Tengo recuerdos vagos de lo que una vez fue sentirme estar en familia comiendo la cena y riendo de algunas ocurrencias. Lo más cercano que he tenido a eso, fue cuando mi madre aún seguía con vida...
Ella siempre me contaba historias de mi padre, lo mostraba como el gran héroe que casi derrotó a los androides diecisiete y dieciocho. En ese entonces era una niña de unos cuatro o seis años. Le creía. Cualquier infante a esa edad le cree lo que sus padres les dicen.
Sin embargo, hasta el sol de hoy yo le creo a mi madre, pero muy adentro de mi ser cree que solo era un mero cuento para apaciguar la ausencia de mi padre.
El tema sobre qué mi padre era un "héroe" siempre surgía cuando preguntaba por él. ¿Debería creer que ese hombre que relatan en la radio en ese entonces, era mi padre? Puff, eso es imposible, jamás podria ser hija de ese sujeto. Tal vez eso diría en ese momento, pero ahora lo puedo ver desperté lo que parece ser mi poder heredado de ese hombre que mi madre hablaba.
Mi padre...
Fue una noche en que caminaba de vuelta a casa... lo recuerdo como si hubiese sido el día de ayer.
Emma ya me había dado advertencias claras de que la noche era muy peligrosa tanto para los hombres como mujerd, despues de todo lo ocurrido hace años la delicuencia seguia elevada. ¿Acaso no tienen algo meuor que hacer que joderle la vida a los demás? Tenía en cuenta ta ese hecho, pero... teníamos que cenar desde que la ciudad estaba siendo reconstruida la comida se vuelve algo tediosa de encontrar, debido a que, las personas solo están dedicadas a la reconstrucción.
Recuerdo que esa noche corrí cuanto me daban las piernas hasta que la bolsa de los alimentos se rompió en el camino, así que, solo lancé el resto que quedaba. No obstante, esos sujetos no querían lo de la bolsa. Ellos buscaban algo más y eso implicaba el lastimarme. creí haberlos despistado, pero terminé acorralada en un callejón sin salida.
-Hola, preciosa. ¿Qué haces tan tarde por aquí? - Anunció uno de los sujetos.
Al no recibir respuesta alguna aquel sujeto tomó mi rostro en un intento de someterme y forzarme a verlo, solo azote su mano y eso provocó su furia. Llevo mi mano derecha a mi espalda y pego mi cuerpo y rostro a la pared. Apreté mi mandíbula, sabía lo que estaba por venir, doy movimientos para tratar de safarme de su agarré, pero este provocó que aquel infeliz terminará pegándome aún más a la pared de aquel callejón. No tenia salida alguna.
-¿Qué pasa hermosa? ¿Ya tan pronto te quieres ir? - Dijo uno de los sujetos que acompañaban al que me sometía. Di una mirada breve a los sujetos de atrás.
- ¡Vete a la mierda! ¡Agh! - Chille ante el fuerte agarre de mi brazo a la espalda.
-Veo que en tu casa no te enseñan modales. - Por el comentario sus compañeros solo se ríen. Arrugue mi faz y trate de safarme de su agarré. - Ya deja de luchar, nadie vendrá ayudarte. Tuviste muy mala suerte de estar sola.
Con todo el atrevimiento del mundo aquel sujeto posó su mano sobre mi cadera subio y bajo ligeramente, temblaba dem coraje y mi cara estaba enrojecida de la furia y continuó bajando su mano hasta llegar a mi parte trasera ese fue el detonante que saco fuerzas de donde no tenía y apartarlo de mí.
Aquel infeliz cayó al suelo y sus compañeros quedaron atónitos, pero aún así decidieron ir al ataque. Con un simple movimiento dejé fuera de combate a los delincuentes.
A pesar de que fue algo que surgió de la nada las preguntas en mi cabeza sobre mi persona emergieron. ¿Quién soy? ¿Qué son estos poderes?
Cuando regresé a casa de Emma ella me preguntó apresuradamente sobre mi estado y el porque no tenía la bolsa de alimentos, solo le comenté que me encontré con pandilleros y solo se llevaron la bolsa. Se que no me cree, los pandilleros no me dejarían ir así sin más, solo por coperar con ellos y entregar la bolsa. Emma, sabe mi temperamento y no me iba a importar enfrentarme a esos sujetos si estos tenian armas de fuego. Pero el tema se desvió cuando la interrogué sobre si aún conservaba la caja de cosas que mi madre le dio, Emma era una buena amiga de mi mamá, después de su muerte ella se ha hecho cargo de mí todo este tiempo. Más que una madre parecía mi hermana mayor.
Ella dio una respuesta vaga, pero afirmó que tenía la caja. Le supliqué que me la entregará y ella con una ceja alzada y extrañada va en busca de la dichosa caja.
-Es raro ver tu interés por estos objetos viejos. - Dijo una vez deposita la caja sobre la mesa del comedor. - Mira, una foto de cuando eras una niña. - Emma me mostró una imagen en la cual estaba sentada sobre el suelo con un vestido y un gran moño. No comprendia el afán de mi mama de vestirme de esa manera, a veces hasta me daba escalofrios verme asi vestida. - Es una lastima que esta fuera la única foto tomada en ese entonces, no había cómo recargar la cámara, la fueras visto. Ella estaba loca buscando una forma de tomarte otra foto, después de todo no era fácil encontrar ese tipo de vestimenta en esa época, es un merito de que Videl haya encontrado uno intacto. - Ríe levemente al comentario.
Ignoré lo que decía y solo seguí registrando la caja hasta encontrar un puñado de cartas que estaban amarradas juntas.
-¡Esos son muchos sobres! - Resaltó Emma al ver que las cartas cubrían mis manos. Ojee las que pueda.
-Por lo visto son cartas que nunca fueron enviadas. ¿Sabrás a quien se lo enviaba, mamá? - Averigüe.
-No lo sé, aunque Videl y yo éramos algo cercanas. Ella casi nunca me contaba de sus cosas, pero... - Dio un pausa y me arrebató el sobre que estaba apunto de abrir. - Debe tener el nombre de la persona a enviar o alguna ubicación. - Dijo e inició un análisis del sobre hasta que finalmente lo abre, al leer por encima su expresión cambió a una de sorpresa y dio el diagnóstico de esta. - Por lo visto la carta iba dirigida para un hombre llamado Gohan.
Una vez escuché ese nombre mis ojos se abrieron de par en par y le arrebate el pedazo de papel.
-¿Lo conoces?
-No. Pero mamá en ocasiones mencionaba su nombre cuando dormía. - Confesé y seguí leyendo lo que decía aquella carta, la realidad es que no tenía mucho.
Sólo hablaba sobre mí y sobre todo el gran anhelo de mi madre por encontrarse con aquel hombre, pero más que parecer una carta que iba a ser enviada a ese hombre, parecía un diario. Es como si ella contará sus penas en este pedazo de papel. Dejé aquella carta sobre la mesa y rompí el sobre de las demás cartas para seguir con la recolección de información de ese tal "Gohan". Quería información alguna, sobre quién era mi padre, ¿Qué era? ¿Qué soy?
No es común que una persona golpeé y dejé noqueado a un grupo de hombres en segundos. Ni tengo el aspecto tan atlético como para llegar a hacer aquello que hice, me corrijo creo que una mujer atlética hubiese podido con dos o tres, pero literal, esos sujetos eran un grupo algo grande.
Leí.
Leí.
¡Leí!
Ya me estaba dando por vencida y a su vez me daba pena con mi pobre madre, me siento como una carga ahora que leo estas cartas. "Quisiera que la conocieras, es igual a ti", "De seguro sigues tratando de salvar a las personas", "Espero todo esto acabe y estemos juntos otra vez".
Frases como esas salían en las cartas.
Jamás pensé ver este lado de mi madre, siempre... actuó de manera ruda. Tomé otra carta y seguían los lamentos hasta que llegue la última carta de aquella montaña que había abierto.
-Pan, me preocupa la forma en que actúas. - Eso lo dijo en cuanto vio que seguía mirando el sobre y sudaba de los nervios. - Me preocupas... ¿Estás bien? - Ella siguió interrogando, pero yo seguía con mi vista al sobre, volví del trance cuando ella me arrebató el sobre. - ¡Ya basta, Pan! Me estas asustando con todo este misterio de querer ver las cosas de Videl y sobre estas cartas. Actúas muy raro desde que volviste de la tienda. ¿Acaso te paso algo?
Le exigí que me devolviera el sobre, pero esta solo se negó hasta que le confesara lo que me pasaba, le notifique que no tenía de qué preocuparse. Ella solo alzó la voz y me aclaró que le preocupaba la forma en que actuaba, me señaló los sobres y me anunció que es raro que esté viendo esas cartas, nunca me había interesado en el pasado de mi madre y que haya venido alterada de la calle y con las vestimentas desordenadas le preocupaba aún más. ¡Eso lo tenía presente! Se que la preocupó, pero yo quiero saber que soy.
¿Qué buscaba? Fue lo último que escuche pronunciar de sus labios.
La realidad es que yo tampoco estoy al cien por ciento segura de lo que buscaba. Sólo sé que aquel hombre llamado Gohan tenía algo que ver con lo que pasó atrás... Emma volvió a insistir. Ya me estaba hartando de tantas preguntas y cero repuestas, apreté mi mandíbula y de manera inconsciente azote la mesa del comer seguido de un "callate". La mesa se rompió y Emma posó la mirada estupefacta a la mesa, yo también hice lo mismo. En cuanto levante la mira, lo pude ver... no solo estaba asombrada por lo que acababa de presenciar, si mirada estaba marcada de miedo.
-¿C-Cómo es que pudiste romperla? - Su voz fue quebrada y sentía una presión en mi pecho, un nudo se forma en mi garganta y solo saco balbuceos inmediato, mi respiración era agitada, ¿Qué hice? Jamás había reaccionado de este modo delante de ella. Se que estoy desesperada por saber lo que soy, pero la manera en que me mira me asusta. Delante de sus ojos debo parecer un monstruo.
No era la primer vez que ve este tipo de poder sobrenatural. Pero al verme azotar aquella mesa dura y romperla sin ningún esfuerza era un hecho que desbloquee un recuerdo que ella no quería saber. Su familia murió en manos de aquellos sujetos que tenía poderes sobrenaturale y el ver uno cerca de ella era obvio que reaccionaria de esta manera. Ella dio un paso para acercase a mi, pero yo di otro hacia atrás, mi corazón seguía sonando y podía escuchar el latido de este. No sé si era ella la asustada o yo era la que estaba asustada.
-Pan... - Con escuchar mi nombre reaccione rápidamente y le arrebate el sobre de su mano para luego salir disparada a la puerta de la casa. Pude sentir que me seguía. Sin embargo, la terminé perdiendo ante mí corrida.
No se cuanto tiempo habrá pasado, pero estoy segura de que quizás Emma me siga buscando. Sin embargo, en el lugar que me encuentro dudo mucho que me encuentre de forma sencilla, este lugar era el que mamá siempre me llevaba para ver la puesta de sol, decía que era el mismo lugar que se encontraba con mi padre. Ya veo porque les gustaba estar sobre este edificio y ver el cielo teñido entre rojo, azul y amarillo era hermoso. No recordaba que el cielo se viera así de brilloso desde esta perspectiva, imaginó que el no venir acá me hizo olvidar esta sensación de paz.
¿Por qué dejé de venir? Cierto... deje de venir en cuanto ella falleció, era nuestro lugar especial y siempre veíamos la puesta de sol juntas, pero en cuanto mi madre dejó este mundo se llevó ese momento con ella.
Estuve un largo rato mirando aquella grandes montañas en la cual el sol salía a medida que pasaban los minutos, bajé mi vista levemente y noté que aún tenía aquel sobre.
-¿Debería ver su contenido? - Murmuré, pero a pesar de la pregunta mis manos ya estaban rompiendo el sello del sobre.
Finalmente lo abrí saqué la carta, pero venía acompañada de dos fotografías de la cual cayeron al suelo y mi vista se fijó en una de ellas. Era mi madre y yo cuando tenía unos cuatro años con una gran sonrisa. Luego observé la otra fotografía y era mi madre con una gran sonrisa y con un hombre de cabellos negros y ojos del mismo color.
Aquel hombre estaba avergonzado por ser abrazado por mi madre, pero aun así se notaba feliz. Esta debe ser una fotografía vieja, a juzgar por su estado deduzco que debió ser tomada antes de que naciera. Se ven tan felices juntos.
Giré la fotografía inconscientemente y me encontré con una breve descripción. Me reí levemente al leer lo que decía detrás de la fotografía. Mamá cuando se lo propone puede ser cursi. La nota solo decía: "Una agradable cita en el parque de diversiones de la capital del Oeste."
¿Capital del Oeste? ¡Claro! Si voy hasta allá es probable que encuentre el paradero de mi padre. Nunca me había hecho esta pregunta, pero... Si mi padre y madre se amaban realmente, ¿por qué dejó de visitarla? ¿Por qué no vino a verla todo este tiempo? ¿Acaso nos abandonó? ¿Tuve la culpa de eso? No evite pensar en las incontables palabras que habían en las demás cartas sobre ser un estorbo para mi padre. Se que eran simples letras escritas en un momento que mi madre estaba decaída, pero eso me da mucho que pensar... No pienses en eso ahora Pan. Lo ideal es que averigües cómo llegar a esa capital y buscar el paradero de tu padre. Pero ¿Cómo lo haré? Solo conozco esta ciudad, desconozco en su totalidad esa tal ciudad del este. ¿Está bien ir? Y si... ¿Él tiene una familia allá? Solo estaría dañando a una familia...
-¡AAH! - ¡Qué desesperante! ¡Ya! Iré y punto, no me interesa si daño lo que construyó, él abandonó a mi mamá y a mí. Iré a ese lugar, lo buscaré y le haré un cuestionario de preguntas sobre mi persona y el porque nunca más volvió a ver a mi madre...
¡Si! Eso haré. Ahora solo queda buscar cosas para el viaje... Tengo el presentimiento de que este viaje no será tan sencillo...
Hola soy Jess, este es mi primera historia de esta pareja. Asi que, sean pacientes je, je, je.
Queria aclarar que los personajes de esta obra no me pretenecen, sino a Akira Toriyama. Sin embargo, la mayoria de aquellos que saldran y la trama de la historia si me pretenecen.
Cabe resaltar que, en la historia en ocasiones se tocaran temas delicados o quizas se describiran escenas que no seran el agrado de algunos lectores, pero si estas dispuesto a seguir leyendo seras mas que invitado, pero si no te agrada esta en tu derecho a abandonar la historia o seguirla.
Espero les guste que la hago con mucho cariño para ustedes.
Nota: No tengo un dia exacto de subir los capitulos, somos varias personas haciendo esta historia, asi que, no se sabra quien actualizara la historia...
