¡こんにちは! ෆ

A pasado mucho tiempo desde mi última publicación, debo admitir que esta historia que aun no se si dejarla como un Two-Shot o hacerla una historia de varios capítulos, me llevo mucho tiempo terminar de escribir esta primera parte... este capítulo lo empecé como un borrador un 11 de noviembre del 2021 y lo retome a mediados del año pasado y lo segui a principios de este año.

Espero que les guste, segun yo y mi documento de gugul no hay errores ortográficos quizas haya errores gramaticales, pero, equis eso lo arregló luego, de igual manera si ven un error ortográfico por favor háganmelo saber para yo corregirlos.

Disclaimer: Naruto ni ninguno de sus personajes me pertenece, su total autoría es de Masashi Kishimoto su creador. Yo únicamente los tomé prestados para esta historia sin fines de lucro con la única intención de entretener.

Historia 100% de mi autoría, no acepto copias, adaptaciones ni mucho menos que mi trabajo sea resubido en otros foros, por favor respeta mi trabajo.

‹⟨•Embarrassing Mess•⟩›

By: Sazulshi

ʕ•ᴥ•ʔ

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Tenues rayos de luz iluminaban aquella pequeña habitación de hotel, la cama ya hacía ocupada por dos individuos quienes dormían plácidamente ajenos al mundo que los rodeaba. Aquella escena tan reconfortante al poco tiempo se vió irrumpida por tenues movimientos de una delicada silueta femenina quien aún somnolienta se sentó en la cama.

Parecía perdida, miró la habitación con detenimiento, su rostro antes adormilado paso a uno lleno de confusión.

Aquella habitación no era la suya.

Visiblemente afectada por la situación pasó una sus manos por su larga cabellera, no entienda cómo es que llego hasta ahí, los recuerdos de la noche anterior eran borrosos, lo último que recordaba es que estaba en la playa con sus dos amigas totalmente ebrias y abrazadas a dos completos extraños.

De ahí sus recuerdos parecía que alguien los hubiera borrado.

– No vuelvo a tomar… — se dijo así misma en susurró llevando una de sus manos a la altura de sus ojos ofuscada por no poder recordar el cómo llegó hasta ahí.

Estaba tan sumida en sus pensamientos que ni siquiera notó que había otra persona en la habitación, cayó en cuenta hasta que un movimiento a su lado hizo que ella girará su cabeza bruscamente, acto que hizo que su cuello doliera.

– Que de mo… — su maldición a medio decir quedó en el olvidó al reparar en el cuerpo de un hombre a un lado suyo.

El pecho de aquel hombre estaba al descubierto, la sábana cubría hasta la mitad de su cadera la cual aparentemente carecía de prenda alguna que la cubriera. Confusa por la presencia de aquella persona empezó a escanear al hombre del pecho hacia arriba, paso por su cuello y mandíbula hasta llegar a su rostro el cual era simplemente perfecto, sus facciones eran delicadas pero masculinas al mismo tiempo, su nariz era fina y contrastaba perfectamente con el resto de su rostro, subió su mirada hasta sus ojos pero estos estaban cerrados.

– es una lastima… — susurro por lo bajó, se moría de ganas por ver los ojos de tan perfecto hombre, de pronto algo en su cabeza conectó — "no, no, no ,no, por favor no" — se decía mentalmente al tiempo que llevaba su vista hasta su propio cuerpo.

Rezaba porqué lo que pensaba fuera solo una idea suya una paranoia que su mente le creaba dada la situación en la que se encontraba, una vez se vio a si misma casi deseó tirarse por una ventana, estaba desnuda de pies a cabeza y peor aún al lado de un hombre al cuál no recordaba ni de haber conocido en toda la fiesta. Con cuidado de no despertar aquel hombre salió de la cama y empezó a buscar su ropa por la habitación, afortunadamente su vestido estaba al lado de la cama y su ropa interior al lado de este, sus zapatillas estaban tiradas aún lado de la puerta juntó a su cartera, agradecida con la vida de que no tuviera que buscar por todo el lugar rápidamente tomó todas sus cosas y se fue de aquella habitación sin mirar atrás.

• ω •

One month after

Iba llegando a su casa cuando sintió su estómago revuelto, a lo que no le dio tanta importancia pues llevaba un par de semanas con aquella sensación, aquello se lo atribuía al estrés acumulado y a sus horas de comida mal pasadas.

– Nada que algo dulce no solucione — se dijo así misma abriendo la puerta para después ingresar al lugar — ¡Estoy en casa! — dijo en voz alta mientras se quitaba los zapatos.

– Llegas a tiempo, ya casi está la comida — de lo que parecía ser la cocina salió una mujer de cabellos rubios y ojos azules quien miro a la chica con una sonrisa — ¿Cómo te fue? Me acordé que hoy entregaban las notas de cursó — con paso tranquilo se acercó y extendió sus manos.

–ah, Si, ya las tengo — sin terminar de ponerse las sandalias tomó su mochila y sacó de éste un papel el cuál le extendió a la mujer.

– Estoy orgullosa, nuevamente sacaste las mejores calificaciones de todo el cursó — su voz salió notablemente emocionada — tú padre se pondrá muy contento no para de decirle a todos sus amigos que tiene una hija inteligente que está próxima a titularse como médico

– No es para tanto, aún no me graduó y me falta mucho por recorrer – un notable sonrojó se hizo presente en las mejillas de la chica, si bien era cierto que era inteligente la carrera de medicina era complicada no solo debía concentrarse en leer libros y sacar notas perfectas también debía tener un excelente desenvolvimiento en el campo quirúrgico — por cierto mamá ¿Me llegó alguna carta? Hace semanas que solicité hacer mi residencia en el hospital de Konoha y estoy esperando la respuesta.

– ¿Carta? ¡Oh! Si en la mañana vino el cartero y dejó varias — con la mirada señaló la mesa que estaba en la entrada subiendo el escalón — creó haber visto una con tú nombre — dicho aquello regreso a la cocina con una radiante sonrisa.

Tras el comentario de su madre la chica se acercó rápidamente a la mesa y empezó a revisar las cartas, paso de una en una leyendo detalladamente el nombre y de dónde venían. Al principio no vio ninguna con su nombre, la decepción empezaba hacerse presente en su interior "y si ¿No me aceptaron?" Se cuestionó a sí misma sin dejar de

revisar los sobres, siguió hojeando hasta que encontró la carta que buscaba, rápidamente la apartó y dejó el resto en la mesa.

Su respiración se había vuelto agitada, sus manos temblaban de los nervios.

– tranquilízate, Sakura, respira profundo — susurraba para sí misma — ahora con mucha delicadeza abre el sobré — se dijo nuevamente sintiéndose más tranquila.

Lentamente rasgó el sobré por la parte superior y de este saco una hoja de papel perfectamente doblada, con suma lentitud desdobló la hoja en su totalidad y empezó a leerla.

– me aceptaron… — se dijo con voz queda aún asimilando el contenido de aquella carta — ¡ME ACEPTARON! — gritó emocionada una vez que asimiló la información dando pequeños saltos en su lugar.

Su madre al escuchar el grito de emoción de su hija salió nuevamente de la cocina; la mujer se veía notable contenta y orgullosa de su retoño.

– ¡son excelentes noticias! Sabía que lo conseguirás, Sakura — la mujer abrazó a su hija y acarició su cabeza con sumó cariño — tu padre se pondrá contento.

Y como arte de magia el nombrado abrió la puerta de su hogar, parpadeó un tanto extrañado de ver a su esposa e hija en medió del pasillo de la entrada abrazadas.

– ¿Qué sucede? — preguntó con genuina curiosidad.

– Sakura fue aceptada en el hospital de Konoha para hacer su residencia — dijo con total emoción — además nuevamente sacó las mejores calificaciones de su cursó.

El hombre soltó su maletín que llevaba en mano y a pasó rápido se unió al abrazo de su esposa e hija.

– esa es mi hija — soltó orgullo con una sonrisa de oreja a oreja — estoy muy orgulloso de ti mi pequeña niña — con delicadeza beso la cabeza de su hija.

Luego de muchas felicitaciones y palabras llenas de orgullo por parte de sus progenitores, se dispusieron a comer. Su madre le había preparado su comida favorita, aunque ni bien dió el primer bocado sintió su estómago revolverse haciendo que se levantará de golpe y corriera a toda velocidad al baño.

Ya en su destino vacío su estómago en la taza del sanitario por varios minutos, cuando se sintió un tanto mejor, tiró de la cadena y procedió a enjuagarse la boca con abundante agua. Se miró en el espejo detenidamente; se veía ojerosa y su rostro reflejaba mucho cansancio, pero, a ella no le sorprendía, las últimas semanas estuvieron muy pesadas, tuvo diversos exámenes así como proyectos para sus diferentes asignaturas además de haber iniciado con su tesis.

Unos toques en la puerta la trajeron de regreso a la realidad.

– ¿Hija estás bien? — preguntó preocupada su madre detrás de la puerta.

– si, estoy bien, creo que comí algo que me sentó mal en la mañana — respondió con una pequeña mentira, ella no había comido nada en la escuela, nada más al entrar a la cafetería sintió unas terribles ganas de volver el estómago por lo que prefirió saltarse el almuerzo, se dijo que comería algo ya que estuviese en su hogar.

Su madre convencida de su respuesta le dijo que estaba bien, que se retirará a su habitación a descansar si se sentía mal y que en rato le llevaría un té para su malestar; la chica agradecida por la comprensión de su madre le agradeció al salir del baño. Con pasos lentos subió hasta su habitación al tiempo que se frotaba el vientre; su malestar ya no era normal, no había pasado de náuseas en las mañas las cuales calmaba con algún dulce.

– "no puedo estar embarazada o ¿Si?" — aquel pensamiento la invadió de preocupación — "no creo, aunque, no descartaría la idea… no recuerdo haber visto algún preservativo tirado en aquella habitación" — visiblemente más preocupada apresuró su andar hasta su habitación.

Atropelladamente entró a la habitación y de uno de los cajones sacó una prueba de embarazo, para ella tener aquel objetó no presentaba ningún problema para sus padres ya que la joven en varias ocasiones había asistido a escuelas para dar charlas de educación sexual y a enseñarles como usar un condón, así como explicar el funcionamiento básico de la prueba de embarazo; así que tener pruebas y preservativos era normal.

Entró al baño que tenía en su habitación y procedió a hacerse la prueba. Cinco minutos pasaron, cinco minutos que para ella fueron eternos, tomó la prueba que mantenía boca abajo sobre el lavamanos y la giró lentamente con los ojos cerrados negándose a ver el resultado, "tienes que ver" se dijo así misma en voz baja obligándose abrir los ojos y ver el resultado.

Positivo

– no puede ser… — expresó con palpable preocupación — ¿Que hago ahora? — se preguntó afligida.

No sabía que hacer, no sabía quién era el padre de aquel feto creciendo en su interior, con nerviosismo sacó su móvil del interior de su bata médica y se tomó una foto con la prueba con rostro preocupado para después mandar la foto al grupo de chat que mantenía con sus dos mejores amigas Ino y Karin seguido de un "¡urge vernos!".

• ω •

Al siguiente día después de sus clases las tres chicas se reunieron en una cafetería no muy cerca de sus respectivas universidades.

– ¡Felicidades Sakura! — exclamó contenta Ino abrazando a la mencionada con total emoción.

Pero está lejos de verse feliz se veía cada vez más angustiada.

– Sakura, ¿Qué pasa? me estás asustando — preguntó preocupada Karin al ver la expresión de su amiga.

– ¿Ustedes recuerdan con quién estuve en la boda de Shion? — preguntó mordiendo su labio inferior.

Ambas chicas guardaron silencio por breves segundos.

– a ver, hay algo que no entiendo ¿No te estabas tomando las pastillas? — cuestionó Karin.

– no, deje de tomarlas después de que Sasori me dejó para irse a España — respondió pasando uno de sus dedos por la cien.

– por el amor de dios Sakura, ¿Que vas hacer si te pego alguna enfermedad? — volvió a cuestionar Karin visiblemente alterada.

Así empezó una larga mención de diferentes tipos de enfermedades de transmisión sexual que obviamente ella conocía.

– puedes dejar de tomar alcohol, dejar de comer carbohidratos, dejar de consumir gluten, hasta puedes dejar de tener intimidad, pero, nunca dejes de tomarte las pastillas, por el amor de dios, Sakura — regañaron al unísono ambas chicas.

– bueno ¡ya! Gracias por su apoyo — soltó fastidiada, ya sabía que había metido la pata no necesitaba que la regañaran.

– de verdad ¿No te acuerdas de nada? — cuestionó Ino.

– solo recuerdo que llegamos a la fiesta, que estuvimos bebiendo y de ahí en adelante no recuerdo nada, todo es borroso y confuso — respondió.

Las tres guardaron silencio tratando de recordar todo lo sucedido en la boda, los segundos pasaron, el silencio empezaba hacer incómodo pues ninguna decía nada o bueno eso hasta que una chasqueó los dedos como si una bombilla se le hubiera encendido.

– ¡Las fotos! — exclamó Ino de repente haciendo que las otras dos voltearan a verla con duda — las fotos de la boda, seguramente ahí encontramos algo — sugirió a lo que Sakura y Karin estuvieron de acuerdo.

Al mismo tiempo las tres chicas sacaron sus móviles y empezaron a ver las fotos de la boda a la que asistieron, entre las fotos salieron algunas tomas bastante vergonzosas y algo cuestionables de ellas mismas, pero, no las borrarian ya que entre ellas tenían dicho que si posaban para la foto aunque fuera estando ebrias ya no había marcha atrás; esas fotos

serían guardadas para toda la vida. Así siguieron un largo rato hasta encontrar a la persona con la que su amiga ebria engendro una cría.

– oigan ¿Quién es este chico tan guapo? — preguntó Karin mostrando su móvil — aparece mucho en las últimas fotos contigo Sakura.

La aludida miró con detenimiento la pantalla de aquel dispositivo, al principio no lograba reconocer al chico por lo que miro el resto de fotos y ahí algo en su cabeza conectó.

『••[ Flash Back ]••』

Estaban en medio de la playa sentados alrededor de una fogata, miró a su alrededor y vio a sus amigas prácticamente comiéndose a dos chicos, poco más y se desnudarian ahí mismo, están empapados de pies a cabeza gracias a la anterior zambullida que se dieron en el mar; estaba tan absorta mirando a sus amigas que dio un ligero respingo del susto cuando sintió que alguien la tomaba del mentón y giraba su cabeza.

– en lugar de ser espectadores ¿Por qué no lo hacemos también? — preguntó aquella persona en un tono seductor.

Ella lo miró fijamente escasos momentos perdiéndose en sus ojos de un peculiar tono perla con reflejos morados; se sintió tan atraída por estos que lentamente acortó la distancia que separaba sus labios de los suyos. El beso era lento y suave, tan delicado que sentía que estaba sobre las nubes, poco a poco este se volvió apasionado y exigente, sus lenguas liberaban una fiera batalla en sus bocas por ver quién tenía el mandó; al mismo tiempo las manos del chico empezaron a recorrer sin vergüenza alguna sus largas y torneadas piernas.

Pronto la falta de aire se hizo presente, se separaron escasos centímetros en busca de oxígeno, jadeantes cruzaron miradas, en la mirada de él había una invitación silenciosa que la invitaba a ella a pasar la noche en su habitación, sin decir nada a nadie ambos se pusieron en pie y emprendieron camino hacia la habitación de aquel chico.

『••[ End of the Flash Back ]••』

Las mejillas de la chica se volvieron rojas de golpe, aquel chico era con quién ella se levantó aún lado de la cama, ese era el padre de su hijo.

– ¡es él! — aseguró mirando su móvil.

– eres una suertuda frentuda, tendrás un bebé muy guapo — felicito Ino con una sonrisa orgullosa — lo tendrás ¿Cierto?

¿Tenerlo?

El tener ese hijo no era algo que ella contemplará cómo opción, si bien ella se sentía confundida, era más por el hecho de que no estaba segura de si buscar o no al chico y decirle que estaba embarazada, estaba casi segura de que él tampoco querría echarse una

gran responsabilidad estando tan joven, seguramente hablarían sobre irrumpir el embarazo, esperaba que él por lo menos le ayudará con la mitad del gasto que supondría el legrado.

Se sentía mal por aquel feto, quizás si se hubiera concebido en otro momento de su vida ella lo tendría, lamentablemente aquel momento no era el indicado; estaba por iniciar su residencia, un bebé en esos momentos de su vida supondría una pausa en sus estudios además no sabía qué reacción tendrían sus padres sobré todo su padre quién hacía un enorme esfuerzo por pagar su carrera; no quería ver su rostro lleno de decepción y menos porque sabía con cuánto orgullo hablaba de ella con sus amigos y con cuánta persona podía.

– ¿Estás loca? Sakura no tendrá un hijo con un desconocido, Ino — la voz de Karin hizo que regresará a la realidad.

– ¿Por qué no? — cuestionó Ino cruzándose de brazos — no le veo lo malo, Karin.

– te diré porqué no, no sabemos su nombre, quién sabe si trabajé, no sabemos de qué familia viene y lo más importante, no sabemos si está casado, comprometido o en una relación… — en número las razones que serían las más obvias y que la rubia pasaba por alto — piénsalo, tal vez utilizó a Sakura.

La aludida asintió dándole la razón a la pelirroja, aunque por su mente no cruzó la idea de que aquel chico de belleza digna de un dios la utilizará, sin embargo, no descartaba la idea.

– tienes un punto, pero, sigo diciendo que Sakura debería tener ese bebé — opinó dando un sorbo a su café, dicha opinión género un debate entre ambas chicas.

Ino alegaba que Sakura se vería hermosa con un enorme vientre abultado y que sería una excelente madre, mientras que Karin refutaba diciendo que aquel bebé solo sería una obstrucción para sus estudios.

–piensa un poco en Sakura, Ino — suplico con mirada preocupada — piensa en su futuro, en lo mucho que a estudiado para convertirse en médico, ese bebé supondría que ella pause sus estudios por quién sabe cuántos años — expresó seriamente tomando la mano de la rubia.

–yo… lo siento, no estaba pensando correctamente — se disculpó sinceramente — es solo que me emocionó que Sakura fuera la primera de las tres que está embarazada, me imaginé a ese bebé llamándonos "Tía Ino" y "Tía Karin", pero tienes razón lo primero es pensar en el futuro de Sakura — con una sonrisa miró a la peli-rosa y la tomo de una mano — lo que decidas hacer está bien, nosotras te apoyamos.

Karin asintió de acuerdo con las palabras de ino, aquel gesto enternecido a la peli-rosa quien agradeció con un asentimiento de cabeza, quería agradecerles con palabras, pero simplemente no encontraba la palabras adecuadas, pronto sus ojos se empezaron a empeñar por las lágrimas que se le empezaban acumular.

–lo siento, las hormonas están empezando a hacer de las suyas — se disculpó ventilando se con una mano en un intento de disipar aquéllas lágrimas.

Luego de aquel emotivo momento, las chicas empezaron su investigación sobre aquél chico, trataron de buscarlo por redes sociales indagando en fotos y vídeos de la boda de sus amigos esperando encontrar alguna etiqueta que las llevará a algún perfil, pero nada, aquel chico parecía no tener redes sociales y en los comentarios no decían ni su nombre, por lo que no les quedó de otra que preguntarle a su amiga Shion sobre aquél chico.

Y dado que Shion seguía en su viaje de luna de miel, no podían llamarle por lo que le enviaron mensajes y varias fotos del susodicho, ya solo quedaba esperar su respuesta.

El día transcurrido sin mayores cambios, las chicas se despidieron y se fueron a sus respectivos hogares; Sakura al llegar a su hogar fue interceptada por su madre preguntándole si cenaría a lo que respondió con un no, agradeció y se retiró a su habitación. Ni bien entró a su habitación se sentó frente al pequeño escritorio que tenía, abrió su computadora, entró en el navegador y buscó lugares dónde le hicieran el legrado que estuvieran certificados, mediante correos electrónicos solicitó citas a tres diferentes instituciones.

Iría a tres lugares para una valoración y cuando tuviera la información, buscaría al padre de su hijo y entre los dos elegirían el mejor lugar, sin embargo, una parte de ella por muy mínima que era se preguntaba qué pasaría si aquel chico le proponía que tuvieran aquel bebé; desdé que escuchó a Ino decir que sería una excelente madre y que se vería hermosa con una panza del tamaño de un globo terráqueo, algo muy en su interior se empezó a visualizar a ella misma teniendo a ese bebé, se echó hacia atrás en su silla, descubrió su aún plano vientre y lo empezó acariciar lentamente.

–¿Sacarías su color de sus ojos o los míos? — preguntó distraídamente — no le digas a nadie pero tú tía Ino logró hacer que visualizará un poco el cómo serías — se sincero con aquel ser que crecía en su interior como si este la entendiera.

Pasó un largo rato acariciando su vientre absorta en sus pensamientos, por su mente pasaron diversos escenarios de lo que se podría ser su vida con y sin su hijo, por un lado estaba su vida cómo médico ya realizada, se vió como médico en jefe en el área de Neurocirugía, mientras que por el otro lado estaba su vida cómo madre, se veía en una hermosa casa sentada en un jardín viendo como su hijo aprendía a caminar con ayuda de su padre quién lo miraba con orgullo, en aquella visualización no sabía si seguía estudiando, si ya se había graduado y se encontraba ejerciendo la medicina, pero, de veía feliz.

El ruido de su móvil la trajo de regreso, tomó el dispositivo y miró el mensaje.

『••[Shion's Conversation]••』

⟩ Se llama Neji Hyūga, es un amigo de Naruto, este es su número.

[ Neji Hyūga ]

Mensaje

⟩ Ahora, ¡déjenme disfrutar mi luna de miel!

Lo siento, ¡muchas gracias, Shion! ⟨

» • ෆ • «

Guardó entre sus contactos el número y con sus nervios a flor de piel se armó de valor y le envío un mensaje, en el mensaje le pedía que se encontrarán al día siguiente por la tarde ya que tenía algo importante que decirle, le dijo su nombre, le dió una breve descripción de ella, y, por último le envío la dirección de una pequeña cafetería cerca de su universidad.

Bien, no había hecho nada según lo había planeado, su plan perfectamente calculado se fue al demonio ni bien tuvo el contacto del chico.

Suspiro tratando de relajarse, apagó sus datos móviles y lo dejó sobre el escritorio, cuando le envió el mensaje pudo ver qué estaba en línea y por no ver las palomitas azules que confirmaban la lectura del mensaje prefirió pagar sus datos, si le respondió ya lo vería el día de mañana; se levantó de su asiento, caminó hasta el baño se desvistió y tomó una relajante ducha, al salir se vistió y fue directo a su cama donde nada más su cabeza tocó la almohada se fue directo a los brazos de morfeo.

ʕ•ᴥ•ʔ

Al día siguiente de camino a la universidad, encendido sus datos y ni bien lo encendido una oleada de mensajes asaltaron su barra de notificaciones, por encima les dio un vistazo y los fue deslizando, ninguno decía nada importante; le decepcionaba un poco no ver una respuesta del tal Neji, pero, decidió esperar por lo menos hasta la hora del descanso sino tenía respuesta de él hasta en ese entonces le llamaría directamente.

Sus clases transcurrieron con normalidad y aprovechó que aquel día tenían práctica de laboratorio para sacar una muestra de su sangre y realizar una prueba de embarazo sanguínea, nadie la cuestionaría y podría sacar los resultados como si nada. Para la hora del descanso recibo una llamada de la persona que tanto esperaba, en la llamada acordaron la hora de su encuentro, se despidieron y su día continuó con normalidad.

Al final sus clases Sakura salió de prisa del lugar pues se le estaba haciendo tarde para llegar al lugar de su encuentro, afortunadamente la cafetería estaba bastante cerca, hizo aproximadamente cuatro minutos hasta el lugar, al llegar se adentro y tomó asiento en una mesa algo alejada del restó de los clientes del establecimiento; mientras esperaba que llegara Neji se dispuso a practicar sus suturas en un pedazo de piel sintético que su padre le había comprado recientemente. Estaba tan concentrada en lo que hacía que no se percató cuando Neji llegó, no fue hasta que esté se sentó delante suyo y le habló.

–¿Tú eres Sakura? — preguntó seriamente de repente, esto hizo que la peli-rosa diera un brinco en su lugar del susto.

–dios… qué susto — exclamó llevándose una mano a la altura de su corazón — pudiste hacer algo ruido antes de acercarte, pero si, soy Sakura — respondió sin mirarlo aún, dejo lo que estaba haciendo, guardó sus cosas y le miró — tú eres Neji¿Cierto?

El nombrado asintió y la observó por un largo tiempo en total silencio, debía admitir que era más hermosa de lo que recordaba aunque tampoco es como si la recordará nítidamente, sus recuerdos eran borrosos, lo único que recordaba de ella era haberla visto bailando también recordaba que le llamo tanto la atención que en algún momento se acercó a ella y empezaron a bailar juntos, de ahí sus recuerdos eran confusos y muy borrosos, lo último que recordó de aquella boda es que al día siguiente despertó en su habitación con una enorme resaca y desnudó.

Desdé aquel día su mente trataba de recordar la imagen de aquella chica que ahora tenía frente a él, había querido buscarla e incluso estuvo tentado en llamar a Naruto para saber de ella, pero, su estúpido orgullo de hombre lo detuvo, él no era como los demás chicos que buscaban a las mujeres, no, él era todo lo contrario las chicas eran quienes lo buscaban, desde muy joven sabía el poder que tenía sobre las mujeres y se aprovechaba de ello, sin embargo, aquella chica fue diferente y de cierta manera le atraía.

La hubiera seguido observando más tiempo, pero, la mirada que la peli-rosa le enviaba le decía que tenía algo que decirle.

–y bien, ¿Qué era eso tan importante que tenías que decirme? — cuestionó con seriedad.

Sakura se mordió el labio, no estaba segura de como decirle que estaba embarazada por lo que solo atino a sacar las dos pruebas de su mochila y se las extendió sobre la mesa, el castaño un tanto confundido miró lo que está le extendía, reconoció al instante aquel pedazo de plástico, era una prueba de embarazo, se sorprendió al ver el resultado que está marcaba, pero, antes de decir algo miró el papel sobre la mesa con suma atención. Con los nervios empezando a recorrer su cuerpo leyó el papel, era una prueba de embarazo sanguínea donde confirmaba lo que la otra prueba decía.

Miró a la peli-rosa esperando inútilmente que ella empezará a reír y le dijera que era una broma orquestada por algun amigo suyo, pero, el semblante avergonzado se la chica le decía que no era ninguna broma; mentalmente se golpeó mil veces ¿Cómo es que había sido tan irresponsable? Le estaba arruinando la vida a una chica que apenas si recordaba. El silencio que se instaló entre los dos era incómodo, ninguno decía nada, ambos estaban absortos en sus pensamientos, dicho silencio fue roto por una chica que trabajaba en el lugar como mesera, ambos regresaron a la realidad y pidieron un par de tés helados, la joven tomó el pedido y se retiró dejándolos a solas nuevamente.

Se miraron en silencio escasos según antes de retomar la conversación.

–lo siento, debe ser bastante sorpresivo para ti recibir está noticia — inicio disculpándose, el castaño asintió levemente dándole la razón — dude en si buscarte o no, pero, siento que es

lo correcto… espero que no lo tomes como que buscó sacar provecho de esto para obligarte a qué te cases conmigo o algo así, es todo lo contrario — guardó silencio por breves segundos — estuve buscando lugares donde pueda irrumpir el emb…

Neji quien escuchaba con atención a la chica la cortó con un gesto de mano, ya entendía hacia dónde se dirigía aquella conversación, sabía que era grosero de su parte hacerla guardar silencio de tal forma, pero, necesitaba asimilar aquella información. Su padre lo reprendería por tal descuido aunque por otro lado estaría feliz, desde hace tiempo le decía que deseaba ser abuelo y quería ver sus futuros nietos antes que falleciera, su tío también lo regañaria por su imprudencia y estaba seguro de que lo convencería de hacer lo correcto, no es como que eso le molestara, la chica le atraía bastante, pero sería apresurado hablar de matrimonio; lo correcto sería conocerse y tranquilamente hablar del tema sin apresurar nada.

Ambos eran jóvenes, un hijo era una gran responsabilidad, él lo sabía y sabía que irrumpir ese embarazo era lo mejor, pero una parte de él quería vivir aquella experiencia con la chica, quizás no está siendo lo más razonable, sin embargo, estaba dispuesto a intentarlo, claro siempre y cuando ella lo quisiera así.

•

•

•

Continuará…

• ω •

Hasta aquí esta primera parte, espero que les haya gustado, espero no demorarme en subir la continuación, y si demoró lo siento mucho.

Me gustaría decir que esta historia también estara publicada en Wattpad, por si llegan a verla no la reporten porfa, Mii usuario es el mismo que tengo aquí en Fanfiction.

sin más que decir, me despido! nos leemos luego.