Elisif
En el momento en que la Jarl Elisif estaba cenando con sus thanes y algunos diplomáticos muy importantes, cuando sintió una mano se poso en su muslo. Por lo general, ella habría mostrado misericordia al solo hacer que azotarán al atrevido. Pero este era Constantino Rumeliano, el Sangre de Dragon, su nuevo thane. Era conocido sobre todo como el héroe de Skyrim... Y un sueño húmedo recurrente desde que supo cómo volatizo al traidor Ulfric con su voz.
Ella no pensó que alguna vez desearía la compañía de otro hombre después de Torygg. Sin embargo, Elisif podía sentirlo, sus manos recorriendo su pierna desnuda por el corte de su vestido al estilo imperial. Ella cerró los ojos.
"Constantino, ¿qué estás haciendo?" Elisif murmuro "Hay gente aquí"
Él solo sonrió y Elisif decidió ignorarlo, su ropa lo suficientemente larga como para cubrir la parte inferior de su cuerpo. Lo cual era algo muy bueno, dado que la mano que guiaba su pierna ahora se deslizó debajo de su vestido y lo hizo agitarse hacia arriba. Los ojos de Elisif se abrieron tanto de sorpresa como de escándalo cusndo sintió que le quitaban la ropa interior, todo sin que ella moviera un musculo. Pero lo peor vino después, cuando los dedos de él se deslizaron en su coño, inevitablemente mojado, y la hicieron agarrarse al borde de la mesa. De alguna manera, de alguna forma, logró mantener la calma. A pesar de que ella estaba montada en los dedos de Constantino, mientras él estaba sentado en la silla de al lado.
Elisif agradeció que sus ropajes superiores fueran lo suficientemente gruesos para nadie notará que sus pezones estaban extremadamente duros. Y afortunadamente, estaban demasiado absortos en la conversación como para darse cuenta de que su thane empujó su mano por su vestido y la acarició. Ella no quería admitirlo, pero el riesgo de ser pillada practicando sexo en público excitaba la exitaba demasiado, razón por la que ella abría sus piernas cada vez más.
Ahora, las manos de Constantino estaban sobre ella. Su culo, tetas, piernas y su coño eran abusados con tal pericia que no solo parecía que el no se movía de su lugar, sino que la había dejado desnuda debajo de su vestido y ella sólo podían sentarse allí y masticar los aperitivos como una forma de proteger sus verdaderas emociones.
Después de lo que para ella fue una eternidad placenteramente tortuosa él tomo una de sus manos y la coloco sobre su bulto, sosteniéndola allí firmemente mientras comenzaba a acariciar su coño, ahora desprotegido. Por los nueve, eso tenía que terminar.
"Ba-basta... pide permiso para usar los servicios y... yo me excusare y te seguiré después" Ella se estremeció mientras hablaba.
Él asintió e hizo lo pedido. Elisif tomo estos momentos para recuperarse del asalto que 'sufrio', pero fue incapaz de bajar el calor que crecía ella. Fue igualmente imposible concentrarse en sus invitados, contando el tiempo prudente para ir tras el responsable de su estado actual.
Cuando llegó el momento, ella se disculpo y fue rápidamente a dónde estaría él. En eso ella había decidido que como la jarl de Soledad no podía permitir tal impertinencia a su persona. Pero cuando abrió la puerta del servicio y lo vio allí, en todas sus doce pulgadas de virilidad masculina, Elisif la Bella se quedó parada en el umbral con torpeza antes de entrar y cerrar la puerta con llave, luego se volvió retorciendo sus manos con un profundo sonrojo y una sonrisa nerviosa.
"Estoy lista" Ella dijo, mirándo a Constantino, luego a su verga.
Él se acerco a la Jarl, pasando sus dedos por su cabello largo hasta la espalda antes de darle un beso lento y amoroso. Su lengua se deslizo dentro de su boca, comenzando un baile sensual con la de ella. Sus manos se deslizaron hacia su espalda y comenzo a desatar su vestido con dedos expertos y hábiles rápidamente, desde la base de su cuello hasta su coxis, todos los hilos se habían desatado y su vestido se deslizo hacia abajo y se acumulo a sus pies, mostrando sus buen par de tetas y su trasero, ambos son alegres y regordetes, listos para el placer.
Levantándola por su trasero, ella envolvio sus piernas alrededor de su cintura, frotando su feminidad húmeda contra su verga. La sentó en la mesa suavemente y él alineó su miembro con su raja de la mujer real y la miro.
"… Hazlo" Ella dice después de respirar profundamente.
Él empujo lentamente y ella hacía una cara diferente cada centímetro. Para cuando sus bolas descansaban contra su culo, su mirada estaba perdida y su boca formaba una pequeña 'o'. Él maravilló, contemplando el cuerpo de la posible futura reina en su totalidad.
"Oooh, thane Constantino" Ella dijo con voz soñadora, envolviendo sus brazos alrededor de su cuello y lo atrajo hacia un beso apasionado "Mmnn, llevo tiempo deseando esto"
Él se estremeció, los brazos de Elisif todavía alrededor de su cuello, comenzó a empujar. Elisif soltó largos y bajos gemidos mientras él se metía dentro de ella.
"Dioses del cielo… ¡Esto se siente tan bien!" Gimio Elisif.
Con un acuerdo silencioso, empezamos. Él tomó las caderas de Elisif y empujo dentro, y fuera con vigor, fuego y pasión, dominando por completo la feminidad de la pequeña mujer. Agarrando el cabello de Elisif y guiandola hacia una serie de besos fogosos para callar sus gemidos. Él empezo a masajear el suave pecho de Elisif mientras se seguían besando. Pero no hacían nada para callar los sonidos húmedos y obscenos de sus pesadas bolas golpeando sus nalgas mientras se balanceaban furiosamente mientras ella follaba el coño de Elisif. Después bajo hasta la garganta de Elisif, lamiendo hacia arriba y hacia abajo, chupando la piel sensible y su cuello elegante.
"¡Oh Kyne! ¡Estoy a punto de estallar!" Ella estaba justo al límite y él también.
Constantino fue a retirarse, no queriendo correr el riesgo en una posible futura reina, pero ella envolvio sus piernas alrededor de él y lo empujo hacia ella justo cuando él estalla como la Montaña Roja en el útero de Elisif, provocando que Elisif llegue a su propio orgasmo.
"¡Ooooh, Dibella! ¡Eso fue increíble!" Elisif exclamo desplomada sobre él. Ella se acerca, rodea el cuello de él con sus brazos y empuja al imperial hacia abajo para darle un beso lento y dulce "Gracias" Elisif se rió dulcemente.
"Esto fue increible. Pero debo regresar a la cena o la gente se preguntará" Ella sonrió suavemente mientras pasaba una mano por sus pectorales y él lentamente salia de su canal apretado y el semen salió a borbotones de su coño.
Cuando se puso de pie, la semilla blanca salió de su útero y corrió por su pierna izquierda, haciendo que el semen se acumulara en el piso de mármol pulido. Ignorando eso ellos dos se vistieron y Elisif sonrió mientras se acercaban a la puerta, compartieron un último beso y se alejaron juntos, dejando un lío blanco por dónde ella pasaba.
Desconocido para ambos, cierta doncella estaba limpiando los aseos desde antes que llegarán. Erdi estaba con el vestido desarreglado, sonrojada y respirando con dificultad.
"Ah... Lo he encontrado... Mi principe encantador" decia Erdi con tono soñador mientras pensaba en nuestro héroe.
