Estaba demasiado molesta, para mala fortuna de su primo él la estaba pagando por algo que no tenía idea de que era lo que pasaba.

-Hinata-sama, no entiendo que está pasando- Neji trataba de bloquear los ataques que su prima le proporcionaba.

Hinata se detuvo en seco. Tomó una bocanada de aire y se detuvo.

-Lo siento Neji-nisan, solo estoy un poco molesta- Se quitó los guantes de boxeo que tenía puestos y los dejó en el suelo, después ella ocupó un lugar en el mismo. Neji hizo lo mismo. Quería saber que pasaba con su prima.

-¿Qué pasó?- de verdad estaba preocupado por ella, la mayoría del tiempo ella era explosiva y demostraba su inconformidad cada que algo no le parecía.

-Mi entrenador, no para de coquetear con otras mujeres y...

Neji estaba expectante al relato de su prima.

-¿Habla de Sasuke Uchiha?¿El hombre que se la pasa coqueteando con mujeres todo el tiempo? Hinata-Sama, él es un hombre libre de hacer lo que quiera, sin embargo, yo no permitiría que se fijara de usted, ahora si el problema es que no la está entrenado bien supongo que deberia decirle que ya no quiere que la entrene.

-No, Neji, ese no es el caso. Tienes razón, solo debería no prestarle atención.

Neji estaba orgulloso de su prima. Se había convertido en una hermosa mujer, capaz de cualquier cosa, actualmente era la boxeadora del momento, llevaba una racha seguida de victorias.

-El próximo domingo peleare contra Haruno Sakura, dicen que es una gran boxeadora, la verdad estoy un poco nerviosa.

-Está bien. Hace tiempo era la sensación, pero actualmente creo que ha bajado su ranking, de cualquier forma, estaré con usted y estoy seguro de que el Uchiha hará un gran trabajo con su entrenamiento para esta pelea.

-Tiens razón Neji-nisan- se levantó seguida de su primo y lo abrazó.

-Aquí estás Hyuga, deberías estar entrenando y no perdiendo el tiempo en esas cosas- A Neji le pareció un toque de celos en ese reclamo, sin embargo, no le tomo importancia, ya no quería pelear con él sobre el mismo tema, solo salió de ahí después de despedirse de su prima.

-la iré a ver a su pelea- Hinata le sonrió.

-Tu primo pasa mucho tiempo aquí, ¿no tiene nada que hacer?- Hinata ya no estaba molesta con él. Su primo se había encargado de ayudarla.

-Es un gran chico.

-Tsk, si ya ya, comencemos.

--

-Hola gatita, ¿te gustaría salir algún día conmigo?- Sasuke le entregaba una hoja de papel a una chica de cabello rubio.

-Vamos entrenador- le dió un golpe en las costillas.

-tsk, por tu culpa hoy no podré salir- Sasuke seguía a Hinata con una mano en un costado.

-Deberia concentrarse entrenador, no me haga perder el tiempo.

Sasuke mostró su inconformidad.

-¡Hina-chan!- Escucharon unos gritos que llamaban a Hinata detrás de ellos, ambos voltearon al mismo tiempo.

-¡Kiba-kun!¡Shino-kun!- corrió hacía su dirección para abrazarlos.

-Tú puedes Hina, acaba con esa pelirosa teñida.

-Si si si, largo de aquí perro- Sasuke los estaba corriendo, gruñía como si de un perro se tratase.

-Ey, Uchiha-san, ellos son mis amigos y vienen conmigo.

Sasuke sin más acepto, sabía que no iba a ganar contra ella, aunque estaba demasiado molesto, esos chicos siempre le habían parecido molestos.

-Bien Hinata, debes encargarte de hacer el nocaut en cuanto tengas la oportunidad, ella es demasiado resistente.

-¿Cómo la conoces tanto?

-Pues, fue mi ex, así que cuando te digo que es resistente, es porque es resistente.

Hinata sintió que su cuerpo pesaba, algo en su pecho presionaba con fuerza y tenía muchas ganas de llorar.

-ah- fue lo único que salió de sus labios.

Sasuke no sabía lo que eso significaba, pero sentía que algo había pasado.

-Dame cinco- pidió con entusiasmo, Hinata sin ganas chocó sus manos.

-¿pasó algo?- escuchó a Kiba detrás de él.

-N-nada, entraré pronto. Debo darme prisa- Salió del camerino hacía el ring.

-Ella... tartamudeo- Dijeron los amigos de Hinata al unisono.

Sasuke sabía que significaba eso, estaba triste ¿porqué?.

Salió corriendo hacía donde iba Hinata. La alcanzó cuando estaba a punto de salir hacia la multitud.

-Hinata- Sasuke la tomó del brazo, pequeñas lágrimas habían sido apartadas de sus ojos torpemente.

-Estoy bien entrenador.

Jaló su brazo para seguir su camino pero él no la dejó.

-Hinata, tengo algo muy importante que decirte, pero te lo diré cuando ganes esa pelea- Hinata se sorprendió.

-¿Lo hace porque sabe que no ganaré?¿acaso es eso?- Hinata ahora estaba furiosa.

-No me refiero a eso gatita- le sonrió con burla y le dió un beso en la frente.

Escucharon la llamada de Hinata por los parlantes.

Con el corazón latiendo al mil avanzo al centro del ring.

--

Ambas mujeres estaban al límite. Llevaban ocho rounds, todos gritaban sus nombres.

La campana del final del round sonó. Ambas retrocedieron a sus esquinas.

-Bien Hime, a partir de ahora quiero que des tus mejores golpes, ¿recuerdas cuando golpeaste a Neji? haz lo mismo.

-Ella tiene una muy buena contra.

-Si, pero tú tienes una buena defensa y mucho coraje. ¿qué pasó con el carácter que siempre me muestras? es hora de que lo uses en otra persona. vamos, gana ese combate.

Hinata asintió, el round nueve comenzó, primero se dedico a defenderse y parar los ataques, de un momento a otro comenzó a contraatacar, con fuerza, hasta que Sakura cayó.

Todos aplaudían, gritaban su nombre. Sasuke y sus amigos corrieron a abrazarla.

--

La emoción y el festejo habían terminado, Sasuke llevaba a Hinata a su departamento.

-¿Ya me dirás?

-¿A qué te refieres?- Sasuke sabía perfectamente a qué se refería, pero quería hacerla enfadar.

-sobre lo que me dirías si le ganaba, ¡No puedo creer que lo olvidarás! ¡Eres un caso perdido! ¡Siempre confío en ti!¡Esa chic...

No pudo continuar, Sasuke sin previo aviso tomó sus labios.

Hinata estaba sorprendida, Sasuke se apartó cuando ella no correspondió. Al verla a los ojos tomó su rostro.

-Me gustas Hinata.

No podía creer lo que pasaba, su rostro se convirtió en un tomate, por fin pudo reaccionar al ver a Sasuke acercarse nuevamente y tomar sus labios.

-Me gustas Hinata Hyuga- lentamente deslizó un collar en su cuello. Se separó y vió como colgaba en su cuello.

Hinata bajó su vista apreciando el hermoso dije de un abanico rojo con blanco. Fijó su vista en Sasuke y le sonrió sutilmente.

-Eres un caso perdido.

--

Habían pasado dos años desde que habían hecho oficial su relación.

Ambos estaban arriba del ring entrenando los golpes. Hasta que Hinata bajó molesta y Sasuke detrás de ella.

-Supongo que nunca van a dejar de pelear como perros y gatos- Kiba sonreía divertido mientras veía como se alejaban, siendo apoyado por Shino que veía por la misma dirección.