Damar observó atentamente al Minamoto, quién se encontraba durmiendo tranquilamente en su cama. Respiró profundo, bastante le costó hacer que quisiera entrar al Internado y que descansara, luego de mucho hablar ¡Al fin! Logró que durmiera.
Acarició su cabello y depositó un beso en su mejilla. Moría de ganas por acompañarlo esa noche, más, sabía que si Rumiko los encontraba tendrían problemas, algo que no quería darle al Minamoto. Además, Koichi estaba en su habitación encerrado, no sabía de su estadía en el departamento junto a su hermano (Gracias al cielo no se dió cuenta)
Fue así que se levantó de su lugar y caminó en dirección a la puerta, la abrió sigilosamente percantándose que nadie estuviera fuera, la habitación de Koichi aún permanecía cerrada, cuando vio esto salió lentamente del lugar sin hacer ruido, en puntillas caminó hacia la puerta principal, más, al llegar a ella esta se abrió y frente a ella apareció su hermano.
—¿Damar?
—¿Takuya?
—¿Qué haces aquí?— Preguntó el moreno sorprendido.
—Vine junto a Kouji.
—¿Cómo está?
—Terrible.— Respondió la chica— Lo seguí, hablé con él y me costó mucho subirle ánimo, literalmente no lo logré, pero logré hacer que viniera a descansar.— Respondió la castaña— Ahora está durmiendo señaló levemente su habitación.
Takuya hizo una mueca, inevitable era para él ser empático con su amigo, porque él vivió lo mismo.
—¿Y tú?
—No hice mucho, recién terminé de cenar.— Respondió el moreno— Ahora vengo a dormir.
—Bueno yo recién bajaré a cenar.— Moría de hambre— Si Kouji se despierta ¡Llamame!— Le pidió, mejor dicho exigió a su hermano.
—Pareces su niñera.— Comentó Takuya.
Damar rodó los ojos— No estoy de ánimos para tus bromas.
—Evidentemente no.— Musitó el chico antes de posar una mano en su cabello y desordenarlo—Buenas noches hermanita.
—¡Hey!— Reclamó la chica y se dispuso a ordenar su cabello—Buenas noches.
Fue así como el moreno ingresó a su habitación y la chica se dispuso a nuevamente a salir del lugar, pero antes de hacer esto la puerta de la habitación del Kimura se abrió.
—Damar ¿qué haces aquí?
—Koichi.— Pronunció su nombre nerviosa— ¿E? Vi-vine a ver a Takuya, pero se fue a dormir.
El Kimura hizo una mueca— Ah.— Por unos minutos creyó que venía a verlo a él.
El silencio se hizo presente.
—¿E? ¿Cómo estás?— Pésima pregunta por parte de la castaña.
—Mal.
—Me imagino.— Musitó la castaña— Todo está muy reciente.
Koichi asintió— Me siento devastado, quiero puro darme un tiro.
—No digas eso.— Respondió Damar, ella más que nadie intentó hacer algo similar hace un tiempo, no quería que alguien que conocía lo hiciese— Mira, yo sé que es triste, pero no pienses en eso, el dolor es fuerte ahora, más, pensar en acabar con tu vida no es lo mejor.
—Mi vida será incompleta sin ella.
—No dije que no, pero te lo digo por experiencia a pesar de todo, debes continuar.— Musitó antes de sacar de su chaqueta una pulsera de piedras negras—Toma.
—¿Qué es esto?— Preguntó Koichi.
—¿Acaso no lo recuerdas?— Preguntó la castaña.
El Kimura observó atentamente el objeto, era una pulsera negra de piedras volcánica y el recuerdo del funeral de Satoe vino a su mente. Esa pulsera fue un regalo que él le dió a Damar para alejar la tristeza, según había leído, las piedras volcánicas alejaban los sentimientos de tristeza.
—Esa es la pulsera que te di cuando...
—Murió mi madre.— Damar completo.
—No pensé que todavía la tuvieras.
Ni ella, por unos momentos creyó haberla pérdido, pero el otro día removiendo sus cosas la encontró y ahora más que nunca serviría para subir el ánimo de alguien. Quiso darsela en el funeral, pero no tuvo oportunidad.
—¿Cómo no la iba a tener?— Preguntó Damar— Fue un regalo especial en un momento difícil que ahora mereces tener tú.— Se la extendió— Dijiste que el efecto de la piedra volcanica ahuyentaba la tristeza, en esos minutos lo creí, espero que ahora tú lo creas, tal vez, no olvidarás todo, pero sí algo.
Koichi sonrió y recibió la pulsera— Gracias.
—No me agradezcas.— Respondió la castaña— Ya sabes que puedes contar conmigo para lo que sea, a la hora que sea, cuando quieras, siempre te apoyaré, mucho más ahora.
Como novia fue de lo peor, pero quería, al menos, ser buena amiga, como él fue con ella.
El Kimura sonrió— Lo sé.
La noche llegó de manera tranquila y pacífica en el internado Billonario de Odaiba, todos los estudiantes estaban en sus departamentos descansando, la mayoría sin ánimos de salir, uno que otro con miedo a las almas en pena, otros por el cansancio de haber estado dos días en vela u otros simplemente descansaban para el día siguiente rendir como correspondía.
Más, este no era el caso de cierto chico castaño quién se encontraba a las afueras de la habitación de seguridad donde se encontraban las cámaras del internado.
Respiró profundo, observó a su al rededor esperando que nadie lo viera, después de todo, entrar a ese lugar estaba "prohibido" debido a la "investigación" que sigilosamente se estaba haciendo luego de la muerte de Tomoko.
"Investigación" Cabe resaltar las comillas, porque él estaba seguro que no se estaba realizando como correspondía, después de todo, Rumiko estaba al frente de todo, podía trasformar fácilmente las pruebas en su contra a su favor.
Ese era el caso de las cámaras de seguridad ¡Y debía realizarlas!
Fue así como de su chaqueta sacó una llave, la introdujo en la cerradura y la puerta se abrió.
¡Sí! Pensó efusivo cuando se abrió y sin decir palabra, ingresó al lugar rogando que nadie estuviera dentro. Para su buena suerte estaba solitario el lugar, así que, no lo esperó y se acercó al gran monitor principal.
No se molestó en tomar asiento en la silla, simlemente tomó el mouse y la pantalla se prendió apareciendo un:
"Ingrese contreseña"
¡Fácil! Pensó para sí mismo, conseguir la contraseña de ese lugar era lo más simple del mundo teniendo a Izzy en aquel lugar encargado de la informática. Además, Rumiko era predecible.
Listo, se inició sesión y el computador se prendió. El escritorio apareció frente a sus ojos. Sin dar vueltas se dispuso a buscar la carpeta correspondiente al día, mejor dicho noche que murió Tomoko.
Más...No encontró nada.
Estaba vacío.
¡Rayos! No había ninguna grabación de esa noche.
¡Ni siquiera una!
Ryo golpeo con su puño el escritorio totalmente enfadado.
~Noche anterior~
(Exactamente a la misma hora y en el mismo lugar)
La noche transcurría de manera tenebrosa, la tensión estaba en el aire, no era para menos la sub-directora Tomoko murió hace nada. La tristeza se sentía en el ambiente, la oscuridad era máxima y no exactamente porque fuera de noche, sino por la situación triste.
Todos en ese lugar parecían estar de luto, la mayoría estaba en el velorio u otros simplemente decidieron alejarse del lugar al menos por esa noche, por miedo a las almas en pena.
Más, un chico parecía no importarle nada de eso, ya que, se encontraba observando atentamente la puerta de la habitación de cámaras. Respiró profundo armándose de valor para entrar en aquel lugar "prohibido" Sí, prohibido. Nadie sabía esto, solo él, porque le llegó la información interna que la directora no dejó revisar las cámaras, el informe decía que hubo una falla. Sí, una falla, justo esa noche. Extraño ¿no?
El chico alzó su mano en dirección a la perilla, observó a su alrededor percantándose que nadie lo viera en aquel lugar, checkeando esto y sin dar vueltas, giró la perrilla e ingresó a la habitación rogando al cielo que nadie estuviera dentro.
Para su buena suerte nadie estaba ahí. Respiró profundo y aliviado ante esto, más esto volvió a ser estrés al recordar que debía ser rápido. Rápidamente cerró la puerta tras él. Se acercó a la computadora, tomó asiento en la silla de cuero negra y sacó de su chaqueta su móvil, desbloqueo la pantalla e ingresó a su correo encontrándose con los mensajes que recibió de la DEA.
"Contraseñas posibles"
Suspiró y sin decir palabra comenzó a ingresó la primera contraseña.
"Error"
Ingresó la segunda.
"Error"
La tercera.
"Error"
Por cuarta vez ingresó una clave y...¡Bingo!
Automáticamente se inicio sesión mostrando el escritorio del windows y...
¡Un minuto! Todos los archivos estaban ahí, ordenado en carpetas con fecha y hora. Sí ¡Todos! Cuando supuestamente por Rumiko, esto no estaba porque las cámaras fallaron.
Se mordió el labio inferior, por unos minutos tuvo intención de llamar al agente Anderson, más, se contuvo, después de todo, si hacia aquello perdería tiempo.
Sin decir más, comenzó a revisar el nombre de las carpetas estaban separadas por meses, encontró el mes, ingresó, luego estaban las semanas a continuación las fechas y ahí estaban.
Sí, ahí estaban.
Hizo una mueca, según el agente debía ir a las cámaras de la azotea, después de todo, la Kimura cayó de ahí. Presionó el video, era bastante largo, así que adelantó varias horas, encontrándose una escena en la cual la señora Rumiko estaba fuera fumando un cigarro, a los segundos ingresó la sub-directora.
Tomoko no se veía agradada, al principio pareció que Rumiko no le tomaba importancia, más, algo ocurrió, no supo exactamente, pero parecía que estaban gritando, la mujer Kimura alzó su móvil, Rumiko observó esto enojada, en un minuto la oji-azul tuvo intenciones de irse rápidamente la rubia se acerca a ella y jala de ella, no se escuchaba lo que decían, pero, evidentemente estaban gritando. En un minuto dado, la madre de Rika empujó a Tomoko hacie el borde de la azotea, la empujó levemente y...
¡Oh no! ¡Oh no!
El chico llevó sus manos a su cabello.
La directora Rumiko mató a Tomoko.
~Actualidad~
(A la mañana siguiente)
—¿Cómo es posible que no te sientas bien?— Nene preguntó cruzada de brazos al rubio moribundo frente a ella, quién hace unos segundos le reclamó por su "enfermedad"
—¿Esperabas que no? — Cuestionó Kiriha— Ayer me diste a comer frituras.— Hamburguesa, papas a la francesa y nuggets ¡En su vida comió ese tipo de comida! Tal vez, perdió dinero y estaba en ese internado, pero siempre fue precavido en todo lo que comía.
La castaña rodó los ojos—Si ¿y?
—¿Y? — Repitió esa pregunta alarmado— Casi matas mi estómago con eso. — Suspiró— Me dolía tanto que ni siquiera pude dormir.
Eso explicaba las ojeras.
—¡Qué exagerado eres! — Musitó Nene—¿No dijiste tú que eras fuerte?— ¿cómo era posible que algo tan simple como una comida frita le hiciera daño?
—En ese minuto no me refería a la comida.— Respondió Kiriha.
—Deberías considerar serlo.— Comentó la chica de ojos morados.
El rubio negó con la cabeza— Malditas frituras.
—¡Vaya! Enserio tienes defectos extraños. — Musitó la castaña— Jamás me los hubiera esperado de alguien como tú.
—No es un defecto, comer este tipo de cosas no hace bien en general.— Respondió el oji-azul— Deberían estar prohibidas.
—¡Qué exagerado eres!— Exclamó la castaña, este chico en verdad parecía un princeso, rubio de ojos azules, con dinero y dramático.
—No soy exagerado.— Respondió Kiriha.
—Claro que sí.— Musitó la chica antes de levantarse del lugar donde estaba—Quédate aquí, te traeré una agüita de orégano.
El rubio suspiró— Soy alergico al orégano.
La castaña lo observó sorprendida— ¡Vaya! Verdaderamente eres un principe de Cristal. Más de lo que esperaba.
—Ja, ja muy graciosa.— Musitó Kiriha— No lo soy.
—Claro que ní, eres alérgico a una hierba tan simple.
—No te burles de mí.— Recriminó el oji-azul.
—Créeme, tengo muchas ganas de hacerlo. — Musitó Nene.
—Eres fastidiosa.
—No más que tú rubio.— Rió Nene— Dime ¿Eres alérgico a la manzanilla?
Kiriha negó.
—Bueno, esperame y te traeré un té de manzanilla.— Comentó la chica antes de alejarse.
Rika observó atentamente el video de su laptop frente a ella donde abía una imagen de una mujer sobre un sofá con las piernas abiertas sostenidos por los bordes.
Hizo una mueca, jamás fue flexible, más debía lograr hacer esto.
—Vamos, tú puedes.— Se dijo así misma— Tú puedes.
Hikari salió de su habitación e inevitable fue para ella sentirse sorprendida ante esto—¿Rika?
—Buenos días.
—Buenos días.— Musitó sorprendida ante su posición— ¿Qué estás haciendo?
—Se llama el Van Damme.— Respondió Rika, más no continuo hablando, ya que perdió el equilibro cayó.
Hikari alzó una ceja— ¿Van Damme? Esa la usan en yoga.
Rika asintió— Exactamente eso estoy haciendo.
—¿De verdad?— Preguntó la castaña sorprendida.
La pelirroja asintió—De alguna forma debo mantener las ansias de las drogas.— Comentó la Nonaka— Así como Damar se inscribio en el equipo de fútbol.— Hizo una mueca— Aunque, no entiendo como lo hizo, si jamás le gustó la administración de ese club.
—Ya somos dos.— Comentó Hikari— Pero, bueno, las cosas cambian, mirate a ti ¿yoga? Eso jamás me lo hubiera esperado de ti.
—Inesperado ¿no?— Respondió la pelirroja— Al principio no le encontraba sentido, pero Takato me convenció de intentarlo y tenía razón.
Takato, Takato y más Takato, últimamente Rika solo hablaba de ese chico.
—¿Sabes? En verdad quiero pedirle a ese chico la fórmula para que me hagas caso.— Comentó la Yagami.
¡Toc, toc!
Unos golpes en la puerta se hicieron presente.
—Yo voy.— Hikari se dirigió a abrir la puerta, al hacer esto se encontró frente a frente con cierto chico rubio.
—Hola.
—Ho-hola.— Saludó la castaña y el silencio se hizo presente.
Intercambiaron miradas sin saber que exactamente que hacer o decir.
Como si ambos se hubiesen puesto de acuerdo a la vez musitaron estás palabras— Tengo que hablar contigo.— Ambos se sintieron sorprendidos ante la coordinación.
—Yo también.
Otra vez musitaron a la vez.
—Dime...
Nuevamente intercambiaron miradas y sin decir más, ambos rieron ante la coordinación que tenían, era increíble, como si leyeran los pensamientos del otro hablaban a la vez.
—Te escucho.— Habló el rubio.
—No, habla tú primero, después de todo, tú viniste hacia acá.— Respondió la castaña.
—Será poco caballeroso de mí hablar primero.
—No, porque yo te lo permití.— Contestó Hikari.
Tk respiró profundo y sin decir más, se decidió a hablar—Recibí tu regalo.
—¿A sí?
El rubio asintió—Me gustó mucho tu cuadro.
La castaña sonrió— ¿De verdad?
—Sí.— Respondió Takeru—Amo el paisaje de la torre Eiffel.
Sí, lo sabía, siempre se lo comentaba. Su pasatiempo favorito de vacaciones en casa de sus abuelos era ese.
—Me alegra que agradara, lo hice con mucho cariño para tí.— Declaró la castaña.
—Y también...—Tk bajó la mirada— Leí tu carta.
Hikari alzó la mirada—¿A sí?
El rubio asintió.
La castaña se sintió nerviosa ante esto— Mira, yo te lo puedo explicar, sé que a través de esa pintura o de esa carta no lograré hacer mucho, pero...
—No, Hika, no es necesario que me des explicaciones.— Interrumpió el chico— La carta...
—Sí, la carta decía mucho, pero debo decirlo personalmente.— Contestó Hikari— Quiero disculparme, jamás he querido dudar de ti. Pero, me resultó difícil superar mis inseguridades, tú sabes que eres el chico que amo y tan solo con pensar en perderte me siento mal.
—Nunca me vas a perder, siempre te lo he dicho, Catherine jamás será más importante que tú.
—Lo sé.— Musitó la castaña— Pero, tú sabes, cuando trata de esa chica siempre dudo de todo y en verdad, lamento si te hice creer que dudé de ti, eso no estuvo bien, porque tú siempre has confiado en mí, yo debí haberte correspondido en ese sentido, no lo hice y te lastimé.
—No negaré que me dolió, pero ya no importa.— Respondió el rubio— Lo importante es lo que viene ¿si?
—Y por eso, yo necesito que me des una oportunidad ¿si?— Tomó su mano— Para demostrarte que puedo luchar contra esto, que confió en ti.— Musitó— Por nuestro amor.
Tk tomó el rostro de la chica entre sus manos— Hika, no es necesario que me pidas una oportunidad, eres mi novia y la mereces.
—Esto va más allá de ser formalmente novios, necesito que tu corazón.— Posó una mano en su pecho— Me dé una oportunidad.
—Sí es en ese caso, entonces, no es necesario que ruegues una oportunidad.— Respondió el rubio— Porque mi corazón siempre ha gritado tu nombre, siempre estará abierto para tí y para nadie más se abrirá.
—No te preocupes hermosa. — Respondió el oji-azul antes de depositar un beso en sus labios.
Mientras tanto en el departamento de Mimi.
—Aammm...— Musitó Mimi con los ojos cerrados con las piernas cruzados y manos levemente alzada mientras meditada.
Rika le recomendó unos videos para relajarse y los estaba siguiente, más, no sabía que tan efectivo sería práticar esto. Aún así, no perdía nada con intentar.
—Ammm no pienso nada.— Murmuró para sí misma— Ammm olvidó a Yamato.— Suspiró— Ammm puedo hacerlo.
Sora salió de su habitación extrañada ante las palabras de su amiga y la observó sorprendida ante la posición que se encontraba—Mimi ¿qué haces?
—Estoy haciendo yoga.— Respondió la Tachikawa.
—¿Yoga?— Preguntó la pelirroja.
La castaña asintió— Para ahuyentar las malas vibras.
Sora alzó una ceja— ¿Ahuyentar malas vibras?
Mimi asintió.
—Pensé que no te gustaba la yoga.— Comentó Sora, después de todo, su amiga era todo menos una persona calmada.
—Pues no, pero mis hermanos me dijeron que practicara un deporte.— Musitó la castaña— Pero no quise, sudar y romperme las uñas, ya que no solucionará mis problemas.
Por alguna razón, ese comentario no le sorprendió a la pelirroja.
—Bueno, hoy se arruinarán tus uñas.
—¿Por qué?—Cuestionó Mimi.
—Porque hoy nos toca lavar loza.
—¿Qué?— Preguntó la Tachikawa—¡Oh no! No quiero que mis manos se pongan asperas.
¡Esto era una pesadilla!
La puerta de la habitación de su antigua amiga rubia se abrió llamando su atención. De ella salió la Ishida con una maleta, un bolso, entre otras cosas.
—Izumi ¿qué haces?— Preguntó Sora.
La rubia hizo una mueca— Me voy.
¿Qué?
—¿Te vas?— Cuestionó la pelirroja— ¿Dónde?
—A otro departamento, no puedo continuar aquí.— Respondió la oji-verde.
Luego de todo lo vivido lo que más anhelaba era estar sola para meditar, analizar y recapacitar, no se sentía bien en lo más mínimo, ni con los Tachikawa, ni con sus ex-amigas, ex novio, pero sobretodo con ella misma.
Mimi hizo una mueca—No es necesario que te vayas, la que cometió el error fui yo y...
—No interesa quién cometió el error, lo importante es que no quiero estar con ustedes y dudo que ustedes quieran estar conmigo.— El ambiente entre ellas era tenso, incómodo, no valía la pena seguir viendose las caras todos los días.
La rubia acomodó su bolso en su hombro, tomó su maleta y caminó en dirección a la puerta.
—¿Y así crees que se solucionarán los problemas?— La pregunta de Mimi provocó que su antigua amiga detuviera su marcha.
La Tachikawa observó atentamente a su amiga— ¿Crees que huyendo de los problemas podrás solucionar nuestros problemas?
Izumi bajó la mirada— No lo sé.— Suspiró— Pero, me dará más tranquilidad...—Alzó la mirada hacia la castaña— Y a tí también.
Mimi se mordió el labio inferior, lamentablemente Izumi tenía razón, sin embargo, no quería que así fuera, por todos los años de amistad que tuvieron.
—Permiso.— Musitó la rubia antes de retomar su caminata a la puerta, al llegar a ella tomó la perilla y abrió la puerta encontrándose frente a frente con la inspectora Onodera.
—Buenos días señorita Ishida.— Saludó la inspectora.
—Buenos días.— Respondió Izumi.
—¿Está la señorita Tachikawa?
Izumi hizo una seña señalando a la castaña— Ahí.— Fue lo único que contestó antes de tomar sus cosas y salir del lugar.
—Traigo esto para usted.— La mujer se acercó a la Tachikawa y le entregó un sobre.
¿Ahora qué?
La Tachikawa hizo una mueca y recibió aquel envío.
—¿Qué es?
—No sé.— Respondió Onodera— Pero cumplí con entregarselo.— Musitó antes de voltear hacia la puerta— Permiso.
Mimi observó la hoja.
—¿Qué es?— Preguntó Sora.
—E-es...—Tragó saliva nerviosa— La hora para el juicio.
Mientras tanto en el cementerio, frente a la tumba de la fallecida Tomoko Kimura se encontraba una mujer de cabello castaño-rubio, ojos azules y piel pálida observando atentamente la lápida de quién un día fue su amiga.
Un sollozo se hizo presente en el silencioso lugar, un par de lágrimas cayeron por la mejilla de la mujer, quién luchaba contra sus ganas locas de llorar.
Era imposible creer que la Kimura estuviera muerta. Sí, tuvieron problemas, quizás se alejaron, pero jamás le hubiera deseado este mal, al contrario. Tomoko era muy joven para morir, tenía una vida por delante y momentos que recuperar con sus hijos, ahora que no temía por Kousei, pero...
Ya no sería posible.
—Perdoname amiga.— Murmuró la mujer— En verdad lo lamento.
A lo largo de su vida ambas tuvieron una buena relación, siempre se apoyaron mutuamente, reían juntas, lloraban juntas. Era triste para ella que su último recuerdo juntas fuera de una discusión.
Más...
Natsuko secó sus lágrimas rápidamente— Pero, aunque me duela tu muerte, ahora debo luchar por mí y mis ideales.— Acomodó sus gafas sobre sus ojos— Me encargaré de alejar a los Tachikawa de mis hijos.
+Antes que todo quiero pedir disculpas por este capítulo de relleno, la verdad es que estuve son cero ánimos, por diversas situaciones y no pude escribir un capítulo de calidad, tuve un pésima fin de año. Aunque no lo crean ustedes con sus comentarios me subieron mucho el ánimo, me hicieron sentir bien.
+Digo desde ahora que desde el próximo capítulo se vienen los capítulos de impacto, se viene la ola y todo lo intenso, serán capítulos largos, así que, deben estar preparados.
+Espero que todos hayan tenido un buen inicio de año.
Respuesta a comentarios:
mimato bombon kou: Jsjsjs que bueno que te lo hayas creído, cumplí con mi propósito entonces jiji Pues sí, me tendrán para rato. Ojalá me sigan leyendo y comentando.
Maberth24: JAJAJAJA ¿Enserio? jsjsjs Supuse que algunos se acordarían y otros no de la fecha jsjsjs Buena idea de tu parte en ir a ver el calendario jsjsjs Bueno, sí fue una broma por el día de las bromas, ojalá te haya gustado, sigas leyendo y comentando, te mando un abrazo.
milrose: jajajaja Sí, soy muy mala JAJAJAJA esta broma la tenía planeada desde hace meses, dije: Debo aprovechar de asustar a mis lectores jsjs y creo que funcionó jsjsjs Gracias por considerarme buena escritora, ojalá te haya gustado, sigas leyendo y comentando, te mando un abrazo, eliz año.
Adrit126: Pido disculpa como subo por parte y luego uno ocurre eso, pero evitaré unir los capítulos para que puedan comentar. Sí, una pena que haya muerto sin duda, pero debía ocurrir. Ya veremos si Natsuko se sale con la suya o no jsjsjs Sí, Matt merece sufrir y así lo veremos ahora, con respecto a Izumi, tendrá su protagonismo y arco de reflexión, pero falta jsjsj Sí, Takuya podría tener otra más, ahora se acerca a Hikari y entiendo que a muchos les duela que no esté con Tk, pero sí, TakuyaxHikari está comenzando a gustar, es la pareja más "loca" o inesperada que se me ocurrió, incluso más que Koichi y Juri jajaja ojalá te haya gustado, sigas leyendo y comentando, te mando un abrazo.
Yaoyorozu: Hola jsjs curiosamente el otro día estaba leyendo comentarios antiguos y me acordé de tí jajaj Es un gusto leerte de nuevo. Me alegra saber que te interesa la historia jsjsjs Bueno, en esta temporada en particular la pareja "secundaria" es Kirine, en la temporada pasada fue Koumar, pero creo que he logrado mi objetivo en cierto modo de que amen mi nueva pareja favorita NenexKiriha. Bueno, entre Thomas y Nanami siempre habrá una tensión en particular, a pesar de decepcionarse mutuamente se atraen bastante, a mi también me gustan lo enemies to lovers jsjsjs Sí, es algo inesperado la muerte de Tomoko, lo tenía bien escondido, pero sí, Rumiko es peligrosa, hay que tener cuidado. Takato en cierto modo no estaba solo, él sabía que Tomoko era otra agente de la DEA, pero ahora sí está solo lamentablemente, tendrá que cuidarse jsjs Ya veremos que ocurre jsjsjs Ojalá sigas leyendo y comentado. Te mando un abrazo a la distancia y gracias, feliz año para ti también.
