Capítulo 4: El intruso.
Luz
Dentro de la Casa Búho, Luz se encontraba grabando a King con su teléfono celular. "Y aquí tenemos la criatura más terrible el rey de los demonios, enfrentándose a su enemigo natural. El calcetín de patito". La adolescente humana narraba con un acento británico como uno de los documentales que veía con su madre. Mientras el pequeño demonio seguía luchando con el calcetín hasta que lo termina rompiendo con los pies, cuando se da cuenta de esto se levanta. Se lo quita y lo arroja contra el suelo.
"¿Dónde estás ahora, calcetín de patito?". Exclama después de darle un puñetazo.
"Entonces…, ¿Por qué me llamaste aquí?". Pregunta curiosa la aspirante a bruja.
"Oh, sí". El pequeño demonio reacciona ante esas palabras, como si por fin recordara lo que tenía que hacer. Se acerca a una pizarra que estaba cubierta con una sábana. "Humana Luz, humano… ¿Dónde está Adam?". Pregunta al notar su ausencia.
"Bueno, después de nuestro entrenamiento de combate de la mañana. ¡Y que él se cansara de usarme como su saco de boxeo personal!". Le muestra a King sus hematomas y rasguños completamente indignada. "Dijo que tenía que hacer una llamada y que seguiría entrenando solo".
"Mmm, él se lo pierde. Como decía, has estado tan obsesionada con la brujería que no has aprendido sobre lo de mi especie. Acordamos con Eda que yo también podría enseñarte, así que prepárate para…". Quitaba la sabana y se ponía una boina de profesor. "Demonios 101, los demonios como yo somos embaucadores sombríos del crepúsculo. Criaturas de hueso y azufre…".
"Y lindas patitas", señala la joven de ascendencia hispana.
King suspira ante su comentario. "Y lindas patitas, vivimos solo para crear el caos y miseria". Levanta un bolígrafo en el aire. "Nuestras únicas debilidades son el agua vendita y lo comentario pasivo agresivos… A veces". Se mostraba incomodo al mencionar esa última parte.
"Oh, ustedes son sensible". Susurra Luz ante la nueva información.
"Incluso los demonios, tienen demonios internos…". Entonces muestra un dibujo de una criatura de color rosa y un caparazón en la espalda. "El demonio más poderoso de todos es Snaggleback, es el…".
"¡Chico malo!", dijo la aspirante a bruja de forma infantil. Mientras jugaba con las aplicaciones de su teléfono.
"Luz presta atención, esta información podría salvarte la vida algún día". Dice el pequeño demonio señalando la pizarra.
"No, no. Estoy prestando mucha atención". Asegura Luz. "Esta es mi cara de atención", se señala a sí misma y empieza a hacer muecas.
Se ven interrumpidos cuando se escucha el sonido de un rayo no muy lejos. "Oh, parece que va a llover". Comenta King mientras mira por la ventana.
Luz jadea de la emoción. "Me encanta la lluvia", esta corre directamente hacia la puerta.
"Oye, espera". El pequeño demonio trata de detenerle. Pero esta le ignora, sin prestar atención a su advertencia.
Adam
"Gracias por cubrirme Kevin, estoy investigando una pista sobre mi pasado y no quiero preocupar demasiado a mi madre... No Kevin no me estoy quedando con una chica sexy…, ¡tampoco me estoy quedando con un chico!". Responde las preguntas de su amigo, avergonzado por lo que insinuaba. "Tranquilo tendré cuidado y saluda Julie, sé que ella también ha estado preocupada". Después de decir eso cuelga la llamada y deja escapar un largo gemido. "Primero le miento a mi madre, luego a mi hermana y ahora a mis mejores amigos. Realmente soy una persona horrible", se decía a si mismo con gran culpa por sus acciones. Después de eso empieza a practicar con su hacha lanzando varios golpes descendentes.
Entonces se da cuenta que el cielo se oscurece y se podían escuchar algunos truenos a lo lejos. "Parece que va llover…", dice restándole importancia y siguiendo con su entrenamiento. Hasta que recuerda algo que Eda le dijo. "¡Parece que va a llover!", exclama ahora con pánico.
Corre a toda velocidad por el bosque hasta que escucha algo. "Adam", el adolescente rubio voltea para ver a la Dama Búho también corriendo en pánico. "Esta por llover, sabes lo que eso significa".
"Si, me acuerdo". Seguían avanzando hasta que pueden ver a Luz parada frente a la Casa Búho con los brazos extendidos.
"Hola Eda, hola Adam. Vamos sentir las primeras gotas de lluvia sobre nuestro cabello". Decía una ilusionada Luz.
"¡Luz entra a casa, ahora!", trata de advertir a su hermana menor.
Esta solo se veía confundida, hasta que nota que una flor a su lado. "Apuesto que tú también amiguito", su actitud alegre se ve interrumpida cuando una gota impacta en la planta marchitándola. "¿Qué?".
"¡Lluvia hirviente!", decía la Dama Búho quien se adelanta y se protegía con los brazos. "Todos adentro de inmediato".
Luz no pudo preguntar lo que estaba pasando, cuando su maestra le toma del brazo y le empuja a al interior de la casa.
Adam entra poco después y jadeaba un poco mientas recuperaba el aliento. "Me sorprende que puedas correr tan rápido con tacones".
"Años de práctica, pero vale la pena". Luego mira con orgullo a su estudiante que salvo. "Uf, eso estuvo cerca. Pero lo importante es que no te lastimaste".
"Si", gemía una adolorida Luz y en una posición muy incómoda. "No duele".
En Bonesborough, sus habitantes se resguardaban al ver las nubes de lluvia y sentir los truenos. En una ventana que tenía varias masetas con plantas, de ella sale Willow quien se horrorizada al ver sus plantas en peligro. Las toma con sus manos, aunque las gotas de lluvia le quemaban y logra cerrar la ventana con los dientes. En otra parte se puede ver a la pequeña criatura teórica de las conspiraciones, corriendo completamente aterrada. Finalmente encuentra la cueva de un ratón y expulsa a su dueño después de gruñirle.
De regreso en la Casa Búho, King se encontraba poniéndole unas banditas en el brazo a Luz. Mientras Adam fue a buscar un botiquín, la aspirante a bruja se encontraba con su capucha de orejas de gatos. El pequeño demonio se pone una de las banditas sobre la nariz. "Oh, mira somos amigos de banditas".
Los ojos de Luz brillan de emoción y se desploma al suelo con un chillido. "Oh, dios mío. Te amo tanto". Siente que la puerta se abre y de ella sale el adolescente rubio cargando un botiquín. "¿No te parece lo mas lindo que has visto en tu vida hermano?". Pregunta completamente fascinada.
"He visto mejores", responde encogiéndose de hombros. Luego aparta a su hermana del pequeño demonio, para revisarle. "No se ve tan mal, pero deberías tener más cuidado".
"Bueno, ¡recibí peores heridas esta mañana!". Le responde sin ocultar su molestia, aunque su hermano mayor ignora sus quejas. "¿Te acuerdas de esa ves que salimos a bailar bajo la lluvia usando trajes de baño?". Pregunta con cierta nostalgia en su voz.
"Como olvidarlo, estuvimos horas bajo la lluvia y al día siguiente te enfermaste. Mama nos regañó". Una sonrisa nostálgica se ve en el rostro de Adam. "Aunque no podríamos hacer eso hoy".
"Una tormenta hirviente en las Islas Hirvientes, el clima aquí es muy divertido". Decía la aspirante a bruja completamente emocionada.
"Yo no lo llamaría divertido hermanita, Eda me advirtió sobre el clima aquí entre los peligros de la isla". Dice el adolescente rubio que había terminado de revisar a Luz.
"Aquí no tenemos clima", corrige Eda mientras se encontraba trabajando en un hechizo y se encontraba protegiéndose con una barrera mágica. "Tenemos desastres naturales, gorenados, granizo de esquito y arcoíris del dolor".
"Es como un arcoíris, pero si los miras te pondrá de adentro a fuera". Explica King a los sorprendidos humanos.
"Puaj, sigue sorprenderme puedan vivir en un lugar como este". Comenta Adam disgustado y Luz serraba su capucha con miedo.
"Te acostumbras a los peligros y amenazas constantes, quieras o no. El resto de la gente en esta isla no tiene otra llave al reino humano como yo". Responde concentrada en su trabajo.
Mientras la veía trabajar, el adolescente humano recuerda algo. "Eda, ¿has descubierto algo sobre mi brazalete?".
"Es un trabajo en progreso niño, te dije que me iba a llevar un tiempo y ahora esta lluvia es mi prioridad". La Dama Búho sonríe al recordar algo. "Debieron verme la primera vez que probé la inofensiva lluvia de su mundo, pero esta lluvia no es cosa de risa. Nadie sale esta noche hasta que termine, ¿les quedo claro?". Advierte a los presentes.
"Si las lluvias no te atrapan", King saca de la nada su cuaderno de demonio. "Los Snaggleback lo aran, deambulan en los días de lluvia alimentándose de turistas hervidos".
"Buena cual sea el caso, este hechizo de campo de fuerza debería de protegerla casa de la lluvias hirvientes y demonios inventados". Se burla Eda de la imaginación del pequeño demonio.
"¡Hoot!, ¡hoot!. Bueno date prisa con ese campo de fuerza". Grito un adolorido y enojado Hooty. "Esa lluvia está llegando a mi precioso estuco".
"Si, si. Lo tengo". Eda levanta su bastón en el aire, conjurando una gran burbuja dorada que empezó a crecer hasta envolver toda la casa. Protegiéndole de la peligrosa lluvia.
"Impresionante", dijo Adam al ver a la bruja mayor en acción.
"¡Lo sé!, algún día me gustaría ser tan genial como Eda. La Dama Búho". Luz se bajaba la capucha admirando a su maestra. "Mágica, atrevida, sorprendentemente astuta para su edad…".
Adam miraba su hermana con una sonrisa y pensaba. "Mama quería que admirara alguien más que no sea un personaje de ficción", podían entender que alguien tan fácilmente impresionable pueda reaccionar así. Luego mira a Eda y su sonrisa desaparece un poco, en el poco tiempo que la conoce se ha dado cuenta de no había tenido una vida fácil. Literalmente el día que la conoció afirmo que solo tenía King, al pensar en eso le deprimía. "¿Por qué habrá terminado así?".
"Oye, ¿Por qué te llaman la Dama Búho?". Pregunta la aspirante a bruja.
Ella se pone una mano en las caderas y toma una pose de orgullo. "Por qué soy muy sabia".
"La llaman la Dama Búho por que escupe huesos de rata". Afirma Hooty inesperadamente.
"Pensé que le llamaban así por que podía girar su cuello ciento ochenta grados". Comenta Adam.
"Creo que es porque se distrae por objetos brillantes". Dice King mientras sostenía sus manos en las caderas.
"Cierto, recuerdo que hizo eso cuando vio el brazalete mágico de Adam". Comenta Luz recordando el día que se conocieron.
"No, yo hago eso". Niega Eda las palabras del resto de los presentes, has que el pequeño demonio saca un bolígrafo y presiona un botón del cual sale una luz llamativa. "Brilla, resplandece, brilla y deleita. Debo tenerlo para mi nido". Se abalanza sobre el objeto brillante, pero King lo esquiva haciendo que se estrelle con el suelo.
"¿Tienes un nido?", pregunta una Luz emocionada. "Quiero un nido, fiesta de nido". Luego ayuda a levantarse a Eda junto con su hermano.
"Uf, ese campo de fuerza me dejo fuera". Dice la bruja mayor gimiendo un poco por el cansancio.
"Oh, movientes lentos". Brome King sobre sobre su estado. "¿La edad por fin te ha alcanzado?". En respuesta Eda, le cubre su cara con su propia boina. "¡Ahh, oscuridad!". Gritaba mientras luchaba por recuperar la vista.
Adam le da un pequeño codazo al pequeño por lo que acababa de decir y luego se le acerca para susurrarle al oído. "King, las mujeres son muy sensibles con su edad, cuando son más jóvenes tratan de aparentar que son mayores y cuando mayores tratan de aparentar de que son más jóvenes".
"Eso suena complicado", responde King confundido por sus palabras.
"¡Sí!, si lo es". Dice el adolescente rubio con una mirada en blanco.
Eda ignora la conversación y entre a la casa luciendo cansada. Luz nota eso y se mostraba emocionada. "Esto es perfecto, como estaremos atrapados toda la noche Eda no tendrá escusas para enseñarme algún hechizo". Decía mientras pensaba en por fin aprender algún truco
"No lo sé Luz, Eda se veía como mama cundo regresa de hacer horas extras en el trabajo". Comenta Adam un poco preocupado por la Dama Búho. "Tal vez deberías dejarla descansar un rato".
"Por favor hermano, estamos hablando de Eda. Se necesita más que una simple barrera para dejarle fuera de combate". Responde la aspirante a bruja con completa seguridad de su maestra, aunque su hermano no se veía convencido.
"¡Esperen!", interrumpe King a los hermanos Noceda. Quienes se habían olvidado de él. "¿No quieren terminar nuestra lección?". Se mostraba notablemente decepcionado. "Iba a dejar que le rascaran la barriga a un verdadero demonio, yo".
"Oh, lo siento King". Luz se veía genuinamente apenada por él, pero no dejaba de ver en la dirección donde se fue su maestra. "Pero magia…", esta se va dejándolo atrás y casando que perdiera su boina de profesor.
Notando su estado de ánimo Adam decide hablar. "Puedo escuchar tu lección". Le dice al pequeño demonio.
"¿En serio?", pregunta King. Con una mescla de sorpresa e incredulidad.
"Claro, va ser una larga noche y no tengo nada mejor que hacer". Asegura el humano mientras le da una sonrisa amigable, pero luego se distrae con una alarma de su teléfono celular.
El pequeño demonio sonríe alegremente ante la idea de que alguien le preste atención, pero no puede dejar de ver a Luz con tristeza. "Realmente quería ser su maestro", susurra decepcionado por ser ignorado por ella.
Luz
Eda camina por atrás de un cambiador de ropa y se coloca su piyama rapiditamente. Se ajusta la ropa y chasquea la lengua. Se desploma sobre el sofá y suspira de satisfacción. Hasta que nota una sobra sobre ella y gime al darse cuenta de quién era la responsable.
"Oh, Eda. "¿Te he dicho lo bien que se ve tu colmillo hoy?". Dice torpemente la joven de ascendencia hispana.
"Sea lo que sea, no". Responde la buja mayor con cansancio y sin mostrar atención por lo que iba a decir.
En lugar de hacerle caso, la aspirante a bruja insiste con sus halagos. "Uh y tu cabello…".
"No te enseñare magia esta noche", adivino las intenciones de su estudiante. "Tengo sueño", decía mientras se cubría con su con su manta. "Soy un pequeño búho somnoliento".
"Por favor, Eda. Por favor". Suplica Luz a su maestra. "¿Cómo se supongo que obtenga mi bastón de bruja si no conozco ningún hechizo?".
"¡No!, duermo". Responde Eda con cansancio y cubriéndose con su manta. Tratando de por fin descansar un poco.
"Vamos, vamos. Tengo que pensar en algo que haga que Eda cambie de opinión…". Pensaba Luz hasta que recuerda algo útil y va buscar lo que podría ayudarle. Poco después regresa y sostiene un bolígrafo que brillaba. Al escuchar el ruido de clic levanta la mirada y sus ojos se aben como platos de emoción.
"Cosa brillante", exclama la Dama Búho emocionada ante lo que veía.
"¿Oh, esto?", pregunta Luz con falsa inocencia. Eda se encontraba expectante y miraba de cerca, al ver su reacción la aspirante a bruja mueve el objeto brillante de un lado a otro. La bruja mayor salta para trata de atraparle, pero falla y termina cayendo al suelo. "No, enséñame y te daré tu cosa brillante".
"Respeto tu astucia, pero te odio por ello". Responde una Eda frustrada desde el suelo por la táctica de su estudiante.
Se podían ver relámpagos a las afueras de la casa, pero en ese momento Luz solo prestaba atención a la esperada lección que estaba por recibir de su maestra. "Por fin, nací para este momento", pensaba con ansia por lo que estaba por venir.
La Dama Búho sostiene su bastón mágico con orgullo como normalmente lo asía, pero se notaba que no estaba en su mejor momento. Luchando para mantenerse despierta y cabeceando de vez en cuando. "Si quieres tu bastón de bruja no me hagas repetir lo mismo…". Ella estaba por quedarse dormida, pero Adam que pasaba a su lado chasque los dedos. "¿Qué?, ah. Gracias niño, los bastones de bruja tienen incrustados poderes mágicos en ellos".
"Dame, dame". Suplica Luz, mientras extiende las manos. Adam miraba la escena ligeramente curioso y tomando un vaso de agua.
"Pero antes de ganarse uno, cada bruja necesita lanzar un hechizo por su propia cuenta". Explica la Dama Búho con sorprendente seriedad. "Esta noche te enseñare a crear Luz". Esta hace un circulo de hechizos con su dedo, que se convierte en un pequeño círculo de luz. La aspirante a bruja sonríe y se acerca para admirarle, pero desaparece tan rápido como apareció.
"Aburrido", bosteza King burlándose de esa exhibición de magia. "¿Quién necesita una aburrida lección sobre hechizos cuando podrías estar aprendiendo sobre todas las formas en que un demonio podría matarte?". Luego muestra unos dibujos de un demonio atacando a un humano, pero dibujados con la calidad de un niño pequeño. "Mira que dientes, muere…". Decía de forma juguetona mientras, trataba de llamar la atención de Luz.
"Silencio, necesito concentrarme". Exclama la Dama Búho con severidad.
El pequeño demonio se sentía angustiado por esas palabras, haciendo que Adam se acercara para darle unas palmaditas en la cabeza. En un intento de reconfortarle, pero luego se distrae al escuchar un ruido de su teléfono otra vez.
"Ahora los humanos piensan que la magia viene de la nada, esa es una estupidez. Todo surge de algún lugar". Asegura la bruja mayor con completa confianza.
"Eso, tiene sentido…". Comenta el adolescente rubio, quien había dejado su teléfono por un momento y luchaba con tratar de recordar algo. "El origen de la magia", susurra para sí mismo.
"Déjame preguntarte algo, ¿de dónde crees que viene la magia?". Sonríe de forma confiada Eda, mientras le da un golpecito en la punta de la nariz a su fascinada estudiante.
"Hmm, ¿desde el corazón?". Responde Luz emocionada por sus palabras y con una mirada iluminada.
"¿No se te ocurrió algo más cursi hermanita?", responde Adam incrédulo y con una ceja levantada por su respuesta. En respuesta Luz le saca la lengua, molesta por su interrupción.
"En realidad, tiene razón". Responde Eda después de una pausa, la aspirante a bruja jadea de alegría. Luego sonreí de forma arrogante y se cruza de brazos, haciendo que el adolescente rubio le mirara esperando una aclaración. "No de verdad", la bruja mayor mete su mano en su cabello. Del cual saca un pergamino con un dibujo muy realista de un corazón. "Proviene de un saco mágico adherido al corazón de las brujas".
Los hermanos Noceda se asquean por lo detallado del dibujo. "Oh, que asco. ¿Puedo quedármelo?". Pregunta Luz en un rápido cambio de actitud.
"No", responde Eda antes de guardar se pergamino. "Ahora, todo depende del circuló de hechizos. Cuando más grande el círculo, más poderoso el hechizo". Hace una demostración, creando un gran circulo de donde sale un orbe más grande que el anterior.
Luz mira la esa escena emocionada, hasta que se da cuenta de algo. "Espera, ¿cómo yo la pequeña Luz puede hacer magia sin tener ese saco… biliar mágico".
La Dama Búho se quedan pensando por un momento. "Sabes, en realidad no estoy segura. Llevo pensando en eso desde que acepte enseñarte magia".
"¿¡Que!?". Exclama Luz con una mescla de sorpresa y decepción, encontrándose con otro obstáculo para cumplir con su sueño.
"Eso es todo, un órgano especial en corazón de una bruja. Esperaba que la magia fuera algo más místico o profundo". Comenta el adolescente rubio, decepcionado por la explicación de la bruja mayor y luego retornar su teléfono.
"Bueno existen otras formas de hacer magia sin la glándula de bilis, como los conjuros de luz de luna y la magia de la estrella de los lamentos. Pero solo se puede hacer en momentos muy específicos". Le explica al humano rubio, antes de volver a hablarle a Luz. "Sé que las brujas hacían magia de manera diferente en el pasado, pero nunca me moleste en aprender cómo". Se rio un poco avergonzada.
"¡Eda!", la aspirante a bruja se veía molesta por su respuesta vaga.
"No te preocupes", la bruja mayor le revuelve el cabello a su estudiante. "Lo resolverás con el tiempo, ahora… oh". Da un gran bostezo, se desperezo haciendo que sonara su espalda con un sonoro crujido. "Necesito acostarme…", se tambaleo sobre el sofá.
"Eso es todo", decía Luz completamente decepcionada. "Me dices que no puedo hacer algo y luego que trate de averiguar cómo hacerlo por mi cuenta", piensa frustrada por este nuevo obstáculo. Hasta que se le ocurre una idea. "Espera, necesito verte hacer el circulo una vez más". Decía mientras buscaba su teléfono celular.
"Tal vez deberías…", Adam trata de intervenir. Preocupado por el estado de la bruja mayor, pero no podía apartar la mirada de su teléfono.
"¡Es solo es un hechizo más!", interrumpe sin darle la oportunidad de terminar a su hermano y le muestra su teléfono a su maestra. "Sonríe, estas frente a la cámara. Un hechizo mas no te matara".
Eda deja escapar un gemido, ante la actitud demandante. Pero decidió hacerle caso para poder dormir un poco. "Bien, ahora veras. Un circulo de hechizos es realmente importante…", esta trata de repetir su círculo de hechizos. Pero se veía inestable y ondulaba.
Adam aparta la mirada de su teléfono celular y estaba por preguntar si sentía bien, pero la bruja se desmalla antes de que pueda hacerlo. El adolescente rubio reacciona a tiempo y logra atraparle antes de estrellarse contra el suelo.
"Bueno, parece que un hechizo más mato a Eda". Comenta King indiferentemente y Luz se veía horrorizada. Mientras Adam revisa a la bruja y la coloca en el suelo con cuidado.
"¡Oh, dios!". Mi obsesión con los hechizos noqueo a Eda". Esta se sujeta la cabeza en pánico. "Soy un monstruo", mientras hacía eso no podía dejar de pensar como causo esto. "Bien hecho Luz, acabas de arruinarlo todo otra vez. Como todo lo que has intentado".
Sus pensamientos depresivos se ven interrumpidos cuando siente unas manos en sus hombros. "Luz, tranquilízate", esta se da cuenta que es su hermano. "Eda está bien, solo se desmayó por el cansancio".
Mientras King se acerca a la bruja inconsciente y le da una bofetada. "¡Bap!, si ella está afuera. ¡Bap!". Se reía de sus actos, mientras los humanos le veían con incredulidad por el descaro. "Solo me aseguro", estaba por golpearle otra vez. Pero Adam le detiene.
"¿Deberíamos buscar ayuda?, pregunta Luz todavía en pánico. Trata de dejar la habitación, pero el pequeño demonio le detiene.
"Lluvias hirvientes, ¿recuerdas?". Le advierte.
"Déjala intentarlo, será divertido". Comenta inesperadamente Hooty, cosa que hace que el pequeño demonio cierre la puerta de golpe para no tener que seguir escucharle.
"Y te recuerdo que Eda es una criminal fugitiva, aunque podamos llegar a la ciudad no sabemos si hay alguien que quiera ayudar a Eda en lugar de entregarla al Conformatorio". Advierte Adam sobre la situación de la Dama Búho.
"¿Peo que pasa si Eda se muere?". Pregunta la joven de ascendencia hispana toda se mostraba incomoda.
"Cosa brillante…, gran nido". Balbuceaba la bruja mayor inconsciente.
"¿Recuerdas cuando le cortaron la cabeza la semana pasada?", recuerda King a la humana. "Esa mujer es capaz de sobrevivir a cualquier cosa, probablemente solo está cansada de perseguir musarañas y topillos". Decía restándole importancia a su estado actual.
"Lo más probable sea por la barrera de la casa y que luego alguien le obligara a repetir un hechizo tres veces seguidas". Decía Adam con sarcasmo, mientras su hermana desvía la mirada avergonzada. "Ayúdenme a llevarla a su habitación".
"Cierto, no podemos dejarla el suelo". Luz le da la razón, mientras King no se veía convencido.
Otro trueno se hollé a la distancia, mientras llevaban a Eda su habitación. Luz y King le cargaban de los pies. Mientras Adam la levantara de sus hombros, cuando logran entrar se dan cuenta que si había un gran nido adentro. Luz lo limpia un poco, antes de que los tres la dejen.
"Realmente tiene un nido, ¿me pregunto si eso es bueno para su espalda?". Comenta Adam al ver la estructura y llamándole la tención lo huesos pequeños.
"Perdón por presionarla tanto Sra. Eda, no me mate cuando despierte". Se disculpaba torpemente Luz, con una mescla de culpa y miedo.
"Eda no te hará daño, aunque puede que te encargue algunas tareas asquerosas". Decía el adolescente rubio rata de reconfortar un poco a su hermana.
"¿Debería volver a abofetearla?", pregunta King con malicia infantil.
Al escuchar eso la aspirante a bruja le da una palmadita en la cabeza como corrección. "Déjala descansar pequeño tonto".
"Vamos, no hay nada que podamos hacer ahora". Decía el adolescente rubio antes de dejar la habitación.
"Tienes razón, bajemos". Su hermana le sigue, dejando atrás al pequeño demonio.
"¡Bap!", este aprovecha que esta solo para dar una última bofetada y se ríe de orgullo por su trabajo.
King
El trio regresa a la sala de estar, Luz se sienta mientras revisa su teléfono celular. Para ver como salió el video de Eda. Sin notar que King se le se le acercaba con una gran sonrisa.
"Como Eda estará fuera por un tiempo, ¿supongo que ahora tendrás tiempo para una clase sobre demonios?". Pregunta deseoso de su atención.
"Lo siento King", se disculpa la aspirante a bruja. Todavía revisando su celular. "Si quiero descubrir cómo hacer un hechizo, tengo que empezar a investigar".
Esto le desanima, hasta que siente una mano en sus hombros. Levanta la vista para ver a Adam sonriendo y guiñándole un ojo. "Parece que solo seremos tu y yo".
"¿¡Enserio!?", pregunta King completamente ilusionado.
"Claro, como dije no tengo nada mejor que hacer". Decía mientras que acercaba a una Luz que no había apartado la mirada de su teléfono. "Y viendo que mi hermanita estará haciendo trabajar esa linda cabecita suya toda la noche", le da un beso en la frente. Cosa que hace su hermana le mire por un momento y sonriera un poco. "Con gusto tomare su lugar, solo espero que seas mejor enseñando sobre demonios que entrenando babosas".
"Bueno…, admito que las cosas con Prince Jr. no salieron como esperaba". Se escusa el pequeño demonio por su fracaso anterior. "Y pensar que llegue a verte como a un hijo", pensaba con tristeza al recordar a la babosa de la basura.
"Que se robara tu bolsa de bocadillos, ignorara tus ordenes, destrozara las puertas de la casa y tratara de matarte. ¿Supongo que no esperabas nada de eso?". Decía con los brazos cruzados y una ceja levantada.
"Ejem, mejor comencemos con la clase estudiante". King guía al adolescente humano, frente la pizarra y tratando de cambiar de tema. Cuando los dos estaban en posición, el pequeño demonio se había vuelto a poner su boina de profesor. "Muy bien estudiante humano, hay muchas criaturas mortíferas en las Islas Hirviente que se alimentan de lo ingenuos. ¿Sabes cuál es la criatura más escalofriante?".
"¿El Molkrom?", pregunta Adam quien parecía haber recordado algo.
"Aaa, no sé qué es eso". Responde un confundido King.
"¿Y qué hay del Braylok?", vuelve preguntar el adolescente humano.
"Tampoco sé que es eso", seguía confundido el pequeño el demoño.
"¿Y el Drachadon?", todavía preguntaba por criaturas que solo el parecía conocer.
"¿Seguro que no lo estas inventando?". Se mostraba cada vez más confundido
"¿Mmm, que hay del Dragoon?". Vuelve a preguntar después de aparentemente recordar algo.
"¿No querrás decir Dragón?". El pequeño demonio se rascaba la cabeza confundido.
"No, pero por favor continua". Le indica Adam actuando como si nada hubiera pasado, para mayor confusión de King.
"Eso fue extraño", piensa King desconcertado por lo que acababa de pasar. Estaba por continuar con su clase cuando un ruido extraño le detiene.
"Ups, perdón King". Adam saca su teléfono celular y lo revisa. "Es una emergencia, me tengo que ir".
"Pero, pero. La clase". King se mostraba completamente decepcionado.
"¡Solo cinco minutos!, lo prometo…". Promete antes de dejar la habitación, sin apartar la mirada del teléfono.
El pequeño demonio se vea decepcionado, hasta que nota que Luz seguía en la habitación.
En ese momento Luz repetía una y otra vez, tratando de ver cualquier detalle que halla pasado por alto. "Esto todo lo he hace", imitaba con la mano los movimientos de Eda. "¿Por qué tienes que ser tan criptica Dama Búho?", susurra en voz alta mientras seguía reproduciendo el teléfono.
"Hola", King le interrumpe mientras sostenía su cuaderno de notas. "¿Sabes lo que es realmente críptico?, déjame contarte sobre el demonio más escalofriante". Le mostro un extraño dibujo. "Smootchie Pie, el dulce bebe". Luego hace una pausa después de considerar sus palabras. "Él es… bueno, mucho más amenazante de lo que su nombre implica".
"Ahora no King", le responde al pequeño demonio centrada en su video. Sin darse cuenta de que sus palabras habían angustiado a King. "¿No se supone que ibas a darle tu clase sobre demonios a Adam?".
"Ese extraño aparato que tienen ustedes empezó a hacer ruido y dijo que era una emergencia", se mostraba triste al recordar eso.
"Extraño, mi hermano no es de los que se distraen con su teléfono". Esta desvía su atención por un momento. "Pero ahora tengo que trabajar en esto". Responde Luz mientras seguía viendo el video en una y otra vez con creciente frustración. "Pero si no tengo un saco mágico, ¿cuál es el punto? Estaré siempre girando mis dedos para siempre".
"¿Por qué quieres aprender magia?", pregunta King con una mescla de amargura y curiosidad.
"…Yo no era nadie en casa", explica Luz con tristeza en sus palabras. "Pero ser una bruja es mi oportunidad de ser alguien", sus palabras eran una mescla de esperanza y tristeza.
"¿Qué hay de Adam?", pregunta el pequeño demonio curioso por el adolescente humano. "¿Él era igual?".
"No, mi hermano si es alguien. Tiene amigos, tenía un trabajo, tenía buenas notas y lo querían en su escuela". El rosto de la aspirante a bruja toma una expresión de enojo y se veía en conflicto. Como si estuviera luchando con algo. Antes de tomar una expresión más amigable. "Pero también es la única persona que realmente cree en mí y en mi sueño".
"Por lo menos tu si tienes a alguien que te escucha de verdad", pensaba King comparándose con la adolescente humana. Eda no siempre tomaba enserio sus palabras viéndole en el mejor de los casos como un niño y Hooty era una pérdida de tiempo hablar con él la mayor parte del tiempo.
"¿Sabes lo que se siente que nadie te tome en serio?", pregunta la aspirante a bruja con tristeza.
"Todos los días", pensaba con amargura. Antes de dejar escapar un gemido y mirar seriamente a la humana. "Si te ayudo a aprender ese hechizo, ¿podríamos terminar nuestra lección?".
"¡Sí!, ¡sí!". Responde Luz completamente ilusionada. "Puedes enseñarme sobre demonios toda la semana si me ayudas con ese hechizo".
"Bueno, ella dijo que las brujas solían hacer magia de forma diferente". King se rasca su barbilla de forma pensativa. "Así que tiene que haber una manera, ¿verdad?. Tengo una teoría". Levanta uno de sus dibujos que tenía algunos diagramas. "Todos los días noto que Eda bebe a escondidas este elixir especial, ¿ves?. Entonces ella recibe un impulso de energía, ¿ves?. Creo que de hay obtiene sus poderes". Decía mientras señalaba algunos puntos de su diagrama.
"¿Es como un café o alguna bebida energizantes?", pregunta Luz tratando de asociarlo con al que conocía. "Mi hermano tomo un Explosión de Bayas Blam para estudiar por unos exámenes y no pudo dormir por tres días".
"No sé de qué estás hablando, pero se dónde Eda guarda su elixir". Comenta el pequeño demonio.
"¿Enserio?, pregunta la joven de ascendencia hispana ilusionada mientras King asentía con la cabeza. "Muchas gracias, eres mi príncipe". Decía mientras le daba un gran abraso.
"¡Rey!, soy un rey". Responde enojado sin terminar de entender su expresión.
King se infiltra en la habitación de Eda, la cual todavía dormía. El pequeño demonio se habría paso en entre los numerosos objetos mágicos y extraños que la Dama Búho había recolectado a lo largo de los años.
"Ahora, ¿Dónde podría estar?". Finalmente encuentra una botella de vidrio redonda, con un líquido de color naranja. Había una etiqueta que decía, 'un elixir al día'. Estaba por tomarlo cuando accidentalmente pisa una trampa, se da cuenta que era una trampa de osos lo esquiva último minuto esquiva el golpe. "¡Eh!, buen intento".
La trampa empieza moverse y abrió un ojo. "No, mi corazón no está en esto". Afirmo con pesar antes de irse para confusión de King.
El pequeño demonio revisa de cerca la etiqueta. "Un elixir al día, críptico". Arranco la etiqueta y pensó en guardarlo en algún tipo de bolsillo en su pelaje. Toma la botella y estaba por abandonar la habitación. Cuando se quedó viendo a Eda todavía durmiendo en su nido, sintió un poco de culpa. No era la primera vez que robaba, de echo la misma Eda le enseño a robar a gente desprevenido. Pero siempre le dijo que hacían eso porque solo eran ellos dos contra el mundo, haciendo le sentir culpable de usar las habilidades que le enseñaron de esa forma. Pero luego piensa en lo mucho quera ser un maestro para Luz. "No se dará cuenta y lo que no sepa no le hará daño". Piensa para el mismo antes de abandonar la habitación.
Adam
"Esto se está complicando cada vez más", se decía a si mismo Adam mientras miraba su teléfono. Desde que llego a las Islas Hirvientes se había sentido culpable, el mentirle a su madre era malo. Pero saber que alguien se está haciendo pasar por Luz y no contarle sobre eso le carcomía por dentro. Al principio pensó que podría ser una ladrona de identidad de la tierra, pero el hecho de que su madre la llevara allí quiere decir que había algo más… Algo mágico, pensó en decirle a su hermana, pero tenía miedo de cómo iba reaccionar. "Probablemente iría corriendo al campamento con un plan complicado y se la pasaría citando los diálogos de algún libro de Azura con poco o ningún contexto". No poda decirle a Luz, por lo menos no hasta que sepa a qué se está enfrentando. "¿Qué clase de hermano hace eso?", se maldecía por su decisión. Sabiendo que su hermana no merecía algo así, tenía que saber más de esta impostora. Pero era difícil buscar información sin explicar por qué. "¿Tal vez debería decirle a Eda, pero no sé si podrá mantener el secreto?".
En su habitación el adolescente se encontraba revisando su teléfono celular, se le había ocurrido suscribirse a la página del Campamento de Verificación de la Realidad. Le seguía sorprendiendo de tener tan buena señal a pesar de estar en otro mundo. Descubrió hace poco que subían fotografías de sus campistas regularmente y estaba esperando comprobar si sus peores temores se habían hecho realidad. Eso lo había mantenido distraído buena parte del día, descuidando a Luz y a King. Este último se había visto muy desanimado cuando se fue de su clase y tampoco estuvo atento para evitar que Luz llevara a su límite a Eda. "Prometo que se los compensare".
Pero su teléfono celular hace que el adolescente salga de su culpa, recordando que programo su teléfono para que le avisara cuando hubiera actualizaciones y cuando lo escucho antes tuvo que dejar lo que estaba haciendo. Adam empieza a revisar su teléfono, llega a la página del Campamento de Verificación de la Realidad. "Vamos, vamos". Revisa la página web, llegando a las fotografías de los campistas de ese año. Seguía buscando entre los diferentes grupos hasta que llega un grupo en particular, estaba compuesto por alguien que parecía ser una chica gótica, una chica pelirroja corpulenta, un chico con un gran flequillo y por ultimo alguien que se veía igual a Luz. "Esto no puede ser", seguía revisando y había más fotos de esta doble en diferentes actividades. No pudo soportarlo más y aparto el teléfono, sintiéndose abrumado al ver como se confirmaban sus peores temores. "Una impostora, una farsante, una faker… Se está haciendo pasar por mi hermana".
Esto demuestra que es algo de naturaleza mágica, tengo que averiguar quién o que esta haciendo esto y por qué. "¿Pero realmente poder hacer algo así solo?", seguía cuestionando sobre qué era lo mejor que podía hacer. Trata de volver a revisar por si se pasó algo por alto, pero su teléfono empieza hacer un ruido muy familiar. "Genial, me quede si batería. Siempre me pasa cuando me distraigo, ¿esta noche se puede poner peor?". Dice en vos alta sin darse cuenta del impacto que tendrán sus palabras. Después de dejar escapar un largo gemido decide, levantarse cambiar su actitud. "No lograre nada con esa actitud, puedo preguntarle a Eda cuando despierte o King que dice ser un experto en demonios". Trata de recuperar el optimismo, cuando se da cuenta que le prometió al pequeño demonio regresar y que él y su hermana estaban extrañamente callados.
De regreso en la sala de estar, el adolescente nota que no había nadie a simple vista. Sigue buscando los encuentra, hasta que le pareció escuchar algo.
"¿Entonces solo tengo que tomarlo?", se escuchaba la voz de la aspirante a bruja preguntar algo.
Nota que su hermana esta junto con King y con un frasco con algún tipo de líquido naranja en sus manos. "Luz, King. ¿Qué están haciendo?", pregunta por su actitud sospechosa.
"Nada", responde rápidamente mientras oculta el frasco a sus espaldas.
"Si, no estamos haciendo nada sospechoso". Responde el pequeño demonio también tratando disimular.
El humano rubio no toma muy bien su intento de ocultarle algo. Y estaba de mal humor por lo de la farsante y esto realmente no estaba ayudando a mejorar su noche. "Si no me quieren decir que están haciendo, adelante. Solo no me mientan otra vez". Les da una mira seria, antes de darles la espalda. "Voy a mi habitación, no me molesten el resto de la noche".
Luz se mostraba inmediatamente culpable, duda por un momento por lo que tenía que hacer. Pero al final se decide a hablar. "Espera Adam", luego le muestra el frasco con el elixir. "King dijo que Eda tomaba este elixir todos los días cuando se sentía cansada, por lo que pensamos que si yo lo tomaba tal vez podría hacer magia incluso sin ese saco". Da una sonrisa un poco incomoda mientras explicaba.
"Y lo obtuve legítimamente del cuarto de Eda", responde King evitando cualquier culpa.
Adam se le queda viendo de forma seria por unos minutos, hasta que da un suspiro. "Luz no te tomes eso, sé que quieres hacer magia. Pero si Eda tiene que tomarlo todos los días no es algo con lo cual jugar. Además de que si hubiera un método tan fácil para hacer ese hechizo Eda ya te hubiera dicho, tampoco sabes que efecto podría tener en un ser humano. Podría darte una indigestión extrema o crecerte una segunda cabeza".
"Eso suena increíble", exclama Luz emocionada con la idea.
"¿Crees que mama pensaría lo mismo?", le pregunta con una ceja levantada. La sonrisa de Luz desapareció, mientras desvía la mirada. Luego Adam mira al pequeño demonio que quería pasar desapercibido. "Si ese elixir es tan importante Eda se molestará cuando sepa que le falta un frasco". Ahora era King quien desvía la mirada avergonzado, viendo que sus palabras tuvieron efecto. Los ve con una sonrisa más amable. "Miren no llegaron a hacer nada malo, devolvamos eso antes de que Eda se dé cuenta y después hagamos algo divertido ente los tres".
La aspirante a bruja sonríe, pero antes de pudiera hacer o decir algo. Un relámpago le asusta causa causando que deje caer el frasco. "No el elixir se ha ido, esto es horrible". Se lamenta de haber perdido el valioso elixir por su torpeza.
Adam se acerca y revisa los restos destruidos del frasco. "Tal vez…, Eda no se moleste mucho si le pides perdón". Dice tratando de ser optimista.
"Bueno, eso fue una pérdida de tiempo. ¿Pero quién necesita un hechizo de luz cuando tenemos toneladas de lámparas?". Se jacta King, desestimando el problema. Pero antes de que pudieran decirle algo, las luces de la casa se apagan inesperadamente. Los hermanos Noceda se le quedan viendo y el solo podía maldecir la ironía. "Hooty controla las luces de la casa, seguramente se quedó dormido".
De repente se escucha por toda la casa un grito. "¡Hoot!, ¡hoot!".
"¡Hooty", los hermanos exclaman en pánico y corren hacia la entrada de la casa. Para su sorpresa y horror ven que la puerta haba sido destruida, por una gran criatura cuadrúpeda. No se podía ver en su totalidad por la oscuridad, pero jugueteaba con un Hooty aparente aparentemente inconsciente. Como un gato con su presa, cuando se da cuenta que no está sola. Deja escapar un gran gruñido y se adentra en la oscuridad de la noche.
Llegan a la puerta y examinan al estaño búho guardián. "Hooty, ¿estas hay?". King toca el pico y revisa sus ojos.
"Todavía respira, tal vez solo esta inconsciente". Afirma Adam que miraba la huellas que dejo la criatura.
"Lo que sea que le ataco escapo bajo la lluvia, ¿Qué podría sobrevivir a eso?". Cuestiona Luz la existencia de criaturas así.
"Tiene sentido si lo piensas, sería raro que no hubiera un animal que no haya logrado adaptarse al clima de este mundo". Responde el adolescente rubio, tratando hallarle algún sentido a lo vivido.
Mientras King examinaba las marcas de garras y jadea de emoción. "Por el titán, es el Snaggleback. Se alimenta durante la lluvia, debe haber tropezado con la casa y habernos visto adentro".
Los tres escuchan un fuerte aullido y pueden ver la silueta de la criatura entrando por una ventana del segundo piso.
Al ver esto el adolescente rubio piensa por que querría entrar al segundo piso, hasta que recuerda algo. "¡Eda!, esta indefensa y si esa cosa le encuentra…".
"Esto es horrible", exclama Luz asustada. Hasta que nota que King se encontraba extrañamente emocionado.
"Por qué esta podría ser una lección", decía con emoción infantil. "Esta será una excelente oportunidad para ver un demonio salvaje de cerca".
"¡King concéntrate!", exclama Adam molesto por la actitud del pequeño demonio. "Eda está en peligro, nos enfrentamos a una criatura peligrosa y no podemos salir de la barrera sin morir quemados. No es momento para pensar en tu clase". Regaña fuertemente a King, cosa que hace que este se asuste y avergüence. Luz se acerca para consolarle, mientras le acariciaba la cabeza.
"Tienes razón", admite el pequeño demonio todavía avergonzado. "Eda está arriba indefensa, porque Luz la noqueo".
La joven de ascendencia hispana gemía al escuchar eso. "Tiene razón, supongo que tendremos ir donde esta ese sonido espeluznante".
Luz se había, preparado con algunos guantes, amarrándose una almohada, banditas bajo los ojos y usando un palo de hockey. Mientras que King solo sostenía su conejito de peluche con orgullo.
Viendo esa escena Adam solo quería palmearse la cara con todas sus fuerzas. "Lo que daría por tener mi equipo de HEMA en este momento". Se lamenta de tener que trabajar con ese equipo y él era el único que estaba usando armas de verdad en ese momento crítico. "Muy bien no nos separemos pase lo que pase", les informa al demonio y la adolescente.
"Evitar el mayor error de una película de terror, entendido". Afirma Luz comprendiendo su advertencia.
"Encontremos a Eda y abandonemos la casa", informa Adam.
Luz y King se miran confundidos, es el último quien decide preguntar. "¿Hacia donde?, ¿olvidaste la lluvia hirviente?".
"Vamos a la tierra, el reino humano". Explica para sorpresa del resto de los presentes. "Eda guarda la llave del portal en su cabello, cuando llegamos a ella iremos a la tierra y cuando Eda se recupere planearemos entre todos nuestro regreso". Dudan por un momento, pero al final asienten con la cabeza en aprobación a su plan.
Los tres habrían paso por la oscura casa, mientras Luz usaba la linterna de su teléfono para iluminar el camino. Cada paso hacia crujir la escalera, lo cual asía más escalofriante la noche de tormenta. Cuando llegan al segundo piso notan que la puerta del cuarto de Eda chirriaba, cuando entraron notaron que el lugar estaba destrozado con marcas de garra y la ventana destrozada. Pero no había ningún rastro de la bruja mayor. Un trueno ilumina la habitación, haciendo ver el lugar de forma aún más siniestra.
"¡Dios mío, Eda!". Exclama Luz presa del pánico, temiendo el destino de su maestra. Adam inmediatamente le abrasa, para tratar de reconfortarla.
"Tranquila Luz, si algo le hubiera pasado no estaría tan… Limpio". Dice el adolescente rubio, tratando de escoger las palabras correctas para no asustarla.
"¡El debió haberla capturada!", exclama King al ver el estado de la habitación. Los tres revisan el lugar, viendo marcas de arañazos pero no encuentran rastros.
"Si Eda se hubiera despertado, estaría luchando contra esa cosa o nos estaría buscando". Razona el adolescente rubio en voz alta.
"Tal vez se la llevo a un lugar más cómodo", razona la aspirante a bruja viendo la almohada rota.
"¡Iré a buscar a mi libro de demonios!", King corre abandonando la habitación.
"Espera", Adam trata de detenerlo. Pero el pequeño demonio ya se había escapado, haciendo que este gimiera de frustración. "Ahí va el no separarnos".
Luz seguía viendo la escena con confusión. "Adam, hay algo que no me gusta". Habla en voz alta, expresando sus dudas. "Me doy cuenta de donde salió el intruso, pero no de como entro". Mientras seguía revisando no se da cuenta que piso un papel muy importante.
King
"Tengo que ayudar a Eda, tengo que ayudar a Eda". Se decía a si mismo mientas corría por la oscura casa. Esto era una emergencia y solo él podía solucionarlo como el experto en demonios. "Te prometo que te salvare de las crueles garras de Snaggleback", se juraba hasta que llego a donde había dejado sus libros sobre demonios.
Sube por la escalera de regreso a la habitación de Eda para reunirse con los humanos. "No se preocupen su maestro sobre demonios está aquí", se seguía dicen con confianza. Cuando entra en la habitación revisa sus apuntes mientras murmura para si mismo. "Espera, espera. ¿Primera edición o segunda?". Cuando por fin mira el interior de la habitación, se da cuenta que está completamente solo. "¿Luz?, ¿Adam?". Pregunta en pánico, mientras deja caer sus apuntes. "¡El Snaggleback los atrapo!".
Escucho un ruido a sus espaldas y cuando voltea ve a una sombra. "¡Bestia cobarde!, regrésame a mi amiga de banditas y a su hermano de fuerte olor corporal". Siguió por la casa y en el camino encontró un zapato de Luz y se molestó cada vez más. "Heres el rey de los demonios, es hora de demostrar quien eres". Lo siguió hasta una habitación aparentemente vacía, pero le pareció notar algo en el armario. En el interior solo parecía haber basura que Eda había recolectado a lo largo de los años. "¡No hay lugar donde puedas correr!". Finalmente lo encuentra al mover una cortina y lo que encontró era decepcionante. Había una criatura no mucho mayor al mismo King, que parecía un pequeño simio rosa y con un caparazón en su espalda. "¿Snaggleback?, eres mucho más bajo en persona".
"Lo siento, lo siento". Gimió la asustada criatura. "Solo necesitaba un lugar donde ocultarme de la lluvia".
"¿Entonces por derribaste nuestra puerta y te llevaste a Luz y Adam?". Encara el pequeño demonio al intruso. "Eso no está bien viejo. Snaaggleback malo".
"No hice nada de eso, solo me cole por una ventana". Trata de explicar el intruso que fue lo que paso.
King dudo al principio, pero rápidamente se dio cuenta que no se parecía a la criatura que vieron en la entrada de la casa y no tenía las garras para destruir el cuarto de Eda. "Si no fuiste tú entonces quien…", sus palabras se ven interrumpidas. Cuando una garra aparece y se lleva Snaagleback del caparazón. "Oh, no. Un giro".
Se escucharon gruñidos salvajes y gritos de pánico. Luego el ruido de algo bajando gran velocidad, antes de que pudiera hacer algo la puerta se abre de forma siniestra. Se puede ver la silueta de una criatura cuadrúpeda, la cual escupió el caparazón e su más reciente presa. Gruñendo cuando nota la presencia del pequeño demonio, mientras que King solo podía quedarse sin aliento ante tal impresionante y aterradora vista. Aprovechando esto la criatura ataca con sus garras, pero King logra esquivarle a último momento.
"¡Quédate atrás!", advierte débilmente mientras se aferraba al zapato de Luz. "Soy el rey de los demonios, ¿de acuerdo? Te exijo que vomites a mis amigos".
La criatura dejo escapar un fuerte ruido y estaba por atacar a King, cuando una silla de madera se estrella sobre su espalda haciéndole astillas.
Cuando la criatura voltea para ver de dónde vino y se encuentra al humano rubio mirándole de forma desafiante. "¡Aléjate de el!".
La criatura ataca, pero Adam logra rodar para esquivarle. La bestia seguía con su frenético ataque y el humano cada vez más tenia dificultad para seguirle el ritmo por la oscuridad de la casa. Logra ver una pequeña abertura y golpea en la cara a la bestia con su escudo, pero a diferencia de sus oponentes anteriores no se vio afectado y solo pareció molestarle. Enviste otra vez, pero el adolescente humano piensa rápido y se hace a un lado. La criatura se estrella contra la pared agrietándola y aturdiéndole, aprovechan eso Adam se abalanza sobre la bestia y golpearle con todas sus fuerzas, pero la bestia anticipo el golpe del hacha con su boca. El adolescente estaba demasiado sorprendido en ese momento, pero sale de este estado cuando escucha un ruido metálico. Para su horror se da cuenta de lo que estaba haciendo la criatura, con la fuerza de su mandíbula destroza el hacha y la convierte en fragmentos de metal. El humano queda paralizado cuando se dio cuenta que quedo completamente desarmado, la criatura levanta una de sus garras y Adam apenas tuvo tiempo para usar su escudo para defenderse. El impacto lo manda a estrellarse a otro lado de la habitación y redujo el escudo a astillas inservibles.
El intruso se acercar para terminar con su presa atontada, hasta que escucha que un ruido que llama su atención. "Oye, oye. Por aquí". Se trataba de King quien llamo su atención en un intento de ayudar a su amigo humano.
La criatura gruñe a pequeño demonio, este le dio tiempo Adam para recuperarse y notar a su lado una pata de la silla que arrojo. Aprovechando la distracción el adolescente rubio toma la astilla y la clava en una pata de la criatura. Mientras rujía de dolor, Adam aprovecha para tomar a King y escapar. Corrieron con la ventaja de que su atacante era una criatura grande en un espacio pequeño, hasta entrar en otra habitación en que Luz se encontraba esperando.
"King, estoy tan contenta de que este bien". Ella corre a abrasarle por la emoción del momento.
"¿A dónde fueron?", pregunta el pequeño demonio sin entender por qué desaparecieron.
"Notamos que te habías ido y bajamos buscarte". Responde Adam viéndose adolorido por alguna razón.
"Yo tropecé y perdí mi zapato, Adam me dijo que esperara aquí mientras te buscaba". Entonces la aspirante a brujas, noto que King tenía su zapato perdido. "Oh, lo encontraste".
Mientras se calzaba el pequeño demonio nota algo en el zapato de Luz. "Oye, ¿Qué es eso?", se acerca que era un papel que le en voz alta. "Mantiene a raya la maldición". Este se da cuenta de algo cuando junta los dos papeles para leerlo. "Un elixir al día mantiene a raya la maldición".
"¿Maldición?", Luz no terminaba de entender. "Espera, ¿Qué estas tratando de decir?".
"King, por favor dime que no se trata de lo que estoy pensando". Habla el adolescente rubio temiendo la respuesta.
"¿De qué están hablando?", pregunta la aspirante a bruja cada vez más confundida por donde iba esta conversación.
King se veía asustado al darse cuenta de lo que pasaba. "Me equivoque todo el tiempo, no es el Snaggleback. Esa criatura es…".
Antes de que pudiera terminar de hablar, una garra destroza la puerta para horror de los presentes. La criatura entro a la habitación y el trio pudo tener una imagen más clara de su rostro.
"¿Eda?", fue todo lo que pudo decir un impactada Luz.
Luz
"Esto tiene que ser una pesadilla", era todo lo que podía pensar la aspirante a bruja al descubrir que su maestra se había convertido en esa aterradora criatura. Por pánico deja caer su teléfono celular agrietando la pantalla, pero activando el flash aturdiendo a la bestia Eda y tapándose a los ojos de dolor. Aprovechando la confusión Adam toma King y a su hermana, quien apenas había tenido tiempo de recuperar su teléfono. Cuando la criatura se recupera se da cuenta que estaba sola en la habitación.
La vestía Eda seguía asechando buscando a sus presas, había salido al exterior de la casa protegida por la barrera. Atrás de un muro se encontraba el trio tratando no ser descubiertos, Adam le tapaba la boca a Luz y a King. La vestía Eda se acercaba cada vez más, atraída por el olor de Adam. Notando esto Luz toma una lata en el suelo y lo arroga legos, el ruido llama la atención de la criatura y se alega de ahí.
Después de unos minutos los tres puede respirar tranquilos. "Bien pensado hermanita", felicita Adam a Luz por su rápida acción.
"Gracias, ¿viste esos ojos?". Pregunta la aspirante a bruja aterrorizada y King se veía culpable. "¡Eran como BLUAGH!, ¿Qué le ocurrió a ella?".
"¿No lo ves?, es mi culpa. El elixir que te di no le daba poderes a Eda, impedía que se convirtiera en esa cosa. ¡Se ha convertido en pesadilla y todo es mi culpa!". Admite King quien se sentó culpable y abrasando sus rodillas. "Lo siento mucho Luz, Adam. Solo quera que les gustara los demonios, como a Luz le gusta la magia. No tengo muchos amigos y nadie me presta atención, pensé que si te enseñaba finalmente alguien se preocuparía por alguien como yo".
Luz le mira con lastima y se siente culpable. "No eres el único culpable", dice para mayor confusión de pequeño demonio. "Mi obsesione con aprender ese hechizo y presione demasiado a Eda. Solo quería sentir que no soy una inútil y no me di cuenta de cómo te sentías".
"No, todo esto es mi culpa". Dice Adam con pesar, para sorpresa de King y Luz. Quienes se le quedaron viendo, sin entender de que hablaba. "Estuve descuidándoles todo el día, si hubiera estado más atento no hubieran robado el elixir de Eda".
El pequeño demonio y la adolescente miran con lastima al adolescente rubio. "Adam, no puedes echarte la culpa por los errores de otros. Eso no es bueno para ti". Responde Luz apenada.
"Tengo que, como tu hermano mayor es mi deber el cuidarte". Desvía la mirada avergonzado. "Luz cuando salgamos de este problema, hay algo importante que tengo que decirte".
La aspirante a bruja se veía confundida, pero antes de que pudiera preguntar el pequeño demonio le interrumpe.
"Eso se oye bien, pero primero tenemos que salir con vida de esto". Responde King sarcásticamente.
Luz se queda pensando hasta sonreír. "Bueno, podemos terminar la lección". Le extendió el bolígrafo brillante a King.
El pequeño demonio y el adolescente rubio se le quedan viendo confuso. "¿He?".
"Eda se convierte en una especie de demonio y tenemos que salvarla. Entonces, ¿quién sabe más sobre demonios que el mejor maestro del mundo?". Responde Luz a sus dudas, tratando de animo a su pequeño amigo demonio.
Con renovada confianza King toma el bolígrafo y empieza a trabajar, dibuja en algunas hojas un retrato de la bestia. "Veamos, era más grande, estaba cubierta de plumas y tenía ojos negros gigantes. Los demonios de ojos negros suelen ser sensibles a la Luz". El pequeño demoño reflexiona, hasta que recuerda los teléfonos. "Eso es, pueden usar sus magníficos rectángulos humanos".
"No puedo", dice Luz mostrando el teléfono con la pantalla rota. "Mi cámara esta arruinada".
"Y yo me quede sin batería en el mío", decía Adam muy avergonzado.
"Entonces…, ¿Qué pasa con ese hechizo de Luz?". Pregunta King a la aspirante a bruja.
"Me viste, no puedo dibujar círculos de hechizos en el aire. No soy como Eda". Decía con pesar mientras seguía reproduciendo el video.
Viendo esto Adam se acerca para ver a su hermana a los ojos. "Luz, sé que estas bajo mucha presión por lograr ese hechizo. Pero quiero que sepas que podrás lograrlo, porque cuando te concentras en algo eres capaz de hacer cosas increíbles. Pero recuerda, no trates de ser como Eda. Solo se Luz Noceda".
No segura de como reaccionar ante estas inspiradoras palabras, Luz seguía reproduciendo el video. Pero por culpa del daño que había recibido el teléfono, las imaginen se cortaban. Pero gracias eso se podía ver algo en la demostración de Eda. "¡Hay un patrón en el círculo de hechizos!".
"¿Qué?", exclaman King y Adam sorprendidos. "¿Dónde?".
Luz toma una de las hojas de King y tomo un bolígrafo, pone el papel encima de teléfono para calcar el patrón. "Se parece a esto, ahí está". Ella al terminar golpea el circulo con su bolígrafo, causando que para sorpresa de los presentes se convirtiera en un pequeño orbe de luz. La aspirante a bruja lo sostiene entre sus manos completamente maravillada. "Es hermosa…, oh dios mío. Lo hice, acabo de hacer magia. ¡Acabo de hacer magia!". Levanta las manos triunfante y exclama con alegría por su logro.
Rápidamente le hacen que se baje, para no llamar la atención de la bestia Eda. "Shh".
"Yo también estoy contento por ti hermanita, pero celebraremos después que detengamos a Eda".
"Pero no vamos a detener a nadie con algo tan pequeño". Se lamenta King sobre lo puedan hacer.
"El hechizo será útil, pero no servirá de nada si no podemos volver a Eda a la normalidad". Explica Adam al resto de los presentes. "Tenemos que buscar más elixir para volverle a la normalidad".
"¿Tal vez Eda tendrá una botella extra entre sus cosas?", se pregunta Luz en voz alta. "Aunque podríamos llevarnos un tiempo, el cuarto de Eda era todo desastre".
"Tenemos que tener cuidado, esa bestia es lo más fuerte a lo que hemos enfrentado hasta ahora. Destrozo mi hacha y mi hacha con gran facilidad". El adolescente rubio agacha la cabeza sintiéndose indefenso. "Ojalá tuviera alguna de mis armas a mano en este momento".
"¿Y por no tomaste alguna de las armas de la colección de Eda?". Pregunta un confundido King.
Los hermanos Noceda miran al pequeño demonio incrédulos por esa revelación, pero es el mayor que decide hablar. "¿Eda tubo una colección de armas todo el tiempo?, ¿¡por no nos dijiste antes!?". Un gruñido a la distancia hace que el trio se encojan de miedo y por alguna razón Adam se frota las costillas.
"Creo que se recuperar a Eda", dice Luz con confianza renovada. "¿Me ayudaras amigo de bandita?".
"Mmm, ya superé ese apodo. Pero ya está bien". Los dos chocan sus puños y se quedan viendo Adam, que después de dejar escapar un pequeño gemido se une a ellos.
La bestia Eda seguía deambulando por la casa, usando su sentido del olfato para encontrar cualquier presa potencial. Hasta que le pareció haber escuchado un ruido, cuando voltea ve a King apoyándose contra el respaldo de la puerta.
"Oh, ¿qué cosa tan bonita tenemos aquí? Es tan brillante". El pequeño demonio usa el bolígrafo brillante para llamar la atención de la criatura maldita. Quien gruñe para perseguirle, se abren paso por la casa. Estando distraída por el objeto brillantes, que no noto que alguien salto a sus espaldas.
La bestia Eda gruñe, pero antes de que pudiera hacer algo una sábana le cubría los ojos. Se trastraba de Adam que seguía en la espalda de la criatura aferrándose a la sabana en su rostro, mientras esta trataba de quitárselo de encima. "Date prisa Luz, no podre aguantar por mucho tiempo".
"¡Ya casi estoy!", la joven de ascendencia hispana se encontraba escriben un circulo muy grande con un crayón en la pared. "Lo siento Eda, pero es por tu propio bien. Ahora". Activa el circulo de hechizos, con una gran Luz envolvió la habitación. Adam quita la sabana de la bestia y la usa para cubrirse. La criatura es golpeada desprevenida y grita de agonía.
Eda
"¿Dónde estoy?", era todo lo que podía pensar la Dama Búho. Lo primero que recordó es que estaba enseñándole un hechizo a Luz y luego todo se volvió borroso. Luego despertó en su nido cuando se dio cuenta que la maldición se estaba saliendo de control, pero cuando busco su elixir no estaba en su escondite y todo se volvió borroso. Ahora está en su nido, tenía una pajita en la boca que la conectaba a su elixir. También se dio cuenta de su rostro estaba parcialmente transformada. "Ah", da otro gran sorbo y vuelve a la realidad por completo. "Me duele tanto cabeza y ¡la cara!". Sentía como si uno de esos vehículos del reino humano le hubiera golpeado directamente en la cara a toda velocidad, se pasa una mano en su rostro y se dio cuenta que tenía un vendaje. "¿Desde cuándo tengo un vendaje? y la boca me sabe a ha animal atropellado". Se seguía preguntando la bruja mayor en voz alta, hasta que empieza a hacer arcadas y para su sorpresa regurgita una bola de pelos como lo aria un búho. Esta se abre y de ella sale un atormentado Snaggleback.
"Voy a…, quedarme aquí un minuto". Dice el pequeño demonio rosa antes de tomar posición fetal.
"¿No recuerdo la última vez que vomite a un sujeto parcialmente digerido?", pensaba antes de sostener la botella de elixir. "Mmm, estaba buscando esto".
"En realidad encontramos otro en tu armario", explica King quien aparece de la nada. "Y si te duele la cara es por qué Adam te golpeo con un mazo hasta que perdiste el conocimiento". Señala un mazo de guerra recostado contra la pared.
"¿¡King!?", exclama furiosa después de darse cuenta lo que paso. "¿Robaste mi elixir?, debería romper cada uno de tus huesos…".
"Shh", le calla el pequeño demonio. Cosa que solo la confunde y le hace enojar más. Hasta que nota que señala al otro lado de la habitación, cuando voltea se encuentra posiblemente una de las cosas más sorprendentes que visto en su vida. Luz estaba sentada con las piernas cruzadas y dibujando en algunos papeles. Cuando termina de un simple golpe activa el hechizo de luz, en ese momento se da cuenta el techo estaba lleno de orbes brillantes. Al lado de la adolescente se encuentra su hermano abrasándole con orgullo y besándole en la frente.
"Wow, ¿Cómo está haciendo eso?", pregunta Eda completamente incrédula.
"No lo sé, pero ella lo está haciendo todo sola". Decía con orgullo, antes de tomar un tono más arrepentido. "Oye, yo… estropee un montón de cosas hay atrás". Eda le mira con furia cuando admite su culpa. "Y solo quería decir, lo siento".
La bruja mayor se le queda viendo antes de ceder. "No puedo enojarme con esa carita", pensaba en su interior con derrota. "Bueno será mejor que lo estés, tengo una larga lista de tareas repugnantes con su nombre". Pero luego toma una postura más culpable, los humanos se dan cuenta que esta despierta y se acercan a ella. "Pero no es del todo su culpa, me he sido completamente con ustedes".
"Si, nos dimos cuenta". Responde Adam con una sonrisa amable.
"Cuando era más joven, fui maldecida. No sé cómo paso, pero sé que si no tomo mi elixir…". Hace una pausa sosteniendo incomoda la botella. "Bueno, por eso me dicen la Dama Búho. A nadie le gusta tener una maldición, pero si tomas las medidas correctas es manejable".
"Vaya", exclama Luz sorprendía y Adam mirándole con lastima. "¿Entonces estas bien?".
"No hay nada de qué preocuparte", dice la bruja mayor esforzándose por ser optimista. "Todo está bajo mi control mientras nadie se robe mi elixir… King". Señala al pequeño demonio avergonzado. "Entonces estaré bien, pero mira esto un humano haciendo magia". Dice señalando a su estudiante con orgullo. "Bien por ti".
"No es la única", dice el adolescente rubio. Quien sostiene uno de los círculos y lo activa frente a todos los presentes. "Luz insistió que lo intentara también y no pudo decirle que no a mi adorable hermanita". Todos estaban pendientes de la bola luminosa y no notan que el brazalete mágico desprendía unas chispas dorada.
"No lo hubiera logrado sin mi maestro", dice con orgullo la joven de ascendencia hispana. Haciendo que King se avergüence, hasta que todos escuchan la voz de alguien que habían olvidado.
"Hey, hey. ¿Hay alguien hay?, ¿hola? Hoot, estoy en el suelo. Hace frio". Ruega Hooty por ayuda de forma muy lamentable.
"Esa voz", se queja King en voz alta. "¡Esa voz es horrible!".
"¿King, Luz se pueden encargar?. Necesito hablar con Eda de algunas cosas". Les pide amablemente Adam. "Y se pueden llevar a Snaggleback, se nota que el pobre pasado por mucho".
"Oh, vaya. Creo que mi cola fue digerida", decía el pequeño demonio rosa todavía perturbado.
"Vamos amigo tonto", la aspirante a bruja carga alegremente al demonio perturba. Hasta que se detiene después de recordar algo. "¿Qué era lo que me querías decir antes Adam?", pregunta Luz curiosa.
"Bueno…, Kevin me dijo que Julie estaba preguntando por mí. Parece que está preocupada de que me haya metido en algo peligroso otra vez". Responde incomodo, sin hacer contacto visual con su hermana.
"Oh…, bueno. Mándales saludos de mi parte", responde en un principio un poco incomoda. Pero luego regresa a su actitud alegre anterior. "Te espero abajo".
La adolescente humana deja la habitación, mientras bajaba y se podía escuchar como bajaban las escaleras. Entre Adam y Eda se produce un largo silencio con esta última se mostraba incomoda y luchando por querer decir algo.
"Sé lo que me vas a decir, debí contarles sobre la maldición antes". Comenta la Dama Búho avergonzada.
"Sí, es cierto. Nos hubiéramos ahorrado muchos problemas hoy". Luego el adolescente rubio le pone una mano en el hombro y le da una mirada amable. "Pero me doy cuenta que tu maldición es un tema delicado para ti".
Al principio la bruja mayor sonríe, pero luego su estado de ánimo cambia otra vez. "¿Cuándo te vas a llevar a Luz?", pregunta completamente desanimada.
"¿De que estas hablando?", pregunta Adam confundido.
"Recuerdo bien nuestro trato, dijiste que cuando las cosas se ponían peligrosas se iban a ir. Es obvio que las cosas se salieron de control hoy, me sorprende que no se hayan ido después de lo de Adegast". Eda agacha la cabeza incapaz de ver al adolescente a los ojos. "Solo déjame despedirme de ella antes".
Adam le mira por unos momentos antes de sonreír. "Si las cosas se pusieron demasiado peligrosas hoy, pero como dije esa maldición esa parece ser un tema de delicado para ti. Y lo de Adegast también fue culpa de Luz, al no escuchar nuestras advertencias. Así que tendrás que sopórtanos un poco más. Ja, ja… auch". Su risa de ve interrumpida, cuando se aprieta su costado adolorido.
Eda reacciona rápido y le levanta su sudadera, entonces se da cuenta que tenía una un gran hematoma a la altura de sus costillas. "¿Cómo te hiciste eso…?, ¡No!". Rápidamente extendió una mano y aparece un circulo de heridos azul claro que impacta en el humano rubio. "No otra vez, no otra vez. Todo va estar bien….". No dejaba de repetir frenética, aparentemente atormentada por algo.
"¡Eda, tranquila!". El adolescente rubio toma a la Dama Búho, por el rostro y le mira a los ojos. "Estoy bien Eda, respira". La bruja mayor empieza a respirar y lentamente retomando la compostura. Terminando el hechizo y dejándose caer en su nido. "¿Malos recuerdos?".
"No tienes…, ni la menor idea…".
"Por favor no le digas a Luz, hace años que no la veo tan feliz y no quisiera preocuparle". El adolescente humano se vea un poco culpable al decir eso.
Después de unos segundos que se sintieron eternos, Eda dejo de jadear y miro al humano que esta frente a ella con una mirada seria. "Adam si mi maldición se sale de control otra vez, quiero que tomes a Luz y a King y escapen al reino humano". Mete la mano en su cabellera y le entrega la llave del portal.
Adam mira la llave en sus manos antes de hablar. "Bien, iremos a la tierra si eso pasa. Pero luego volveremos por ti, ya te dije de dónde vengo no dejamos a nadie atrás". Le mira con una sonrisa amable y le regresa la llave. "Descansa, has tenido un día muy largo".
Cuando queda sola, Eda deja escapar un leve gemido. "Ese niño", dice con una mescla de molestia y diversión. Después de eso tratara de dormir, pero para su desgracia tubo una pesadilla que para ella era recurrente. En la cual ve una silueta que no puede reconocer. "¡Tu!, tu eres quien me maldijo. ¿Quién eres?", por desgracia no tuvo respuesta que buscaba. Se despierta una vez más, antes de ver el rostro de la persona que había tantos problemas en su vida. Gime de frustración, después de que las respuestas se le escaparan una vez más.
Adam
El adolescente rubio baja a la entrada y puede ver a Luz había puesto a Hooty en su lugar. Y ahora estaba tratando de reparar la puerta con banditas…, por alguna razón.
"Listo, bienvenido al club de amigo de banditas. Hooty".
"¡Finalmente puedo ser parte de algo!", exclama alegremente el extraño búho guardián.
Adam también puede ver a Snaggleback hablando con King, este último tomaba notas de lo que decía. "Y luego tenia dientes en el estómago, ¡dientes en el estómago! ¿Puedes creer eso?".
"Oh, sí". Decía el pequeño demonio mientras anotaba. "Esa será una gran adición a mi libro de demonios". Mostrando sus dibujos de la bestia Eda.
"Ese libro está llena de cosas interesantes, como esta". Decía el demonio rosado mientras señalaba la parte que hablaba de él. "Soy uno de los demonios más fuertes de las Islas Hirvientes, ¿eh?".
"Voy a tener que editar eso", decía King decepcionado después de haber conocido al verdadero Snaggleback. Cosa que apena a este último.
Adam se ríe de la escena y le cuesta creer que solo hace unas pocas horas estaban luchando por su vida. Mira a su hermana con culpa y pensaba. "Perdóname Luz, estabas tan feliz que no podía decirte la verdad. Por lo menos no hoy". También mira el segundo pisa con un sentimiento similar. "No pienso en compartir esta carga contigo Eda, tú ya tienes tus problemas". Miraba su teléfono con enojo, recordando a quien suplanto a su hermana. "Por ahora somos tu y yo farsante".
Omake
Eso es solo una historia
Luz y Adam se encontraban frente a King, quien de forma emocionada y señalando su pizarra.
"Dado los eventos recientes puedo decir que tal vez algunos de mis cocimientos estén un poco exagerados". Admite el pequeño demonio de mala gana.
"¿Hablas del Snaggleback, que resulto solo ser un adorable monito rosa?". Pregunta Luz levantando la mano como si estuviera en la escuela.
"Si…, pero todavía quedan muchas criaturas increíbles y mortífera". Insiste King.
"No me extraña que se tratara de un fraude", aparece Eda con los brazos cruzados y una sonrisa. "Ese cuento que, era más tonto que he escuchado desde el Grizzlor".
Esa última parte confunde a los presentes, pero Adam es quien pregunta primero. "Nunca escuche ese nombre".
"Yo tampoco", dice un confundido King. "Y pensé que conocía todos los demonios de las Islas Hirvientes".
"No me extraña que no lo conozcas es una muy vieja historia", viendo como había llamado la atención deja escapar un gemido. "Siéntense niños, que voy a contarles un cuento. Cuando mi madre era una niña más joven que ustedes apareció un brujo que decía haber viajado a otro titán. Hay escucho la historia del horrible Grizzlor, cuando cae la noche y el inquietante velo de la oscuridad cubre al titán con su resplandor. Es la hora más macabra para el mal, acechando en la sombra el terror camina en la noche. Iluminado por la luz de la luna acecha sus víctimas, bestias salvajes, valientes guerreros y astutos brujos terminan siendo despedazados miembro por miembro. Algunos decían que parecía un jabalí, otros que era un oso y otros decían que era un hombre lobo. Poco habían sido afortunados de verles de cerca y vivir para contarlo. Nadie sabe de dónde vino, pero dicen que una estrella callo de los cielos poco antes. Aterrorizo la isla hasta que un día simplemente se fue, aunque todavía se dice su nombre con terror".
Esta historia a pesar de no sonar más aterrador de lo que han visto hasta ahora en las Islas Hirvientes. "Es solo una historia, ¿verdad?". Pregunta tímidamente Luz.
"Pff, relájense es solo una historia. Y aunque sea real, eso fue hace años. Es imposible que algo así exista o siga con vida". Decía descartando la historia.
Mientras tanto, en un lejano mundo alienígena.
Se podía ver un cielo rojo y la distancia una ciudad en ruinas. En un bosque cercano tres humanoides fuertemente armados marchaban en línea recta, se notaban que estaban en aterrados con algo. La oscuridad y el extraño silencio no ayudaban, miraban a todos lados tratando de encontrar algo. Sin que lo vean una silueta negra captura al humanoide que estaba más atrás, al darse cuenta de que su compañero se había ido. Estos se ponen espalda con espalda para protegerse, mientras trataban desesperados de encontrar a su atacante. Pero no se dieron cuenta que la figura está en un árbol cercano, toma por sorpresa a otro humanoide y suave a la copa a una velocidad aterradora.
El ultimo humanoide presa del pánico empieza a disparar con algún arma láser, a la copa del árbol y luego a cualquier donde pueda ocultarse su asechador. "¿¡Donde estas!?", grita con todas sus fuerzas antes de que su arma pareciera sobrecalentarse. "Muéstrate".
En su paranoico estado no se da cuenta de que una silueta oscura con ojos rojos está en su espalda. "Aquí estoy".
Fue todo lo que escucho el desafortunado, antes de que sus gritos de agonía se perdieran en la noche.
Bueno ese era uno de los capítulos que más quería escribir, siendo de mis episodios favoritos de The Owl House. Perdón si no hubo demasiados cambios, pero Adam estaba demasiado distraído con el tema de Vee y todavía no es lo suficientemente fuerte para vencer a la Bestia Búho. Hablado de Vee, el futuro príncipe querrá saber a qué se está enfrentando antes de confrontarla.
Tenemos el primer glifo y Eda descubrió que los humanos si pueden hacer magia. Un pequeño spoiler, la Dama Búho conocerá a mas humanos que pueden hacer magia. Algunos les enseñara cosas sobre la magia que nunca creyó posible y otros que le aran cuestionarse si realmente no hay magia mala.
En próximos capítulos se verá los frutos del entrenamiento de Luz que está teniendo con Adam, les recuerdos que los Omakes no son canon pero pueden anticipar cosas que veremos.
Si no se dieron cuenta Kevin y Julie no son personajes originales, son personajes de la película de 1987. Quería que Adam tuviera amigos en la tierra, para mostrar que a diferencia de Luz a él resultaba más fácil encajar en Gravesfield. Pensé en crear personajes originales para eso, pero luego recordé que existen personajes terrestres en el canon motu. Con eso dicho hasta el próximo capítulo y que el poder los proteja.
He-Man and the Masters of the Univese es propiedad de Rob David y Mattel, The Owl House es propiedad de Dana Terrance y Disney.
