¡Saludos, queridos lectores!
Con un tiempo de atraso, vengo a traerles la historia del tema de hoy. Sin embargo, quiero hacerles una pequeña advertencia, pues quizá empiecen a leer y al final me odien
Verán, esta historia sólo es una presentación para un LongFic que no escribiré hasta mucho después. Será un caso parecido a Bodas terrestres o Dimensión espejo, así que, si no quieren quedarse con la duda por tiempo indefinido, mejor no lean la historia sino hasta que pueda subirla.
Para aquellos que quieran leerla de todos modos, sepan que no hay fecha para subir la historia formal, pero esto les dará un planteamiento de la historia a futuro n.n
Hecha la advertencia, sólo me queda decir que esta historia corresponde al Día 16 de marzo: Novela romántica de la actividad de la semana del Día blanco 2023 del grupo SasuKarin Month n.n
La novela romántica "Detective del amor" acababa de salir a la venta y ya era toda una sensación en el mundo, especialmente en la ciudad de Konoha, ubicada en el país del Fuego, y nadie podía estar seguro que la novela podría alcanzar niveles de audiencia tan grandes, de no ser que hacía un mes, una noticia de gran importancia en el mundo policial, había salido a la luz y con ella, una fotografía que bien podría servir de portada para la novela que estaba causando furor.
¿El motivo?
Un año atrás apareció un ladrón muy habilidoso que cometía crímenes perfectos. Al principio, se ocultaba por completo, pero conforme el tiempo pasaba y ni se acercaban a atraparle, comenzó a volverse más descarado e incluso, cada que podía se burlaba de la policía. A sí mismo, la frecuencia de sus robos aumentaron y la cantidad de dinero que llevaba robado entre dinero y joyas, ascendía a cien millones de ryō en menos de seis meses.
Tal burla a las autoridades, los obligó a ofrecer una buena recompensa si alguien descubría la identidad del ladrón o daban pistas y una más grande si lo atrapaban. Esta noticia atrajo a las agencias privadas de detectives y a pesar de tener a un montón de las personas más astutas e inteligentes en el caso, no lograban descubrir nada.
Lo peor vino cuando el ladrón decidió hacer mayor su burla, cuando de vez en cuando anunciaba sus robos, en los cuales a veces no se presentaba, pero cuando lo hacía no daba detalles y aún con tanta gente vigilando, se salía con la suya.
Entre más tiempo pasaba, el ladrón era cada vez más burlón y tras un año de la aparición de este, al que llamaron "Dark Moon" porque su primer robo lo había hecho una noche de Luna nueva, la agencia Taka, dirigida por Uchiha Sasuke, había conseguido un dato del que nadie se había imaginado: Dark Moon era una mujer.
Sin entrar en detalles, Dark Moon había anunciado un asalto, ella nunca daba detalles, sino pistas a modo de acertijos, así que sus anuncios causaban mucho caos en la ciudad, pero la agencia Taka descifró correctamente, que el asalto sería en la mansión de los Hyuuga.
Uchiha estaba tan seguro de ello, que preparó una trampa junto a su equipo, pero a pesar de haber caído, de alguna forma ella no sólo logró escapar, sino que lo atrapó a él en la trampa cuando iba a buscarla y le robó un beso, uno que un fotografió capturó y llegó a los periódicos y las redes sociales.
Dark Moon, siempre había pasado desapercibido. Nunca nadie podía obtener un dato específico como de su altura, complexión, color de ojos o cabello y aunque Sasuke había tenido a la ladrona frente a él, por no decir en sus labios, ella llevaba un traje en la oscuridad de la noche que le evitó notar nada más allá de que era una mujer delgada, más bajita que él, pero más alta que su compañera de equipo y que llevaba un labial rosa que le dejó en los labios cuando lo besó.
Cuando la noticia salió a la luz, todos estaban sorprendidos, y el gobierno no sabía si dar alguna compensación a Taka por haber descubierto aunque fuera algo mínimo cuando nadie más había logrado conseguir nada en un año. Sin embargo, el resto de las agencias privadas señalaban, ya fuera por verdaderas sospechas o envidia, que Taka había fabricado esa información para tomar la delantera y que era absurdo que una mujer como la de la foto, hubiese pasado desapercibida de los testigos que llegaron a ver sospechosos durante los atracos.
La foto del beso fue muy comentada en todos lados, la gente ni siquiera prestaba atención al hecho de las pocas pistas que la trampa de Taka arrojó, porque ahora habían fanfics, fanarts, y clubs de fans de la pareja; por ello, cuando la novela salió al público, todos querían una copia, y fue precisamente el estreno de esta novela, lo que hacía pensar al mundo que Taka había fabricado las pistas, porque ¿cómo es que una novela sobre un detective que intenta capturar a una ladrona de joyas saliera un mes después de que se sacara la foto de la supuesta Dark Moon besando a uno de los detectives que estaba más involucrado en el caso?
Y no era que no hubiese gente que pudiera sacar una novela de mala calidad en un mes para aprovechar la noticia y así conseguir muchas ventas, sino que las noticias aseguraban que el libro estaba planeado para lanzarse seis meses más tarde porque aún no estaba completado y se adelantó porque una de las escenas principales del libro, era la del beso de la ladrona y el detective.
El editor afirmó que el adelanto fue porque la noticia había inspirado tanto a la autora, que pudo terminar lo que faltaba del libro en poco tiempo, pero aquellos que conocían aunque fuera un poco las dinámicas de una editorial, sabían que ese libro había sido impreso, incluso antes de que Dark Moon anunciara el atraco en que ocurrió el beso.
—¿Ya lo leyeron? —Karin llegó a la agencia de Taka colocando en el escritorio de Sasuke la afanada novela. Se veía bastante molesta y no era para menos, pues todo lo relacionado con el beso de su jefe con la ladrona la ponía de malhumor.
—¿Quién quiere leer esas novelas empalagosas? —bufó Suigetsu.
—¿Encontraste algo? —preguntó Sasuke sabiendo que si su compañera estaba señalando la novela, no era en vano. Sin embargo sus otros compañeros no parecían estar de acuerdo.
—No vas a creerlo. La historia es prácticamente todo lo que hemos hecho con esta investigación. Es más, si me preguntas, se siente casi como si alguno de nosotros convirtiera su diario en novela, con todo y las pistas que tenemos, pero con una historia de amor en medio y con algunos datos sobre "Cat" como llaman a la ladrona de la novela. ¡Ah! Y hay varios detalles cambiados.
—¿Estás de broma? —preguntó Suigetsu.
—No, incluso hay un idiota fastidioso como tú como trabajador del guapo detective Sadao Yūkan, llamado Kano. Es tan molesto como tú, pero mejor parecido —respondió Karin para luego mirar a Sasuke que estaba por interrumpirlos— Y no, no hay cosas de la investigación en la novela que no se dieron al público, así que o uno de nosotros escribió esta historia y los omitió o alguien nos espía a distancia.
—Tu eres la única mujer en el grupo, tú debes ser la autora —señaló Suigetsu y el azabache tomó la novela.
—Según su editor, Kaori Yanara es un pseudónimo de una mujer de veintiocho años que vive en Berī. Sólo vino a Konoha el primer día de venta del libro, pero no dio conferencia ni autógrafos cómo suelen hacer los autores para presentar sus libros, ya que quiere permanecer anónima —informó Karin que ya había hecho parte de la investigación.
—¿Y sabes si el editor ha visto en persona a la autora? —preguntó Juugo— Si no, entonces quizá ella mintió y estuvo en Konoha el día del robo.
—No quiso decirme mucho. Sólo me dijo que se comunica con ella por teléfono, mensaje y correo por la distancia.
—¿Existe en la novela una escena como la de la foto que nos sacaron? —preguntó Sasuke para asegurarse.
—Sí, sí la hay. De hecho, es el encuentro final de los protagonistas.
—Muéstrame.
Karin buscó en el libro la escena del beso y cuando la encontró, el azabache le hizo una señal para que se lo leyera.
"Sadao, satisfecho de ver a la ladrona atrapada en su trampa, se acercó con una sonrisa orgullosa. Al fin la persecución había terminado y sabría quién era esa mujer que había estado librándose de todas y cada una de sus trampas y que no dejaba ni una sola pista de su identidad.
Ahora estaba allí, amarrada de las manos, casi colgada, mientras sus pies estaban atados para impedirle aún más la movilidad. La posición le permitía ver al detective que esa chica tenía un cuerpo gimnástico, muy propio de alguien que había huido de la justicia más de una ocasión de la maneras más impensables en cada momento. Empero, ahora estaba allí, sin posibilidades de escapar.
Lo único que tenía que hacer, era estirar la mano para al fin quitarle la máscara que ocultaba su identidad, pero antes de poder hacerlo, ella le sonrió altiva, como si la que tuviera todas las cartas para ganar fuera ella y no él. Sin embargo, él estaba seguro que sólo alardeaba y admiraba que no perdiera el temple en esa situación.
—Bien hecho, detective, me ha atrapado. No esperaba menos de usted, pero ¿de verdad tenía que usar este tipo de trampa? ¿O es que había tenido la fantasía de someterme de esta manera?
El detective frunció el ceño, no le gustaban esos coqueteos que la ladrona le hacía cuando tenía oportunidad porque estaba seguro que se burlaba de él o que intentaba provocarlo para distraerlo. Ya lo había hecho con otros y le había funcionado, pero no con él.
—No juegues conmigo, sabes que no caeré en tus trucos —respondió muy serio y estiró la mano para quitarle la máscara.
—No son trucos, usted es un pervertido al atraparme aquí de esta forma mientras trae el zipper abajo. Por eso no hay nadie de su equipo cerca. ¿No es así?
Sadao detuvo su acción cuando lo llamó pervertido, pero no bajó la vista a su pantalón. Con ella debía ser precavido y no distraerse aún si estaba amarrada, pero no pudo evitar sentirse ofendido por la acusación.
—Ya no hay truco que pueda ayudarte a escapar. Estás inmovilizada y el lugar está rodeado —le señaló para que supiera que sin importar cuánto tiempo intentara ganar, ya no había escapatoria
—Tienes razón en todo, excepto en una cosa —la mujer le aseguró con tranquilidad y el detective levantó una ceja— No estoy inmovilizada como tú quisieras.
Antes de que Sadao pudiera reaccionar, "Cat" había dado una patada en los bajos al detective y al aprovechar que él se doblaba del dolor, en un par de ágiles movimientos se soltó de las cuerdas y desarmó al hombre que, pese al dolor, intentó amenazarla con su arma de fuego.
El detective no tuvo muchas oportunidades para defenderse, pues el dolor que esa mujer le había causado, era algo con lo que apenas podía lidiar, así que de un momento a otro, él ya estaba colgado de las manos con los pies amarrados tal y como la ladrona había estado hacía muy poco.
—Jugaste sucio —acusó el detective.
—En la guerra y en el amor, todo se vale, así que por favor, no me decepcione acusándome de jugar sucio. Además, si hablamos de malas pasadas, usted no se vio muy correcto poniéndome esta trampa en la que casi me deja medio desnuda —señaló Cat acercándose al detective— Pero no le guardo rencor porque yo juego pensando en posibles juegos sucios —la chica sacó un bilé rosa de la marca Sakura de la bolsa en su cintura y se dio un retoque. El detective estaba irritado por la demostración de confianza de la mujer— Por cierto, lamento mucho haber dañado a su "amiguito", usted no me dejó otra opción. Sólo espero no haberlo dejado incapacitado, porque sería una lástima si ya no le funciona antes de que me atrape y lo use para castigarme por ser una niña mala.
—Deja la mierda —gruñó el detective que aún sentía pulsaciones de dolor en su entrepierna. Le irritaba que ella siguiera burlándose de él.
—Pero le daré una compensación por las molestias —dijo ella rodeando con sus brazos el cuello del hombre que la veía con enfado y, sin titubeos, Cat besó al detective.
Sadao quedó paralizado ante la acción de la ladrona, pues si bien ella siempre se había burlado de él con falsos coqueteos y comentarios hacia la policía e investigadores en general, era la primera vez que ella tomaba acciones directas acorde a sus palabras de flirteo.
Comenzaron a oírse pasos de la gente que llegaba para tratar de atrapar a la mujer y sólo en ese momento, Cat se alejó del hombre corriendo. Antes de salir por una ventana, ella se dio el lujo de voltear hacia el detective y sonreírle.
—Nos vemos pronto, cariño —dijo guiñándole un ojo y mandándole un beso al aire, antes de desaparecer en la noche.
Los policías y compañeros de Sadao llegaron a la escena sólo para ver apenas a la mujer escabullirse, y aunque la mayoría de los presentes corrieron tras de ella para tratar de atraparla, ella volvió a perderlos sin dificultades.
Por un año entero, él había estado tratando de atraparla sin poder encontrar información sobre ella. No sabía su nombre, su edad, dónde vivía, ni mucho menos de qué nacionalidad era porque ella hablaba con diferentes acentos en cada encuentro y aún así, estaba conociendo a qué sabían sus labios, pues si bien el primer sabor que sentía era al de cerezas artificiales del bilé que llevaba, el beso de ella no sabía igual que el de cualquier otra mujer que hubiese conocido.
—¿Cómo es que terminaste así? —preguntó Kano mientras trataba de deshacer el nudo que sujetaba las manos de Sadao.
—¡¿Por qué carajos no llegaron antes?! —preguntó frustrado cuando salió de su estupefacto.
—Hubo un incendio en el ala oeste y todos pensamos que Cat estaba allí porque alguien vio una silueta sospechosa dirigirse allí antes del incendio —explicaba la única chica del equipo del detective mientras le liberaba los pies.
—¿Dónde está Kazuhiro? —preguntó el detective.
—Dijo que rodearía la mansión en caso de que Cat intentara huir por detrás —decía frustrado de no poder deshacer el nudo, a lo que Mika le extendió una navaja suiza para que cortara las cuerdas.
—Quizá haya podido atraparla —sugirió la joven.
—No lo creo —murmuró Sadao con la mirada perdida en la ventana por la que Cat escapó mientras se sobaba las muñecas. Esa noche, ella no sólo había robado un collar millonario, sino también su orgullo y era algo que él no…"
—¡Un momento! —Suigetsu detuvo la lectura de Karin— Esta historia está muy extraña.
—¿Qué quieres decir? —preguntó la pelirroja molesta por la interrupción.
—Dijiste que era como un diario que cualquiera de nosotros hubiese escrito, pero fuiste tú la que rodeó la mansión, Juugo el que liberó las manos de Sasuke con una navaja y yo el que le desató los pies.
—Si es alguien que nos está espiando, es natural que haya detalles que no logre conocer y los llene con lo que sabe —sugirió Juugo.
—También pudieron haberse cambiado adrede, ya fuera para despistar o por preferencia en los personajes —comentó la pelirroja— En toda la novela hay cambios de ese tipo, pero en esencia, son los mismos sucesos y mismas pistas.
—¡Kaori Yanara debe ser Cat! Digo… Dark Moon —exclamó Suigetsu muy seguro.
—Por las fechas, la autora escribió esto antes de que pasara. ¿Cómo podría saber que íbamos a tenderle una trampa a Dark Moon? —planteó Juugo tomando en cuenta que se supone que la autora terminó la novela cuando se supo la noticia, pero que el tiempo de edición, impresión y armado, llevaría más de un mes para hacer una preventa— Y aún si alguien nos espía y supo del plan ¿cómo supo que las cosas iban a salir de esa forma? Nadie podría saber el futuro.
—Ella lo planeó —declaró Sasuke irritado y al fin hablando después de oír los debates de sus compañeros.
—¿Cómo que ella lo planeó? —preguntó el albino, pero la sorpresa en los rostros de Karin y Juugo era evidente.
—Kaori Yanara puede ser nuestra ladrona, pero también puede ser alguien del entorno de la autora que leyó el manuscrito y planeó todo para tratar de asemejar lo que ocurre en la novela —aseguró el azabache— Es por eso que hay detalles que cambian y no son palabras exactas, porque no puede predecir todo lo que ocurrirá sin importar cuán bien pueda analizar a la gente.
—¿Y por qué alguien que ha estado protegiendo su identidad, haría algo como eso? —preguntó Juugo confundido— Prácticamente nos está regalando las pistas para descubrirla. A menos que sean falsas.
—Quizá Sasuke tenga razón. Las pistas que nos dio, incluso podrían ser falsas para desviarnos de la investigación y al mismo tiempo, logró que nos desprestigiaran —señaló Karin molesta— Y aún si las pistas fueran reales, con la pérdida de credibilidad y como somos sector privado, la policía ya no nos ayudará a menos que reportemos un crimen.
—Los dos están exagerando. ¿No le están dando demasiado crédito a esa mujer? —preguntó Hozuki— Si ella lo planeó todo, quiere decir que cayó en la trampa a propósito. Aún si sabía cuál era la trampa, no podía saber que todo saldría al pie de la letra —decía seguro de que sus compañeros se equivocaban— Y si estuvo cubriendo su identidad como mujer ¿por qué delatarse ahora?
—Esa mujer ha demostrado mucha astucia y cada vez se arriesga más. Podría ser una adicta a la adrenalina —explicó Juugo, pero enseguida, se le ocurrió una idea— ¿Y si fue una trampa de otra agencia para calumniarnos? Eso explicaría la presencia del reportero que tomó la foto en el momento justo.
—No es una idea descabellada. Si fue el plan de otra agencia, entonces no sólo nos estaría despretigiando, sino que daría pistas falsas a todas las agencias y la policía sobre el sexo del ladrón —dijo Karin pensativa— Si ellos son los únicos que saben que Dark Moon es hombre, pueden investigar sobre esa línea mientras la competencia lo hace sobre la idea de que el ladrón es una mujer.
—Y si es así ¿por qué justamente nosotros tuvimos que pagar los platos rotos?
—Somos… o éramos la tercera agencia privada de investigación del país más importante. Si hubiesen marcado a Akatsuki o Seven, habría sido más obvio que era una trampa, pero al mismo tiempo, necesitaban que fuera una de las agencias con nombre para que las pistas falsas funcionaran —Karin le explicaba a Suigetsu.
—Seguiremos la línea de investigación desde la autora. Consigan toda la información que puedan sobre ella, sus obras y el lanzamiento de este libro en especial —ordenó el azabache— Y todos vamos a leer esa novela y hacer comparativas con lo que realmente pasó en cada descripción. Si Dark Moon escribió eso, quizá dejó pistas.
—Podrían ser pistas falsas —objetó Juugo.
—Juugo tiene razón. Si fue tan inteligente como para hacernos recrear una escena de esa novela, podría haber puesto pistas falsas —comentó Karin.
—Falsas o no, vamos a encontrarlas. Siguen siendo pistas.
—¿Es eso o quieres caer en otra de sus trampas para que te haga algo más que un beso? —acusó Suigetsu burlón.
—¡No digas estupideces! ¡Sasuke sólo quiere atrapar a esa criminal! —exclamó Karin enfadada.
—Tu no estuviste cuando liberábamos a Sasuke, así que no te diste cuenta que después de que ella lo besó, él quedó como zombie como mirando la nada —Suigetsu ampliaba más su sonrisa y se recargó en el hombro de Sasuke en modo de complicidad— Y no te culpo, colega, esa mujer es sexy en ese traje de cuero y con todas esas acrobacias que hace para escapar, estoy seguro que debe ser un as en la…
—Vayan a hacer su trabajo —Sasuke ordenó levantando la voz, pero sin gritar. Había sido tan autoritario que ninguno protestó.
Cada uno de los miembros volvió a su escritorio y Sasuke decidió entrar al área de descanso para poner la cafetera a andar. Poco tiempo después, Karin entró, aprovechando que Suigetsu y Juugo estaban distraídos haciendo llamadas.
—Sasuke…
—¿Encontraste algo? —preguntó el azabache cuando ella no dijo más.
—¿Ella te gusta? —soltó la pelirroja de repente.
—No digas tonterías —bufó el varón irritado, pues la foto había causado gran furor entre los civiles que lo emparejaban con esa mujer y la insistencia se hizo más grande cuando apareció ese estúpido libro. Hasta había locos que juraban que el libro lo había escrito él.
—Según la nota, ni siquiera te opusiste a que te besara y…
—Estaba amarrado y no pensé que fuera a hacer algo como eso —se defendió— No sé lo que diga esa novela, pero no la relaciones conmigo.
Karin se quedó mirando a su jefe en silencio y después de un rato suspiró resignada.
—¿Sabes? En el libro, mi personaje se llama Mika y los pensamientos y sentimientos que ella tiene, son los mismos que tengo.
Tras decir aquello, la pelirroja salió del área de descanso dejando a un muy confundido Sasuke, pues obviamente él no había leído la novela y no estaba muy seguro de por qué su compañera había confesado aquello. Es decir, no era ciego, sabía lo que ella sentía por él y si acaso tenía alguna duda, esta debió desvanecerse el día en que ella casi lo besa.
Se habían quedado solos en la oficina de casualidad, pues Suigetsu siempre se encargaba de evitarlo. En esa ocasión, ella se acercó a él hablándole con una voz suave sugiriéndole salir juntos. Está por demás decir que él la rechazó y al momento siguiente ella intentó besarlo.
Mientras ella se acercaba lentamente a juntar sus labios con los de él, Sasuke se sintió contrariado, pues él no era indiferente a su compañera, ella le gustaba, pero si la rechazaba o fingía que no se daba cuenta de nada, era porque juntar los negocios y el amor nunca salía bien. Eso sin mencionar que el amor siempre era más problemático.
Cuando sintió la respiración de ella chocar contra su rostro, quiso dejar que pasara el beso, pero al final, él la detuvo y se fue sin decirle nada, porque sentía que si se quedaba, terminaría por consumar ese beso.
No, él debía concentrarse en el trabajo y por ello siempre se iba. Sin embargo, ahora que ella le había dicho su relación con el personaje de aquella novela y verla tan afectada, lo inquietó.
—¿Sabes? Lo estuve pensando y no creo que esa autora sea Dark Moon —Suigetsu se acercó a Sasuke cuando salió del cuarto de descanso— ¿Qué tal si Dark Moon le envió alguna nota a la autora como hizo con el periodista?
—¿Dónde está Karin? —preguntó Sasuke al no verla por ningún lado.
—Dijo que iba a buscar al editor de Kaori Yanara para interrogarlo sobre la autora —respondió Juugo.
—¿Me estás oyendo? Dije que quizá Dark Moon le dio la idea a la autora como hizo con el periodista. Vamos a perder el tiempo leyendo esa empalagosa novela.
—Aun si es verdad, tenemos que investigar de dónde consiguió la nota. Sigan investigando —ordenó el detective, tomó la novela que Karin le había dejado en el escrito y se encerró en su oficina— Estaré leyendo. No me molesten a menos que encuentren algo importante o que Karin vuelva.
Sasuke sabía que la autora de esa novela tenía que ver con Dark Moon, no podía asegurar que la propia autora lo fuera, pero al menos consideraba que fuera alguien de la editorial o un familiar. ¿El motivo?
Todo lo descrito en lo que Karin les había leído en voz alta, ocurrió cuando él se encontraba a solas con la ladrona, pero él no contó a nadie, ni a sus subordinados, todos los detalles de lo que pasó y aunque la escena descrita en la novela no fue exacta, él jamás le dijo a nadie que ella le había dicho que traía el cierre abajo.
Quizá el único que podría saberlo, era el reportero que estaba escondido en el lugar preparado para sacar la fotografía, pero además de que él no agregó detalles en su nota sobre el encuentro, aún seguía estando la duda de por qué se publicó un libro que fue escrito antes de que todo pasara.
Aquél pequeño detalle hacía más extraño el contenido de la novela, porque así como se había mencionado, también hubo algo más que no se mencionó al público.
*****Flash Back*****
Cuando los pasos de la gente que corría al encuentro de Sasuke y Dark Moon se escuchaban llegar, la ladrona se alejó del hombre corriendo. Antes de salir por la ventana, ella se volteó hacia el detective y le sonrió.
—Nos vemos pronto, cariño. ¡Ah! Y la próxima vez, quizá quieras revisar tu cierre, así te darías cuenta si tengo los pies libres —dijo guiñándole un ojo y mandándole un beso al aire, antes de desaparecer en la noche.
*****Fin Flash Back*****
No entendía por qué, si fue Dark Moon quién escribió ese libro, mencionó el cierre abajo, pero no la burla que hizo antes de irse. Tampoco tenía sentido si le envió una nota a la autora con la idea. Además, aunque Sasuke no lo mencionó, estaba seguro que el reportero que les tomó la foto, la escuchó, sin embargo, en las noticias no salió nada al respecto.
Claro, el reportero fue tomado por sospechoso porque aunque el robo estaba anunciado, él era el único que estaba esperando justo donde estaba la trampa, una que muy pocos sabían que existía, pero él logró demostrar que había recibido una nota anónima que le daba instrucciones de esperar en ese lugar para obtener una gran nota.
Taka y otras agencias trataron de rastrear quién entregó esa nota, pero perdieron la pista cuando el hombre que dejó la carta en el buzón del periodista, se perdió de las cámaras en el centro comercial más concurrido de Konoha justo en uno de los momentos con más afluencia.
Sasuke estaba sorprendido y frustrado con esa ladrona, pero estaba decidido a atraparla, porque si lo conseguía antes que Akatsuki, donde trabajaba su hermano, podría demostrar que era mejor.
Por supuesto las posibilidades que su equipo había sugerido aún no estaban descartadas, ni siquiera la que sugería que alguno de sus colegas fuera la autora de la novela al parecerse a un diario de los que trabajaban en Taka o incluso Dark Moon, pero eso es algo que las pistas le dirían, sólo debía saber encontrarlas.
¿Quién es Dark Moon? ¿Cuáles son los pensamientos que Karin tiene que asoció con el personaje de Mika? ¿Sasuke podrá atrapar a la ladrona?
Me encantará ver en los comentarios sus preguntas y teorías, aunque sé que quizá me odien por dejar esto hasta aquí
Quiero decir que esta historia al estilo detectivesco es mi primer intento de este género, así que esta presentación o incluso cuando me ponga a escribir el LongFic, serán más un experimento del género, por lo que tampoco esperen nada tan grandioso.
La idea de esta historia surgió gracias a que ManaKarin me envió un capítulo de una serie vieja llamada Hércules Poirot. Sinceramente no conocía al personaje y me ha causado gracias que recientemente se está sacando una colección de las novelas de la autora de este personaje (sí, originalmente es una novela), pero debo decir que el capítulo que vi no es exactamente como esta historia, pero sirvió de inspiración, así que, gracias ManaKarin, pues con ello pudo crear algo para este tema n.n
Dejaré la historia como completada, pero cuando comience a escribir el LongFic, cambiaré el estatus de la historia, por lo que, si la siguen, recibirán notificación cuando la escriba n.n
¡Hasta la próxima actualización!
