Ese día Duo llegó súper temprano a la escuela con tal de no toparse con su hermanastro por la mañana, siendo el primero de todo el salón, ni el nerd de su amigo Quatre llegó antes tan temprano como él

Sacó sus libros y quiso distraerse leyendo pero no pudo, recordó todo lo que sucedió la noche anterior, las confesiones de Heero, más que todo el oír que le gustaba, porque ahora estaba todo confundido y que quizás él también gustaba de Heero, eso lo tenía vuelto de cabeza

—Duo te estoy hablando —escuchó a su amigo Trowa y volteó

El tiempo pasó volando tanto que no se dio cuenta que en el salón de clases ya estaban otras cinco personas más además de su amigo

—Hola Trowa, buenos días

—Estabas muy distraído, dime qué te sucede

—No dormí bien, es todo —respondió con mentiras — ¿Dónde está Quatre?

—Fue a la oficina del director que lo quería ver

—Ya veo —dijo distraído

Su amigo no era nada tonto y se daba cuenta que algo no estaba bien, así que se sentó en la silla de enfrente y volteó atrás, hablándole bajito

—Algo te sucede, dime qué pasa

—Es verdad, algo pasa, pero no quiero hablar ahorita —respondió un poco triste, su amigo aceptó eso y ya no insistió.

Terminaron las clases a la hora de siempre, como Quatre también se dio cuenta que Duo estaba bien distraído y que ni siquiera quiso salir a almorzar y solo se quedó en el salón, entonces sugirió que fueran los tres a un café y Duo estuvo de acuerdo

—Ahora nos contarás que te pasa —dijo el rubio

—Anoche pasó algo extraño —relató todo serio, Quatre y Trowa compartieron una mirada de unos segundos

—Raro dices ¿en qué sentido?

—Heero me dijo, bueno él

Las pausas que hizo Duo preocuparon a sus amigos porque él solía hablar todo de corrido y sin interrupciones y eso estaba muy raro, por eso estaban ansiosos de oír toda la historia, pero Duo seguía haciendo sus pausas

—Ya dilo —insistió su amigo Quatre

—Heero me dijo que le gusto —relató finalmente, Quatre exclamó sorpresa pero Trowa no

—Le gustas ¿o sea así como novio? ¿o qué le agradas?

—Como pareja, eso entendí

— ¿No será que te confundiste? —cuestionó el rubio —A lo mejor quiso decir que ahora si le caes bien ¿no?

—No Quatre, sé bien lo que oí y con que intensiones lo dijo

—Yo opino lo mismo que opina Duo —interrumpió la charla Trowa —Conozco a Heero porque estamos en el mismo equipo de baloncesto, ya había notado antes eso

—Trowa ¿Por qué no me lo dijiste? —preguntó preocupado el trenzado

—No ibas a creerme, además eres algo homofóbico

—No digas tonterías —reclamó avergonzado Duo

—Entonces sabes de esto ¿verdad? —preguntó agarrando la mano de Quatre

El rubio se puso rojo y todo nervioso porque ellos nunca le habían contado a Duo que estaban saliendo como pareja aunque el trenzado bien que estaba enterado

—Trowa por Dios

—Dinos Duo ¿lo sabes? ¿Qué Quatre y yo somos gays y pareja? —volvió a preguntarle mirándolo bien fijo a los ojos, el trenzado le volteó la cara

—Claro que lo sé ¿crees que soy estúpido? Comencé a sospecharlo hace tiempo y nunca los rechacé ni les dejé de hablar ¿verdad? —de nuevo lo miró —Así que no entiendo porque dices que soy algo homofóbico, no soy nada de eso y lo sabes, no seas injusto conmigo por favor

—Tiene razón Trowa, deja de acusarlo —regañó Quatre quitándole su mano

—Solo deseaba ver tu reacción, no te enojes conmigo —sonrió un poco, de esa forma que a Quatre lo tenía golpeando la banqueta

—Está bien, te perdono —dijo todo indignado —No quiero ser egocéntrico pero estábamos hablando de mí ¿lo recuerdas?

—Bueno ya, dinos que más pasó Duo —habló esta vez Quatre porque su novio se quedó callado

—Estaba borracho cuando me lo dijo, sonaba muy sincero, si no me hubiera ido estoy seguro que habría intentado besarme o algo así —explicó con tristeza, pensando que quizás si quería alguno de sus ricos besos

—Duo pero ¿a ti te gusta? Sé que no eres homofóbico pero ¿te gustan los hombres?

—No lo sé, no sé si me gusta —admitió todo preocupado —Pero no quiero que me guste

—Amigo ¿por qué? —preguntó Duo

—Vivimos como hermanos, no importa si no llevamos la misma sangre —dijo todo angustiado, solo pensar en la cara que pondrían sus padres adoptivos

—No tiene nada de malo —dijo esta vez Trowa

—Es cierto Duo, aunque sus padres es probable que se enojen, sobre todo contigo porque pues, eres el adoptado —explicó el rubio de la forma más sutil que pudo

— ¡Esa es otra cosa! —exclamó el trenzado —Me confesó que él también es adoptado

—No te creo —dijo Quatre bien sorprendido

—Tal vez ese matrimonio no podía tener hijos, pero el caso es que los dos somos adoptados, eso es un poco un alivio, pero aun así, vivimos como hermanos bajo el mismo techo, ellos nos correrán, estoy seguro —dijo todo pesimista

—No lo creo Duo, si ellos los adoptados y los tratan con mucho amor

—Porque quieren dos hijos, no porque quieren a una pareja de amantes viviendo bajo el mismo techo —declaró su forma de pensar y aunque Quatre quería ser optimista eso sonaba muy lógico

—En verdad es un problema —estuvo de acuerdo Trowa

—Mientras tanto no sé que voy hacer ni que va a pasar, evitaré a Heero lo más que pueda, Quatre ¿me puedo ir a dormir contigo unos días?

—Bueno, lo que pasa

Trowa y Quatre se miraron así como algo raro, Duo los observó sin entender porque compartieron esa mirada tan extraña

—Bueno, ya sabes que somos novios, que mas dá —expresó Quatre —Me salí de casa y ahora vivo con Trowa —sonrió todo apenado y un poquito sonrojado

—Ah vaya, eso no lo esperaba —respondió sorprendido

—Como sabes vivo en un pequeño departamento y solo tiene una habitación, en la sala no hay ningún mueble, no puedo darte un buen hospedaje —dijo avergonzado Trowa

—Entonces buscaré la forma de evitarlo en casa —todo resignado suspiró —Ni hablar

Sin nada más que hacer Duo no tuvo de otra que atenerse a las consecuencias de todas sus dudas existenciales recientes.

Después que salieron de ese lugar el trenzado se fue a casa, por fortuna su hermano no estaba ahí y no tuvo que verle la cara con toda y la pena que le generaba recordar lo que sucedió

Subió a su habitación y ahí encontró a Heero dormido sobre su cama, la sangre se le fue hasta los pies porque no se esperaba esa situación, así que exclamó un sonido de asombro que hizo despertar al bello durmiente. Heero se paró alarmado y Duo pensó que se veía muy lindo así todo desorientado pero solo se sonrojó un poco

—Dime ¿Qué estás haciendo en mi cama? —regañó molesto, pero el otro chico solo se sacudió la ropa disimuladamente

—Si pensabas que no estaba subirías a tu habitación, lo hice a propósito —dijo sin vergüenza ni nada, no le dio problema admitirlo, Duo expresó sorpresa, no se la esperaba de nuevo

—Entonces me voy

—No espera —llamó acercándose a él lo agarró del brazo, estaban bien cerca y el trenzado se puso todo nervioso

—Suéltame —movió bruscamente su brazo

Se miraron a los ojos, Duo todo nervioso porque Heero seguía muy cerca de él y ahora lo veía muy guapo, tanto que de la pena se volteó al otro lado

—Creo que anoche hablé de más

—Lo recuerdas todo entonces

—Un poco, sí —admitió

—Entonces tú…

—Es verdad lo que dije, me gustas

—Eso no puede ser —exclamó abrumado, Heero se acercó de nuevo y esta vez no le importó nada, lo agarró de la muñeca y lo jaló para con él, Duo chocó contra su pecho y Heero aprovechó para abrazarlo con fuerza poniéndolo nervioso

—Desde que comenzó el año escolar, me comenzaste a gustar, cuando mis padres dijeron que te adoptarían me sentí muy confundido, pero ahora me siento feliz de que eso sucediera —confesó bien cerca de su oído, a Duo le dieron cosquillas, sintiendo una agradable sensación

— ¿Estás borracho de nuevo? ¿Cómo es que de pronto hablas tanto? —preguntó nervioso, queriendo hacer chistes porque no sabía que decir a sus declaraciones

—Duo, ahora te quiero

Esta vez el trenzado se soltó rápido y fuerte, mirándolo confundido, nunca nadie se le había declarado así, mucho menos un hombre, ahora estaba asustado también y no sabía qué responder o cómo sentirse

—Heero, no es apropiado y por favor. Ya no me digas nada —aterrado por las palpitaciones de su corazón se fue corriendo de ahí sin darle oportunidad de nada a su hermanastro

Oyó a lo lejos la voz que lo llamó pero no hizo caso, salió de la casa y corrió sin rumbo, sintiendo deseos de llorar ¿Qué era esa sensación que de repente le alteraba todos los sentidos?

¿QUÉ LES PARECIÓ ESTA VEZ? ESPERO SUS COMENTARIOS Y SUS SUGERENCIAS, SUS CRÍTICAS, TODO LO QUE QUIERAN DECIRME, SOLO NO SE ACUERDEN DE MI MAMITA SANTA Y TODO ESTÁ BIEN JIJIJI