Hijo de la Luna
Capítulo 35
Templo Hikawa:
Aquella mañana en la cocina del templo Hikawa se encontraban preparando el desayuno de la familia tres de las personas contratadas por el padre de los chicos Chiba. Setsuna y Kenzo disfrutaban con tranquilidad de su desayuno cuando una ojerosa Rei Hino apareció en la cocina seguida de su hijo y segundos después Hotaru.
-ustedes lucen como si hubieran corrido un maratón durante la noche-Se burla Raymond que toma una taza de chocolate caliente y su desayuno mientras se sienta cerca de Kenzo y Setsuna-¿no lo creen?
-Es verdad que lucen como si no hubieran descansado-apoya Setsuna que está dando los últimos sorbos a su té
-¿no durmieron bien?-Cuestiona Kenzo
-yo fuí a la cama temprano. Quizás dormí en una mala posición-supone Hotaru que se sirve una taza de café y sirve otra a su madre que se ve como si no hubiera dormido nada
-quizás estoy por resfriarme- apoya Rei mientras se acomoda un pañuelo en el cuello a juego con su saco.
-le prepararé una infusión para subir sus defensas-ofrece una de las cocineras mientras sigue manejando las cacerolas y los ingredientes para entregar un plato a cada una para su desayuno.
-gracias- acepta Rei que toma su plato y se sienta en la mesa junto a los demás
-Buen día-Saluda Helios que en silencio toma su desayuno y se sienta a la mesa
-Cho ¿esos aretes son nuevos?no te los había visto-interroga la madre
-¿son de Santorini? Ese tipo de trabajo solo los he visto ahí- Cuestiona Setsuna
-¿en santorini?-sorprendida la muchacha de ojos amatista
-Setsuna ¿has ido a Santorini?-se interesa Raymond jalando la conversación hacia la mujer morena,nadie se da cuenta que Hotaru y Helios se miran sorprendidos en silencio
-buenos días familia…y Helios-saluda el padre de los jóvenes
-Doctor Chiba, buenos días-Saluda con educación Inglesa el de ojos dorados
-Hora de irnos. Raymond, Hotaru ¿quieren que los lleve?-ofrece el padre
-Te agradezco, Otou San, pero-interrumpe sus palabras el sonido de la camioneta de Andrew y el muchacho de ojos amatista corre a ponerse en pie, tomar su almuerzo que está listo ya con su nombre y besar le mejilla de su madre-el tío Andrew ha llegado. Te veo más tarde.
-Ya casi es hora de ir a la universidad, Helios ¿me llevas?-interroga Hotaru que no espera la respuesta y corre por las bolsas de almuerzo y da un beso a sus padres-¿nos vamos?
-si. Vamos-apoya el joven de ojos dorados
-¿nos vamos?-ofrece galante el de ojos azules haciendo reverencia a su ex que solo pone los ojos en blanco y sale de la cocina, Darien corre a tomar la bolsa del almuerzo de la mujer de fuego y sale tras despedirse brevemente de todos, Setsuna Ríe y Kenzo la observa.
-por esto quisiste esperar cinco minutos más para salir de la cocina- adivina Kenzo
-no negarás que es muy divertido ver las expresiones en sus caras.
-Lo es, debo admitirlo. Es como ver una de esas novelas que ve la señorita Hotaru -apoya el sacerdote
-creo que ya podemos iniciar bien nuestro día ¿vamos a trabajar? Ya me puse de buen humor
-eso es muy bueno,me alegra.
Esa Mañana empezó quizás como muchas otras, llena de energía y cosas por hacer, pero al final del día se demostraría que no se trataba de un día común.
Colegio Mugen:
Cuando el receso llegó para los alumnos del colegio Mugen, Raymond y Sayuri se apresuraron a buscar un sitio lindo para ir a sentarse a disfrutar de sus almuerzos. Disfrutaban hacer un picnic y combinar las preparaciones de Makoto y ahora las que les preparaban los cocineros contratados por el padre de Raymond.
-¿Entonces no se molestó la tía Rei al saber que tienes poderes de fuego?-Interroga la rubia
-no. Hoy comenzaré mis entrenamientos para aprender a manejarlos.
-Es estupendo. ¿Crees que alguno de mis hermanos o yo vayamos a adquirir los poderes de mamá? Podría electrocutar a alguien si pasa de repente y sería peligroso
-no lo sé, pero te prometo que cuando aprenda a hacer interpretación del fuego como Oka San será lo primero que investigue.
-Gracias, Raymond. Eres un gran novio-besa la rubia la mejilla del pelinegro que se sonroja de inmediato y tose nervioso
-Así que aquí estas-interrumpe la chica de cabellos rosas la tranquilidad del momento.
-¿qué quieres aquí, Rini?-se enoja Sayuri ¿quieres ir a la enfermería temprano para que puedas salir antes?-ofrece la rubia
-No vengo a hablar contigo; vengo a hablar con Raymond-indiferente la muchacha de cabellos rosados-Ray, sé que tú puedes convencer a papá de que me levante el castigo. Ha sido muy duro conmigo y tuve que venir al colegio en autobús
-Otou San se ofreció a traerte-cuenta el hermano
-eso no es lo que importa. Quiero recuperar mi auto y mi tarjeta de crédito. Tuve que traer un almuerzo que papá hizo en casa. Quiero mi capuccino-reniega la alta chica de ojos granate
-¿por qué Raymond iba a abogar por tí? Hotaru se la vivía abogando por ti y mira como le pagaste-interviene la rubia- si bien le dije desde un inicio que no se molestara en considerarte y a hacerse a un lado por alguien como tú, ya decía yo que ibas a pagarle mal
-cállate. Ella se aprovechó del momento y de la cercanía con Helios para robarmelo- se enoja Rini
-¿Robartelo? No es un juguete, Rini; Helios es una persona y te aviso que Helios y Hotaru se conocieron en Okinawa y fue amor a primera vista; para mala suerte de ambos se perdieron el rastro hasta que llegaron a Tokio y Hotaru decidió hacerse a un lado por ti
-¡no es verdad!-grita Rini
-no debió preocuparse por ti. De todos modos tu solo ves por ti
-ella nunca se preocupó por mi como hermana
-¿y quién crees que hizo que te redujeran tus castigos?-Se burla Sayuri
-Eso es verdad. Hotaru siempre abogaba por ti para que Otou San no fuera tan severo y te levantara los castigos.
-Y tú solo fuiste lo que siempre has sido y ofendiste a la única que te apoyaba a ciegas; así que no, Raymond, ni se te ocurra ir a convencer al tío Darien de nada, seguro te terminarás arrepintiendo-amenaza la rubia
-¡Te odio, Hansford!-grita Rini y se aleja corriendo
-En verdad fuiste ruda con Rini-se sorprende Raymond-Gracias, a mi me hubiera costado decirle que no
-Bueno, cuando necesites que sea la chica ruda que te pateaba el trasero cuando eramos niños, con gusto lo seré-Asegura la mayor de los Hansford
Raymond sonrió y observó con orgullo a Sayuri, le encantaba saber que tenia junto a él a los dos lados de la moneda, la novia tierna y dulce y la que fácilmente podría romperle un brazo si se lo propusiera.
--0--
Luego de que el camino a la universidad fuera casi mudo, Helios al estacionarse decidió romper el silencio.
-Luces muy linda el día de hoy, aunque pareces estar preocupada.
-Helios… Creo que ocurre algo raro-confiesa la joven-de un tiempo para acá he soñado contigo
-¿En serio?-sonríe él joven de ojos dorados-¿son sueños interesantes?
-han sido sueños muy extraños Helios ¿no te ha ocurrido?
-Bueno, la verdad es que yo sueño contigo todas las noches desde que te conocí, mi bella Mariposa
-Lo que quiero decir es que…anoche soñé que íbamos a Santorini y me comprabas estos aretes y… desperté con ellos puestos
-¿no los tenías desde antes?-confundido el de ojos dorados- quizás estaban guardados y…
-No. No tenía algo como esto. Cuando fuimos a Santorini Oka San y yo, fue una breve temporada y no hubo tiempo para ir de compras. Setsuna confirmó que este tipo de trabajos solo los ha visto en Santorini
-Bueno, la verdad es que yo también soñé contigo y un viaje a Santorini anoche…
-Creo que es muy extraño-Confiesa Hotaru-¿podemos Hablar de esto más tarde? Llegaré atrasada a mi clase si no me apresuró
-Claro, Mariposa…te veré más tarde-ofrece Helios que besa la mano de Hotaru antes de que salga de su auto.
Helios despidió a la joven con caballerosidad y galantería pero detrás de esa sonrisa se quedó en él la duda de qué tanto de sus sueños eran reales y qué tanto fantasía ¿qué estaba pasando en realidad?
Quebec:
Desde el interior de una bella casa en las heladas tierras de Quebec, una mujer de cabellera rubia se asomaba a la ventana sin la intención de abrir la puerta para salir al balcón.
-¿te encuentras bien?-le llama una voz a sus espaldas que hace que la blanca y desnuda piel de la mujer se estremezca.
-si, quise disfrutar del paisaje, es realmente hermoso. Gracias por traerme- Sonríe la rubia que es abrazada por una cadena humana y su captor besa su hombro
-Soy tu esclavo, solo pide y haré lo que me ordenes-cuenta con veneración el peliplata
-¿Sabes? Anoche soñé con Helios
-¿con nuestro hijo?-se sorprende Diamante
-ya no es un niño. Ahora es un jovencito muy guapo, como su padre. Por fin entiendo porqué sentía que algo faltaba en mi vida, como si hubieran arrancado algo de mi cuando volví a la tierra
-me da gusto que pudieras verlo en tus sueños, es una buena señal y quizás en realidad pudiste verlo
-¿lo crees?
-Espero que si. Confío en el destino y en que una vez que soluciones tu divorcio podamos buscarlo y reunirnos con él
-¿Crees que nos recuerde?-se gira la rubia y busca con sus ojos azules el amatista de Diamante
-Sé que todo pasó cuando era muy pequeño pero confío en que lo hará, pero de momento no quiero preocuparme por eso
-¿quieres que vayamos a desayunar?-invita la rubia con una sonrisa
-creo que en este momento me apetece volver a la cama-responde el hombre de cabellos plata y toma entre sus brazos a Serena que lanza un grito de sorpresa y luego una risa divertida.
Aquella mañana el desayuno sería saltado por ambos, pero había valido la pena.
--0--
Las clases de Hotaru y Helios habían terminado y como cualquier pareja enamorada y ansiosa estuvieron mandándose mensajes durante toda la mañana y prometiendo verse en la biblioteca al finalizar su día escolar. Helios llegó primero y sonrió de oreja a oreja al ver a la joven de ojos amatista aparecer ante él vistiendo la mejor de sus sonrisas.
-Llegaste antes-evidencia Hotaru
-la verdad es que corrí un poco al terminar la clase. Moría por verte-explica el muchacho de ojos dorados
-¿en verdad?-sonrojada la joven de cabellos negros y Helios asiente y besa su mano
-¿puedo invitarte a comer? Me gustaría poder charlar a solas
-me encantaría pero no puedo
-¿Ocurre algo?
-otou San estuvo muy distraído y dejó su celular en la cafetería cuando desayunamos. Quiero ir a llevárselo al hospital, ni siquiera ha notado su ausencia
-bueno, eso puede resolverse ¿qué te parece si te llevo al hospital y después vamos a comer?
-¿en verdad no te molesta?-sorprendida la chica de tez marfil
-En absoluto. ¿Nos vamos?
-Si. Está bien-Acepta Hotaru y Helios toma los libros de los brazos de Hotaru y camina sonriente junto a ella al estacionamiento de la universidad.
Al llegar al coche de Helios este abrió la puerta del copiloto y ayudó a Hotaru a subir, aún no podía creer que tuviera el honor de tener a su hada a su lado sin armaduras, sin pretextos y sin tener que ocultarle sus verdaderos sentimientos e intenciones, aún así sabía que debía de tratarla como lo que era: el hada de sus sueños.
Cafetería Crown:
La mujer de cabellos castaños se encontraba detrás de la barra de la cafetería preparando un café para disfrutar de su tranquilo desayuno cuando vió aparecer a su antigua compañera de departamento.
-¿otra vez Dormiste mal?-interroga Makoto ofreciendo su taza de café a la recién llegada y sirviendo una para sí misma
-terrible, demasiados sueños perturbadores y confusos
-¿quieres contarme?-ofrece Makoto que acerca una rebanada de pan tostado con mermelada de fresas a su amiga y ella toma un croissant con mantequilla para sí misma
-bueno… la verdad es que no es nada especifico; creo que debo estar preocupada porque Raymond descubrió sus poderes de fuego y Hotaru ha tenido más episodios de su poder como Sailor Saturn.
-eso preocuparía a cualquiera-Apoya Makoto
-Sayuri y los chicos no…
-Nada. Lo más cercano que están mis hijos del poder del trueno es provocar un cortocircuito cuando ayudan a Andrew con las extensiones eléctricas
-que extraño
-no tenemos más referencias; Amy está casada con su carrera y Mina con el amor y de Rini…
-De Rini no hay ninguna señal, al menos que se sepa
-sería bueno preguntar a Luna o Artemis, pero Artemis nos mandó a todos al diablo hace tanto.
-¿no han vuelto a saber de él?
-a veces le manda mensajes a Mina pero al parecer ni quiere decir su paradero ni cruzarse con Luna, desde que la boda de Darien y Serena se canceló hace más de veinte años él se esfumó y aunque supo que se casaron luego de tu divorcio con Darien eligió no volver
-¿y Luna?
-es la primera vez que me preguntas por ella
-no somos amigas, lo sabes más que nadie, de Hecho me Tranquiliza no haberla visto desde que llegamos a Tokio
-Luna suele desaparecer por muy largos períodos. No sé si se deba a que no es muy bien recibida en casa de Serena ya que Darien y ella no se llevan nada bien o a alguna otra cosa, aun así cuando llega a aparecer lo hace por muy poco tiempo y luego vuelve a desaparecer
-que extraño
-bastante, pero no me quejo y supongo que tu tampoco. A veces me entero que apareció porque Andrew me pasa la información de su fuente fiel de información
-mientras va a surtir la lista de insumos-recuerda Rei y Makoto asiente
-ambos ganamos y solo tu ex pierde…dinero
-Bien por Andrew
-¿Sabías que el abuelo de Darien pensaba que ellos tenían un romance?
-¿Darien y Andrew?
-si. Lo gracioso es que el abuelo Chiba recibía con más alegría la posibilidad de tener a Andrew en la familia que a Serena, diremos que era su rubio favorito
-Andrew Hubiera sido una Señora Chiba muy especial
-y yo su casa chica, que mientras ese médico no esté contigo no podría jamás descartar esa posibilidad- se divierte la castaña
-Mako-chan
-yo solo digo
-no lo digas, eso no pasará
-no estoy segura de ello.¿te llevó a trabajar?
-mi coche sigue en el taller
-claro…no pasará
-Está más cerca Andrew de volverse "La señora Chiba" que yo de volver con él-asegura Rei
-lo que sí es cierto es que aún con los chefs que mandó a Hikawa, gasta más en alimentar a Andrew de lo que gasta en ti
-¿Dónde guarda Andrew tanta comida?
-lo exploto como esclavo para que no acumule esa comida en grasa. Justo cuando llegue tiene mucho por lavar, hornee galletas esta mañana
-eso suena fantástico ¿me darás algunas para el camino?
-ya las tengo listas;Sayuri quiso que las hiciera para darle a Raymond
-Es tan dulce,¿quién diría que es capaz de dar una paliza a sus hermanos en un par de segundos?-nostálgica la pelinegra
-¿Recuerdas la vez que tomaron prisionera a su muñeca cuando fuimos a Busan? No volvieron a intentarlo jamás Andy y Motoki
-mi pequeña sobrina es tan ruda como su madre y tan dulce también
-la que me aterra un poco es Midori.
-jamás la he visto golpear a alguien
-ella no golpea… amenaza y chantajea- preocupada la madre de la niña
-Eso es de Andrew
-pero lo hace con una maestría aterradora para ser tan pequeña. Yo usaba los puños y Andrew no es tan listo
-eso lo sacó de la tía Rei-orgullosa la pelinegra-debo volver a trabajar ¿veras a las chicas hoy?
-Amy vino por un café y Mina dijo que nos veíamos más tarde, tiene noticias
-quiero ver eso. Si sabes la hora mándame un mensaje, sino, quiero una video llamada
-hecho. No olvides tus galletas-recuerda la castaña que entrega una caja a su amiga antes de marcharse
Rei sonrió y se alejó de Crown con su botín en las manos, parecía que había sido ayer cuando Makoto preparaba esas galletas en París, eran las favoritas de su amiga, lo fueron de Hotaru cuando fue pequeña y ahora lo eran de Raymond, sus galletas tenían imán sobre los Hino y eso la hacía sentir orgullosa.
Hospital Chiba:
Cuando la consulta de las dos terminó y el doctor Chiba se quedó solo no tuvo que levantar la vista para saber que una cabellera rubia había ingresado a su consultorio y sin levantar la vista le habló.
-¿en verdad Makoto no sospecha que te escapas de tus deberes para venir a comer al hospital?
-no. Soy un maestro del engaño ¿qué tiene el menú hoy?-sonriente el rubio que comienza a revisar los cajones del escritorio del médico-ay por dios… Darien….
-cállate, Rubio-sonrojado el pelinegro que ve de reojo a su amigo sacar una caja de terciopelo negro con un anillo de diamantes y rubíes
-amigo, sé lo que dice tu abuelo, pero no puedo dejar a Makoto por tí…¿qué pasaría con los chicos?-sonrojado el rubio
-no seas idiota, no es para tí
-¡ay que susto!-respira el rubio que analiza el anillo- espera…yo se de alguien que es amante de los rubíes… ¿Rei?
-¿quién más si no?- sonríe de lado el pelinegro
-amigo… adoro a Rei, pero ¿piensas volver a intentarlo?
-no lo intentaría con nadie más, siempre ha sido solo ella
-pero… bueno. No me malentiendas, Rei es mi amiga, casi casi mi cuñada pero, tú eres algo celoso, rencoroso y posesivo
-¿y?
-¿Podrías reiniciar una relación con ella después de que te dejó por otro? Dicho por tí, yo nunca le vi a ningún galán, solo a Michael que nunca se le separa pero entre ellos no hay nada. Siempre he pensado que fue muy raro que volviera a los días por sus cosas con aquel hombre misterioso
-lo he pensado mucho. Llegué a odiarla en verdad, pero dicho está que aunque me hierve la sangre recordarla besándose con aquel hombre rubio a los días de dejarme, no puedo vivir sin ella, es como un veneno que no sale de mi sistema
-¿Crees que por él te dejó? Que raro que jamás se volvió a ver o saber de ese tipo
-no me importa con quién me engañó o por qué, solo quiero estar con ella.
-¡Oka San no te engañó!-se escucha la voz de Hotaru que entra aventando la puerta de golpe
-Hotaru- nombra el padre sorprendido-hija,no debiste escuchar eso
-¡Oka San jamás te engañó ni te dejó por nadie!-grita entre lágrimas la joven de ojos amatista
-Andrew, ¿nos dejarías solo?-pide el médico y Andrew asiente extendiendo la caja de terciopelo y estirando la mano, Darien pone los ojos en blanco y le entrega su tarjeta de crédito, el rubio sale en silencio cerrando la puerta tras de si- Hotaru, Hija. Perdóname, nunca debiste escuchar, tu eras muy pequeña y…
-Lo recuerdo todo, Otou San-Suelta Hotaru molesta- Oka San y yo salimos de Tokio y fuimos a Santorini, se supone que íbamos a quedarnos ahí pero algo atacó a Oka San, casi la mata y estuvo mucho tiempo en el hospital. Ojisan fue a alcanzarnos en cuanto lo llamaron pero, okasan y yo salimos de Tokio y ella no volvió a pisar Japón hasta que nos viste en Okinawa
-calma, Hija, por favor
-tu no pudiste ver a oka San con algún otro hombre, otou San. Nosotras nos fuimos de Tokio en cuanto salimos del departamento y no teníamos casi nada de llegar a Santorini cuando algo atacó a Okasan ¿no has visto la cicatriz en su pecho? ¡casi la mata!
-Ho…hotaru yo no sabía
-Ese es el motivo por el que OkaSan se negaba a que Ray o yo viviéramos a Tokio, incluso A ojisan le preocupaba que quien atacó a okasan hiciera lo mismo con nosotros. No se a quién viste, pero esa no era OkaSan.
-Creí que era, yo…
-otou San, eso que atacó a Okasan no era humano. Yo era muy pequeña pero… recuerdo que era maldad pura
-debiste sentir mucho miedo. Eras muy pequeña-abraza el padre a joven que no rechaza su abrazo
-por suerte me enseñaron a hacer llamadas a emergencias cuando era muy pequeña y pude salvar a Oka San. En cuanto ella estuvo bien ojisan arregló todo para que nos mudaramos a Praga.
-ya veo…ahora entiendo muchas cosas. Gracias por ser tan valiente y haber salvado a tu madre y a Ray…
-al poco tiempo de llegar a Praga supimos de Ray. Fue una alegría para las dos.
-Sabes que el inteligente de la relación entre nosotros siempre fue tu madre ¿verdad?
-Siempre me lo dice-sonríe la joven y eso Tranquiliza un poco a su padre
-lamento haber sido tan idiota entonces y seguirlo siendo aún ahora, pequeña. Le debo una disculpa a tu madre, una grande
-supongo que si
-¿quieres ir a comer con tío Andrew y conmigo? Tu elige, aunque si quieres algo de la cafetería seguro Andrew no dejó mucho
-Helios me está esperando. Olvidaste tu celular en el salón de clases y Helios me trajo a entregartelo, iremos a comer, pero ¿quieres venir?
-Creo que sería un poco raro aunque…podrías hacer pasar a Helios para tener una charla con él-sonrie el padre
-no hoy, otou San. Ve con tío Andrew, te veré más tarde
-Si, pequeña-acepta el padre y Hotaru sonríe- te quiero
-y yo a ti- sonríe Hotaru que lanza un beso al aire y sale corriendo.
El padre le regala un saludo y la ve alejarse con una sonrisa aunque por dentro su cabeza tiene mil ideas y preguntas girando por su mente, una sobre todas ellas "¿qué Rayos pasó hace quince años?
Cafetería Crown:
Aquella tarde tal como se había pronosticado Mina hizo congregar a Sus tres amigas para actualizarlas sobre los nuevos acontecimientos; Amy había cancelado sus citas de la tarde, Rei fingió tener dolor de cabeza y Makoto le dijo a Andrew que ni se le ocurriera molestarla mientras tenía su tiempo con las chicas y que él se quedaba a cargo de todo en ese tiempo, al menos así era de importante la situación para ellas en ese momento.
-¿cuándo volviste, Mina?-Interroga Rei qué saca de su bolso una pequeña botella de licor del que vierte un poco sobre su café
-apenas ayer en la noche. Tengo muchas cosas por hacer y ustedes también-afirma la rubia
-¿nosotras?-Se extraña Amy
-pues claro. Ustedes me convencieron de que le dijera a Yaten que aceptaba casarme con él y fuí como loca a perseguirlo a mitad de su gira
-¿entonces fue nuestra culpa?-divertida Makoto
-claro que lo es. Yo vivía muy feliz entre mis chicos en poca ropa pero ustedes me metieron la idea del amor romántico y fuí a hacer un escándalo a otro país y a que me persiguiera la seguridad del estadio
-¿hiciste eso?- interroga la mujer de ojos amatista
-claro, así es como Mina hace las cosas-Cuenta orgullosa la rubia- y pues, me subí al escenario a decirle que si quería casarme con él y me dio el anillo a medio concierto
-que romántico-emocionada la castaña
-así que Mina Ahino se les casa-emocionada la de ojos azules se pone de pie anunciándolo como si hubiera una gran audiencia escuchando
-Ehm, Mina. Solo estamos nosotras-susurra Rei
-¡y Andrew!-grita el rubio desde la cocina-¡Felicidades, Mina!
-¡Gracias!-Llora emocionada la rubia que toma el centro de mesa con flores y posa orgullosa y melodramáticamente
-¡Cállate y lava el horno, Hansford!-grita Makoto al rubio que se mete a la cocina agachando la cabeza
-Pobre Andrew ¿ahora qué hizo?-pregunta Rei
-El señor llegó hace veinte minutos de surtir la lista de insumos del mercado-indignada la castaña
-¿Crees que estaba con otra?-preocupada Amy
-¿Andrew? ¿Con otra? Ja, claro que no. Estaba con Darien teniendo su cita de señoras comunicativas, pero debió llegar temprano y se extendió dos horas. Puedo fingir que no me doy cuenta como él finge que no se da cuenta que voy al spa cuando voy a ver los uniformes de los chicos, pero se extendió demasiado y esta me la paga. Lo puse a lavar los hornos.
-pobre Andrew-Se apena Mina
-te apenas porque la felicidad te nubla la vista. Yo te apoyo Mako-chan-se une Rei- yo haría lo mismo
-tú serías capaz de ponerlo a lavar el piso de los baños con cepillo dental-se burla la rubia y Rei considerada posibilidad
-bueno, ahora dinos. ¿Qué harán? ¿Cuándo será la boda?-interroga Makoto
-Creo que quizás en un mes o dos. Eso depende de qué tan bien hagan su trabajo,lo que me lleva a: Makoto te toca hacerte cargo del banquete y las flores, Rei, a ti te toca ver mi vestido de novia, los vestidos de las damas y la temática de la boda, Amy, a tí te toca ver los sitios posibles para la ceremonia y la fiesta y coordinar la lista de invitados y sus acomodos en las mesas ¿entendieron?
-¿qué estás queriendo decir?-interroga Makoto
-Son mis damas de honor-Sonríe Mina entregando una lista a cada una de sus amigas
-descuiden. Yo organizaré mi despedida de soltera en el bar, será una gran noche
-¿conservarás el bar? -interroga Amy
-¿organizarás tu propia despedida de soltera?-se extraña Makoto
-claro a ambas-responde la rubia- Si Yaten me quiere me debe aceptar tal y como soy, con todo y mi amor por los chicos y por el dinero y claro que organizaré mi despedida, ustedes son muy mojigata y son capaces de querer hacer una cena o una pijamada y yo necesito más diversión
-eres incorregible, Mina-reprende Amy
-no esperaba menos de tí-apoya Rei que agrega más vino a su bebida
-bueno, supongo que tenemos mucho trabajo por hacer-se resigna Makoto
-¡sí!-grita divertida la rubia
El resto de la tarde consistió en escuchar los detalles del compromiso y cómo Mina interrumpió el concierto de Yaten a mitad del show y lo bien que la pasaron ese fin de semana, muchos de los detalles hubieran preferido no escucharlos jamás, pero Mina estaba realmente feliz y eso era lo verdaderamente importante.
Departamento Black:
Luego de pasar la tarde junto a Hotaru comiendo y en Hikawa, Helios recogió sus cosas del templo y luego de agradecer a Rei y a Setsuna y Kenzo por la hospitalidad regresó al departamento junto a su tío que seguramente para la hora de su regreso ya estaría ahí y como supuso lo encontró, no como esperaba bebiendo té sino revisando en la cocina y algo ansioso.
-tío ¿te encuentras bien?
-No precisamente
-¿Ocurre algo?-se extraña Helios de ver a su tío incluso nervioso
-perdí algo y… es importante
-¿algo? Sueles ser muy cuidadoso y ordenado, tío.
-lo sé
-las cosas no desaparecen solo porque sí. Y yo nunca tomo tus cosas, pero si buscas algo podrías decirme qué es y ayudarte a buscar.
-Es algo muy valioso de nuestro hogar.
-¿qué es? Creí que no había sobrevivido nada de nuestro hogar
-Es una caja de joyería con piedras preciosas de Némesis, era de tu abuela
-Espera, un joyero-duda Helios y abre su maleta mostrando la caja a su tío y entregándola- ¿esta?
-¡Si! ¿Por qué la tenias tú?-se extraña Zafiro abriéndola y viéndola casi vacía- Espera ¿donde está el contenido?
-¿hablas del té? Tío, tú mismo me autorizaste a llevar al templo Hikawa uno de tus tés para agradecer las atenciones; les preparé a los Hino y al doctor Chiba.
-¿qué tú hiciste qué?-palidece Zafiro
-¿está todo bien?-se extraña Helios-luces pálido. Lo lamento, no sabía que era tan valioso para tí el contenido
-Era lo último que quedaba de las flores del planeta de los sueños, de igual manera no tenían mayor uso en simples mortales. Tú eres un heredero no solo de Némesis sino del mundo de los sueños y las flores que estaban ahí adentro sirven para poder entrar a los sueños, como sea no cualquiera puede, ni tu padre ni yo heredamos el don de tu abuela y aunque tú lo herederas solo podrías entrar a los sueños de aquellos que bebieran el té y que tuvieran la magia suficiente en sus venas y en el planeta tierra no existe la magia…
-Ehm, tío… deberías de sentarte-sonríe Helios
-Helios, me estás preocupando…
-Creo que debería de contarte un poco de la familia de mi novia, va a ser largo ¿quieres un té?
Aquella noche mientras bebían una taza de té, Zafiro palideció y se quedó sin palabras ante las explicaciones de su sobrino, era imposible que las probabilidades se burlaran de ellos de esa forma; Zafiro no creía en el destino pero todo esto parecía un juego del destino, en un mundo sin magia la hija de la reencarnación de la heredera de marte y el heredero de la tierra se había enamorado de su sobrino que luego de varias generaciones perdidas había desarrollado sus poderes del guardián de los sueños ¿qué Rayos estaba pasando aquí?
hola
lamento la tardanza pero estos días han sido una aventura total.
Gracias a Irais y Litakino por dejar sus reviews, espero que sea de su agrado este capítulo y valga la pena la espera.
lector silencioso, gracias por estar ahí.
chicos y chicas trabajo en 2 historias que sustituirán a hijo de la Luna que como ven su final se acerca.
un abrazo a todas y espero sus reviews contando qué les pareció
con cariño
La maga del mal