¿Vegeta estás bien? ¿Qué te hicieron? -preguntó Bulma en cuanto el otro Vegeta y Vegetto se alejaron de allí. Pelear dentro de la nave resultaba muy incómodo dado el espacio reducido que había en la misma.
Tienes que huir de aquí ahora que están distraídos-dijo Vegeta con debilidad en su voz. Aún no había podido recargar sus energías del todo. Al parecer tardaría en poder moverse por sí mismo, un intenso dolor recorría su cuerpo.
No te dejaré aquí-dijo Bulma con seriedad al escucharlo. Sabía que la prioridad de él era salvarla a ella a como diera lugar.
Milk se acercó a ellos, había decidido quedarse allí para poder ayudarlos mientras los demás peleaban. La misión de esa invasión en la base de Freezer era recuperar a Bulma.
Díganme qué hacer por ustedes y lo haré. Puedo sacarlos de aquí -dijo Milk con prisa. No dudaba que pronto habría mercenarios en ese lugar para pelear contra ellos.
Saca a Bulma de aquí, yo debo quedarme. En cuanto pueda moverme acabaré con todos en esta maldita nave-dijo Vegeta con determinación- La prioridad es ella, necesito que esté a salvo -afirmó.
No voy a irme sin ti, ven con nosotros -dijo la peliazul insistente-Si no vas me quedaré aquí, no podré saber si seguirás con vida si te dejamos atrás -dijo con tono preocupado. Estaba muy asustada, no quería que el saiyajin pusiera en riesgo su vida.
Milk llévatela, necesito que salgan de aquí pronto-dijo mirando a la mujer de cabello negro. La misma se sorprendió al ver que sabía su nombre. Eso debía significar que la conocía en su tiempo, quizás sería acertado hacerle caso.
¿Tú me conoces en tu tiempo? -preguntó sorprendida. Vegeta asintió, casi no podía moverse, debía lograr que confiara en él para que salieran de allí lo antes posible.
Sí, allá eres amiga de mi esposa. Y tienes dos hijos-dijo para que le creyera. Los ojos de ella brillaron al escuchar eso, al parecer las cosas si eran diferentes en la otra línea temporal-Por favor, sácala de aquí rápido-pidió.
¿Por qué debería confiar en ti? -preguntó Milk desafiante. No sabía si ese sujeto era de fiar, aunque podía notar que su amiga si confiaba en él.
Intento salvar a la humanidad y llevar a mi hijo a casa. Está en peligro en este lugar-dijo Vegeta, la situación era desesperante, unos ki estaban acercándose al lugar en el que estaban-Si no lo saco de aquí podrían intentar matarlo, solo vine aquí por él.
Milk notó que el saiyajin parecía estar preocupado por todo lo que estaba pasando. Decidió que lo más prudente sería confiar en él, después de todo, sus acciones demostraban que solo intentaba proteger a Bulma.
No, hay que...-dijo Bulma, Milk la cargó de improviso para sacarla de allí. Era bastante fuerte, la peliazul frunció el ceño al ver que Milk haría lo que el saiyajin le había dicho.
Intenta no morir, Vegeta-dijo Milk a modo de advertencia antes de sacar a Bulma de allí. Vegeta asintió antes de que ella comenzara a caminar llevándose a la peliazul. Ella pataleaba y gritaba mientras la pelinegra se dirigía al gran agujero que el príncipe saiyajin había hecho en el borde de la nave.
Vegeta dejó salir un suspiro lleno de alivio una vez que las vio salir de ese lugar. Al menos Bulma estaría a salvo si la sacaban de esa trampa mortal llena de mercenarios peligrosos.
Luego de pensar algunos segundos, vio el perímetro del lugar en el que se encontraba e intentó moverse. Apenas y podía mover un poco los dedos de su mano derecha. Intentar desplazarse solo allí sería algo muy difícil. Su cuerpo se recuperaba muy lentamente de lo que sea que el saiyajin moreno le había hecho.
Sería un problema si tenía que permanecer mucho tiempo allí, esa parte de la nave estaba cayéndose a pedazos dadas las explosiones que había afuera. Constantes ráfagas de poder la azotaban desde el exterior, ya sea por los enfrentamientos de los mercenarios afuera o por los explosivos que los humanos lanzaban hacia allí.
Luego de pocos minutos escuchó unos pasos sincronizados acercarse a donde estaba. Al parecer había mercenarios que estaban dirigiéndose a ese lugar, se alivió de que hubieran aparecido sin que Bulma o Milk estuvieran allí. Las habrían matado de inmediato si las hubieran visto.
Vio a Lin y Hanasu llegar al lugar, ambas lideraban un escuadrón de mercenarios que venía tras ellas.
ALTO-vociferó Hanasu inmediatamente en cuanto vio a Vegeta en el suelo. Lin dejó la formación rápidamente para acercarse a él.
Hanasu se limitó a observarlos desde cierta distancia, quería mantener a los mercenarios a raya hasta que terminaran de hablar.
¿Estás bien? ¿Por qué estás aquí? -preguntó Lin preocupada al ver que el saiyajin estaba allí inmóvil. No era usual que el príncipe saiyajin estuviera en el pasillo sin hacer nada- ¿Te atacaron los humanos?-insistió mientras se agachaba dándole la espalda a Hanasu para poder verlo de cerca.
Trunks usó algun tipo de truco extraño contra mí y no puedo moverme-dijo el saiyajin. Lin frunció el ceño al escucharlo, al parecer ella sabía de qué se trataba.
Lo mataré-afirmó la híbrida saiyajin con seriedad-solo déjame ir tras...-dijo hasta que notó que Vegeta logró tomar su muñeca con su mano. Al parecer intentaba que cesara de sus intenciones.
No hace falta que hagas eso por mí. Necesito que me ayudes a salir de aquí ahora. La nave está bajo ataque- dijo el saiyajin, Lin parecía estar sumamente molesta por lo que había escuchado.
Te ayudaré, pero luego voy a matarlo. Es un traidor-dijo la rubia con molestia-Hanasu, sigue sin mí. Tengo que llevar a Vegeta a un lugar seguro hasta que se recupere-avisó.
¿Vegeta está bien?-preguntó subiendo el tono de su voz para que la escucharan.
Lin volteó ligeramente y asintió, la hermana del príncipe saiyajin se fue rápidamente con los mercenarios siguiéndola luego de la afirmación de la rubia. No podía perder más tiempo, mientras su hermano estuviera bajo la vigilancia de Lin estaba segura de que estaría bien.
Lin ayudó a Vegeta a reincorporarse, al menos no le costaba demasiado esfuerzo ayudarlo a levantarse dado que tenía bastante fuerza.
Quizás pueda acelerar tu recuperación con mis habilidades curativas para que puedas salir a defender la base cuanto antes, pero primero nos iremos de aquí -dijo Lin, ayudaba a Vegeta a caminar como podía haciendo que él la rodeara con su brazo en la parte de los hombros.
Solo déjame en algún lugar donde el techo no vaya a caerse, estaré bien pronto-dijo Vegeta, una vez que se puso de pie con ayuda de ella pudo volver a mover al menos un poco sus piernas. Al parecer lo que le había hecho el moreno era algo transitorio.
Milk y Bulma salieron rápidamente por el hueco que había a uno de los lados de la nave. La pelinegra había cargado a Bulma esquivando varios rayos de energía que provenían del cielo. Probablemente eran de la pelea que estaba desarrollándose entre los saiyajin que la habían acompañado y los mercenarios que defendían la base.
El lugar estaba repleto de humo, era el producto de los explosivos que eran lanzados incesantemente hacia la nave del emperador maligno. Todo en ese lugar era un completo caos, necesitaba encontrar un vehículo terrícola cercano para que la ayudaran a sacar a Bulma de ahí.
MILK, BÁJAME-gritó la peliazul furiosa desde su espalda. Milk frunció el ceño al escucharla. No la obedecería en esta ocasión. Bulma era sumamente obstinada, pero debía asegurarse de que ella saliera ilesa de allí.
Siguió desplazándose hasta poder bajar de las ruinas de la nave espacial de Freezer y se dirigió a la superficie terrestre.
Un mercenario desconocido para ellas las interceptó en el camino, al parecer iba a matarlas.
El mismo se interpuso en el trayecto que harían hacia la nave con actitud hostil. Bulma logró bajarse de la espalda de Milk al ver la situación, ambas estaban en problemas.
Los humanos deben ser eliminados-dijo el extraterrestre acercándose a ellas con una esfera de energía formada en su mano. Su mirada maligna les indicaba que no tendría piedad.
Milk antepuso su cuerpo en frente de Bulma en caso de que el extraterrestre las atacara. Justo cuando el mismo les lanzó la esfera de energía una persona apareció frente a ellas evitando el ataque.
Hola ¿Están bien? Las estaba buscando-dijo Goku sonriente. La esfera lo había golpeado en su espalda sin provocarle daño alguno.
Milk vio al saiyajin frente a él que la había salvado de morir. No lo había visto antes en la base. Aunque bien sabía que él estaba de su lado, Bulma le había contado con detalle sobre todos los que estaban a favor de la humanidad.
Goku, deshazte de él-dijo Bulma señalando al extraterrestre que había querido matarlas antes de que él apareciera.
El saiyajin de cabello alborotado volteó a ver al mercenario y lo golpeó para dejarlo inconsciente rápidamente. El mercenario ni siquiera pudo predecir que recibiría tal golpe.
Me asignaron que viniera por ustedes dos una vez que Milk te salvara en medio de todo el alboroto, hay que irnos de aquí -dijo Goku con algo de prisa. Era muy peligroso que los humanos permanecieran allí por más tiempo. Habían corrido un enorme riesgo con ese ataque sorpresa.
Vegeta está allí aún, estaba debilitado. No puedes dejarlo solo -dijo Bulma con preocupación, Goku tan solo le sonrió.
No te preocupes por él, estará bien. Él me encargó que te protegiera, así que tenemos que ir pronto o todo lo que está haciendo será en vano Bulma- dijo el saiyajin con seguridad. Volteó a mirar a Milk la cual aún miraba impresionada que aquel saiyajin las había protegido-¿Tú estas bien? ¿Te hicieron daño Milk?
No, estoy bien-dijo la mujer, notaba que el saiyajin parecía algo preocupado por ella. Incluso más que por Bulma-¿Cómo sabes mi nombre?- preguntó confundida. Sentía que un calor emanaba de sus mejillas al hablar con ese sujeto. No lo conocía ¿Por qué causaba esa sensación en ella?
Te conozco en mi tiempo, por eso no puedo permitir que algo te suceda. Ni a ti tampoco-dijo mientras las cargaba a ambas. Sería mejor que se las llevara pronto de allí para que ningún otro mercenario intentara matarlas.
El saiyajin las llevó a un vehículo que era conducido por otros humanos del refugio. En él se encontraban Yamcha y Krilin.
Por favor, asegúrense de que nada les pase hasta que lleguen al otro refugio. Tengan mucho cuidado-dijo Goku a modo de advertencia en la puerta del vehículo. Bulma y Milk ya habían ingresado en él.
Confía en nosotros Goku-dijo Krilin sonriente. Estaba feliz de ver que Bulma estaba sana y salva.
No te arriesgues de más Milk-dijo Goku mirando a la pelinegra, ella volteó a verlo y se sonrojó al sentir la mirada de él sobre sí. Ese saiyajin parecía interesarse bastante por su bienestar.
¿Dónde está Vegeta? ¿Lo has visto? -preguntó la pequeña Bulma, ella también se encontraba en el vehículo. Trunks y Goten se habían ubicado en uno distinto para irse rumbo al otro refugio.
Vegeta está bien, yo iré a ver cómo va todo ahora. Seguramente iremos con ustedes pronto, manténganse a salvo hasta que los encontremos allá-dijo Goku con seguridad. Si no persuadía a la pequeña Bulma estaba seguro de que ella encontraría la forma de interceder en el plan.
La pequeña lo miró con cierta desconfianza, pero accedió a quedarse allí al ver que su versión adulta estaba con ellos ahora.
Los veré luego, váyanse rápido -dijo Goku dejando de bloquear la puerta para que el vehículo avanzara. La cerró luego de que Yamcha y Krilin lo saludaran.
Espero que todo salga bien-dijo Goku para sí mismo una vez que los demás se fueron. Se dispuso a verificar los alrededores para asegurarse de que nadie atacara las aeronaves de los humanos.
Era poco probable que les hicieran daño una vez que salieran de las cercanías de la nave espacial de Freezer. Después de todo la mayoría de los mercenarios estaban concentrados en la base para defenderla.
Los bombardeos de los humanos y la explosión que Vegeta había provocado habían hecho que todos los mercenarios se centraran en la nave espacial.
SEÑOR GOKU-vociferó una voz desde la distancia. El saiyajin volteó a ver hacia la dirección en la que había escuchado la voz y sonrió.
¿Ya estás mejor? Creo que esto es todo lo que puedo hacer por ahora-dijo Lin, tenía sus manos encima del abdomen de Vegeta. Los dos estaban en uno de los pasillos internos de la base, el saiyajin estaba recostado en un banco.
Al menos ya puedo moverme, pero no sé hasta qué punto puedo hacer uso de mis poderes-dijo Vegeta incorporándose, la mujer se puso de pie también.
¿Qué debemos hacer ahora? -preguntó intrigada la mujer, esperaba las nuevas órdenes para desarrollar el plan de la rebelión.
Tú ve afuera e intenta desestabilizar a los mercenarios que encuentres. No estarás sola, tengo aliados afuera. Yo iré a buscar a Freezer ahora, necesito hacer algo antes de que nos vayamos de aquí o esto no funcionará-dijo Vegeta con seriedad. Lin puso una mueca de preocupación al oírlo.
No puedes ir así, si descubre que tú fuiste el que pensó todo esto te matará. No cuentas con toda tu fuerza aún Vegeta-dijo la rubia, suponía que lo que Vegeta tuviera que hablar en su encuentro con Freezer no sería muy amigable.
Debo hacerlo, si algo me sucede huye lo más rápido que puedas. No estamos solos en esto-dijo Vegeta procediendo a irse en la dirección en la que Freezer estaba. Al parecer él estaba activo, sentía su ki moverse por la base.
Espera-dijo Lin tomando su mano. Obligó al príncipe saiyajin a que la mirara-Prométeme que intentarás regresar a salvo Vegeta -solicitó.
Vegeta la miró directamente a los ojos, podía ver la genuina preocupación que irradiaban. Sería mejor que le siguiera la corriente para que no sufriera, después de todo ella estaba de su lado.
Lo prometo, en cuanto salga te sacaré de aquí. Solo espérame-dijo Vegeta con seguridad. Lin se abalanzó hacia él para darle un rápido pero dulce beso en los labios. Le dedicó una fugaz mirada antes de retirarse por el pasillo.
Maldición-dijo Vegeta para sí mismo luego de procesar lo que acababa de pasar.
Haber recibido esa despedida de la híbrida namek había logrado distraerlo momentáneamente de su objetivo. Estar en esa confusa situación lo hacía sentirse cada vez más alejado de su realidad.
Cada vez que debía actuar como su otro yo en ese tipo de circunstancias recordaba a su amada peliazul. Seguramente ella debía estar muy preocupada por todo el tiempo que estaban tardando en volver.
Por un momento se sintió completamente solo, definitivamente estar tan lejos de Bulma le estaba afectando. Si bien podía ver a la versión de ella de ese tiempo extrañaba en demasía a la mujer que lo conocía en realidad. Que podía verlo tal y como él era.
Tal vez fingir ser otra persona tanto tiempo estaba haciendo que enloqueciera. Se sentía apartado de su verdadero ser, no era un mercenario genocida ni un don nadie cuya historia debiera ocultar.
Él era la versión de sí mismo que había elegido como estilo de vida, aquella versión que reflejaba su verdadera esencia. Aquella que tanto le había costado encontrar.
En ese momento solo lograba enojarse por todo lo que estaba pasando. No podía más que soñar en el instante en el que por fin pudiera estar en su mundo otra vez con su familia. Con su Bulma.
Debo seguir adelante-dijo en voz alta, a pesar de que sabía que nadie lo escuchaba. Intentaba juntar la fuerza suficiente para poder enfrentar ese problema. Parecía estar muy lejos de terminar.
Miró la palma de su mano enguantada y presionó su puño, sentía que el poder comenzaba a recorrer su cuerpo casi tan eficientemente como antes. No podía esperar más tiempo a recuperar toda su potencia, debía actuar lo más rápido que le fuera posible.
Mi misma ¿Tu sabes a dónde vamos? No quisieron decirme-dijo la pequeña Bulma irritada. No le agradaba no saber qué estaba pasando, tan solo la habían sacado abruptamente del refugio sin decirle nada.
Lo siento Bulma, no queríamos asustarte antes-se disculpó Krilin al escuchar lo que la niña había dicho. Él era quien conducía la aeronave en la que estaban escapando. No habían tenido mucho tiempo para hablar con ella con todo lo que había pasado.
Estamos en una aeronave camino al refugio de emergencia. Solo hay una persona allá-dijo Yamcha a su vez. Era el copiloto, él era una de las personas en el refugio que necesitaba más protección. Después de todo su condición le hacía más difícil poder valerse por sí mismo.
¿Trajeron la máquina del tiempo? -preguntó Bulma preocupada. Desde que la contraparte de Vegeta la había secuestrado casi se había olvidado de ese asunto.
Por supuesto, también traje todos tus planos. Supuse que seguirías intentando repararla, aquí está -dijo Krilin, le enseñó una cápsula que llevaba consigo. Se la arrojó, Bulma la atrapó y suspiró con alivio una vez que la tuvo en sus manos.
¿Cuál es el otro refugio?-preguntó Bulmita confundida. No estaba muy segura del lugar al que la estaban llevando.
No te preocupes, es seguro. Yo ayudé a construir ese refugio cuando todo esto empezó-dijo Bulma para tranquilizarla. Notaba que su pequeña versión estaba algo asustada y confundida. Era lógico, todo estaba pasando muy rápido, ni siquiera ella lograba decidir con tanta precisión sobre lo que debía hacer.
Allí estará Gero ¿No es así? -preguntó Milk, hace tiempo no veía a ese sujeto. Al menos había pasado bastante tiempo desde que habían construido el segundo refugio.
Si, necesitamos cambiar de ubicación. Ya que el otro Vegeta se escapó es evidente que irán a buscar a los humanos allí. Pero ellos no saben de nuestro segundo refugio-dijo la peliazul, le alegraba mucho que las cosas estuvieran momentáneamente tranquilas. Se había asustado mucho en la nave de Feeezer.
¿El otro Vegeta te llevó lejos? -preguntó Bulmita confundida. Al menos ya era consciente de que había dos versiones del príncipe saiyajin.
Sí, él me sacó del refugio, y el Vegeta que tú conoces me salvó -dijo Bulma, sabía que su pequeña alter ego estaba muy preocupada por el paradero del saiyajin.
Extraño a Vegeta, me dejó sola -dijo la niña cabizbaja. Llevaba días sin ver al único en quien confiaba ciegamente. Esperaba poder reunirse con él pronto otra vez.
Él está bien, lo veremos pronto -dijo Milk a su vez- Yo también lo vi, no tienes que estar asustada. Él te protegerá-dijo la mujer, la pequeña Bulma la miró sorprendida al escucharla-Pronto todos estaremos bien y seremos libres-aseguró.
Ya estamos cerca del refugio-dijo Bulma a modo de aviso. Si bien la parte en la que ellas estaban era blindada, la parte frontal permitía ver hacia el exterior.
Lo logramos, solo hay que permanecer aquí a salvo hasta que ellos terminen con su plan -dijo Krilin mientras aumentaba la velocidad. Pronto llegaron a la entrada del otro refugio. Estaba camuflado entre viejos escombros de edificios que parecían haber sido destruidos hace tiempo.
Al menos la rebelión logró su objetivo -dijo Milk, se sentía más tranquila de haber cumplido su misión.
¿El objetivo era salvarme? -preguntó Bulma sorprendida. Milk asintió.
No estaríamos vivos si no fuera por ti Bulma. Vegeta nos llamó para poder sacarte de ahí y que estés a salvo. También a ella-dijo señalando con la mirada a la pequeña peliazul- El refugio entero colaboró para salvarte, eres muy valiosa.
Debo reparar la maldita máquina del tiempo-dijo Bulma con frustración en su rostro.
Todos los humanos que conformaban su refugio se habían arriesgado a morir a manos de los mercenarios de Freezer solo para recuperarla a ella. Debía demostrar que habían tomado una buena decisión ayudándola
Una vez que todo esto termine reconstruiré la Tierra para que sea como antes. Recuperaremos nuestro planeta y la haremos nuestro hogar otra vez-dijo decidida la peliazul-No dejaré que esos sujetos nos arrebaten nuestro futuro.
La aeronave se detuvo una vez que llegaron a la entrada del refugio para ingresar en la base subterránea de Gero.
Capítulo 39 listo! Acabo de notar que esta es la historia más larga que he escrito.
Me hace muy feliz escribir historias y que ustedes las lean. Muchas gracias por el apoyo, sus votos y sus comentarios.
Si les gustó el capítulo de hoy por favor háganme saber qué tal lo vieron, qué les pareció o cómo lo sintieron.
Nos leemos pronto
Niebla~
