, como si hubiese pasado por una experiencia horrorosa. Aún temblando de miedo, miró al grupo donde solo logró articular algunas palabras.
Bastet: Amigos….Sois….vosotros….
Ventus: No parece estar bien. Parece asustada.
Decía el fénix desde la grupa de Star White al ver lo enormemente asustada que estaba la yegua.
Sirius: Pues cuando estaba en esa forma de esfinge gigante demoníaca, no parecía asustada en absoluto.
Black Cat: Cállate un poco, Sirius ¿No ves que ella está asustada de verdad?
Respondía molesta la gata reprochando la actitud del unicornio. Camaleón se acercó con cuidado hacia Bastet e intentó tranquilizarla.
Camaleón: Tranquila, Bastet. Ahora estás a salvo.
Bastet: No…No lo estoy…Lo he visto…Lo que hace ella…
Archer: ¿De qué hablas, Bastet?
Bit: ¡Cuidado! Su nivel de estrés está en niveles altos.
Avisaba el robot grifo sobre el estado de Bastet. Camaleón ahora disfrazado de psicólogo, siguió en su intento de calmarla.
Camaleón: No te preocupes. Con nosotros estás segura. No tienes que temer que te hagan daño.
Bastet miró a Camaleón, aún con miedo en los ojos mientras se ponía lentamente de pie, habló entre balbuceos.
Bastet: No…No es mi seguridad lo que me preocupa….Sino de la gente que está conmigo. Si ella me encuentra…Me….Me…
Star: ¿Ella? ¿De quién hablas?
Black Cat: Bastet, por favor. Cálmate. Podemos protegerte de quien te asusta.
Bastet: ¡No! ¡No podéis! ¡Solo necesita tocarme y la pesadilla empezará de nuevo! ¡Tengo que irme lejos de aquí!
Gritó completamente asustada la esfinge donde salió corriendo a toda velocidad alejándose del grupo.
Black Cat: ¡Bastet! ¡Espera!
La esfinge no la escuchó y asustada seguía corriendo. Así hasta que Camaleón lanzó su brazo donde se extendió y atrapó con él a Bastet.
Camaleón: ¡Quieta, Bastet! ¡No corras!
Bastet: ¡Soltadme! ¡No puedo dejar que me encuentre!
Gritaba enormemente asustada la esfinge como si de la muerte estuviera huyendo. Camaleón la iba atrayendo hacia sí mientras sus compañeros rodeaban a la esfinge.
Black Cat: Bastet. Por favor, tranquilízate. Sea lo que sea que te esté ocurriendo, seguro que podemos ayudarte.
Hablaba la gata tratando de calmar a su amiga. Bastet miró por un momento a la gata donde parecía ya algo más tranquila. Aquello bastó para que Camaleón la soltara.
Camaleón: Cálmate un poco, Bastet. Estás con amigos. Sea lo que sea que te estés pasando, seguro que podemos resolverlo juntos.
Hablaba el changeling con intención de calmar a la esfinge. Bastet donde parecía tranquilizarse un poco, trató de hablar.
Bastet: Veréis…Lo que pasó antes…Fue a causa de….
Ardeth: ¡Alejaos de ella ahora mismo!
Gritó Ardeth interrumpiendo lo que iba a decir Bastet. El grupo se alertó al ver a nada menos que al medjai con su grupo.
Camaleón: ¿Vosotros otra vez? Mirad que sois pesados.
Decía con tono de frustración el changeling al ver aparecer de nuevo a los medjais, estando estos últimos armados.
Ardeth: Ese monstruo no puede volver a surgir para hacer daño de nuevo. Debemos matarla ahora.
Star: ¡Ni hablar! ¡No vamos a permitir que hagáis daño a nuestra amiga!
Contestaba de inmediato Star White empuñando la espada de Perceval y rápidamente adoptando el Bankai Fénix. Los demás estaban de acuerdo. Camaleón ahora disfrazado de caballero y con la Morfo Arma convertida en un rompe cabezas, apoyó las palabras del alifénix mientras daba vueltas el arma.
Camaleón: Dicho y hecho. Tendréis que pasar sobre nosotros.
Ardeth: No nos habéis dejado elección ¡Hombres! ¡Acabad con la esfinge! ¡A los otros quitadlos de en medio a ser posible sin matarlos!
Black Cat: Que detalle.
Respondía con sarcasmo la gata mientras sacaba su látigo para usarlo. El grupo le tocaba enfrentarse a los medjais que tenía el objetivo de matar a Bastet.
Mientras tanto, otro grupo compuesto por Kazu con Ship en su forma espada, Splendora, Rancy, Clear Water y Albar, siendo dirigidos por Gunsmith, iban buscando éstos también a Bastet.
Gunsmith: Bien, muchachos ¿Alguna ve a Bastet por algún lado?
Kazu: No, profesor.
Ship: Lo que sí veo son muchos destrozos.
Respondía el robot donde desde la espalda de Kazu observaba algunas calles destrozadas como vehículos como si hubieran sido lanzados por los aires, donde algunos se quedaban enterrados en los edificios.
Rancy: ¿Qué habrá hecho todo esto?
Splendora: Alguien con mucha fuerza sin duda.
Contestaba la alicornio astralix. En ese momento se escucharon varios ruidos como de destrozos.
Albar: Capto sonidos como de destrozos.
Kazu: Eso ya se nota.
Gunsmith: ¡Sigamos el origen del ruido ahora!
Decía Gunsmith y todos se dirigieron hacia el origen del ruido. Ahí encontraron a nada menos que a Bastet, donde la esfinge caminaba mandando a volar más de un vehículo con su magia.
Splendora: ¡Ahí está Bastet!
Rancy: ¿Por qué está mandando a volar los coches?
Water: ¿Tendrá un mal día?
Comentaban los jóvenes viendo como Bastet con expresión enojada mandaba a volar los vehículos sin ningún tipo de consideración.
Un lobo plateado salía de una tienda hasta que vio un coche estrellarse enfrente suyo. Al verlo el lobo exclamó molesto.
Lobo plateado: ¡Venga ya! ¡Si solo iba por el segundo plazo mi coche!
Bastet: ¡Maldita sea! ¡Ahora que ya volvía a estar de nuevo completa, me tiene que pasar justo esto!
Decía enojada la esfinge donde ahora alzaba un enorme camión y lo lanzó hacia atrás, justo donde estaba el grupo para sorpresa de estos.
Gunsmith: ¡Cuidado todos!
Alzó fuerte la voz Gunsmith usando su magia para teletransportar a este y al grupo justo a tiempo para evitar que el camión cayera sobre ellos.
Éstos reaparecieron a pocos metros de Bastet.
Kazu: ¿Se puede saber qué haces, yegua loca?
Preguntaba enojado el alicornio cebra a la esfinge, pero esta última ni siquiera le prestó atención y seguía caminando.
Clear: ¿Nos ignora?
Splendora: Voy a hablar con ella.
Decía la alicornio yendo hacia la esfinge, Gunsmith intentó pararla.
Gunsmith: ¡Espera! ¡No te acerques!
Splendora finalmente alcanzó a la esfinge y caminando hacia su lado, trató de hablar con ella.
Splendora: ¡Bastet! ¿Qué te pasa? ¿Por qué de repente has empezado a destrozar vehículos? ¿Acaso no te das cuenta de que estás asustando a todo el mundo con tus acciones desenfrenadas?
Bastet: ¡No molestes, mortal!
Contestaba con tono enojada la esfinge sin ni siquiera a mirarla ni parar su marcha. Splendora insistió.
Splendora: No estás siendo tú misma, Bastet. Por favor, habla con nosotros. Si tienes algún problema, podemos ayudarte a….
Bastet: ¡Que me dejéis en paz!
Gritó furiosa la esfinge sacando las uñas de sus zarpas e intentando golpear a Splendora, donde al principio la alicornio se sorprendió por ello pero por fortuna fue rápida de reflejos donde saltó hacia atrás para esquivar el ataque.
Kazu: ¡Eh! ¡Qué crees que haces!
Gritó Kazu sacando de inmediato a Ship modo espada ya que presentía que iba a combatir. La esfinge mirando al grupo, les gritó a éstos.
Bastet: ¡Ahora estoy ocupada! ¡Perdeos todos, mortales!
Water: ¿Por qué nos llama mortales?
Albar: Su comportamiento no tiene lógica alguna con la Bastet que conocemos.
Bastet usó su magia para generar una esfera de energía sobre su cabeza.
Gunsmith: ¡Cuidado todos!
Advertía Gunsmith y en ese momento de la esfera surgió varios relámpagos que se dirigían hacia el grupo donde estos tuvieron que ponerse a esquivar.
Kazu: ¡Ahora sí que se lo ha buscado!
Kazu iba a atacar a la esfinge hasta que Splendora sujetándolo con su magia, le dijo a éste.
Splendora: ¡Quieto, Kazu! Bastet no parece ahora ella misma. Debemos intentar hacer esto sin hacerla daño.
Rancy: ¿Y qué impide que nos haga daño ella a nosotros?
Preguntaba con ironía el ciervo al ver que la esfinge venía con intenciones hostiles. Clear Water alegremente le contestó a Rancy.
Clear: Para eso estás tú, Rancy. Ya que eres nuestro médico.
Rancy: Muy graciosa.
Respondía con ironía el ciervo ante el comentario de la sea pony donde esta última sonreía de forma traviesa.
Bastet llena de ira, con sus patas delanteras golpeó con fuerza el suelo provocando que se levantara y avanzara contra el grupo.
Gunsmith: ¡Todo el mundo, saltad!
Gritó Gunsmith saltando este y los demás hicieron lo mismo para esquivar el ataque.
Albar: Puedo dormirla con dardos tranquilizantes y así detenerla sin hacerla daño.
Decía Albar donde en su rifle lo cargaba con dardos tranquilizantes.
Gunsmith: Adelante.
Albar disparó varias veces contra la esfinge, pero esta última empleó su magia para detener los dardos.
Bastet: Necesitareis algo mejor que eso.
Decía con una sonrisa perversa la esfinge donde lanzó de nuevo los dardos.
Kazu: ¡Cuidado!
Kazu desvió uno de los dardos, pero accidentalmente hizo que diera en una pata de Rancy, provocando que éste empezar a quedarse dormido.
Rancy: Creo….que necesito….una…siesta…
Decía el ciervo donde se durmió y empezó a caer, donde fue atrapada por Clear Water donde esta trató de despertarlo.
Clear: ¡No te duermas ahora, Rancy! Un médico no puede dormirse nunca en el trabajo.
Decía la yegua zarandeando al ciervo en un vano intento de despertarlo. Gunsmith al ver que la esfinge no se iba a entregar sin luchar, dio por sentado que tendría que reducirla por la fuerza.
Gunsmith: Muy bien. No nos deja elección. Tendremos que reducirla a la fuerza.
En ese momento el comunicador que tenía Gunsmith comenzó a emitir una luz, clara señal de que enviaban un mensaje.
Gunsmith: Aquí Gunsmith ¿Qué ocurre ahora? Aquí estamos ahora un tanto ocupados.
Decía Gunsmith sin apartar la vista de Bastet. En él se escuchaba la voz de Camaleón.
Camaleón: Aquí tenemos problemas, y otra cosa. Hemos encontrado a Bastet.
Gunsmith: Lo sé. Lo tenemos justo delante.
Camaleón: Que raro. Estamos ahora mismo en la zona suroeste de donde estáis vosotros y yo diría que Bastet está por aquí.
Kazu: ¿Qué dice?
Preguntó confundido el alicornio cebra al igual que los demás. Bastet al escuchar eso, sonrió con perversidad mientras decía.
Bastet: Con que está al suroeste. Ya es mía.
Decía la esfinge desplegando sus alas y saliendo despedida a una velocidad enorme. El grupo veía como se alejaba la yegua del lugar.
Gunsmith: ¡Hay que seguirla!
El grupo se puso a perseguir a Bastet, siendo Kazu el que cargaba con Rancy.
Kazu: ¿Por qué tengo yo que cargar con el ciervo?
Splendora: Porque es por tu culpa que esté ahora dormido. Así que tienes que compensar por tu error.
Respondía Splendora con una ligera sonrisa burlona para molestia del joven cebra alicornio.
Mientras tanto, Star White y los otros se enfrentaban a los medjais, estos últimos tratando de alcanzar a Bastet para matarla, pero el grupo se lo impedía por todos los medios.
Star: ¡Alejaos de ella, malditos!
Gritaba Star White en su Bankai Fénix alejando con golpes de viento a los medjais.
Ardeth: ¿Acaso no lo entendéis? ¡Estamos haciendo esto para protegeros de ella!
Archer: No es de ella de quien debemos protegernos.
Respondía Archer disparando unas flechas con cuerda donde acababa atando a los medjais que pillaba por el camino.
Camaleón: ¡Estira el brazo…Lanzamiento!
Gritaba Camaleón lanzando su brazo extendido hacia atrás para luego lanzarlo a la vez que hinchaba su casco, logrando golpear a varios medjais por el camino.
Bastet observaba como sus amigos luchaban por defenderla, cosa que la alegraba por tener tan buenos compañeros y a la vez la hacían sentir culpable.
Ardeth: ¡Ahí estás!
Decía Ardeth donde había lograd escabullirse hasta llegar hacia donde estaba Bastet. La esfinge no se sobresaltó al verlo.
Bastet: Supongo que vienes a matarme ¿Verdad?
Ardeth: Por supuesto. Tu reinado de terror termina aquí.
Respondía el semental de forma amenazante mientras sacaba una espada. Bastet lejos de estar asustada, estuvo algo tranquila donde ahí le contestó.
Bastet: Si yo muero, la otra ya no podrá tenerme y mucho menos usarme para sus planes. Así que, adelante. Hazlo.
Ardeth parecía confundido por las palabras de la esfinge. Él esperaba que ésta se resistiera, pero no fue así.
Ardeth: ¿Acaso no vas a resistirte?
Bastet: ¡Tú quieres acabar con la maldición de la esfinge! ¿Verdad? ¡Pues deja de dudar por un momento y acaba ya con mi vida, así al menos la otra ya no tendrá a nadie que la ayude en sus diabólicos planes!
Gritaba enojada la esfinge y queriendo acabar ya con su vida. Ardeth estaba confuso por la actitud de la esfinge, pero no podía quedarse a pensar ya que tenía una misión que cumplir.
Ardeth alzó su espada con intención de acabar con la esfinge hasta que un látigo atrapó su brazo impidiendo a este atacar.
Black Cat: ¡No ataques a mi amiga, maldito!
Gritaba molesta la gata donde no estaba dispuesta a dejar que lastimaran a su amiga.
Bastet: ¡Black Cat! ¡Déjale hacer, por favor!
Black Cat: ¿Qué dices? No puedes en serio pedirme que deje que este semental te mate.
Bastet: Tú no lo entiendes. Si hubieras pasado por lo que yo he visto, entenderías por qué debo morir.
Black Cat estaba muy confusa por las palabras de la esfinge, pero no tuvo más tiempo para pensar ya que un rayo mágico golpeó a Ardeth donde lo mandó estrellarse contra unos cubos de basura.
Sirius: ¿Quién ha lanzado ese ataque?
Bastet?: ¡Yo! Je, je, je.
Todo el mundo se sorprendió de ver a una segunda Bastet aparecer.
Bastet: No…Me ha encontrado…
Decía con miedo la esfinge al ver a la otra Bastet.
Camaleón: ¡Veo doble!
Exclamó el changeling adoptando forma de él mismo y una copia.
Star: ¿Cómo puede haber dos Bastet?
Preguntaba confundido el alifénix. Ardeth que se había levantado, no comprendía nada.
Ardeth: Esto no lo explicaba en los manuscritos antiguos.
Decía el semental donde no parecía saber nada de las dos Bastet.
Sirius: ¿Quién eres tú?
Preguntaba Sirius apuntando con su lanza a la otra Bastet. La esfinge con una sonrisa perversa, contestó.
Bastet: Soy Bastet…o más bien su mitad.
Archer: ¿Mitad?
Bastet2: Cuando los antiguos hechiceros trataron de detenerme, usando para ello un hechizo que presuntamente reduciría mi poder y me borraría la memoria. Pero tuvo un efecto inesperado. Lo que hizo fue dividirnos en dos mitades, mi yo débil a quien tratáis de proteger, y mi yo grande y poderosa que obviamente soy yo. Ja, ja, ja.
Explicaba la esfinge emulando una sonrisa perversa. Camaleón miró a Ardeth donde este hizo un gesto con la cabeza en señal de no saber nada.
Bastet2: Yo acabe lejos y cuando recobré el sentido, intenté recuperar mi otra mitad para volver a ser poderosa. Por desgracia los medjais la habían capturado y la habían llevado a un lugar que yo desconocía dónde estaba. Los habría atacado si no hubiese estado tan débil. Así que solo pude quedarme a dormir en un lugar secreto, esperando a que mi otra mitad volviera a aparecer.
Star: Hasta que nosotros la encontramos ¿Verdad?
Bastet2: ¡Correcto! Por si acaso, tenía un hechizo que me mantenía dormida y que solo me despertaría en caso de que mi otra mitad se despertara también. Ahora que estamos por fin juntas, reanudaremos por donde lo hemos dejados.
Ardeth: ¡Eso nunca, monstruo! ¡Muere!
Ardeth lanzó varios cuchillos como varios de sus hombres flechas. La esfinge sonrió con malicia mientras haciendo un gesto con su mano, detuvo las armas para luego incinerarlas por completo.
Bastet2: Ja, ja, ja. Tranquilos. Pronto os mataré a todos. Pero antes…
Decía la esfinge teletransportándose justo al lado de la otra Bastet para horror de esta última.
Bastet: ¡No! ¡Aléjate de mí!
Bastet2: Tranquila. Solo será un momento.
Decía la esfinge agarrando la garra de su otra mitad y dicha garra se iluminó con una luz roja oscura.
Bastet2: ¡Volvamos a ser una!
Bastet: ¡Ayudadmeeee…!
Gritaba de miedo la esfinge extendiendo su garra rogando ayuda a sus amigos.
Black Cat: ¡Bastet!
Black Cat corrió e intentó agarrar la garra de Bastet, pero ésta desapareció en una columna de luz y que empujó a la gata donde fue atrapada por Camaleón con disfraz de jugador de Rugby.
Bit: ¡Atención! Detectado altos niveles de energía.
Ardeth: Oh, no…
Las dos esfinge desaparecieron para luego volver a convertirse en la esfinge destructora.
Bastet: Ja, ja, ja ¡He vuelto! ¡Hora de empezar destruyéndolo todo! Ja, ja, ja.
Se jactaba la esfinge donde tenía clara una cosa, quería destruirlo absolutamente todo.
Continuará.
No olvidéis comentar.
