¿Cómo les fue en las compras? -preguntó Milk curiosa una vez que vio a su hermano llegar. Había estado esperándolos en la entrada desde que se había levantado.

Hay un problema-dijo Vegeta buscando en uno de sus bolsillos. Pronto sacó de uno de ellos el dibujo que había arrancado en la calle.

Goku y Krilin procedieron a ingresar en la casa con las cosas que habían comprado.

¿Pedido de captura?-preguntó Milk sorprendida al ver lo que su hermano le mostraba. Visualizó el dibujo que estaba en la hoja y lo comparó con el rostro de Vegeta -Recuerdan bien tu rostro y tu cabello, parece que esto es serio.

Tendré que ocultar mi cabello siempre a partir de ahora-dijo Vegeta mientras se quitaba la capucha que había estado usando para ocultar su cabello. No le agradaba mucho tener que usarla, pero no veía que las cosas se estuvieran facilitando.

Seguramente te están buscando en todas partes. Dudo que hayan encontrado al avatar aún, ahora eres el objetivo de la nación del fuego y ni siquiera eres el avatar -dijo la pelinegra irritada. No entendía porqué no podían dejarlos en paz de una vez.

Hay que seguir el plan o tendré que entregarme. Y no creo que sea una buena idea, no sabemos a dónde llevan a los maestros que secuestran -dijo con tono cansado, Milk frunció el ceño.

Yo no te entregaré a esos idiotas, ellos no van a separarnos Vegeta- dijo con determinación-Nos llevarán a los dos o ninguno. No pienso permitir que hagan lo que quieran con nosotros.

Bien, hay que seguir con el plan de la huida. No podremos contra una nación entera solos-dijo Vegeta con resignación. Se sentía asfixiado por las circunstancias.

Claro que seguiremos con nuestro plan de la huida-dijo Milk-Por lo pronto vamos a desayunar -solicitó. Tomó de la mano a su hermano para que ambos se dirigieran al comedor de la casa de Goku.

Los demás ya estaban allí con el desayuno en la mesa. Krilin y Goku se encontraban cortando frutas mientras que Yamcha estaba sirviendo té.

¿Quieren pan? ¿Panecillos? -preguntó Yamcha en cuanto ambos se sentaron. Se apresuró a acercarle una taza de té a cada uno.

Yo quiero una manzana-dijo Milk, apenas terminó su frase Goku le acercó un cuenco de madera repleto de frutas.

Milk es alérgica a los arándanos -dijo Vegeta mientras tomaba uno del cuenco que el maestro aire les había dado y se lo llevaba a la boca.

Es cierto ¿Podrías darme una que no haya tocado los arándanos?- preguntó Milk con amabilidad. El joven de cabello despeinado le sonrió con nerviosismo mientras hacía lo que le había solicitado.

¿Son alérgicos a alguna otra cosa? No teníamos idea-preguntó Krilin interesado. No quería darles algún alimento que pudiera hacerles daño.

No, eso es todo-dijo el peliflama con desdén mientras seguía comiendo los arándanos que había en el cuenco. Aún no podía asimilar la forma tan cercana en que los trataban.

Parece que a ti también te gusta la fruta-dijo Goku sonriente al ver que el maestro tierra devoraba la fruta que había preparado para Milk.

Nosotros comemos lo que esté disponible. No se puede elegir cuando eres pobre-dijo Milk a su vez mientras comía la manzana.

Pero aquí si pueden elegir, hay muchas cosas-dijo Krilin animado, era consciente de que seguramente las cosas no habían sido fáciles para ellos.

Bien, odio el té-dijo Vegeta rechazando la taza que Yamcha le había servido. El mismo lo miró con el ceño fruncido ante sus palabras.

Disculpa, no sabíamos. Es una costumbre del templo del aire ofrecer té a los visitantes-dijo Krilin con tono conciliador.

A mí sí me gusta, aunque las costumbres de ustedes son algo diferente a las nuestras-dijo Milk pensativa. No quería ser grosera con ellos, pero realmente no estaba acostumbrada al trato que tenían con ellos.

Ya veo, discúlpennos-dijo Goku a su vez- Hemos estado tratándolos como si fueran de la nación del aire cuando no es así, nuestras disculpas.

Iré a tomar un poco de aire, regresaré en un momento-dijo Vegeta poniéndose de pie. Milk lo miró extrañada retirarse de allí.

¿Crees que lo molestamos? -preguntó Goku curioso. Lo último que pretendía era incomodar a sus huéspedes.

No, quizás salió a ver cómo están las cosas afuera. Vegeta a veces es un poco paranoico y todo esto del pedido de captura debe ponerlo nervioso-dijo Milk, había notado que la expresión de Vegeta lucía algo inquieta. Dudaba que la presencia de los otros maestros allí lo hubiera puesto así.

Ah, bueno. Supongo que cuando vea que todo está bien volverá -dijo Krilin a su vez. Tampoco sabía muy bien qué le pasaba a Vegeta.

A tu hermano no parece gustarle estar con personas-dijo Yamcha a su vez. Milk volteó a mirarlo con expresión neutral ante su comentario.

No es así siempre, probablemente no le agradas-dijo la muchacha pensativa. Había notado que Vegeta atacaba más al maestro tierra que a los otros dos integrantes de la nación del aire.

Vegeta caminó por los pasillos lentamente mientras intentaba pensar con claridad. En cuanto se dio cuenta, estaba en frente de la puerta del cuarto hecho de roca. Al parecer había algo que lo atraía a ese lugar por alguna razón. Entró en él sin pensarlo demasiado, después de todo aún sentía curiosidad por esa extraña estatua del avatar Bardock.

Al entrar la miró algunos segundos con detenimiento analizando sus detalles. Notó la ropa esculpida en piedra que la estatua tenía, era la vestimenta típica del reino tierra.

Sus facciones faciales parecían ser acordes a las pinturas que había visto de él. Goku era su viva imagen, si no fuera por la cicatriz de la mejilla serían completamente idénticos.

¿Qué quieres de mí, avatar Bardock?-preguntó para sí mismo mientras miraba la estatua. Sabía que no obtendría una respuesta preguntándole algo así a una estatua. Pero al menos lo ayudaba a pensar.

Percibía algo extraño en ese cuarto. Algo que lo llamaba, que lo invitaba a estar allí.

Se sentó frente a la estatua con las piernas cruzadas y cerró los ojos. Recargó sus manos en el suelo rocoso de la habitación, sentirse en contacto con la tierra siempre lo hacía sentir menos desorientado.

Desde el mismo momento en que había sido capaz de hacer tierra control por primera vez había notado que su conexión con el mundo se daba por ese elemento.

Sintió como si una corriente eléctrica lo recorriera desde una punta de su espina a otra. Como si algo en él se hubiera activado y fuera uno con la tierra. Sentía que las rocas querían transmitirle algo con su vibración incesante.

De repente, abrió sus ojos con sorpresa. Las ondas de movimiento que percibía eran inusuales, se puso de pie rápidamente ignorando por completo la estatua para ir hacia donde estaban los demás.

Afortunadamente, pudo encontrarlos rápido. Había partes de la casa en las que no podía percibir las vibraciones dado que la misma estaba construida de madera.

Hay que irnos, ahora-dijo Vegeta entrando en el comedor donde su hermana y los demás estaban desayunando. Voltearon a mirarlo intrigados al notar que había vuelto.

¿Ya te aburriste de estar aquí?- preguntó Goku confundido al notar que Vegeta parecía tener prisa.

Milk se puso de pie inmediatamente, había notado por la expresión de Vegeta que algo no estaba bien.

¿Ya están aquí?-preguntó Milk alarmada. Sabía que su hermano solo podría alertarse de esa forma por algo grave.

Los sentí, alguien está viniendo. Hay que irnos, no hay tiempo-dijo Vegeta con seguridad. Milk se apresuró a seguirlo, buscarían las cosas que habían llevado en primer lugar para partir pronto.

Krilin, Yamcha y Goku los siguieron hasta que fueron hacia afuera para buscar a Leigh. Debían vigilar el perímetro en caso de que necesitaran ayuda.

Ya están aquí-dijo Vegeta con seriedad, se puso la capa que había utilizado antes para cubrir su cabello. Aún no habían sacado a Leigh del establo de la casa, no podrían huir antes de que alguien los encontrara, las vibraciones se acercaban irremediablemente.

En segundos vieron llegar a dos maestros que se desplazaban con tierra control. Inmediatamente se acercaron a ellos con actitud hostil, sus rostros no parecían muy amables.

Estamos reclutando jóvenes maestros que tengan 18 años, ustedes parecen estar en esa edad -dijo uno de ellos con seriedad. Su expresión era imperturbable.

Si pueden controlar algún elemento tendrán que acompañarnos, la nación del fuego está buscando al avatar. Todos los jóvenes maestros deben ser reclutados-afirmó el otro maestro a su vez. Ambos ya tenían una edad mucho más avanzada.

Pero nosotros no podemos hacer fuego control señor-dijo Krilin, intentaría no tener que pelear con ellos primero. Pero la actitud de esos dos no parecía ser muy conciliadora.

Eso no es importante, necesitamos que nos acompañe cualquier joven que pueda controlar cualquier elemento. Ya sea tierra, fuego, aire o agua-sentenció nuevamente el primero.

¿A dónde quieren llevarnos?- preguntó Goku a su vez. Vegeta y Milk tan solo permanecían en posición de ataque, sabían que era inútil intentar razonar con ellos. Solo podían procurar estar listos para atacar.

Eso no es asunto de ustedes. Lo sabrán cuando estén allá-dijo el segundo maestro a su vez. Ya estaba cansándose de tantas preguntas.

Exigimos su colaboración-dijo el primero a su vez, aunque su tono de voz no sonaba muy conciliador.

No iremos a ningún lado-dijo Milk con seriedad, se posicionó rígidamente para poder atacar. Notaba que ambos ya estaban acercándose a ellos.

Ustedes huyan, nosotros nos quedaremos aquí-dijo Goku en un susurro para Milk en cuanto los maestros tierra empezaron a acercarse a ellos intentando detenerlos.

Uno de los maestros que intentaban capturarlos alzó sus manos para hacer surgir rocas desde el suelo. Procuró atrapar a Goku sin lograrlo, dado que el mismo despegó en el aire dado que lanzó una corriente de aire hacia abajo para impulsarse.

Krilin dirigió oleadas de aire hacia sus rostros para poder despistarlos de tratar aprisionarlo, mientras tanto, Yamcha comenzó a lanzar rocas fuertemente.

Hay que ayudar-dijo Vegeta al ver que ellos tres estaban intentando salvarlos. Milk asintió, abandonarlos no era una opción, estaban de su lado.

Malditos-dijo Milk, comenzó a arrojar una lluvia de rocas para intentar desestabilizarlos.

No vamos a ir con ustedes. Sabandijas-dijo Vegeta, hizo surgir una gran roca desde abajo de los pies de los agresores y luego la separó en dos en direcciones opuestas para que ambos perdieran el equilibrio al intentar mantenerse en pie en ellas.

Luego de que pudieron levantarse, los maestros tierra dirigieron ataques incesantes de rocas contra ellos intentando que cesaran de sus trucos.

Hay que dividirnos, pueden atraparnos pronto-dijo Vegeta mientras levantaba estructuras rocosas para poder protegerse-Tu, ven aquí-dijo refiriéndose a Goku. El mismo asintió.

Milk los miró alejarse de reojo mientras seguía atacando a los otros con rocas. Krilin desviaba algunos de los proyectiles con su aire control.

Libera a Leigh mientras intento detener al otro sujeto-dijo a modo de orden el joven maestro tierra. Goku asintió y se dirigió rápidamente al establo para abrirlo.

Vegeta comenzó a atacar con tierra control a uno de los sujetos que estaba lanzando rocas a su hermana para disuadir su atención. No le agradaba que intentaran lastimarla.

Malditos desgraciados-dijo Vegeta con frustración, uno de ellos había inmovilizado una de sus extremidades con tierra control obligándolo a pelear con tan solo una de sus manos.

Escuchó el ruido de los pasos de Leigh saliendo del establo detrás de él. Quizás tenía una pequeña chance de salir de allí, la mítica criatura se acercó a él rápidamente para ayudarlo a desviar las rocas con su cola. Estaba entrenado para proteger a los suyos.

Leigh, hi no kōgeki-ordenó Vegeta al ver que el mismo ya había salido del establo. Leigh comenzó a escupir fuego de su boca haciendo que los maestros tierra que los atacaban retrocedieran por temor a quemarse.

Goku salió después que el dragón y también comenzó a evadir los ataques con fuertes ráfagas de viento. El dragón al menos hacía que los mismos fueran menos frecuentes con sus ardientes llamas.

Súbete al dragón, yo te cubriré -dijo Goku para ayudarlo. Sería mejor disuadir la atención que estaba puesta sobre el maestro tierra. Si descubrían que él era el fugitivo que perseguía la nación del fuego estaría en peligro de ser capturado de nuevo.

Vegeta decidió no obedecerlo, lo mejor sería pelear hasta que pudieran hacer caer a los maestros tierra. Al menos el tiempo suficiente para poder salir de ahí.

Vegeta lanzó las rocas con las que habían aprisionado su mano de regreso a donde estaban los maestros tierra. Las mismas se impulsaron con más fuerza dadas las corrientes de aire que Goku dirigía hacia ellos.

Ayúdame y distráelos, creo que puedo retenerlos unos minutos -dijo Vegeta en un susurro al joven que estaba a su lado. El mismo asintió.

Goku comenzó a mover sus manos en círculos haciendo que las corrientes de aire hicieran lo mismo. Vegeta corrió hacia donde estaba Milk para que colaborara con él.

Pronto, Krilin notó lo que Goku estaba haciendo a la distancia y lo ayudó a hacerlo aún más fuerte para arrinconar a los maestros tierra en el centro de un remolino.

Vegeta y Milk movieron la tierra desde donde estaban hasta la ubicación de los maestros atrapados en el remolino de viento. Fragmentos de rocas comenzaron a incrustarse en sus cuerpos impidiendo que movieran sus brazos y piernas. Solo habían dejado sus rostros a la vista.

Hay que irnos, ahora-dijo Vegeta una vez que lograron inmovilizar a los maestros tierra. Elevó el suelo para hacer que Goku y Krilin subieran de improviso en Leigh. Milk hizo lo mismo con Yamcha el cual se había ocultado detrás del dragón.

Leigh, arriba-dijo la maestra tierra una vez que los dos se subieron al dragón. El viento que generaron las alas de la mítica criatura cuando despegaron hizo que la capa de Vegeta se bajara dejando al descubierto su cabello.

El fugitivo está con ellos-dijo uno de los maestros atrapados en las rocas. Había alcanzado a ver el cabello flameante de Vegeta justo antes de que despegaran.

Ambos intentaban librarse de su dura prisión sin lograrlo. Tardarían un poco en salir de esa situación.

Hay que avisarle a la nación del fuego, en cuanto salgamos de aquí -dijo el otro. Ambos estaban notablemente adoloridos por la rígida forma en la que habían sido atrapados.

¿A dónde vamos? Se supone que nosotros nos quedaríamos-dijo Yamcha con nerviosismo cuando todos se encontraban volando en el dragón. No se esperaba terminar montado en esa gran criatura que volaba por el cielo.

Ustedes no pueden quedarse ahí. Los secuestrarán, no seas estúpido -dijo Vegeta con tono de reproche. Lo irritaba que el muchacho de cicatriz no se hubiera detenido a pensar al menos un segundo lo mucho que les había costado escapar de esos sujetos.

Pero mi casa-dijo Yamcha con tono triste. La abrupta huida no lo había dejado procesar todo lo que pasaba.

Muchas gracias por sacarnos de ahí-dijo Goku con tono agradecido -Sin ustedes no habríamos podido escapar de ellos, quizás no me habrían secuestrado a mí. Pero si a Yamcha y Krilin-dijo a modo de observación el maestro aire.

Yo también les agradezco por la ayuda. Disculpen si antes fui grosero con ustedes-dijo Krilin haciendo una leve reverencia como símbolo de respeto.

No es nada, ustedes también nos ayudaron mucho. Ahora hay que huir pronto de este lugar, esos dos van a seguir buscándonos y seguramente traerán más personas para que intenten atraparnos-dijo Milk con cierta tranquilidad. Estaba aliviada de que hubieran podido escapar exitosamente.

Lo mejor será que salgamos de la ciudad rápido. Si permanecemos en esta más tiempo van a encontrarnos-dijo Vegeta a modo de sugerencia-Debemos salir de su rango de búsqueda.

¿Nosotros vamos a irnos con ustedes?-preguntó Yamcha confundido al ver que ambos hermanos estaban fraguando un nuevo plan.

Si quieres podemos arrojarte desde aquí, pero te atraparán pronto. Solo podremos salir de aquí rápido con la velocidad de Leigh-dijo Vegeta, notaba que el maestro tierra no parecía querer ser parte de eso.

Nosotros iremos con ustedes. Quedarnos seguro provocará que nos secuestren-dijo Krilin, Goku asintió de acuerdo-Si es que nos lo permiten, por supuesto.

Nosotros los metimos en problemas en primer lugar. Creo que podríamos ayudarlos por el momento-dijo Milk cediendo a la petición del pequeño monje.

Por fin me iré lejos de mi casa-dijo Goku sonriente. Yamcha cayó hacia atrás con cansancio quedando acostado en la espalda de Leigh.

Yo quería volver a mi hogar-dijo con tono nostálgico, al parecer estar incluido en esa repentina aventura lo había tomado por sorpresa.

Vuelve solo si quieres. No podemos llevarte, debemos seguir hacia la siguiente ciudad para evitar ser atrapados-dijo Vegeta con seriedad. El muchacho de cicatriz bufó con resignación.

Yamcha quédate. No sabes qué puede pasarte si los de la nación del fuego te secuestran-dijo Krilin intentando convencerlo. Esa situación no era tan mala, al menos estaban a salvo por el momento.

Aún así yo quería regresar y no podré hacerlo al menos hasta que el avatar aparezca-dijo con tristeza el maestro de cicatriz.

En eso tienes razón. Todos estamos subordinados a la aparición del avatar- dijo Goku con una sonrisa- Me pregunto cómo lucirá en esta vida, espero que el ciclo no se haya roto. Me encantaría conocerlo-dijo con ojos soñadores. Solo imaginar la apariencia de la nueva vida de su padre en el mundo lo llenaba de esperanza.

Yo también quiero saber quién es. Sería bueno poder darle una paliza por desaparecer por tanto tiempo-dijo Milk irritada. Le molestaba no poder tener una vida normal por culpa de la nación del fuego y su búsqueda de ese maestro desconocido.

Si no aparece pronto nuestro viaje será muy largo-dijo Vegeta con cierto cansancio. Ya se había mentalizado en cómo sería un viaje de tal longitud junto a su hermana, pero ahora que los demás estaban allí no estaba seguro de cómo procederían las cosas.

Pasaron algunas horas volando hasta llegar a la próxima ciudad. Afortunadamente, pudieron llegar a ella sin mayores problemas justo antes del anochecer.

Aterrizaron en un lugar algo despoblado donde se dispondrían a acampar. Después de todo los cinco estaban muy cansados, hasta Leigh se había agotado bastante por toda la distancia que habían recorrido.

¿Qué vamos a hacer ahora? ¿Somos vagabundos?-preguntó Yamcha algo alterado por las condiciones en las que estaban.

Goku y Krilin se habían sentado en el suelo para poder descansar un poco. Mientras, Vegeta y Milk iban a buscar algunas cosas para poder pasar bien la noche en el equipaje que Leigh cargaba.

Bienvenido a la vida del pobre -dijo Vegeta con tono divertido, ese sujeto parecía quejarse de todo. No sería difícil molestarlo.

Voy a buscar agua, debe haber algún lago cercano-dijo Milk llevándose su odre consigo mientras se dirigía a adentrarse un poco en el bosque.

Vegeta levantó la parte del suelo en la que Goku estaba sentado con tierra control obligándolo a ponerse de pie de improviso.

Acompáñala-ordenó. El pelinegro tan solo sonrió ante su sugerencia y se fue corriendo en la dirección en la que Milk se había ido.

Vaya, parece que a Goku nada de esto le molesta-dijo el joven de cicatriz algo frustrado.

A mí tampoco me agrada mucho ser perseguido por la nación del fuego. Pero esto no es tan malo -dijo Krilin aún sentado en el césped-¿Necesitas que te ayude con algo, Vegeta?-ofreció.

Iré a buscar leña para hacer una fogata. A Milk le da frío de noche y tampoco es muy agradable estar en la oscuridad. Cuando vuelva tú la encenderás, vigilen a Leigh mientras vuelvo-ordenó antes de alejarse de allí. Seguramente no tardaría mucho en encontrarla, el lugar en el que estaban estaba repleto de árboles.

Es muy mandón-dijo Yamcha a modo de queja en cuanto el maestro tierra se alejó.

Lo es, pero sabe lo que debemos hacer para sobrevivir. Mientras estemos con él y Milk estaremos bien-dijo Krilin para animarlo -Son muy valientes y hábiles -insistió.

No puedo negar eso-dijo Yamcha sin cambiar su expresión de resignación. Después de todo ellos dos los habían ayudado con los maestros que querían secuestrarlos. Aunque no se llevaba tan bien con Vegeta parecía que el mismo estaba dispuesto a ayudarlos.

Ánimo-dijo Krilin sonriente, se puso de pie para acercarse a Leigh. El mismo acercó su cabeza hacia él para que lo acariciara. Podía ser una criatura muy bondadosa cuando tomaba confianza con las personas.

El dragón podría encender la fogata ¿No escupe fuego? -preguntó Yamcha confundido al recordar que había visto al animal lanzando llamas desde su boca.

Es verdad, aunque quizás esté cansado. Estuvo volando muchas horas hoy-dijo Krilin, el dragón reposó su cabeza en el suelo luego de que el pequeño maestro dejara de acariciarlo. Parecía que se había dormido inmediatamente.

Entonces podemos encenderla usando rocas-dijo Yamcha pensativo, tomó dos piedras del suelo para poder encender la leña que Vegeta traería.

Krilin sonrió al ver que su amigo al menos estaba intentando adaptarse a la nueva situación, esperaba que la convivencia de los cinco fuera armónica mientras el avatar siguiera sin aparecerse.

Capítulo 6 listo!! Espero les haya gustado el capítulo de hoy. Estos días no he tenido tanto tiempo para escribir, disculpen el hiatus en las otras historias.

Si tienen dudas o comentarios respecto a la historia estaré feliz de leerlas. Agradezco las opiniones que quieran darme.

Muchas gracias por leer

Nos leemos pronto

Nieblaneit0r.