Los guerreros z se dirigían a cumplir con lo especificado por Bulma Brief. La base automáticamente se alarmó y colocó en alerta máxima ante el peligro de los invasores en la cercanía de la ciudad en ruinas del oeste.
Las compuertas y el grosor del Domo creció al doble de resistencia. Se racionó la comida y agua dentro de la misma, todas las personas fueron trasladadas hacia varios bunkers ubicados en toda la base. Los mismos, cuando eran atacados, se elevaban del suelo para que las personas ingresaran en ellos y luego regresaban a un sótano del Domo.
El sótano era un enorme espacio cubierto por cuatro paredes y pisos de hierro, era algo menos natural que la configuración de la pequeña ciudad subterránea.
Cientos de humanos convertidos en soldados se dispersaban por todo el lugar utilizando un arma y armadura desarrollada por Bulma inspiradas en las utilizadas por los soldados de Freezer. Había fabricado varias de ellas en masa para que la resistencia de humanos estuviera bien equipada en combate.
Trunks, Goten y la pequeña Bulma fueron llevados por Krilin hacia la casa de los Briefs dentro del domo que también descendió hacia el sótano.
Vamos-ordenó el guerrero calvo mientras lo seguían a través de la casa. Debía encargarse de mantener a los niños a salvo, Vegeta les había dicho que le dieran prioridad a la seguridad de la pequeña niña.
¿A dónde crees que nos llevan?- preguntó Goten a los otros mientras atravesaban la cocina. Las paredes eran blancas, había un horno con una hornalla eléctrica en una esquina. Una enorme y larga mesada que poseía una bacha para lavar los platos. A un lado un refrigerador y una mesa para comer en el centro.
Ni idea, pero ojalá haya comida- contestó Trunks, los tres estaban sumamente hambrientos.
Si, o sino me enojaré mucho-agregó Bulma. Ya hacía horas que no comían nada, su estómago rugía del hambre.
No se preocupen por eso, les daré algo de comida, es que hay mucha escasez últimamente-se disculpó el calvo al notar el hambre en los niños. Se dirigió al refrigerador y les entregó una barra de alimento a cada uno. Era inventada por los Briefs también y contenía todos los nutrientes necesarios para un día en un ser humano, claro que los saiyajin necesitarían más de una.
¿Cómo sabrá esto?- preguntó para sí mismo el peli violeta sosteniendo la barra y quitándole su envoltorio. Le dió un mordisco quedando totalmente en shock-¡Sabe a Ramen!-exclamó el saiyajin sorprendido dándole otro mordisco.
¿En serio?-contestó Goten imitando a su amigo-No sabe a ramen sabe a teriyaki-aclaró el peli negro.
¿A teriyaki? ¿a ver? tal vez son de distintos sabores-pensó el peli violeta probando el de Goten-No, sabe a Ramen- aseguró el niño.
A mi me sabe a pizza-dijo también sin entender mucho la peli azul. Las tres barras se veían iguales.
Krilin sonrió al ver a los niños tan inocentes y felices probando la comida. Hacía tiempo no veía a nadie tan tranquilo, al menos desde que comenzó la invasión de Freezer.
La llamamos "Comida especial" y sabe a lo que quieras que sepa- explicó el humano dejándolos totalmente sorprendidos-Es genial, no tenemos mucha variedad de cosas con las qué elaborar comida. Pero Bulma halló la forma de al menos imitar los sabores de la comida que había antes de la invasión-dijo con una sonrisa, su amiga era muy inteligente, al menos hacía que aquella triste comida no fuera insípida.
Vaya, de seguro es un invento de mi ma...-dijo Trunks, hasta que notó que lo que decía no era adecuado. Iba a delatar el parentesco que tenía con la científica.
¿Qué cosa?- preguntó la pequeña Bulma. No había comprendido lo que el niño había dicho, se había distraido un poco comiendo de su barra de alimentos.
Que es un invento de tu yo adulta- dijo claramente el niño, casi había metido la pata. La pequeña Bulma había notado ya que aquella mujer que andaba con Vegeta antes era ella misma adulta.
Si, es super inteligente-contestó la niña feliz y orgullosa de ver que en el futuro sería una científica muy inteligente. Observó la barra de nutrientes unos segundos mientras se le escapaba una sonrisa y una mirada soñadora que Krilin notó, le recordó casi de manera inmediata a su amiga.
Tienes la mirada de ella, de seguro serás una gran científica cuando crezcas-vaticinó Krilin. Ante esto, Bulma lo miró con ojos esperanzadores-Bien, sigamos-ordenó Krilin seguido por los niños.
Caminaron unos pocos metros por la cocina hasta llegar a unas escaleras para subir al segundo piso.
Al llegar allí, emprendieron su camino, que consistía en un largo pasillo con una ventana en su final que tenía vista hacia el exterior, pero debido a que bajaron al sótano estaba cubierta por metal. Recorrieron el pasillo logrando visualizar las paredes blancas al igual que en la cocina, además de varias puertas de madera con nombres en ellas.
Yamcha, Krilin, Ten, una de las puertas tambien estaba etiquetada con el nombre de Milk y otra con el nombre Piccolo que sorprendió a los niños.
La pequeña Bulma de repente se detuvo llamando la atención de los que la acompañaban.
¿Qué sucede, aún tienes hambre?- preguntó Krilin con un tono amable, había notado que la niña ya había terminando con su barra de alimento.
La pequeña Bulma señaló una puerta. En ella estaba gravado el apellido Brief y junto a ella otra puerta que decía Bulma.
Ah si, aquí duerme Bulma, la que inventó todo esto-mencionó el calvo señalando su puerta-Y aquí, bueno, dormían sus padres, hasta que...-Krilin enmudeció con una mueca algo triste.
Quizás no era correcto hablarle de aquello a la niña, no sabía cómo eran las cosas en el tiempo de ella, pero seguramente eran mucho menos tristes que allí.
Extraño a mis padres-dijo la niña en voz baja, estaba triste, se le caían algunas lágrimas de los ojos. Estaba lejos de su casa y cuando Vegeta no estaba con ella se sentía más sola aún. Aquel lugar parecía ser extremadamente precario y caótico. No se parecía en nada a la corporación cápsula en la que vivía, extrañaba bastante su hogar.
No te preocupes, los volverás a ver pronto- dijo Trunks abrazándola, intentaba calmar a la versión niña de su madre-Yo también extraño a mi mamá, pero pronto los volveremos a ver-la animó. Bulma lo miró con una pequeña sonrisa al notar que se había preocupado por ella.
Vamos, ya casi llegamos-los apresuró Krilin en cuanto se aproximaron a su destino. Caminaron unos pocos metros hasta el final del lugar. Allí abrieron una puerta sin etiqueta alguna e ingresaron.
Era un cuarto sencillo, no muy grande lleno de juguetes y había libros encima de una mesa. También había una ventana cerrada con hierro junto a una nevera llena de barras de comida y varias botellas de agua.
Se quedarán aquí hasta que vuelvan sus amigos-indicó Krilin con tranquilidad, no querían dejar aquellos niños a la deriva. Lo mejor era que se quedaran por el sótano en caso de que atacaran el refugio, ese lugar era el más blindado de la base.
¿Aquí? nos aburriremos- contestó Trunks niño-¿Por qué no nos llevan con los demás? Quizás mi papá necesite ayuda-dijo con algo de preocupación.
Es peligroso, aquí estarán a salvo- contestó el calvo, Trunks frunció el ceño al oírlo. Quería volver a estar con su padre y ver qué era lo que estaba haciendo, ese lugar era muy peligroso.
Cállate, Vegeta nos sacará de aquí luego-interrumpió la niña con su voz chillona, sabía que sería de ese modo. Vegeta les había dicho expresamente que obedecieran las órdenes de Bulma y Krilin mientras él no estaba.
Al observar la actitud de la infante, Krilin se retiró cerrando la puerta con llave, estarían tranquilos por el momento. Seguramente Bulma tendría a los niños en raya al menos un tiempo.
Cuídenlos- ordenó a cinco soldados que estaban vigilando esas instalaciones. Estos se ubicaron frente a la puerta para custodiarla.
¿Creen que nos mantendrán encerrados aquí así nada más?-gritó el peli violeta a los soldados empezando a generar una esfera de ki. No podía verlos, pero sabía por sus ki que los mismos estaban al otro lado de la puerta de la habitación.
Los soldados del domo estaban cada uno custodiando su puesto tranquilamente cuando, de improviso, la compuerta principal se abrió e ingresó Trunks del futuro. Llevaba en su hombro al Capitán Vegeta inconsciente.
Inmediatamente, todos los soldados cercanos a él se colocaron frente al saiyajin del futuro apuntándole con sus armas.
Esperen, somos amigos- intentó convencer el saiya cuando una persona se desprendió del gran grupo de soldados. Era una mujer y para sorpresa de Trunks se trataba de Milk.
Soy la Capitana de los Guardias del Domo-gritó con voz segura y decidida. Hasta resultaba bastante intimidante, su ropa consistía en una armadura con expandex negro.
Ya veo, quisiera hablar con Bulma por favor-peticionó el saiya mirándola a los ojos, no quería que pensara que era una amenaza. Ansiaba entrar antes de que el otro yo de su padre despertara.
No hablarás con nadie hasta que digas quién eres primero-contestó la mujer con desconfianza, no dejaría que un desconocido perjudicara en manera alguna a la base. Si no quedaba convencida procederían directamente a atacarle.
Bulma apareció de entre los soldados abriéndose paso mientras caminaba hacia el tumulto que se había generado. Estaba algo apresurada cuando llegó, creyó que algo malo podría haber pasado.
¿Qué sucede?-preguntó la científica, notó que no les había advertido sobre las visitas que habían venido de otro tiempo, debido los nervios de tener al enemigo muy de cerca se le había olvidado.
Déjenlo pasar- ordenó la científica, los soldados se apartaron inmediatamente del camino de Trunks del futuro al escucharla.
Entendido-contestó Milk haciéndose a un lado, luego, le ordenó a los guardias que descansen.
Ven- solicitó la científica a Trunks, éste asintió. Caminaron hasta una escalera que al bajar chocaba con una puerta que daba a la casa en el sótano. Bulma se detuvo un momento a observar a la persona que Trunks traía consigo.
¿Ese no es...?-preguntó Bulma anodada al notar quién era aquel que Trunks llevaba a cuestas, lo había reconocido luego de un par de segundos.
Si, es Vegeta, pero es el de tu tiempo- terminó la frase el peli violeta sorprendiéndola.
¿El de nuestro tiempo?-dijo Bulma con miedo al notar que era parte del enemigo-¿Por qué lo trajiste aquí? es peligroso-lo regañó algo enfadada al pensar que su base podría estar en peligro. No podía permitir que nadie echara abajo ese preciado escondite, muchas vidas humanas estaban en riesgo.
No te preocupes, está inconsciente, yo me encargaré de él-la tranquilizó el saiyajin-Vegeta dijo que lo trajera, dijo que tenía un plan. Pero para hacerlo había que sacar a su otra versión de circulación -explicó. No sabía si era adecuado que aquella mujer supiera que Vegeta era su padre, prefería no comentárselo por el momento.
De acuerdo, vayan a las mazmorras y vigílalo, que no haga destrozo-precisó Bulma-Por favor, sé muy cuidadoso. Mucha gente vive aquí y confían en mí para estar seguros.
Trunks asintió y se dirigió hacia las celdas con el príncipe saiyajin a cuestas. Bulma se quedó a solas en la cocina, estaba sentada en la enorme mesa alimentándose con una barra de nutrientes.
¿Acaso estará bien lo que estoy haciendo?-Se preguntó
a sí misma con dudas surcando su mente, estaba arriesgando todo por unos desconocidos y una posibilidad dudosa de vencer. Siquiera soñar con derrotar a ese imponente ejército era irrisorio, tenían mucha desventaja numérica. No podrían seguir sin ayuda por siempre, sino intentaban algo nuevo la humanidad se extinguiría.
Repentinamente, escuchó una explosión que la alertó, luego de eso, los niños bajaron rápidamente por la escalera.
Le advertí que no nos detendrían allí por mucho tiempo-Exclamó Trunks sonriente, detuvo su andar en cuánto vio a su madre de ese tiempo allí.
¿Qué sucedió allí arriba?-preguntó confundida la cientifica quién subió a verificar, la puerta del fondo estaba totalmente destruida y todos los soldados se encontraban inconscientes. Afortunadamente no parecía haber heridos de gravedad-¿Quién hizo esto?-preguntó a los tres niños al bajar a la cocina de nuevo.
Fui yo- dijo en voz baja Trunks con miedo a una represalia. La que veía frente a él no era su madre, pero él lo sentía así ya que era idéntica. En su interior la extrañaba mucho.
¿Por qué lo hiciste?- preguntó confundida y levemente irritada, comenzaba a pensar que tener a esos extraños allí era mala idea. Además parecían ser bastante peligrosos, desconocía que tuvieran el poder para hacer eso.
Porque estamos aburridos-respondió Goten, estaba especialmente aburrido y también hambriento-Krilin nos encerró, no teníamos otra forma de salir y queremos saber qué sucede -se excusó. No les agradaba la idea de quedarse aislados en esa habitación.
Entiendo, si están aburridos y quieren ayudarme ¿Podrían subir por la escalera y preguntar por la Capitana? digan que la Señorita Brief los manda-solicitó Bulma, los niños asintieron y se dirigieron a hacer lo que la científica les había pedido.
¿Capitana? ¿Quién será?-se preguntó Goten pensativo. Trunks y él se fueron por la escalera para buscar a la susodicha. Todo era muy confuso en ese lugar.
Ambos niños subieron corriendo por la escalera emocionados,excepto la pequeña Bulma, quien se quedó con su versión adulta.
¿Qué sucede, no irás con ellos?- preguntó la adulta a la niña, observó a la niña con suma atención. Era evidente que esa niña era idéntica a ella.
No quiero, me aburren-contestó la niña cabizbaja, estaba algo preocupada por lo que pudiera suceder.
Entonces ven conmigo, tengo algo que mostrarte-pidió la científica amablemente a su pequeño yo-¿Te llamas Bulma, no es así?-preguntó interesada, quería confirmar que la presencia de esa niña era por lo que había supuesto. Le parecía algo inusual que estuvieran con una versión pequeña de ella misma.
¿En serio? ¿Qué es?-preguntó la niña con brillo en sus ojos, estaba totalmente emocionada-Si, yo soy tu cuando eras pequeña-afirmó, ya había notado cómo los demás se referían a la mujer de cabello azul.
Solo ven, te encantará- dijo la científica sonriéndole, la niña había confirmado su sospecha. Al parecer era muy lista, tal y como ella lo era a esa edad.
Ambas se dirigieron hacia el segundo piso, allí, se detuvieron frente a la puerta que estaba etiquetada con el nombre Bulma. Invitó a la niña a entrar.
¿Estás lista para todo esto?- preguntó la peli azul adulta a la niña, ésta asintió con una mirada de emoción.
Bulma utilizando una llave en forma de herramienta, abrió la puerta que daba a una escalera que iba hacía más abajo todavía que el sótano. Bajaron por la misma y se encontraron con algo que dejó perpleja a la niña. Era un laboratorio secreto, lleno de maquinarias increíbles que habian sido encontradas, desde naves de Freezer hasta prototipos creados por los Brief.
¿Este lugar es increíble no?- preguntó la mujer a la niña, ella asintió con una sonrisa.
Bueno, igual no es lo que te quería mostrar- dijo con una sonrisa la adulta a la niña-Ven-tomó su pequeña mano para que la acompañara.
Llegaron hasta una nave, era idéntica a la nave en la que Goku llegó al planeta o la que utilizaron Vegeta y Nappa durante su invasión en ese tiempo, estaba refaccionada y a un lado se podía leer un cartel que decía "Simulador".
Aquí es donde entrenan mis pilotos pero creo que podrías jugar un rato-dijo Bulma a su otro yo indicándole que se sentara-Yo aprendí a pilotar aeronaves así antes de subirme a una de verdad.
La niña se sentó en la cabina. Era joven, pero comprendía totalmente los controles. La puerta se cerró y en el frente un casco se desprendió de un compartimiento. Bulma se lo colocó y automáticamente empezó a volar. Podía visualizar el planeta como lo recordaba desde el aire, las ciudades, las personas, los autos, el cielo azul con un sol radiante.
Se divirtió con aquel juego, amaba las naves que le permitían volar, Bulma sabía que le gustaría ya que, después de todo, se trataba de sí misma.
Bulma se dirigió a otro cuarto dejándo a la niña jugando con el simulador, estaba segura de que ella estaría bien. En el cuarto al que fue había una enorme pantalla y muchos controles.
Era una computadora gigante, presionó varias teclas dejando ver la entrada, allí estaban los viajeros del tiempo, habían regresado. Al reconocerlos se puso de pie y se dirigió a recibirlos, quizás tenían novedades sobre cómo procederían a devolver la paz a la tierra.
Después de todo, eran la última esperanza que le quedaba a la humanidad.
Capítulo 24 Listo! Muchas gracias por leer, esta es mi primer actualización del año.
Espero que todos tengan un buen 2021.
Nos leemos.
Niebla~
