RinMakoto. Michiru encontró nuevas compañeras para la nueva unidad a quienes le quería un capítulo especial como este, aunque miraremos lo que rompió las tendencias como lo fue la primera pareja yuri oficial.
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Sin más, comencemos…
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Los tiempos han cambiado con respecto al libre pensamiento de las relaciones entre personas del mismo sexo. Aunque en nuestros días se ha visto como este tabú se ha liberado, quedan personas que no aceptan por verlo como algo repugnante y que Dios no aceptaría eso.
Aun así, siempre habrá personas que acepten esto o lo toleren, pero son cosas que tenemos que seguir mejorando por el bien de las personas que no tienen culpa de tener una orientación sexual diferente a la común.
Y este fue el caso de la pareja conformada por Kokoa Shinomiya y Hayate Tendo, ambas integrantes de la unidad DJ UniChØrd. Las dos ocultaban su relación en la academia Arisugawa, esto debido a los posibles rumores y malas oraciones que pudieran decir de ellas dos.
- Buenos días Kokoa – Hayate esperó a su pareja a la entrada de la academia.
- Buenos días Hayate – ambas querían darse un beso, pero se detuvieron para seguir hacia la institución.
- Quiero besarte Kokoa.
- Sabes que no podemos hacer esto aquí – la peli bicolor susurró algo sonrojada – aquí en la escuela no dirían cosas buenas al saber que dos chicas están en una relación sentimental y además de ser católica.
- Lo sé, es molesto, pero solo hay una cosa que quede claro, que te quiero mucho, eres mi novia y eso nada lo cambiará Kokoa – Hayate decía rozando su mano con la de su pareja, pero sin más, ambas siguieron hasta su respectiva aula.
Las clases no fueron ningún problema ya que no pasaba nada fuera de lo común, y así fue hasta llegar la hora del almuerzo.
Como era costumbre para ambas, estas comían las dos juntas, estaban en un sitio apartado en donde Hayate le daba de comer a su pareja, todo como alguien que realmente ama a su novia.
- No tienes que hacer eso Hayate.
- Pero lo hago porque te quiero, a ver, di aaaaah.
- B-Bien – Kokoa hizo eso y fue una linda escena, pero le quedó una migaja en la mejilla.
- Te quedó una cosa ahí, espera – Hayate fue hacia la mejilla de esta lamiéndola la mejilla, aunque la cosa siguió cuando fue a los labios de la peli bicolor besándola. Kokoa se sorprendió por eso, pero a pesar de que se quiso separar, Hayate no la dejó y el beso se profundizó más. Las cosas se pusieron buenas para ambas, aun así, alguien llegó sin previo aviso a donde estaban.
- Este… lamento si interrumpí algo – Kano llegó ahí con unas cajas, la pareja se separó de golpe con sus caras muy rojas.
- ¡N-No es lo que piensas!
- S-Solo comíamos y… me resbalé y la besé, pero solo fue un accidente, ¡un accidente! – a pesar de toda excusa que les daba Kokoa y Hayate, Kano solo suspiró.
- Eso fue un beso, pero bueno, no es como que me moleste, solo voy a dejar unas cosas a la iglesia – el peli cian solo tomó sus cajas y se fue de ahí, aunque las dos chicas fueron tras él con miedo, habían sido descubiertas en una situación íntima.
Hayate fue la que siguió más de cerca al joven, aunque este solo dejó las cosas en la iglesia y siguió con lo suyo, aunque la pareja trataba de ver si él mencionaba algo del beso que tuvieron.
Kano solo fue con las de Lyrical Lily al finalizar las clases para hablar un poco para la próxima actuación del siguiente grupo el cual aún no estaba definido del todo, por lo que estaban en charlas para definirlo.
Ese día fue tortuoso para Kokoa y Hayate quienes temían que el peli cian dijera algo sobre lo que vio, pero no parecía el caso, es más, lucía como si no hubiera visto nada, aun así, estas pedirían ayuda.
- Por favor, contesta Lumina – Kokoa logró contactar a la peli rosa pálido quien sonrió al verla.
- Hola mis amigas, ¿Cómo les va? ¿Todo bien? ¿Todo correcto? Y yo que me alegro.
- Ok, deja esas referencias que no entiendo del todo y quiero que me hagas un favor, investiga a un chico el cual nos vio a Kokoa y a mí… en una situación un poco comprometedora.
- ¿Se estaban besando?
- ¡No importa que estábamos haciendo! Mira, escuché que se llama Kano Nakanishi, por favor, tú qué sabes de redes sociales y ver mensajes.
- De acuerdo, entonces déjenmelo a mí, veré que tiene en su celular jeje – Lumina decidió hacer ese trabajo.
Para ella que era una persona virtual y que sabía mucho de internet, no le era difícil entrar a un aparato conectado a la red para ver algunas cosas, así como otros detalles. No le fue nada complicado entrar al celular de Kano, aunque se llevó una decepción.
Los mensajes eran simplemente conversaciones con su tío que era el sacerdote de la iglesia de Arisugawa, así como chats con las chicas de Lyrical Lily sobre algunas cosas, pero nada expresivo o que diera a conocer sobre la relación de Kokoa y Hayate.
Ya con eso sabido, ni siquiera eso las tranquilizaba, además de que era un chico en una escuela femenina, pero este era conocida por varias como el sobrino del sacerdote y por palabras de las de Lyrical Lily, este era de confianza.
La pareja iba caminando hasta que se toparon justamente con Kano quien iba charlando con Kurumi, este llevaba una caja en ella, tanto Kokoa como Hayate se acercaron lo más que pudieron.
- Mil gracias por la ayuda Nakanishi-kun, esa caja pesaba para mis pobres bracitos.
- No pesa mucho Shiratori-san.
- Bueno, tú lo dices, pero es que porque eres hombre y ustedes cargan cosas pesadas.
- Como sea, ¿A dónde la llevarás?
- Si quieres puedes dejarla en la iglesia, luego iremos por ella – el peli cian asintió y sin más, se fue caminando hasta la zona en donde dejaría la caja.
Hayate y Kokoa siguieron al chico para ver que hacía, aunque sería luego del día escolar ya que este se tenía que ir a cumplir sus propias obligaciones. Al finalizar ese día, gracias a Lumina, la pareja se dio cuenta que estaría paseando por el distrito comercial.
Al ir por ahí, las chicas notaron como es que esta zona había volviendo a ser una zona muy buena gracias a los conciertos que las chicas estaban dando, Kano observaba esto también y fue cuando se formó una escena con una pelea en medio de la calle.
- ¡¿En serio eres así?!
- S-Sí – era una chica la cual estaba en una especie de declaración que le hizo el chico frente a él que estaba con sus amigos – me gustan las mujeres.
- ¡¿Cómo puedes decir que te gustan las mujeres?! ¡Eso no es normal!
- ¿Qué entiendes tú por normal? El hecho de que estemos en el siglo XXI no quiere decir que estemos cerrados de mente.
- ¡Cállate lesbiana de mierda! – este se iba a lanzar sobre la joven, pero Kano llegó en su ayuda, Kokoa y Hayate estaban en shock ante esto.
- Oye, ¿acaso piensas golpear a una mujer que no te está haciendo nada?
- ¡No te metas! ¡Esta no es una mujer normal, es una…!
- Si dices que con que sea lesbiana no es normal, entonces alguien que golpea a una mujer solo por ser rechazado es peor que un anormal, es escoria – el peli cian decía ante la mirada de algunas personas que se detuvieron a ver eso, hasta las de Lyrical Lily llegaron por ahí.
- Nakanishi-san, ¿Qué ocurre?
- No se preocupen, solo necesito un minuto para acabar con este sujeto.
- Te pones a defender a una lesbiana como si eso fuera normal, llevas un crucifijo y por eso deberías estar a favor de que ese tipo de persona no son normales…
- Que sea católico no quiere decir que no tenga mi mente abierta, si ella no hace nada malo, entonces no tienes por qué actuar así, ella decide qué hacer con su vida y si le gustan las mujeres, entonces está bien por ella – Kano lo tomó del cuello – y si hablas mal de alguien así, créeme que desearás no haber nacido.
- T-Tú… ¡vámonos! – el grupo se fue de ahí corriendo, el peli cian fue por la chica.
- ¿Estás bien?
- Sí, muchas gracias, no pensé que se lo tomaría a mal.
- Hay personas que nunca verán esto como algo normal, pero hay que dejarlos que piensen lo que quieran, pero lo que tú quieras hacer con tu vida, es tu decisión – sonrió el chico, la joven casi llora.
- E-Eres… el primero que me dice eso.
- En serio, no me deja de sorprender – Haruna decía, sus amigas asintieron.
- Kokoa, él no es homofóbico y cree que la relación entre mujeres está bien.
- Sí, no pensé que alguien en la academia diría esas palabras – la castaña decía apretando la mano de su novia quien no dijo nada y solo prestaron atención a Kano.
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Al día siguiente, Kokoa y Hayate decidieron ir a hablar con el peli cian y disculparse por estarlo siguiendo, aunque este parecía que nunca se dio cuenta de esto.
- ¿Por qué me siguieron?
- Es que… pensamos que dirías algo sobre lo que viste el otro día, ya sabes…nosotras dos estábamos comiendo y…
- Oh, lo del beso ¿eso?
- N-No lo digas en voz alta por favor, nadie sabe que Hayate y yo somos novias – decía Kokoa.
- Pero, ¿Por qué evitan hablar de eso? – Kano se quedó pensando en la misma respuesta a su pregunta – oh, entiendo, es porque la Academia Arisugawa es católica y no ven con buenos ojos a una relación entre mujeres.
- Sí, no fue difícil para nosotras comenzar un noviazgo entre nosotras, pero si tenía a Hayate a mi lado, sabía que nada me tendría que dar miedo – Kokoa decía – pero el ver que nos habías descubierto, pensé que todo se iría a la mierda.
- Estuvimos pensando mucho ya que, si las monjas se enteraban, sería un gran problema para nosotras, así como nuestra unidad UniChØrd – Hayate decía – pero parece que por algo eres conocido entre las estudiantes de la academia, así como amigo de las chicas de Lyrical Lily.
- Solo hago lo que puedo, además, el que ustedes dos sean novias no debería avergonzarlas ya que, si se quieren, es lo único que importa – Kano tomó un poco de aire mirando al cielo – así que, ¿Por qué no solo salen como cualquier pareja normal?
- Pero es que no sabemos que…
- Que no les importe que digan las demás personas, es la vida de ellos contra la de ustedes y no les importa, ellos no las mantendrán a ustedes, si se aman, es lo que importa – este las tomó de las manos – es lo que ustedes decidan.
Las palabras de Kano hizo un gran efecto en ambas chicas quienes decidieron probar lo que el joven les dijo y se pasearon por la ciudad en una cita, aun así, optaron por hacer algo que no había hecho hasta ahora.
- Estoy nerviosa Hayate… pero haré como dijo Nakanishi-san – la peli bicolor tomó la mano de su novia quien se sonrojó un poco, pero la apretó.
Kokoa y Hayate pasearon por la ciudad tal y como Kano les mencionó, sin miedo a que dirá la gente, la vida de ellas era más importante que escuchar opiniones de gente de mente cerrada.
- C-Creo que me podría acostumbrar a esto – susurró la castaña mientras seguían con su cita, aunque en algunos momentos recibieran unas miradas por eso, no le prestaron atención y continuaron con lo suyo.
- Me parece que al menos les va bien – decía Kano observando la cita de Kokoa y Hayate quienes iban felices por eso.
- Me alegra que todo salga bien – Lumina decía a través del celular de Kokoa – ¿y cuando se van a besar?
- ¡Cállate!
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Continuará…