Ataque de Codicia

Star White estaba ahora patrullando los barrios bajos cercanos a Omega con el Gran Torino.

Star: ¿Qué hacemos aquí, Gran Torino?

Preguntaba el joven alifénix donde el viejo semental sonriendo le contestó.

Torino: La mejor forma de obtener experiencia es patrullando la ciudad, sobre todo en zonas tan transitadas como Omega.

Ventus: Y tan transitada. Por lo que sé, por menos de dos reales te apuñalan por la espalda.

Respondía el fénix celeste con sarcasmo mientras observaba como gente peligrosa se asomaba por los límites de Omega. El Gran Torino para tranquilizar a los jóvenes les dijo a estos.

Torino: No os preocupéis. Mientras no crucemos los límites de Omega, no hay nada del que preocuparse.

En ese momento algo se estrelló cerca de ellos para sobresalto de todo el mundo.

Star: ¿Qué ha pasado?

Torino: ¡Atrás, chavalín!

Respondió serio el Gran Torino mientras se acercaba con cuidado a la zona de impacto. Ahí vio que era nada menos que Basilio, siendo reconocido por Star White donde lo conocía de antes.

Star: ¿Basilio?

Preguntaba el alifénix al ver al minotauro, donde este último se ponía de pie y respondió.

Basilio: Siento el sobresalto, simplemente se me ha presentado un problema de gran envergadura.

De improviso un brazo elástico surgió de la nada, haciendo que el minotauro rápidamente tuviera que agacharse para esquivar el ataque e impactara contra una pared donde destrozó parte de la misma.

La gente se alarmó ante tan inesperado ataque y aún más cuando apareció un extraño monstruo delgado y largo de piel color verde oscuro, donde sospechosamente tenía una apariencia similar a nomu, pero sin pico, solo una boca con labios metálicos y dientes afilados.

Basilio: ¡Ahora verás que te has metido con el minotauro equivocado!

Decía Basilio armado con un enorme hacha y cargar contra el monstruo, intentando golpear a este último pero que al final lograba esquivar los ataques con gran agilidad.

Star White se sorprendió al ver a un monstruo similar a nomu.

Star: (¡No puede ser! Es como el monstruo que atacó la academia ¿Serán hermanos o algo así?)

Torino: ¡Quédate aquí, chico! De esto me ocupo yo.

Decía el semental donde comenzó a moverse con sus saltos donde logró propinar una fuerte patada en la cabeza del monstruo donde lo mandó a volar lejos.

Rápidamente el nomu se levantó y lanzó su pierna, que se extendía como si goma se tratase, a toda velocidad contra Torino donde el semental pegó un veloz salto para esquivarlo y acto seguido saltar una vez más en el aire para tratar de propinar una fuerte patada. Ahí el nomu con sus brazos bloqueó el ataque a la vez que recuperaba su pierna lanzada.

Gran Torino tuvo que saltar una vez más para esquivar un intento de golpe por parte del nomu.

Mientras Gran Torino caía cerca de donde estaba Basilio, este último le comentó al viejo.

Basilio: Te conozco. Eres el viejo chiflado que vive en ese estercolero de casa cercana a Omega.

Decía el minotauro reconociendo al viejo semental donde este último le quiso preguntar a Basilio.

Torino: ¿Qué ocurre aquí? ¿De dónde ha salido ese monstruo?

Basilio: Éste y dos más aparecieron causando disturbios. Flavia, junto con los chicos que estaban a nuestro cuidado, están luchando contra los otros dos.

Respondía el minotauro a la pregunta del semental. Torino con expresión seria, comentó preocupado.

Torino: Mal asunto si han aparecido monstruos. Mejor nos ocupamos de este monstruo y luego ayudamos a los demás.

Basilio: Me parece bien, viejo.

Torino y Basilio fueron a ocuparse del monstruo. Star White observaba como ambos se enfrentaban al monstruo donde este último mostraba poderes elásticos.

Ventus: ¿Qué hacemos, Star White?

Star: Naturalmente, ayudarlos.

Respondió con decisión el alifénix.

Ventus: ¿Pero no dijo el Gran Torino que nos mantuviéramos al margen?

Star: Han mencionado que la señorita Flavia se ocupa de otros dos monstruos junto con dos chicos a su cuidado. Tienen que ser Carl y Jin. Debemos ir a ayudarlos.

Ventus: Me imaginaba que dirías eso.

Respondía el fénix dando por sentado que su compañero no dudaría en ir a ayudar a sus compañeros apenas enterarse de que estos estarían en grave peligro.

Star: Vamos allá, Ventus ¡Bankai!

El fénix se fusionó con el alifénix, para así otorgarle la armadura fénix.

Star: ¡Vamos allá!

Star White se disponía a buscar a sus compañeros hasta que vio algo que le llamó poderosamente la atención.

Era un reguero de monedas de oro y objetos de valor que se arrastraba por el suelo como si un gran grupo de hormigas estuvieran llevando comida al hormiguero.

Star: ¿Qué es eso?

Star White decidió seguir el reguero de oro donde sorprendentemente parecía pasar desapercibido para la gente, razón obvia por el hecho de que un monstruo estaba atacando la calle y su principal preocupación era huir del peligro.

Star White seguía el reguero de oro donde lo llevó hasta una tapa de alcantarilla abierta.

Ventus: (Oro que se mueve solo. Esto no es normal).

Pensaba el fénix para sí donde Star White escuchando sus pensamientos, le contestó.

Star: Está claro que algo sospechoso está pasando aquí. Mejor echar un vistazo.

El alifénix se introdujo en la alcantarilla.

Una vez abajo, el alifénix vio que había mucho más oro moviéndose por la alcantarilla como si un río dorado se tratase.

Star: Vale. Esto ya se está volviendo raro por momentos.

Comentaba el fénix donde le resultaba muy sospechoso todo eso.

Siguiendo el nuevo rastro, el alifénix llegó hasta una importante bajada hacia un agujero donde todo el oro caía hacia donde parecía no tener fondo.

Star: Un agujero sin fondo. Habrá que investigar.

El alifénix iba a descender volado, pero sin percatarse de que una gran caja fuerte se movía por detrás de él con el resto del oro, lo golpeó por la espalda e hizo que cayera al vacío.

Star: ¡Ahhhh….!

Gritaba el alifénix descendiendo con el río dorado durante unos instantes, hasta que finalmente llegó al fondo.

Star: ¡Au…! Mi cabeza….

Se quejaba de dolor el alifénix tocándose la cabeza adolorida. Cuando ya se sintió mejor, se fijó en el lugar dónde estaba.

Era una sala bastante amplia rodeada de oro y objetos de valor, con múltiples torres de oro y demás materiales donde alcanzaban gran altura.

Ventus: (¿Qué lugar es este?)

Star: No lo sé. Parece una zona donde guardan cantidades enormes de oro.

Contestaba el alifénix igual de confundido que su fénix. Ahí Ventus le comentó a su compañero.

Ventus: (Oye, Star White ¿No hubo recientemente noticias sobre robos de grandes sumas de oro, piezas de arte y objetos de valor?)

Star: ¿Insinúas acaso que estamos donde han llevado todo el botín de los robos?

Ventus: (Es bastante Probable y….¡Cuidado!)

Escuchando el aviso de su fénix, rápidamente Star White saltó para esquivar una enorme bañera de oro lanzada hacia él donde luego dicho objeto se estrellara a lo lejos.

Nada más tocar el suelo, Star White se puso en guardia. Al poco rato se escuchó una risa perversa.

Codicia: Vaya, vaya, vaya. Parece que tenemos visita. Alguien que ha entrado en mi fabuloso museo sin pagar entrada ¡Y la entrada es con tu vida!

Star White se sorprendió de ver a un extraño ser subido en lo alto de una torre de oro, siendo nada menos que Codicia. El alifénix no se imaginaba cómo lograba aquella misteriosa criatura cargar con aquel enorme saco por la espalda como si no le pesara nada.

Star: ¿Quién rayos eres tú? O mejor dicho ¿Qué eres tú?

Preguntaba el alifénix tratando de ganar tiempo mientras con una garra tras la espalda, iba tocando un teléfono móvil que tenía consigo. El llamado Codicia se presentó.

Codicia: Debería cobrarte por la pregunta, pero te lo diré por una vez por cuenta de la casa. Soy Codicia, uno de los Siete Pecados Capitales.

Star: ¿Has dicho uno de los Siete Pecados Capitales? ¿Tienes algo que ver con un tal Ira y Pereza que nos encontramos en un planeta lejano?

Preguntaba el alifénix aún tratando de ganar tiempo mientras seguía con su móvil. Codicia sin problemas le contestó.

Codicia: Veo que conoces a mis hermanos. Eso ahorrará muchas explicaciones gratuitas. Je, je, je.

Decía Codicia mientras se movía ágilmente de una montaña de oro a otra. Star White sin dejar de seguirlo con la mirada, siguió interrogándolo.

Star: Debo deducir que eres tú el responsable de los misteriosos robos de oro y objetos de valor que han estaco ocurriendo en los últimos días.

Codicia: Otra vez correcto. Soy yo.

Codicia sacó de su saco una estatua de oro de gran tamaño. Sin importarle que dicha estatua fuera pesada, Codicia la movía como si fuese una pluma mientras hablaba.

Codicia: Soy un gran coleccionista y me gusta todo lo que tenga valor, sobre todo el arte y el oro. Je, je, je. Pero no nos desviemos del tema. Has entrado sin mi permiso en mi sala de colección ¡Por lo que vas a morir aquí mismo!

Gritaba esto último lanzando la estatua a modo de proyectil hacia Star White. El alifénix lo esquivó mediante un teletransporte y una vez en el aire, disparó un rayo de fuego. Codicia saltó para esquivar el rayo y pasar por encima del alifénix donde ahí sacando un centro de oro, lo golpeó encima donde mandó al alifénix estrellarse contra el suelo lleno de oro.

Rápidamente Star White tuvo que apartarse para esquivar un nuevo ataque de Codicia, que consistía en una enorme roca hecha de plata donde por poco no le alcanzó.

Acto seguido Codicia empezó a lanzar diamantes afilados contra el alifénix donde este último se escondió por detrás de una estatua de plata, donde algunos diamantes se clavaron como cuchillos en ella.

Ventus: (¡Star White! ¡Me parece que estamos en problemas!).

Avisaba el afénix a Star White donde el alifénix asomándose con cuidado, para acto seguido esconderse de nuevo para esquivar otros diamantes afilados, le dio la razón.

Star: ¡Lo sé! Solo espero que los refuerzos estén en camino.

Contestaba Star White esperando recibir la ayuda pronto.

En otra parte de la ciudad, Flavia junto con Carl y Jin, estaban combatiendo contra un nomu musculoso de piel rojiza.

Ésta y los otros dos retrocedieron bruscamente a causa de un golpe de impacto proveniente del nomu.

Flavia: ¡Agarraos fuerte, chicos! Este bicho no tiene esos músculos de adorno precisamente.

Advertía la yegua mientras blandía su espada. Carl y Jin haciéndola caso, se pusieron en guardia.

Carl: Normalmente trataría de arreglar las cosas hablando, pero dudo mucho que ese tipo atienda a razones.

Jin: Dudo mucho que siquiera sepa hablar.

Respondía Jin donde cargaba de energía su espada y lanzó una poderosa ventisca contra el nomu musculoso, dejándolo congelado.

Flavia: Buen movimiento, chico.

La felicitaba la yegua con una sonrisa al semental. Por desgracia la celebración no duró mucho ya que el nomu logró liberarse del hielo.

Carl: ¡Cuidado! Se ha liberado.

Advertía Carl y en ese momento el nomu lanzó una ventisca similar a la que había lanzado Jin antes para sorpresa de estos.

Flavia: ¿Qué rayos?

Jin: ¡Atrás!

Jin se interpuso creando una poderosa barrera etérica para proteger al grupo de la ventisca lanzada por el nomu.

Jin: (¿Acaso esta cosa posee poderes del hielo iguales a los míos?)

Pensaba para sí Jin al ver que el monstruo estaba lanzando el mismo ataque que había lanzado él. Mirando de reojo a Carl, le dijo a éste.

Jin: ¡Carl!

Carl: ¡Entendido!

Carl agarrando la acera, arrancó un buen trozo y lo lanzó hacia arriba, sorteando la barrera de Jin.

Dicho trozo se congelaba por la ventisca, pero no detuvo la marcha. Al final el nomu fue alcanzado por el trozo donde se lo llevó por delante y estrellarlo contra una pared.

Flavia: ¡En el blanco!

Celebraba la yegua hasta que de repente el trozo congelado empezó a moverse y ahí todos vieron como el nomu alzaba la roca como si nada.

Flavia: ¡Tienes que estar bromeando!

El nomu lanzó la roca donde el grupo tuvo que apartarse, salvo Flavia que fue corriendo hacia delante para acto seguido deslizarse por el suelo para pasar por debajo el trozo congelado.

Flavia: ¡Ya eres mío!

Flavia esquivó un intento de golpe del nomu y pasando por su lado le dio un potente tajo contra el brazo con que intentó golpearla a ella.

Flavia acabó al otro lado mientras al nomu le caía el brazo.

Carl: ¡Bien hecho, señora Flavia!

La iba felicitando el minotauro a la yegua mientras esta sonreía. Por desgracia la celebración no duró mucho cuando al nomu se le fue regenerando otro brazo.

Flavia: ¡No fastidies! ¿Puede regenerarse?

Jin: (Es como la criatura que atacó la academia. Es posible que, incluso sean de la misma familia o del mismo ser que los creó).

Pensaba para sí Jin al deducir que el nomu era muy similar al monstruo durante el ataque a la academia por su capacidad de regenerarse.

Flavia: ¡No importa, chicos! Vamos a acabar con él todos a la vez.

Flavia, Jin y Carl cargaron contra el monstruo nomu. Este último no hizo nada, sino que en cierto modo tensó sus músculos y luego empezar a brillar como si estuviera hecho de metal pulido.

Flavia y Jin atacaron con sus espadas mientras Carl lanzaba un puñetazo. Sorprendentemente el nomu aguantó los golpes donde fue para el grupo como golpear duro metal.

Sin tiempo para reaccionar, el nomu se giró sobre sí mismo donde golpeó a los tres con fuerza para luego mandarlos a volar.

Los tres se estrellaron contra diversas paredes de las calles.

Carl lograba ponerse de pie con algunos daños, pero aún estable.

Flavia: Chico…A veces envidio esa enorme resistencia tuya.

Decía la yegua poniéndose de pie como podía ya que la dolía la espalda. Jin poniéndose también de pie, comentó.

Jin: Creo que es hora de ponerse serio.

Decía esto Jin donde comenzó a moverse a gran velocidad por alrededor del nomu, comenzando a dar un sin fin de tajos con su espada donde creaba profundos cortes en su cuerpo.

Jin se alejó observando como el nomu estaba completamente lleno de heridas muy profundas. Aún así se iban regenerando.

Jin: No lo creo.

Jin usó sus poderes congelando el suelo hasta llegar al nomu y encerrarlo en puro hielo.

Jin comenzó a girar su espada por alrededor de él dibujando así un círculo. Cuando su espada estaba en su punto más alto, Jin realizó un veloz tajo vertical contra el bloque de hielo.

A los pocos segundos el bloque de hielo se rompió en pedazos quedando pocos trozos del nomu.

Carl: ¡Whoa, Jin! ¡Eres espectacular!

Elogiaba Carl la destreza de Jin donde el semental se daba la vuelta dando la espalda a los restos del nomu. Flavia viendo algo que la alertó, trató de avisar.

Flavia: ¡Detrás de ti, Jin!

Jin se giró y su sorpresa fue que una parte de la cabeza del nomu quedaba intacta, donde comenzaba a regenerarse poco a poco.

Flavia: ¡Hay que destruirlo ahora antes de que se regenere por completo!

Decía Flavia cargando contra la cabeza con intención de destruirlo y Jin se unió a ella. Pero antes de que pudieran alcanzarlo, algo se interpuso en su camino.

Era otro monstruo nomu, solo que más delgado, más alto y de piel blanca con partes grises. Éste tenía grandes alas para volar como garras y pies afilados con largas uñas.

Flavia: ¿Otro bicho raro y encima más feo todavía? ¡Esto no acaba!

Se quejaba molesta la yegua al ver aparecer otro nomu. El nuevo abrió su boca donde lanzó un chorro de aire que empezó a hacer retroceder al grupo.

Éstos trataron de mantener la posición mientras observaban como el nomu rojo se había regenerado por completo.

Flavia: Mucho me temo que las cosas se han complicado más que antes.

Decía Flavia donde comenzaba a preocuparse al ver que ahora tenían que lidiar con dos nomus. El nomu musculoso cargó contra ellos.

Carl: ¡Cuidado!

Carl se interpuso donde lanzó su puño y el nomu haciendo lo mismo, donde ambos chocaron sus puños provocando una onda de choque por alrededor.

Carl: Presiento que tú no tienes la misma capacidad de absorber los golpes como el que atacó la academia ¿Verdad?

Decía Carl viendo que el nomu no había absorbido el puñetazo lanzado por Carl. El minotauro ahí comenzó a lanzar ataques mientras el nomu hacía lo mismo, convirtiéndose en una intensa lluvia de puñetazos fuertes.

Carl: ¡Yo protejo a mis compañeros!

Decía Carl donde esquivando un puñetazo lanzado por el nomu musculoso, Carl lanzó un fuerte directo con todas sus fuerzas en el estómago hasta el punto de hundirlo por completo. El impacto fue tal que logró mandarlo a volar muy lejos hasta estrellarse por ahí.

Carl iba recobrando fuerzas sin percatarse de que el nomu volador volaba detrás de él con intención de atacarlo, hasta que Flavia se interpuso.

Flavia: ¡Ni lo sueñes!

Flavia lanzó unos tajos contra el monstruo donde este último se defendía con las garras o pies afilados, llegando incluso a bloquear algunos ataques.

El monstruo lanzó ataques en forma de esferas de viento desde su boca, donde Flavia tuvo que esquivarlas. Jin moviéndose a alta velocidad intentó golpear al nomu, pero este último como si lo hubiera previsto, bloqueó con sus pies afilados el ataque del semental.

Jin: (Tiene buenos reflejos).

Pensaba para sí Jin al ver que el monstruo había logrado evitar su ataque. En ese momento se escuchó una voz.

¿?: ¡Apartaos todos!

Un veloz rayo mágico salía de la nada, donde Jin y los otros se apartaron. El nomu volador lo esquivó, pero el nomu musculoso fue golpeado por dicho rayo mágico de lleno.

Flavia: Ya te hacías esperar, Magic Star.

Decía con una sonrisa la yegua al ver aparecer a Magic Star, solo que ahora no era un unicornio, sino un alicornio. El semental guerrero empuñando su armadura como una espada, la contestó.

Magic Star: En cuanto supe que había problemas, vine tan rápido como pude.

Carl: ¿No vino Will contigo?

Preguntó Carl ya que sabía que Will estaba a cargo de Star Magic. El semental le contestó.

Star: Dijo que había recibido una llamada extraña y tuvo que irse. Lo dejé irse ya que confiaba que sus poderes lo ayudaran en caso de problemas.

Flavia: Siento interrumpir, pero ¿Qué le pasa al nomu al que le golpeó el rayo?

Preguntaba esto Flavia señalando al nomu musculoso, donde su cuerpo comenzó a brillar para acto seguido disparar un rayo mágico del mismo tipo que Magic Star contra el grupo.

Magic Star: ¡Cuidado!

Todos se apartaron mientras Magic Star bloqueaba con mucho esfuerzo el rayo mágico con una barrera mágica.

Magic Star: Interesante. Por lo visto puede hacer magia como un alicornio.

Comentaba Magic Star al ver lo que fue capaz de hacer el nomu. Jin teniendo otra teoría, dijo.

Jin: No lo creo. Antes le lancé un ataque de hielo donde al poco rato lo imitó. Y ahora lo mismo con tu ataque. Creo que ese monstruo puede emular los ataques que este reciba.

Flavia: Mmm…Una teoría interesante del cual no se puede descartar.

El nomu volador fue a atacar al grupo. Éstos se prepararon, pero Magic Star a la velocidad del rayo atacó al nomu volador donde de un golpe de su espada cargada de magia, golpeó al nomu y lo hizo estrellarse contra el suelo.

El nomu musculoso intentó atacar a Magic, pero éste se agachó para esquivarlo para luego darle una fuerte patada cargada de magia contra el mentón del nomu. Acto seguido Magic cargó su cuerno de magia para disparar un potente rayo mágico que arrastró al nomu hasta estrellarlo contra una pared.

Magic Star: Os daréis cuenta de que no soy fácil de vencer.

Decía confiado el alicornio. En ese momento Jin escuchó un sonido y sacó de su abrigo un teléfono móvil que este tenía. El semental aún le costaba dominar tal aparato, pero enseguida vio de qué se trataba.

En la pantalla del móvil se mostraba un mapa con una ubicación y que representaba el móvil de Star White.

Jin: Que raro ¿Por qué Star White me manda su ubicación?

Carl: No solo tú. Yo también lo he recibido.

Contestaba Carl mostrando este que su teléfono mostraba lo mismo. Jin se quedó pensando.

Jin: Es muy extraño esto. Carl, quédate aquí y ayuda a Flavia y a Magic Star. Yo me iré a buscar a Star White.

Carl: ¿Estás seguro de que deberías ir solo?

Jin: No te preocupes. Sé cuidarme. Hasta luego.

Se despedía Jin donde comenzó a moverse rápido, dejando a Carl con los otros.

Carl: No sé si es buena idea dejarlo solo.

Flavia: ¡Carl! ¡Cuidado!

Carl se giró para ver como el nomu volador se dirigía hacia él. Carl logró esquivar un zarpazo para luego darle un fuerte puñetazo en mitad de la cara, donde lo mandó a volar lejos.

Carl: ¡Bufff…! En serio. No dejan un respiro.

Flavia: ¿Se puede saber dónde se ha metido tu amigo? El del hielo.

Preguntaba la yegua por Jin, donde Carl simplemente la contestó.

Carl: Dijo que iba a ayudar a Star White. Presiente que está en problemas.

Flavia: ¿Con Star White? ¿El hijo de Mike? No sabía que estaba aquí.

Comentaba la yegua donde parecía ignorar por completo que Star White estaba a cargo del Gran Torino. Carl rascándose la cabeza, comentó.

Carl: Mucho me temo que no sé nada sobre con quién está.

Mientras tanto, Star White volaba a ras del suelo, esquivando objetos de oro pesados que Codicia le iba lanzando.

Codicia: ¡Corre, chico! ¡Corre! ¡Pronto formarás parte de mi colección!

Alzaba la voz Codicia entre risas perversas, donde desde lo alto de una de las torres de oro, iba lanzando infinidad de objetos contra el alifénix.

Star White hizo una veloz maniobra para cambiar de dirección y cargar contra el pecado de la codicia. En pocos segundos logró llegar justo enfrente de Codicia.

Star: ¡Toma esto! ¡Puño Fénix!

Cargando su puño de fuego, lanzó un directo. Sorprendentemente Codicia logró bloquear su ataque con un gran escudo de plata que detuvo en seco el ataque del alifénix.

Antes de que tuviera tiempo de hacer otra cosa, Codicia empujó bruscamente el escudo haciendo retroceder al alifénix.

Codicia saltó a gran altura para luego descender con intención de aplastar al alifénix. Con su tamaño normal no sería demasiado efectivo, si no fuese por el enorme saco que cargaba encima donde sin lugar a dudas debía ser muy pesado.

Star White se hizo a un lado para esquivarlo. Parecía que lo iba a lograr hasta que Codicia extendió su garra agarrando una de las patas traseras del alifénix.

Codicia: ¡No tan rápido, fénix pony!

Con una risa perversa, se llevó con él a Star White para luego estamparlo duramente contra el suelo.

Star: Que golpe….

Decía quejándose de dolor el alifénix por el golpe. Codicia sacó una lanza de oro con punta de diamante con intención de ensartar al alifénix, hasta que Star White rodó por el suelo para evitar ser empalado contra el suelo con dicha lanza.

Codicia lanzó la lanza contra el alifénix donde este último sacando la katana de agua, de un golpe desvió el arma. Codicia sacando una bañera de oro cargó con dicho objeto contra Star White.

Star White saltó para esquivarlo, pero Codicia aún agarrando el objeto giró sobre sí mismo donde golpeó con dicha bañera a Star White donde lo mandó a volar lejos.

El alifénix chocaba en diversas superficies de oro botando y rebotando hasta que cayó al suelo.

Star: Grrr….Creo que ya he pasado demasiado a la defensiva. Quizás es hora de pasar al ataque ¡Ahhhh…!

Gritó Star White donde, empleando lo que aprendió con el Gran Torino, comenzó a intensificar su fuerza, esta vez repartiendo su energía por todo su cuerpo.

Codicia: ¡Serás una pieza excepcional en mi colección!

Decía Codicia corriendo hacia Star White para luego saltar e intentar golpearlo. Pero en el último instante el alifénix desapareció, dejando perplejo a Codicia.

Codicia: ¡Por todos mis tesoros! ¿Qué ha pasado?

Star: ¡Puño Fénix!

Gritó Star White reapareciendo de repente logrando golpear fuerte a Codicia donde lo mandó a volar.

Tomando impulso en el suelo, Star White saltó para luego golpear de nuevo a Codicia por debajo. Acto seguido lo agarró de uno de sus cuernos y giró sobre sí mismo para luego lanzar fuerte a Codicia contra la pared donde se quedó parcialmente pegado en la superficie de oro.

Star White gritó a la vez que lanzaba infinidad de esferas de fuego explosivas hacia Codicia, formando un sin fin de explosiones.

Tras una tanda, Star White descendió al suelo para descansar, esperando haber acabado por fin con Codicia.

Cuando el humo se disipó, Star White veía a Codicia aún pegado en la pared donde parecía inconsciente.

Star: Lo que aprendí con el Gran Torino me ha servido bien. Me he sentido como nunca.

Decía Star White sintiéndose orgulloso de lo que había logrado dominar por sí mismo.

Repentinamente Codicia sonrió y alzó rápidamente la cabeza para sobresaltó de Star White.

Star: ¿Cómo…?

Codicia: Reconozco que eso me dolió un poco. Je, je, je.

Codicia salió de un potente salto del lugar donde estaba. Star White no tuvo tiempo de reaccionar donde Codicia lo golpeó con un especie de garrote de oro donde lo mandó a volar lejos y luego estrellarse contra una columna de oro.

Star White estaba adolorido por el golpe, pero rápidamente tuvo que alzar su katana para protegerse de un nuevo ataque por parte de Codicia que intentó golpearlo de nuevo con el garrote.

Codicia: Pronto serás fénix aplastado. Ja, ja, ja.

Se reía perversamente Codicia mientras Star White trataba de mantenerse firme como podía, pero poco a poco iba cediendo ante la enorme fuerza que poseía Codicia.

Star: (¡Rayos! Sí que es fuerte. Con el Bankai no basta. Tendré que subir de nivel) ¡Shini….!

Will: ¡Tornado!

Se escuchó un grito y Codicia percibiendo un ataque, saltó lejos hacia atrás para esquivar un ataque de viento.

Star White sintiéndose libre, pudo ver que quién había aparecido era nada menos que Will en su forma adulta.

Star: ¡Will! Que oportuno que llegaras.

Decía Star White alegrándose de ver a su amigo. El grifo le contestó.

Will: Me pareció raro que me mandaras a mi móvil tu ubicación. Aún así decidí seguirla a ver qué pasaba.

Star: Cosa que te agradezco.

Codicia: ¿Acaso os habéis olvidado de mí?

Preguntaba Codicia alzando por encima de su cabeza un enorme saco cargado de oro. Antes de que pudiera éste lanzarlo, es parcialmente congelado por un aire frío. Al poco rato apareció Jin.

Star: ¡Jin!

Will: ¡Has venido tú también!

Jin: Me costó entender el por qué de tu aviso, Star White. Ahora entiendo por qué.

Respondía el semental observando a Codicia, donde este último logrando liberarse del hielo, empezó a hablar de nuevo.

Codicia: ¡Más visitantes inesperados! ¡Como con el alifénix, vuestra entrada se paga con vuestras vidas!

De repente Codicia comenzó a lanzar flechas de oro contra el grupo donde estos tuvieron que ponerse a esquivarlos.

Jin se movió a gran velocidad hasta alcanzar a Codicia y ahí comenzó a lanzar múltiples tajos. Codicia empleando de nuevo un escudo, solo que de oro con incrustaciones de diamantes, donde bloqueaba los ataques hasta que intentó golpear a Jin con él. El semental se echó para atrás de un salto para lanzar una tormenta de hielo que iba congelando todo a su paso. Codicia simplemente golpeó fuerte el suelo creando una onda de impacto que neutralizó el hielo.

Star White, empuñando su katana de agua, lanzó un chorro de agua que golpeó y empujó a Codicia donde iba parcialmente retrocediendo. Will queriendo ayudar a Star White, generó una ventolera donde se sumaba al chorro de agua donde aumentó la fuerza de empuje, llevando a Codicia contra una pared.

Jin lanzó de nuevo una ventisca helada hacia donde estaba Codicia, congelando el agua de alrededor y así encerrar al pecado de la codicia dentro de hielo puro.

Los tres se reunieron para observar mejor a Codicia encerrado en el hielo.

Will: Bueno. Parece que acabamos con él ya.

Decía el grifo. Star White suspirando aliviado, les quería dar las gracias a sus compañeros.

Star: Gracias a que habéis venido. Ese Codicia me estaba poniendo en aprietos.

Jin: No es nada.

Respondía como siempre serio Jin. Por desgracia la calma no duró mucho cuando notaron que el hielo comenzaba a resquebrajarse.

Will: Ay, no…Tiene que ser una broma.

De golpe, Codicia se liberó del hielo de un salto.

Codicia: Ja, ja, ja ¿En serio pensabais que os habíais librado de mí?

Decía esto Codicia ahora armado con unas mazas de oro donde golpeó brutalmente a cada uno del grupo, mandándolos a volar hacia cada parte del lugar.

Star: ¿Por qué nunca nos toca un adversario fácil?

Comentaba en parte molesto el alifénix por el hecho de que Codicia resultaba ser más fuerte de lo que aparentaba. Jin poniéndose de pie, le comentó a éste.

Jin: ¿Después de todo lo que has tenido que luchar en Alrest, esto te parece demasiado? Tú mejor que nadie debería saber que no importa lo fuerte que sea tu enemigo, siempre encuentras la forma de vencer.

Las palabras de Jin llenaron de motivación a Star White dándole fuerzas para decidir seguir adelante y ahí dijo.

Star: Tienes razón. Basta de tonterías ¡Bankai Fénix!

Star White adoptó su forma Bankai Fénix y acto seguido empuñar su katana de agua. Jin no se quedó atrás y adoptó su forma alterna.

Will: Esas formas molan bastante.

Decía el grifo donde observaba con admiración las formas alternas de Star White y Jin. Codicia saltando de una montaña de oro a otra donde sin apartar la vista de éstos, les dijo.

Codicia: Unas formas espectaculares. Razón de más para que forméis parte de mi colección.

Decía Codicia donde lanzó otra bañera de oro. Jin de un tajo partió en dos dicha bañera y Star White a la velocidad del rayo se plantó delante de Codicia, dando un veloz tajo cargado de agua donde golpeó a Codicia y lo hizo caer de la torre.

Antes de que siquiera Codicia tocase el suelo, Jin se puso debajo para lanzar una bocanada de hielo donde golpeó y elevó a Codicia hacia arriba.

Star White se desplazó al instante por encima de Codicia.

Star: ¡Bomba Ígnea!

Gritó Star White cargando una esfera de fuego en su garra, para acto seguido golpear por encima a Codicia donde primero se produjo una enorme explosión de fuego, para acto seguido mandarlo hacia el suelo donde se estrelló de lleno en ella.

Del lugar del impacto, surgieron montones de piezas de oro despedidas por dicho impacto.

Codicia se levantó de nuevo mientras el grupo se ponía en guardia. Lejos de estar molesto, Codicia sonrió con perversidad mientras decía.

Codicia: Nada mal. Hagamos esto más interesante.

Codicia alzó las manos y en ese momento el lugar comenzó a temblar.

Will: ¿Ahora qué pasa?

Star: No lo sé, pero estemos atentos a cualquier cosa.

El grupo esperaba cualquier cosa que fuera a hacer Codicia, pero nunca se imaginaron lo que iba a hacer.

Afuera, Gran Torino y Basilio estaban combatiendo contra el nomu veloz y elástico. Torino empleaba su velocidad en un intento de golpear al monstruo, cosa complicada donde este último también se movía a gran velocidad.

Torino: (Condenado monstruo. Es tan rápido como yo. Tengo que despachar con esto cuanto antes).

Pensaba para sí el viejo semental. El nomu iba a atacarlo hasta que de repente Basilio logró partir parte de su cuerpo con su hacha.

Basilio: ¡Te tengo! Je, je, je. Ahora ya no eres tan duro ¿Verdad?

Se reía Basilio hasta que de repente el nomu, extendiendo su brazo, golpeó a Basilio donde lo tiró al suelo como a la vez sacando su hacha de sitio. Torino vio su oportunidad y de un veloz salto le propinó una fuerte patada al monstruo donde lo mandó a estrellarse contra una pared.

Basilio: Gracias, viejo. No esperaba que esa cosa pudiera seguir moviéndose después de un hachazo.

Comentaba el minotauro mientras se ponía de pie. Gran Torino desconfiando de haber terminado ya, le contestó.

Torino: No creo que hayamos terminado ya con esto.

En ese momento el nomu volvió siendo todavía parcialmente partido por el hachazo de basilio. Sorprendentemente se iba regenerando hasta quedar como nuevo.

Basilio: ¡Tiene capacidad de regeneración! Eso es hacer trampa.

Se quejaba el minotauro. Torino poniéndose en guardia, comentó.

Torino: Está claro que no iba a ser un oponente fácil. Habrá que tratar de destruirlo del todo cómo sea.

En ese momento hubo un fuerte temblor de tierra que sacudió buena parte de Ekalaif.

Flavia: ¿Qué pasa? ¿Un terremoto? Si esto no es zona de fallas tectónicas.

Comentaba la yegua mientras esquivaba un ataque del nomu musculoso para luego ser golpeado por Carl con una columna de piedra que había tomado prestada. El minotauro volviendo a poner de pie la columna, comentó.

Carl: ¿Acaso no son frecuentes los terremotos aquí?

Flavia: Para nada. Lo que es raro por lo que mencioné antes.

En ese momento del suelo surgieron varias grietas donde emergieron auténticas columnas de oro donde se movían por todas partes como si serpientes se tratasen. Dichas serpientes de oro iban golpeando y destrozando los edificios como todo lo que se encontrasen en su camino.

Magic Star: ¿Y eso?

Preguntaba el alicornio donde disparó un rayo mágico contra el nomu volador donde logró mandarlo hacia tierra.

De uno de los chorros de oro salían disparados Star White y compañía gritando de la impresión para luego caer duro contra el suelo, siendo vistos por Flavia y los otros.

Carl: ¡Chicos! Que sorpresa veros aquí.

Flavia: ¿Qué hacéis vosotros aquí? ¿Y por qué de repente hay montones de oro moviéndose de un lado a otro como si serpientes o tentáculos se tratasen?

Preguntaba ahora la yegua donde los tres susodichos la contestaron.

Star: Me temo que tenemos problemas.

Will: Yo diría más bien un grave caso de ataque de codicia.

Completaba Will a la vez que el grupo se apartaba de la trayectoria de una serpiente de oro.

Sobre una de las serpientes estaba Codicia montado mientras se reía.

Codicia: ¡Todo va a ser mío! ¡Todas las vidas como posesiones de esta ciudad van a ser todas mías! Ja, ja, ja.

Se reía como un loco el pecado de la codicia más que dispuesto a cumplir con su plan.

Lejos de allí, había alguien observando la ciudad siendo atacada por las serpientes de oro.

Continuará.

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