Nuestra historia comenzaría mostrándonos una estatua de piedra del Avatar Roku. La cual comenzó a resquebrajarse en la parte del cuello, mientras se oía a una voz gritando detrás de ella.
-¡Muy bien! ¡Creo que ya casi lo tengo, chicos!- Comentó la voz, dando otro golpe tras la estatua, provocando que su seria expresión cambiase a una de sorpresa, mientras que otra enorme grita se formaba a la altura de sus tobillos. -Solo una embestida más, y…- Declaró la voz, poco antes de dar otro golpe que derribaría el cuerpo de la estatua y mandaría la cabeza de esta a volar.
-¡Wu-ju! ¡Les dije que sí podría! ¿¡O no!? ¡Y solo necesite de una mano!- Declaró Toph, con el rostro enrojecido y obvios signos de ebriedad. Mientras que sujetaba una taza de cerámica, a la que no tardó en dar otro sorbo mientras uno de sus acompañantes tomaba la palabra.
-¡Nunca dude de ti, amiga! ¡Por algo eres la mejor Maestra-Tierra que haya existido!- Agregó Sokka, mostrándose en un estado similar al de la muchacha.
-Si…bueno… Yo me conformo con haber sido capaz de salir de ese agujero al que me arrastraron.- Replicó Zuko, al tratar de alejar el polvo que flotaba en el aire tras su intrusión.
-Oye, ¿Cuál es tú problema, amigo? Relájate, ¿Quieres? ¿O acaso olvidas por qué vinimos aquí en primer lugar?- Preguntó de forma despreocupada Sokka, ganándose así una severa mirada por parte del chico de la cicatriz.
-¡Lo que recuerdo es que tú y Toph se emborracharon bebiendo un cóctel que hiciste con Agua de Cactus! ¡Que encontraron unas viejas minas bajo la ciudad, que supuestamente están en desuso! ¡Y que al ir a buscarme a la mitad de la despedida de soltero que mi tío organizó junto a la Orden del Loto Blanco, decidieron secuestrarme para supuestamente "Llevarme a un sitio más divertido"!- Reclamó Zuko, al tiempo que picaba con su dedo índice el pecho de un Sokka que no paraba de mirarlo con ojos confundidos.
-¡En primera! Jugar Pai Sho junto a un grupo de ancianos, no es para nada una despedida de soltero. Y en segunda, todavía estoy ofendido contigo por no haberme dejado ser el que organice esa fiesta en primer lugar.- Replicó Sokka, alzando tres dedos en lugar de dos. Cosa que Zuko no pasaría desapercibido.
-Amigo, estás tan mal que ni siquiera puedes contar correctamente.- Contestó Zuko, consiguiendo así que Sokka se quedase mirando sus dedos con interés. -Pero en fin, ahora que finalmente salimos de ese agujero, pienso salir de aquí y volver a…- Acotó él, al momento de mirar a su alrededor en búsqueda de una salida.
Notando que el sitio que se reveló ante ellos, luego de disiparse todo el polvo, se trataría de un elegante y lujoso baño termal que; si bien parecía estar al aire libre; tenía una enorme puerta que protegía la única entrada y salida del sitio; y numerosas estatuas y plantas a su alrededor.
-Oh…por los… ¡Espíritus! ¿¡T-tienen idea de en donde estamos y de lo que acaban de hacer!?- Preguntó Zuko, mientras que se veía a Toph bastante entretenida con la cabeza de la estatua que yacía en uno de los tantos estanques rellenos de agua caliente.
-Mmm… ¿Invadir un baño de lujo y tirar una estatua del tipo que indirectamente provocó la guerra que Aang termino?- Comentó Sokka, tras reunir toda la concentración que le era posible en aquel estado. Ofreciendo una respuesta que no hizo más que avivar el enfado de Zuko.
-¡Este "Baño de Lujo" y sus aguas son un sitio sagrado para mi Nación, idiota!- Explicó Zuko, al tomar a Sokka de los tirantes de su ropa y empezar a zamarrearlo. Ignorando el hecho de que Toph se acababa de acercar al borde de la bañera para así comprobar su temperatura. -¡Mi tío me hablo de él! ¡Se supone que estás aguas solo deben de ser usadas por las doncellas como una forma de purificación! ¡No es un jodido baño mixto que uno pueda invadir y usar a su antojo!- Continuó explicando el pelinegro, sin conseguir que Sokka reaccionase ante lo que le decía. Ni tampoco cayendo en cuenta del momento en el que Toph comenzó a desnudarse. -¡Y además, se dice que a aquellos que no acaten sus reglas o se atrevan a profanar su santidad, acaban siendo víctimas de toda clase de catástrofes amorosas! ¡Al punto de que luego les resulta imposible…!- Se encontraría diciendo él, poco antes de ser interrumpido por el grito de una Toph que ya estaría dentro de la bañera.
-¿¡Van a venir o qué, señoritas!? ¡El agua se siente genial!- Exclamó Toph. Recostando su espalda contra la pared de la bañera, sonriendo de forma despreocupada y dándole otro sorbo al vaso con Agua de Cactus.
-¡Ya voy, Toph! ¡Solo deja que Zuko termine de darme el tour del sitio!- Gritó Sokka, sacudiendo su mano. Perdiendo el equilibrio y cayendo luego de que Zuko lo soltase, tras ver el sitio en el que la muchacha se hallaría.
-¡Sal de ahí…! ¡AHORA!- Ordenó el pelinegro, mientras corría y se precipitaba velozmente hacia las aguas.
-Ah…Así que quieres jugar a las carreras, ¿Eh?- Preguntó Sokka, permaneciendo recostado contra el suelo, luego de su caída.
-No~- Respondió Toph, sin variar la posición en la que estaba. Con la excepción del par de dedos que alzó. Cosa que provocó que una roca se alzase enfrente de la pierna de Zuko, para así hacerlo trastabillar. -Mejor…- Continuó diciendo, al esperar a que el chico cayese al agua con una sonrisa de oreja a oreja. -Ven conmigo…-
-¡Toph! ¡Te lo advierto…!- Respondió Zuko, tras haberse puesto de pie luego de la caída. Mirando con enfado la expresión inmutable con la que la chica lo desafiaba.
-Bebe un poco de esto y…- Interrumpió la chica, al emplear su Tierra Control para acercar el vaso y que tenía en mano. Forzando a que Zuko bebiese del jugo y se comenzase a notar la manera en que este le comenzó a afectar. Convirtiendo su expresión de enfado en una de alcohólica alegría. -Déjate llevar por una vez en tu vida, ¿Si?- Terminó de decir la muchacha, separando el vaso del rostro de Zuko, tras asegurarse de que este bebiese todo el contenido del mismo.
-¿Emm? ¿Q-qué estaba diciendo? Joder…la cabeza me da vueltas y…tengo tanto calor.- Declaró el pelinegro, con ambas mejillas enrojecidas. -Creo que me quitaré esto un momento y…- Comentó, al desprenderse de la camisa que traía y revelar su fornido pecho.
-Mmm~ ¿Ya ves? ¿No te estás sintiendo mejor y divirtiéndote mucho más ahora?- Cuestionó, a la vez que posaba su mano sobre el torso de Zuko.
-Creo que sí…un poco…- Contestó él, todavía aturdido.
-Pues solo espera, Zuko, porque la fiesta apenas acaba de empezar~- Añadió, acercando sus labios a los del chico. Al tiempo que deslizaba su mano para así bajarle los pantalones.
-Toph…yo…n-no debería…- Trataría de alegar el chico, recuperando un ápice de compostura.
-Shhh…sin peros. Solo concéntrate en lo bien que nos la podríamos pasar. Solos tú, yo y…- Respondió la muchacha, poco antes de ser interrumpida por un grito repentino.
-¡Banzai!- Exclamó Sokka, al arrojarse en forma de bola de cañón. -Hola.- Comentó él, tras ponerse de pie y exhibir su desnudo cuerpo y evidente erección frente al dúo. Provocando una risa por parte de Toph.
-¡Jaja! ¡Y este cabeza de chorlito de aquí, obviamente!- Exclamó ella, al rodear con su brazo el cuello de Sokka y comenzar a besarlo de manera descarada. Pasando por alto el cambio en la mirada de Zuko.
-Diablos. Aun estando ebrio sé lo mal que está esto y los problemas en los que nos podríamos meter, pero…- Musitó en su mente, poco antes de sujetar el rostro de Toph por el mentón. Girando el mismo en su dirección, para así concretar el beso que habían dejado pendiente. Sin esperarse o inmutarse luego de que la muchacha comenzase a compartir con él, parte de la última bocanada de licor que había llegado a beberse antes de la unión de sus labios.
-Entonces… ¿Eso es un "Si"~?- Preguntó ella, más que nada para fastidiar. Ya que; al posar su mano sobre la entrepierna de Zuko en medio del beso y comprobar el estado en el que se encontraba; no tenía duda respecto a la respuesta que este le daría.
-Si…A fin de cuentas, creo que te lo debía una "Experiencia que te cambiase la vida".-
-Por supuesto que si~- Y con eso, ella bajó de súbito la única prenda que cubría al chico, descubriendo su polla.
Acto seguido, la muchacha se pondría de rodillas y; tras asegurarse de sujetar a Sokka con su otra mano; comenzó a mamar y a atender a ambos chicos por igual.
-Hoy les voy a enseñar…Mmm~…lo femenina que…Mmm~ Joder~…puedo llegar a ser~- Musitó, a medida que la mamada a ambos proseguía. Consiguiendo que tanto Sokka como Zuko hiciesen expresiones de placer.
-¡Cielos, amigo! ¡Ohh~! ¡Su boca se siente genial!- Declaró Zuko, tras verse obligado a sujetar de la cabeza a la muchacha, debido al goce que le producía.
-Je. ¿De en serio? Eso tengo que verlo. Es decir, sé lo bocona que ella puede llegar a ser, pero de ahí a que realmente sea como tú dices…- Replicó de manera descarada Sokka, a sabiendas de que eso provocaría a la muchacha.
-¡Oh! ¿¡Con que esas tenemos!? ¿¡Eh!?- Cuestionó en tono desafiante Toph, al separar su boca de la polla de Zuko. A la vez que alzaba una roca en el medio de la bañera, sobre la cual poder recostar de espaldas, abrir ampliamente su boca y terminar su respuesta ante las palabras del chico. -¿Qué tal si te acercas un poco y deja que te enseñe lo "Bocona" que puedo llegar a ser~?-
Y con eso dicho, Sokka no tardó en introducir su pene dentro de la boca de Toph, quedando a merced de la lengua que no paraba de dibujar círculos a su alrededor, o de la ceñida garganta de esta.
Por su parte, tras haber sido hecho a un lado y permanecer con su polla erecta en la mano, Zuko se cuestionó acerca de lo que podría hacer, mientras observaba de reojo el coño humedecido que tenía frente a sí.
-¿Y tú qué esperas, fueguitos? ¿Una invitación acaso?- Preguntó la muchacha, al abrirse de piernas, con tal de incitar al chico. -No se me olvidó que tú eres el invitado de HONOR en esta pequeña fiesta~- Musitó, poco antes de reanudar su mamada hacia Sokka.
-B-bien…ya que insistes…- Tartamudeó Zuko, poco antes de introducir de una sola arremetida todo el largo de su miembro. Intercalando sus arremetidas con las de Sokka, agarrando de los senos a Toph y aumentando poco a poco el ritmo, antes de que finalmente los tres alcanzasen su primer orgasmo de ese día.
-¡Jaja! ¡No está mal, chicos! ¡Nada mal!- Declaró Toph, mientras estiraba su lengua en la dirección de sus ojos, en un intento por recoger los restos de semen adornándole que le habían goteado por ahí. Y sentía como la descarga que Zuko había soltado dentro de sí borboteaba de su feminidad. -Pero espero no ser la única con ganas de continuar~-
…
Saltaríamos a otro cuadro, en el cual ambos chicos se encontrarían a cada lado de la muchacha. Quién permanecía sentada sobre la piedra que le hubo servido a modo de cama y mostraría una sonrisa de oreja a oreja, mientras sujetaba sus pechos y veía la forma en que Sokka y Zuko se turnaban arremeter y así ocupar la parte central de estos.
-¡Ah! ¡Joder, Toph! ¡Tus pechos son…!- Empezaría por decir Sokka, con una expresión de goce absoluto.
-¡S-simplemente geniales!- Terminó de decir Zuko, con un rostro similar, pero distinto al del moreno.
-¡Jeje~! ¡Pues claro! ¡No habrán creído que me quedaría como la "Niña" del grupo por siempre! ¿¡O sí!?- Replicó ella, poco antes de ejercer presión por ambos lados de los senos. Atrapando las pollas de ambos y haciendo que sus cabezas quedasen apresadas en el medio y a escasos centímetros de una boca que Toph abrió, con la idea de recibir la descarga que ambos estaban a punto de soltar. -¿¡O SI, IDIOTAS!?-
…
En una nueva escena, se vería a Toph dándole una mamada a un Zuko que permanecía sentado en el borde de la bañera. A la vez que era tomada por atrás y alzada en el aire por un Sokka que no paraba de follársela por el coño.
-¿Te gusta esto? ¿No es así?- Preguntó el moreno, al elevar su mano en el aire, con la idea de propiciar una nalgada que hizo temblar el voluptuoso trasero de la chica. -Sé te pones aún más apretada cada que alguien se pone rudo contigo, Toph~-
-S-Sokka…tú…eres un idiota~ ¿Lo sabías~?- Contestó ella, de una manera que resultaba poco creíble, debido a la amplia sonrisa que decoraba su rostro.
-Pero parece que tiene razón, ¿O no?- Cuestionó Zuko, aprovechando el hecho de que la muchacha se había incorporado levemente, para así sujetarle uno de sus pechos y decir… -Y sabes, sí quieres, ambos podemos ser incluso más rudos…claro, suponiendo que seas capaz de soportarlo.-
Sin pronunciar otra palabra, pero si dejando escapar un gemido luego de que Zuko le mordiese un pezón, Toph decidió darse media vuelta y abrir el agujero de su trasero ante los ojos del pelinegro.
-Den lo peor de sí entonces…- Declaró, exhibiendo unos signos de vergüenza que no hicieron más que despertar la excitación de un Zuko que prontamente la sujeto de las nalgas e introdujo de súbito su polla.
-¡Oigan! ¡No se olviden que yo todavía sigo aquí! ¿Eh?- Añadió Sokka, al momento de meter su pene dentro del coño de Toph y completar con ello con la que el trio le daría fin a todo.
Limitándose a variar la postura únicamente con detalles como lo serían el mostrar a Sokka chupando los pechos de la chica; Zuko tomando y volteando la cabeza de Toph para que ambos compartiesen un beso apasionado; o el como la muchacha se abrazó al cuello de ambos, luego de que la alzasen en el aire e intercalaran sus arremetidas. Deleitándose con el momento en el cual fue llenada a tope y sentía el calor de ambos cuerpos masculinos presionándose contra su espalda y pecho.
Por un segundo, el trio compartiría una mirada de deseo; indicando que todavía estaban dispuesto a seguir por más tiempo. Más sin embargo, la llegada de un grupo de personas al sitio en el que se hallaban, provocó que aquel bonito momento que compartían fuese interrumpido.
-¿¡QUÉ RAYOS CREEN QUE ESTÁN HACIENDO!?- Gritó de manera fúrica, una voz obviamente femenina.
-¿¡Toph!?- Preguntaría Katara, cubriéndose el rostro con ambas manos.
-¿¡S-Sokka…!?- Añadió Suki, mirando al moreno con decepción y tristeza.
-¡ZUKO! ¿¡SE PUEDE SABER QUÉ MIERDA CREES QUE HACES!?- Terminó de cuestionar Mai, la cual; al igual que el resto de chicas; se encontraba cubierta únicamente por una toalla. Amenazando al trio de amantes por medio de un puño cerrado. Siendo esa escena lo último que se vio, antes de un último y abrupto cambio.
…
Siendo dicho cambio uno que nos llevaría muchos años en el futuro. En donde veríamos a una vieja Toph, narrándole la historia a una Korra que parecía sumamente incomoda.
-Y así fue como tras ello; el compromiso del Señor del Fuego se canceló; Suki y Sokka terminaron; y el uso del Agua de Cactus fue prohibido en 3 de las 4 Naciones. Cosa que me hace pensar que todo ese asunto de "Las Consecuencias" que caería sobre los que profanasen ese sitio, quizás no haya sido la patraña que pensamos que era en aquel momento. Ya que ni Sokka, Zuko o yo fuimos capaces de mantener una pareja estable luego de aquello.- Terminó de decir Toph, mostrándose algo nostálgica, pero no triste del todo. Ya que el recuerdo de ese día acabó por parecerle algo alegre con el pasar del tiempo.
-Que duro, amiga.- Se limitó a responder Korra, mientras que algo de sudor le recorría el rostro, al no saber exactamente qué decir.
Fin