Golpeé la puerta un par de veces y entonces salió detrás de ella aquel hombre del que yo estaba tan enamorado. Me paré de puntillas y lo besé mientras ponía mis brazos alrededor de su cuello.
Sosteniéndome con su brazo derecho por la cintura, este me llevó directo a su cama y procedió a besarme profundamente, en realidad no yo quería ensuciarme tan rápido ya que íbamos a salir, pero a veces no me importaba despeinarme un poco a cambio de diversión.
-Yoichi- dijo justo en mi oído, rayos, ¿así quién podría oponer resistencia?. Abrí mis ojos para observarlo y noté que él ni tan siquiera se había duchado, no es que me molestara hacerlo de esa manera, es solo que yo me tomé mi tiempo en arreglarme y él ni siquiera había entrado al baño todavía.
-Oye, ¿por qué no estás listo? creo que me demoré bastante en llegar aquí como para que no te hayas dado una ducha- le dije regañándolo un poco. -¿Te da asco?- preguntó.
-Por supuesto que no- le contesté haciendo un puchero, la verdad me sentía tanto molesto como excitado. -Entonces no veo el problema- contestó mientras bajaba el zipper de mi pantalón.
-No se trata de eso, me molesta que juegues con mi tiempo, se va a hacer tarde para salir a almorzar- le dije, la verdad es que sin entender el por qué, me estaba empezando a sentir de mal humor.
-¿Querías salir?, pensé en que íbamos a pasar el día aquí, por eso no me he duchado- dijo deteniendo sus acciones.
Mi molestia empezó a escalar, no es que odiara la idea de pasar el día en su apartamento, es sólo que no podíamos vernos muy seguido por lo que no podíamos tener citas, así que quería aprovechar el tiempo para hacer cosas nuevas juntos.
Se sentía como si él quisiera poner cero esfuerzos en hacer algo conmigo, otra vez estaba yo exagerando mis sentimientos. Ya no tenía ganas de tener sexo en lo absoluto por lo que subí el zipper y me bajé la camisa.
-Si ya no quieres estar conmigo tan solo dilo, al principio de la relación dijimos que terminaríamos si nos gustaba otra persona o si ya no nos queríamos más, y creo que no estás siendo honesto, siento que ya no me amas igual que antes- sentía tanta vergüenza de estar diciendo estas cosas, no paro de soltar estupideces.
Él parecía estar confundido por mi cambio repentido de actitud -¿Qué dices?- fue lo único que contestó, es cierto que no solía ser un gran hablador, y que en nuestra relación yo era quien hablaba y él quien escuchaba, pero a veces necesitaba que esos roles cambiaran.
Unas pequeñas lágrimas se derramaron por mis mejillas, no quería llorar ni tampoco hacer un drama, solo quería estar seguro de que me siguiera amando ya que sentía dudas, siempre que le preguntaba si me seguía amando me contestaba que sí, pero no me terminaba de convencer.
El ambiente estaba muy tenso, era incómodo hasta cierto punto, yo había arruinado el momento bonito que estábamos teniendo, ya ahora ninguno sería capaz de retomar la pasión de hace unos minutos.
Después de un espacio de silencio -Iré a ducharme e iremos a dónde quieras- dijo levantándose de la cama y dirigiéndose al baño. Yo me sentía muy mal, había arruinado todo, tampoco quería obligarlo a hacer nada, si no quiere salir no tenemos porque hacerlo.
El resto del día transcurrió de manera natural, tuvimos una cita como normalmente lo haríamos y nos olvidamos de la situación ocurrida en la mañana, ya había llegado la noche y estábamos en su sillón terminando de ver una película de miedo.
-Bueno, ya me voy creo que es un poco tarde- dije mientras acariciaba su pecho -¿Mañana entrenas, cierto?, yo tengo un entrenamiento en la mañana y un partido de práctica en la tarde-.
-No, mañana tengo el día libre- contestó, otra vez no se le veía mucho interés en verme, pero esta vez no le haré la propuesta hasta que nazca de él.
Como no me dijo nada más me levanté para irme a mi apartamento, él también se levantó y me acompañó a la puerta -Si quieres puedes quedarte- su propuesta era tentadora, sin embargo me molestaba un poco quedarme a dormir ahí, ya que después de todo teníamos ya tantos años de estar juntos que no podía evitar sentirme mal con respecto a otro tema.
Sí, el hecho de vivir juntos. En diversas ocasiones cuando éramos más jóvenes y empezamos nuestra carrera profesional, habíamos hablando sobre vivir juntos, sin embargo los años han pasado y eso no ha sucedido.
Yo no quise tocar más el tema ya que parecía ser el más interesado y no quería ser intenso o molesto, tampoco quería que se sintiera presionado, ya que después de todo considero que está bien tener la etapa de vivir totalmente solo y ser independiente antes de estar conviviendo con alguien más.
Pero, aunque tenemos algunos años de estar viviendo solos y de tener una situación económica estable, nunca volvimos a tocar el tema, es mas, diría que él parece estarlo evitando, y como dije yo tampoco quiero ser insistente.
Así que me molesta que me invite a quedarme con él sólo de vez en cuando, parece como si no quisiera tenerme tanto tiempo a su lado, ya que si tengo mi apartamento me puede enviar de regreso cuando quiera.
Y además de que tengo que pagar alquiler aquí en Japón y en Alemania, si viviéramos juntos tampoco estaría en casa tan seguido, así que no puedo evitar conflictuarme con esta situación ya que no sé en que está pensando.
-¿Pasa algo?- me preguntó, ya que me vio absorto en mis pensamientos -Verás... hay un tema que siento que no tocamos hace algunos años y no sé que opinas- la verdad es que me da miedo.
-¿Sabes?, Kunigami y Chigiri están casados hace un par de años y viven juntos desde los veinte; Reo y Nagi viven juntos desde que terminó Blue Lock, incluso tu hermano y- antes de poder terminarme de expresar fui interrumpido.
-¿Qué quieres decir?, ¿Qué por qué los demás hacen su vida de cierta manera tú y yo tenemos que hacerlo igual?- no entendía por qué pero Rin estaba molesto -No existen edades correctas para hacer las cosas, no tenemos que ser iguales que los demás, pensé que te gustaba tener tu propio espacio, porque a mí sí me gusta, lo que quiero decir es que aún no estoy listo para dar ese paso- espetó.
No sabía como sentirme al respecto, ¿no está listo para vivir conmigo aún?, ¿es tan terrible mi compañía y convivencia?, lo sabía no debí haber preguntado, no quería armar algún nuevo conflicto, no después de la situación de la mañana.
-Mejor me voy, nos vemos- dije dándome media vuelta y saliendo del apartamento caminando rápidamente. Me gustaría mirar hacia atrás y ver que él viene corriendo por mí, sin embargo el sonido de la puerta cerrándose resonó por todo el pasillo y me confirmó lo contrario.
