Su hermana ha estado algo distraída, pero por lo demás está normal. Fue a la escuela como siempre esos días, a diferencia del pelinegro que se había recluido en su habitación. Él en serio la está pasando mal y Chiara mentiría si no dijera que eso no la hizo algo feliz, aun si fuera cruel y Alice estuvo de acuerdo al principio, pero ahora estaba molesta porque lo de su hermano parece serio, luce depresivo.
No es que alguna sepa qué hacer además de buscar consejos en Youtube, pues nunca han tenido que lidiar con una ruptura.
Pero aun así, Chiara no se imagina a sí misma pudiendo hablar tranquilamente luego de que rompiera con su novio. No es que ella hubiera tenido novio aún.
Y Felicia estaba acostumbrada a eso de romper, así que por eso debía serle fácil. Nunca la había visto en medio del acto, pero podía imaginarla convenciendo dulcemente a algún chico de que lo mejor es no verse más.
Alice. Tu hermana es una zorra.
Chiara. Por motivos de seguridad cibernética (?), no puedo afirmar eso.
Alice. Oh, vamos. No es como si tuvieras otros hermanos que vayan a hackearte y publicarlo si están molestos.
Chiara. Sí tengo uno. El que es mayor y se mudó por trabajo a Italia.
Alice. Oh, es cierto… Bueno, no lo veo capaz. Ni mis hermanos son tan malos para hacerlo.
Chiara bufa, sintiéndose confusa nuevamente con este tipo de cosas. Ah, sería más fácil si Felicia pudiera concentrarse en un solo chico por algún tiempo. ¡Le evitaría tener este tipo de peleas! ¡Además esta vez con Alice! Tal vez debería sincerarse, solo que cree que sería mejor una charla y no por Whatsapp.
Es domingo y hay cena en familia en la casa de los Kirkland, así que la rubia no puede salir y Chiara no fue aunque estaba invitada porque no creía que fuera correcto, además no quiera aguantar a Scott siendo idiota.
Su hermana por el contrario había comido felizmente en el almuerzo, riendo con sus padres y contando sobre cualquier cosa que no fuera la cita y su novio o ruptura, como si fuera algo sin importancia para siquiera mencionarlo.
.
.
—Te admiro, Chiara. No sé cómo puedes vivir con ella —dice Alice cuando regresan de la escuela. Su hermano tampoco vino hoy con ellos, Dewi se aleja yendo a buscar a algún amigo y Aidan le sigue, pasa por su lado apenas mirando a la Vargas de reojo y saluda por lo bajo antes de irse.
—¿Gracias? —dice en duda, mirando al chico y tratando de restar importancia a lo raro que fue eso. Hizo lo mismo cuando llegaron.
Luego alejándose de Felicia y el grupo de chicas al que ésta se había dirigido, de esas que estaban riéndose y conversando fuerte contando chismes, hablándose bonito a la cara y mal a sus espaldas, lo normal.
La rubia se tomó el autobús con ella, dejando que su hermana hiciera lo propio con sus amigos.
Una vez llegaron a casa y en su habitación, la Kirkland le contó a su mejor amiga qué pasaba con el pelirrojo hermano suyo al que le gustaba.
Chiara maldijo una vez más a su no tan inocente hermanita. También la llamó zorra esta vez.
