Aquí vengo con la segunda entrega del capítulo. Perdonen el retraso, pero estuve muy ausente antes. Bien, como ya había dicho antes, en el próximo lunes no publicaré más capítulos ya que estaré de vacaciones. Reanudaré los capítulos en el 12 de Abril.

Capítulo 4: La Guerra del Santo Grial

29/03/2021


"¿La Guerra del Santo Grial?" Preguntó Uryū mientras recitaba el título del libro que Urahara les estaban mostrando a sus invitados.

"Así es." Respondió el tendero una vez que sus invitados hayan captado el titular del libro.

Los minutos que pasaron dentro de la sala de la tienda fueron un poco tensos desde que llegaron aquí para buscar información específica sobre el asunto que estaba ocurriendo desde que apareció aquella misteriosa guerrera llamada Mordred y afirmaba que Ichigo había sido elegido para ser su Master por algún motivo que aún no conocía, y esperaba descubrirlo en cuanto llegaran a la tienda de Urahara para pedir respuestas y si era posible, zanjar esto para no verse metido en esto.

Por desgracia, el propio Ichigo no estaba preparado para lo que acababa de escuchar. Lo que había descubierto ahora era que había sido elegido para participar en un ritual conocida como la 'Guerra del Santo Grial', tal como se lo acababan de decir, y no pudo evitar sentir algún tipo de inquietud en las entrañas a saber de qué era probable que participara en otro conflicto como el de hace 17 meses.

"¿Qué diablos es eso?" Preguntó Ichigo tratando de ocultar su nerviosismo.

El tendero guardó un poco de silencio mientras consideraba la pregunta, y trataba de pensar en un modo de explicarlo mejor. Fue solo un instante, que se le ocurrió una forma.

"Decidme, ¿algunos de vosotros sabéis que es un universo paralelo?"

Por supuesto, los 3 adolescentes se encogieron ante la pregunta ya que no entendían a donde quería llegar el ex capitán Shinigami, incluso Mordred parecía bastante confusa por lo que dijo. Por suerte, el Quincy fue rápidamente inteligente para enterarse.

"¿Universo paralelo? ¿Te refieres a realidades alternativas?" Preguntó Ishida en referencia a los planos dimensionales.

"¡Bingo!" Exclamó Kisuke con voz alegre como un marcador de un concurso de preguntas. "Me alegra escuchar a alguien que sepa algo sobre el tema."

Ichigo solo frunció el ceño irritado al oír eso. ¿Qué tenía que ver con esas cosas aburridas de ciencia ficción ahora?

"¿Y eso qué significa?" Preguntó Ichigo tratando de contener la paciencia para aclarar el asunto.

Kisuke solo soltó un suspiro. Esto podría ser un poco difícil.

Enseguida cogió una libreta grande y la abrió revelando solo páginas en blanco. Luego con un bolígrafo, empezó a dibujar algo que los invitados no pudieron ver ya que el tendero tenía la página volteada hacia él. Cuando terminó, dio la vuelta para que sus invitados vieran una línea horizontal en medio dividiendo toda la página. En cada lado hay 2 esferas y dentro de cada una había otras 2 esferas, pero más pequeñas y presumiblemente representan 2 planetas.

"Veréis, existe una teoría conocida como 'multiverso' en la que se hipoteca la existencia de numerosos mundos o universos paralelos, ya sea igual o diferente al nuestro." Empezó Kisuke como un tipo de profesor que enseña a sus alumnos de forma cómica. Sus invitados observaron esto con curiosidad.

"Imaginaos que el universo mismo está dividido en numerosos cuerpos que no tienen absolutamente nada que ver uno con el otro. Hay a veces que uno de los universos que hay sean idénticos entre si a pesar de no ser extensiones." El tendero señaló con el bolígrafo el dibujo del círculo del lado de la izquierda. "Por ejemplo, este círculo representa nuestro mundo, la Tierra que está ubicado en nuestro plano dimensional."

Luego mueve el bolígrafo a la línea en el medio. "Esta línea representa algo así como la frontera que divide ambos planos dimensionales, y pasando al otro lado, está el otro universo." Dijo esa frase cuando movió la punta del bolígrafo al lado derecho del dibujo señalando la esfera grande. "Puede que no tenga que ver con el otro, pero también hay otro planeta Tierra muy similar al nuestro. Las diferencias que puede haber allí pueden ser enormes radicando ya sea época, tiempo y acontecimientos, pero también puede albergar los mismos humanos de nuestro mundo. Sin embargo, también puede que haya ciertos elementos importantes como la ausencia de la Soul Society, Hueco Mundo o nosotros mismos que podríamos no existir en ese universo."

El tendero hizo algo de pausa para dejar que la información se asentara entre sus invitados. Algunos captaron esto con cierto interés, aunque para otros no lo tenían demasiado claro.

"Pues eso, así es como funciona el sistema de los planos dimensionales." Terminó Urahara con una sonrisa sonando como haber finalizado una lección de historia infantil mientras ponía la libreta en el suelo.

"¿Qué tiene que ver con todo esto?" Volvió Ichigo a preguntar aún sin comprender el asunto.

"Pues veras, por lo que he leído en este libro, parece que procede de uno de esos mundos paralelos, incluyendo la guerrera." Añadió Urahara la última frase, señalando con el abanico hacia Mordred.

Todos quedaron muy sorprendidos por esto y voltearon sus cabezas hacia la guerrera que también estaba igualmente sorprendida y confusa.

"¿Qué diablos quieres decir que soy de otro mundo? ¿Te refieres al Trono de los héroes?" Preguntó ella.

"No, me refiero que vienes de otro planeta Tierra, pero diferente, donde se está dando lugar la Guerra del Santo Grial." Respondió Kisuke con un leve brillo en sus ojos.

Ahora el asunto era aún más complicado de entender. ¿Qué demonios significa eso de que viene de otra dimensión diferente donde estaba teniendo lugar una guerra? ¿Qué es eso de la Guerra del Santo Grial? ¿Y qué tenía que ver Ichigo en todo esto? Había muchas preguntas sin contestar.

"Urahara-san, ¿nos podrías explicar más de esto?" Preguntó Uryū con calma, pero intrigado.

"Naturalmente." Respondió el tendero con una sonrisa. "Veréis, en el mundo de donde proviene la guerrera..."

El tendero se detuvo al darse cuenta de que aún no sabía el nombre de la chica caballero, y no siempre podía llamarla Servant.

"Perdona, ¿me puedes decir cómo se llama?" Preguntó Kisuke con una sonrisa nerviosa. Ichigo frunció un poco el ceño antes de responder.

"Se llamaba..." de nuevo, el chico peli naranja trato de memorizar el nombre de la guerrera, aunque el proceso fue un poco lento.

Justo cuando el Servant o sus amigos iban a corregirlo, de repente Ichigo se los adelanta.

"Mordred." Dijo Ichigo finalmente diciendo su nombre correctamente. "Así era como se llamaba."

"Vaya, por fin te acuerdas de mi nombre. Mira que eres lento." Dijo Mordred con sarcasmo en su voz. Por supuesto, aquel tono no le gustó demasiado a Ichigo.

Ichigo gruñó ante el comentario y le lanzó una mirada sucia a la chica caballero, quien esta última chasqueó la lengua.

"Vale, vale, ¿qué tal si dejamos las discusiones durante un rato?" Habló Kisuke de manera diplomática con la esperanza de calmar a los 2. Por suerte, lo hicieron y cada uno se volvieron a sus respectivos puestos como si nada hubiera ocurrido.

"Bueno, por donde iba, ah, sí. Veréis, en el mundo de donde proviene Mordred-san, se está llevando a cabo un ritual místico conocido como la Guerra del Santo Grial, que consiste en un gran duelo entre siete magos hasta que sólo uno de ellos quede en pie para así obtener el tan ansiado premio que da nombre a la competencia, el Santo Grial. Según lo que leí en este libro, el Santo Grial es un artefacto mágico con un poder omnipotente que se dice que cualquier mortal que lo poseyera, tendrá el derecho de formular cualquier deseo que quiera."

Los adolescentes recopilaron la información en sus mentes y enseguida recordaron las palabras que escucharon de Mordred sobre ese Santo Grial.

"Eso fue lo que Mordred nos contó cuando nos explicó sobre cómo fue invocada ya que, según ella, Kurosaki fue aparentemente elegido por ese Santo Grial para ser su Master, ¿no?" Dijo Uryū antes de mirar a la rubia para buscar confirmación en ella.

Mordred captó la indirecta y asintió en respuesta. "Así es. Todo es tal como lo dijo."

"Por supuesto, y ahora si me dejáis continuar, para los que sepan que es el Santo Grial, no me refiero a la copa donde se había derramado la sangre del Mesías. Se trata de un objeto completamente diferente con un gran poder divino capaz de trascender el espacio físico y el tiempo ya sea pasado, presente y futuro, incluso llegando a otros planos dimensionales. Veréis, en nuestro universo no existe tal cosa como el Santo Grial, pero el del otro universo es capaz de extender su influencia hasta aquí, y eso explicaría la presencia de Mordred-san aquí." Explicó Kisuke mientras volvía a señalar a la Servant con su abanico.

Los adolescentes, más Kon, se quedaron perplejos al oír eso, y eso explicaría la razón por la que había aparecido Mordred, aunque no toda. Porque aún le quedaba un detalle importante.

"Entonces, fue ese Santo Grial quien transportó a Mordred a nuestro mundo, ¿verdad?" Preguntó Uryū creyendo que por fin había resuelto el enigma.

"Así es. Como dije antes, el Santo Grial es un artefacto todopoderoso que concede deseos. En teoría, puede ser cualquier cosa, como fama, fortuna, poder e incluso es capaz de resucitar una persona que haya muerto. Por eso 7 magos talentosos participan en esta contienda para reclamarlo y obtener el deseo que tanto ambicionan." Explicó Urahara.

"¿Y eso qué tiene que ver con Mordred? ¿Acaso ella es uno de esos magos?" Preguntó Uryū a continuación.

"No exactamente." Respondió Urahara con cierta seriedad. "Ella no es una maga. Si bien, es cierto que la guerra es una especie de ritual de invocación mística en la que sus participantes; 7 magos se enfrenten entre si hasta que quede uno en pie para que el Grial se manifieste frente a él, pero en realidad, no es necesario que los magos participen directamente en las batallas." Sus ojos ahora quedaron posados sobre Mordred.

"Los verdaderos protagonistas son los llamados Espíritus Heroicos."

"¿Qué son exactamente los Espíritus Heroicos?" Preguntó Ichigo al escuchar el término. A pesar de haberlo escuchado antes en referencia a Mordred, todavía no sabía más detalles de aquello.

El tendero dio una extraña sonrisa antes de empezar. "Los Espíritus Heroicos fueron una vez en vida, gente que habían hecho grandes hazañas y actos heroicos y memorables que quedaron grabados en los anales de la historia, como salvar a su pueblo, o detener una invasión extranjera, y que después de su muerte se convirtieron en objeto de adoración y conocimiento. Estos individuos son figuras legendarias que podrían tratarse de grandes genios militares como Minamoto no Yoshitsune, Oda Nobunaga, Miyamoto Musashi, Sakamoto Ryōma y Hajime Saitō. También pueden ser grandes gobernantes como Minamoto no Yoritomo, Ashikaga Takauji e Ieyasu Tokugawa. Naturalmente, se incluyen a personajes extranjeros como el Kan mongol Genghis Khan, Alejandro Magno, Napoleón Bonaparte, y por último personajes mitológicos y venidos del folclore antiguo como el fundador tradicional de Japón, el emperador Jinmu Tennō, y Hércules de la mitología griega.

Todos estos personajes ya sean ficticios o no, tiempos diferentes, religión, lugares extranjeros o incluso su estatus social, ya sean campesinos, aristócratas o miembros de la realeza, vivieron sus propias vidas y murieron dejando un fuerte legado grabado para siempre."

Los adolescentes absorbieron la información del tendero y estaban realmente interesados por el tema. Ahora sabían que era exactamente Mordred con respecto de ser un Espíritu Heroico; un héroe de leyenda o algo. Sin embargo, para Uryū permaneció escéptico con considerarla una heroína teniendo en cuenta todo lo que sabía de ella y esperaba exponerlo en algún momento.

"Por cierto." Dijo Kisuke mientras volvía su mirada en la Servant rojo con una sonrisa. "Dijiste que tu nombre es Mordred, ¿verdad? Entonces, eso significa que eres el hijo bastardo del Rey Arthur, ¿no es así?"

Mordred frunció el ceño ante la estúpida sonrisa del otro rubio, y aún más por el hecho de que su identidad haya sido expuesta así de simple. El resto se sorprendió por la revelación.

"¿El Rey Arthur?" Preguntó Ichigo recordando el nombre del personaje recién pronunciado. "¿Te refieres a ese rey de Gran Bretaña?"

Los ojos de Mordred se crisparon al escuchar como su Master mencionó el nombre de su 'padre' y su puesto de forma tan casual como si no fuera nada importante. No sabía por qué, pero esto de alguna manera la ofendió bastante y casi tuvo ganas de expresar su indignación sobre él. Sin embargo, no pudo hacerlo cuando escuchó a la otra chica decir una ofensa aún mayor. "¿Quieres decir que eres una princesa?" Preguntó ella mirando a la rubia.

Su respuesta fue recibida de manera directa cuando dicha rubia le lanzó una mirada oscura llena de ira dirigida a la otra chica. Esta última se congeló instantáneamente al verla.

"Oye tú, si vuelves a llamarme 'princesa' en mi presencia, juro que te arrancaré tu cabello a tiras, ¿entendido?" Amenazó ella con un gruñido lleno de malicia. La pobre Orihime se sintió intimidada por esto.

"Ha-hai, gomen'nasai."

Ichigo frunció el ceño intensificando su propia ira. Le daba igual si era un Espíritu Heroico o una princesa, pero tampoco podía permitir que alguien tan vulgar hablara o amenazara de una forma tan brusca a uno de sus amigos, como acababa de hacer.

"Oye, no te permito que hables de esa forma a Inoue. ¡Discúlpate!"

Mordred dirigió una rápida mirada de desdén hacia su Master, pero no dijo nada antes de volver a mirar a la chica que había amenazado antes, para disculparse con ella de mala ganas.

"Lamento por haber dicho eso." Respondió ella, su voz sonando un poco apacible ya no albergando malicia. "En realidad me gusta un poco tu peinado."

Esto sorprendió a la chica peli naranja, quien no esperaba escuchar algo como esto. "¿Q-qué?"

Mordred ladeó un poco la cabeza a un lado para evitar que vieran el pequeño rubor que crecía en sus mejillas.

"Digo que te queda bien el color de tu pelo. Pareces una princesa." Dijo ella en voz baja.

Ahora era el turno de Orihime ruborizarse por el comentario mientras Ichigo, Kon y Uryū solo miraban totalmente atónitos mientras Kisuke levantaba su abanico abierto delante de la cara para ocultar su sonrisa.

Un momento después, Mordred gruñó mentalmente mientras lamentaba haber dicho esto. El silencio duro poco cuando Orihime reacciono de forma exagerada.

"Lo-lo dices en serio? ¿De verdad te gusta mi peinado? Vaya, muchas gracias, Mordred-san." Exclamó ella apresuradamente mientras se rascaba la parte de atrás de la cabeza sin poder contener la vergüenza. "La verdad es que a mí también me gusta mucho tu cabello."

Luego ella se relaja un poco y mira solemnemente a Mordred.

"Perdona por haberte llamado princesa." Dijo ella haciendo que la Servant la mirara un poco. "No quería molestarte, así que perdóname." Ella se inclinó un poco en señal de disculpa.

Mordred consideró esto por un momento.

"Vale, acepto tu disculpa." Dijo ella con un asentimiento. Una vez que las cosas se habían tranquilizado y que ella no estaba prestando atención, Kon se acercó al oído del adolescente peli naranja para expresar su opinión sobre ella.

"Esta tía sí que es bastante marimacho, ¿no crees?" Susurró Kon.

"Ya lo creo." Respondió Ichigo estando de acuerdo.

"Bueno, ya que todo está zanjado, me gustaría proseguir con la explicación." Dijo el tendero, su expresión alegre se volvió un poco seria. "Como decía, los Espíritus Heroicos eran en vida figuras legendarias de cualquier tipo que murieron en cualquier circunstancia dejando un fuerte legado en la historia y sus almas fueron trasladadas al llamado Trono de los Héroes."

"¿Trono de los Héroes?" Preguntó Uryū intrigado.

"Sí, según lo que leí en el libro, el Trono de los Héroes es un lugar que está afuera de cualquier mundo paralelo o línea del tiempo. A diferencia de la Soul Society que es el reino donde emigran todas las almas tras la muerte, y durante un tiempo indefinido, reencarnan en el mundo de los vivos, el Trono de los Héroes, por el contrario, es un reino diferente casi inaccesible para cualquier alma que no sea reconocido como un Espíritu Heroico por lo que esta fuera del ciclo de transmigración de las almas y sus únicos residentes son los Espíritus Heroicos. A diferencia de la Soul Society, el Trono de los Héroes no es un reino o simplemente una sociedad donde todos sus habitantes coexisten, sino más bien una especie de almacén dimensional donde se almacenan las almas de los Espíritus Heroicos por un tiempo indefinido, y también son incapaces de viajar libremente al mundo de los vivos tal como lo hacemos nosotros, a no ser que sean invocados por magos mediante un pacto."

Kisuke se tomó un momento de respiro antes de continuar.

"Ahora os diré una última cosa. Cómo os dije antes, la Guerra del Santo Grial es un ritual de combate que solo puede llevarse a cabo por no más de siete personas, de los cuales todos son magos competentes. Por tanto, el número de Espíritus Heroicos invocados para acompañar a cada uno también se reduce a siete, y dichos espíritus participantes se les autodenominan como Servants y están clasificados en 7 categorías diferentes para determinar su clase y habilidad."

Kisuke abre el libro, pasando de página en página y después de unas hojeadas, se detuvo por la mitad. Luego muestra a los adolescentes una de las páginas con 7 dibujos de personas vistiendo como guerreros, pero teniendo distintos estándares que lo difieren de uno con el otro.

1. Un caballero medieval empuñando una espada.

2. Una mujer arquera sosteniendo un arco y una flecha a punto de disparar.

3. Un hombre del siglo XVI sujetando una lanza.

4. Un hombre montado en un carro sujetando con su mano los rieles y la otro una lanza.

5. Un brujo vestido con una túnica gris sujetando en su mano derecha un libro y en su derecha un bastón.

6. Un hombre con piel blanca, pantalones negros, torso desnudo, porta una máscara de calavera y un par de cuchillos negros.

7. Una feroz criatura parecido a un minotauro.

"Estas son las siete categorías que difieren cada Servant una vez invocados por el Grial." Urahara señala al dibujo del caballero. "A este se le considera la clase Saber, un habilidoso espadachín casi de la misma categoría de los Shinigamis."

Luego señala a la arquera. "Este es la clase Archer, un excepcional arquero, de la misma categoría de los Quincies."

Luego al hombre de la lanza. "Este es Lancer, un habilidoso lancero."

Luego al hombre montado a un carro. "Este es Rider, un guerrero que siempre va a la batalla en un carro tirado por animales."

Ahora al brujo. "Este es Caster, un Servant que se especializa en la magia y otros trucos.

Al hombre con cuchillos. "Assassin, un mercenario asesino."

Finalmente, al minotauro. "Y por último tenemos a Berserker, un guerrero con una fuerza descomunal y una ferocidad en la batalla bastante desenfrenada. Si tuviera que comparar a este guerrero con alguien que conocemos, definitivamente elegiría a Kenpachi Zaraki."

"Como podéis ver, estas son las siete categorías de los Espíritus Heroicos después de ser invocados como Servants y cada uno tiene su propia especialidad y estilo de lucha dependiendo de la clase a la que pertenece. ¿Puedes decirme qué tipo de arma usa Mordred-san?"

"Uh, ella utiliza una gran espada." Respondió Uryū.

"Una gran espada, ¿eh? Eso significa que ella pertenece a la clase Saber, ¿no? Escuché que de entre las siete categorías, la clase Saber es uno de los mejores Servants que se pueden convocar y el más fuerte, supongo."

Ante eso, Mordred no pudo evitar dibujar una gran sonrisa orgullosa y arrogante en su rostro por ser elogiada como una de las guerreras más fuertes entre los Servants.

"Pues claro que soy fuerte." Se jactó así mismo con orgullo. "No me habría convertido en un Espíritu Heroico de no ser por mis increíbles habilidades de combate, y es por esa misma razón que debí haberme convertido en rey."

Su momento de arrogancia terminó cuando un recuerdo desagradable brilló en su mente donde una sola figura ensombrecida se posó de pie con firmeza mirando apáticamente sin mostrar emoción alguna a una rabiosa Mordred. El solo pensamiento de aquel recuerdo le dio ganas de vomitar.

'Arthur.'

Orihime fue la única que noto el extraño cambio de humor de Mordred y no pudo evitar estar preocupada al preguntarse qué era lo que le perturbaba.

"Bueno, supongo que hasta aquí puedo contarte sobre la Guerra del Santo Grial." Dijo Urahara dijo como si estuviera poniendo punto final a la conversación. Pero uno no estaba de acuerdo.

"No tan rápido, Urahara-san." Interrumpió Ichigo de repente mirando al comerciante con un ceño fruncido. "Todavía no me has explicado cómo llegó esta mierda aquí." Exclamó señalando sus Sellos de Comando.

"Oh, cierto. Casi lo olvido." Dijo el tendero antes de tomarse otro sorbo de su té. "Según lo que leí, para garantizar la lealtad del Servant con el mago que lo invocó, se crean sellos mágicos denominados 'Sellos de Comando' que representan la voluntad de un mago pelear y autoridad absoluta sobre un Servant." Explicó Kisuke. "Aquellos magos que participen activamente en la guerra y tengan a su disposición a un Servant se les autodenominan como Master."

"Espera un minuto, así es como Mordred siempre llamaba a Kurosaki de esa forma." Dijo Uryū de repente al recordar las ocasiones en las que la rubia siempre llamaba a Ichigo 'Master', además de recordar también que ella había dicho que habían hecho un pacto por algo que aún no sabían. Y solo podían imaginar de qué se trataba.

El resto también parecía captar lo que estaba pensando el Quincy, y tampoco le gustó, especialmente Ichigo.

Ahora todo parecía cobrar sentido para el adolescente peli naranja desde que toda estar mierda había empezado. Aún recordaba todo lo que Mordred le intentó explicar de que había sido elegido para ser su Master, aunque no le había dado más detalles concretos sobre aquello. No sabía por qué razón y quien lo eligió, pero esperaba que una vez que hubiera pedido explicación al tendero, tal como lo acababa de hacer, también esperaba no involucrarse en cosas extrañas y que todo acabara bien, pero hoy, con todo lo que le habían explicado hasta ahora, parecía que la suerte no estaba de su lado.

"Entonces, ¿quieres decir que Kurosaki fue elegido para participar en esa Guerra del Santo Grial?" Preguntó Uryū, aún confundido por todo esto. "¿Por qué?"

Las miradas de los adolescentes se centraron más en el ex capitán Shinigami para saber la verdad. Por un momento, el tendedero mantuvo sus ojos sombreados por su sombrero con un aire inexpresivo hasta dislumbrarlos y dar conocer por fin su respuesta.

"Me temo que no lo sé."

Como era de esperar, esta simple respuesta fue bien recibida cuando todos pronunciaron un "¿¡Eeeeh!?" colectivo.

"¿¡Cómo que no sabes nada!?" Protestó Ichigo en voz alta creyendo que esto podría ser una broma. "¿¡No dijiste que habías encontrado toda la información en ese maldito libro!?"

"Tranquilízate, Kurosaki-san." Calmó Kisuke al adolescente alterado sin molestarse por su reacción. "Si bien, es cierto que he visto mucha información en este libro, pero todavía no he terminado." Dijo la última frase mientras seguía mirando el libro que aún mostraba las páginas de cada Servant. "Pero por lo que se, es que existen dos maneras para que uno se convierta en Master." Ichigo y Mordred lo miraron con atención.

"La primera opción es que técnicamente el usuario deba ser un mago experimentado y deba haber recibido los sellos de parte de algún familiar. La segunda opción sería que los sellos se le apareciera de manera "milagrosa" por el propio Grial, quien también puede enviarte un Servant sin la necesidad de que tú lo invoques. En otras palabras, fuiste elegido por el propio Santo Grial para que participes en la guerra junto a tu Servant."

Y eso era lo último que Ichigo tenía que escuchar ahora sobre esta mierda.

"¡Espera, espera, espera!" Gritó el ex Sustituto como se levantaba parcialmente de su asiento con la ayuda de sus manos como soporte, y haciendo que Kon se cayera del hombro de Ichigo al suelo. "¿¡Qué demonios quieres decir que fui elegido para participar en una guerra!?"

Habían pasado 17 meses desde que había ganado la Guerra de Invierno, y desde entonces había tratado de recuperar su tiempo perdido con la paz y tranquilidad que había ganado como un ser humano normal desde que perdió sus poderes de Shinigami. Quería seguir con su vida ordinaria por donde lo había dejado antes de conocer a Rukia como ir al instituto con sus amigos, graduarse, ir a la universidad y construir un futuro para él.

De hecho, fueron unos 17 meses tranquilos sin incidentes a pesar de la continua presencia de hollows rondando por la ciudad, pero él había confiado en que sus amigos, quienes aún preservaron sus poderes espirituales, pudieran encargarse de ellos sin problemas, por lo que podía estar tranquilo y seguir adelante. Sin embargo, para su mala suerte, parece que el destino estaba actuando como una perra, y ahora le estaba llamando para que participara en una guerra que ni siquiera conocía ni le interesaba en lo más mínimo.

"¡Tiene que ser una jodida broma!"

"Pues me temo que este no es el caso." Dijo Urahara con seriedad. La seriedad en su voz, así como la falta de su habitual sonrisa molesta, hizo que Ichigo se tomara en serio sus palabras.

"Espera un momento." Dijo la Servant de repente. "Si es verdad eso lo que dices, ¿por qué el Santo Grial no envió a este tarugo a donde se estaba dando la guerra?"

Ichigo gruñó mientras miraba irritado a la rubia por el insulto, pero esta última lo ignoró.

"La verdad es que no lo sé tampoco." Respondió Kisuke de manera apagada.

La Servant gruñó con frustración, y siguió hablando. "Además, ¿por qué a ti te han dado ese libro si se puede saber? No creo que a ti también te hayan elegido como Master, ¿verdad?"

"Claro que no."

"Pero ¿por qué ese Grial eligió a Kurosaki para participar en esa guerra si no es un mago?" Preguntó Uryū, ya que todavía no veía el sentido en el que el antiguo Sustituto vaya a involucrarse en otra guerra así de repente.

"Me temo que no tengo las respuestas a eso, pero es un hecho irrefutable que Kurosaki-san vaya a participar."

Ichigo gruñó una vez más. Se estaba hartando más de esta mierda. "¡Y una mierda! No voy a entrar en una guerra por una estúpida copa-

No pudo terminar la última frase cuando de repente notó una sensación a ardor extrañamente familiar, y el adolescente se estremeció al ver que provenía de su manga derecha donde estaba sus Sellos de Comando. Ichigo miró dichos sellos y sus ojos se ampliaron de sorpresa al ver que ahora estaban brillando de manera fluorescente, casi como la primera vez que apareció. Sus amigos también se percataron de esto y estuvieron desconcertados.

"¿Qué demonios?" Gritó Kon sorprendido.

De repente, como si la mano de Ichigo hubiera cobrado voluntad propia, se elevó al aire sin el consentimiento del musculo de Ichigo.

"¡Kurosaki-kun!" Gritó Orihime preocupada.

"¿Qué estás haciendo?" Preguntó Uryū pensando que ese movimiento lo había hecho Ichigo.

"No soy yo." Dijo Ichigo casi en pánico sin comprender a que vino aquel movimiento involuntario. Podía sentir que algo manipulaba sus músculos como una marioneta.

Kisuke miraba esto con cierto asombro y tenía una ligera sospecha de lo que pasaba. No pudo pensar más cuando notó otro pequeño resplandor, solo que esta vez provenía de una de las páginas del libro. Uryū también notó esto, pero estaba más concentrado en Ichigo que en cualquier otra cosa.

Con curiosidad, el tendero saltó unas cuantas paginas hasta dar con la fuente del resplandor y en ellas ve un gran número de letras luminosas formando un texto. Kisuke lee atentamente el mensaje y sus ojos se estrecharon.

Fue entonces que, del centro de los sellos, salió disparado un delgado haz de luz carmesí parecido a un cero en miniatura que parecía que iba a chocar con la pared de la habitación, pero de pronto se detuvo bruscamente a mitad de camino como si hubiera impactado contra algo invisible.

Los amigos de Ichigo incluyendo la Servant se levantaron de sus asientos observando en shock el extraño suceso, mientras Kon logro subirse al hombro de Ichigo inmediatamente. De repente la punta del extraño haz congelado en el aire se condensó formando una especie de masa brillante parecido a un vórtice cuyo tamaño era comparable a la de la habitación. Todos quedaron conmocionados por esto.

"¿¡Q-qué demonios es esto!?" Preguntó Uryū totalmente perplejo al ver la masa.

Kisuke solo pudo observar esto con una mezcla de confusión y curiosidad. Desde su punto de vista, parecía que este fenómeno era una especie de portal dimensional debido a la profundidad que tenía en el centro como si fuera una especie de túnel. No se parecía demasiado al Senkaimon, aunque si un poco a una Garganta, pero él sabía que tampoco se trataba de lo último. De repente algo empujó sus brazos hacia adelante, al centro de la tormenta, y vio para su sorpresa de que se trataba del libro.

Al mismo tiempo, el brazo alzado de Ichigo cambio de dirección y ahora se movía hacia el extraño agujero como si una fuerza invisible lo estuviera arrastrando hacia allí. Ichigo trató desesperadamente de apartarlo, pero por más que lo intentara no pudo ya que parecía que la gravedad era demasiado fuerte por lo que se vio incapaz de cambiar de trayectoria y apartarse a un lado.

"¿¡Qué demonios está pasando!?" Gritó Ichigo en pánico. Él trato de luchar duro, pero perdió la batalla y casi se tropieza, pero continuó aguantando.

Incluso a pesar de no saber lo que estaba pasando, Uryū y Orihime fueron en su ayuda, cada uno agarrando al otro adolescente por un lado de la espalda y tirarlo hacia atrás. Justo cuando Mordred iba a ayudarlos, de repente sintió como sus propias piernas y su cuerpo lo traicionaban y se viera arrastrada hacia el portal.

Inmediatamente descubrió por qué.

'¿Esto es cosa del Grial?'

"¿Qué es lo que está pasando?" Preguntó Uryū en pánico. "¡Urahara-san!"

El tendero no parecía reaccionar ante el grito del Quincy y miraba extrañamente tranquilo para confusión de Uryū y Orihime, quienes voltearon sus cabezas para mirarlo.

En ese momento llega Tessai a la habitación y se queda congelado por lo que estaba viendo. "¡Tenchō!" Justo cuando iba a socorrerlo, de pronto fue detenido por el simple gesto de mano del propio tendero como si dijera "No te acerques."

"No des ningún paso más." Advirtió Kisuke de una manera extrañamente tranquila a pesar de la situación. Ichigo no pudo entender su comportamiento.

"¿¡Se puede saber qué estás diciendo!?" Preguntó Ichigo medio mirando al tendero con rabia mientras su cuerpo seguía siendo arrastrado lentamente. "¡Haz algo, joder!"

El tendero no dijo e hizo nada, lo que agravó más el temperamento del adolescente. Justo cuando iba a gritarle algo, de repente sintió como otra fuerza más grande forzara a Ichigo a despegarse del suelo y arrastrarlo hacia el portal como si fuera un agujero negro. Uryū y Orihime quienes aún se aferraban a cada hombro de Ichigo para intentar mantenerlo, también se vieron arrastrados hacia el portal. Mordred también trató de resistir, pero ella también se vio arrastrada.

Solo fue en menos de unos instantes que finalmente que los pies de Ichigo se despegaron del suelo y fue inmediatamente arrastrado por aire junto a Kon (aún pegado en el hombro) Uryū y Orihime hacia el portal como si fueran absorbidos por un aspirador gigante. Al mismo tiempo, Mordred también cedió ante la presión y se dejó arrastrar hacia adentro. Por último, fue seguido por Kisuke, quien cedió voluntariamente y se dejó arrastrar sin problemas hacia el portal.

Tessai miró totalmente conmocionado por lo que vio, y desobedeciendo las palabras del gerente, fue inmediatamente en su ayuda. Sin embargo, fue demasiado tarde cuando el portal absorbió a Kisuke y luego desapareció sin dejar rastro y todo volvió a la normalidad. El hombre gigante solo podía contemplar con impotencia y confusión lo que había pasado preguntándose que había pasado y a donde se fueron todos.


Dentro del túnel dimensional, Ichigo y sus amigos aún seguían siendo arrastrados por la fuerza sin control como si estuvieran dentro de un gran huracán gritando como locos. Esto era completamente diferente a lo que estaba sucediendo dentro del Senkaimon y la Garganta cuando cruzaron por primera vez aquellos portales en respectivas ocasiones, ya que aquí no había suelo para caminar.

"¿¡Qué diablos es todo esto!?" Exclamó Ichigo en voz alta teniendo el control de su cuerpo a pesar de que aún seguía flotando en medio de todo este caos. Casi le recordaba a cuando atravesaron la membrana del Seireitei con la bala de cañón que fabricaron con el cañón de Kukaku.

"No lo sé, pero parece que estamos siendo arrastrados hacia otro lugar." Dedujo Uryū tratando de mantener la calma y analizar la situación.

"¿¡Y qué va a ser de nosotros!?" Gritó Kon con histeria mientras trataba de 'nadar' de vuelta hacia el hombro de Ichigo.

"¡Oi, Urahara-san!" Gritó Ichigo viendo flotar al tendero a pocos metros de donde estaba él, y por lo que estuvo viendo él, no parecía estar llevándolo nada mal para confusión e irritación del adolescente. "Oi, ¿¡se puede saber qué está pasando!?"

El ex capitán Shinigami solo mantenía una expresión seria antes de hablar. "No os preocupéis. Ya no queda demasiado para que lleguemos."

Aquellas simples palabras no eran suficiente para satisfacer y calmar al ex Sustituto y sus amigos ya que ahora miraron todos con confusión al tendero sin comprender una mierda de lo que hablaba.

"¿Para llegar a dónde?" Preguntó Ichigo con inquietud en su voz. No tardó demasiado en saberlo cuando todos notaron un misterioso resplandor blanquecino al final del umbral y su imagen crecía se ampliaba más a medida que los viajeros se aproximaba más. A ninguno le gustaba lo que estaban viendo.

"¿Qué es eso?" Preguntó Kon con temor.

En cambio, Kisuke mantuvo su expresión estoica y calmada al saber que este era el final del umbral. No falto mucho cuando Ichigo y sus amigos alcanzaron y fueron completamente absorbidos por el resplandor.


En medio de la noche, un gran agujero rojo se abre en medio del aire no muy lejos del suelo, y unos instantes después, vomitó a Ichigo y a los demás haciendo que se estrellaran sobre el suelo antes de cerrarse. La primera en recuperarse fue Orihime quien miro a su alrededor para saber el estado de todos. Todos se encontraban en una posición bastante incómoda cuando aterrizaron. Por algún milagro, Mordred se las arregló para aterrizar sobre sus pies y actuar como si nada hubiera ocurrido. El cuerpo de peluche de Kon estaba extendido sobre el suelo. Uryū tenía la cara plantada sobre el suelo, lo que resulto en que su trasero sobresaliera en el aire. Kisuke, de alguna manera, se quedó sentado en el suelo, pero no parecía afectarle la caída sobre su trasero, más bien en la cabeza. Notó que le faltaba el sombrero en la cabeza y tras una rápida inspección en el suelo, lo encontró y se lo volvió a poner sobre la cabeza.

En cuanto a Ichigo, bueno, Ichigo había aterrizado de espaldas en una posición intermedia con las piernas al lado de la cabeza. Irónicamente, la posición en que se encontraba era la misma cuando llegaron al Rukongai por primera vez cuando atravesaron el Dangai.

Kon fue el siguiente en recuperarse y no le dolía nada. Debería estar agradecido de que este cuerpo de peluche no tuviera huesos.

El Quincy fue el siguiente. "Mierda, que dolor." Se quejó Uryū mientras trataba de levantarse del suelo frotándose una parte de la cara con una mano. "Esto me recuerda cuando viajamos por primera vez a la Soul Society hace tiempo."

Ichigo levantó las piernas, colocándolas en una posición normal antes de incorporarse vagamente de pie con una mano sobre la parte posterior de la cabeza un poco dolorido. Cuando quiso darse cuenta, sus ojos se agradaron como platos. Él no era el único.

Uryū y Kisuke miraron con total seriedad al igual que Mordred. Orihime solo observó con una mezcla de confusión y temor, y en cuanto Kon solo confusión. Todos miraron el nuevo ambiente a su alrededor y ninguno podían interpretar lo que estaban observando.

Se suponía que hace unos instantes antes de que ocurriera el incidente, estaban dentro de una sala de la Tienda de Urahara, pero ahora, tras aquel extraño fenómeno que los absorbió y les dio un paseo caótico, ahora se encontraban al aire libre y en plena noche, a pesar de que solo quedaban unas horas para el atardecer.

Mirando a su alrededor, se encontraban en medio de lo que parecía un parque completamente vació siendo iluminado por algunas farolas. Trataron de identificar la ubicación en la que estaban incluyendo las casas y los edificios que se veían a la lejanía, pero sus memorias no pudieron procesar muy bien lo que estaban contemplando.

"¿Dónde estamos?" Fue Uryū el primero en preguntar.

"No me suena haber estado en este sitio antes." Dijo Orihime en voz baja un poco preocupada.

Kisuke también estaba en un extraño estado de confusión al analizar el ambiente a su alrededor. Estando 100 años exiliado en Karakura, le había dado una gran ventaja al ex capitán de reconocer cada parte de la ciudad como si fuera la palma de su mano, pero ahora que tenía sus ojos enfocados a su alrededor, su memoria no podía hacer mucho para reconocer el lugar.

"No creo que estemos en Karakura, ¿verdad?" Dijo Uryū llegando a la conclusión de que era probable que no estuvieran en el mismo lugar de antes.

Sabía que tenía razón. El hecho de ser absorbidos por una especie de portal parecido al Senkaimon o la Garganta, que ambos son 2 portales que conducían a la Sociedad de Almas y al Hueco Mundo respectivamente, 2 dimensiones opuestas, era lógico pensar que ya no estuvieran en Karakura, o quizás en el mundo en general.

"¿Qué?" Preguntó Ichigo mirando a Uryū confusamente. "¿Qué quieres decir exactamente?"

"Ishida-san." Urahara habló con un tono serio llamando la atención de los adolescentes quienes de inmediato voltearon hacia él. "¿Te importaría sacar tu móvil y poner Google Maps?"

Por un momento el Quincy miro al ex capitán Shinigami confundido sin entender porque quería revisar el mapa, pero de inmediato se dio cuenta de que era vital para saber su ubicación exacta. Sin hacer preguntas, Uryū saco su móvil del bolsillo y reviso su Google para seleccionar el modo 'Google Maps'. Fue entonces que sus ojos se abrieron con total perplejidad.

"¿Ishida-kun?" Preguntó Orihime preocupada.

"¿Qué ocurre?" Fue el siguiente Ichigo en preguntar al ver el estado sorprendido de su amigo.

El Quincy no dijo nada mientras sus ojos aún estaban pegados a la pequeña pantalla de su móvil observando el mapa que indicaba su actual ubicación. Parpadeo varias veces para comprobar si estaba leyendo mal, pero este no era el caso. Luego trato de verificar si hubo un error en el mapa, y no encontró ninguno.

"Oye, ¿qué pasa?" Preguntó Mordred uniéndose al grupo y ver lo que le preocupaba al Quincy.

"¿Ves algo que está fuera de lugar?" Preguntó Urahara acercándose un poco al chico con anteojos. Al escuchar eso, Uryū se volvió hacia los demás quienes aún tenían sus miradas fijas en él para saber que era lo que le perturbaba. Se aclaro la garganta antes de responder.

"No tengo idea."

"Qué quieres decir exactamente?" Preguntó Ichigo sin comprender la respuesta de Ishida.

"Todavía no estoy seguro. Lo único que sé es que no estamos en Karakura, y parece que estamos en una ciudad muy distinta llamada Fuyuki."

"¿Fuyuki?" Preguntó Orihime confundida.

"Sí, mirad." Indicó Ishida como mostraba a todos la pantalla de su móvil. Vieron en medio del mapa GPS el punto rojo que señalaba la ubicación del móvil de Uryū. Arriba había una nota que ponía «冬木市» (Ciudad Fuyuki) haciendo que los ojos de Ichigo, Orihime y Kon (este último subido al hombro de Ichigo) también parpadearan confusos para comprobar si estaban viendo bien.

"¿Estás seguro de que no se habrá estropeado?" Preguntó Ichigo confusamente.

"No lo creo." Respondió Ishida a cambio.

"¿Y dónde está exactamente Fuyuki?" Preguntó Orihime para saber más acerca de su ubicación exacta o si estaba demasiado lejos de Karakura.

Tomándose la idea, Uryū volvió a comprobar su Google Map y después de unos instantes, dio a conocer su respuesta.

"Parece que estamos en Kyūshū."

Los 2 no pudieron evitar jadear con sorpresa. Se suponía que Karakura se encontraba al oeste de Tokio, mientras que Fuyuki, ubicado según el Quincy a 887 kilómetros al sur, por lo que hubiera sido completamente imposible llegar hasta aquí en un instante.

"¿Eso queda lejos?" Preguntó Kon sin comprender la ubicación exacta de cada pueblo. Ninguno le respondió ya que tuvieron prioridades más importantes.

"¿Estás seguro de eso?" Preguntó Ichigo con incredulidad.

"¿Qué significa eso exactamente?" Preguntó Mordred aún sin entender. "¿Dónde diablos estamos?"

"Chicos." Habló Urahara haciendo que todos lo miraran de nuevo. "Creo que se exactamente dónde estamos." Esto hizo que Ichigo y los demás tomaran más atención. "No sé si os habéis dado cuenta, pero aquel vórtice que nos absorbió era un portal dimensional como el Senkaimon o la Garganta que nos llevó a un lugar diferente."

"Sí, ya sabemos eso." Interrumpió Ichigo queriendo saltarse esa parte e ir directamente al grano. "¿A dónde nos han llevado?"

En eso, Urahara volvió su atención a Ishida de nuevo.

"Ishida-san, ¿puedes buscar allí la ubicación de Karakura?"

De nuevo, Uryū parpadeó confuso por la extraño solicitud del ex capitán Shinigami, pero no hizo falta preguntar porque cuando decidió hacer lo que le pidió al tener un extraño presentimiento sobre esto. Poniendo el nombre de su pueblo natal en la barra de buscar de Google Maps y presionando un botón para iniciar la búsqueda, Uryū espero unos instantes para ver los resultados.

No tardó demasiado cuando sus ojos parpadearon con evidente confusión y perplejidad acompañado con un pequeño gemido.

"¿Qué pasa ahora?" Preguntó Ichigo de nuevo intrigado.

"No está..." Respondió el Quincy repentinamente con conmoción en su voz. Aquello alerto a sus amigos.

"¿Cómo qué no está? ¿Qué quieres decir?" Preguntó Ichigo acercándose hacia el Quincy y mirar los resultados él mismo. Orihime también se une, y los 2 se ponen en cada lado de Uryū para ver mejor. Lo que observaron los dejaron también perplejos y confusos.

Encima de la pequeña pantalla estaba la barra donde estaba escrita el nombre de Karakura en kanji, sin embargo, su verdadera atención se fijó en la barra de abajo que ponía tan solo "場所不明" (Ubicación desconocida) y nada más.

Todo esto era bastante extraño.

"¿Qué significa esto?" Preguntó Ichigo confuso y a la vez inquieto. "¿De verdad tu móvil no se habrá estropeado o algo?"

Eso era lo que el Quincy quería pensar. Estaba seguro de haber escrito muy bien el nombre de Karakura perfectamente, y no debería haber ningún error en reconocer el lugar. Cierto que Karakura no es un sitio muy bien conocido, pero tampoco significaba que era un lugar tan remoto o imaginario, por lo que debería al menos aparecer en el Google Maps sin problemas.

Decidiendo intentar encontrar Karakura con otro medio, Uryū decidió poner la opción "Tokio occidental" donde se suponía que debería estar Karakura, y rápidamente empezó a buscarlo entre los municipios que había. La búsqueda termino en un instante sin encontrar tan siquiera con lo que buscaba.

"No lo entiendo. Es como si no existiera..."

"¿Qué quieres decir, Ishinda-kun?" Preguntó preocupada Orihime.

"Eso, ¿el qué no existe?" Cuestiono Kon con inquietud.

"Oi, oi, ¿podéis decirme cuál es el problema?" Preguntó Mordred casi enojada ya que ella era la única que no entendía la situación y quería respuestas. Ninguno de los 3 querían ayudarla ya que tampoco sabían lo que estaba pasando.

Fue en ese momento que Uryū miró al comerciante.

"Urahara-san, por favor explícanos esto." Rogó Uryū con la esperanza de encontrar una respuesta para esto. Los demás también miraron al Shinigami rubio de la misma manera.

Kisuke se quedó callado durante un momento antes de volver a hablar.

"¿Recordáis aquella conversación que tuve antes de contarles sobre la Guerra del Santo Grial?" Como era de esperar, algunos lo miraron extrañados sobre la pregunta, pero uno con una mente tan veloz fue el primero en enterarse.

"¿Te refieres a eso sobre los universos paralelos?" Preguntó Uryū recordando la conversación anterior que tuvieron.

"Sí, recordad que hay una infinidad de universos alternativos casi idénticos al nuestro salvo por varios detalles tanto elementales como históricas, y el hecho de que Karakura no existe aquí es prueba de ello."

No le hizo falta esperar unos segundos al primer clasificado de entre los 20 mejores estudiantes de Karakura en entender a lo que el viejo comerciante se refería cuando sus ojos se abrieron como platos en puro shock. El hecho de haber viajado por una especie de portal dimensional ya era bastante obvio.

"¡No puede ser! No estarás diciendo que hemos viajado a otra dimensión, ¿verdad?" Preguntó Uryū casi en pánico. El resto tomaron nota de las palabras del Quincy y ellos tampoco parecían gustarles por donde iban.

"Me temo que sí." Urahara se volvió para mirarlos directamente con una sonrisa en la cara.

Y así se formó un nuevo silencio en mitad de la noche sin que nadie se atreviera a romperlo mientras sus mentes aún trataban de recopilar lo que acababan de escuchar sobre su situación actual y ninguno quería creerlo. Solo después de 2 minutos, el ex Sustituto fue el primero en romperlo.

"¿¡Qué demonios significa eso que estamos en otra dimensión!?" Estalló Ichigo alterado por la situación.

"Pues es tal como lo oyes. Fuimos enviados por la fuerza hacia este mundo así de repente." Respondió Urahara simplemente.

"¿Pero de qué diablos se trata esto?" Preguntó Mordred mirando molesta al tendedero nada contenta por su nueva situación. "¿A dónde he ido a parar ahora?"

Kisuke solo dio un suspiro cansado. Estaba claro que ella era igual de impaciente que Kurosaki.

"Pues a tu mundo." Con esas palabras, la expresión rabiosa de la Servant disminuyó ligeramente mientras registraba lo que acababa de escuchar.

"Estamos precisamente en el mismo lugar donde se está llevando a cabo el ritual de invocación del Santo Grial." Continuó explicando Kisuke llamando la atención de los demás. "Fuyuki es el lugar donde se encuentra oculto el Santo Grial y es donde se va a llevar a cabo las batallas entre los Masters y sus respectivos Servants para completar su invocación."

Esto fue recibido con una sorpresa desagradable por los adolescentes, especialmente por el ex Shinigami. Si viajar a otro mundo donde su pueblo natal no existiera fuera el mayor de sus preocupaciones, ahora estaba en el lugar donde iba a dar lugar aquella absurda contienda, y la verdad es que deseaba no participar en ella.

En cambio, Mordred solo sonreía con satisfacción al escuchar que por fin habían llegado al lugar indicado donde se llevara a cabo la tan ansiada contienda.

"¡Espera, espera, espera!" Volvió gritar Ichigo, aún sin aceptar lo que estaba sucediendo. "¿De verdad dices que estamos en el peor lugar posible? ¿Pero cómo?"

"Por lo visto, el Santo Grial no aprobó tu negación en participar en la guerra, y es por eso que te arrastro aquí por la fuerza abriendo aquel vórtice dimensional que nos absorbió antes." Explicó Urahara haciéndoles recordar a los adolescentes lo que había sucedido antes.

Instintivamente, Ichigo miró su manga derecha para ver el tatuaje que volvió a meterlo en este nuevo lio abriendo aquel portal que los habían succionado antes, solo para ver que ya no brillaba como antes, y solo estaba en su estado normal como si nada hubiera sucedido.

"¿Quieres decir que nos han arrastrado hasta aquí para que participemos en esta guerra?" Preguntó Uryū con perplejidad.

"Más bien, vosotros fuisteis los que decidieron acompañar a Kurosaki-san ya que vosotros os sujetasteis a su hombro, y por eso os visteis arrastrados a esto. El Santo Grial solo quería atraer a Mordred-san y a su Master, vosotros no tenéis nada que ver en esto." Respondió Urahara con un tono de hecho.

Inmediatamente Uryū y Orihime comprendieron su gran error y se lamentaron amargamente haberse acercado a Ichigo solo para traerlos hasta aquí por error.

"¡Aaah! ¿Eso significa que yo tampoco tenía nada que ver con esto?" Grito Kon mortificado dándose cuenta de su error.

"Bueno, ¿y por qué tú también te dejaste arrastrar, eh?" Preguntó Ichigo molesto por esta situación hacia el tendero vestido de verde.

"Sera porque aún sujetaba este libro." Dijo sonriendo mientras indicaba el libro en sus brazos.

"Pues debiste haberlo tirado."

"Ya, pero aun así no hubiera cambiado el hecho de tu y Mordred-san hubierais acabado aquí, en medio de un campo de batalla, y necesitareis mi ayuda para salir vivo de esta y regresar a nuestro mundo." Respondió Urahara viendo la lógica en sus acciones.

"¿Quieres decir que sabes una manera de hacernos regresar a nuestro mundo?" Preguntó Uryū obteniendo algo de esperanza.

El hombre sacó su abanico de su bolsillo y lo agitó cerca de su cara mientras consideraba la pregunta por unos momentos. "Lo siento, pero no puedo hacerlo."

"¿¡Nani!?" Gritó Ichigo, sin gustarle para nada la respuesta. "Pero si eres tú el que sabes de esto, ¿no? Oye, será mejor que no me andes jodiendo las pelotas. No estoy de humor para tus bromas." Ichigo aún seguía mirando con dagas al hombre con sandalias, esperando matarlo en el acto.

Kisuke solo suspiró ante su temperamento. "Entiendo muy bien tu malestar, Kurosaki-san. Pero todavía no se gran cosa sobre esto. Yo solo sé lo que te conté antes, además yo no fui quien te obligo a que participaras en esto, fue el mismo Grial del que estamos hablando."

Ichigo no pudo evitar gruñir con frustración. 17 meses de paz interrumpidos por una estúpida copa.

"¿De qué te quejas tanto?" Preguntó Mordred mirando con molestia hacia Ichigo. "Si tanto no te gusta estar aquí, ¿por qué no le pides al Santo Grial que te envíe devuelta a tu mundo, eh?"

"¡Oh, que buena idea!" Gritó Kisuke de júbilo llamando la atención de los demás. "Tienes razón."

"¿El qué?" Preguntó Ichigo sin entender la idea que tenía ahora el molestoso tendero.

"Puesto que fue el Santo Grial quien nos envió aquí, también puede hacernos regresar. Después de todo, el Grial es capaz de conceder cualquier deseo a la persona quien la encuentre."

"Bien, ¿y dónde podemos encontrar ese Grial?" Cuestionó Ichigo, listo para hacer cualquier cosa para encontrar dicho objeto que los llevó a este lío y también será la solución a sus problemas.

La única respuesta de Urahara fue una sonrisa. "Para que el Santo Grial esté a tu disposición, tendrás que ganártelo participando en la guerra y venciendo a los demás Masters."

Ichigo se congeló ante eso. Desde luego no quería llegar a esto de participar en una guerra y arriesgar su vida o verse obligado a matar a gente que no conocía, pero era probable que no sean tan viles como los Arrancars. No le gustaba demasiada la idea.

"¿Y a que estamos esperando?" Todos voltearon para ver a Mordred aun luciendo con esa sonrisa tan engreída y a diferencia de lo que estaba pensando Ichigo, ella estaba entusiasmada por participar. "Venga, Master. Vamos a darles caza de una vez."

"¡Oye, no me metas en esto!" Replicó Ichigo no compartiendo la misma idea que su Servant.

"¿Qué pasa ahora contigo?" Espetó Mordred hacia su Master. "¿No decías que querías regresar a tu mundo una vez que obtengamos el Santo Grial? Pues esta es la única oportunidad que tienes para hacerlo."

Todavía estaba indeciso de querer hacer esto. Había rogado que esto solo sea un mal sueño, que cuando se despertara, estaría en su habitación sin que nada de esto sucediera. Pero por desgracia, no era así, y esto era tan real como el golpe que se dio cuando aterrizaron aquí.

"¿De verdad no hay nada que podamos hacer?" Preguntó Ishida a Urahara en referencia a que harán Inoue y él ahora que se han visto arrastrados por accidente hacia aquí.

"Me temo que no mucho, pero si queréis ayudar a Kurosaki-san a ganar la guerra, supongo que vosotros también podéis participar, aunque no de manera directa."

"¿Qué quieres decir?" Volvió Uryū a preguntar.

"Todavía no estoy seguro." Dijo con un tono serio. "Todavía quedan varias incógnitas que tengo que resolver, por ejemplo, por lo visto en esta guerra también hay ciertas reglas sobre cómo debe llevarse a cabo con normalidad."

"¿Y qué hacemos mientras tanto?" Preguntó Orihime curiosa de saber cuál sería su siguiente movimiento.

Antes de que Kisuke pudiera decir una palabra, de repente notaron que una de las páginas del libro empezó a brillar de la misma manera de cuando se abrió aquel portal que los absorbió. Los adolescentes casi se asustaron al verlo y se mantuvieron en alerta, mientras el tendedero conservo la calma y abrió de nuevo el libro. Hojeando unas cuantas páginas, encontró la que buscaba y sus ojos escanearon lo que decía.

"¿Qué pasa ahora?" Preguntó Uryū.

"Parece que el Grial nos ha dado un mensaje y quiere que nos dirijamos a una iglesia." Respondió Kisuke mientras seguía leyendo el mensaje.

"¿Una iglesia?" Preguntaron Ichigo y Mordred al unisonó, sin entender que tenía que ver una iglesia en todo esto.

"Sí, por lo visto es un sitio neutral cuyo propietario es el supervisor de la guerra. Creo que merece la pena ir a visitarlo para pedir respuestas." Dijo Kisuke como cerraba el libro y luego se volvió hacia Ishida. "Ishida-san, ¿Te importaría indicarnos si hay una iglesia por aquí cerca con el GPS?"

El Quincy asintió antes de volverse hacia su móvil que aún estaba en modo 'Google Maps' y puso la opción «冬木教会» (Iglesia de Fuyuki). En menos de unos segundos, la información y ubicación aparecieron en el GPS.

"Está a 2 manzanas de aquí hacia el norte. Sera solo unos 8 minutos de paso." Respondió el Quincy mientras analizaba la información.

"Uf, pues hay que darse prisa, chicos." Instó Urahara con un aire de como si se trataba de una excursión divertida. Algo que no había sido apreciado por Ichigo. "Tal vez allí encontramos más información sobre esto."

De mala gana, Ichigo y compañía decidieron obedecer al comerciante y acompañarlo a dicha iglesia con la esperanza de encontrar algo importante. Sin nada más que objetar, nuestros protagonistas empiezan a caminar por primera vez en este mundo alternativo y salieron del parque, según la indicación en que ruta deberían tomar para llegar a dicha iglesia.

Sin el conocimiento de nadie, mientras salían, ninguno se había percatado de que estaban siendo vigilados por una misteriosa sombra escondida en uno de los arbustos.


El antiguo equipo del Shinigami Sustituto (menos Chad) quienes fueron por primera vez a la Sociedad de Almas para rescatar a Rukia, ahora deambulaban por las calles de una ciudad que no conocían muy bien en medio de la oscura noche, y a pesar de que las aceras fueron iluminadas por el resplandor de las farolas, no significaba que fuera seguro. No veían a ninguna persona deambulando por las calles a parte de ellos como si fueran los únicos despiertos aquí. Uryū actuó como guía del grupo mientras seguía inspeccionando su GPS e indicaba la dirección a la que deberían ir hacia su destino según se vayan acercando. Todo estaba muy tranquilo por los alrededores, y eso causo algo de inquietud para algunos.

"Está todo muy tranquilo..." Murmuró Orihime en voz baja estando justo detrás de Ichigo. "¿Creéis que estarán todos dormidos?"

"Pues claro, hoy es medianoche." Respondió Ichigo con un tono de hecho.

"¿Y qué pasa si aparece un hollow?" Preguntó Kon un poco inquieto.

"No creo que hayan hollows aquí." Habló Urahara de una manera despreocupada.

"¿En serio?" Cuestionó Ichigo un poco sorprendido por esto.

"Bueno, todavía no sabemos gran cosa de este mundo, pero no creo que nos encontremos con un hollow." Contestó el tendedero mientras se ajustaba el sombrero en su cabeza y luego se volvió serio. "Daga, eso no significa que lo más probable que nos encontremos con un Servant por ahí."

Esto casi alarmo a Ichigo, su mascota de peluche y a Orihime quienes se preocuparon ante la idea de que uno de esos Servants apareciera en cualquier momento antes de llegar a la iglesia.

"¿Es posible que aparezca uno ahora?" Preguntó Orihime algo temerosa.

"No lo sé, pero según lo que he leído en el libro, en este mismo instante, cada Master aquí en la ciudad ya ha invocado a sus respectivos Servants y están preparados para dar inicio la batalla."

Ichigo gruñó internamente. Eso era lo único que tenía que escuchar ahora que estaban caminando por estas calles que nunca había visto y caminando con el riesgo de que uno de esos Servants se les aparecieran de golpe para atacarlos.

"Je, pues que lo hagan si se atreven." Dijo Mordred con arrogancia mientras chocaba su puño con la palma abierta y apretándola cerrado con una sonrisa. "Veamos si uno de ellos se atreve a enfrentarse al heredero del Rey de los Caballeros."

Ichigo, Kon y Orihime solo miraron a la Servant un poco desconcertados por su actitud además por el título que ella acaba de jactarse a sí misma.

¿Rey de los caballeros? ¿Qué significa eso?

Ninguno de los 3 dijeron o quisieron comentar algo al respecto si no querían ofender a la rubia o posiblemente no quisiera hablar del asunto, y continuaron caminando.

Una vez dejado la conversación a un lado, nuestros protagonistas continuaron caminando por las calles siempre estando alerta de que algo sospechoso se moviera a su alrededor. Por suerte no ocurrió ningún incidente hasta que después de unos minutos más llegaron a su destino en forma de una iglesia de tamaño modesto en la cima de una colina.

"¿Es eso?" Preguntó Ichigo viendo el edificio a tan solo pocos metros de distancia.

"Sí, parece que hemos llegado." Indicó Urahara sonriendo de que hubieran llegado con seguridad. Orihime suspiro aliviada de que no se hubieran cruzado con ningún Servant a la vista, aunque Mordred se sintió un poco frustrada por ese hecho. Además, ¿qué sentido tenía entrar en un sitio religioso en estos momentos?

"Vamos." Indicó Ishida mientras cruzaban una carretera y llegaban al otro lado para entrar adentro del campus que rodeaba el viejo edificio. Una vez dentro, notaron que había un hombre ahí de pie junto a la puerta del edificio. Era un anciano con una larga cabellera canosa, con una constitución bien construida a pesar de tener 80 años y iba vestido de sacerdote, por lo cual Kisuke dedujo que era el propietario del monasterio. El hombre parecía firme como una estatua a pesar de su edad observando el exterior con pinta de estar esperando a alguien, y esos podrían ser ellos.

"¿Quién es ese viejo?" Preguntó Ichigo observando a la persona parada en la puerta.

"De seguro que será el propietario de la iglesia." Respondió Ishida también mirando extrañado al sacerdote.

"También es el supervisor de la guerra." Indicó Urahara también mirando al hombre. "Vamos a hablar con él."

Así, el grupo de Kisuke continuaron caminando de manera cautelosa hacia la entrada del edificio con el sacerdote aún en su lugar y no parecía reaccionar ante su presencia.

"Hola, bonita noche, ¿no?" Saludó Kisuke con una voz jovial y una gran sonrisa, lo que hizo escandalizar un poco a Ichigo y compañía por su estúpida actitud exagerada.

El hombre movió un poco la cabeza antes de fijarse en el tendero. "¿Eres tú el octavo Master?"

Kisuke sacudió un poco la cabeza antes de aclarar sus palabras.

"Oh perdona, no soy la persona que usted busca." Respondió el tendero antes de colocar su mano encima del hombro del adolescente peli naranja desprevenido.

"Este chico es el Master del Servant de la clase Saber, Kurosaki Ichigo."

El sacerdote miró hacia el adolescente por un momento para incomodidad del ex Sustituto y luego dio un gesto de bienvenida.

"Entrad adentro, por favor." Indicó el hombre mientras se hacía a un lado mostrando la puerta abierta y luego gesteo a que entraran. Los adolescentes dudaron un poco ante las intenciones que tenía el extraño sacerdote, pero Kisuke fue el primero en recuperar la compostura y empezó a caminar hacia la entrada. Él hizo un gesto hacia los de atrás, instándolos a que les siguieran, cosa que hicieron.

Kisuke fue el primero en entrar adentro y justo cuando Ichigo iba a ser el siguiente, el viejo sacerdote se interpuso delante de él casi sin avisar.

"Perdona, ¿pero podrías decirme cuál es tu Servant?"

Ichigo se extrañó un poco por la pregunta, pero decidió responder de todas formas.

"Es ella." Hizo un gesto hacia la chica rubia quien tenía los brazos cruzados y un ceño fruncido en la cara. El sacerdote la miró por un momento.

"Ya veo… entonces tendré que pedirte que te quedes aquí afuera sin entrar." Aquella solicitud provocó una sorpresa desagradable por parte de la Servant roja.

"¿Y eso por qué? ¿Acaso tengo pinta de ser un sucio sajón?" Preguntó ella medio ofendida.

"Claro que no. Pero esto es un lugar restringido para los Servants, y es por eso que no se te permite pasar adentro." Habló el sacerdote sin problemas, haciendo que Mordred gruñera.

"Uh, creo que será mejor que te quedes aquí." Dijo Ichigo hacia su Servant entendiendo la situación y no querían causar problemas ahora. Mordred solo soltó otro pequeño gruñido, pero cedió.

"Vale, me quedare aquí cerca." Dijo Mordred como ella se apoyó la espalda sobre una pared del edificio aún con los brazos cruzados. Después de eso, Ichigo se volvió hacia Kon.

"Tú también, Kon."

"¿Qué? ¿Por qué?" Cuestionó Kon sorprendido al escuchar que él también fue excluido del grupo.

"Mira, no sé lo que vamos a hacer ahí adentro, pero no creo que nos convengan que vean a un peluche parlante, ¿entiendes?" Explicó Ichigo haciendo que el animal de peluche parlante gruñera.

"Y me pregunto quién fue el idiota que decidió meterme aquí adentro." Refunfuñó Kon antes de saltar del hombro de Ichigo al suelo. "Vale, me quedare aquí pero no tardes mucho."

"Gracias. Por cierto, ¿te importaría vigilar a Mordred también?" Preguntó Ichigo mientras señalaba a la chica que todavía estaba apoyada contra la pared y que de repente sus ojos se abrieron cuando escuchó eso.

"¿Quieres que vigile a esa tía tan rara?" Kon preguntó señalando a la rubia.

"Sí, avíseme si pasa algo." Dijo Ichigo en respuesta.

Kon no supo qué decir. No le importaría hacer esto si ella fuera una chica hermosa y dulce como Orihime, pero después de ver su actitud tan descarada, impulsiva y en ciertas ocasiones cínica, no quiso estar cerca de ella bajo ninguna circunstancia. Pero, de nuevo, tampoco pensó que ella le haría algo si no interactuaba con ella.

"De acuerdo, lo haré."

"Entonces te dejo aquí." Respondió Ichigo antes de adentrarse dentro del edificio dejando solo al alma modificada y a la Servant fuera.

En cambio, la Servant rojo soltó un resoplido de molestia. ¿Iba a estar bajo vigilancia por un estúpido animal de peluche parlante?

Esto iba a ser una noche larga.


Eso fue todo. ¡Hasta el 12 de Abril!