My Hero Academia pertenece a Kohei Horikoshi.

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Camino al más grande

26: El Descubrimiento de Black Widow.

Para su Pasantía, Izuku volvería con su Harem MILF… ellas adoraban ver, como él se avergonzada, cuando ellas se autonombraban así y eso las divertía a ellas.

No tanto el que se pusiera incomodo, sino que él admitiera que ellas habían sido sus maestras, madres sustitutas y eran sus amantes.

Para esta ocasión, Momo y Kyōka se unieron a Izuku, en la Oficina de Entrenamiento de Black Widow, pues ambas le contaron sobre cuan mal, estuvo el Trabajo de Campo, que pudo realizar Momo, después del Torneo de la U.A, al haber ido con Uwabami; y Kyōka pensaba, que le sería útil, adquirir aún más técnicas de combate cuerpo a cuerpo.

Tomaron el tren Fukuoka y al llegar a la estación, la pelinegra dotada y la pelivioleta de lóbulos conectores, siguieron a su compañero de cabello verde, hasta la oficina de Black Widow.

—Bienvenido, Izuku-Kun —saludó la secretaria, sorprendiendo un poco a Momo y a Kyōka, pues no era normal, que la secretaria de una oficina de héroes, hablara tan cercanamente de un pasante.

—Me alegro de verte, Hikari-Chan. —saludó el peliverde con una sonrisa Por favor: Avisa que estaremos en el Gimnasio 04.

—En realidad: Natasha-San, te espera en el Gimnasio 10 —dijo Hikari, causándole un escalofrío al peliverde, mientras que la pelinegra y la pelivioleta lo miraban curiosas, levantando una ceja. El misterio alrededor de Arashi "Naritai" Izuku, no hacía más que volverse mayor, mientras eran llevadas, hacia el ascensor. Tanto Momo, como Kyoka, fruncieron el ceño, al ver dos grupos de botones a presionar: Del lado derecho que eran blancos y con números negros y simplemente se alumbrarían al presionar los botones. Del lado izquierdo eran números romanos e Izuku presionó el botón con la X.

— ¿Cómo es que eres tan cercano a estas heroínas, Izuku? —preguntó Momo —Son las Vengadoras, después de todo.

—Yo… carecía de un Kōsei, cuando cumplí cuatro años de edad. —dándose cuenta de lo que estaba por decir, Izuku modificó la historia al máximo —Ellas habían enfrentado a un poderoso enemigo en América y utilizaron un artefacto, para contener el Kōsei de ese sujeto. El ejercito americano, realizó todo tipo de experimentos con el sujeto, en un lugar llamado El Lago Blanco, hasta que ellas lo descubrieron y les arrebataron el resultado de la experimentación: Suero del Súper Soldado, pero este Suero tenía un agregado extra y esto fue lo que les otorgó sus poderes a She-Hulk y a Red She-Hulk, muchísimos años antes de que ellas me encontraran.

— ¿Qué pasó cuando te encontraron? —Preguntó Kyōka, estando prestando atención, a su compañero.

—Ellas me ofrecieron un Súper Poder y resultó ser que el Suero, necesitaba de un componente codificado naturalmente, dentro de mi ADN y esto es el modo Naratai: Asalto y Salvaje, mientras que potenció el fuego que mi padre poseía biológicamente. —y encendió su mano en llamas blancas, mientras seguía modificando la realidad, en su historia —Mi madre me odiaba, por ser un supuesto Mukōsei, —volvió a decir la verdad, pero en realidad, mi Kōsei era algo tan pequeño, tan… inútil, que creían que era un Mukōsei, incluso si mi radiografía decía lo contrario.

— ¿Cuál era tu Kōsei? —Preguntó Momo interesada, con sus ojos brillando de emoción.

Izuku enseñó una sonrisa, ante la felicidad que embriagaba a su amiga. —Liberar aire caliente desde mis manos. Con el Suero, la transformación me transformó físicamente, también me dio los tentáculos y me otorgó aquel fuego blanco. Mi hermana: Hikari tiene aliento de fuego común y corriente de mi padre y yo… yo solo tenía aquello del aire caliente —se escuchó una campana y las puertas se abrieron, los tres adolescentes caminaron por un pasillo y aunque Kyōka y Momo se veían perdidas, Izuku las guio hasta los vestuarios —primero nos cambiaremos, por nuestros trajes —los tres se encontraron delante de un largo pasillo, por el cual caminaron, hasta encontrarse con los vestidores, uno masculino y uno femenino, separándose por algunos instantes. Al salir, Izuku guio a sus amigas, hasta el campo de entrenamiento, en donde encontraron cientos de maquinas de todo tipo: Desde torretas de flechas, pasando por brazos mecánicos, suelos desde los cuales saldrían cosas como pinchos, un camino en el cual tendrían que arrastrarse por el suelo, en lugar de sortearlo corriendo o saltando lejos...

Black Widow, Red She-Hulk, Invisible Woman y Capitana Marvel, se acercaron a los tres alumnos y les explicaron lo que estarían haciendo: Entrenamiento físico y capacitación de combate, pues las acompañarían a ellas a una gran misión.

Eso emocionó y asustó un poco a Momo y a Kyōka, quienes no estaban acostumbradas y esto casi que parecía ser, alguna clase de institución militar, más que de superhéroes. Pero sentían que no podrían quejarse, debido a que iban a entrenar y a conseguir conocimientos de combate cuerpo a cuerpo. Y podía ser, que en la U.A ellos llegaran a tener aquella Clase de Batalla, con All Might... pero el héroe nunca les enseñó a lanzar golpes o agarrar al enemigo o lo que fuera.

Por lo tanto, Momo y Kyōka, se comprometieron a aprender lo máximo posible de las heroínas.

A decir verdad, Natasha no quería involucrar a ninguno de los tres, en algo tan peligroso, como lo que estaban a punto de hacer. Pero no podía dejare a su novio sin su Trabajo de Campo y ellas eran las mejores para esto.

Buscaría en los Kōseis de las niñas, como auxiliarlas a aumentar su repertorio de combate físico y defensivo. Las involucraría en la misión que todas ellas, tenían por delante, para que aprendieran de ellas, tanto como pudieran. Así era este mundo: Hacía que los adolescentes fueran a academias de heroísmo y luego acababan involucrándose en operaciones militares o policiales.

Entonces, Izuku, Momo y Kyōka… perdón: Naratai, Creati y Earphone Jack, las acompañarían en la próxima misión.

—Comencemos entonces, Nat —pidió Invisible Woman. Los tres adolescentes, recién se daban cuenta, de que las heroínas estaban rodeando una mesa de cristal azul.

La pelirroja asintió y los adolescentes caminaron, hasta una mesa, siguiendo a Black Widow. En la mesa, apareció a modo de holograma tridimensional, un símbolo. —Esto que estamos viendo, es el símbolo de un movimiento sectario, llamado Los Sabuesos. Se han visto involucrados en tráfico de armamento y parece ser, que están armando a sus propias tropas, para algún tipo de guerra urbana. —apareció el rostro de un hombre de cabello largo atado en una cola de caballo, lo más destacable era que le faltaba la piel de la quijada y estaba vestido con una gabardina, camisa por debajo y pantalón —Este ejercito responde ante Takahashi Daiki. Creemos que el puerto del muelle oeste, hace algo más, que solo servir para almacenar armamento, pues se ha visto a muchos soldados Sabuesos, en ese lugar. —se vieron imágenes de una docena de personas con armaduras pesadas y cascos bajo el brazo. Kyōka no lo diría en voz alta, pues sabía que eso solo terminaría con ella, siendo calificada como una mocosa que no entendía la seriedad del asunto… pero ella pensaba… sinceramente, ella pensaba que esto de detener a traficantes de armas y con un ejercito privado, era algo muy interesante. —Iremos allí y desmantelaremos toda la operación: Confiscaremos tanto armamento, munición y armaduras como podamos. Pero lo más importante, será acabar con el grupo y enviar al hospital a tantos como nos sea posible.