Prologo
Desde que era un niño, mi vida ha sido completamente normal. Crecí en el seno de una familia como cualquiera otra, y tuve la vida de cualquier persona de mi edad: Asistí a la escuela, tenia amigos, incluso salí con alguna que otra chica que llamaba mi atención. Cuando era el momento de escoger una carrera universitaria, fue ahí cuando me sentí atraído por las maquinas, por todo aquellos dispositivos que poseían engranajes o cuerdas. En ese momento decidí dedicarme a la ingeniería civil
Al poco tiempo de graduarme, conocí a mi gran amigo: Art Blank. El era un abogado un tanto... Incorrecto. Pero era su trabajo defender a cualquier persona, ya fuera un criminal o un inocente. No es que me quejara, para ese entonces, no le tomaba demasiada importancia. Juntos fundamos el "Grupo de Renovación Urbana", una fundación donde creábamos propiedades para aquellas personas necesitadas (Es decir, de bajos recursos)
Al poco tiempo conocí a mi primer amor: Jill... Aun recuerdo perfectamente el día que la vi por primera vez. Nuestras manos chocaron cuando la ayude a levantar unos libros que se le habían caído. Cuando nuestros ojos se cruzaron, sabíamos que nada volvería a ser igual. Nuestra relación comenzó de maravilla; sentíamos que, con el pasar de los días, nos amábamos mas y mas
Un día decidimos dar el gran paso de nuestras vidas, nos unimos como marido y mujer. Ambos eramos betas, nuestra vida seria como antes, antes de que la humanidad se dividiera en 3 géneros: Alfas, betas y omegas
Lo único que podría decir... Es que la vida es un regalo que debemos cuidar, porque jamas sabemos cuando podríamos perderlo
