N/A:Todos los personajes, así como lo que podáis reconocer pertenece a J.K. Rowling.

Flashback 24

El sol entró por la ventana anunciando el amanecer pero Hermione ya estaba vestida. Tenía que prepararse y solo tenía tres días por delante.

El reloj marcaba las 7 de la mañana y esperaba que no hubiese nadie todavía en la cocina para poder desayunar tranquila.

La cocina estaba solitaria. Se preparó un té y cogió algo de fruta. Salió al jardín y se sentó en el banco a desayunar mientras pensaba en el primer capítulo del libro sobre oclumancia.

Dividir la mente es un arte que solo unos pocos pueden lograr. El éxito está en saber separar los pensamientos y recuerdos en fragmentos tan pequeños que pasarán desapercibidos para la intrusión. Escoger bien la forma de fragmentar y recuperar los recuerdos es el noventa por ciento de esta ciencia…

Hermione intentaba buscar la forma en como fragmentar los recuerdos; llevaba practicando desde el día anterior pero ahora que sabía que tenía tres días necesitaba encontrar la forma y empezar a practicar. El problema es que necesitaba a alguien con quien hacerlo… y no le apetecía que Snape o Malfoy hurgaran en su mente…cerró los ojos y el sol acarició las pequeñas pecas, casi inexistentes que tenía en la nariz.

Pensó en sus padres…les echaba tanto de menos…pero lo había hecho por su bien, prefería que no recordasen que tenía una hija antes que verlos muertos por tener una hija llamada Hermione Granger, mejor amiga de Harry Potter y una hija de muggles.

Muggles…¡ya está!

Hermione empezó a dar vueltas por el jardín hablando en voz alta, totalmente concentrada en sus pensamientos; su frente fruncida indicaba que estaba a punto de llegar a la conclusión.

· La mente es como un ordenador, es más los ordenadores estan inspirados en eso…tengo que crear carpetas. ¡Si eso es! , crearé tantas carpetas que podré esconder lo que quiera…y si también creo algo parecido a un antivirus…que detecte la intrusión …¡Podré advertir a mi sistema que mande las carpetas a una papelera de reciclaje! Y la papelera será la que esté escondida, bajo montones de recuerdos que no tengan nada que ver con Snape o Malfoy. ¡Si eso es! Voy a intentarlo.

Hermione cerró los ojos y se concentró, intentó crear su sistema ajena a la mirada curiosa de Malfoy que llevaba un rato mirando como hablaba sola y se emocionaba por palabras que él no entendía.

Joder Granger, estás más loca de lo que me imaginaba…

Draco no había entendido nada, Hermione hablaba de ordena no se qué y de montones de carpetas y no se que más por qué él solo se había fijado en como paseaba hablando sola como una loca .

Pero una loca preciosa, con ese cejo fruncido que le daba un aspecto de empollona; como en Howarts, cuando se sentaba en la biblioteca y leía murmurando.

No es que Draco se hubiese fijado en ella en Howarts, pero cada vez que hacia eso en la biblioteca le sacaba de quicio. Aunque ahora se daba cuenta que le sacaba de quicio porque le parecía preciosa y no quería admitirlo.

Hermione abrió los ojos y sonrió abiertamente; se giró para volver a sentarse en el banco y se dio cuenta que él estaba allí. Sentado en la hierba, descalzo y mordiendo una manzana.

-Malfoy ¿Qué haces aquí?

- Ni que el jardín fuese de tu exclusividad…-Draco le pegó un mordisco a la manzana y se tumbó en la hierba, relajándose.

-Estoy practicando Oclumancia, necesito estar concentrada y tú presencia me distrae.

- ¿Sola? La Oclumancia requiere de un legeremante. Podría ayudarte…- los ojos de Malfoy la miraban con ansia -.

- No me apetece que juegues en mi mente.- Hermione se colocó el pelo detrás de la oreja-.

-Ya he urgado en otros sitios antes y no te ha ido tan mal ¿No?-El rubio río con picardía mientras Hermione le echaba una mirada de furia-.

-No pienso dejar que veas mis pensamientos.- sentenció la chica-

- Si no eres capaz de ocultármelos a mi, ¿Qué harás si te atrapan? ¿Qué harás ante Bellatrix? Es una legeremante muy buena...- Draco la miró esperanzado-

Tiene razón…tengo que poner en practica las carpetas, no sé si lo he hecho bien…además, ¿Qué puede ver? ¿Que me gusta? ¿Que me encanta mirar su cuerpo?...creo que eso ya lo sabe…

· Está bien. Podemos intentarlo.

Draco sonrió satisfecho; no había cosa que le produjera más curiosidad que entrar en la mente de Hermione Granger.

· Túmbate y gírate hacia mi, así estaremos más cómodos.

Hermione hizo lo que le dijo y sintió unos nervios en el estómago al tenerlo tan cerca y en aquella posición, como el día que se besaron por primera vez.

Draco la miró a los ojos, unos ojos color miel preciosos…sintió la desconfianza de ella en su mirada así que le cogió la mano, se la llevó a la boca y se la besó.

Hermione se sorprendió ante el dulce gesto del chico pero no podía desconcentrarse. Le miró fijamente asintiendo con la cabeza dándole a entender que empezase.

· Legeremans- susurró Draco y la mente de Hermione se abrió para él.

Draco veía carpetas, montones de ellas. Empezó a abrirlas y los recuerdos salían a tropel.

Hermione con Harry y Ron en Howarts.

Fuera

Hermione con Viktor Krum en el baile de navidad.

Fuera

Hermione en la batalla de Howarts. Desolada ante tanta muerte.

Fuera. ¡Fuera!

Hermione lanzando el obliviate a sus padres.

Fuera

Hermione y sus padres en el andén 9 en su primer año. Fuera

Intentó ahondar más, buscar en los recuerdos más profundos.

Iba de carpeta en carpeta , abriendo y cerrando como buscando algo desechando lo que no le interesaba. Buscaba recuerdos que tuvieran que ver con él.

Hermione rompiéndole la nariz en tercero. Vaya Granger…voy a ver un poco más…

Se metió en el recuerdo de lleno.

Buen golpe me diste, casi había olvidado lo que me dolió.

Salió de esa carpeta y comenzó a buscar más recuerdos de él.

Hermione insultada por él en los pasillos de Howarts.

Fuera

Hermione llorando en su cama tras haberla llamado sangre sucia.

Fuera,¡ Fuera!

Hermione empezó a temblar y Draco paró.

· Bueno Granger…está muy bien. Vamos a parar un ratito.

· No tenemos tiempo de parar.-Hermione se levantó y empezó a caminar nerviosa –

Draco alzó una ceja y se levantó tras ella.

· Hace un momento no querías ni que te ayudase. Hay que hacer un pequeño descanso, no quiero presionarte o sufrirás daños.- la verdad es que a Draco no le estaba gustando nada ver esos recuerdos donde ella sufría, y más si era por él -.

Hermione asintió. Tenía razón, al menos ya sabía que sus carpetas estaban funcionando.

· Podemos practicar otra cosa si quieres…así te relajas- Dijo el rubio con voz ronca; estaba dispuesto a borrar esos recuerdos hirientes con otros más placenteros hacia su persona…aunque tuviera que enterrarlos temporlamente-.

Hermione lo miró perpleja.

· Ni lo sueñes Malfoy. Estaré leyendo. Cuando creas que tenemos que volver a intentarlo búscame en mi habitación.- la chica salió disparada al interior de la casa.

No dudes que lo haré Granger…te buscaré las veces que haga falta.

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