Hola chicos, ¿Cómo están? Espero que de lo mejor, si no es el caso, mis mejores vibras para ustedes. Estoy de vuelta con un nuevo capítulo que representa el final del arco actual. La siguiente parte de la historia traerá consigo algunas cosas inesperadas para ustedes donde tengo planeado hacer un episodio dedicado explicar un evento de desarrollo para Issei e Isami. No daré más información al respecto, pero este arco va a ser un punto importante que espero les guste. Además, andamos agüitados por Date a Live así que no me culpen si me pongo maquiavélico con mis fics.
Por otro lado, esta vez volvemos con ilustraciones de imágenes IA donde he tratado de crear la apariencia de Kiyome, aunque realmente difícil al no contar con diseños a color de ella. El link como siempre estará al final del capítulo.
Ahora, como información adicional es de mi agrado decirles que ya tengo el prólogo de la parte de dos de Un Reencuentro que Siempre Soñé. Es algo fuera de lo ortodoxo a un prólogo convencional, pero es que el episodio uno y dos seguramente los destinaré únicamente a que Issei se ponga al día con sus amigos y familia. Quizás sea algo aburrido, pero es lo que necesito para dar hincapié a la historia debido a que habrá muchas cosas por revelarse.
Dos Veces Sekiryuutei
Ahora sin más relleno, vamos con el capítulo del día de hoy.
- No los perdonaré nunca. Persona hablando
- [Balance Breaker] Habla Ddraig
- "Lo siento." Pensamientos
- "Nunca más" Comunicación mental
Capítulo 29 - Una Realidad Inesperada Parte 2
Después de estar un tiempo sentados observando el firmamento, Mai finalmente pregunto algo.
- Issei-kun, ¿tu capitana de equipo sabe del mundo sobrenatural? Recuerdo que ella te llamo cuando íbamos a la academia y le dijiste que tuviera cuidado. – cuestiono la rubia.
- ¿Huh? Si, Kiyome sabe del mundo sobrenatural. Aunque ella está involucrada con criaturas un poco inferiores a demonios. – dijo Issei.
- ¿Ella es fuerte? – pregunto Mai.
- No sabría responder eso, pues Kiyome hace contratos con monstruos. Su fuerza radica en la fuerza de sus criaturas contratadas, por lo cual ella es solo una humana normal con un talento para relacionarse con criaturas como lamias y esas cosas. – dijo Issei.
- Suena genial, además… ella es bastante linda. – dijo Mai intentando ver como reaccionaba el chico.
- Mmm, tienes razón. Es bastante genial. Además, Kiyome es muy amable y suele ser muy empática con todos. Particularmente, ella ha sido muy buena conmigo. – dijo Issei con una sonrisa.
Notando eso, Mai le pellizco una mejilla al castaño.
- Ella te gusta, ¿no es así? Seguro es la chica de la que nos dijiste que era como una ángel. – dijo Mai con un pequeño puchero.
- ¡Ouch! No hagas eso y no malinterpretes las cosas. Apreció bastante a Kiyome, tanto como te aprecio a ti y las demás junto con Haruhiko. Sin embargo, Kiyome no es la persona que les mencione. Cuando dije que es como una ángel fue porque realmente lo es… o bueno, algo así. – dijo Issei sobándose la mejilla.
- Has cambiado mucho. Antes no solías prestar tanta atención a las chicas, pero ahora si lo haces. – dijo Mai.
- Bueno, creo que tienes razón. Aunque lo atribuyo a que actualmente vivo con casi puras mujeres. De hecho, solo el líder de los ángeles caídos y yo somos los únicos hombres en casa. – dijo Issei.
- ¿Huh? ¿Con cuántas personas vives? – cuestiono Mai curiosa.
- Somos 8 personas en casa. – dijo Issei.
- Entonces convives con 4 chicas. – dijo Mai.
- Si, aunque ahora que lo pienso bien, todas tienen muchos años de vida. De hecho, creo que tienen al menos un siglo de vida. – dijo Issei.
- Debo suponer que los seres sobrenaturales envejecen diferente a nosotros los humanos. – dijo Mai.
- Si, podría decirse que lo es. De hecho, una de ellas parece una chica de primer año de secundaria. – dijo Issei.
- En parte, eso parece genial. Quiero decir, seguro que parecer tan joven con más de un siglo encima es fantástico. – dijo Mai.
- Si, pero también pueden cambiar su apariencia con magia. Pueden hacerse ver más jóvenes o mayores. – dijo Issei.
- Eso suena útil. Me gustaría aprender magia para cambiar un poco mi aspecto. – dijo Mai.
- ¿Huh? ¿Por qué quieres cambiar tu aspecto? – pregunto Issei.
- Bueno, me gustaría tener ojos amarillos y quizás disminuir un poco mi altura. – dijo Mai.
- ¿Tu altura? – cuestiono Issei.
- Issei, soy muy alta. Demonios, soy incluso más alta que Arisu-sensei y muchos chicos de mi edad. – dijo Mai.
- ¿Qué tiene eso de malo? – cuestiono el castaño no encontrando problemas en eso.
- Issei, los chicos suelen sentirse intimidados por una chica más alta. A este paso nunca tendré un novio antes de iniciar mi vida universitaria. – dijo Mai con una nube depresiva sobre su cabeza.
- Ajajaja, vamos, deja el show. No le veo problema a que seas más alta que muchos chicos. De hecho, Haruhiko y yo somos más altos que tú. – dijo Issei.
- Haruhiko apenas y se nota más alto que yo, aunque contigo es un poco más evidente. Aun así, ese no es el punto… tonto. – dijo Mai con un puchero.
- Ajajaja, vamos, no seas tan dura contigo misma. No tiene nada de malo que seas más alta que la mayoría de chicos, podrás encontrar a alguien especial para ti. – dijo Issei ligeramente divertido.
- Mou, no te burles. Las inseguridades de una chica son difíciles. – dijo Mai poniendo mala cara sumada a su puchero.
- Heh, lo siento. El caso es que no deberías sentirte mal por ser más alta que muchos chicos de nuestra edad. Incluso el color de tus ojos es bonito, así que no cambies cosas de ti solo porque no son como esperabas. Estas bien como eres y alguien te aceptará tal cual sin que cambies algo. – dijo Issei.
Una pequeña sonrisa se dibujó en el rostro de Mai que se reclino apoyándose sobre el hombro derecho de Issei.
- Eres un tonto… harás que me enamore de ti si dices esas cosas. – dijo Mai.
- ¿Huh? Vamos, no bromees. Creo que soy el menos indicado para que busques una relación seria. – dijo el castaño.
- ¿Por qué lo dices? – Mai cuestiono.
- Veamos, estoy involucrado en un mundo peligroso, actualmente no soy bueno para las relaciones personales y lo más obvio, vivimos en diferentes ciudades. – dijo Issei.
- Bueno, quizás tienes un punto. – dijo Mai suspirando pesadamente.
- En todo caso, recuerdo que el año anterior estabas interesada en Haruhiko. ¿Por qué parece que eso cambio? – cuestiono Issei.
- ¿Eso? Bueno… ambos nos sentíamos atraídos, pero simplemente no se dieron las cosas. El crecimiento de nuestra popularidad hizo que simplemente pensáramos que podría ocurrir algún mal tercio. – dijo Mai.
- ¿En serio? ¿Solo por eso? Cielos, ustedes dos parecen unos niños. En mi nueva academia me he hecho bastante popular, pero eso no quiere decir que me interesen todas las chicas. Quizás por eso Ray-chan se siente segura. – dijo Issei murmurando lo último.
- Ohh, ¿así que Ray-chan ehh? Nunca te había escuchado usar ese sufijo con alguien que no sea Isami. – Mai le dio unos codazos suaves al castaño en complicidad.
- Mmm, supongo que baje mi guardia. Además, deje escapar eso. – dijo Issei con una sonrisa complicada.
- Y dime, ¿Quién es esa Ray-chan? Cuéntame un poco de ella. – pregunto Mai.
- Bueno… Raynare es realmente agradable y comprensiva. Le salve un par de veces, aunque la última… - recuerdos borrosos pasaron por la mente de Issei.
La sensación de opresión en su pecho, la profunda y pura ira al ver a Raynare y Aiko heridas de gravedad, la sensación plena y cálida que le transmitió la pelinegra cuando le confesó lo que sentía… todo eso le hicieron cuestionarse seriamente que estaba pasando tanto en su mente como en su corazón.
- "Si… no hay duda. Simplemente lo estoy tratando de negar, pero me he empezado a enamorar de Ray. El temor de poder perderla es lo que me hace negarlo, tanto como cuando Kazumi-san intenta acercarse. No me gusta que se preocupen por mí, pero eso solo es una fachada. Me gusta ese sentimiento de atención, solo que inconscientemente sé que podrían ponerse en riesgo solo por mí." – tras pensar en eso, el castaño cerró los ojos y suspiro.
Había mucho trabajo por hacer, demasiado si quería sentirse libre de amar a Raynare sin temer que algo le pase solo por estar cerca de él.
- "Aún me falta madurar." – pensó el castaño con una sonrisa.
- ¿Issei? – Mai le acaricio una mejilla al chico cuando este se quedó en silencio.
- Oh, lo siento. Acabe divagando, pero no pasa nada. – dijo el castaño con una sonrisa.
- ¿Qué era lo que estabas por decir antes? – cuestiono Mai.
- ¿Huh? Nada especial, solo que quizás debo aprender a entenderme mejor a mí mismo. – dijo Issei.
La rubia observo al castaño por unos segundos, pero se encogió de hombros y suspiró.
- Ah, como sea. – dijo Mai encogiéndose de hombros.
- Seguro. En todo caso, deberíamos ir adentro. Ya es algo tarde y debemos descansar para los partidos. – dijo Issei.
- Si, tienes razón. Espero que tu equipo y el mío se encuentren en la final. Se sentiría como luchar con el jefe final de un juego. – dijo Mai.
- Jajaja, esperemos que se dé así. También me gustaría que la final sea contra ustedes. Seguro les servirá ya que buscadores de talento asistirán a la gran final. – dijo Issei.
- Si, eso es un gran motivante para jugar bien. – dijo Mai.
Caminando de vuelta al interior de la casa, Issei tomo del hombro a la rubia y la miró con algo de seriedad.
- Por cierto, si les vuelven a encargar un trabajo que involucre a un demonio no dudes en llamarme. Los apoyaré mientras estoy en la ciudad. – dijo el castaño.
- C-claro, gracias Issei-kun. Buenas noches, descansa bien. – dijo Mai con una sonrisa antes de separarse de Issei.
Una sonrisa feliz se dibujó en el rostro de la rubia cuando volvió a la habitación y se envolvió en las mantas.
- "Ha cambiado un poco, pero creo que está aprendiendo a ser un poco más comprensivo sobre los sentimientos." – pensó Mai.
La noche paso como un momento fugaz, aunque esto no fue impedimento para que antes de las 7 AM el castaño ya estuviera listo para volver al hotel.
Saliendo de la habitación, Issei se encontró con Arisu que estaba recién levantada y llevaba un pijama sencillo.
- Buenos días sensei. – saludo el castaño.
Bostezando y estirándose para deshacerse del sueño, la mujer respondió.
- Mmm, buenos días Issei. Me sorprende verte levantado tan temprano. – dijo la mujer.
- De hecho, esto es algo tarde. Suelo levantarme antes de las 5 cuando entreno. – dijo Issei.
- Ya veo. Supongo que te diriges al hotel para cambiarte y llegar con tu equipo al parque Ariake. – dijo Arisu.
- Si, así es sensei. – confirmo Issei.
- ¿No quieres algo antes de irte? Quizás un café con una tostada. – ofreció la mujer.
- Mmm, supongo que está bien. Eso no tardara más de unos 20 minutos. – dijo Issei.
- Genial, vamos a la cocina. – dijo Arisu bajando las escaleras seguida del castaño.
Grigori
Reunida con Penemue y Mittelt, Isami estaba ahora mismo meditando.
Las manos de la castaña tenían algunas vendas debido a que el día anterior se había lastimado al producir magia de rayo, solo que no la pudo mantener y controlar acabando por lastimarse. Sin embargo, a pesar de eso fue felicitada por Baraqiel.
El mismo hombre se sorprendió que finalizando el día, Isami hubiera podido manifestar magia de rayo. Mientras que a Issei le tomo en promedio 5 días hacer exactamente lo mismo que Isami, a esta le tomo solo un día completo.
Esto había motivado mucho a la castaña, pues Baraqiel le dijo que podría ser un raro caso de prodigio. No importaba si tenía afinidad por todos los elementos, la magia de rayo era casi que imposible de lograr manifestarla en solo un día de preparación del elemento.
- "Según Baraqiel, Isami puede ser una prodigio en la magia elemental. Aunque tiene sus motivos para creerlo, pues nadie había logrado manifestar magia de rayo el mismo día que empezó a prepararse para emplearla. No importa que la afinidad sea increíblemente alta, simplemente es imposible. Bueno, lo era hasta que Isami demostró lo contrario. Esa niña… ella tiene algo especial en ella. El idiota de Azazel debe evitar que ella se vaya a otra facción o mitología." – pensó Penemue mientras observaba con detalle como una corriente de aire y un delgado hilo de agua rodeaban al centro de sus pensamientos.
Mittelt miró a la cadre con una sonrisa que le fue correspondida, pues las dos podían sentir la emoción de que la castaña estaba logrando un ejercicio con dos elementos con lo que parecía facilidad.
- "Creo que esto es lo que Isami necesitaba. Poder enfocarse en su entrenamientos sin ningún tipo de preocupación, cosa que le permitiría enfocarse de mejor manera." – pensó la rubia.
Después de unos minutos, la castaña empezó a sudar y dejo su pose de meditación soltando un gran suspiro y empezando a jadear.
- ¿C-Cómo lo hice? – pregunto Isami.
- Estuviste genial. Ahora mismo, es evidente que tu única falencia es tu poco poder mágico. Por el momento, creo que ya puedes descansar el resto del día. Sigue meditando y usando pequeñas porciones de magia para que tus reservas crezcan y eso sería todo por hoy. – dijo Penemue.
- Entendido. – dijo Isami con una gran sonrisa.
En otra zona de Grigori podemos ver a Raynare entrenando. Una vista algo curiosa de ver ya que la pelinegra llevaba mucho tiempo sin hacerlo.
Kazumi a cierta distancia estaba observando intrigada, pues Raynare había dejado de mostrar interés en entrenar al decir que sus 8 alas bastaban para los trabajos que usualmente le encargaba Azazel.
- "¿Por qué has vuelto a entrenar? ¿Acaso algo te preocupa?" – se cuestionó la kitsune notando como la pelinegra producía una lanza de luz a la que le añadió fuego.
Lanzando el arma, esta impacto con una pared y la redujo a nada tras una fuerte explosión.
- "Ese ataque es fuerte, tan fuerte que creo que podría herir a alguien como Armaros o Baraqiel que tienen una defensa muy sólida." – pensó Kazumi.
Sin embargo, Raynare no pensaba eso.
- Tch, aún es muy débil. A este paso, solo acabare por ser un estorbo para Ise-kun. Él pudo enfrentar a Kokabiel siendo mucho más débil y ganar, pero yo no. Aún soy más fuerte que Issei, pero él sigue aumentando su fuerza cada día. Quiero ser una digna pareja para él, quiero ser capaz de combatir a su lado y protegerlo cuando este vulnerable. – dejándose caer al suelo, la pelinegra suspiro. – Estoy estancada. Siento que mi fuerza de alguna manera esta retenida. No me he podido hacer más fuerte por alguna razón, pero no sé a qué se debe. Dejé de entrenar solo porque no pude fortalecerme más, pero esto ya es ridículo. ¿En serio este es mi limite? –
Con evidente frustración, Raynare miró al cielo. A pesar de haber sido una ángel caída toda su vida, la pelinegra sentía que el cielo era como un refugió. Mientras otros caídos sentían repulsión solo con verlo, la pelinegra sentía una indescriptible sensación de paz.
- Los humanos oran a los dioses cuando se sienten impotentes, ¿pero a quien recurrimos nosotros los seres sobrenaturales? No tenemos un dios que nos ampare a todos. – se preguntó Raynare.
Sintiendo que su pregunta era tonta, la pelinegra se levantó y decidió irse a descansar.
Inframundo – Territorio Agares
En la mansión principal de los terrenos Agares, la actual heredera se encontraba en su habitación mientras miraba un dispositivo holográfico donde repetía la batalla de la nobleza Phoenix contra Issei.
Había estado pensando en formas de tratar de defenderse del castaño en caso de que fuera hostil cuando intentará acercarse, pero cierta afición suya le hizo difícil concentrarse.
- ¡Aahh! Maldita sea, porque su tonta armadura tiene que parecerse a un mecha. Ahora solo me viene a la mente formas de modificarla para hacerla más eficiente. – la rubia se quejó tirándose sobre su cama.
A su mente también volvieron los recuerdos de la reunión entre los líderes de las 3 facciones.
Si bien el encuentro fue muy bueno, los problemas surgieron de alguna manera y pudo apreciar parte de la verdadera fuerza del castaño.
- Esas llamas… no solo son poderosas. También parecen incrementar sus capacidades. Me pregunto si se podrían fusionar con su armadura completa. Seguro eso daría nacimiento a un monstruo de combate. – pensó Seekvaira.
Tras unos segundos, la chica se revolvió el cabello algo molesta.
- ¡Aaaahhh! Ahora pienso como si el fuera mi siervo y quisiera ayudarlo a hacerse más fuerte. ¿Qué rayos pasa conmigo? Siento un genuino interés por él, pero está lejos de ser lo que quiere el consejo. Me interesa más tenerlo como aliado, quizás un amigo. – se dijo Seekvaira a sí misma.
Sin embargo, esto trajo una ola de recuerdos de cómo ha sido su vida.
- Ahh, creo que lo comprendo. Yo… he sido solo una chica que se comporta como una noble alta y refinada. Eso nunca ayudo a mi actitud, nunca he tenido un amigo, al menos no uno que sea un chico. Supongo que inconscientemente quiero lograr eso con el Sekiryuutei. No me interesa como hombre, pero quizás… quizás con él pueda conocer lo que es tener un amigo que se preocupe por mi como lo hace por su familia. –
Seekvaira se puso de pie y salió de su habitación con el objetivo de tomar una caminata. Sentía que debía despejar su cabeza, pero no sabía si lo que se dijo a sí misma era real o no.
Tener un amigo era algo que no comprendía, después de todo, solo había tenido a una especie de amiga en Rias cuando eran niñas. Claro que eso fue bastante fugaz ya que al crecer tomo responsabilidades y estudios importantes para ser una buena heredera.
- Mis padres nunca me presionaron a nada, pero supongo que fui yo misma la que se autoexigió demasiado. Yo misma me arruine al punto que no sé cómo crear amistades o relaciones interpersonales nuevas. – murmuró la rubia mientras caminaba por los pasillos.
Territorio Sitri
En la zona restringida de la biblioteca se encontraba la nobleza de Sona aun explorando el lugar. Algunos de los chicos habían encontrado libros interesantes que tomaron, pero no los leyeron aún al estar buscando las peticiones de su rey.
Ahora mismo, la albina del grupo acababa de encontrar un libro con una cubierta bastante peculiar.
- Este libro parece cubierto de escamas. – murmuro Momo tomando el libro de la estantería donde lo encontró.
Justo cuando su mano entró en contacto con la cubierta del libro, la chica tuvo una sensación extraña. Era casi como si hubiera encontrado algo realmente peculiar.
Al mirar la portada notó que no había un nombre en la misma, pero si había algo bastante peculiar.
Un símbolo con forma de la cabeza de un dragón envuelto por lo que parecía una llama.
- Creo que puede ser útil. – murmuro Momo abriendo el libro.
El primer obstáculo se le presento tan pronto miro las letras del libro.
- Ugh, no entiendo nada de esto. – dijo Momo y suspiró. – Supongo que lo llevare conmigo hasta que nos reunamos con Kaichou. Quizás ella si lo pueda leer. –
Guardando el libro en un maletín que llevaba, la albina retomo su búsqueda de más libros.
Por otro lado, la propia Sona acababa de encontrar un libro que llamo su atención de manera muy especial.
- "Origen de Sitri." – murmuro la pelinegra leyendo la portada de un libro que lucía especialmente viejo ya que estaba bastante deteriorada su cubierta.
No pudiendo evitar su curiosidad, Sona tomo el libro y se arrodillo en el suelo para darle un vistazo.
Inmediatamente la pelinegra notó que el libro era más que antiguo, pues el idioma era el antiguo que usaban los demonios.
- Este libro debe ser cercano a la época en la que vivió el fundador del clan. – murmuró Sona mientras buscaba un libro en el maletín que llevaba consigo. – Tendré que traducir algunas cosas ya que no soy fluida con este antiguo idioma. –
Gran sorpresa se llevó Sona cuando la primera palabra que no entendió y tuvo que traducir decía lo siguiente.
Leviathan
- ¿Q-Qué tiene que ver el rey demonio Leviathan con los Sitri? – la mente de la pelinegra empezó a dar vueltas en ese momento intentando descubrirlo por sí misma, pero le fue imposible. – Se que vine a buscar información sobre las llamas monarcas, los dragones y el senjutsu, pero no puedo dejar pasar esto. –
Con absoluta convicción, Sona se levantó y se dirigió a una zona que parecía una banqueta donde se sentó a empezar a descifrar más sobre lo que decía el libro.
Tokio
En horas de la tarde cuando ya habían finalizado los partidos de tenis, Issei y Kiyome iban juntos después de que los demás miembros del equipo salieran a explorar por su cuenta la ciudad.
- Si que tenían ánimo de salir solos. – comento Issei mientras caminaban entre la gran multitud de personas que iban por la calle.
- Bueno, el plan original era que saliéramos juntos, pero bueno. – dijo Kiyome con una risita nerviosa.
- Bueno, igual creo que nos da bastante libertad para movernos más rápido. Dime Kiyome, ¿algún tipo de lugar que te gustaría visitar? – pregunto Issei.
Pensando seriamente en su respuesta, la castaña de rizos considero las múltiples opciones que vinieron a su mente.
- Mmm, no lo sé realmente. ¿Qué consideras bueno para hacer? Tu conoces la ciudad, así que guiame I-kun. – dijo Kiyome.
- Me lo pones difícil en ese aspecto, pero tengo una idea. – dijo Issei.
- ¿De qué se trata? – pregunto Kiyome emocionada.
- ¿Te interesa ir a la Torre de Tokio? Es bastante cerca, por lo que no será costoso el transporte. – dijo Issei.
- Mmm, suena bien. Vamos. – dijo Kiyome.
- Bien, viajaremos en metro. Vamos. – dijo Issei mientras la chica aceleraba el paso junto a él.
Después de poco más de media hora, los dos castaños llegaron al destino.
Siendo que ya empezaba a ocultarse el sol, la vista desde el mirador de la torre fue una maravilla para Kiyome.
- La vista desde aquí es hermosa. – dijo la castaña.
- Si, lo es. Antes de irnos deberíamos comprar algunas cosas en la tienda de regalos. – dijo Issei.
- Me parece bien, pero también quiero algo más. – dijo Kiyome.
- ¿Huh? ¿Qué quieres? – cuestiono Issei.
- ¿P-Podríamos tomarnos una foto juntos? – pregunto Kiyome.
- ¿Una foto? Mmm, seguro, ¿Por qué no? – dijo el castaño encogiéndose de hombros.
- ¡Yatta! – celebró Kiyome tomando su celular de un pequeño bolso que llevaba con ella. (Pdt: Yatta es hurra en japones)
Acercándose a Issei, la chica preparo la cámara del móvil y tomó varias selfies.
- ¿Te molesta si uso una como foto de mi perfil? – Kiyome pregunto cuando se dirigían a una tienda de recuerdos.
- Siéntete libre de usar cualquiera. – respondió Issei sin importarle realmente.
- Bien. Oh, también te las enviaré. – dijo Kiyome.
- Jajaja, seguro. – dijo el castaño con una sonrisa.
Mientras buscaban algo para comprar, el castaño recibió una llamada inesperada.
- ¿Ray-chan? – murmuro Issei mirando su celular antes de atender. – Diga. –
- "Ise-kun." – la voz de Raynare se escuchó al otro lado de la línea.
- Mmm, ¿ocurre algo Ray-chan? – pregunto Issei.
- "¿Huh? N-Nada, s-solo quería escucharte." – dijo Raynare con un tono nervioso y algo avergonzado.
- Ejeje, oye, apenas han pasado un par de días. ¿Tanto me extrañas? – cuestiono Issei medio en broma.
- "Huh, yo… bueno… quizás un poco." – respondió suavemente la pelinegra tomando por sorpresa al castaño.
Dum-dum
Sintiendo que su corazón empezó a latir con fuerza, Issei se quedó sin una respuesta para dar.
- "Creo que me he acostumbrado a estar cerca de ti, es todo. Uhh, perdón si llame en un mal momento." – dijo Raynare.
- N-No, está bien. P-Podrías llamarme en un par de horas, es que ahora no estoy en el hotel. – dijo el castaño.
- "C-Claro, te llamaré más tarde. O quizás podríamos mandarnos mensajes." – el tono de Raynare se hizo evidentemente feliz, aunque Issei tenía una pregunta.
- Mmm, por cierto Ray, ¿cómo me llamaste? Se supone que estas en Grigori. – cuestiono el chico.
- "¿Eso? B-bueno, vine a la casa." – dijo Raynare.
- ¿En serio fuiste a la casa solo para llamarme? – cuestiono Issei.
- "¡N-No me juzgues!" – dijo Raynare mientras se sonrojaba del otro lado de la línea.
- Ajajaja, no-no, está bien. Entonces, te enviaré un mensaje cuando ya este de regreso en el hotel. – dijo Issei.
- "S-Si, lo esperaré con ansias." – dijo Raynare.
- Bien, adiós Ray-chan. – dijo Issei.
- "¡E-Espera! ¿P-Puedo… puedo dormir en tu cama esta noche? ¡Prometo dejar todo ordenado!" – pregunto Raynare con un tono suplicante.
- ¿Huh? Bueno, supongo que puedes. No me molesta. – dijo Issei.
Sin saberlo el castaño, Raynare sonrió de manera alegre mientras salía de su cuarto y se dirigía al del chico.
- "Bien, espero tu mensaje Ise-kun" – dijo la pelinegra terminando la llamada.
Issei suspiró una vez que finalizó la llamada, pero una sonrisa se dibujó en su rostro. La llamada aunque inesperada, termino por alegrarle al poder escuchar a Raynare.
Por otro lado en la casa, la pelinegra ya estaba en el cuarto del castaño donde se dejó caer sobre la cama.
Casi al instante tomo la almohada y la abrazo mientras sentía el aroma de Issei en la misma.
- Ahh, espero no parecer una especie de pervertida por hacer esto. – murmuro Raynare arropándose con las mantas mientras seguía abrazando la almohada y se frotaba constantemente contra esta. (No va a haber cochinadas… a menos que las pidan XD)
Claro que esto también tenía un efecto secundario, pues las feromonas de Issei estaban más concentradas en su cama así como en su ropa ya que estaban en contacto directo con este la mayor parte del tiempo.
Esto simplemente hizo que Raynare se sintiera aún más embriagada al estar en la cama del castaño.
- Ise-Ise-Ise. – murmuraba la pelinegra en repetidas ocasiones.
Volviendo con el castaño, este estaba pagando por un llavero que tomo como recuerdo. Al salir, vio que Kiyome ya estaba fuera de la tienda.
- Vaya, fuiste rápida. ¿Qué compraste? – pregunto Issei.
- Una pulsera. – dijo la castaña mostrándole el objeto que ya se había puesto.
- Bastante apropiado diría yo. Vamos al hotel, no queremos que nos dejen por fuera. – dijo Issei.
- Si, no quiero dormir en la calle. – dijo Kiyome.
Partiendo a la estación del metro, ambos castaños pudieron apreciar lo hermoso de la ciudad durante la noche.
Una vez que pudieron abordar el metro, Kiyome hizo un comentario.
- Que raro, esta vació. –
- Quizás se debe a que muchas personas no suelen salir ya durante la noche, aunque si es extraño que no haya nadie. – dijo Issei que inmediatamente se comunicó con su inquilino. – "Oye Ddraig, ¿sientes algo raro? Porque siendo honesto, no logró captar nada." –
- "[No hay demonios si es lo que te preocupa compañero. Quizás esto se debe a algún Phantom, pero no representa peligro para nadie. Como lo dije, los Phantoms son la más baja escala en el mundo sobrenatural. Es raro que uno supere el poder de un demonio de clase baja.]" – respondió el dragón.
- "Ya veo. Por favor mantenme informado si algo cambia." – dijo Issei.
- "[Seguro compañero, puedes estar tranquilo.]" – dijo Ddraig.
- Sentémonos, no creo que ocurra nada malo. En todo caso, solo necesitamos volver al hotel. – dijo Issei.
- C-claro. – dijo Kiyome.
Sorpresivamente para Issei, el viaje fue sin ningún tipo de problemas. Llegaron al hotel justo 10 minutos antes de que cerraran.
- Bien, justo a tiempo. – dijo el castaño cuando subieron al ascensor.
- Si, fue un tiempo perfecto. La pase bien, gracias I-kun. – dijo Kiyome.
- Claro, no hay problema. – asintió Issei.
Justo al llegar a las puertas de sus habitaciones, los dos castaños se desearon las buenas noches antes de ingresar cada uno a su cuarto.
Dejándose caer sobre la cama, Kiyome suspiro mientras tenía una sonrisa en su rostro.
- Para ser una salida informal, creo que estuvo bastante bien. Podría considerarlo una cita si vamos a comer algo juntos. – murmuro la castaña mientras revisaba las fotos que se tomó con el castaño y le enviaba una copia al chico.
Por su parte, Issei se metió al baño para darse una ducha rápida antes de cambiarse y acostarse en su cama.
Reviso los mensajes que tenía siendo las fotos que Kiyome le envió. Una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro, pues había disfrutado de la pequeña salida.
Sin embargo, busco de inmediato el contacto de Raynare y le envió un mensaje.
- "Ya estoy en el hotel." –
No pasó ni un minuto cuando recibió su respuesta.
- "¿Te has divertido?" – pregunto la pelinegra.
- "Si, ha sido divertido. Me reuní con un grupo de amigos de mi anterior academia." – respondió Issei con una sonrisa en su rostro.
La pelinegra y el castaño se mensajearon por horas hasta que les dio alrededor de las 2 de la madrugada.
En ese momento, aunque reacio ya que estaba feliz por hablar con Raynare, Issei tuvo que despedirse de la chica para poder descansar al menos un poco.
La pelinegra se desanimó un poco cuando el castaño dijo que era hora de despedirse, pero le gusto leer en el mensaje una parte de que decía "Es hora de dormir, aunque podemos repetirlo en otro momento".
- Creo que empiezo a ser más especial que antes. – murmuro Raynare para sí misma sintiendo una calidez sin igual en su pecho. – Estar enamorada… es muy diferente de lo que pensé que era. Se siente bien, pero seguro sería mejor al compartir más tiempo con esa persona especial. –
Dejando su celular a un lado, Raynare abrazo con fuerza la almohada de Issei imaginando que era el castaño.
- La próxima vez que te vea no te soltare a menos que sea necesario. – murmuro la pelinegra antes de empezar a sentir que el sueño la reclamaba.
Una semana Después
Inframundo – Territorio Sitri
Después de varios días de salir de la zona restringida de la biblioteca, Sona Sitri tenía que pensar seriamente sobre las cosas que descubrieron en el lugar.
Aparte del hecho de que sus siervos encontraron cosas de su interés propio, Momo había encontrado información valiosa sobre un tema en específico… las llamas monarcas.
- Aún no puedo creer que existen 5 llamas primordiales y aun así, dentro de esas 5 una es la primordial más poderosa. – murmuro Sona en su habitación mientras revisaba dicha información.
La preocupación de la pelinegra estaba centrada en cierto castaño.
- Issei-san tiene una llama realmente poderosa, pero por lo visto, el verdadero poder de una llama monarca primordial nunca fue visto en las eras que los demonios surgieron. Si queremos saber el alcance de estas, se debe de consultar a un ser antiguo. Claro que la única opción sería un dragón que provenga de esa erá mítica. – dijo Sona.
Sin embargo, esa no era su única información importante. A pesar de que encontraron información de senjutsu y los dragones, la información sobre la relación de Leviathan con su clan le daba vueltas a su cabeza. Todo esto debido a que estuvo equivocada al principio, no se trataba de una relación con el Maou Leviathan y su clan… era algo más sorprendente aún.
- ¿Qué tiene que ver la criatura Leviathan con nuestro clan realmente? No creo que eso sea solo un mito. – murmuro Sona mientras revisaba su celular en el cual tomo fotos de todas las páginas del libro.
Tuvo suerte que de esa manera logro "sacar" el contenido de la biblioteca sin consecuencias, pero el libro estaba bastante deteriorado que le costaba leer bien sobre lo que narraba.
Hasta el momento, la pelinegra solo tenía un fragmento de lo que parecía ser una historia.
"Leviathan, un nombre que causo terror absoluto en el pasado. Un dragón acuático que formaba parte del reino del monarca de los dragones que era su hermano. Sin embargo, un día se dejo influenciar por aquellos que codiciaban el trono y trato de arrebatarlo a su hermano.
La ira de su monarca fue tanta que casi lo acabo por matar al usar sus llamas monarcas de la destrucción, pero sus propias llamas lograron defenderlo. Tras sobrevivir a una batalla feroz, Leviathan fue despojado de gran parte de su poder y desterrado por su hermano.
Aquellos que lo influenciaron a batallar contra su hermano le dieron la espalda temerosos del poder de su líder, por lo cual el Leviathan acabo solo y se sumergió en el basto mar esperando encontrar una manera de mostrar a su hermano que estaba arrepentido.
Reinando entre las criaturas marinas, el Leviathan quiso ser similar a su hermano y dirigir todo un mundo. Si su hermano gobernaba gran parte de la tierra, él podría gobernar gran parte del mar.
Con el tiempo, logró establecerse con una fuerza dominante, pero justa…"
Eso era todo lo que Sona tenía del libro ya que después de eso, las páginas eran un desastre total. Si podía reconocer una letra o palabra era muy bueno, pero lo demás era completamente ilegible.
- Solo puedo decir que el Leviathan fue bastante fuerte como para enfrentar al ser más poderoso de aquel tiempo. Sin embargo, aún necesito saber por qué aparece en un libro que narra el origen de mi clan. – dijo Sona.
Las únicas similitudes que encontró eran que tanto los Sitri como el Leviathan podían controlar las corrientes de agua, pero no era tan especial ya que el Maou Leviathan original también podía hacer eso.
Decidiendo descansar ya por el día, Sona decidió salir de su habitación y ver a sus siervos.
Salto de Tiempo
(porque no me voy a estancar unos 5 capítulos con Issei ayudando a cazar algunos pocos Phantoms y con Isami entrenando más que nada con el objetivo de aumentar sus reservas de poder mágico. Tampoco quiero aburrirlos ya que seguro esperan la historia principal y el desarrollo de Issei con las chicas. Sin embargo, siéntase libres de pedir un capítulo OVA donde incluya minihistorias que ocurrieron en los lapsos de tiempo que me salte)
Grigori – Oficina del Vicegobernador
Preparado y vistiendo un traje casual compuesto por pantalones beige, una camisa blanca, un blazer azul oscuro y como calzado unos mocasines marrones estaba Baraqiel.
El hombre estaba listo para ir a Tokio con el objetivo de ver las finales de tenis del torneo entre academias, después de todo, le prometió a Issei asistir si su equipo llegaba hasta las finales.
Junto al cadre, estaba Raynare vistiendo con un bonito vestido de una pieza color lila y zapatillas de color blanco. Lo complemento con una pulsera que parecía de plata y el collar que Issei le había regalado.
La pelinegra había hablado con Baraqiel para ir con este a ver la final de los partidos y darle una sorpresa a Issei, cosa que el hombre no vio mal. De hecho, el cadre ahora mismo entendía que Raynare parecía más que interesada en el castaño, pues nunca la había visto tan interesada en alguien.
- Raynare, tu estas interesada en Issei, ¿no es así? – Baraqiel pregunto.
- ¡¿Huh?! Ehh, b-bueno… yoooo… - sonrojándose y poniéndose nerviosa, la pelinegra no supo cómo responder a la inesperada pregunta.
- Ajajajaja, eso está bien. Creo que Issei es el hombre correcto para ti. – dijo Baraqiel.
- ¿E-en serio? – pregunto tímidamente la pelinegra.
- Si, estoy seguro. Si hay alguien que seguro te amará y cuidará, estoy convencido de que ese alguien es Issei. – dijo Baraqiel.
- Tu también pareces muy conforme con Ise-kun. ¿Acaso has desarrollado algún tipo de apego por él? – pregunto Raynare.
Ver que el hombre se quedó en silencio le hizo pensar a la pelinegra que pregunto algo innecesario, razón por la cual pensaba en disculparse.
- L-Lo siento, c-creo que no es un asunto de mi incumbencia. – dijo Raynare.
- No… está bien. Es solo que… diste de lleno al clavo. No sé, pero a Issei lo veo casi como a un hijo. Él llegó roto a Grigori, pero aun así seguía insistiendo en entrenar. Sin embargo, lo vi colapsar y casi desmoronarse cuando entrenó para enfrentar al demonio Phoenix. – dijo Baraqiel.
Los ojos de Raynare se abrieron con sorpresa al escuchar eso, pero su mirada le dijo al hombre que quería escuchar más.
- Los primeros días que empezó a entrenar lo hizo bien, pero su cuerpo al ser mitad humano tenía un límite marcado. Al quinto día su fuerza empezó a fallarle, cosa que lo hizo sentirse desesperado ya que no había logrado manifestar ni un poco de magia de rayo. Es increíble como puedes ver a alguien ser tan vulnerable cuando quiere proteger a alguien. – dijo Baraqiel.
- ¿Qué sucedió? – cuestiono Raynare.
El rostro del cadre se suavizo para sorpresa de la pelinegra y lo vio esbozar una suave sonrisa.
- Issei empezó a llorar y golpear el suelo hasta que sus manos empezaron a sangrar. Grito como loco que no era justo, que no iba a perder a su hermana y sus nuevas amigas solo por el capricho de un demonio. Cuando lo quise detener, su cuerpo liberó una densa energía roja y su mano derecha se cubrió de una delgada capa de magia de rayo. Antes de darse cuenta, toda el área a su alrededor era un agujero. Una simple y delgada cantidad de magia de rayo sumada a su impotencia e ira y su poder mágico hicieron tanto daño. – dijo Baraqiel.
- Ise-kun… ¿realmente estaba tan desesperado? – Raynare pregunto.
- Si, la muerte de sus padres lo dejó marcado profundamente. El chico no lo demuestra, pero se encariña rápido con los que intentan ayudarle. Se siente culpable por lo que le paso a sus padres, aunque tampoco se puede evitar. Desbloqueo su poder solo cuando ya habían sido asesinados, cosa que crearía frustración en cualquiera. Si él quiere sanar, debe entender que ser el Sekiryuutei no significa que debe proteger a todos. Ese poder no es lo que provocó la muerte de sus padres, fue el destino que decidió ser cruel. – dijo Baraqiel.
- ¿Hablaste con él? – pregunto Raynare mientras sentía su corazón apretarse en su pecho.
No se imaginó que tan mal se sentía Issei en aquel momento, pero ahora se podía dar una idea. El castaño siempre estaba intentando ser fuerte, cosa que le hizo entender algo.
- "Ya veo, es por eso que dijo que no sabía que decir ante mi confesión. Entonces, debo sentirme afortunada de que incluso dijera que podría explorar sus sentimientos por mí. Si realmente tiene miedo de perdernos, significa que solo debo darle la confianza para creer en sí mismo y en nosotros." – se dijo mentalmente la pelinegra.
Saliendo de sus pensamientos, escucho a Baraqiel responder su pregunta de antes.
- Si, hable con él. Una noche note que estaba teniendo una pesadilla, aunque lo peculiar fue que la marca en su pecho brillaba con intensidad y su cuerpo alcanzó temperaturas irreales. El caso es que me las arregle para despertarlo. Sin embargo, nunca en mi vida pensé que vería a alguien con un alma inocente tan rota, pero supongo que el destino es más cruel con aquellos que son demasiado amables. – dijo Baraqiel.
- ¿Con qué estaba soñando? – pregunto Raynare.
- Me costó hacer que me hablara de eso, pero al final lo hizo. En varias noches había estado reviviendo en sus sueños la muerte de sus padres, cosa que lo estaba rompiendo poco a poco. Eso explicaba porque estaba tan desesperado por hacerse más fuerte. Sin embargo, creo que ya ha empezado a superar esa difícil etapa de su vida. Lo noté bastante más alegre la última vez, y creo que ya sé por qué es eso. – dijo Baraqiel dándole una mirada cómplice a la pelinegra que se sonrojo.
- ¿T-Te dijo algo? – pregunto Raynare.
- Solo dijo que quizás había alguien que empezaba a tener su atención. – dijo Baraqiel.
- Y-Ya veo. Entonces, ¿es por eso que ves a Issei casi como a un hijo? – cuestiono Raynare.
- Creo que en su mayor parte se debe a que me recordó a mi cuando perdí a mi esposa. Claro que no puedo comparar el dolor, pues Issei estaba peor. Perder a quien te crio y educo durante 17 años no debió ser fácil, en especial al ver como sucedió. Él es realmente fuerte, algo digno de admirar a su corta edad. Me agrada mucho el chico, por lo cual le he tomado apreció. Si hubiera tenido un hijo con Shuri, definitivamente me hubiera gustado que fuera como Issei. – dijo Baraqiel.
- Ya veo. – dijo Raynare.
- En todo caso, se nos hace tarde. He estado antes en Tokio, aunque no en la zona donde esta Issei. Tendremos que viajar en algún transporte humano para no llamar demasiado la atención. – dijo Baraqiel.
- ¿Se van tan pronto? – Azazel apareció cruzando la puerta de la sala.
- Si, no voy a llegar tarde. – dijo Baraqiel.
- Bien, quiero pedirles un favor a los dos. – dijo Azazel con un tono serio.
- ¿Un favor? – Raynare cuestiono preguntándose que podría ser.
- Seguro no has olvidado que Issei decidió reportar que había estado matando algunos demonios renegados que se encontró en Tokio junto a unos amigos que cazan Phantoms, ¿verdad? – cuestiono Azazel.
La pelinegra recordó en ese momento que hace solo 4 días atrás, Issei le envió un documento para que lo hiciera llegar a Azazel.
Su líder compartió la información con ellos y con los Maous debido a que era información relacionada a demonios, cosa que les hizo estar atentos.
- Si, lo recuerdo. – dijo Raynare.
- Bueno, Sirzechs me pidió de favor que Issei hiciera un rastreo completo a todo Tokio, pero eso es estúpidamente ridículo debido al tamaño de la ciudad. Espero que ustedes 2 se unan a él y al grupo de cazadores de Phantoms para hacer ese trabajo. Ya me comuniqué con el director de esa academia, por lo cual no tendrán problemas. – dijo Azazel.
- ¿Por qué tenemos que hacer el estúpido trabajo de los demonios? – Raynare cuestiono evidentemente molesta.
- Tengo que estar de acuerdo con ella, no es nuestro deber atender asuntos de los demonios. Si no pueden mantener un rastreo perfecto de los demonios renegados que escapan es su problema, no nuestro. – dijo Baraqiel.
- Si, lo sé, pero es un favor que nos quedaran debiendo. Será útil en el futuro ya que se lo deberán específicamente a Issei. – dijo Azazel.
- Pff, a Ise-kun poco le pueden importar los favores de los demonios. – resoplo Raynare mientras Baraqiel hacía un gesto de acuerdo.
- Miren, solo háganlo por esta ocasión. Estoy seguro que Issei pedirá algo útil con ese favor, después de todo es un genio. – dijo Azazel.
- Ahh, bien. Pero harás mi trabajo por una semana Azazel. – dijo Baraqiel mirando a su líder.
- Ugh, s-supongo que puedo. – dijo Azazel.
- Y yo no quiero que me molestes en la casa cuando estemos de vuelta. – dijo Raynare con mala cara.
- Ahh, de acuerdo. – suspiro el hombre de mechón rubio.
Baraqiel y Raynare chocaron los cinco en una vista bastante única por no decir extraña.
- Bien, nos vamos. – dijo el cadre así su círculo mágico apareciendo a sus pies y desapareciendo con la pelinegra en un destello de luz.
Azazel miró por unos segundos donde estaban antes los dos ángeles caídos y suspiro nuevamente.
- Creo que nadie me respeta ya como líder. Desde la llegada de Issei, parece que todos hubieran dejado de ser los de antes y se pusieran mucho más serios. – murmuro Azazel para irse de la oficina de Baraqiel.
Tokio – Distrito Itabachi
Apareciendo en la cima de un edificio, Baraqiel y Raynare sintieron la brisa del viento golpearlos.
- Mmm, ¿Dónde fue que Issei dijo que estaba ubicado el lugar donde jugarían la final? – pregunto el hombre.
- Están en el distrito Ariake, Parque de Tenis Ariake. Deberíamos buscar una estación de metro para ver qué tan lejos estamos. – respondió Raynare.
- Heh, que no se note que quieres verlo. – dijo Baraqiel bromeando, algo raro en el hombre.
La pelinegra por su parte se sonrojo y desvió la mirada a otro lado.
- Jajaja, bien, solo vamos. – dijo Baraqiel mientras se lanzaba de la cima del edificio.
Raynare lo siguió mientras expandía una pequeña barrera para evitar ser notados hasta que cayeron en un callejón.
- Pediré algunas indicaciones. – dijo la pelinegra saliendo del callejón seguida por Baraqiel.
Acercándose a un grupo de mujeres, Raynare tuvo la información del distrito en el que se encontraban y cuanto tardarían en metro para llegar a su destino.
- Estamos en el distrito Itabachi y el viaje hasta el distrito Ariake toma cerca de 40 minutos en el metro. No quiero tardar tanto, pero realmente no sabemos llegar al lugar. Aunque… podríamos hacerlo si intento localizar la energía de Ise-kun. No debería ser difícil siendo que es mitad dragón. – dijo Raynare.
- Mmm, tu idea es buena. Vamos a intentarlo. – dijo Baraqiel mientras volvían al callejón.
Poniéndose la pulsera para adquirir los rasgos de kitsune, Raynare se esforzó por encontrar la energía de Issei.
Varios minutos pasaron hasta que las orejas de la pelinegra se agitaron suavemente y una sonrisa se dibujó en su rostro.
- Lo encontré. Tenemos que ir al sureste. – dijo Raynare.
- Perfecto, en marcha. – dijo Baraqiel.
Desplegando solo un par de sus alas, ambos caídos tomaron vuelo al tiempo que usaban magia para no ser vistos.
Parque de Tenis Ariake
Reunidos en el estadio principal y el secundario, había una sorprendente cantidad de personas presentes en el evento de la final.
- Asistieron muchas personas. – comento Issei estando al lado de Kiyome frente a su equipo.
- Si, parece que tendremos que dar un gran espectáculo. – dijo la castaña de rizos.
- Heh, dalo por hecho. No tengo duda de que contra el equipo de mi antigua academia tendremos muy buenos partidos. Seguro se lucirán todos. – dijo Issei.
- Mirá, allí están los buscadores de talento. – dijo Kiyome señalando a un pequeño palco apartado.
- Heh, espero que recibas una invitación de ellos. Seguro podrás asistir a una escuela especializada en tenis. – dijo Issei.
- Seria un sueño hecho realidad. – dijo Kiyome.
- "Damas y caballeros, sean bienvenidos a la final del torneo de tenis entre academias. Hoy verán a 8 talentosos jóvenes enfrentarse tanto en equipos como en partidos individuales para definir a los mejores. Tendremos un total de 5 partidos, algo bastante conveniente ya que se encuentran empatados en puntos actualmente. No olviden que los sets ganados otorgan un punto extra y el partido ganado da dos puntos. – anuncio un presentador.
La emoción de los aficionados no se hizo esperar cuando gritaron apoyando a un equipo principalmente.
- ¡Vamos Academia Hosea, son los mejores! –
La popularidad del equipo local era evidente, pero de las pocas personas que reconocían a Issei fueron los que acabaron por apoyar a la academia Kuoh. Además, la participación en kendo por parte del equipo liderado por Murayama y Katase había sido impecable al conseguir un segundo lugar el día anterior.
Además, el equipo de atletismo de la academia Kuoh obtuvo un tercer lugar en su competencia. Esto hizo que la academia fuera reconocida con buenos talentos deportivos, algo que sin duda atraería la atención sobre la misma.
- "Para esta final se planea establecer algo especial, y es que el partido de los dos representantes masculinos será de 5 sets debido a que han mostrado un rendimiento destacable a lo largo del torneo. Ninguno a perdido un partido desde el principio, por lo cual esperamos ver un buen encuentro entre los dos. Sin embargo, esperamos saber si se encuentran de acuerdo con esta decisión." –
Tras el anuncio, Haruhiko e Issei se miraron de manera retadora y sonrieron.
- ¡Aceptamos! – respondieron al tiempo ambos chicos.
- "¡Excelente! Podremos presenciar un gran encuentro entre dos grandes jóvenes promesas. Ahora sin hacerlos esperar más, el orden de los partidos será el siguiente." –
En una pantalla apareció que el partido de los equipos mixtos y los equipos masculinos irían primero ya que se usarían las dos canchas principales. Después de que los dos partidos hubieran finalizado, habría un receso para luego ir con el partido de las representantes femeninas y los equipos femeninos.
Y por último, el partido de los representantes masculinos que parecía tener el foco de atención sería el último en la cancha principal.
- Ahh, supongo que soy el último de todos. – dijo Issei con un suspiro mirando a Kiyome y luego a los demás miembros del equipo.
- Kiyome-san, Issei-san… prometemos hacer nuestro mayor esfuerzo. – dijeron los miembros de los 3 equipos.
- Si, no esperaría menos de ustedes. Dieron partidos increíbles en las anteriores rondas. – dijo Kiyome.
- Vamos a ganar esto. ¿Están de acuerdo? Además, no tengan miedo de lucirse. Dudo que los buscadores de talento joven dejen pasar algo, pueden estar seguros de eso. – dijo Issei.
- ¡Si! – dijeron todos emocionados, incluso Kiyome.
Juntando sus manos al centro, el equipo completo se propuso el ganar a toda costa para llevarse un primer lugar con ellos.
- ¡Por la victoria! – gritaron emocionados.
El equipo de la academia Hosea también se reunió y junto sus manos con la misma emoción.
Después de eso, algunas personas se movieron a la segunda cancha para ver el encuentro entre los equipos de los chicos mientras el partido de los equipos mixtos sería en la cancha principal.
Issei y Kiyome se movieron a un área exclusiva para los participantes junto al equipo femenino. Desde su lugar observaron el partido del equipo mixto mientras en una pantalla podían ver el del equipo masculino.
Ambos partidos estuvieron interesantes, aunque no muy destacables. El equipo mixto de Kuoh logró hacerse con la victoria, pero el equipo masculino perdió. En ambos casos, el equipo perdedor logró un punto por un set ganado mientras el ganador obtenía 4 por dos sets ganados y los dos puntos de la victoria.
- Lo sentimos, no pudimos ganar. – dijeron los dos integrantes del equipo masculino volviendo con su capitana y vicecapitán.
- Esta bien, no se preocupen. Esta competencia a sido realmente exigente, es normal si no pudieron dar su 100%. Creo que todos aquí estamos cansados. – dijo Kiyome.
- Si, además el equipo mixto pudo ganar. Seguimos igual que al comienzo. – dijo Issei.
- Aprovechemos la media hora antes del inicio del otro partido. – dijo Kiyome.
- De hecho, voy a reunirme con alguien. – dijo Issei mientras una sonrisa se dibujo en su rostro al revisar su móvil.
- ¿Huh? ¿Vas a salir? – pregunto Kiyome.
- No, será aquí mismo. Necesito encontrar algunos lugares disponibles. – dijo el castaño.
- Oh, ¿tienes invitados? – pregunto una de las chicas del equipo femenino.
- Jajaja, se podría decir que sí. – dijo el castaño.
- ¿Vino tu familia? – cuestiono uno de los chicos.
Kiyome parecía dispuesta a decir algo al pensar que Issei se desanimaría, pero la respuesta del chico la sorprendió.
- Si, podríamos decir que son mi familia. En todo caso, los veo en breve. Estaré devuelta antes del inicio de los otros partidos. – dijo el castaño alejándose.
- "¿I-kun? – Kiyome no pudo evitar pensar en quien habría venido a ver al chico, aunque tenia una corazonada relacionada con cierta pelinegra.
Fuera de las instalaciones del parque de tenis, Baraqiel y Akeno estaban esperando saber como ingresar ya que se había prohibido la entrada de más personas.
- Ya recordé porque odio venir al mundo humano. – murmuro el cadre algo molesto.
- Ajaja, e-estoy segura de que Ise-kun encontrará una forma para que podamos entrar. – dijo Raynare.
Casi como si lo hubiera invocado, el mencionado apareció del interior de las instalaciones.
- ¡Ise-kun! – la pelinegra no pudo evitar la emoción y corrió hacia el castaño que la recibió con un abrazo.
- Ray-chan. – dijo suavemente Issei.
- Joven Issei, ¿conoce a estas personas? – cuestiono el guardia de la entrada.
- Si, yo les dije que podrían venir a la final. ¿Hay problema si entran a pesar de que ya paso la hora de ingreso? – cuestiono el castaño.
- Supongo que puedo hacer una excepción por esta ocasión ya que vienen de lejos. – dijo el guardia.
- Te lo agradezco. – dijo Issei con una pequeña reverencia.
Siguiendo al castaño, Baraqiel y Raynare ingresaron hasta llegar al estadio principal.
- Mmm, creo que hay lugares disponibles donde están los profesores. Veré si los dejan integrarse con ellos. – dijo Issei.
- De acuerdo. – dijo Baraqiel.
Después de 5 minutos hablando con su profesor de deportes, Issei volvió con los caídos.
- ¿Entonces? – cuestiono Raynare.
- Si, pueden sentarse con los profesores. De hecho les emociona saber que vinieron conocidos. – dijo Issei.
- Genial. – Raynare dijo mientras caminaban hasta los lugares disponibles.
- ¿En qué momento juegas Issei? – cuestiono Baraqiel.
- Siguen el partido de los equipos femeninos y de las representantes femeninas. Mi partido es el último. – respondió el castaño.
- Ya veo, entonces llegamos bastante temprano. – dijo Baraqiel.
- Si, están temprano. – dijo Issei.
Sentándose junto a Raynare, el castaño permaneció con los dos caídos hasta que llego el momento en el que iniciaban los siguientes partidos.
- "Bien, ha llegado el momento de ver uno de los partidos más esperados. El encuentro no solo de las representantes femeninas de ambos equipos, sino que también las capitanas de los mismos. Además, en la otra cancha estará dándose simultáneamente el encuentro entre las participantes femeninas por equipos."
Tras el anuncio, Issei volvió volando hasta su lugar donde alcanzo a desearle suerte a su capitana.
- Suerte Kiyome. – dijo el castaño.
- Gracias I-kun. – dijo Kiyome antes de avanzar a la cancha con una sonrisa. – "Puedo hacerlo. Así podré aligerar la carga sobre el equipo femenino y sobre I-kun." –
Con ese último pensamiento, el partido de la castaña dio inicio.
Kiyome pudo notar que Mai no era una rival cualquiera, pues la fuerza del servicio de esta era considerable. Esto representaría bastantes problemas para la castaña, pero sabía que podría manejarlo.
Fue una sorpresa que en a medida que pasaba el tiempo, los dos partidos que se llevaban a cabo parecían similares en puntuación.
Llego el momento en que el partido de los equipos de las chicas llego a un tiebreak para definir el segundo set.
Por su parte, el partido de Kiyome llego a un empate. Esto significaba que la primera entre la rubia y la castaña en anotar dos puntos se llevaría la victoria al ser ya el último set de su juego.
Kiyome se esforzó al máximo igual que Mai, pero de un buen remate de la rubia hizo que se quedara un punto por detrás.
Sintiendo la presión sumado al agotamiento de las 3 últimas semanas, Kiyome intento golpear la pelota con fuerza en un momento… aunque algo salió mal.
Justo cuando estaba lista para golpear, la castaña perdió el equilibrio y cayó al suelo antes de lograr golpear la pelota que anotó el punto decisivo del partido.
- "¡La ganadora es Mai Kawakami!" –
Tras el anuncio, la mayor parte del público empezó a celebrar la victoria de la rubia.
Por su parte, Issei se apresuró a ir con Kiyome para ayudarla a levantar.
- ¿Estas bien? – pregunto el castaño preocupado.
- Si… estoy bien. Lo siento. – dijo Kiyome con un tono desanimado.
- Vamos, esta bien. Lo hiciste estupendo. – dijo Issei intentando animar a la chica.
Sin poder soportarlo realmente, de los ojos de Kiyome brotaron lágrimas. Sentía que había decepcionado a su equipo con lo que sería un error tonto.
- Oye, no tienes porque llorar. Diste un buen espectáculo como te propusiste. Han sido tres semanas intensas, estas muy agotada. No importa lo que ocurrió, lo hiciste bien Kiyome. – dijo Issei ayudando a poner de pie a la chica.
- Quería ganar para aligerar la carga tuya y del equipo de las chicas. – dijo entre sollozos la castaña.
- Heh, sabes que estoy bien. A pesar de que limito mi fuerza a la de un humano, sigo teniendo mejor resistencia para una competencia como esta. – dijo Issei abrazando a Kiyome. – Jugaste increíble durante todo el torneo y solo perdiste dos partidos con este. No te preocupes. –
La castaña se aferró a Issei y enterró su cara en el pecho de este.
Mientras el chico seguía tratando de calmarla, Mai se acercó pareciendo preocupada.
- Etto… ¿estas bien? – pregunto la rubia.
Kiyome giró su rostro para mirar a la chica y le asintió con la cabeza.
- Ya veo, me alegra. Ha sido el partido más emocionante que he tenido. Espero que volvamos a jugar en algún momento. – dijo Mai con una sonrisa tendiendo su mano para un apretón de manos.
- Si, seguro. – dijo Kiyome extendiendo una de sus manos para estrecharla con la de la rubia.
- Nos vemos después. – dijo Mai con una sonrisa y volviendo al lado de su equipo.
Kiyome se volvió a apoyar contra el castaño que le acarició el cabello al sentir que volvía a empezar a sollozar.
- Shhh, esta todo bien. Estoy segura que recibirás buenas críticas ya que hiciste buenas jugadas. – dijo Issei mientras caminaba lentamente hasta la banca con Kiyome aún aferrada a él.
Raynare miró desde su lugar pensando que la castaña estaba exagerando las cosas, pero acabo por recordar que esta tenía como sueño ser una gran tenista reconocida.
- "Ahh, a veces la amabilidad de Ise-kun es demasiada. Ahora Kiyome podría estar viéndolo como un refugio seguro cada vez que tenga un tropiezo, aunque bueno, seguro que yo haría lo mismo en su lugar por lo que no la puedo culpar." – pensó la pelinegra suspirando ligeramente.
Sorpresivamente, solo un par de minutos después se anuncio el resultado del partido de los equipos femeninos.
- "Las ganadoras son el equipo de la academia Kuoh con 2 sets a favor y uno solo en contra. Con esto la diferencia de puntos es solo de unos y la responsabilidad cae en los hombros de los representantes masculinos." – (pdt: Kiyome perdió dos sets a cero)
Tras el anuncio, el humor de Kiyome pareció mejorar un poco y recibió con una pequeña sonrisa a las dos chicas del equipo.
- Buen trabajo. – dijo brevemente la castaña.
- Si, muy bien hecho chicas. – dijo Issei.
- Gracias, pero ahora todo depende de ti Issei-san. – dijo una de las chicas que acababan de volver del partido.
- Heh, no se preocupen, solo déjenmelo a mí. – dijo el castaño con una sonrisa de confianza.
- ¿Puedes ganarle a tu amigo? – Kiyome pregunto.
- Heh, somos un tira y afloja. La última vez que jugamos Haruhiko me ganó, pero antes le había ganado 2 juegos seguidos. Supongo que es hora de definir quien es mejor. – dijo Issei.
Mientras pasaba el tiempo de descanso para que las personas fueran a tomar y comer algo, Raynare bajo hasta donde estaba el equipo de su academia.
- Ise-kun. – dijo la pelinegra tomando por sorpresa a todos.
- ¡¿Raynare-san?! – dijeron todos en conjunto con sorpresa, aunque Kiyome ya había pensado que la caída había venido a ver las finales.
- ¿Te dejaron bajar? – cuestiono Issei mientras estaba sentado junto a Kiyome.
- El profesor de deporte me dijo que podía servirte como asistente en los descansos. – dijo Raynare con una sonrisa.
- Heh, ya veo. Entonces cuento contigo para apoyarme. – dijo el castaño con una sonrisa.
- Si, lo haré. – dijo Raynare.
Después de unos 15 minutos, era hora de que diera inicio el partido entre Issei contra Haruhiko.
El apoyo superior que había tenido la Academia Hosea pareció mitigarse un poco, pues el castaño también era bastante conocido de su tiempo en esta misma. Además, estaba el hecho de que tanto él como Haruhiko llevaban una racha invicta a lo largo del torneo, cosa que los hacía mucho más parejos a la vista de todos.
Caminando hasta la red que dividía la cancha, el castaño y el peliverde se saludaron con un choque lateral de sus antebrazos. Esta era una acción que solían hacer en el club cuando se enfrentaban en el pasado.
- Suerte. – dijeron al unisonó antes de alejarse.
En ese momento, el tiempo pareció ir más lento para los dos chicos. El sol de la tarde brillo suavemente sobre la cancha de tenis al tiempo que una ligera brisa ayudaba a mitigar el calor del día. Las gradas estaban llenas de espectadores, todos con la mirada fija en la cancha donde los dos chicos se preparaban para disputar el último y decisivo partido de la competencia entre las academias. El equipo de la academia Hosea lideraba con 70 puntos, mientras que el de la academia Kuoh tenía 69 puntos. El ganador de este encuentro sería quien se llevará todo para su equipo, razón por la cual era evidente la tensión y emoción del encuentro.
En un lado de la red se encontraba Haruhiko, un chico de figura atlética y una gran agilidad. Su mirada era intensa, concentrada, reflejando la determinación de alguien que ha trabajado arduamente para llegar a este momento. En el otro lado, Issei con su postura igualmente determinada. Él castaño se preparaba para lo que sabía sería un juego realmente difícil. Ambos habían demostrado su talento a lo largo del torneo y ahora iban a dejarlo todo en la cancha con tal de darle la victoria a su equipo.
El juez dio la señal para empezar así uno de los dos recibiendo las pelotas para servir.
El primer set comenzó con un intercambio feroz de golpes. Haruhiko con un servicio potente, tomó la delantera rápidamente, imponiendo su ritmo en el juego. Su saque era muy bueno y su revés obligaba a Issei a acelerar para mantenerse a la par.
Sin embargo, el castaño no era alguien que se sometiera fácilmente. Con paciencia y habilidad, logró neutralizar el ataque de Haruhiko y forzó un resultado que finalmente ganó 7-6 así llevándose el primer set.
En las gradas, Mai animó a su compañero con gritos de apoyo y consejos estratégicos durante los cambios de lado al ver que su rostro decaía un poco.
- ¡Vamos Haruhiko! ¡Concéntrate en los saques y mantén la presión! Sabes que Issei es algo lento, así que aprovecha eso. - Mai sabía que el peliverde tenía la capacidad de ganar, pero también conocía la tenacidad del castaño.
Claro, no por nada estos eran los mejores cuando estaban juntos en el equipo en el pasado.
- Si, derrotaré a Issei. No importa que, seremos campeones. – dijo el peliverde en respuesta.
Por otro lado, Raynare también animó a Issei cuando se acercó para darle un poco de agua y una toalla para secarse el sudor.
- Ise-kun, tú puedes. Eres el mejor jugador que conozco, así que has lo de siempre. - su voz suave pero enérgica y su presencia calmante parecían darle a Issei la energía que necesitaba para seguir en el partido.
- Si, yo ganaré. – asintió el castaño con una sonrisa de confianza.
El segundo set fue un espejo del primero, pero esta vez, Issei comenzó a mostrar signos de cansancio debido a que limitarse todo el tiempo y no descansar adecuadamente le empezó a pasar factura.
- "Maldición, pensé que podría aguantar hasta el final del torneo." – pensó el castaño.
Haruhiko aprovechó cada oportunidad para encontrar su ritmo y empezó a ganar puntos cruciales. Su estrategia cambió, utilizando más tiros veloces y buscando acortar los puntos para evitar largas devoluciones. Esto le permitió ganar el segundo set 6-4, igualando el marcador.
Durante el descanso, Mai corrió a la valla de la cancha, ofreciendo agua al peliverde.
- Buen trabajo, es evidente que Issei-kun está cansado. Será más fuerte que nosotros, pero no es una máquina! Si puedes mantenerte puede ganar. – animó la rubia con el chico asintiendo.
Raynare hizo lo propio con el castaño al aconsejarle algunas cosas, incluso si no era tan buena.
- Ise-kun, tu fuerza estando reprimido debe seguir siendo superior, así que úsala a tu favor. Sé más agresivo y no le dejes que se mueva cómodamente. – dijo la pelinegra.
El castaño asintió y tomó una bocanada de aire para intentar recuperar el ritmo.
El tercer set fue un tira y afloja, con ambos chicos mostrando lo mejor de sí mismos. La multitud estaba metida de lleno en el juego, pues cada punto era disputado con una intensidad que sólo se ve en las finales más cerradas.
Haruhiko logró mantener su ritmo en los momentos cruciales y se llevó el set 7-5, poniéndose a un solo set de la victoria. Esto pareció afectar al castaño, pero seguro que no estaba dispuesto a rendirse.
En el cuarto set, con una determinación renovada, Issei empezó a jugar de manera más agresiva como sugirió antes Raynare.
El castaño subió a la red con mayor frecuencia y dirigió el ritmo del juego. Sus voleas y remates eran precisos, cosa que dejó a Haruhiko sin respuesta en varios puntos críticos.
Issei se llevó contundentemente el cuarto set 6-0, empatando el partido y llevando la decisión al quinto y definitivo set.
La tensión en la cancha era palpable, pues cada punto se disputaba con una intensidad feroz.
Mai y Raynare desde sus lugares empezaron a liderar cánticos y aplausos de sus respectivos equipos, cada una intentando darle a su compañero la energía extra necesaria para imponerse sobre el otro.
El quinto set fue una verdadera locura, pues la ferocidad de los dos chicos era evidente. Los espectadores contenían la respiración con cada intercambio, mientras los dos jugadores dejaban alma y corazón en la cancha.
Haruhiko comenzó fuerte ganando los primeros juegos, pero Issei con una resistencia admirable empató el marcador y llevó el set a un tiebreak que definiría al ganador. Esto hizo que la tensión entre ambos chicos aumentara.
Los ojos azules se cruzaron con los ojos esmeraldas, era casi como un reto personal. Ambos chicos sentían la voluntad del otro, y definitivamente ninguna cedía ante la otra.
En el tiebreak, tanto el peliverde como el castaño demostraron por qué estaban en la final.
Haruhiko con su saque segador tomó una ventaja temprana, pero Issei con su fuerza y su resistencia al límite remontó para igualar el marcador una vez más. Con un 6-6 en el tiebreak, el siguiente punto sería decisivo.
El peliverde sirvió con toda su fuerza, pero Issei respondió con una devolución perfecta. El intercambio que siguió fue intenso, con ambos chicos corriendo de lado a lado golpeando con precisión y buscando la oportunidad de cerrar el punto.
Finalmente, después de un intercambio feroz de casi 5 minutos, Haruhiko intentó un golpe corto que parecía perfecto.
El punto parecía seguro, pero un obstinado Issei con una velocidad impresionante llegó a la pelota y la devolvió con un tiro de pase que rozó la línea de fondo debido a la gran fuerza que empleó para que su rival no pudiera ni reaccionar.
El silencio se hizo presentes con la expectativa de quien habría ganado. Finalmente, la multitud estalló en vítores cuando el árbitro cantó la bola como buena.
Issei había ganado el tiebreak 8-6 y con ello, el partido.
El castaño se permitió dejarse caer al suelo mientras respiraba agitadamente, pero un sentimiento de satisfacción lo invadió.
La cancha se llenó de aplausos mientras ambos jugadores estaban en el suelo, agotados pero llenos de satisfacción y felicidad por el encuentro.
Raynare se acercó a Issei junto con Kiyome y lo empezaron a felicitar, pero evidentemente la más feliz era la castaña. Sabia que el castaño se esforzó solo para que ella se sintiera tranquila tras haber perdido, cosa que le hizo sentir más que alegre.
Cuando los dos chicos estuvieron más recuperados se acercaron y sobre la red se felicitaron mutuamente.
- Gran juego, debo admitir que sentí que me ganarías. – dijo Issei.
- Heh, debo decir que has mejorado tu velocidad. Antes no habrías llegado a esa pelota ni de chiste. – dijo Haruhiko.
- Jajaja, tienes razón. Salgamos mañana antes de que tenga que viajar de vuelta a casa. – dijo Issei.
- Tenlo por seguro, Mai y las demás estarán encantadas. – dijo Haruhiko.
La ceremonia de entrega de los premios dio inicio después de eso.
Kiyome le dijo a Issei que recibiera el trofeo que le darían a los ganadores del primer lugar, aunque aparte de ello recibieron medallas cada uno de los miembros del equipo.
El segundo y tercer lugar también recibieron medallas. Aparte, se confirmó que les llegaría un correó electrónico a los chicos en caso de que los buscadores de talento se interesaran en alguno.
Preparándose para dejar el lugar, Baraqiel se acerco al grupo y se dirigió inmediatamente a Issei.
- Bien hecho, creo que has conseguido uno de tus objetivos personales, ¿no es así? – cuestiono el hombre.
- Si, tienes razón. – dijo el castaño.
- ¿Lo conoces I-kun? – Kiyome cuestiono y sintiendo algo de temor del hombre ante su fuerte presencia.
- Si. Él es Baraqiel, uno de mis maestros fuera de la academia. – dijo el castaño.
- ¿Maestro? ¿Qué te enseña Issei-san? – cuestiono una chica del equipo.
- Ya saben que practiqué muchas otras disciplinas en mi anterior academia, por lo cual no las puedo dejar tan fácilmente. Baraqiel-sensei me enseña de combate y estrategia. – dijo Issei.
- Genial. – dijo la chica ante la respuesta a su pregunta.
- Bien, en todo caso te veré después. Tengo que hablar contigo sobre algo más tarde. – dijo el hombre.
- Claro, podemos reunirnos después. – dijo Issei.
- Lleva a Raynare contigo, después de todo es la única forma de que nos contactemos de momento. – dijo el hombre antes de retirarse por su cuenta.
- Supongo que tendré un poco de tiempo para pasarlo contigo. ¿Te molestaría mostrarme un poco de la ciudad en la que creciste? – cuestiono la pelinegra.
- Heh, después de una hora de descanso podría. – dijo Issei.
- Genial. – dijo Raynare aferrándose al brazo derecho del castaño al tiempo que sonreía feliz.
La vista fue algo nuevo para los miembros del equipo, pues la pelinegra nunca se había mostrado tan afectuosa con el chico. La idea de que estaban quizás saliendo fue casi instantánea en todos, pero no dijeron nada al respecto.
Tardaron unos 15 minutos en llegar al hotel donde Raynare ingreso al cuarto del castaño y notando lo pequeño pero acogedor que era.
- Mmm, es agradable a pesar de no ser muy grande. – dijo la pelinegra.
- Lo mismo pensé cuando entré por primera vez. Sin embargo, te acostumbras rápidamente. – dijo Issei.
- En todo caso, dijiste que querías descansar, ¿no? – comento Raynare.
- Si. Tomare una ducha y trataré de dormir un rato para que salgamos después. – dijo Issei.
- Esta bien, te espero. – dijo la pelinegra.
Asintiendo, Issei paso al baño para poner a llenar la pequeña tina.
Una vez que esta estuvo lista, el castaño se desvistió y se sumergió hasta el nivel del pecho para disfrutar del agua fresca.
- Ahh, este día fue intenso. No pensé que Haruhiko mejorara tanto. – murmuro Issei.
- [Heh, no fue eso realmente. Estas bastante cansado compañero. Puede que seas un hibrido humano-dragón, pero esa mitad humana te limita bastante. Debes saber que tienes tus límites marcados.] – dijo Ddraig con la gema parpadeando en el dorso de la mano del chico.
- Mmm, tienes razón. Honestamente, creo que me sobreexigí en el transcurso del torneo. – dijo el castaño.
- [Si, lo hiciste. Aunque debo admirar el hecho de que lo hiciste con el objetivo de que tu equipo no se sobreexigiera también. Eso es algo que haría un buen líder, algo que haría un dragón.] – dijo Ddraig.
- Heh, gracias. Pronto estaré entrenando de nuevo, así que espero estes listo para eso. Nos prepararemos para derribar a esta tipa. – dijo Issei con sus ojos brillando ligeramente.
- [Si, seguro compañero. Contigo podré demostrar finalmente que soy el más fuerte de los dos dragones celestiales.] – dijo Ddraig.
- Heh, lo haremos compañero. – dijo Issei.
- [Pero por el momento, descansa. Disfruta tu tiempo con la chica Raynare, sé que ella es ahora bastante importante para ti.] – dijo Ddraig.
- Gracias. – dijo Issei suavemente sin negar nada, pues realmente no había razones para ello.
Después de un tiempo, el castaño salió del baño con ropa cómoda que constaba de una camisa blanca y una sudadera gris.
- Oh, eso no tomo mucho tiempo. – dijo Raynare mirando al chico, pues apenas habían pasado 15 minutos.
- Si, no suelo demorar demasiado. – dijo Issei encogiéndose de hombros.
- Ven. – la pelinegra palmeo la cama justo al lado de donde estaba sentada.
Sin decir nada, el castaño se acerco y se sentó junto a Raynare. Sin embargo, permanecieron en silencio ya que no sabían que decirse.
- Habías dicho que ibas a descansar, ¿no? – comento Raynare.
- Heh, cierto. Lo siento, es que no quiero que te aburras mientras tomo una siesta. – dijo Issei.
- Esta bien, no te preocupes. Es más, déjame hacerte un masaje para que te relajes. – dijo Raynare.
- Mmm, eso suena bien. – dijo Issei.
- Vamos, solo acuéstate boca abajo y yo me encargo. En caso de que Baraqiel-sama se comunique te despertaré. – dijo Raynare.
- Heh, esta bien. – dijo Issei haciendo lo pedido.
Seguido, Raynare se subió a la cama y se posiciono sobre la espalda del castaño empezando a hacerle un masaje en los hombros y espalda alta.
- Cielos, estas demasiado tenso. – dijo la pelinegra.
- Jugar todos los días partidos intensos no es lo mejor que digamos. – dijo Issei.
- Tonto. – dijo Raynare presionando con fuerza un nudo ganándose un quejido.
- ¡Ouch! Tampoco te desquites así, no lo hice apropósito. – dijo Issei.
- Jajaja, esta bien, lo entiendo. Solo deja esa mala costumbre de no priorizarte tu mismo. – dijo Raynare.
- Heh, lo intentare. – dijo el castaño.
Después de unos cuantos minutos, Issei se quedo profundamente dormido. Cuando notó esto, Raynare se tumbó a su lado y se aferró a este.
Ya que la cama era pequeña, la pelinegra quedo muy cerca del castaño mientras lo veía dormir.
- "Se ve tan pacífico cuando duerme." – pensó Raynare con una sonrisa.
Dejándose llevar, la chica abrazo al castaño antes de sentir que también le daba un poco de sueño.
- Solo será una pequeña siesta. – murmuro suavemente Raynare antes de quedarse profundamente dormida.
Las horas acabaron pasando hasta que llegó la noche, aunque no todos podían descansar apropiadamente.
Academia Hosea
En la oficina de Arisu, la mujer estaba reunida con Haruhiko, Mai, reina y Koito. El rostro de la mujer era serio, pero a su vez mostraba preocupación. Era evidente que algo grave sucedía, pero los chicos no sabían cómo preguntar.
- Ahh, bien, creo que es mejor decirlo de inmediato. – dijo Arisu y miró seriamente a sus alumnos.
- ¿Qué sucede sensei? Te ves realmente preocupada. – cuestiono Mai.
- Chicos… tengo muy malas noticias. Recientemente hemos descubierto que uno de los laboratorios donde se estudia a los Phantoms han empezado a experimentar con estos. – dijo Arisu.
- ¿Experimentar? ¿Qué clase de experimentos? – cuestiono Haruhiko.
- Modificación del ADN. Han estado combinando la genética humana con el ADN de Phantoms. – dijo Arisu con tono grave.
- Eso suena bastante inhumano, incluso para los Phantoms. – dijo Koito.
- Si, pero eso no es lo peor. Recientemente uno de sus experimentos más peligrosos escapó. – dijo Arisu.
- ¡¿Qué?! – gritaron los chicos al tiempo.
- Sucedió en medio de la final del torneo de tenis, por lo que no muchos se enteraron. Además, este Phantom es un problema real, quizás peor que el demonio del que Issei los salvo. – dijo la profesora.
- ¿Es más fuerte? – Reina pregunto aterrada ante tal expectativa.
- No solo más fuerte, después de todo, a este Phantom le añadieron ADN de demonio. – dijo Arisu así los 4 chicos quedándose congelados.
- E-Es broma, ¿verdad? – Mai dijo tartamudeando.
- No, no lo es. Tal parece que lograron obtener ADN de un demonio para estos experimentos. Sospecho que quizás fue del mismo que Issei eliminó. – dijo Arisu.
- Pero vimos como lo redujo a cenizas. – dijo Mai.
- Quizás fue algo mínimo, quizás sangre o incluso saliva. El caso es que consiguieron el ADN. Además, las habilidades originales del Phantom son todo un problema. – dijo Arisu.
- Genial, lo que hacia falta. También es un Phantom problemático. – dijo Koito.
- Más que problemático. Es llamada como Enigma y puede robar el poder de los demás por medio de besos, pero no solo su poder, también imitarlos. Se supone que ella es similar a un vampiro en su forma original, pero los experimentos la hicieron así. – dijo Arisu.
Los rostros en shock de los 4 chicos eran suficiente para saber lo que pensaban, pues era lógico.
- Necesitamos eliminarlo pronto, de lo contrario, corremos el riesgo que escape de la ciudad. – dijo Arisu.
- Sensei, se que hemos mejorado mucho como equipo, pero no podemos manejar una amenaza así. – dijo Haruhiko.
- Lo sé, pero quiero que lo hagan con Issei. Ya que él tiene una armadura con casco, será imposible para Enigma robar sus poderes. – dijo Arisu.
- Eso es cierto. – murmuro Mai.
- Comuníquense con él. Además, esas dos personas que vinieron a verlo en la final del torneo no son normales. Estoy segura que tienen que ver con el mundo sobrenatural también. – dijo Arisu.
- Esta bien, podemos llamar a Issei, pero… ¿cómo vamos a encontrar al Phantom? Literalmente podría ser cualquiera, incluso alguien de nosotros. – dijo Haruhiko.
- Se sospecha que puede estar cazando a otros cazadores de Phantoms y a los mismos Phantoms. Tampoco se descarta que también intente capturar demonios para robarles sus poderes. Además, es seguro que tenga las habilidades del demonio del ADN que recibió, por lo cual se debe tener cuidado. – dijo Arisu.
- Esto esta definitivamente fuera de nuestras manos. – dijo Mai.
- Vamos chicos, sé que con Issei tienen una oportunidad real de ganar. – dijo Arisu.
- Entendido sensei. Trataremos de capturar a este Phantom. – dijo Haruhiko.
- Llamare a Issei. – dijo Mai saliendo de la oficina al tiempo que buscaba su celular en un bolso que traía con ella al estar vestida de civil.
Encontrando el contacto del castaño, la rubia realizo la llamada de inmediato. Su primer intento no fue exitoso, pues la llamada fue a parar al buzón de mensajes.
- Vamos, contesta Issei. – murmuró Mai volviendo a llamar.
Volviendo al hotel, el castaño y la pelinegra seguían dormidos mientras que de alguna manera, la chica termino acostada sobre el pecho del chico.
Sin embargo, el tiempo de sueño termino cuando finalmente el ruido de una llamada entrando en el celular de Issei los despertó.
Abriendo sus ojos casi al mismo tiempo, Raynare miró adormilada al castaño.
- Mmm, 5 minutos más Ise-kun. – dijo la pelinegra enterrando su rostro en el pecho de Issei.
- Ugh, ¿Qué hora es? – Issei murmuro estirando su brazo izquierdo hasta la pequeña mesa de noche donde tomo su celular. - ¡Las 8:28 PM! – prácticamente grito el castaño.
La reacción del chico hizo que Raynare también se despertara completamente y mirara la posición en la que estaban. Su rostro rojo no se hizo esperar, pero luego acabo por escuchar a Issei atender la llamada entrante.
- ¿Mai? – pregunto Issei.
- "Ahh, por fin. Issei-kun, tenemos un problema." – dijo la rubia al otro lado de la línea.
- ¿Qué sucede? Te escuchó preocupada. – dijo el castaño.
- "Hay un Phantom un tanto peculiar suelto." – dijo Mai.
- ¿Un Phantom? No voy a ayudarles con una cosa de esas de nuevo. Son demasiado débiles, ustedes pueden ocuparse. – dijo Issei recordando que en dos ocasiones acompaño al grupo de la rubia solo para terminar decepcionado.
- "¡Esta vez es diferente! ¡Algunos imbéciles mezclaron ADN de demonio con el Phantom!" – dijo Mai.
- ¿Huh? ¿Es una clase de broma? – cuestiono Issei.
- "No, lo digo en serio. Arisu-sensei nos acaba de asignar el trabajo y pidió que nos ayudaras. Ella sabe que estamos en problemas por nuestra cuenta" – dijo Mai.
- Ahh, bien. ¿Están en la academia? – cuestiono Issei.
- "Si, estamos en la academia. Si vas a venir, ten cuidado. Esa cosa puede robar el poder de las personas y copiar su apariencia." – dijo Mai.
- Genial, lo que hacia falta, un maldito doppelganger. – dijo Issei.
- "¡Oye, no es broma!" – Mai dijo con molestia.
- Si-sí, como sea. Estaré en la academia en 10 minutos. – dijo el castaño.
- "Gracias Issei, te esperamos." – dijo Mai antes de finalizar la llamada.
Raynare miro intrigada al castaño cuando la llamada terminó, aunque no hizo falta que preguntará por esta.
- Hay un demonio mezclado con un Phantom suelto en la ciudad. Necesito ayudar a mis amigos. – dijo Issei.
- Te acompaño. – dijo Raynare al instante.
- Heh, ¿Por qué no me sorprende? – dijo Issei.
- Tonto. – dijo la pelinegra golpeando juguetonamente el hombro derecho del chico.
- Como sea, deberías ponerte otro atuendo. No creo que un vestido sea la mejor opción para este trabajo. – dijo Issei.
- Oh, eso es sencillo. – dijo Raynare.
Usando magia, la pelinegra se cambio en un parpadeo a su traje como agente de Grigori.
- Mmm, creo que debo considerar viajar con el mío. – dijo Issei.
- Ejejeje, los días que fui a la casa me puse de entrometida en tu armario. – dijo Raynare antes de cambiar el atuendo de Issei al que Azazel le había dado antes.
Al igual que el de la pelinegra, este constaba de una camisa negra ajustada, pantalones negros y un chaleco con mangas largas ajustado con cinturones. Por último, el calzado eran unas botas negras para el combate.
Parpadeando sorprendido, el castaño miro a Raynare por unos segundos.
- Mmm, definitivamente necesito aprender a usar magia. – comento Issei.
- Ajajaja, estaré feliz de enseñarte cuando ya controles mejor tu poder mágico. – dijo Raynare.
- Pongámonos en marcha. Sería bueno que te comuniques con Baraqiel-sensei, sería de ayuda si se nos sale de las manos la situación. – dijo Issei.
- No lo veo necesario, pues eres muy fuerte y yo también. Aunque bueno, hay que ser precavidos. – dijo Raynare.
- Si, no debemos confiarnos. – dijo Issei.
Levantándose de la cama, Raynare usó un círculo mágico para comunicarse con Baraqiel que no tardo en atender.
- Baraqiel-sama, los amigos de Issei reportaron un demonio cruzado con un Phantom. Iremos a ayudarlos con ese problema, por lo cual esperábamos que nos reunamos de esa manera. – dijo la pelinegra.
- "Mmm, eso suena como un problema que pueden atender. Yo ahora mismo estoy limpiando la ciudad de los demonios renegados que he detectado, así ustedes no tendrían que hacer nada. Por lo tanto, vayan y eliminen a esa cosa. Me uniré a ustedes si tienen problemas." – dijo Baraqiel.
- Comprendo, en ese caso intentaré terminar el trabajo rápido. – dijo Raynare.
- "De acuerdo." – dijo Baraqiel.
Tras ese breve cruce de palabras, el castaño entendió que el hombre estaba ocupado.
- Ahh, supongo que nos encontramos después. Vámonos Ray-chan. – dijo Issei.
- Si, dirige el camino Ise-kun. – asintió la pelinegra.
Los dos dejaron el hotel y se dirigieron volando a la Academia Hosea gracias a que Raynare uso magia para no ser notados. Debido a eso, no tardaron más de 3 minutos en llegar a su destino.
Vaya sorpresa se llevaron Mai, Haruhiko, Koito, Reina y Arisu al ver las alas rojas del castaño ya que los esperaban en la entrada del edificio.
- ¿E-Esas son alas? – la rubia se acerco al castaño y observo de cerca los apéndices.
- ¿Huh? Si, lo son. Creo que olvide decirlo, pero soy mitad dragón. – dijo Issei.
- ¡¿QUEEEEEEEEEEEEEEEEÉ?! – el grito de los 5 fue colectivo y lleno de sorpresa.
- Ejejeje, perdón por eso. – dijo Issei con una risita nerviosa.
- Pero no tiene sentido, no sentí que fueras más fuerte que en el pasado cuando jugamos. – dijo Haruhiko.
- Ah, ¿eso? Desde luego que debo regular mi fuerza, de lo contrario la pelota o la raqueta se volverían un desastre. – dijo Issei.
- Ya veo, eso tiene sentido. – dijo Haruhiko.
- En todo caso, ¿Qué es exactamente a la cosa que debemos erradicar? – cuestiono Issei.
- Uhh, antes de eso, ¿podrías presentarnos a tu amiga Issei? – Arisu pregunto mirando a la pelinegra.
- ¿Huh? Oh, claro. Ella es Raynare, una ángel caída. Se supone que actualmente sirve como mi cuidadora, aunque recientemente creo que asido al contrario el trabajo. – dijo Issei mirando a la chica.
Riendo ligeramente por el comentario final del castaño, la pelinegra saludo a los demás.
- Es un gusto. Issei me habló en noches pasadas sobre ustedes, por lo cual no es necesario que se presenten. – dijo Raynare.
- Debes ser bastante fuerte si fuiste asignada para cuidar de Issei-kun. – dijo Mai.
- Bueno, cuando Issei esta bajo control soy mucho más fuerte que él. Pero las cosas cambian cuando él se enfurece. Al perder el control, su poder se dispara de manera incontrolable. – dijo Raynare.
- O-Oye, no hacia falta que lo dijeras. – dijo el castaño pareciendo avergonzado.
- Ufufu, vamos, te ves lindo cuando te avergüenzas. Además, cuando entras en ese estado furioso eres tan imponente. – dijo Raynare acercándose mucho a Issei.
La interacción entre los dos hizo que el grupo de Mai y la profesora sospecharan algo.
- Mmm, Issei… ¿Raynare-san es de casualidad la chica de la que nos contaste? – pregunto Mai.
- ¿Huh? B-bueno. – el castaño tartamudeo sin saber cómo responder.
Vaya sorpresa se llevaron sus antiguos compañeros y maestra el ver como se sonrojaba, pero eso respondia la pregunta.
- Ara, ¿les hablaste de mí? Eso es tierno Ise-kun. – dijo Raynare bastante feliz al escuchar esas palabras.
- C-como sea, solo vamos a eliminar a esa cosa que anda suelta. Aunque primero debemos encontrarla. – dijo Issei intentando recomponerse al alejarse e intentar parecer serio.
- Ufufu, eso será fácil para nosotros. Solo debemos usar senjutsu para aumentar nuestra sensibilidad y encontrar a criaturas sobrenaturales. – dijo Raynare.
- Si, lo sé. Pero esa cosa imita a las personas, por lo que no sabemos si puede ocultar su presencia. – dijo Issei.
- Mmm, tienes un punto. – dijo la pelinegra.
- Tampoco podemos separarnos, de lo contrario alguno de nosotros podría caer. – agregó el castaño.
- Supongo que tendremos que hacerlo a la antigua. – dijo Mai con un suspiro.
- Bueno, será al menos un paseo nocturno. – dijo Haruhiko.
- Tengan cuidado chicos. – dijo Arisu.
- Si, lo tendremos sensei. – asintió Mai.
Saliendo tras Raynare e Issei, los chicos dejaron la academia para iniciar la búsqueda.
Tras media hora buscando, el grupo parecía irritado al no tener éxito.
- Esto es tedioso. – comento Issei.
- SI, en especial ya que no he sentido energías demoniacas cerca. Parece que tu hipótesis era cierta, pues esa cosa quizás puede ocultar su presencia o disfrazarla. – dijo Raynare.
- Ya estoy cansada de buscar. No hemos podido descansar bien después del torneo. – comento Mai.
- Si, ciertamente no estamos en la mejor forma. – dijo Haruhiko.
- Quejarnos no nos sirve de nada, es nuestro trabajo cazar a los Phantoms. – dijo Koito.
- Aunque sea así, no somos maquinas. Necesitamos descansos. – dijo Reina.
Mientras empezaban a hablar entre ellos, el castaño de repente sintió una energía familiar cerca de donde estaban.
- ¿Kiyome? – murmuro Issei.
- ¿Huh? ¿Pasa algo? – Raynare notó que el chico dirigió su mirada a una dirección.
- Esta sensación. – las pupilas del castaño se rasgaron para sus ojos tomar un aspecto similar a los de un reptil. - ¡Maldición! – grito el chico que corrió hacia un callejón donde desplegó sus alas y salió volando a toda velocidad.
- ¡Issei! – Raynare se sorprendió por el repentino accionar del castaño, pero recordó algo.
Escena Retrospectiva
Una semana antes, la pelinegra estaba conversando con Kazumi sobre Issei y Valeria. El tema central era que la kitsune había decidido decirle que el castaño había decidido que mataría a Valeria, cosa que tomo por sorpresa a la pelinegra.
- Eso… eso realmente no debería sorprendernos. – dijo Raynare.
- Si, supongo que tienes razón. Aun así, creí que tenían buena química los dos. De hecho, el día que salieron juntos Issei evito que un demonio atacara a Valeria. – dijo Kazumi.
- ¿En serio? – Raynare pregunto no creyendo eso.
- Si, así nos lo dijo. Según ella, Issei-kun parece haber desarrollado un instinto que le permite detectar a los demonios renegados, incluso si estos no liberan su poder. – dijo Kazumi.
- Suena como una habilidad extrasensorial. – dijo Raynare.
- De hecho teorizamos que es así. El trauma por la muerte de sus padres seguro lo llevo a desarrollar dicha capacidad, algo lógico porque de tenerla se habrían podido salvar. – dijo Kazumi.
- Parece que Issei-kun se estuviera convirtiendo en el cazador y asesino perfecto de demonios. – dijo Raynare.
Perdiendo un poco su ánimo, la kitsune asintió.
- Si, tienes razón. Es como si lo que no logró en su vida pasada lo estuviera logrando ahora. Ah desarrollado una gran fuerza, tiene una llama de clase monarca y como si fuera poco, ahora puede detectar a los demonios fácilmente. De hecho, es algo aterrador si lo pensamos bien. – dijo Kazumi.
- Si, solo imagina si llega a desarrollar odio por los dioses. ¿Acaso se convertiría en un Godslayer? De por si el poder del Sekiryuutei ya le da esa capacidad. – dijo Raynare.
- No lo sé, pero creo que Issei ha cambiado mucho desde que lo encontramos. Su fuerza no deja de crecer y su temperamento me hace pensar en un asesino entrenado. – dijo Kazumi.
- Si, es cierto. Solo esperemos que no vuelva a pasar por alguna situación difícil. No lo sé, pero si algo así le ocurre de nuevo, muy seguramente pierda su poca amabilidad y lo que lo sigue haciendo un humano. – dijo Raynare.
- Si, es cierto. – dijo Kazumi de acuerdo.
Fin Escena Retrospectiva
- ¡Maldición! Issei nombro a Kiyome, ¿acaso ella esta en peligro? – Raynare recobro el sentido y siguió al castaño lo más rápido que pudo al tomar vuelo también.
- Ahh, no nos dejen así. – dijo Mai empezando a correr mientras observaba por donde se había ido Raynare para tener una idea de adonde dirigirse.
Los demás siguieron a la rubia inmediatamente, pero definitivamente se preguntaban por la reacción de Issei.
A unas 5 calles de donde estaban los chicos antes, una castaña de rizos estaba caminando tranquilamente hasta que fue abordada por una extraña mujer.
Esta extraña persona estaba vestida con lo que parecía una blusa de color negro y detalles de color bronce, lleva una minifalda de color rojo y botas negras de tacón bajo. Además, tiene una gabardina donde una correa roja pasa sobre sus clavículas para mantenerla en su lugar.
- Oh, eres diferente de los demás. Sin embargo, no pareces una cazadora de Phantoms. Me pregunto qué deliciosa habilidad tendrás. – dijo la mujer que levanto su rostro revelando unos brillantes ojos rojos y su cabello negro largo y lacio se movió lo suficiente revelando que sus orejas eran puntiagudas.
Kiyome inmediatamente dio un paso atrás, la sensación que le daba la mujer era extremadamente intimidante. Sus rodillas empezaron a temblar, pero se obligo a permanecer de pie para evitar dejarse ver como alguien débil.
- ¿Q-qué eres? – la castaña pregunto.
- Ejeje, sabes que no soy normal. Eso lo facilita. – la mujer sonrió mostrando que tenía colmillos similares a un vampiro.
Empezando a avanzar hacia la castaña, su sonrisa se amplió en gran medida al notar que su simple presencia lograba dejarla paralizada.
- "Que habilidad tan conveniente. Los más débiles simplemente no son capaces de hacer nada." – pensó la mujer.
- ¡N-No te acerques! – Kiyome grito asustada al tiempo que un sello en forma de estrella de 6 puntas aparecía sobre el dorso de su mano derecha.
Un breve brillo apareció entre la castaña y la mujer donde al desvanecerse revelo a una lamia.
- ¿Huh? Que interesante. Puedes invocar a monstruos. – dijo la extraña mujer observando la mitad superior de la lamia que era de una mujer y el resto como una serpiente.
- No tocaras a la maestra. – dijo la lamia que solo vestía un top cubriendo sus senos.
Aparte, la criatura tenía orejas puntiagudas y cabello negro largo con unos guantes que llegaban por encima de sus codos.
- Ejejeje, trata de detenerme. Aunque si fallas acabaras por servirme ya que planeo tomar el poder de tu ama. – dijo la mujer.
La lamia hizo una mueca de desagrado y con su larga cola intento darle un latigazo a su enemiga.
La mujer evito el golpe con gracia al saltar hacia atrás, pero pudo ver la fuerza de la criatura cuando el suelo se hizo trizas tras el impacto de su cola.
- Mmm, que fuerza. Seguro tienes a más monstruos como ella, por lo cual deseo más tu poder. – la mujer sonrió y se abalanzo sobre la lamia.
Lanzando ataques, la criatura al servicio de Kiyome no fue lo suficientemente rápida y recibió un golpe secó en el vientre.
- ¡Argh! – se quejo la lamia antes de caer al suelo inconsciente y desaparecer.
Kiyome trato de alejarse, pero la mujer la sujeto por el cuello de la camisa y la acerco a ella.
- Vamos, portate bien. No quiero lastimar un rostro tan lindo, por lo cual solo robare tu poder. No dolerá, solo será un beso. –
Kiyome se agito intentando soltarse, pero fue inútil. La mujer era mucho más fuerte que ella por lo que no pudo escapar.
- Issei-kun… por favor salvame. – murmuro la castaña aterrada.
- Ufufu, ¿llamando a tu amado cuando vas a besar a alguien más? Eso esta mal. – la mujer se burló.
Cerca de lograr unir sus labios con los de Kiyome, la pelinegra sintió una masa de energía acercarse y soltó a la castaña antes de dar un salto hacia atrás.
El suelo tembló cuando algo muy pesado cayó sobre el mismo con fuerza y levantó una cortina de polvo.
- ¿Quién eres? – pregunto la mujer al ver a un chico de ojos verdes sujetando a Kiyome con su brazo derecho y apuntándole con la palma izquierda que tenía un guantelete rojo.
- Issei-kun. – la castaña se aferró a Issei con fuerza temblando ligeramente.
- ¿Qué haces fuera del hotel? Ahora mismo ya debe estar cerrado. – dijo el castaño.
- L-lo siento. Salí hace bastante y perdí la noción del tiempo. – dijo Kiyome.
- Oh, así que ese es el tal Issei. – dijo la mujer observando al chico y relamiéndose los labios. – Nada mal, es bien parecido. Además, puedo sentir su gran poder. Me sería útil. –
- Lo único que tendrás de mí será mi puño en tu cara. – dijo el castaño.
- Ara, que agresivo. ¿No sabes que a una dama no se le golpea? – dijo la mujer.
- Yo solo veo a una asquerosa demonio. – dijo Issei.
- Ufufu, no soy un demonio. Tampoco soy un Phantom, soy algo mejor que ambos. Puedes llamarme Enigma. – dijo la mujer.
- No veo la diferencia entre ti y un demonio. Estas atacando a las personas. – dijo Issei.
- Ufufu, no lo entenderías. – dijo Enigma.
- Tampoco estoy interesado. – dijo Issei con sus ojos brillando. – Apartate Kiyome, Ray-chan y mis amigos de mi antigua academia llegaran pronto. Ve con ellos cuando los veas. –
- ¿Qué? ¿Qué esta pasando? – pregunto la castaña.
- Solo hazlo, después hablamos de esto. – dijo Issei.
- B-Bien. – dijo Kiyome que se alejó y se ocultó tras unos edificios.
- Ejejeje, entonces vas a combatir contra mí. – dijo Enigma con diversión.
- No, combatir no. Pienso aplastarte rápidamente. – dijo el castaño así un brillo rojo envolviéndolo.
- [¡Welsh Dragon, Balance Breaker!] – rugió Ddraig desde el guantelete equipando la armadura.
En un parpadeo, el castaño ya estaba sobre Enigma que abrió sus ojos con sorpresa ante la inesperada velocidad.
- ¿Qu… - la mujer no completo ni la primera palabra al recibir un cruel golpe en la cabeza que la envió volando a estrellarse con un edificio.
Justo en ese momento llego Raynare que aterrizó junto a Kiyome y miró a la armadura.
- Bueno, sigue calmado. – suspiro la pelinegra y notando que la castaña estaba bien.
- Raynare-san. – temblando asustada, Kiyome se aferró con una mano temblorosa al brazo derecho de la recién llegada.
- Esta bien, Issei se hará cargo de esa cosa. Si las cosas se complican, yo puedo ayudarle. – dijo Raynare intentando calmar a la castaña.
Saliendo del cráter que provoco su cuerpo, Enigma sonrió ligeramente mientras se limpiaba un hilo de sangre que salía de una comisura de sus labios.
- Esa fuerza tuya es increíble. Sin embargo, absorbí la energía de muchos humanos, Phantoms y demonios para regenerarme de daños graves. No se que tan fuerte seas, pero necesitas más que solo fuerza bruta para detenerme. Quizás necesites destruirme a nivel celular para hacerlo. – dijo la mujer.
- Será un placer usarte como saco de boxeo antes de acabarte. – dijo Issei cargando de nuevo.
Enigma empezó a recibir una paliza, pero se levantaba siempre sin ningún tipo de daño. Esto hizo irritar al castaño, en especial ya que la mujer no parecía sufrir por sus ataques.
- "Tch, ¿acaso no le duele nada?" – se preguntó Issei.
Realmente molesto, Issei golpeo a Enigma con una cruel patada en el costado del rostro y la envió volando hacia la calle donde no se espero que aparecieran sus amigos de su anterior academia.
- Maldición. – el castaño gruño intentando llegar hasta el grupo, pero ya era tarde.
Enigma había besado a todos y lo sorprendió un golpe sorpresivamente fuerte en el abdomen que incluso agrieto la armadura.
Saliendo disparado con fuerza, el castaño cayó pesadamente sobre la mitad de la calle.
- Maldición… le robo a Mai sus poderes. – gruño Issei mientras se levantaba lentamente.
- Ufufu, estas habilidades son geniales. Es una pena que no tengo nada con que dibujar, de lo contrario te sellaría y podría invocarte para servirme. – dijo Enigma.
- No digas tonterías, eso nunca pasaría. – dijo Issei cargando nuevamente contra la mujer.
- Ufufu, me gusta esa actitud. – dijo Enigma.
Cargando también contra el castaño, los dos se vieron enfrascados en una batalla que acabo siendo unilateral. Sorpresivamente, Issei empezó a perder terreno al ser abrumado por la fuerza de la mujer.
- Peleas bien, pero esa chica tetona de allí no solo es fuerte… - dijo Enigma impactando un golpe en el pecho de la armadura agrietando la gema. – También tiene muy buena técnica. –
Con una patada giratoria, la mujer golpeo en la cabeza al castaño deshaciendo su armadura completamente.
- Maldición. – con la frente sangrándole, Issei fue sujetado del cuello y estrellado cruelmente contra el suelo donde se hundió por la fuerza.
- Ufufu, eres bueno. Me pregunto si seré capaz de hacerte mío en lugar de matarte. Me serviría tenerte conmigo, no solo eres fuerte, también eres bien parecido. – dijo Enigma relamiéndose los labios.
Levantando al castaño, la mujer empezó a acercar su rostro al de Issei.
- ¡Suéltalo maldita bruja! – Raynare cargó y atravesó el pecho de Enigma con una lanza de luz.
Los ojos de la mujer se abrieron con sorpresa, sangre salió expulsada por su boca al tiempo que soltaba su agarre sobre el cuello de Issei.
Una patada en su costado la envió a toda velocidad a estrellarse con el borde de un edificio y se quedo tendida en ese mismo lugar.
- Issei, ¿estas bien? – Raynare apoyó al castaño y le curó la frente.
- Tch, baje la guardia. – dijo el chico en respuesta.
- [No deberías mentir compañero. Descansar unas cuantas horas no te ha repuesto de lo mucho que te sobreexigiste durante el torneo, no importa cuan fuerte seas o el poder que tengas. Sigues siendo en parte humano, este es tu límite actual. Exagerar causará daños casi que irreparables en ti.] – dijo Ddraig.
Casi como si fuera evidencia de lo dicho por el dragón, el castaño escupió un poco de sangre.
- ¿Por qué siempre tienes que exigirte más de lo necesario? No seas un tonto. – Raynare regaño al chico.
- Lo siento, simplemente no lo puedo controlar. No quiero ver a los demás lastimados, no si puedo hacer algo. – dijo Issei.
- Eres un tonto. – dijo Raynare, aunque no podía negar que le gustaba la razón que le dio el castaño. – "Si, un tonto que me gusta." –
- Ajajajajajaja, eso es perfecto. Si me sirves será perfecto, siempre me vas a priorizar. –
Girando su cabeza, Raynare vio con sorpresa que Enigma se había levantado y la herida en su pecho ya no estaba.
- ¿Cómo? – los ojos de la pelinegra se abrieron a más no poder.
La lanza de luz debería haber matado a la mujer, después de todo era en parte demonio. Incluso un hibrido debería haber sufrido un daño imposible de reparar tan rápido.
- Ufufu, te vez tan linda. Tu poder me interesa. – dijo Enigma que cargo hacia Raynare.
Con reflejos rápidos, la caída logró recibir a su rival donde hizo una mueca al bloquear el primer golpe.
- "¿Qué demonios es esta fuerza?" – pensó Raynare.
- Ajajajaja, esto será tan divertido. – dijo Enigma.
Las dos pelinegras iniciaron una dura batalla que parecía pareja. Cuando una golpeaba, la otra no se quedaba atrás.
Dando un grito, Enigma uso la habilidad de Koito sin la necesidad del cantico y creo ataduras que retuvieron a Raynare.
- ¿Qué rayos es esto? – la caída abrió sus ojos con sorpresa antes de recibir un golpe en la cara.
- Es una pena tener que lastimar tan bello rostro, pero en fin. Solo tomemos tu poder. – dijo Enigma.
- ¡Estas loca si crees que te dejaré! – grito Raynare.
Desplegando sus 8 alas más duras que el acero, la pelinegra se liberó de sus ataduras y con una nueva lanza de luz perforó la cabeza de su rival que cayo al suelo con un ruido sordo.
- Eso ganas maldita loca. – dijo la pelinegra que se levanto y se dirigió hacia Issei, o bueno, eso intento. - ¿Ehh? –
Sintiendo que la sujetaron de los pies, Raynare miró hacia el piso y vio que una de las manos de enigma se aferró a su pie izquierdo.
- Oh cariño, no habrás pensado que hemos acabado, ¿verdad? – la mujer se levanto mientras el agujero en su cabeza era cubierto por oscuridad y se regeneraba,
- ¿Qué diablos eres tú? – algo aterrada, Raynare pregunto intentando soltarse del agarre en su pie.
- Ya lo dije, soy mucho mejor que un demonio o un Phantom. Yo soy superior. – dijo Enigma.
Apareciendo 5 círculos mágicos con forma cuadrada en el suelo, de estos aparecieron 5 criaturas.
Dos de estas las reconoció Haruhiko desde su lugar donde estaban recuperando el aliento tras sus poderes ser arrebatados.
- ¿Cthulu… Marchosias? – los ojos del peliverde se abrieron de par en par por la sorpresa.
- Maldición, ¿puede invocar a los Phantoms que selló Haruhiko? – Mai gruñó.
- Tal parece que así es. Su poder no solo nos quita el nuestro, también parece dárselo en su totalidad. – dijo Koito.
- Ahora mismo somos un estorbo en esta batalla. – dijo Reina.
- Tch, esto es una basura. – dijo Mai.
- Espera, ¿esos no son… - los ojos de Haruhiko se abrieron más de ser posible.
- Maldición, también invocó a esos 3 Phantoms. – dijo Koito.
Aparte del lobo y el pulpo, también estaba el Phantom que parecía un dragón de 3 cabezas, el Phantom que parecía una especie de oni y uno que estaba formado de arena y tierra.
Sin tiempo para escapar, Raynare recibió ataques de los 5 Phantoms al mismo tiempo solo pudiendo poner sus alas como escudo.
A pesar de que su defensa funciono, sus alas se vieron bastante lastimadas al lucir quemaduras así como un par de estas se rompieron.
Haciendo una mueca de dolor, la pelinegra volteo a ver a Issei que se estaba volviendo a integrar poco a poco.
- ¡Ddraig! – dijo Issei.
- [¡Adelante compañero! ¡Welsh Dragon, Balance Breaker!] – rugiendo una vez más, pero con mucho más vigor, el dragón equipo la armadura que empezó a brillar intensamente. – [Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost] –
Saliendo disparado a una velocidad desorbitante, Issei se llevó por delante a el lobo, el pulpo y al dragón.
- ¡Ise! – la pelinegra se preocupó, pero el castaño fue firme al hablarle.
- ¡Yo puedo, tu ocupate del resto! – grito el chico con su cuerpo entero siendo cubierto de elemento rayo.
Sintiéndose en conflicto, Raynare decidió confiar en el castaño y enfrentar a sus 3 rivales del momento.
Liberando el poder de kitsune otorgado por la pulsera, la pelinegra cubrió su cuerpo completo de touki para liberarse del agarre de Enigma.
- Se acaban los juegos. – gruño Raynare pateando con su pierna libre el rostro de la mujer que salió disparada con tal fuerza que creó una zanja en el concreto.
Creando ahora una espada de luz, la pelinegra le añadió fuego antes de lanzarse contra el Phantom de arena y el que parecía un oni.
- ¡Desaparezcan de mi vista! – rugió la chica realmente molesta.
Logrando despachar de un solo tajo al Phantom de arena, se sorprendió cuando este se regeneró en cuestión de segundos.
- "Tch, que molesto." – pensó Raynare evitando un golpe del Phantom oni y pensando en algo. – "Quizás si caliento el área no pueda volver a regenerarse." –
Dando un salto hacia atrás, la pelinegra preparo un gran ataque de fuego en su mano libre. Una vez que reunió el poder suficiente, Raynare tomo vuelo y lanzó su ataque que se expandió por una gran porción de suelo.
Su idea tuvo el efecto deseado al ver como el Phantom de arena parecía cristalizarse, mismo momento que aprovecho para finiquitalo al hacerlo pedazos.
Sin embargo, la pelinegra cometió un error de novato y lo notó solo al sentir un golpe aplastante en su costado derecho que le hizo estrellar con fuerza a un lado de donde estaba Issei ocupándose de los otros 3 Phantoms.
El oni al tener afinidad al fuego no se vio afectado por el ataque de la pelinegra, por lo cual se pudo mover libremente.
- S-Son más fuertes que antes. – Mai dijo desde su lugar junto a sus compañeros.
- El poder debe de aumentar en proporción al invocador. Enigma es mucho más fuerte que yo, una diferencia abismal. Cthulu y Marchosias pueden derrotar a Phantoms que superan nuestras capacidades normales, por lo cual ahora mismo deben ser más fuertes que la propia Enigma. Eso explicaría porque le están dando tanto problema a Issei y a Raynare-san. – dijo Haruhiko.
- Tu poder da miedo en manos de alguien muy fuerte. – dijo Koito.
Por otro lado, la caída estaba en el suelo luciendo realmente adolorida.
- M-Maldición. – Raynare se quejo sintiendo que su brazo derecho había sido roto.
- ¡Ray-chan! – Issei se acerco a la pelinegra y golpeó con una fuerza aplastante al oni enviándolo a estrellar con el dragón de 3 cabezas. - ¿Estas bien? –
El chico pregunto preocupado, pero la mueca de dolor de la pelinegra al tocar su brazo derecho lo dijo todo.
- Estas malditas cosas… empiezan a hartarme. – gruño Issei empezando a molestarse realmente. - ¿Cómo se atreven a lastimarte? –
El aura rojo sangre envolvió su cuerpo en ese momento y la intención de matar se hizo palpable al instante.
- ¿Issei-kun? – Raynare miró con sorpresa al chico, pues la reacción había sido demasiado rápida.
- [Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost – Boost.] – los impulsos empezaron a suceder de manera descontrolada, tanto que la voz del propio Ddraig casi no se lograba entender.
Con su aura creciendo de manera abismal, Raynare pudo sentir como el poder del castaño llegaba cerca de su propio poder.
- ¡Aaaaaaaaaaaaahhhh! – el grito de ira de Issei fue lo último que escucharon todos antes de que vieran un destello rojo moverse a gran velocidad.
Un estruendoso ruido se escucho antes de ver al oni y al dragón enterrados en el pavimento, cosa que dejo en shock a Haruhiko ya que la fuerza del castaño se disparo de manera realmente increíble.
- E-Ese es el poder de Issei. – murmuro el peliverde.
- Es asombroso. – Mai dijo admirada al observar como el castaño tomaba por la cabeza al oni y lo azotaba contra el dragón.
- Aun así, ¿Por qué no esta usando esas llamas suyas? – Koito comento.
- Es verdad, esas llamas que controla son realmente fuertes. – dijo Reina de acuerdo.
- No lo sabemos, pero hay que admitir que da algo de miedo. Fueron solo segundos para que pasara de luchar de manera tranquila, a pasar a luchar de manera frenética. – dijo Mai.
Después de 5 impactos consecutivos, el castaño se deshizo del dragón y del oni así fijando su vista en Cthulu y Marchosias que se acercaban.
Preparando su cañón de agua, el pulpo monstruoso disparo contra el castaño al tiempo que el lobo lanzaba una gran llamarada.
- Desaparezcan. – apuntando con su mano derecha, Issei lanzó una pequeña llamarada carmesí que se llevó por delante el ataque de fuego y de agua.
Las expresiones de Mai, Haruhiko, Koito y Reina no podían ser más asombradas. Cthulu y Marchosias eran Phantoms realmente poderosos, más al ser invocados por enigma. Sin embargo, el castaño no solo superó su fuerza con un ataque, sino que también los hizo desaparecer.
- Ufufu, eso sí que da miedo. – Enigma se revelo luciendo completamente ilesa, incluso cuando parecía que su cabeza había sido rota con la patada anterior que le proporciono Raynare.
- Tu… - los ojos de la armadura viajaron hacia la mujer.
Los orbes rojos de los dos se encontraron, aunque Enigma dijo algo inesperado.
- Bien, tu ganas. Destruiste a esos dos Phantoms fácilmente, por lo que no puedo aspirar a mucho. Sin embargo, ¿es realmente malo querer vengarme de aquellos que me lastimaron tanto? ¿Es injusto que quiera cobrar el dolor de cada experimento que tuve que pasar? Esos despreciables humanos tocaron mi cuerpo, lo usaron como quisieron y me transformaron en esto. ¿Te parece eso justo? Era una Phantom hermosa que solo debía drenar un poco de energía a las personas para sobrevivir, similar a un vampiro. Solía dejar muy débiles a los humanos, pero nada que los pusiera en peligro. Nunca lastime a nadie realmente. – dijo Enigma.
- ¿Entonces con qué derecho lastimaste a tantas personas inocentes? – la voz grave del castaño se escucho desde el interior de la armadura.
- Necesitaba poder para cumplir mi venganza, solo eso. Además, nadie resulto realmente afectado. Tus amigos allí están ya de pie. – dijo Enigma señalando al grupo de Haruhiko y las 3 féminas.
El aura amenazante del castaño empezó a disminuir lentamente, aunque no se apagó del todo.
- ¿Qué planeas hacer entonces? Te has rendido, no te queda de otra que desaparecer. – dijo Issei apuntando con su palma derecha donde aparecieron llamas listas para acabar a la mujer.
- Heh, has lo que quieras. ¿Qué se supone que haga si no podré cumplir mi objetivo? Quería castigar a esas personas que me lastimaron, ¿o tu no harías lo mismo? Quizás incluso exterminarlos a todos. – dijo Enigma con veneno en su voz.
- Si, yo haría lo mismo. – dijo Issei sorprendiendo a todos por la respuesta.
- ¿Ehh? Entonces me entiendes, ¿no? ¿Por qué me impides hacerlo? – Enigma pregunto.
- Los demonios me arrebataron un par de tesoros en mi vida, cosa que me ha llevado a detestarlos y jurar acabarlos. Tu eres un demonio, ¿Por qué no incluirte en esa lista de eliminaciones? – dijo Issei.
- Ya veo, no eres muy diferente de mí. De hecho, la única diferencia es que si tienes a alguien contigo, yo estoy sola y siempre lo estuve. – dijo Enigma.
Las llamas en la palma de Issei se atenuaron un poco al escuchar eso, cosa que tomo por sorpresa incluso a la propia Enigma.
- ¿Qué pasa? ¿Acaso tienes lastima de mí? – pregunto la mujer.
- No lo llamaría lastima, sería más bien una especie de empatía. – dijo Issei bajando su mano completamente.
- ¿Empatía? – cuestiono Enigma confundida.
- No le des vueltas al asunto. Te perdono la vida, pero devuelve los poderes que has robado. – dijo el castaño.
- ¿Issei? – Raynare que acababa de sanarse el brazo torpemente se vio sorprendida al igual que los demás.
- ¿Hablas en serio? – Enigma miró con cautela al castaño.
- Si, habló en serio. Sin embargo, si haces algo de nuevo volveré solo para matarte. – dijo Issei.
- ¿Por qué? – pregunto Enigma.
- Tu sufres por algo muy diferente a mí, sin embargo, eso nos ha llevado a tener un pensamiento similar. El caso es que yo estoy superando eso, quizás tú también puedas hacerlo. – dijo Issei.
- Pff, como sea. – Enigma miró a otro lado mientras su cuerpo empezó a brillar y libero múltiples esferas de energía que salieron volando.
Cuatro de estas esferas volaron hasta Haruhiko y las 3 chicas junto a él sintiendo así que sus poderes habían vuelto.
- Ya lo hice, ¿ahora qué? – Enigma le dijo a Issei.
- Has lo que quieras, solo no provoques problemas. – dijo Issei así su armadura desapareciendo.
Los orbes esmeralda se encontraron con los rojos, momento en el que Enigma notó algo en la mirada del castaño. Algo mucho más complejo que lo que ella sentía… algo mucho más doloroso.
- "Ese chico… ¿en serio tiene ese tipo de mirada?" – pensó la Phantom antes de reaccionar y moverse rápidamente desapareciendo del lugar, aunque una sensación similar a la lastima surgió en su mente.
- Ise-kun, ¿estas seguro de tu decisión? – Raynare cuestiono al castaño.
- Si, lo estoy. – dijo Issei antes de verse obligado a hincarse sobre una rodilla y jadear pesadamente.
- ¡Ise! – la pelinegra inmediatamente se arrodillo junto al chico.
- Estoy bien… solo necesito descansar. – dijo el castaño.
- Eres un idiota. – dijo Raynare abrazando al chico.
- Heh, recientemente me lo dicen a menudo. – dijo Issei con una sonrisa.
Suspirando y controlando sus jadeos, el castaño acabo por quedarse dormido.
Haruhiko y las 3 chicas se acercaron en ese momento preocupados por el castaño.
- ¿Esta bien? – Mai preguntó.
- Si, solo necesita un buen descanso. Aún es en parte humano… en más de un sentido. – dijo Raynare, aunque lo último muy suavemente por lo cual no escucharon. – "La piedad y compasión son un sentimiento humano muy complejo, algo difícil de aprender para otras razas. Issei más que nadie debería haber perdido esa cualidad, pero tal parece que aún la conserva. -
- I-kun. – Kiyome se acercó también y ayudo a sostener al castaño.
- Umm, ¿Dónde se quedarán esta noche? Tengo entendido que el hotel en el que se hospedan debe estar cerrado. – pregunto Mai.
- Yo puedo transportarnos directamente a la habitación. – dijo Raynare.
- Vaya, eso suena genial. – dijo Mai.
- Mmm, perdón por las molestias. Tú e I-kun salieron lastimados por mi culpa. – Kiyome le dijo a Raynare luciendo avergonzada.
- No te preocupes, estábamos buscando a esa cosa. Estuvieras o no en problemas habríamos enfrentado a esa mujer. – dijo Raynare.
- Supongo que podemos volver con sensei y decirle lo sucedido. – dijo Mai.
- ¿Creen que este satisfecha sabiendo que Enigma quedará libre? – cuestiono Haruhiko.
- Solo no le digan sobre eso. No creo que esa mujer aparezca de nuevo, no después de la amenaza de Ise-kun. Parece que se pudieron entender sin necesidad de palabras, por lo cual no deberían tener problemas con ella en el futuro. – dijo Raynare.
- Esta bien, confiamos en su palabra. – dijo Mai.
- Bien, ahora vamos al hotel. Ise-kun necesita descansar bien y yo tratar mejor el daño que recibí. – dijo Raynare mirando a Kiyome. – ¿Has viajado por círculos mágicos antes? –
- Mmm, no. Nunca lo he hecho. – dijo la castaña.
- Bien, lo vas a experimentar por primera vez. Acercate a mi para irnos. – dijo la pelinegra.
- Si. – Kiyome asintió acercándose más y ayudando a sujetar a Issei.
- Nos veremos. – dijo Raynare así su círculo mágico apareciendo a sus pies antes de desaparecer por medio de este con los dos castaños.
- Eso fue genial. – murmuro Mai.
- ¿Por qué Issei dejaría ir a Enigma? – Reina pregunto al aire.
- La verdad es que tampoco lo entiendo. – dijo Haruhiko.
- Creo que solo se apiado de ella. Issei vivió un momento traumático al presenciar la muerte de sus padres, lo cual como dijo, le llevó a detestar a los demonios. Enigma es un caso diferente, aunque en cierto modo similar. Hicieron experimentos con ella, experimentos que la cambiaron completamente. No es una Phantom, pero tampoco una demonio. No sabemos que tan crueles fueron las pruebas que la hicieron pasar, pero podemos estar seguros que la llevaron a odiar a los humanos. Mientras Issei desearía exterminar a los demonios, Enigma desearía exterminar a los humanos. – dijo Koito.
- ¿A qué quieres llegar exactamente? – pregunto Mai.
- Issei dijo que estaba superando "eso", por lo cual se refería a que está superando su odio a los demonios. Si él puede superar algo tan cruel como la muerte de sus padres a manos de estos, ¿Por qué Enigma no podría superar el dolor que le causaron los humanos y vivir su propia vida? Bueno, al menos eso creo. – dijo la pelirosa.
- Mmm, creo que tiene algo de sentido. Además, no conocemos ningún caso fatal relacionado con Enigma. – dijo Haruhiko.
- Ahh, solo vayámonos ya. Quiero descansar, realmente estoy muy cansada. No quiero volver a participar en ningún torneo en mi vida. – dijo Mai.
- Estoy de acuerdo con Mai-oneesama. – dijo Reina.
- Igual aquí. Aún no puedo creer que el equipo femenino de la academia nueva a la que va Issei nos ganara. – dijo Koito.
- Heh, hablen por ustedes. Yo tuve que enfrentarlo a él y fue más difícil de lo que recordaba. – dijo Haruhiko.
No pudiendo evitar reírse un poco, los 4 tomaron camino a la academia para reportar a Arisu el "éxito" de la misión.
En otro de los barrios de Tokio, Baraqiel estaba terminando de eliminar a otro demonio renegado y acabó por suspirar.
- Hasta el momento ninguno es más fuerte que un clase media. ¿Cómo es que Issei siempre termina encontrando renegados que son tan fuertes como un clase alta? – murmuro el hombre mientras intentaba sentir más presencias demoniacas, pero parecía que habían desaparecido.
Desplegando sus alas, el hombre tomo vuelo y trato de sentir la energía de Issei ya que antes había sentido que la fuerza del chico se había disparado.
- Mmm, ya no siento su poder. Seguro ya terminaron su batalla, de lo contrario Raynare se habría comunicado si tuvieran problemas. Eso quiere decir que la ciudad quedo despejada de demonios renegados, aunque claro, los inútiles de los exorcistas capaz y la dejan plagar de nuevo. – dijo Baraqiel para sí mismo.
Decidiendo que volvería a Grigori, el hombre partió por medio de un círculo mágico. Se aseguraría de contactar a Raynare por la mañana y así saber que ocurrió con el Phantom hibrido al que enfrentaron.
Por otro lado, en la habitación de hotel de Issei acababan de aparecer Raynare junto a Kiyome y el castaño. Depositando al chico en la cama, la pelinegra luego miró a su compañera de club.
- Ya puedes retirarte, yo me ocupo de lo demás. Ise-kun estará bien, así que no te preocupes. – dijo Raynare.
- ¿Estas segura? – cuestiono Kiyome.
- Si, no hace falta que te preocupes. Además, después de descansar apropiadamente unos 4 días, Ise-kun debería estar nuevamente a su máxima capacidad. – dijo Raynare.
- Mmm, esta bien. Entonces me retiró. – dijo la castaña, aunque se detuvo en la puerta. – Por curiosidad, ¿planeas viajar con nosotros de regreso a Kuoh? –
- No puedo, debo volver con mis superiores mañana. Te encargo que Issei no se esfuerce más. – dijo Raynare.
- Seguro, estaré feliz de ayudar a I-kun. – dijo Kiyome con una sonrisa.
Antes de abrir la puerta, la castaña escucho que la pelinegra le preguntaba algo.
- Kiyome… a ti te gusta Ise-kun, ¿no es así? – cuestiono Raynare.
La castaña se congelo al escuchar esas palabras, no se esperó que la pelinegra fuera tan directa respecto al tema.
- ¿Q-Qué te hace pensar eso? – tartamudeo Kiyome.
- No finjas, he notado como lo miras. También eres muy cercana con él de entre todos los miembros del club. Así que responde mi pregunta, ¿te gusta Ise-kun? – dijo con voz firme la pelinegra.
- ¿Qué pasa si es así? ¿Acaso me dirás que me aleje de él? También es evidente que I-kun te gusta, ¿o acaso me equivoco? – pregunto Kiyome.
La pelinegra se sonrojó un poco, aunque no aparto la mirada ni trato de negar la acusación.
- Si, me gusta Ise-kun. En toda mi larga vida, es la primera vez que conozco a un chico como él. Es amable, justo y cariñoso cuando logras acercarte. No es interesado ni tampoco intenta propasarse solo por quien es, así que si Kiyome, me gusta… no, no me gusta, amo a Ise-kun. – dijo Raynare.
- No me importa, seguiré buscando un lugar junto a él y solo lo dejaré si me rechaza. Así que no esperes que me sienta intimidada por ti, no importa si me puedes aplastar con un suspiro. – dijo Kiyome.
- Heh, no haría tal cosa. Solo te dejaré algo en claro. Pienso ser la primer mujer en la vida de Ise, así que no creas que ganaras ese lugar. – dijo Raynare.
- ¿Es un reto? – cuestiono la castaña.
- No, eso es un hecho que se cumplirá. – dijo Raynare acercándose a Kiyome.
- Ya veremos si es así. – dijo la castaña acercándose también hasta que sus pechos chocaron y se miraron intensamente a los ojos.
Después de eso, Kiyome se dio la vuelta y dejo la habitación.
Raynare suspiró después de eso y se sentó en el borde de la cama. Volviendo a usar senjutsu, la pelinegra se dio cuenta que a pesar de ser buena con dicha energía, ciertamente le faltaba demasiado para aprender a tratar heridas graves como lo eran huesos rotos.
- Creo que debería pedirle a Kazumi consejos, realmente apesto curando heridas. La prueba de ello fue cuando Aiko-chan fue herida por el bastardo de Kokabiel, aunque no lo pensé en ese momento. – murmuro la pelinegra.
Después de más de media hora sanando mejor el daño que había recibido, Raynare se tumbo al lado de Issei y sonrió antes de abrazarlo.
- Bueno, este viaje fue bueno después de todo. Pude dormir contigo en dos ocasiones. – dijo Raynare antes de besar suavemente la frente del castaño.
Tras unos minutos de cerrar sus ojos, la pelinegra se quedó dormida profundamente al tiempo que sentía una sensación de plenitud en su pecho.
En medio de la noche, ambos chicos acabaron por abrazarse mutuamente mientras dormían. Además, Raynare volvió a terminar sobre el pecho de Issei mientras sus corazones parecían latir sincronizados.
Fin del Capítulo
Bueno chicos, eso es todo por esta ocasión y del minicrosscover con Musaigen no Phantom World. Espero que les haya gustado y saber si a futuro les gustaría volver a ver al grupo de Haruhiko. Además, como mencione al inició, volvemos con las ilustraciones de imágenes IA. Intente recrear a una Kiyome al usar su imagen del manga como base y la coloree con IA. Después en base a ese modelo tomé las características y cree unas imágenes en referencia. Siéntanse libres de juzgarlas y que tanto debería mejorarlas.
En esta ocasión, serían imágenes de Raynare junto a sus variantes que hice en la prueba y las de Kiyome. Sin embargo, dejó un intento de hacer a Mai con el uniforme chicas de la academia Kuoh que espero les guste. El link a continuación y sin más por decirles, tengan una bonita mañana, tarde o noche. Hasta la próxima actualización.
Pdt: La imágenes de Raynare me volvieron a quedar bonitas XD
Pdt2: La imagen oficial del atuendo de Raynare tiene el nombre número del capítulo, aunque la imagen en la que tiene vestido negro y blanco fue mi primera opción. ¿Cuál debería ser canon?
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