Hola!
Espero el primer capitulo les haya gustado, aun tengo dudas sobre la historia que escribió, pero eh tenido esta historia en mi mente por bastante tiempo y me anime a mostrarla.
Sin mas que decir, a todos aquellos que entren a mi fic, espero les entretengan y pasen un muy bien dia
-hola- persona hablando
-hola- Pensamiento o recuerdo
Capítulo 2: Pequeños Encuentros
Nos ubicamos en la ciudad de Vale una ciudad de las mas importante en todo Remnant, hogar de la academia para cazadores Beacon, una isla flotante encima de la ciudad la cual hace verse con un aire mágico por la vista de la academia flotante, podemos ver que por la ciudad había mucha gente transitando por las calles, no es de extrañar ya que hoy es el inicio de clases y muchos nuevos alumnos ( más estudiantes viejos) estaban transitando por las calles rumbo a la academia, entre ellos esta nuestro protagonista que luce diferente para poder mezclarse entre las personas. Nuestro castaño estaba rumbo a lo que seria el inicio de sus aventuras a paso tranquilo, este vestía una larga gabardina negra con detalles como líneas rojas pasando por sus brazos y los costados laterales, dicha gabardina la tenia medio abierta solo abotonada a la altura de su cintura dejando el pecho al aire el cual mostraba una playera roja con la imagen de un águila de color negro, vestía unos pantalones ligeramente sueltos de color negro junto un cinturón con una hebilla de metal, para finalizar su atuendo este tenia unas botas de combate de color negro. Nuestro protagonista no solo tenía este nuevo atuendo que lo hacia ver como un cazador, también hay cambios notables en él, por ejemplo su piel ya no era ligeramente bronceada, ahora era blanca y su cabello castaño se volvió ligeramente mas claro, sus ojos grises habían sido reemplazados por unos de color amarillo y mas afilados, aunque el tic nervioso que tenia en su ojo derecho daba a entender que dichos cambios no los había pedido a voluntad.
-(Vaya sorpresita me dejaste Iris, imaginar que el "regalo" que me tenías preparado me haría cambiar mi aspecto)- agradecía que no había sufrido cambios tan relevantes o que haya cambiado de forma exagerada, no iba a mentirse estaba ansioso de tener una oportunidad de usar "eso" en un futuro cercano pero por ahora era mejor concentrarse en su misión….pasar la prueba de admisión –(que bueno que fui precavido al entrenar con mi arma para poder adaptarme a ella, de lo contrario habría hecho el ridículo)- pensó el castaño con una gota de sudor por el recuerdo de besar el piso en varias ocasiones por el peso de esta, dicha arma era una espada de gran tamaño la cual su filo se podía ver como brillaba ante los rayos del sol, tenia unos detalles en rojo cerca de la base de la empuñadura y la misma tenia el color ojo y por extraño que parezca tenia un especie de cerrojo. Así es el arma de nuestro protagonista era la legendaria Red Queen, desde que la vio en ese universo siempre ha querido portarla aunque nunca tuvo la oportunidad hasta ahora, un arma perfecta para este mundo por el hecho que muchas de ellas podían ser transformadas en varios tipos de armas, entrecerró los ojos por un momento recordando las complicaciones para poder crearla ya que no podía usar su poder dársela de combustible a su espada para poder usar las cargas Exceed, se tuvo que crear un mecanismo que le servía para crear y almacenar las llamas dentro como vio, intento adaptarla en el uso del dust pero fue una idea tonta ¿la razón? Gastaba una gran cantidad de este y no duraba mucho almacenado con ese defecto muchos combos eran descartables, por esos mismos mecanismos la espada se volvió muy pesada de lo que uno podría imaginarse, se alegraba que el pudo viajar a este mundo hace dos semanas para practicar con la espada y ver que tanto poder fue bloqueado por el mismo mundo, al pensar en eso el seño del castaño se frunció al poder comprobar mejor su cuerpo –( mi poder disminuyo bastante, aunque mi control sobre mi poder espiritual aun estaba activo, tengo que practicar bastante para liberar todo mi poder, no se que tanto tiempo me tome….solo rezo que sea antes que esa bruja haga su movimiento)- pensó con cierta angustia, no podía ocultarlo si bien no estaba tan en desventaja si fue un duro golpe para el ver que con esto no será suficiente para pelear con ella o si manda a sus Minions antes estaría en serios problemas.
Sacudió su cabeza tratando de olvidarse de eso, no valía la pena pensar en algo que aún no pasa, deberá de aprovechar cada momento para poder sacar poco a poco de su poder que se encuentra bloqueado, enfoco su mirada al camino en frente de el dónde estaba la plataforma donde estacionaban los Bullhead´s aeronaves que servían como transporte entre la ciudad de Vale y la academia Beacon, miro hacia arriba donde estaba la academia flotante antes de entrar al vehículo pensando en las vivencias que tendrá ahí.
Por otro lado, donde estaban los estudiantes hablando entre si o maravillándose por las vistas, podemos ver a la pequeña chica de cabello negro con puntas rojas viendo a los lados algo nerviosa, la chica tenia unos bellos ojos plateados con una vestimenta estilo gotic loli con una capa ropa con capucha, ella era muy tímida y casi rayando a ser antisocial por la timidez que la caracterizaba.
Aun lado de esta estaba una chica algo mas alta que la primera con el cabello largo de un color rubio muy brillante y sedoso demostrando el gran cuidado que le daba a este, unos ojos son de un color Lilia que contrastaba muy bien con su apariencia, vestía una blusa de mangas cortas color café con bordes dorados, sobre una playera con corte bajo amarilla, con un símbolo en negro, que se asemeja a un corazón quemándose. Utiliza un cinturón café con una hebilla, un bolso y una tela café debajo una blanca que cubre la parte de atrás de su cadera, utiliza unos shorts negros. Además de una bufanda naranja alrededor de su cuello, todo lo complementa con unas botas altas con una pequeña plataforma debajo de estas, con calcetines de color naranja que le llegan por encima de las rodillas.
-Vamos anímate Rubes estas fuera de Patch y fuiste inscrita en la academia dos años antes- la rubia trataba de relajar a la pequeña caperucita.
- Si hermana estoy emocionada pero hay mucha gente y también estoy contenta de poder inscribirme contigo Yang, podemos tener grandes aventuras es mas ¡ podemos estar en el mismo equipo, ser compañeras de cuarto será grandioso!- comentaba muy contenta la pelinegra, pensaba que estaría dos años sola aburriéndose en casa, no la mal entiendan ama y adora a su papa, pero al mismo tiempo en casa no tenia muchos amigos solo contados con las manos y entre ellos no todos apreciaban su gran gusto por las armas, pero no espero que su pequeña aventura al tratar de buscar a su hermana, haya podido detener un robo, lamentablemente el ladrón escapo pero impresiono mucho a la profesora que la ayudo y hela aquí ahora siendo una futura cazadora.
La rubia al oír el tono emocionado de su pequeña hermana solo pudo poner una sonrisa tensa, claro le encantaría seguir cuidando a la pelinegra pero también que ella sola buscara amigos potenciales y saliera de su caparazón, no quería dejarla sola pero no tenia de otra. Mientras estaban hablando habían llegando a su destino, la rubia aprovecho eso para mezclarse rápidamente con la multitud y salir dejando a su pequeña hermana ahí, la cual estaba parpadeando ligeramente al notar como su querida hermana mayor, tuvo la osadía de dejarla ahí sola.
-¡ YANG!- para ser pequeña dio un potente grito enojado jurando venganza por lo que hizo la rubia, ya lo vera va a cambiar el contendió de sus zampo especial, tal vez teñirle el pelo si seria mejor, mientras la pequeña caperucita refunfuñona y planeaba su venganza contra la rubia, no le quedo otra que caminar fuera de forma distraída.
Sin que se diera cuenta por sus planes de venganza contra su hermana, la pobre pelinegra choco contra una carretilla la cual tenia varias maletas blancas, las cuales al abrirse tiro algunos frascos con polvos de colores dentro.
-¡¿Acaso no puedes ver por donde caminas?!- la chica que estaba gritando era una chica de cabello blanco atado en una coleta la cual era sujetado por un adorno que pareciera una tiara de color plata, tenia unos ojos azules claros que contrastaban muy bien con su piel pálida, vestía un vestido blanco con un pequeño escote, tenia una chaqueta blanca abierta con mangas largas, el fondo de la chaqueta es de un color rojo, para terminar su atuendo calzaba unas botas largas de color blanco a la altura de sus pantorrillas con tacón.
Dicha peliblanca estaba molesta mientras estaba tratando de guardar los frascos que estaban en el suelo sin notar que uno estaba medio abierto.
-¿Sabes acaso lo peligroso que son? No, no lo sabes, esto niña es Dust, un polvo con propiedades elementales, la cual con un mal golpe pudo haber explotado- a pesar de su claro enojo se podía ver como explicaba los elementos que estos poseían, todo mientras agitaba el mismo frasco con un polvo rojo en el en la cara de la pelinegro, todo sin ver como el polvo salía de este cubriendo a la caperucita, la cual sentía su nariz picar.
Todos sabemos como terminara eso, aunque dicha peliblanca en su furia e indignación parecía ignorar
-Achu-
BOOM
En menos de un segundo la pulcra apariencia de la peliblanca se cubrió de humo ensuciando su BLANCO vestido, mientras la pelinegra solo trataba de sacarse la sensación de su nariz frotándola con su mano
-¡ E-esto es inaceptable, mira lo que has hecho!- grito furiosa al ver como no solo había perdido una buena parte de su cargamento de dust (cosa que podía reponer rápidamente), también quedo sucia por la acción de la pelinegra, ohh sentía una jaqueca llegar lentamente (una de tantas que tendrá en el futuro).
-L-lo siento en verdad no era mi intención- susurro la oji plata sintiéndose deprimida, su primer día en Beacon y ya causo problemas, podía escuchar como la peliblanca seguía regañándola. Bajo la mirada sintiendo sus ojos húmedos señal clara que estaba apunto de llorar, ya se disculpó no se merecía seguir siendo regañada así
-oye princesita la pequeña dijo lo siento, ¿no crees que ya es suficiente?
La pelinegra oyó esa voz y lentamente subía la mirada, lo primero que vio fue la punta de una espada y una gabardina negra, entre más subía podía apreciar la espada en su totalidad, pero antes de que su lado fan se activara al ver semejante belleza, puedo ver un cabello castaño claro, sorprendía que alguien la defendiera.
Por otro lado, el castaño había sido el ultimo en salir de la nave, todo por apreciar mas la academia desde lejos, cuando ocurrió la explosión se movió instintivamente al origen listo para cualquier cosa, pero solo pudo apreciar como una oji azul estaba regañando duramente a la pelinegra la cual se le veía muy triste, es por eso que acuto, podía comprender que fue un accidente y la peli blanca tenia motivos para enojarse, pero eso ya fue demasiado.
-¡¿ Y tú quien crees que eres para meterte donde no te llaman?! Es mas ¿sabes acaso con quien estás hablando? - exclamo con furia fulminando con la mirada al idiota que se metía donde no lo llamaban.
-Soy Tsushima Kazuma y no princesita no se quien eres y ni me interesa- hablando serio sin verse afectado por esa mirada, ya podía ver que esta chica era la típica chica mimada que tenia todo con chasquear los dedos, sonriendo divertido al ver como ella se quedo petrificada al oír que ni le interesaba quien era ella.
-¡¿ como que no sabes quien soy?! ¿acaso vives en una piedra? - luego de recuperarse inmediatamente ataco ofendida
-Weiss Schenees, heredera de la SDC. Una de las compañías mas grandes que producen y refinan el mejor dust de Remnant- esto fue mencionado por otra persona que se metió a la discusión.
3 pares de ojos voltearon hacia la persona que hablo recién, esta tenia un frasco con dust dentro y en la otra mano tenía un libro.
Tenia el cabello largo de color negro, con unos ojos dorados rasgados con ligera sombra color violeta que los hacia resaltar más.
Su vestimenta consistía de un chaleco negro abotonado con abrigos y un solo botón plateado en la parte delantera, por debajo había una camiseta blanca sin mangas y de cuello alto. También llevaba pantalones cortos blancos, medias negras de un casi moradas y botas negras con tacón bajo.
Para terminar tenia un lazo negro en su cabello que curiosamente no se movía a pesar de la leve corriente, esto hizo entrecerrar los ojos del castaño por un segundo al percatarse de este detalle.
-Finalmente, algo de reconocimiento- exclamo la ahora llamada Weiss, contenta que alguien la reconociera, tal ves con esto su molestia se disminuyera un poco.
- la misma compañía con fuerza laboral controvertidas y socios comerciales turbios- completo la peli negra de forma casual.
La gratitud rápidamente se convirtió en una enorme molestia. Su límite fue alcanzado, perdió parte de su cargamento, su perfecto aspecto fue manchado, un ignorante se atreve a desafiarla y ahora esto. Tomo sus cosas del pequeño cráter que se creo por la explosión, guardando lo que sobrevivió en sus maletas y dando fuertes pisadas se fue de ahí
-(no te rías, no te rías, no te rías)- pensaba el castaño con un aspecto neutro en su rostro pero mordiendo el interior de su mejilla para no reírse, oh eso fue tan divertido como pusieron en su lugar a la princesita, si se reía y la chica Weiss lo escuchara temía que tuviera su primera enemiga. No tenia ganas de lidiar con una chica altiva y gruñona, bonita si, pero si actitud no era lo mejor.
Sintió que jalaban de su gabardina al voltear vio a la pequeña pelinegra con una mirada tímida.
-Ahm….muchas por ayudarme- susurro muy bajo debido a su timidez, bajo su cabeza viendo sus zapatos debido a la vergüenza
-No te preocupes por eso, alguien debía detenerla después de todo y admito que fue divertido verla hacer un berrinche- comento divertido el castaño sonriendo a la pelinegra, debía admitir que se veía adorable actuando de esa manera.
- jeje si fue increíble- levantando su rostro con una pequeña sonrisa ya más tranquila, giro su mirada para poder acrecer a la otra persona, pero noto que ella ya se estaba alejando.
- Anímate, estoy seguro que ella sabe que apreciaste su ayuda- le aseguro kazuma la niña también notando el destino que tomaba la pelinegra.
-¿Tu crees eso?- susurro inseguro. Le habría gustado agradecerle de forma correcta la chica por su ayuda.
- Estoy seguro de eso, lo siento no me e presentado correctamente, Tsushima Kazuma, por si no lo escucha bien la primera ves con la princesita- contesto con una pequeña sonrisa volteando su mirada a la caperucita.
-Ruby Rose- Se presento la pelinegra con una sonrisa, olvidando el lamentable primer encuentro que tuvo enfocándose mas en el chico en frente de ella, aunque mas que nada, enfocando su mirada detrás de el con su mirada cambiando a una brillante- esa es una espada genial ¿la hiciste tu? ¿en que arma puede transformarse? ¿puedo verla? - empezó a ametrallar al castaño con pregunta sin descanso hasta dando pequeños brinquitos desde su posición
El castaño parpadeo impresionado ante ese giro de personalidad tan repentino, viéndola así tan energética solo pudo sonreír al tener un pequeño recuerdo. El ya no veía a ruby en ves de eso tenia frente a una niña casi de la misma estatura que la pelinegra, ella tenia el cabello largo que llegaba hasta su cintura, de un color castaño obscuro y usaba una blusa blanca con un dibujo de un animal, junto con unos shorts rosados. Llevaba como calzado unos tenis color rosa con estampillas puestas en ella.
-oni chan eres grandioso, como pateaste la pelota desde un ángulo difícil y ¡GOL! Fue espectacular oni chan, enséñame por favor- hablo la castaña con una gran sonrisa, se notaba en su tono de voz la admiración que tenia y la forma que expresaba lo que paso con sus manos y pies.
-jajaja claro que si Kaori te enseñare con gusto
Sonriendo ante el pequeño recuerdo de cuando tuvo un enfrentamiento de futbol entre escuelas y su hermana había hizo a animarlo. Pero a medida que recordaba también noto algo preocupante, no podía recordar su rostro con claridad.
Desechando esos pensamientos Kazuma estiro su mano para acariciar la cabeza de la pelinegra con cierta ternura por el recuerdo fugaz que tuvo
Ruby se quedo quieta ante esa muestra de afecto, alzo su mirada sonrojada para ver los ojos del castaño, pocas personas le hacían tan muestra, su hermana Yang, su papa y su tío, son las únicas personas las cuales le hacían tal muestra de afecto. El sentimiento tan cálido que sentía de esa mano la hacía sentir tranquila al punto de inclinar su cabeza un poco para sentir mejor ese gesto.
-calma pequeña te dará una sobredosis o la tendré yo- susurrando para el mismo lo ultimo debido a tal muestra la bomba de inocencia que tenia en frente.
Retiro lentamente la mano de la cabeza de la pelinegra, para pequeño disgusto suyo, llevo su mano a la parte de atrás donde tenia el mango de su espada para poder sacarla y ponerla frente a la de puntas rojas, usando también su otra mano para mantener la espada acostada sobre sus manos y así ella pudiera ver mejor- Respondiendo a tus preguntas, si esta espada la fabrique yo, se llama Red Queen, no, no puede transformarse por un pequeño problema técnico, puedes verla mas no tocarla no vaya a ser que te corte, si es muy filosa- contesto sus preguntas sin problema alguno viendo como ella observaba con emoción la espada.
-¡Genial! Es una espada asombrosa, yo también fabrique mi arma mira- de la parte de atrás de su espalda saco su arma la cual rápidamente se transformo en una guadaña bastante grande para el pequeño cuerpo de Ruby- se llama Crescent Rose, es una guadaña y se transforma en un rifle francotirador, la diseñe yo misma- Comento con mucho orgullo mientras abrasaba a su arma
-Vaya eres impresionante si lograste crear esa arma tu misma- reconoció el castaño, si bien a el le mandaron a construir su arma, tuvo que el mismo modificarla para adaptarse a usarla en este mundo y fue un verdadero dolor de cabeza
Ruby al oír ese reconocimiento mostró una gran sonrisa feliz, ni su hermana se mostraba tan impresionada o le reconocía su logro.
-Entonces…..-Rápidamente su entusiasmo bajo y estaba moviendo sus manso nerviosa mientras abrasaba mas fuerte a Crescent Rose- ¿P-podemos…ser amigos?- susurro insegura con claro temor a ser rechazada, no tuvo el mejor de los inicios con la peliblanca.
-¿De que hablas Ruby? Ya somos amigos- Comento con seguridad el castaño mientras volvía a poner su espada en la parte de atrás de su vestimenta, la cual tenia un imán para mantener el arma en su lugar sin que se cayera.
-Espero llevarnos bien -ofreció su mano para que la caperucita la tomara
Ella sin dudarlo la acepto con felicidad al hacer un amigo mas
Ambos fueron dentro de la academia caminando juntos mientras hablaban de cualquier cosa, queriendo conocerse mas en el pequeño recorrido que tenían.
