En la ciudad de Santaun, un importante hombre vestido con ropas rojas y una corona dorada asistía a una gran sala. Allí, un grupo de hombres lo esperaba pacientemente sentados a lo largo de una amplia mesa.

Bien, veo que ya todos están aquí. Díganme los temas que trataremos hoy, no tengo todo el día-dijo el hombre que había ingresado con expresión seria. Tenía piel bronceada, un poblado bigote y una cicatriz que cruzaba su ojo.

Se sentó en la cabecera de la mesa, él era la persona a cargo en ese lugar.

Agradecemos que nos honre con su presencia señor del fuego Paragus -dijo con tono respetuoso un anciano que se encontraba allí.

Infórmenme de la situación- ordenó el susodicho con tono exigente-Reino tierra-dijo como orden.

Ayer recibimos los últimos reportes de los avances de la nación del fuego. Hemos capturado muchos maestros tierra, aún no hay señales de haber encontrado al avatar- informó uno de lo hombres que estaban allí-Una gran parte de nuestros hombres siguen rastreando más maestros en los dominios del reino tierra.

Tribus del agua-dijo luego de escucharlo. Otro hombre comenzó a hablar al escucharlo.

Hemos buscado incansablemente en la tribu del agua del norte, pero se han resistido una y otra vez a nuestros ataques. Tenemos razones para creer que algunos maestros agua han conseguido huir de allí- dijo el hombre con expresión inmutable- La tribu del agua del sur está bajo nuestro control, la mayor parte de sus maestros han sido capturados.

Nómadas aire-mencionó el señor del fuego con expresión imperturbable.

Hemos intentado acceder a ellos, pero dominan el cielo alrededor de los templos. Atacaremos nuevamente en cuanto los transportes aéreos armados estén listos-informó otro de los hombres. Este último se veía algo más nervioso que los otros dos.

La invasión está tardando demasiado-dijo con furia en su voz el señor del fuego.

Discúlpennos señor, pero la invasión resulta difícil si no podemos matar a los maestros jóvenes. Como usted ya sabe, el avatar continúa desaparecido-informó otro de ellos -No podemos arriesgar todo el futuro de la nación del fuego matando por accidente al avatar.

Quiero encontrar a ese mocoso o mocosa, es imposible que se haya desvanecido de la faz de la tierra- dijo con desprecio.

Miró con su ojo sano a los demás hombres que estaban allí. Permanecían atentos a lo próximo que diría.

Convoquen a una reunión si tienen novedades sobre el avatar. Debo ir a la prisión de Santaun hoy. Continúen con los planes de invasión e infórmenme de los nuevos avances, que no quede ningún maestro de diecinueve años libre- ordenó. Los demás hombres allí solo afirmaron con sumisión a lo que les había ordenado.

¿Debo cancelar las lecciones de fuego control de el príncipe Broly, mi señor?-preguntó uno de los hombres allí.

No, Broly se quedará aquí. No es conveniente que salga hasta el evento que haremos en unos días -explicó el señor del fuego-Ese es el tiempo que le daré al avatar para aparecer, si no es así tendré que seguir con la invasión de forma más agresiva. Las personas de la nación del fuego están impacientes por conocer a su avatar, debo encontrarlo a como dé lugar.

Los demás en la mesa lo miraron en silencio. Ya sabían de sobra de qué trataba el plan en caso de que el avatar no se revelara pronto. Sería un completo caos.

La nación del fuego se encontraba en una situación delicada los últimos años. Cada festival del avatar que pasaba solo hacía que la tensión y la incertidumbre del pueblo creciera cada año. Su ausencia brillaba más intensamente con el paso del tiempo.

La situación del avatar ya ha aguantado mucho. Dudo que resista a los diecinueve años, así que si no aparece ya saben como proseguir en el evento anual por el avatar Bardock -ordenó el señor del fuego. Los demás en la mesa solo acordaron con él al escucharlo.

Paragus salió de allí una vez terminada la reunión, iba rumbo al jardín de su palacio.

Sentía frustración, la situación no había cambiado demasiado. Estaba perdiendo la guerra que él mismo había comenzado, aún no tenía las ventajas militares que habría esperado conseguir hasta ese punto.

Los recursos que estaban gastando en la invasión eran colosales, invertía muchas de sus riquezas en la educación y entrenamiento de los maestros fuego. Además del equipamiento y el transporte.

Si no encontraba al avatar pronto las cosas se pondrían difíciles, tener ese elemento de su lado había sido su prioridad desde que su antecesor había fallecido.

Padre ¿Ya acabaste con tu reunión? -preguntó una voz tranquila. Provenía de donde él había salido.

Sí, ya he terminado Broly- respondió con tono seco.

Su hijo, que también tenía ropas rojas y una corona más pequeña en su cabello, una con tres puntas. Se acercó a su lado mientras miraba el paisaje de su jardín. Tenía algunos árboles y un pequeño estanque con especies de peces originarias de la nación del fuego.

¿No vamos a entrenar hoy? Me avisaron que saldrías-preguntó el joven intrigado.

No, tengo que visitar un lugar. Como sabes el avatar aún no ha aparecido, así que tendremos que preparar algunas cosas estos días. La nación del fuego necesita a su avatar -explicó. Broly lo miro con confusión.

¿Qué vamos a hacer? Sé que no has podido encontrarlo por más que ya lo hemos buscado en cada rincón de la nación del fuego-dijo Broly pensativo. Le parecía muy extraño que una persona fuera tan difícil de localizar.

Pronto afinaremos los detalles del evento del día del avatar, quiero que practiques mucho tu fuego control hasta eso. Harás una exposición de tu habilidad en público-anticipó. Broly asintió, ya le había hablado un poco sobre eso.

De acuerdo padre, prometo que no te decepcionaré-dijo Broly con seguridad. Su habilidad para manejar el fuego era una de las mejores. Había sido elogiado por todos los maestros que había tenido en su vida.

Debo irme ahora, sé obediente y practica. Volveré antes del anochecer -aseguró mientras volteaba para retirarse.

¿A dónde irás? ¿Es muy lejos?- preguntó el joven maestro fuego, su padre no le había hablado mucho de eso.

Iré a la prisión de Santaun, quiero ver a los nuevos prisioneros de guerra para saber si han averiguado algo sobre el avatar. Aunque seguramente no saben nada, como siempre- dijo Paragus sin demasiado entusiasmo.

De acuerdo padre, nos vemos en la noche-dijo el príncipe con calma ya que ya había saciado su curiosidad.

Vegeta, Milk y Goku caminaron con tranquilidad y sin problemas hacia un templo. Habían dejado a Leigh en una zona boscosa en las afueras de la ciudad para que se ocultara hasta que regresaran.

No parecía ser un lugar con muchos habitantes, era un pequeño pueblo del reino tierra que se veía pacífico a primera vista.

Pronto encontraron un templo que hallaron preguntándole a un campesino del pueblo. Solo había uno en toda la isla.

Llegaron al templo cuya estructura estaba confeccionada con rocas y tenía decoraciones con tonos verdes típicos del reino tierra.

Este templo es muy bonito-dijo Milk sonriente en cuanto llegaron, Goku entró primero seguido de ella y Vegeta. Todo el lugar se encontraba en silencio.

Había un hombre en las cercanías que estaba allí con una capucha puesta. No dejaba ver su rostro con eso.

Hola, queremos entrar a meditar por favor-solicitó Goku. Ya sabía como solían ser las cosas dentro de los templos, aunque no era usual que las personas llevaran la cara cubierta. Al menos en los que él había ido.

Entren por la puerta del fondo a la derecha, por favor mantengan el silencio y no toquen la estatua del avatar Bardock-solicitó el sujeto que estaba allí. Goku asintió y le hizo un gesto a sus amigos para que lo siguieran.

Vegeta miró de reojo al sujeto encapuchado mientras caminaba atrás de Milk, sentía que ese tipo estaba vigilándolo a él. Aunque no sabía bien porqué.

Bien, aquí hay bastante energía espiritual. Intenta conectarte con papá si quieres, es muy probable que puedas hacerlo teniendo en cuenta que es el día que falleció- dijo Goku en cuanto llegaron al lugar. Era una habitación repleta de plantas, estaba hecha de roca también.

En el centro, había una gran estatua de Bardock con los brazos cruzados y mirada seria.

Dudo que pueda, lo espiritual no es lo mío-dijo Vegeta sin demasiado entusiasmo. Tal vez el aspecto que más lo hacía negarse a ser el avatar era el hecho de tener que aprender de esas cosas espirituales.

No hablen muy alto, hay más personas aquí-dijo Milk en un susurro. Había notado que había personas meditando en el otro lado de la habitación, aunque no eran demasiadas. Parecían ser otros habitantes del pueblo.

Se dirigieron a sentarse frente a la estatua pero al menos dos metros alejados de ella. Vegeta estaba en el centro de frente a ella mientras que Milk y Goku estaban a su derecha e izquierda. Los tres se sentaron con las piernas cruzadas y los ojos cerrados.

Ahora respira, relájate y abre tu mente-dijo Goku con tono calmado a modo de indicación- Recuerda que debes respetar a los espíritus y ellos te respetarán a ti- aclaró. Vegeta no respondió mientras intentaba hacer lo que le decía.

Vegeta respiró levemente antes de cerrar sus ojos, los había abierto para ver la estatua luego de algunos minutos intentándolo. Debería ser paciente si quería conectar con su vida pasada. Goku le había dicho antes que los asuntos espirituales no eran muy sencillos, pero que podría hacerlo si se concentraba.

Cerró sus ojos nuevamente e intentó mantener la calma mientras volvía a respirar suavemente. Procuró ignorar las distracciones a su alrededor, la respiración de sus amigos, las voces de los otras personas que también estaban allí, incluso las vibraciones de las rocas que percibía gracias a su sentido sísmico.

Abrió nuevamente los ojos y todo lucía igual, movió una de sus manos ya que sentía algo extraño en sí mismo. Al hacerlo, notó que se había separado de su cuerpo, tal y como había ocurrido cuando había soñado con su vida pasada.

Miró confundido a su alrededor mientras se ponía de pie notando que sus amigos seguían allí. Milk y Goku estaban sentados uno cada uno al lado de su cuerpo, el cual permanecía meditando inmóvil.

Si bien en el sueño eso le había parecido algo extraño ahora que eso le había pasado estando despierto era un poco más perturbador.

No te asustes-dijo una voz ya conocida para él, volteó a ver hacia la estatua encontrando a Bardock. Había salido de allí-Vine porque tú me llamaste.

Avatar Bardock-dijo Vegeta sorprendido, si bien lo había visto una vez aún no se acostumbraba a aquellas apariciones espirituales. Todo era sumamente fluctuante y confuso en aquellas circunstancias. Sentía que una nube de humo comenzaba a rodearlos dificultandole ver el lugar en el que estaban.

Quería hablarte, me alegro de que acompañaras a mi hijo al templo -dijo Bardock mirando de reojo a Goku-Es un gran guía para ti, no esperaba menos de él-dijo con orgullo en sus palabras.

¿De qué quieres hablarme?- preguntó Vegeta, estaba bastante confundido aún-Supongo que no tenemos tanto tiempo para hablar.

Es verdad, no lo tenemos-dijo Bardock con seguridad- Aún no dominas bien la parte espiritual de ser el avatar, eso lo aprenderás cuando entrenes aire control -aclaró. Vegeta asintió.

El avatar Bardock puso una mueca seria al voltear a verlo, al parecer lo que iba a comunicarle era algo importante.

Pronto el mundo sabrá que eres el avatar, debes estar preparado para afrontar tu responsabilidad ante el mundo Vegeta-advirtió- Debes ser valiente y dejarte guiar por tus maestros, tal vez muchas personas quieran acabar contigo o usar tu poder para el mal. No debes permitirlo.

Lo entiendo-dijo Vegeta, sentía que un gran peso se depositaba sobre sus hombros-¿Puedes decirme qué es lo que está sucediendo? ¿Quién es el enemigo?- preguntó.

No puedo decirte todo, pronto será el momento de la verdad, pero lo que si puedo decirte es que debes estar preparado para cuando eso suceda. Es por eso que debes entrenar duro y dominar todos los elementos, la nación del fuego te busca desesperadamente- advirtió-No debes ceder ante ellos, quien lidera esa nación tiene malas intenciones.

¿Quién lidera la nación del fuego? ¿Hablas del señor del fuego? -preguntó Vegeta confundido-¿Él es quien me busca?

Así es, el señor del fuego Paragus. Él quiere tener tu poder a disposición, además de que no puede iniciar una guerra hasta encontrarte-informó- Requiere tener de su lado al avatar del fuego, por eso debo advertirte que tendrás que cuidar mucho en quién confías. Una vez que tu identidad sea revelada tendrás una gran cantidad de aliados, pero también de enemigos.

Entiendo-dijo Vegeta pensativo- Entonces deberé entrenar para enfrentarlo, pero solo es un maestro fuego ¿En realidad es tan difícil acabar con él?

Cuando yo me enfrenté a él fue una ocasión especial, fue durante la caída de un cometa que potencia las habilidades de los maestros fuego. El cometa de Shenlong. Tú tendrás que hacerlo con otras dificultades que aún no conoces y que yo no puedo decirte. Es por eso que debes ser capaz de alcanzar el estado avatar para estar preparado-respondió el avatar con el ceño fruncido, parecía ser un asunto de suma importancia.

Bien creo que ya llevamos un tiempo aquí ¿Recorremos el templo? -preguntó Goku luego de abrir los ojos. Milk los abrió también al escuchar la voz de Goku, pero Vegeta continuó en la misma posición sin moverse.

Vegeta-dijo Milk tocando su hombro. Su hermano no se inmutó en lo más mínimo. Cuando iba a hacerlo otra vez Goku la detuvo tomando su mano suavemente antes de que lo tocara.

Creo que lo logró-dijo Goku mirando fijamente a la pelinegra, se veía preocupada-No volverá hasta que termine, no tiene caso intentar despertarlo.

¿Está hablando con el avatar Bardock?-preguntó la maestra tierra confundida.

Puede que si, o podría estar en el mundo espiritual. Aunque tal vez solo esté hablando con papá. Vegeta aún no sabe cómo tratar con los espíritus-dijo Goku pensativo-Hay que vigilar su cuerpo mientras no está aquí, no pueden hacerle nada a su espíritu, pero mientras este así su cuerpo es vulnerable.

De acuerdo-dijo Milk algo confundida aún. No sabía mucho sobre los asuntos de avatar, después de todo apenas se estaba enterando de esas cosas, pero haría lo que sea para apoyar a su hermano por más extraño que le resultara.

¿Qué es el estado avatar? -preguntó Vegeta confundido, si bien ya había escuchado algo sobre eso por parte de Goku, él tampoco sabía exactamente qué era.

El estado avatar es un estado que te vuelve sumamente poderoso, todo el poder de tus vidas anteriores se concentra en tu cuerpo cuando lo utilizas potenciando tus habilidades -explicó con calma-Pero debes aprender a controlarla a voluntad, ya que debe ser usada con responsabilidad. Si mueres en ese estado el ciclo del avatar terminará.

Vegeta lo miró sorprendido, apenas y comenzaba a entender cuál era la importancia que tenía la figura del avatar. Parecía ser algo bastante específico y especial, esperaba no fallar en la misión que tenía por delante.

Habrá muchas personas que querrán aprovechar tu debilidad, aunque seas el avatar el dominio de los elementos por separado también puede ser muy peligroso. Así que no subestimes a tus enemigos-advirtió el avatar anterior- Y sé la mejor versión de ti mismo que puedas alcanzar, yo estaré para ti cuando necesites de mi ayuda. Ahora tienes un largo camino qué recorrer, sé que podrás hacerlo como ya lo has hecho antes.

Vegeta iba a contestarle, pero vio a Bardock darse la vuelta para volver a la estatua. En cuanto llegó a ella desapareció, miró nuevamente hacia atrás. Allí estaban Milk y Goku mirándolo atentamente, no a él, sino a su forma física.

Se dirigió hacia allí para poder volver a su cuerpo, aparentemente su tiempo con Bardock había acabado. En cuanto se acercó su figura espiritual se apegó instantáneamente a su forma física.

Una vez que sus dos partes se unieron, abrió lentamente los ojos. Se sentía algo débil por apenas haber devuelto su espíritu a su cuerpo. No era una experiencia muy habitual para él.

Ya estás aquí-dijo Goku sonriente al notar que ya había despertado. Volteó a verlo para notar que le sonreía y luego miró a Milk, ella lucía algo preocupada.

Sí, me duele la cabeza-dijo Vegeta con cierta molestia, ser un puente espiritual era agotador.

¿Estas bien? ¿Qué viste?-preguntó Milk intrigada sin apartarle la mirada.

Vi a Bardock, me advirtió sobre lo que me espera. Les contaré cuando nos encontremos con los demás-dijo Vegeta poniéndose de pie- Quiero irme de aquí, fueron muchas cosas espirituales por un día.

De acuerdo-dijo Goku algo más animado. Miró la estatua de su papá e hizo una reverencia ante ella -Espero que estés en paz papá- dijo por lo bajo con tono respetuoso.

Vegeta y Milk lo observaron en silencio hasta que terminara de despedirse. Sabían que debía ser duro para él recordar lo que había sucedido ese día.

Vamos, ya me despedí de mi papá- dijo Goku mirando a sus amigos con una expresión más tranquila. Al parecer haber acudido a ese lugar había logrado que se sintiera en paz.

Bien, hay que conseguir provisiones, tenemos mucho camino por delante -dijo Vegeta mientras los tres salían de allí. Se cruzaron con el sujeto encapuchado antes de irse, el mismo tan solo les agradeció por su visita con un aura misteriosa.

¿Qué le pasará a ese tipo? Daba miedo- dijo Milk en cuanto salieron del templo. Los tres caminaron uno al lado del otro dirigiéndose a la zona de mercado del pueblo.

Tal vez es dueño del templo-dijo Goku pensativo- Aunque si se veía algo raro, pero al menos no nos hizo nada.

Sentí como si me estuviera observando, aunque no pude ver su rostro- dijo Vegeta con cierta sospecha. No solía confiar mucho en las personas, así que aquella actitud misteriosa le había llamado la atención.

Si intentan hacerte algo Milk y yo te protegeremos-dijo Goku con determinación-Aunque sobre todo Milk, allí había muchas rocas que podría usar para pelear.

No creo que sea adecuado pelear en un templo, aunque de haber sido necesario lo habría hecho- dijo Milk a su vez pensativa. Sonrió al ver la mueca feliz de Goku, al parecer estaba contento de haber ido allí.

Mientras no uses la estatua de mi papá de escudo por mí estaría bien-dijo Goku a modo de broma, Milk rió al escucharlo.

Claro que no, no usaría la estatua del avatar Bardock-dijo Milk entre risas.

Vegeta los miró de reojo al verlos bromear tan animados, percibía que a su hermana empezaba a agradarle el maestro aire. Eso no era algo tan fácil de conseguir teniendo en cuenta el carácter duro que siempre tenía.

¿Por qué no van por comida y yo busco con Leigh a los otros? Tal vez ya estén llegando-dijo Vegeta a modo de sugerencia. Goku y Milk lo miraron sorprendidos al escucharlo, los dejaría solos.

¿Estarás bien? Dijiste que tenías dolor de cabeza-dijo Milk con tono preocupado.

Ya no me duele, además quiero escribir lo que Bardock me dijo para no olvidarlo-dijo a modo de excusa, Goku pareció estar de acuerdo.

Bien, buscaremos en la costa luego, seguramente no será difícil encontrarlos si están con el barco y Leigh-dijo Goku sonriente.

Si no los veo en dos horas iré a buscarlos con el olfato de Leigh- dijo Vegeta con tranquilidad. Goku asintió, Milk accedió a quedarse con él aunque estaba algo nerviosa por aquella situación.

Ve con cuidado Vegeta, no te metas en problemas-dijo Goku con tono amable. El avatar tan solo hizo un gesto con la mano a modo de saludo antes de irse.

¿A quién desea visitar su majestad? -preguntó un guardia. Paragus había ido a caballo junto con sus guardias rumbo a la prisión central de Santaun. La misma estaba ubicada en una montaña cubierta completamente de metal.

Vengo a ver a Vegeta, el traidor- dijo Paragus con seriedad- Debo hablar con él. Así que llévame a su celda, ahora-ordenó. El guardia de la prisión lo vio con temor, era algo peligroso acceder a la celda de ese tipo.

Sin intentar contradecir al señor del fuego, lo acompañó a la sección más profunda de la montaña que estaba transformada en prisión. Caminaron por varios pasillos hasta encontrar una celda metálica, al abrir la puerta una oleada fría rozó sus rostros.

Aquel viento helado se había escapado a través de los barrotes metálicos que protegían la puerta desde adentro.

Aquí está señor ¿Quiere que abra esto también?-preguntó refiriéndose a la protección interna de la celda. Desde allí ya podía ver al prisionero que estaba adentro. Se encontraba encadenado con grilletes gruesos en sus muñecas y brazos.

No, puede oírme perfectamente desde aquí-dijo el señor del fuego con seriedad-Vete, te llamaré cuando termine-ordenó. El guardia se retiró para dejarlo solo con el prisionero.

Hace tiempo que no me visita nadie interesante ¿Por qué me honra con su presencia su majestad?-preguntó una voz masculina con tono irónico, Paragus frunció el ceño al oírlo.

• Créditos por el fanart utilizado a @Dark-crawler en Deviantart.

Buenas noches, aquí les traigo la actualización del capítulo 20

Espero les este gustando cómo va la historia, realmente me gusta mucho escribir este fic y planeo continuarlo por varios capítulos más.

Últimamente mi ritmo de escritura estuvo más lento porque estoy estudiando para exámenes de la universidad y además estoy empezando a hacer fanarts. Apenas hace unos días terminé el primero y ya voy por el segundo, pero me tardo mucho en hacerlos.

No puse mi fanart en este cap ya que lo hice basado en otro capitulo que viene más adelante () pero como no spoilea nada relevante del fic lo publicaré en mi página de Facebook y en mi Twitter.

No soy muy buena en eso todavía pero disfrute mucho intentando dibujar digital así que continuaré practicando. Me hace mucha ilusión ser capaz de hacer fanarts Vegebul.

Si quieren buscarme por su cuenta en mis redes sociales para ver el dibujo en todas estoy como Nieblaneitor.

Sin más que decir, muchas gracias si leyeron hasta este punto, nos leemos la próxima semana.

Niebla~