VEGETA-gritó Bulma poniéndose de pie, Milk se incorporó también y la tomó del brazo. Temía que su amiga se cayera ya que se había acercado al borde del lomo de Leigh.

Ten cuidado-le dijo la maestra tierra, aunque no podía evitar mirar hacia el dirigible. Tenía miedo de que algo malo le sucediera a su hermano.

Goku escuchó el grito de Bulma ya que estaba regresando a donde estaban sus amigos, se encontraba volando con ayuda de su planeador.

Pudo ver el otro dirigible incendiándose y se dirigió hacia allí inmediatamente, aunque el dirigible caería antes de que pudiera llegar.

Milk se apresuró a cambiar el rumbo del dragón para que se dirigieran hacia allí también, el dirigible cayó al borde de una isla que estaba sobrevolando. Justo estaban pasando sobre un archipiélago que se habían topado en su camino a la tribu del agua.

Llegaron poco tiempo después de que el dirigible se estrellara, Milk se bajó primero de Leigh, aunque Goku habia llegado un poco antes. Estaba mirando alrededor del gran vehículo, la cabina del frente estaba destruida.

Hay que buscarlo por aquí, siento que esta cerca-dijo Milk como indicación mientras daba un fuerte paso en la tierra. Aunque no podía distinguir la presencia de su hermano exactamente, seguramente no estaba moviéndose, eso solo la preocupaba más.

Bulma bajó aunque Yamcha y Krilin intentaron convencerla de que no lo hiciera, al no tener éxito en eso procuraron acompañarla para asegurarse de que estuviera a salvo.

Hay que buscarlo-dijo Bulma en cuanto se acercó a Milk, ella miraba preocupada hacia donde Goku estaba. El maestro aire se encontraba removiendo con cuidado las placas de metal del dirigible, ahora estaban deformadas por el impacto.

Tú no puedes Bulma, déjanos hacernos cargo-dijo Krilin, se acercó a ayudar a Goku rápidamente ya que notaba que su amigo no podía levantar solo una de las placas. Era una de las más grandes.

Intentaban crear una entrada para poder inspeccionar el dirigible, seguramente Vegeta estaba allí, no habían visto a nadie en los alrededores.

¿Y si Vegeta cayó al agua? Debería ir a buscar-dijo la peliazul insistente, Yamcha la detuvo.

No puedes, estas herida-le insistió. Bulma forcejeó mientras el maestro tierra la detenía tomándola del brazo, paró de intentar escapar al escuchar el grito de Milk.

Habían quitado la gran placa de metal, detrás de ella estaba Vegeta. Se encontraba inconsciente y tenía varias heridas en su cuerpo, parecía ser algo grave.

En cuanto lo vio, su expresión se transformó a una de terror absoluto. Sintió que su corazón se paralizaba al ver al avatar en ese estado. Yamcha la había soltado al ver a Vegeta así, ella se acercó inmediatamente con una extrema preocupación en su rostro.

Por favor, quédate conmigo-dijo la maestra agua mientras controlaba agua que estaba cerca de ellos. Estaban al borde de la isla en la que el dirigible se había estrellado.

Dirigió el agua hacia Vegeta, la misma brilló ligeramente mientras la hacía adherirse a su pecho- Está vivo-dijo algo aliviada, aunque no tenían mucho tiempo

Hay que salir de aquí-dijo Goku dispuesto a cargar al avatar en su espalda. Krilin lo ayudó para que pudiera levantarlo sin hacerle daño.

Alto-dijo una voz que venía del dirigible, un tipo vestido con los colores de la nación del fuego se acercaba. Aunque parecía estar algo herido por el impacto del transporte. Pronto, otros tipos salieron también, aunque no parecían estar en las mejores condiciones, la mayoría se encontraban heridos a causa del accidente.

Yo me encargo, subanlo a Leigh-dijo Milk con determinación, Goku y Krilin asintieron mientras obedecían -Tú cuídalo Bulma-le pidió. Bulma fue detrás de ellos mientras la miraba de reojo, no sabía qué iba a hacer.

Ese tipo hizo que nuestro dirigible se estrellara-dijo con furia el sujeto que se aproximaba-No los dejaremos salir de esta isla, el avatar vendrá con nosotros-aseguró mientras se acercaba junto a los demás.

Ustedes no saldrán de esta isla, yo me encargaré de eso-afirmó Milk con ira en su voz. Bajó sus manos con sus palmas hacia abajo, giró sus muñecas e hizo un lento movimiento como si estuviera ejerciendo una gran fuerza. El suelo comenzó a temblar instantáneamente.

Hay que subir-dijo Krilin con algo de miedo al sentir la vibración en la tierra. Ya casi habían subido a Vegeta, luego de poder acomodar al avatar cómodamente en el lomo de Leigh se subió, ayudó a Bulma a hacer lo mismo.

No se vuelvan a meter con nosotros jamás-dijo de forma amenazante la maestra tierra, elevó sus manos rápidamente y unos grandes bloques de tierra se elevaron del suelo, los dirigió bruscamente hacia sus enemigos con fuertes golpes de puño que impulsaron las rocas velozmente.

Luego de derribar a muchos de aquellos soldados de la nación del fuego, generó una gran ola compuesta por roca que alcanzó a desestabilizar a los soldados restantes. Los mismos salieron volando del lugar ya que la ola los expulsó lejos de allí, al menos alcanzaba para que tuvieran tiempo suficiente para irse.

Sube-dijo Milk tomando de la muñeca a Yamcha para hacer que se subiera a Leigh con ella lo más pronto posible. Ambos saltaron al lomo del dragón de inmediato.

Leigh, arriba-ordenó Milk con el ceño fruncido, el dragón obedeció y levantó vuelo apenas se lo ordenaron.

Vegeta-dijo Bulma preocupada mientras permanecía cerca de él, Goku y Krilin miraban que nadie los estuviera siguiendo otra vez.

Vegeta está mal ¿A dónde iremos? -preguntó Yamcha, estaba al lado de Milk. No sabía qué podrían hacer, usualmente Vegeta se encargaba de tomar decisiones.

Hay que llevarlo con la mujer que curó a Bulma, si esperamos a llegar a la tribu del agua podría morir- aseguró la maestra tierra, ya había cambiado el rumbo del dragón hacia donde había dicho, estaba muy asustada por el estado de su hermano.

Les avisaré-dijo Yamcha refiriéndose a los demás ya que no habían escuchado su plan.

Llegaron a la isla de la maestra agua que habían visto antes, Bulma fue la primera en bajar del dragón seguida de Milk.

Bájenlo, yo le explicaré a la maestra Zangya. Seguro que ella nos ayudará- dijo Bulma inmediatamente mientras se disponía a tocar la puerta de la casa que la maestra agua habitaba.

La mujer de la tribu del agua del sur los recibió rápidamente, al ver el grave estado de Vegeta le pidió a los demás que lo sumergieran en una tina con agua para poder ayudarlo.

Hicieron bien en traerlo, no habría podido llegar a tiempo a la tribu del agua del norte en este estado-dijo la mujer, notaba las miradas preocupadas de los amigos del avatar. Rodeaban la tina con muecas de nerviosismo-¿Qué le pasó? -preguntó nuevamente.

La nación del fuego nos perseguía y él se metió en un dirigible, lo derribó él solo-le respondió Goku, la mujer los miró sorprendida.

Al parecer es muy valiente-dijo la mujer asombrada por lo que el muchacho había hecho-Les prometo que yo puedo ayudarlo, pero no puedo hacerlo en un solo día. Tendrán que quedarse hasta que esté mejor, no creo que despierte hoy.

¿Nos permitiría quedarnos? La nación del fuego todavía nos debe estar persiguiendo y no podemos irnos sin él-pidió Bulma, la mujer asintió.

Yo estoy encantada de ayudarles-dijo Zangya con una voz tranquila.

Necesito que lo cure, él es mi familia -dijo Milk, ver a Vegeta así hacía que sus ojos lagrimearan-Es muy importante que él esté bien-le suplicó.

Entiendo que es su amigo y estén preocupados por él, les prometo que haré que se sienta mejor-aseguró la mujer, mientras les hablaba el agua de la tina brillaba gracias a su agua control.

No es solo por eso-dijo Goku, los demás lo miraron. Sabían lo que iba a decir- Necesitamos que se recupere porque él es el avatar, sin él el mundo estará perdido. La nación del fuego acabará con todo.

La mujer los miró sorprendida al escuchar lo que el joven le había dicho. Luego volteó a ver a Vegeta asombrada con cierta incredulidad.

No es posible, el avatar está perdido -dijo la mujer, a pesar de su sorpresa no dejaba de realizar su labor.

Ya no, el destino del mundo depende de él-dijo Krilin a su vez, la mujer miró de reojo al joven mientras seguía haciendo sus curaciones. En algunos minutos escucharon a Vegeta exhalar como si hubiera mejorado de repente, aunque todavía tenía sus ojos cerrados.

Bulma presenció cada segundo de las curaciones mientras los demás se ocupaban de esconder a Leigh y vigilar que nadie de la nación del fuego los hubiera seguido hasta allí. Sería difícil pelear nuevamente contra ellos.

Vio el agua brillar alrededor del cuerpo de Vegeta, parte de su ropa de la nación del fuego estaba rota. Tenía algunas manchas de sangre que eran casi indistinguibles del color rojizo de su vestimenta.

Estará bien, podría haberlo hecho mejor si lo hubiera visto antes, pero aún así lo trajeron rápido-dijo la mujer, notaba la preocupación en los ojos de Bulma, había estado observando casi sin pestañear.

Me encantaría ser una sanadora, de esa forma yo podría haberlo ayudado antes-dijo Bulma, sus ojos estaban brillando ya que ver a Vegeta así le daba ganas de llorar. La maestra agua mayor puso su mano sobre la de la peliazul tratando de consolarla.

Puedes hacerlo, yo te enseñaré y podrás sanarlo si sucede otra vez- le ofreció Zangya-Creo que podrás hacerlo, estoy segura de que eres una maestra agua talentosa-aseguró. Bulma la miró asombrada por su ofrecimiento.

Pero no tenemos tanto tiempo, y tiene que sanar a Vegeta-dijo la peliazul, Zangya le sonrió.

El agua puede acelerar la recuperación, pero también necesitará unos días. Puedo enseñarte algunos secretos del agua control hasta que ese tiempo se cumpla. Deben esperar a que él esté lo suficientemente fuerte para poder irse, podría ser riesgoso que lo hagan antes de tiempo-le explicó-Le haré sesiones de curación diarias, pero mientras no esté haciendo eso podría enseñarte algunas cosas, estoy segura que te servirá en tu camino de acompañar al avatar.

Se lo agradecería muchísimo maestra Zangya, realmente no existen formas de agradecer su generosidad-respondió Bulma mientras la reverenciaba.

Mi recompensa será la caída de la tiranía de la nación del fuego. Te aseguro que nadie desea eso más que yo-admitió la mujer con una mirada sombría, guardaba un fuerte resentimiento con ese país.

El agua dejó de brillar repentinamente y Zangya utilizó agua control para quitar el agua de alrededor del cuerpo del avatar.

Hay que dejarlo descansar, vendré a hacerle más curaciones en unas horas. Pero estoy segura de que se repondrá, solo está así porque perdió bastante sangre-dijo, Bulma tomó la mano de Vegeta y lo miró largamente. El avatar todavía no dejaba ver sus oscuros y profundos ojos negros.

¿Puedo quedarme con él un rato? -preguntó Bulma, Zangya asintió.

El que necesites, pero trata de que no sea demasiado. Eres la primera alumna que tengo en años, estoy entusiasmada-le solicitó la mujer mientras se dirigia a salir de aquella habitación, Bulma asintió. Esa mujer le caía bastante bien, parecía muy interesada en enseñarle agua control.

Te pondrás bien pronto, lo prometo -dijo la peliazul en un susurro sin dejar de ver a Vegeta-Yo seré útil para ti, haré lo que esté en mi poder para ayudarte-le aseguró. Lo miró por algunos segundos, vio que el avatar no emitía respuesta, todavía estaba muy débil.

Se acercó lentamente a su cara y le dio un beso en la frente, ese día se había asustado mucho. Probablemente eso era lo que Vegeta había sentido cuando decidió renunciar al poder absoluto de avatar por su lazo con ella, no podía resistir la idea de perder esa conexión que tenía con él.

Se levantó y lo miró una última vez antes de salir de allí, iría a pedirle a Milk que cuide de él mientras ella iba tras la maestra Zangya. Comenzaría de inmediato ¿Qué iba a hacer si no era capaz de ayudarlo si algo malo sucedía? No podría perdonarse eso nunca. Estar con el avatar implicaba exponerse a un peligro muy grande y debía estar a la altura de las circunstancias.

Una vez que salió de la habitación le pidió a Milk que acompañara a Vegeta, la maestra tierra aceptó inmediatamente. Vio a Bulma alejarse para ir tras la maestra Zangya, le parecía extraño que no hubiera querido quedarse más con él, notaba que su hermano y ella se habían vuelto bastante cercanos.

Algunas horas pasaron, Bulma y la maestra Zangya habían desaparecido por horas. Aunque al cabo de unas horas la mujer regresó para la siguiente sesión de curación de Vegeta.

El avatar todavía no había despertado, luego de media hora la mujer volvió a irse con la peliazul quedando al cuidado de Milk. Pasaron algunos minutos luego de que se fueran, Vegeta gruñó por lo bajo.

Milk lo escuchó y se acercó hacia donde estaba acostado, estaba cubierto de vendajes que cubrían sus heridas. Zangya se los había colocado luego de la última sesión de curación ya que había logrado que las heridas de Vegeta sangraran menos.

¿Ya despertaste? ¿Cómo te sientes? -preguntó la muchacha mientras ayudaba a su hermano, el mismo parecía no poder moverse. Probablemente todavía sentía mucho dolor en su cuerpo.

¿Qué me pasó?-preguntó, al parecer no recordaba mucho. Sus ojos recorrieron la habitación hasta donde su vista le permitía ver-¿Y los otros?-preguntó nuevamente.

Todos están bien, aunque tú no tanto -respondió Milk señalando sus vendas- El dirigible que tu ibas a derribar cayó y quedaste muy herido, volvimos a la casa de la sanadora de la tribu del agua del sur para que te ayudara-respondió.

Vegeta miró nuevamente hasta donde su campo visual se lo permitía, al parecer buscaba a alguien, pero no estaba allí.

¿Te duele mucho? Deberías beber algo, llevas inconsciente un tiempo y perdiste mucha sangre. Te haré algo de comer ¿Quieres?-le ofreció, Vegeta asintió-Bien, iré a llamar a alguno de los muchachos para que se queden contigo hasta que yo te prepare algo. No debes estar solo, todavía estás muy débil.

Milk salió del cuarto luego de decir eso, iría por alguno de los chicos para que lo acompañara. Se había preocupado mucho por su estado de salud, agradecía enormemente que su hermano estuviera despierto de nuevo.

Luego de algunas pocas horas más, la hora de dormir llegó. Goku había ido a quedarse con Vegeta antes y un tiempo después de la cena también. Aunque el avatar se durmió rápidamente ya que había sido un largo día para él, su cuerpo todavía estaba muy dañado.

Goku salió de la habitación luego de notar que Vegeta se había dormido. Iba a buscar un vaso de agua ya que compartía la habitación con él, le había dado sed antes de dormir. Apenas salió de ella se encontró con Bulma.

Hola Bulma ¿Dónde estabas? -preguntó el maestro aire de forma amable, la peliazul parecía tener prisa.

¿Vegeta ya se durmió?-preguntó ella, aunque luego de preguntar eso se sintió algo avergonzada por no hacer caso a lo que Goku le había dicho.

Sí, lleva dormido unos minutos. Se sentía mal así que se quedó dormido rápido, todavía le duele -respondió amigablemente-Creo que él quería verte, es una lástima que no llegaras antes de que se duerma, aunque mañana podrás verlo-dijo, notó que la mirada de Bulma se decepcionó un poco al oír que ya estaba dormido.

Es que fui con la maestra Zangya, me está enseñando a sanar con agua control-le explicó-Y llegué tarde porque tomó bastante tiempo, ella quería terminar hoy porque quiere empezar a enseñarme trucos de agua control.

Eso es genial-dijo Goku sorprendido -Bueno, de todos modos eso será útil, puedes ver a Vegeta mañana. Estoy seguro de que él lo entenderá, ya sabes que él le da mucha importancia al entrenamiento.

Sí, lo sé. Por eso quería hacer esto, podría servir cuando las cosas se pongan difíciles o si alguno de nosotros sale herido en el futuro-dijo la chica, miró nuevamente hacia la puerta de la habitación pensativa, realmente quería verlo.

Iré por un vaso de agua ¿Quieres uno? -ofreció, Bulma negó con su cabeza.

No, gracias. Iré a dormir temprano para poder saludar a Vegeta en la mañana-dijo la chica, Goku se despidió sutilmente con su mano y se dirigió a la cocina de la casa en la que estaban quedándose.

Apenas Goku salió de su rango de visión, Bulma abrió la puerta de la habitación para poder ver a Vegeta rápidamente. No iba a despertarlo, solo quería ver que se encontrara bien.

Entró con pasos silenciosos y lo miró desde una distancia prudente, su rostro se veía tranquilo. Su pecho estaba algo destapado y eso dejaba ver las vendas que ahora cubrían su cuerpo.

Sintió tristeza al ver al avatar en ese estado, se veía vulnerable con tantas heridas en su cuerpo. Una en especial la había preocupado mucho, apenas lo habían encontrado había visto un gran volumen de sangre que se había escurrido por uno de sus brazos.

Se acercó un poco más y lo cubrió bien con la sábana, le habría encantado saludarlo cuando estaba despierto. Solo lo había visto inconsciente desde que el accidente había sucedido.

Descansa Vegeta-dijo en un susurro, lo miró unos segundos antes de salir. Debía irse a dormir ya que tenía que levantarse temprano para su entrenamiento con la maestra Zangya.

Salió de la habitación y caminó cautelosamente cuidando no cruzarse con Goku, ya que notaría que había ido a ver a Vegeta de todos modos.

La hacía sentir mal irse y dejarlo así, le habría gustado cuidar de él, pero su tiempo para poder aprender era limitado. Sabía que apenas Vegeta se sintiera bien se irían a su tribu y se concentrarían en su entrenamiento.

Además de que no había otra maestra como Zangya a disposición, al menos nunca había tenido la oportunidad de aprender de alguien que estuviera tan interesada en enseñarle sus trucos de agua control. Aunque era algo usual que no pudiera estar en contacto con tantos maestros, la nación del fuego había secuestrado a muchos de ellos.

Entró en su propio cuarto y se encontró a Milk, la maestra tierra la saludó apenas la vio entrar. Estaba peinando su cabello sentada en su cama.

Hola-la saludó Bulma apenas ingresó - Lamento volver del entrenamiento a esta hora-se disculpó.

Descuida-respondió su amiga, dejó escapar un largo bostezo, estaba algo cansada-¿Ya vas a dormir?-le preguntó.

Sí, estoy cansada-respondió la peliazul, buscó entre sus cosas y se cambió de ropa para luego acostarse- Perdón por no ayudarlos a cuidar a Vegeta hoy, la maestra Zangya me está enseñando algunas cosas de agua control-explicó, todavía sentía culpa. Ver al avatar así la había llenado de remordimiento.

No te preocupes, lo bueno es que hoy despertó-respondió Milk-Me asusté mucho, pero creo que se pondrá bien- agregó. Bulma sonrió levemente ante su actitud positiva, esperaba que así fuera.

Él es muy fuerte, lo resistirá-dijo Bulma mientras se dejaba caer en la cama boca arriba-Buenas noches- la saludó. Milk le respondió lo mismo y apagó la vela que antes iluminaba tenuemente la habitación.

Buenas noches! Aquí les traigo el capítulo número 47, disculpen la demora.

He tenido algunos problemas para editar los capítulos además de que hace poco Wattpad me eliminó uno y no podía escribir por el enojo que me dio. Afortunadamente pude recuperarlo con un reclamo y ahora estoy intentando avanzarle lo más posible ya que mi inspiración no está tan agotada como suele estarlo.

Muchas gracias a quien haya leído el capítulo hasta el final, espero les esté gustando cómo va la historia.

Nos leemos pronto

Niebla~