Capítulo 27: El último interrogatorio
Inmediatamente termino el interrogatorio de Jinbe, cuando llegó el señor Cobra. Pese a las macabras circunstancias en las que se encontraban, el señor Cobra se veía bastante tranquilo, casi sonriente.
-Bueno, creo que usted será al último pasajero que interrogue este día. – dijo Brook solemnemente.
Tras el interrogatorio de Jinbe Brook se sentía agobiado. El hecho de que la mayoría de los interrogados viniesen de alguien relacionado con la familia Newgate le había incomodado bastante y tener que aguantar otra tediosa sesión de interrogatorio, cuando podría estar aprovechando el tiempo desenmarañando de que se trataba aquella coincidencia le resultaba desmoralizante.
-Me alegra. La verdad ya estoy ansioso por que se esclarezca este embrollo y así dejar de lidiar con tanto interrogatorio e inconveniencia. ¡Y pensar que tendré que explicarle ha mi hija de todo este embrollo! ¡Se pone tan nerviosa cuando le cuento de los peligros con los que me enfrento a diario!
-Bueno, supongo que sería mejor omitirle este embarazoso detalle cuando llegue a casa. – sugirió Brook.
-¡Eso sería imposible! ¡Ella se enterará! ¡He tardado más de lo acordado y se dará cuenta! ¡Además mi hija siempre lee los periódicos! ¡Seguro este caso estará en la primera plana del Diario Mundial de Economía! Aunque a decir verdad no suelo creerles mucho a esos patanes de dicho diario, siempre se la pasan mintiendo, sobre todo. – exclamó el señor Cobra.
-Bien, bueno… es importante seguir adelante con el interrogatorio. – dijo Brook.
-Por supuesto, seguiré con el interrogatorio. Aunque usted tiene que entender que mi preocupación por mi hija crece cada segundo. Me da miedo que algo malo le pase en mi ausencia.
-¡Yohoho! ¡Tenga por seguro que ella estará de maravilla! Ahora me gustaría que me diera sus datos generales…
-Bueno señor Brook, yo nací en Liverpool, en el año 1887. Trabajé como arqueólogo en Egipto, así como ayudando a administrar los negocios de la familia de mi difunta esposa. Sin embargo, estoy en proceso de retirarme y quizá ir a vivir a Estados Unidos con mi hija, quien esta casada con un rico hombre de negocios norteamericano con quien tiene un hijo. ¡Si usted supiera lo encantadores que son! Mi hija inicialmente llegó a América para estudiar en un internado y luego en un conservatorio musical, pues sus profesores le vieron talento en la música. Es muy buena cantante, pero actualmente se encuentra retirada. Aunque a veces sigue cantando en eventos de caridad y reuniones familiares. ¡Por eso es que no quiero llegar tarde!
-Usted no tiene de que preocuparse. Este interrogatorio…- pero antes de que Brook pudiera terminar la frase Cobra lo interrumpió.
-¡Todos dicen eso! Sin embargo, seguimos aquí con un asesino suelto y en medio de la nada. Mi pobre hija seguro ha de estar muy nerviosa con este asunto. Lo mejor que podemos hacer en este momento es rezar porque todo salga bien. No soy un hombre de mucha fe, pero como dicen, la fe mueve montañas…
-¡Suficiente palabrería señor Nefertari! ¡Hay que proseguir con este interrogatorio! - Exclamó Zoro, harto de la verborrea de aquel hombre.
-¡Oda mio! ¡Tienes toda la razón! Aunque aclaro, mi memoria no es del todo clara respecto los eventos de anoche. - Dijo Cobra rascándose su canosa barba.
Brook suspiró y tragó saliva antes de arrojar su siguiente pregunta.
-¿Podría decirnos exactamente que fue lo que usted hizo el día de ayer tras abordar el Orient Express, por favor?
-¡Oh! Cielos, la verdad hice muchas cosas. Para empezar tan pronto llegué a mi compartimiento me senté y decidí leer un nuevo libro que adquirí antes de abandonar Alejandría. Ese libro se titula "La edad de la inocencia" y hasta donde pude ver tiene una trama muy romántica e interesante. Creo que la autora es americana, pero no estoy seguro al cien por ciento. La verdad recomiendo mucho ese libro, no lo he terminado de leer pero es bastante bueno… en fin. ¿En que estaba? ¡Ah si! Bueno, después de leer un rato tome algo de tiempo para ir al vagón comedor y comer algo. No recuerdo bien que ordené en el restaurante, creo que fue un platillo con pescado y algo de vino blanco, en fin, tras un rato empece hablar con el señor Garp un rato, sobre mi hija y el hecho de que ella es cantante de ópera profesional, aunque como se lo comenté ella se tuvo que retirar para dedicarse de lleno a su familia. La verdad es que a mi hija le importa más el bienestar de su familia que la fama y aunque…
Nuevamente el señor Cobra comenzó a desvariar hablando de su familia. Brook trató de ponerle atención, sin embargo no había mucho que lo pudiera conducir ni un poco cerca de la resolución del caso. Solo más anécdotas inconexos sobre su familia y lo que hacían en Norteamérica. Brook si bien solía disfrutar las conversaciones largas sentía que el señor Nefertari estaba tardando mucho en dar algo de información valiosa. Tenía que hacerlo hablar respecto a lo que estaba pasando en el tren y sacarlo de esa obsesión con su hija y chismes sin importancia.
- Bueno, señor Nefertari, la verdad es que es muy interesante lo que nos esta contando en este momento pero es necesario que retomemos el tema, principal. Usted dice que estuvo en el vagón comedor, tal y como recuerdo. - Dijo Brook.
-Correcto. De hecho aún me acuerdo de haberlo visto en el vagón no muy lejos de nosotros. - Afirmó Cobra.
-Bien, pues entonces recuerda también haber visto a la víctima en el vagón comedor…
Cobra volvió a rascarse la barba y suspiró con agobio.
-No recuerdo mucho respecto a eso. Creo que si lo ví. Pero como le digo no recuerdo bien todos los sucesos de ayer. Menos aún los de aquel hombre tan horroroso. - Dijo Cobra.
-Sin embargo, parece recordar a la perfección todo respecto a su hija… - señaló Zoro levantando la ceja de su ojo tuerto.
-¡Por supuesto! ¡Recuerdo todos los momentos felices de mi hijita por que la quiero! No puedo, sin embargo, recordar todos los detalles de ayer, por ser un día tan… horrible. Esa avalancha me despertó a media noche y desde ese momento no pude conciliar el sueño. - Contestó Cobra.
-¿Entonces recuerda la avalancha? - Inquirió Brook.
-Un poco, sentí el temblor inicial y luego la quietud del tren. Sin embargo, como no vi nada anómalo, me quedé en la cama sin levantarme hasta la mañana.
-¿Ya había escuchado hablar alguna vez del caso Newgate antes de los sucesos de esta noche? - Preguntó Brook.
Cobra suspiró cansado, viéndose por un momento melancólico, para luego retornar a su expresión tranquila de hacía unos pocos segundos. Brook pareció percibir ese cambio de expresión y tomó nota.
-Me entere un poco de la tragedia por parte de mi hija quien vivía en East Blue en ese tiempo, pero nunca supe en demasiados detalles. Fue un caso terrible, casi soy capaz de llorar de pensar en la tragedia de aquel niño y su familia. ¡Si tan solo mi hija supiera que compartí el vagón con el criminal de aquel caso se volvería loca! ¡En especial tras el asesinato!
-¿Entonces viajará a East Blue? - Preguntó Brook.
-No, no. Mi hija ahora vive en el estado de Nueva York, pues su marido compró una hermosa casa de campo cerca de Albany y me invitaron a pasar una temporada en ella. Yo originalmente le sugerí que la pasáramos en otro sitio con mejor clima, sin embargo ella es muy necia y a la fuerza quería festejar su cumpleaños en esa casita. No es que me disguste la idea, pero a mi edad el aguantar el frío es difícil…
-Sin embargo parece viajar muy cómodo aquí pese al frío. - Dijo Brook.
-Lo es pero la calefacción me ha ayudado a no pasarla tan mal. Aunque prefiero los climas cálidos y también…
Y Cobra nuevamente empezó a desvariar la conversación del interrogatorio. Parecía que ya no tenía nada más que decir el señor Nefertari, por lo que Brook, miró a Zoro con complicidad y ambos asintieron en silencio.
-Muchas gracias por su tiempo señor Nefertari. Creo que hemos concluido con usted y su interrogatorio. - Dijo Brook interrumpiendo la charla de Cobra.
-¿En serio? ¿Tan rápido? - Preguntó Cobra sorprendido.
-Claro. Eso sería todo. - Dijo Brook solemnemente, dando por terminado el último interrogatorio de aquel intrigante caso.
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Creo que debería llamar a este fanfic "Lazaro" porque lo resucite de entre los muertos. Jajaja. La verdad es que ya tenía en mi mente la idea de terminar y darle conclusión a algunos de mis fanfics truncos y decidí empezar por tratar de terminar este que llevaba años sin actualizar, pero reitero, bicho malo nunca muere. Y Takka es un bicho muy malo. ¡Muahahaha!
Saludos a mis lectoras y lectores.
