-Aló, ¿policía? Creo que tengo información muy importante...

Empecé a trotar de manera ligera mientras hablaba con la operadora.

-911, ¿Cuál es su emergencia?

Pensé un momento lo que iba a decir...

-Creo que tengo información sobre un criminal peligroso

La mujer con total profesionalismo me instó a continuar hablando, puedo escuchar claramente el sonido de un teclado de fondo.

-La persona en cuestión es... no tengo el nombre, pero acostumbra a estar por los alrededores del barrio Mirizawa

Acto seguido describí al hombre como lo recordaba de manera rápida.

-¿Y en que dice que está implicada esta persona?

Ya puedo ver a la distancia la estación del metro...

-En el robo a ese camión blindado la semana pasada

Pagué el ticket correspondiente y me paré en el andén para esperar el metro.

-Muy bien señor, ahora... ¿Cómo sabe que la persona en cuestión está implicada en ese robo?

Me detuve a pensar por un momento, no puedo decir que es solamente una corazonada...

-Bueno... para explicar de manera rápida, el hombre fue pareja de la mamá de mi novia... por razones que no nos importan ahora mismo terminaron su relación y el hombre se fue de la casa...

La mujer, que al parecer paró de escribir en su computadora dijo.

-Vaya al grano por favor...

Creo que actualmente solo le estoy contando la información necesaria, pero de todos modos intentaré resumir aun mas la historia.

-Lo siento señorita, lo que realmente importa es que el hombre dejo un auto en el garaje de la casa de la madre de mi novia y pues ese auto es idéntico al que vi en las grabaciones del atraco

Bueno... no alcance a ver bien el color ya que estaba cubierto con una carpa, pero la silueta y la postura eran la misma.

Pero eso es algo que la señorita operadora no debe de saber ahora mismo.

-¿Alguna otro dato que según usted involucre al hombre con el robo?

Esto es lo ultimo que tengo...

-Bueno... además el hombre amenazó en la noche de ayer al dueño de un bar... ese hombre está muerto ahora, lo acribillaron

Y eso es todo lo que tengo, hubo un momento de silencio, carajo... la señorita no parece convencida.

-Señor, las pruebas son insuficientes para informar a los oficiales de campo sobre esto, ya que son solo suposiciones, pero toda la información va a quedar para el archivo policiaco, muchas gracias por su colaboración

Dijo la mujer, soltando un suspiro cansado...

-¡Pe-pero yo estuve ahí!

¡Mierda! la llamada se cortó.

Subí al metro que llegó segundos antes, me enoja que la mujer tenga razón, realmente no estoy muy seguro y además la posibilidad de que me equivoque es alta, pero si algo que yo puedo evitar le llegase a pasar a Yumiko o a su madre... no me lo voy a poder perdonar.

Incapaz de mantenerme en un solo lugar empecé a caminar dentro del vagón, que para mi suerte no estaba tan lleno...

Pude notar en el rostro de una mujer sentada en el metro que estaba actuando como un loco, la comprendo... de seguro parezco un maniaco o al menos alguien que esta teniendo una crisis nerviosa, pero aun así no puedo simplemente sentarme.

-¿Estás bien, joven?

Preguntó la mujer, consideré ignorarla por un momento... finalmente solté un suspiro

-Si, no se preocupe, creo que solamente estoy sobrepensando una situación, ojala sea eso

Dije mirando a la mujer, que parecía estar en sus treintas, casi entrando a sus cuarentas.

Increíblemente la mujer se parece muchísimo a Yuigahama... ¿Serán parientes?

El metro finalmente llegó a mi parada, sacándome de mis pensamientos de golpe y tambien haciendo que la mujer se perdiera de mi vista entre la multitud de personas bajando del metro...

Salí también del vagón y la estación donde usualmente Yumiko baja para después caminar unas cuadras hasta su casa ocupó mi visión.

Emprendí una carrera frenetica de nuevo... Tropezando con algunas personas salí a la calle.

-Discúlpeme, ¡tengo prisa!, lo siento mucho

Una pequeña reverencia es todo lo que les puedo dar antes de continuar corriendo...

Mierda, esto no me sorprende honestamente, pero empezó a llover de nuevo... esto debe ser una jugarreta de los dioses.

Mi mente se puso a recordar que Komachi había pronosticado lluvia para este fin de semana en la noche...

Con un flash de los relámpagos iluminando de fondo al fin pude ver a lo lejos la casa de las Miura.

Honestamente hubiera preferido que todo sea obra de mi imaginación y que esto quede como un caso de paranoia irracional por parte mía, pero una vez me acerqué lo suficiente pude ver a una persona encapuchada y al parecer alterada golpeando la puerta... sentí la sangre de mi cuerpo bajar hasta mis piernas.

Gracias a esa sensación y el cansancio acumulado en el camino hasta llegar aquí mis piernas se volvieron irremediablemente muy pesadas y torpes.

Casi de manera automática, usando mis manos como apoyo en el suelo para compensar la falta de fuerza en mis adormecidas piernas me oculté tras un basurero.

Antes de llegar hasta aquí no podía parar de desear que todo esto fuera solo un delirio paranoico mío...

Me asomé para volver a mirar y a parte del hombre encapuchado parece que hay dos personas mas en una furgoneta estacionada en la acera justo enfrente de la casa.

Saqué mi teléfono y tomé una foto de manera disimulada a la furgoneta.

¿Ahora que hago?, sin darme cuenta empecé a hiperventilar.

Mi ropa parecía asfixiarme, mi corazón empezaba a latir muy rápido.

Me asomé de nuevo con cuidado y pude ver que el hombre tenía algo en la cintura, ¿es eso una...?

En ese momento mi mente empezó a pensar en distintos escenarios... honestamente ninguno parecía alentador.

-Cierra los ojos por un momento Hachiman, inhala... exhala...

Una vez conseguí calmarme lo suficiente me puse de pie como pude, di unos pasos con mis piernas temblorosas y dije.

-¡Oigan!

Para después dar unos pasos en dirección al hombre.

-¿Que haces aquí niño?

Unos decentes 10 metros son los que me separan de un potencial asesino psicótico.

-Yo... eso no importa, la policía viene en camino ahora mismo

El hombres se volteo hacía mi y dijo.

-¿Policía?

Un segundo despues escuché un disparo y sentí como mi cabeza golpeaba contra la fría y mojada acera.

-¡Maldito mojigato!

Mi teléfono cayó al suelo, el numero 911 estaba brillando en el de manera intermitente.

...

..

.

Han pasado 15 minutos desde esa extraña llamada de Hikiman... un tanto dudosa comprobé las puertas.

¡Mierda! aun no encuentro la llave de la puerta principal, fui a la entrada principal y miré por el ojo de la puerta... las calles están desérticas.

Puse la cadena en el pestillo y fui de nuevo a mi cuarto, intenté llamar a Hikiman pero la línea parece estár ocupada...

Le envíe un mensaje de texto y esperé... pero no recibí respuesta alguna.

Unos golpes en la puerta me sacaron de mi pensamientos.

-¿Hola? ¿hay alguien en casa?

Esa voz... sin dudas ese es el ex imbécil de Mamá.

Decidí ignorarlo... hubo un minuto de silencio pero despues los golpes se volvieron mas y mas insistentes hasta el punto de que retumbaban en mis oídos.

-¿Como es posible que no esté nadie? ¡Abran!

Empecé a asustarme... ¿será esto a lo que se refería Hikiman? ¿Cómo supo que iba a venir este imbécil?

Subí las escaleras rápidamente hacía la habitación de Mamá.

Antes de que llegara a su puerta Mamá salió con una revista en sus manos.

-Yumiko, ¿Quién está en la puerta?

La empujé de nuevo a su cuarto y le dije.

-Es tu ex-novio imbécil, no ha dejado de golpear la puerta desde hace 10 minutos

Entré con ella a su habitación y cerré la puerta con llave.

-Esperemos a que se vaya

Me senté en la cama y le pregunté

-¿Donde conociste a ese loco?

Mamá parecía dudar en responderme.

-En una fiesta... estaba pagando las bebidas de todo el mundo, se acercó a mi mesa, hablamos un poco y simplemente pasó

A decir verdad ya sabía que Mamá iba a fiestas, pero nunca dije nada por que no venía demasiado borracha y era responsable con su trabajo, está en su derecho de todos modos.

Los sonidos provenientes de la puerta pararon...

-¿Ya se fue?

Dijo Mamá antes de abrir la puerta.

Salimos al pasillo y escuché un estruendo... era un disparo.

-¡Mamá vuelve a tu habitación!

Llamé a la policía.

-¡Acabo de escuchar un disparo frente a mi casa, vengan rápido por favor!

Dije, el operador me pidió mi dirección y después de que se la dicté dijo.

-Una unidad va a su ubicación señorita, quédese adentro

Bajé las escaleras... silencio total.

Un fuerte golpe rompió el silencio, antes de darme cuenta la puerta principal estaba abierta y pedazos de lo que era el pestillo estaban en el piso.

-Hola preciosa

Dijo el hombre, su rostro era lo mas asqueroso que había visto en mi vida, sin pensarlo corrí a mi habitación y cerré la puerta.

Empecé a llamar a Hikiman, sin darme cuenta estaba llorando.

El hombre empezó al parecer a patear mi puerta, sacando fuerzas de donde no tenía empujé mi tocador para bloquear la puerta.

Me senté en el piso, me acurruqué y tapé mis oídos con mis manos.

...

..

.

Oscuridad... una oscuridad pegajosa me rodea, no tengo fuerzas ni para levantar un dedo, mas bien no siento mi cuerpo.

La oscuridad es total y absoluta, voy a quedarme aquí para siempre...

O al menos eso creí en ese momento, pasó una eternidad, estaba a punto de cerrar por completo mis ojos y dejarme consumir por completo por la oscuridad...

Justo en ese momento, en la distancia un brillo amarillo empezó a expulsar la hasta ahora absoluta oscuridad.

Se dice que no puede haber noche sin dia, Luna sin Sol y por ende una oscuridad total sin nada de Luz.

La fuerza de la luz parecía implacable, poco a poco parecía acercarse a mi, lo que al principio parecia un pequeño punto amarrillo una vez ahora se acercó lo suficiente, pude ver que en era un as de luz imponente.

Pero eso no es lo mas sorprendente, ya que dentro había una silueta, una silueta con cabellos de oro que conocía muy bien.

-Toma mi mano Hikiman

Yumiko estaba flotando frente a mi... brillando como el sol mismo.

Tomando toda mi poca fuerza restante extendí mi mano hacia ella.

Ni bien toqué su mano sentí una calidez indescriptible, lagrimas brotaban de sus hermosos ojos color verde oliva.

-No me sueltes Hikiman

Suplicó el ser mas hermoso que ultimamente se hizo con su lugar propio en mi vida.

-Nunca

Alcancé a murmurar entre dientes, Yumiko se acercó y me envolvió con su cálida presencia en un amoroso abrazo.

Segundos después sentí que poco a poco empezamos a flotar lejos de la oscuridad, la velocidad iba aumentando poco a poco, en la distancia, muy arriba pude ver una salida brillante a la cual nos acercábamos.

Poco a poco la oscuridad pegada a mi piel se fue despegando hasta que finalmente quedé limpio.

La presencia de Yumiko en mi vida es como un destello amarillo en la oscura noche.

FIN

Por fin, los hice sufrir mucho chicos...

Muchísimas disculpas por eso, pero soy un hijo de puta narcisista y exigente conmigo mismo asi que decidí tomarme mi tiempo para escribir esto...

Si bien este capitulo lleva la palabra final en el nombre aun quedan 2 epílogos para resolver algunas dudas que quizás hayan quedado por ahí flotando.

Quiero agradecer al Kazuma_GOD que se pone a leer mis borradores y opinar sobre ellos en plena madrugada.

A ustedes por leer hasta el final.

Y a mi mismo.

Sin mas que agregar me despido.

¡Con delirios de grandeza se despide

Aruk Khan!