Bueno, aquí está otro cap. Avanzando poco a poco, espero que les guste lo que se está preparando.

RWBY: ZX Legends

Capítulo 5: Primer día en Atlas

Al día siguiente, Vent se levantó de golpe. Su mente le hizo revivir el momento en que Albert lo mato…

La sensación fantasma del impacto en su pecho, era algo que no se había ido… estaba ahí aún. Es más, jura que tras todo lo que ha pasado… es una añadidura a sus traumas que debe de afrontar día a día.

Miró el reloj que digital que tenía al lado de la cama, eran las 5 de la mañana…

-Que temprano… - Se sobo la cabeza. – Aunque se me fueron las ganas de dormir. Me pregunto si la cafetería está abierta.

-Lo está. Te recomiendo los pancakes. Son muy ricos.

-Ah, gracias Penny. – Vent agradeció a la chica que estaba al lado de… la cama… un minuto… - ¿¡Penny!? ¿¡Qué estás…!? ¿¡Cómo has entrado!?

-Oh. Sólo abrí la puerta con el control maestro. No es tan difícil.

Vent miró a la chica robot con un tic en el ojo. Se nota que ella no conoce de la privacidad. Se sobo los ojos con sus dedos y…

-¿Por qué viniste a mí en vez de ver a Ruby y su equipo…?

-Pues pensaba hacerlo. Pero… cuando cruce está puerta oí quejarte en sueños. – Penny lo miró con tristeza. – Pensé que… tenías una pesadilla.

Vaya que la tuvo. Lo peor, es que… que lo que sueña pasó de verdad. Tiene la cicatriz para demostrarlo. Parece que se acostumbró mucho a dormir con alguien para que las pesadillas no lo ataquen.

Se sobo los ojos. Rayos, el sueño le regreso.

-¿Todo bien? – Penny le preguntó y se oía preocupada. Si algo entiende, es que está chica tenía un corazón de oro… aunque era un robot.

-Algo… malos sueños. Y peor, me regresaron las ganas de dormir. – Vent se sinceró con ella. – Aunque no quita que dormir solo no ayuda.

-Oh. Entonces deja que me quede contigo mientras duermes. – Penny dijo ello con suma inocencia.

Vent de sobo la nuca, su tic nervioso. No quería abusar de la bondad de Penny, pero… no le ve lo malo. Y ella se ofrece. Quedan unas 3 horas para que todo mundo despierte.

Asintió y Penny sonrió muy feliz. Él se acomodó en la cama para volver a dormir, sólo que esta vez ella levantó las sábanas y se acostó a su lado.

Él pasó a verla con una ceja alzada.

-Listo, a dormir. ¿Deseas que te cuente ovejas? Oí que es la mejor manera de conciliar el sueño.

-No… así está bien… - Vent sintió sus ojos cerrarse.

No sabe si es porque alguien estaba a su lado para dormir o era el calor que ella emanaba de su núcleo, pero el suelo regresó y lo atrapó rápido.

Penny se le quedó viendo tras dormirse. Sonrió sin entender porque. Es más, ella alzó una mano… le quitó unos mechones que llevaba en la cara. A la vez que… sentía el tacto de su mano con la piel de él.

Al hacerlo, sintió la diferencia al tacto. Y eso la hizo entender aún con más claridad que ella era diferente a él… a sus amigos. Ella no estaba viva en el estricto sentido de la palabra.

El contacto físico no le daba nada más que una sensación de que tocaba algo, más no calor o frío. Para ella, todo se sentía igual.

Lo sabe, y a veces desearía haber nacido normal. ¿Qué se sentirá al dar un abrazo siendo un ser de carne y hueso?

…

La alarma sonó y Ruby maldijo al padre tiempo de que no la deje descansar como se merece.

Miró de donde venía el sonido endemoniado, sólo para que note que el Scroll que sonaba la alarma, estaba en el escritorio lejos de su cama… demonios.

De mala gana, se levantó de su cama y caminó al escritorio. Presionó el botón que apagó la alarma y…

Miró el lugar donde estaba. Sabe que era una habitación que les habían dado en la Academia de Atlas a ella y su equipo. Así como a los demás. El equipo JNR y Neo dormían en otro igual.

Las camas en la habitación eran cuatro literas empotradas en la pared con una escalera en el medio que permitía el acceso a las dos camas superiores. A lo largo del otro lado de la pared había cuatro pequeños escritorios y sillas para que cada miembro del equipo estudiara o hiciera otros trámites.

Ese era el que se usa para los que son equipos. Para los individuales, sabe que es lo mismo, sólo que más pequeña y con sólo una cama y un escritorio. Esas eran las que sabe que Vent, Pyrrha, Ilia, Óscar y su tío recibieron. ¿Por qué? Porque según Penny, el general desea darle su espacio a cada uno de ellos.

Si bien no era le parecía muy justo eso, ella sabe que lo que pasa es que… siente que lo necesitan. Y ella lo entiende. Son los que han pasado más cosas en todo esto.

Le daba igual. Ella vio a su equipo seguir durmiendo, aún con todo el ruido de la alarma. ¿Fue ella la única que debe de sufrir por ese objeto Maligno?

No. No señor. Para nada. Esto no se quedará así. Tomó su Scroll, buscó un sonido. Sonrió con maldad, a la vez que subía el volumen a su máxima potencia.

Lo extendió hacia esas cuatro, a la vez presionaba el botón para reproducir.

El sonido de una bocina explotó en los tímpanos de las demás miembros del equipo RWBY, siendo Yang la que cayó al suelo tras tremendo susto que se dio.

-Agh… ¿Qué mier…? ¡Ruby!

-Arriba equipo.

Ruby vio que su equipo vestía lo mismo que ella, pijamas que Atlas les había dado. Estos consistían en camisas blancas con un emblema gris de la Academia en el centro, así como pantalones de chándal negros, blancos y grises. No era la epítome de la moda, pero sirve para su propósito.

-Ugh… Ruby. Te mataré….cuando mi cerebro despierte. – Weiss se levantó de mala gana y se sobo los ojos.

-Deja vu… - Fue lo que Blake dijo, a la vez que bajaba de su cama y ayudaba a Yang a pararse. – Al menos hemos dormido bien.

-¿Lo hicimos? – Yang miró a su compañera con una ceja alzada. – no sé ustedes, pero siento que faltó algo.

Las cuatro sabían que era. Pero no lo dirán en voz alta. Es más, puede que les dé vergüenza decirlo.

-… Ya nos acostumbramos a dormir con Vent.

-En el sentido no sexual, cierra la boca Xiao Long. – Weiss calló a la rubia con la mirada, quien alzó las manos en señal de paz. – Pero si. Miren, no soy el tipo de chica que de mimos.

-*Cough* Mentira *Cough*

Yang desvió la mirada ante los ojos asesinos de Weiss. Blake negó con la cabeza y Ruby rio ligeramente.

-Pero es de esperarse. No podemos estar pegadas a él todo el tiempo. O terminaremos siendo dependientes de su persona.

-Weiss dices todo eso para convencerte tú misma. – Blake vio a su amiga y ella no lo negó. – Miren, lo que debemos de hace es simple. Dar el paso siguiente.

Blake recibió una mirada sin entender de sus amigas, quienes no entendieron por unos segundos lo que dijo la Faunus, hasta que…

-¿¡Qué!? – Fue el grito de Ruby y Weiss, que estaban bien rojas.

-Así es… es obvio que no sabemos que nos puede pasar a futuro. Así que… - Blake se mostró apenada. – No sé ustedes, pero quiero aprovechar todo lo que pueda lo que tenemos. Y eso incluye ello.

Mientras que dos estaban bien rojas, Yang pensó lo dicho por su compañera felina. Asintió, ella sabe que sus vidas corren peligro de manera constante.

Y aunque Vent les prometió pelear y volver en cada batalla, ellas también y por ende el anillo de compromiso… no significa que deban de…

-Ok. ¿Cuál va primero?

-¿¡Yang!? – Fue lo que Weiss dijo al no creer lo que oyó.

-No te hagas la pura Weiss. Sabemos que no lo eres…

-¡Cuidado con lo que dices Belladona! ¡o esos librechos tuyos serán una linda fogata!

-¡No te atreverías!

-¡YA! – fue lo que Yang dijo, a la vez que notaba a su hermana ida. Pensativa. ¿Qué estará pensando su hermana menor?

-… Quizás… debamos de hacerlo. – Todas la pasaron a ver como no creyendo lo que acababa de decir. – Miren… Sé que suena algo apresurado, pero hablé con María sobre esto…

-¿Con la vieja? ¿En serio…?

-Da buenos consejo Yang. – Ruby miró molesta a su hermana, a la vez que se empezaba a cambiar. – Y tiene un punto en algo… Vent ya tiene 20 años. Y… creo que es normal que él desee hacer eso con nosotras. Y antes que digas algo Weiss…. – la chica cerró la boca. – Somos sus prometidas, no le veo lo malo… Digo, es natural que a nuestra edad ya… ya saben…

Ver como ella estaba toda roja era gracioso y Yang en otro momento le habría tomado una foto para la posteridad. Pero ahora…

-… Nunca le dimos un regalo de 20 años…

-Yang, esa es la razón más… - Weiss se quedó en silencio… - Rayos. Ya se me viene la idea a la mente y… Blake, cállate.

-No digo nada. – La Faunus ya estaba solo en su ropa interior, buscando su pantalón. – Y yo digo que lo hagamos.

-Me sorprende lo tranquila que estas a esto Blake…

-No lo estoy. – Era verdad, podían ver sus orejas de gato moverse, señal de sus nervios. – Es un paso importante llegar a eso, ya que una vez lo das, no hay vuelta atrás. Por eso siempre lo pensé bien cuando tuve mi relación con Adam. No crean que no me lo pidió…

-… Pero no lo diste…

-Claro que no. – Miró a Weiss con una ligera molestia. – No… no podía. La idea de entregarme al monstruo que se estaba volviendo, me aterraba. Es más, no sé que pasara una vez llegue a eso con Vent… espero no acobardarme.

-…. Hablemos con él. – Fue la idea de Ruby, a la vez que se ponía su caperuza. – Yo digo que hay que ver que dice él. Pero solo si estamos todas decididas a ello…

-Yo lo estoy. – Blake terminó de cambiarse.

-… Ya que. No dejaré que se me adelanten. – Weiss también se mostró lista.

-Je. Saben que yo jamás me doy la vuelta… Pero si es por Vent…. – Yang hizo una broma sexual, dada esa pose y tanto Blake como Weiss se sonrojaron un poco.

Ruby no entendió… Parece que deberá de investigar sobre eso para hacerlo. Solo conoce una pose y duda que sea todo lo que se necesite

El equipo RWBY en su totalidad salió de la habitación en la que estaban para ir a la que Vent ocupaba solo. Ellas sabían que él les había dado el código para que vayan si es que les da las ganas de dormir juntos. Pero como no lo usaron hoy, es que bueno….

Mejor lo usan ahora, ¿no? Ruy introdujo el código y la puerta se abrió. Las 4 vieron que él estaba durmiendo plácidamente en su cama. Se acercaron a verlo y eso hizo que Weiss al ser la última en entrar, cierre la puerta.

-Se ve tan lindo dormido. – Yang sabe que no es de ella decir ello, pero hasta ella tiene un lado femenino. – Se le ve tan pacífico…

-A veces quisiera que tuviera esa expresión todo el rato. – Blake se sinceró con sus amigas en algo que… - A veces, quisiera que no tenga que pelear.

-Pero lo hace. Y es lo que lo hace valiente. – Weiss sonrió con ternura. – Sé que esto será un reto, pero en verdad quiero llegar al final con él… con ustedes.

Ruby sonrió a las palabras de su amiga, el resto de su equipo pensaba lo mismo y ella lo sabe. Se acercó a la cama y tomó la sabana.

-¡Es de día Vent! – Ruby le sacó la sabana de encima, solo que no esperó lo que vio y el resto menos.

Ahí estaba él, dormido… pero tenía a Penny en sus brazos. La chica robot lo estaba abrazando de la misma manera, además que ella parecía más pegada a él.

Las 4 al ver eso, no supieron que pensar. Ruby sintió celos de su amiga, a la vez que sentía que era una linda escena. Aunque…

Vent se empezó a levantar, dado que sentí que le habían quitado su sabana. Abrió los ojos y se vio…

-Buenos días chicas. – Se vio con las caras de sus prometidas, que estaban todas serias. – ¿Pasa algo?

-No lo sé… Dinos tú. – Yang señaló a Penny, haciendo que él la mire y… - Traes a otra chica cuando no estamos nosotras. – Ella parecía apunto de activar su Semblance.

-… Oh no… - Sintió como todo su ser se puso en alerta, al entender que esto significa. – No es lo que parece.

-… Es lo que parece. – Blake mostró sus uñas, que parecían listas para atacar. – Y tienes el descaro de decir que no pasa nada.

-No… Es.. Ahm… Ella es un robot, no es que…

-¿Sabes que existen lugares donde gente usa robots con forma femenina para… sus deseos mundanos? – Ok, esa información no la quería y era perturbador. – Pero veo que eres como ellos. – Weiss alzó su mano para crear un Glyph que mostraba una invocación.

-¡NO! ¡Dejen que les diga que pasó! – Estaba asustado, sabe que desde que se comprometió con ellas, han sido algo celosas, pero esto era el colmo… ¡Es inocente!

En eso, se pudo ver como Penny se despertó y se sobó los ojos. Miró a Vent y él sonrió, ella podrá…

-Oh, amigo Vent. Fue el mejor descanso de mi vida. No pensé que dormir con un hombre fuera tan placentero…

Mal juego de palabras por parte de Penny. Estaba muerto… Alzó la mirada y vio la mirada vacía de todas, pasó a ver la de Ruby, quien le sonreía con pureza. Pero siente la maldad tras esa sonrisa.

-… Ruby…

-Sabes Vent… - La mirada de ella se tornó vacía con esa sonrisa, que le dio más miedo. – Quizás debamos asegurarnos que eso no se vuelva levantar.

…. ¡ESO NO!

El Modelo X que veía todo desde el escritorio del muchacho, solo pudo ver eso con pena. Parece que corre en las venas de la familia que deben de encontrarse con mujeres así. Aunque mejor lo ayuda, quiere ser abuelo…

-Así que… resumiendo… - Weiss estaba cruzada de brazos y piernas en la cama, con el resto de su equipo de pie rodeando a Vent, quien estaba sentado en dogeza frente a ella. – El Modelo X solo dijo que ella te ayudó a dormir, ¿Verdad?

-¡Así es! – Penny alzó la mano con alegría, dado que le había gustado eso. - ¡Se duerme muy bien con alguien a tu lado!

-… Penny, no sabes que lo que dijiste tiene doble sentido… ¿No? – Blake miró a la robot, quien parpadeó con inocencia. - … Búscalo en internet.

Mientras que la robot estaba haciendo su tarea….

-¿¡Por qué no dijiste eso antes!?

-¡Me atacaron antes que pueda explicar las cosas! – Fue la respuesta de Vent a Yang, quien se sonrojo. – Todas.

El equipo RWBY se mostró más que apenado… Quizás si están pecando de celosas. Pero no lo pueden evitar. Saben la condición de Vent y eso es lo que hace que estén alertas. Es más, saben que…

-¿¡EEEEEEEEEEEH!? – EL grito de Penny hizo que todos la vean. La chica estaba echando humo, de manera literal. – Es… Es…. Lo que dije… Es… una invitación al sexo…. ¿No?

Penny miró a sus amigas, quienes desviaron la mirada en señal de que no sabían que decirle. Ella pasó a ver a Vent, quien se mostró apenado… Eso solo hizo que Penny mostrara una emoción que no estaba acostumbrada a sentir… vergüenza.

-¡NOOOOOOOOOOOO! – Salió corriendo de la habitación de Vent, sin rumbo. De seguro su grito despertó a todo el mundo… Ok, eso fue interesante de ver.

-… En mi vida pensé ver a Penny así. – Ruby parpadeó, deseaba ir con su amiga, pero esto tiene prioridad.

-Se nota que esa chica tiene un AI avanzado, similar al de los Reploids del pasado. – Todos pasaron a ver al Modelo X, que flotó para estar al lado de Vent. – Eso es lo que me llama la atención.

-¿En que sentido Modelo X? – Blake sentía que era raro hablarle al Biometal, a pesar de que sabe que los puede oír desde hace un año. - ¿Qué son los Reploids?

-Los Reploids, son la abreviación de Robot Humanoide. Eran las máquinas que los antiguos humanos en Arcadia crearon a la par de los Grimmroids originales. – El Biometal respondió. – Eran capaces de asemejar su procesamiento al de los humanos, podían tener emociones y demás, pero al final eran lógicos… no son como los humanos o los Faunus, que se preocupan mucho en algo a pesar de que pueden ya tener una decisión.

-Es verdad. Es decir, se ve que Penny aun emulando como somos, ella es lógica la mayor parte del tiempo. – Yang ese puso a pensar y… - Pero, ¿No te hace a ti y los otros Megaman también Reploids?

-Zero y yo entrabamos en la misma categoría, dado que el 70% de nosotros era mecanizado. Poco era orgánico. Si, teníamos la necesidad de comer y respirar, hasta las necesidades básicas de ir al baño dado que teníamos esos sistemas en nosotros, pero no éramos Reploids. Solo nos metieron en esa categoría al no saber que éramos.

-Pregunta… ¿Dónde están los otros Megaman? – Ruby preguntó intrigada.

-Axl, el Modelo A, no apareció hasta unos años después. Los Dioses lo crearon para que nos ayude, dado que la guerra que se vivía en ese entonces, creció. Los demás, ellos nacieron años después del fin de la guerra, aunque nos ayudaron a acabar con la que fue la peor de todas. Esa que obligó a los Reploids a dejar de ser creados, así como los Grimmroids.

-¿Hubo una guerra así? - Vent miró a su compañero / padre, con incredulidad. – Pero… Eso significa…

-La humanidad no acabo una vez, sino dos veces. Ustedes, son la tercera generación de humanos que habita este mundo. Más cercanos a los primeros, dado que la segunda generación usaba la magia en su totalidad y olvidaban la tecnología. Los de Arcadia, eran la primera generación… y sus pocos descendientes crearon la segunda, la que ustedes conocen por el relato de Jinn.

Los presentes no supieron que decir, ya sabían que la humanidad había sido… destruida en el pasado. Pero que el Modelo X diga que aun antes de eso, hubo otra generación de humanos…

-¿Eso que nos lleva a entender? ¿Qué compartiremos el destino de…?

-No. – Weiss se detuvo al oír al Biometal. – A diferencia de la primera, que solo dependieron de los robots que crearon para defenderse y de la segunda, que al final se dejó llevar por la codicia, ustedes han mejorado. Pueden pelear por lo que creen, así como que entienden el peso del poder… Yo, siendo alguien que ha visto dos generaciones de humanos, tres con esta, me alegra de ver que han aprendido algo…

-Pero la desunión y desigualdad…

-No es algo que vayan a borrar de la nada. – Blake oyó al Biometal, quien estaba diciendo algo que no esperaron… - Los seres como ustedes, tienen luz y oscuridad, dejando de lado que fueron creados por ambos Dioses. Pero son ustedes son los que deciden que hacen con eso en sus vidas. El camino es solo suyo.

El equipo RWBY pudo sentir el peso de las palabras del Modelo X y… sonrieron.

-… Es bueno poder oírte Modelo X. – Fue lo que Yang dijo con una sonrisa. – Siempre tuve la interrogante de como eras, tras ver como Vent siempre se animaba tras sus charlas.

-La experiencia es el mejor y más cruel maestro. Es más, no pierdan la esperanza. Ustedes son las Elegidas para ser los nuevos Guardianes Elementales. Tengan la cabeza en alto y no desistan.

-Lo haremos Modelo X, gracias. – Ruby le agradeció al Biometal, quien regresó a la casaca de Vent para poder reposar. – Sin duda… ya se ve de donde sacaste ese don con las palabras.

-Él dice que es parte de él y de mi madre… - Vent se puso de pie y… - Oigan, saben que…

-Vent… Lo sentimos. Exageramos…

-Es solo que… nos asusta pensar que… puede que te aburras de nosotras un día.

-Dado que se ve que hay muchos buenos prospectos y…

-… Lamentamos ser así. Es solo que…

-A ver… -Detuvo a Weiss, Blake, Yang y Ruby de seguir. – Creo que… exageramos. Pero creo que las entiendo, yo me pongo igual cuando alguien más las ve de una manera nada sana y… - Vent se rascó la nuca. – Solo hay que confiar más en nosotros y lo que tenemos.

-… Solo no esperemos que dejemos de tener celos si una cualquiera se te acerca. – Yang solo pudo decir ello, a la vez que el resto asentía.

-Jajaja. Hecho. Oigan, ¿Les parece si comemos algo y luego le pedimos a Jinn que nos diga la segunda parte de la historia de X?

-¡Eso si llama mi atención!

-Ruby… No olvides porque estamos aquí. – Blake sacó a la chica de su emoción, solo para que..

-Oh si… - Ruby se aclaró la garganta. – Vent…. Hemos hablado las cuatro y… hemos llegado a una decisión importante para nuestra relación… - el muchacho alzó una ceja, ¿Por qué tanta formalidad? – Ahm… Nosotras… Queremos que… tú… bueno…

Ver como Ruby poco a poco se vuelve una masa roja, era… gracioso. Más si es que… las demás se daban una palmada en la cara.

Weiss tuvo suficiente, tomó el lugar de su amiga y..

-¡Agh, el punto es…! – Ella también se sonrojo… - Queremos tener… sexo contigo.

Vent miró a la chica, luego a las demás que estaban igual de rojas que las otras dos, pero asintieron. Le tomó unos segundos entender que…

-¿¡EH!? ¿¡Quieren que…!? ¿¡AHORA!?

-¡NO! - gritaron las 4, haciendo que él suelte un suspiro.

-Vent… esto es serio… - Blake lo miró con seriedad. – Es en relación a nosotros y que… queremos dar el siguiente paso contigo.

-Y estamos seguras de ello. – Yang prosiguió. – la pregunta es… ¿Lo estás tú? – Tras la pregunta de Yang, miraron a Vent, quien…

Él no era tonto ni nada de eso, sabe que eso es importante. Un gran paso. Y si bien antes le daba miedo darlo, ahora… tenía la seguridad de que quiere darlo con ellas. Tomó aire y…

-… Muy bien. Lo daremos. – el equipo RWBY sonrió con alivio al oír ello. – Pero… Primero hay que acentuarnos bien en lo que estamos haciendo aquí en Atlas. Luego de ello… Pasare un día entero con cada una y…

Las chicas lo entendieron y se sonrojaron. Al menos la idea estaba y él dijo que también desea que… Aunque parece que él desea preparar terreno. Siempre ha sido así.

-… Vent, nosotras… - Weiss se vio interrumpida. Su Scroll… pidió un segundo y al contestar… - ¿Aló…?

-Weiss… deseo hablar contigo, ahora. Ven a mi habitación, te daré el pase de acceso. – Era Winter…

-… ¿Ahora…?

-Ahora.

Weiss no pudo darle la contraria a su hermana. Demonios, y las cosas estaban yendo tan bien.

-… Debo de ver a Winter… Creo que ya sé de que desea hablar. – Weiss se acercó a Vent y le dio un beso rápido en los labios. – Los veo luego para oír el relato de Jinn.

Y así, la chica se fue de la habitación, lista para afrontar a su hermana mayor.

-… Saben, espero que a Weiss le vaya bien y pueda convencer a Winter de que Vent desea lo mejor para ella. – Blake en verdad esperaba eso.

-Al final, es Ice Queen Vs Ice Queen Jr. Pagaría por ver eso.

-… Yang, no…

Ruby regaño a su hermana, a la vez que Vent reía. Parece que las cosas aun no pierden su toque.

Winter Schnee es lo que uno llama, una mujer de las que no dudas, es poder y firmeza. Ella no estaba para aceptar ordenes de nadie, que no sea alguien de su respeto. Y eso incluía a su padre.

Lo que la mujer sabe, es que su hermana menor la quiso imitar en ello. El de alejarse del control del padre de ambas. Y lo hicieron… ella en la milicia y Weiss en lo que estaba haciendo, que no niega sentirse orgullosa por los reportes que Qrow les dio de lo que han afrontado estos meses.

Aunque otra parte la desea encerrar en un lugar para que no esté en peligro. Se sentía egoísta… Dios. Pero era lo que le pasaba como la hermana mayor. Desea lo mejor para su hermana, aunque a veces no lo aparente… la quiere mucho.

Y por eso, cuando oyó que ella estaba metida en… esa relación con Vent Lucilum, es que quiso degollar a ese chico. Pero sabe que no puede, lo vio ayer… es fuerte. Y con lo que vieron, es obvio… nació para ser un arma viva. Pero de manera irónica, es también pacifista.

Ayer pudo atacarla y seguir la pelea, pero decidió decir que mejor se rinda. Le dio la oportunidad y…

-Agh… ¿Cómo alguien tan bueno puede ser tan bueno en la batalla? – Eso no era lógico. Pero ella sentía que la lógica se fue de su vida hace años.

Oyó la puerta tocarse…

-Pase. – La mujer vio la puerta abrirse, mostrando a Weiss cruzándola. – Weiss, buenos días.

-Buenos días Winter. – Weiss vio que… - Oh, desayuno…

En efecto, en la habitación de Winter, que era mucho más grande que la de los estudiantes, dado que ella es de un rango alto, se veía que había una cama que le recordó a la que usaban en casa. Así como mucho más espacio. Y en medio, había una mesa donde estaba el desayuno.

Weiss miró a su hermana, solo vestía un camisón, como diciendo que recién se ha despertado, además de llevar su cabello suelto. Se veía hermosa y Weiss no pudo sentirse algo acomplejada.

Es más, ella misma se veía inferior a Winter en habilidad y físico… Era algo que siempre cargó.

-Ven… quiero hablar. – Weiss hizo caso y se sentó frente a su hermana. – Comamos primero, luego hablamos.

Y así fue, el desayuno era… como Weiss lo recordaba. De clase. Todo era de calidad. Ha pasado meses en la intemperie, que estos lujos ahora si eran lujos… Ya no algo normal para ella.

Bebió de su taza de té y… sonrió. Como le gustaba.

-Dime Weiss… ¿Por qué? – La menor de las dos la miró con duda. - ¿Por qué él…?

-…. Porque lo amo.

Winter se sorprendió al oír ello de la boca de su hermana. Ella en el pasado decía que el amor era una maldición, tras ver como la madre de ambas se… perdió. Ambas jurando jamás amar… porque las mujeres Schnee al amar, lo hacen con todo el corazón. Que eso puede ser fatal si es que… sufren una decepción.

Winter era una mujer que jamás se había enamorado. Ella no había visto en hombre o mujer lo que uno llamaría ese algo, que hace que desee estar con alguien. Pero el ver a su hermana así, la hizo pensar que…

-Weiss, aún eres muy joven para…

-¿Qué de diferencia hay con lo que nuestro padre tenía planeado? Si hubiera regresado tras Vale, me habría casado con uno de los hijos de sus contactos.

No lo puede negar. Ella sabe bien la clase de persona que es su padre. No importa cuánto lo intente negar, no puede obviar eso. Su padre habría hecho eso y más. No sólo ello, la habría tratado peor que una criada de ser posible.

-Weiss, sólo quiero que no sufras. Esa relación que tienes… él con el resto de tu equipo, sólo puede traer cosas malas.

-No es así. Él… él nos ama, lo sé. – Weiss se llevó la mano al pecho. – Y no pienso dejar de lado lo mejor que me ha pasado. Ni aunque tú me lo digas Winter.

Y ahí, es cuando Winter entendió lo mucho que había crecido su hermana menor. Antes le habría consultado que hacer y si ella le decía su opinión, la chica lo seguía al pie de la letra. Ahora ya no…

No pudo evitar dar una sonrisa, a la vez que bebía de su té.

-Me alegra de ver que tú y el resto de tu equipo estén bien. Han crecido por lo que Qrow me ha dicho. – La mujer vio como su hermana se apenó. – Debo de decir, que quizás las cosas sean más fáciles para ustedes.

-Aun así, no estamos al nivel de Vent y los demás.

-Esos tres son un caso aparte. Se ve que sus poderes y habilidades son algo que no puedes medir con los estándares normales. Son… fuera de serie. Hasta para mí.

Weiss se sorprendió. Oír a su hermana decir ello, admitir que hay algo o alguien que no es capaz de superar, era extraño. A la vez que muy…

-Winter, yo… ¿Cómo está mamá…?

-Igual que siempre. - Se oyó el tono de decepción de Winter. – A veces me gustaría darle un golpe para que despabile. Pero ella ya es una mujer adulta y…

-Entiendo. – Weiss se sobo el brazo. – Es sólo que…. Extraño el como era antes. Sus caricias, su tono…

-Lo sé. Yo también. – es más, también ella pensaba que… - Withley está bien, también.

-Ugh… ese chico. ¿Qué dijo de mí?

-Que solo le dejaste el pase libre para poder hacerse él con la herencia de la familia. – Weiss se mostró triste. – No creas en todo lo que te dice. Te aseguro que hay más de lo que él aparenta. Él no es nuestro padre.

Y eso lo quiere creer. Quiere creer que su hermano será mejor que su progenitor. Maldición, le daba algo de rabia no haber podido ser mejor hermana mayor. Pero sabe que quejarse ahora no cambiará nada.

-Yo por mi lado, ya has visto. Nada ha cambiado en estos meses. – Winter dejo en su lugar la taza de té. – Yo… a veces me gustaría ver qué hay más allá de Atlas. Pero como ves, mis responsabilidades pesan más.

-¿Ha pasado algo más aparte de lo que nos contaron?

-No. Aún nada. Pero temo que eso cambie. – Winter se sirvió más té. – La información que nos dieron, es algo que nos hace ver que aún hay muchos trapos sucios en Atlas que no hemos tratado como se debe. Y eso es preocupante.

Weiss pensaba lo mismo. Ella misma sabe que la situación no es la mejor. Y que ya no puede confiar ciegamente en las autoridades de Atlas. Más si es que…

-Ellos son responsables de muchas cosas. De lo que vimos en ese laboratorio. Jamás lo olvidaré… - Weiss apretó los puños. – Puede que Albert haya sido el que lo hizo todo, pero ellos le dieron la financiación. Y sabían que hacía en su mayoría.

-Lo entiendo. Ayer miré mejor lo que nos dieron. Bebés para ser máquinas de combate. Que vida tan horrible, no merece ser llamada como tal. – Winter miró le líquido en su taza. – Pero lo admito, Vent lo ha tomado bien por lo que veo.

-No tanto. Estuvo muy deprimido un tiempo. Saber que nació para ello y demás, es… - Weiss soltó un suspiro. – No fue fácil para nadie. Ese día, sentimos que quizás la inocencia que aún veíamos en el mundo, murió.

-No lo puedo negar. Yo habría pensado lo mismo. – Winter miró a su hermana. – Aún así, han sido fuertes. Todos. Y eso es algo que deben de enorgullecerse.

-Winter…

-Lo diré con claridad Weiss. Es un buen muchacho, no lo niego. Y si bien puede ser lo que no esperé, no puedo decirte cómo vivir tu vida. Ya tienes 19. – Weiss estuvo a punto de decir algo. – Pero, lo estaré vigilando. En el caso que haga algo indebido contra ti o te haga llorar, lo degollaré.

Y ahí estaba la hermana que conocía. Si, no niega que la extrañaba mucho. Sonrió y asintió. A lo que Winter hizo lo mismo.

-Te extrañe mucho Winter…

-Y yo a ti Weiss, me alegro que estés bien. – Winter no dijo más. – Ahora quiere hacerte una pregunta clara. ¿Qué harás cuando nuestro padre se entere de esto?

-… Resaltárselo en la cara.

Winter negó con la cabeza. No niega que ella haría lo mismo.

Ya tras unas horas de desayuno…

-Aun no puedo creer que nos tengan aquí. – Ilia estaba caminando con las manos tras el cuello. - ¿No podemos movernos e ir investigando?

-Ya oíste Ilia. Las cosas no son sencillas, aún con lo que nos dieron de permiso, no hay tantos transportes para ir a hacia esas zonas que tenemos. – Pyrrha estaba caminando con los brazos cruzados. - ¿Qué opinas Vent?

-… De paso nos sirve para descansar. No lo hemos hecho como se debe desde hace un tiempo. Y en Argus estábamos ayudando tras lo que pasó en la ciudad. – Verdad, no había sido un descanso como tal. – Ahora, sólo esperemos. Recuperemos fuerzas y también, veamos que mejoras les dan a nuestros amigos.

-A mí me hubiera gustado ir a ver mi casa. – Ilia soltó un suspiro triste. – Ya que, iré luego que todo se relaje un poco. Por cierto, ¿Qué creen que nos tengan preparado ese general?

-Ni idea. – Pyrrha se encogió de hombros. – Pero lo que si tengo la certeza, es que tenemos que estar alertas a lo que sea. Incluso aquí… además, ¿Vieron como los Ace-Ops nos miraban?

-Como deseando matarnos. Si… esa chica Harriet parecía deseosa de matarme… - Ilia se rascó una mejilla algo nerviosa.

-Creo que es de esperarse, dado que los derrotamos y ellos son lo mejor de Atlas. – Vent dijo ello con calma. – Claro, no han peleado contra Grimmroids, así que…

-Pues no son la gran cosa. Digo, derrotaste al líder sin atacarlo directamente. Pusiste su Semblance contra él.

-Bueno… jugué con la suerte. – Ilia rio y Pyrrha negó con la cabeza con una ligera sonrisa. – Pero confiar en tu Semblance para ganar… Sólo espero que no le cueste caro.

-Si es tan confiado como se le ve, puede que tengamos que salvarle el cuello cuando esa ínfima probabilidad pase. – Pyrrha se encogió de hombros. – Aunque… nos puede ayudar el estar aquí. Digo, ayer pude dar un salto en el aire.

-Yo al fin tengo mi Semblance. – Ilia sonrió emocionada. - ¿Qué hay de ti Vent?

-Hasta ahora nada. Aunque ya tengo Aura, no sé ni cuál sería mi Semblance. Y aún así, no me interesa saber cuál es en estos momentos. Sólo… avanzar con lo que tenemos.

Las dos chicas asintieron. Era verdad. Estaban regresando para ir a la habitación del equipo RWBY para seguir escuchando el relato de Jinn, pero en eso…

-Vent Lucilum. – una voz los detuvo. Se giraron y… - ¿Podemos hablar? – era Winter.

Vent la miró, ya portaba su uniforme militar, a la vez que se le veía muy seria. Asintió y miró a sus amigas, ellas entendieron. Se adelantaron a la vez que Vent de acercaba a la mujer y…

-¿Pasa algo…?

-Nada. Sólo que esta vez… Quiero pedirte que trates bien a Weiss. – Se sorprendió al oír ello. – No es que te acepte del todo. Pero veo lo feliz que es mi hermana a tu lado, así que… te daré el beneficio de la duda. Es todo.

Vent parpadeó hasta que sonrió, sacando a la mujer de cuadro.

-¿Y esa sonrisa?

-Jaja. Nada. Es que se ve la buena hermana que eres. – Winter alzó una ceja. – Bueno, es que nuestros encuentros anteriores jamás fueron… los mejores. Así que… lamento si tenía otra manera de pensar de ti.

Winter sonrió al oír ello. Ella pensaba lo mismo. La primera impresión que ambos se dieron era lejos de la ideal. Y cuando se vieron de nuevo, jamás hubo tiempo de conocerse mejor.

-Igualmente. – Winter asintió, a la vez que… - Aunque me cuesta creer que el chico que se mostraba asustado ante mí, ahora se muestre lleno de confianza.

-Es eso o me muero del miedo. Además, no le veo razón para tenerte miedo. Weiss cree en ti, así que yo haré lo mismo. – Winter sonrió al oír ello. – Por cierto, hay algunas cosas que me gustaría hablar y dado que eres la mano derecha del general…

-… Sólo mándame un mensaje por scroll y lo vemos. – Vent oyó su Scroll sonar. – Así será más sencillo. Quizás lo hablemos con una taza de té.

-… ¿Es algo común en los de alta cuna el amor por el té? – Winter rio ligeramente.

-Jejeje. Nos vemos Vent. – La mujer se dio la vuelta y se retiró. – Esperaré tu llamada.

La mujer se fue a paso lento de ahí, dejando a Vent sólo y pensando de que…

-Debería sonreír más. Le queda.

-Solo no dejes que esas cuatro te oigan. Weiss sobre todo. No creo que le agrade saber que coqueteas con su hermana.

-No lo hago. – Oyó el bufido del Modelo X. – Vaya apoyo.

Vent se dirigió de nuevo hacia la habitación del equipo RWBY y cuando entró, dado que la puerta estaba abierta. Vio que todos estaban listos.

-¡Hey Vent! ¡Rápido, tengo unos bocadillos para ver esta vez la historia! – Nora mostró lo que tenía.

-No sabemos de dónde lo sacó, pero es de esperarse que lo hizo sin permiso. – Nora se apenó un poco.

Vent vio a Neo negar con la cabeza, pero tenía un pomo de helado neopolitano en sus manos. Por supuesto, un soborno…

Caminó hacia donde estaban todo, se sentó al lado de sus prometidas. Todos estaban emocionados.

-Me pregunto cómo será esta aventura. – Jaune que estaba mostrando signos de emoción, no las podía contener.

-Habra que ver. – Óscar también se mostró muy interesado. Hasta sintió que Ozpin estaba prestando atención en el fondo de su mente. – Deberías de decir algo y no estar solo callado. – No hubo respuesta… por supuesto.

Ruby llamo a Jinn, quién salió y se estiró un poco. Miró a todos y sonrió.

-Vaya que tuvieron una llegada movida, ¿No? – el ente parece saber que les pasó. – Bueno, ¿Listos para la segunda parte? – ver a todos asentir, hizo que Jinn alce las manos y el vapor muestre una nueva imagen. – Tras la derrota de Sigma, habían pasado ya 6 meses. El mundo trató de seguir su vida, pero el daño que este generó, era enorme.

Se vio como la gente mostraba miedo y eso no ayudaba, los Grimms normales estaban al acecho. Es más, se puede ver como es que los que eran los Cazadores de Mavericks, también se hacían cargo de los Grimms.

Entre ellos, vieron a X. Quién se le mostraba dirigir su propia unidad.

-Tras su victoria sobre Sigma, X se hizo de un nombre. De fama. De poder. Pero era alguien humilde a todo eso. Aunque le habían ofrecido ser del rango más alto, a él no le importaba eso. Se quedó con la categoría B que le habían dado al inicio. Así era capaz de ayudar más, que solo actuar en misiones especiales.

-Si. Se nota que se parece a Vent. – Ilia le sonrió con burla a su amigo. – Tú también lo habrías hecho, diciendo que ayudar a la gente pesa más que un puesto especial.

Todos rieron al ver como Vent no decía nada. Se había quedado mudo.

La imagen cambio de nuevo, esta vez mostrando al guerrero desplazarse sobre una aeromoto.

Yang al ver ello, casi le da algo. Era… ¡Era hermosa!

Ruby y Blake sacaron a la rubia de su ensoñación con un par de golpes en la cabeza, para que el relato siga.

La base que X y muchos de sus amigos atacaron, era una donde se producía en masa chips de computadora que incluían un poderoso virus. Uno que afectaba todo lo que tenía contacto con ellos.

X destruyó la base, Pero a su vez, vio como era solo el inicio de sus problemas, cuando una imagen de tres sombras se le presentaron bien destruyó la base.

-Ellos, eran los X-Hunters, una fuerza de Mavericks con la única misión de seguir lo que Sigma inició y acabar con X. Le propusieron el reto de que si logra derrotar a sus 8 generales, así como a ellos, le darían algo importante… - La imagen mostró como los X-Hunters tenían en una cápsula lo que era el cuerpo de Zero, sólo que este estaba totalmente reparado y curado. – Al parecer, antes de la Destrucción de la base, es que hallaron apenas vivo a Zero. Y se lo llevaron, para repararlo y a su vez, usarlo como un rehén para que X no se niegue a lo que ellos le estaban proponiendo.

Pyrrha dio un jadeo, estaba vivo. Y eso la alegró. Pero el ver que lo estaban usando para obliga pelear, la enfureció.

El relato siguió, se vio como X fue y enfrentó a los Mavericks, así como a los X-Hunters en sus ataques sorpresas mientras él avanzaba en su misión.

Las batallas por lo que vieron eran más cruentas que las anteriores, pero se veía que la experiencia de X en la batalla anterior pesaba. Ya que podía pelear mejor que antes. No sólo ello, se veía que ya no dudaba en apretar el gatillo cuando era necesario. Pero se veía el dolor en sus ojos. El odio al conflicto.

-X siguió. Tenía el apoyo de muchos esta vez. – Se vio la imagen de Cazadores ayudando, una mujer que viajaba en un barco en el mar de un cabello rubio y de un anciano que le daba información. – X aprendió a confiar en ellos, los amigos que la guerra le dio.

Y así, el relato siguió. Hasta que al final, se dieron con la base de los X-Hunters. En la zona norte del planeta, lo que sería ahora la zona más norte de Atlas.

Yendo a detener a esos sujetos, X se adentro en la base. En un intento de detener la batalla y salvar a su amigo. Pero fue interceptado por los X-Hunters. Los tres lo atacaron para detener sus planes, pero se veía el como la batalla tres contra uno no era ventajosa. Para él.

Pero no se rindió. Se puso de pie, su determinación para acabar con esos 3 hizo que sus poderes se activen de nuevo. Y eso le dio una nueva armadura.

Esta era muy diferente a la anterior, era se notaba que el rojo y el blanco son lo que predominan en esta. Además que de le veía como una versión mejorada de su armadura anterior. X apuntó con su nuevo Buster y disparó dos poderosos disparos hacia sus enemigos, logrando darle en el medio al más grande de ella tres, acabando con él cuando esté trató de atacarlo.

-Esa es la Giga Armor, la versión mejorada de la Light Armor. No sólo mejoraba su poder de ataque, sino su movimiento. – Se vio como X dio un salto y se impulsó en el aire contra uno de los X-Hunters para derribarlo. – Además que le permitía lanzar dos disparos de gran potencia a la vez. Lo que era muy útil. Además de la onda de energía explosiva que era capaz de usar. Pero era un uso, por lo que X la guardó para su batalla final.

Tras acabar con otro de los X-Hunters, el que parecía ser un anciano, X miró al último de sus enemigos. Quién se lanzó hacia él usando espadas de energía, pero este no esperó que X hiciera lo mismo, sólo que tenía en su puño energía… que ardía como el fuego.

-¡Shoryuken! – el golpe ascendente con una llamarada, era como un dragón que volaba al cielo. Este partió a la mitad a su enemigo. X había vencido.

Los que veían el relato se quedaron en shock.

Vent sintió como Yang lo tomaba de los hombros.

-Debes aprender ese ataque…

-Ahm…

Ok, se veía la emoción en los ojos de su prometida. Si que estaba seguro de que eso puse ser malo.

Pero el relato siguió. Esta vez mostrando a X teniendo que pelear de nuevo con los 8 generales, o sus cuerpos movidos por solo un AI. Y tras derrotarlos, siguió avanzando. Hasta que se halló con….

-¡Sigma! – Y en efecto, era Sigma. Sólo que con un cuerpo nuevo.

-¡Pero es imposible! ¡X lo destruyó en la guerra anterior! – Blake fue la que salió de su shock, a la vez que todos miraban eso con asombro.

-Sigma fue un enemigo difícil de derrotar. Su esencia lograba sobrevivir a la Destrucción de sus cuerpos, pero eso tenía un efecto colateral. Que él no vio tras mucho tiempo. Ya lo verán.

El relato siguió, esta vez con Sigma riendo.

-Ah. X, verte de nuevo… no sabes los deseos que tengo de matarte por lo que me hiciste antes.

-Eso te lo buscaste tú. ¿Cómo has regresado? – Fue la pregunta de X a su enemigo, quien sonrió.

-Ese es el truco X. ¡Jamás podrás deshacerte de mí!

Ambos estaban por lanzarse a pelear, sólo para que de la nada, ráfagas de Busters y una onda de corte haga que Sigma retroceda.

Los dos contrincantes vieron la dirección del ataque y se vio como Zero llegaba, ahora se le veía portando un sable de energía en la mano, además que ahora la zona de sus hombros era más detallada.

-¡Zero! – X se alegró de ver a su amigo, quien le sonrió y asintió.

-¡Imposible, estabas encerrado! ¿¡Cómo es que…!?

-Ese es el truco, Sigma.

Todos se sorprendieron al ver a Zero, quien se veía mejor que nunca. Pyrrha miró a Jinn en busca de respuestas y ella sonrió.

-El Maestro Zero logró despertar cuando X atacó la base, eso bastó para que los sistemas que lo tenían en estasis se dañen. Él estaba listo para la batalla, además que esos tipos lo mejoraron, porque deseaban usarlo para sus planes. Cometieron un error.

La imagen siguió, viéndose como Sigma miró con odio a ambos guerreros. Se lanzó al ataque, sacando del dorso de sus manos unas garras de energía.

X y Zero se lanzaron al ataque contra su enemigo. Se pudo ver que la batalla no tenía cuartel, Sigma era más agresivo que antes, pero X y Zero no perdieron el tiempo. Ambos usando la confianza que tenían al otro, es que las cosas progresaron a su favor.

Al final, aún tras quedar muy dañados, X y Zero se hicieron con la victoria. Sigma estaba en el suelo, su cuerpo destruido por los ataques de los dos guerreros, quienes sonrieron al otro. Habían ganado…

Pero no acabó, del cuerpo de Sigma emergió una energía extraña. Era oscura y maligna, era…

-¡Es como la energía del Modelo V! – Óscar lo dedujo rápido.

-En efecto. Cuando el Dios de la Oscuridad creó a Zero y le dio su poder para que viva, no analizó que la energía oscura tendría efectos adversos… la oscuridad tomó forma… y afectó la mente de Zero. Y cuando Sigma derrotó a Zero en ese golpe, la energía Maligna se pasó a él. E irónicamente, ambos se unieron. – Vieron como X y Zero estaban frente a lo que era una enorme cabeza de Sigma, pero hecha de la energía de antes. – Se hicieron un Virus… esa era la verdadera forma de Sigma. Virus Sigma.

-Virus… Sigma… - Ruby vio la imagen con atención.

El relato siguió. X y Zero esquivaban los ataques de Virus Sigma, quien parecía deseoso de matarlos.

Se veía el cansancio en los dos, a la vez que…

-¡A este punto nos matará! ¡Hay que hacer algo! – Zero miró a su amigo, quien estaba muy cansado. - ¡X!

El guerrero asintió, pero no sabía que hacer… hasta que sus sistemas, como a analizando la situación, le dieron la solución. Es un ataque único, pero los puede salvar.

-¡Tengo una idea, es el todo o nada! ¿¡Confías en que lo logre!?

A la pregunta de X, Zero sonrió. Este se lanzó al ataque contra su enemigo, a la vez que X empezó a concentrar poder en su cuerpo.

El Virus Sigma parecía infectado por los ataques de Zero, a la vez que este…

-¿¡No lo entiendes Zero!? ¡Tu destino es luchar a mi lado! ¡Gracias a ti tengo este poder!

-… Quizás. ¡pero no me agradas! ¡Eso basta para que te destruya! – Zero siguió atacando con su Buster y su espada, sólo para que…

Se vio a X lanzarse hacia el Virus Sigma, su cuerpo brillando en respuesta al poder y…

-¡Giga Crush!

En un destello de energía, ocurrió una explosión que afectó al Virus, quien se retorció. Quién no creía lo que pasaba, ser derrotado dos veces…

-¡No es la última vez que sabrán de mi, X y Zero! ¡Haré que caigan, no dejaré que ustedes…!

No se oyó más. La explosión de energía destruyó la zona y la base se vino abajo.

Cuando todo se pudo ver de nuevo, se vio a X, ya son su armadura de siempre, y Zero. Los dos sentados sobre un trozo de hielo en medio del mar.

-En mi vida pensé que así pasaría un día. Pero lo tomo… mejor que estar en poder de esos tipos. – Zero trató de verle lo positivo.

X rio a las palabras de su amigo.

-Es bueno verte de nuevo, Zero.

-Je… igual X.

Ambos chocaron puños, demostrando la fuerza de su amistad. A la vez que veían como un avión de rescate iba a ellos. Habían ganado nuevamente.

-Y así, la segunda batalla acabó. Pero no sería la última. Con esto, sólo entendieron que Sigma podía volver y eso los puso más alertas. – Jinn deshizo la imagen. – Aún así, han visto el porque Zero sigue vivo. Y desde este punto, ambos trabajaron juntos para proteger el mundo. Pero eso lo seguimos otro día.

-Awww. Estaba interesante. – Nora hizo un puchero, pero nadie puede negar que es verdad

Jinn sonrió, se despidió con la mano y regreso a la lámpara, Ruby la hizo pequeña y la puso a un lado, para así tener que guardarla luego.

-Con que así es que sigues vivo. – Ilia miró al Modelo Z, quien estaba en los brazos de Pyrrha. – No me quiero ni imaginar el como fue tu llegada, Modelo A.

-Fue difícil…

-¡Malos amigos!

Dejando de lado eso, el grupo entero se sentó a hablar un poco, mientras pasaba el tiempo. Dijeron que sus armas nuevas estarán listas en pocos días.

Habrá que esperar.

Por su lado, los 4 Megaman con Cinder, estaban viendo un mapa. Uno donde…

-Aquí. – Fue lo que Aelous señaló en una parte del mapa. – Aquí está lo que Albert dijo que era para nosotros.

-Está algo lejos. – Thetis miró el mapa. – Tomará sus días.

-Pero debe de valer la pena. Sino, ¿Para que se habría molestado tanto Albert en darnos estás coordenadas? – Aquila sólo quería ir, hacerse del poder y poder matar a esos niños.

-Se recomienda el moverse en la mañana para llegar en 5 días estimados.

5 días. Cinder soltó un suspiro. Por lo que ha visto, las palabras de Siarnaq no fallan en sus cálculos. Si bien desea ir a Atlas de una vez, eso puede esperar un poco. Si quiere que las cosas vayan bien, debe de prepararse bien.

Ella asintió y se retiró de ahí, sólo para pensar en algo mientras iba a su habitación…

-Oh, perdón. – Ella esquivó a una niña que iba hacia ella. – Lo lamento señorita.

Antes le habría dicho algo ofensivo. Pero solo asintió y le dio pase a la niña. La vio ir donde su madre y… notó el estado del lugar. Deplorable. ¿De verdad esto era Atlas?

Una parte de ella, siente que quizás… ella aún tenga algo de humanidad. Porque al ver como la madre sólo pudo pagar un pedazo de pan, le movió el alma.

Soltó un suspiro y caminó cerca de la mesa y dejó algo en esta, que la mujer vio luego de unos minutos. Dinero para una comida.

Cinder ya estaba lejos cuando lo noto, pero ella lo estaba entendiendo…

Desde Mistral lo sentía… la humanidad que había deshecho en el pasado, volvía. Y todo por culpa de él…