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Epilogo 1
Estaba bebiendo un café con mi compañero mientras patrullábamos las calles de uno de los barrios mas problemáticos de la ciudad, hasta ahora no ha habido ningún incidente mayor, solo niños violando el toque de queda y algún que otro vagabundo prepotente, una noche tranquila...
-Unidades cercanas, 10-50*(1) recibido, favor de ir inmediatamente a Mirizawa 203, un 10-14*(2) presuntamente armado en las inmediaciones
La radio interrumpió mis pensamientos, ¡Mierda! levanté una bandera.
-10-4*(3) base, unidad 9 en camino
Respondió mi compañero.
Empecé a acelerar, la ubicación estaba a unas pocas cuadras, después de 5 años de patrullar estas calles es fácil maniobrar.
Unos minutos después llegamos al lugar, estacioné la patrulla a unos metros del lugar.
Lo primero que noté fue un joven tirado en la acera frente a la casa y dos hombres en una furgoneta sentados como si un niño desangrándose en la acera fuera normal.
-Solicito 5-52*(4) a mi ubicación rápidamente, presunto 9-10*(5) herido
Comuniqué en mi radio a la base.
-10-4 , llega en 300
5 minutos... con señas indiqué a mi compañero que iba a avanzar y que me provea cobertura.
Usando basureros y una muralla llegué a la parte trasera de la furgoneta sin que los sospechosos me notaran, respiré un poco y conté hasta 3 mentalmente para después desenfundar mi arma.
Me levanté y fui rápidamente hasta el conductor.
-¡Policía! Bajen ambos ahora mismo
Uno de ellos intentó ir a la parte de atrás de vehículo pero desistió en el momento en que le apunté con mi arma y la amartillé.
En mi espalda le hice señas a mi compañero con mi mano izquierda para que se acerque.
-¡Los quiero a ambos afuera del vehículo ahora mismo!
En ese momento mi compañero llego al otro lado y bajó al hombre del lado del acompañante, los reducimos y esposamos.
-Los tengo cubiertos pareja, revisé al muchacho
Dijo mi compañero, en su rostro se podía notar la autoconfianza que fue templada poco a poco en todos estos 2 años.
Definitivamente ya no es un novato al que le encargaba mis donas.
Corrí hasta el chico tirado en la acera boca abajo, puse mis dedos en su cuello... lo voltee con cuidado y noté una gran mancha en su camiseta, a la altura del estomago.
No hay orificio de salida... empecé a ejercer presión en la herida para evitar que se desangre
-Base, el 9-10 se está desangrando, donde está el 5-52
Dije en mi radio, la sangre fluye de manera constante...
-Debería de estar ahí en cualquier momento
Recibí en respuesta, también escuché golpes en el interior del inmueble, afortunadamente la ambulancia llegó segundos despues y empezaron a darle los primeros auxilios al chico.
-Parece haber otro sospechoso dentro del inmueble
Dije mientras me acercaba a mi compañero que estaba subiendo a los sospechosos a una patrullera refuerzo que el solicitó hace un momento.
-Vamos a revisar el inmueble, por favor llevenlos a la delegación
Dijo mi compañero, viendo que nos quedamos solo nosotros dos de nuevo solicité mas refuerzos por si acaso.
Nos miramos por un momento, contamos hasta 3 y entramos con cautela, el lugar no parecía estar desordenado... no parece un robo.
Si es asi... pareciera que estaban buscando algo o a alguien en especial...
-Policía de Chiba, ¿hay alguien aquí?
La sala parecía vacía, caminé hasta un pasillo, noté una puerta abierta y también otra puerta muy golpeada, giré el pomo de la puerta pero esta no se abrió.
Acerqué mi oido a la puerta y escuché el sollozo de una mujer al otro lado.
-Es la Policía, ¿hay alguien ahí adentro?
Pregunté, la mujer soltó un grito al parecer sorprendida.
-¿Está bien?
Pregunté.
-S-si
Respondió con un claro tono de shock.
-¿Puede abrir la puerta?
Volví a preguntar, si no puede voy a tener que derribarla o buscar otra entrada...
-S-si
Dijo la voz temblorosa, escuché el sonido de un mueble pesado siendo arrastrado y un momento después la puerta se abrió.
Una mujer de pelo rubio con los ojos rojos por haber llorado tanto salió del cuarto.
-O-oficiales... a-ayuda, tengo miedo
Dijo la mujer.
-Mi Mamá está arriba... c-creo que ese h-hombre subió las escaleras hace un rato, ¡sálvenla por favor!
La mujer parece entrar de nuevo un estado de shock y empezó a llorar sonoramente.
-La unidad 12 ha llegado a la ubicación y espera instrucciones
Estaba esperando por ellos...
-Pareja, retire a la 9-10... Yo me encargo
Honestamente no hay persona en este mundo en la que confíe mas... con ese pensamiento en mente asentí, tomé a la mujer y la saqué de la casa hasta donde está la patrulla refuerzo.
-Parece estar ilesa, pero la llevaremos al hospital después por si acaso
Dije mientras dejaba a la mujer con una oficial.
Justo cuando me dispuse a entrar de nuevo a el inmueble unos disparos me erizaron la piel de la nuca.
Corrí lo mas rápido que pude dentro de la casa... ¡debí ser yo el que subió a verificar!
-¡Maldición! ¡Kurzawa responde!
Justo cuando estaba por subir las escaleras escuché el rugido de un motor.
Tuve que resignarme y correr hasta lo que parece ser la cochera de la casa.
Ahí pude divisar al sospechoso en un automóvil, tiene el motor encendido y parece a punto de moverse.
Antes de que pueda siquiera decir algo el hombre aceleró y atravesó la puerta de madera del garaje, como dicta el código abrí fuego a las ruedas del rodado para inutilizarlo.
Mis compañeros afuera hicieron lo mismo, logrando exitosamente pararlo.
Aun así el hombre se negó a entregarse y después de bajar empezó a abrir fuego a la humanidad de mis compañeros
No nos quedó de otra que neutralizarlo.
- Y eso fue lo que sucedió jefe
Dije mientras estaba bebiendo un poco de café negro... actualmente estamos parados a un lado del cajón de mi compañero... no, de mi mejor amigo.
-Aun sigo pensando que debí ser yo el que suba esas malditas escaleras
No pude evitar lamentarme, apreté mi mano libre con impotencia mientras miraba el suelo.
Lagrimas mojaron mis zapatos negros.
-Levanta la cabeza, el Oficial Kurzawa dio su vida por el trabajo que amó, de seguro está satisfecho en el cielo por haber salvado a esa mujer
Soltó el jefe, veterano de muchas batallas conocidas y infinidad de desconocidas.
-Lo se... claro que lo se
Te extrañaré siempre amigo.
El sonido de una trompeta junto con unos disparos sincronizados inundaron el ambiente
Código Policíal:
1* Llamada de auxilio/denuncia
2* Hombre armado
3* Copiado o Recibido
4* Ambulancia
5* Civil
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Epilogo 2
Después de esa extraña alucinación que tuve abrí los ojos...
-¿Donde?
Balbucee antes de levantar mi brazo con esfuerzo y cubrirme la cara debido a que la luz golpeó de manera inmisericorde a mis ojos.
-¡Hi-Hikiman!
Escuché antes de sentir unos brazos rodeando mis hombros... una cabeza descansó sobre mi hombro que se humedeció en lo que parecen ser lagrimas.
-¿Aun en situaciones como esta no vas a decir mi nombre como se debe?
Dije mientras correspondía su abrazo en la medida posible que me dejaban los cables conectados a mi cuerpo.
-Hachiman, Hachiman, Hachiman, ¡te amo!
Dijo antes de darme un apasionado beso.
-Tu me salvaste Yumiko
Dije sin siquiera yo entender por completo mis delirios.
-¿De que estas hablando? Tu nos salvaste a nosotras
Dijo Yumiko, aun un tanto dormido dije
-Pero fuiste tu la que me encostraste en ese oscuro lugar y me elevaste fuera de el
Yumiko tomó mi mano y recordé la sensación de calidez de ese momento.
-Sentí una dulce calidez en mi mano que se extendió por todo mi cuerpo.
Continué diciendo mientras aferraba mis dedos con los suyos de manera débil.
Estoy desecho...
-A veces los pacientes que entran en coma responden a impulsos exteriores, es por eso que instamos a los familiares que visiten a los pacientes... aunque con esta chica no fue necesario ya que vino todos los días de este mes que estuviste inconsciente.
Dijo un doctor con cara ya conocida para mi mientras entraba por la puerta acompañado de mis padres, Komachi y la madre de Yumiko.
-Yo nunca lo dude Onii-chan
Dijo Komachi mientras se acercaba a mi con un rostro estoico.
-Bienvenido de vuelta, ¡te tardaste tonto!
Dijo antes de darme un sorpresivo beso en la mejilla.
-Gracias a dios
Dijo antes de al parecer finalmente no aguantar mas y empezar a llorar como una niña pequeña, posé mi mano en su cabeza como usualmente lo hago para molestarla y sonreí para mi mismo.
...
..
.
Poco a poco la pesadumbre de mi cuerpo se fue, dejando todo de nuevo a la normalidad, exceptuando la cicatriz que quedó en mi abdomen como recuerdo... la maldita bala se alojó en mi páncreas y casi me mata.
Dejando eso de lado, los años pasaron volando y ahora estoy en la universidad, no me gradué con honores pero tampoco me fue mal...
Desafortunadamente poco a poco perdí contacto con algunas personas importantes para mi, sin embargo algunas se quedaron conmigo hasta el día de hoy... como Zaimokuza que ahora está estudiando actuación, sorprendentemente el cabron se puso en forma hasta el punto que me da celos, aunque se me pasa viendo que sigue siendo un chuuni sin remedio, aunque ahora parece que es cool según las chicas.
A totsuka hoy en día lo veo en la tv, en sus partidos de tenis en Europa o inclusive América... no me sorprende ya que ama ese deporte desde siempre, en parte por eso es irreal verlo sentado ahora en nuestro apartamento de Tokio bebiendo té mientras acaricia a mi gato.
-¿Quieres mas té Totsu-kun?
Le preguntó Yumiko... cuando dije nuestro departamento me refiero a que es de Yumiko y mío, vivimos juntos desde el año pasado ya que estudiamos en universidades cercanas y la renta es muy costosa.
-No, gracias de todas formas Yumiko-san, creo que es hora de que me vaya...
Dijo...
-Aww ¿estás seguro?
Le pregunté.
-Puedes pasar la noche aquí, Yumiko puede dormir en el sofá y nosotros...
Un mechón de mi pelo fue arrancado de un tirón en ese momento.
-Despídete de tu amigo, Hikigaya Hachiman
Dijo Yumiko, despedí a Totsuka en la puerta y volví adentro
-¿Yumi?
Dije mientras la buscaba con mis ojos.
-En la cocina
Dijo, me apresuré a ir y tomando una toalla dije.
-Tu lavas, yo seco
Yumiko sonrió... cegándome con su brillo...
Ese brillo aun presente después de estos 4 años.
-¿Yumi?
Dije
-¿Si?
Respondió Yumiko de forma natural.
-¿Yumi?
Volví a llamarla, he pensando mucho últimamente sobre esto y ahora finalmente puedo decir con total certeza ahora que soy feliz
-¿Si, Hachi?
Volvió a responder, finalmente acabamos de lavar los trastes, Yumiko se sacó los guantes amarillos y se volteó hacia mi.
-Te amo mi sol
Dije antes de levantarla del suelo y plantarle un beso.
-Te amo Luna
Recibí en respuesta... quizás a otras personas esto les parezca cliché o vergonzoso pero a mi no me importa, amo a esta mujer y se que ella me ama a mi.
Profundicé el beso y con ella aun en mis brazos caminé hasta nuestro cuarto.
Lo siento amigos pero voy a tener que cerrar la puerta y ustedes se van a quedar afuera.
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Bueno... ahora si este es el final.
The end.
Tan tan.
Muchas gracias amigos.
Mejor que estén atentos por que tengo algunos proyectos en mente.
Y por favor si les apetece pueden leer mi historia original que está en mi perfil.
Nos leemos si el destino y las probabilidades así lo deseen en algún momento.
