Soy yo, Serena Lilith, me he cambiado el nombre XD disculpen, tengo crisis de identidad.
Si tengo errores por ahí hagan de la vista gorda.
Capitulo
IX
Sur
-Que su majestad se baje al nivel de una simple guerrera… es un honor para mí- Sakura no se movía, esperaba el ataque de su contrincante.
-Quiero verte… quiero ver a la flor del norte danzar para mi…- extendió sus manos con exagerada elegancia-
-Lo lamento su majestad- sonrió de lado -pero yo no sé bailar- gruñó y dio el primer ataque tan veloz que el moreno no alcanzo a reaccionar tambaleándose, el silencio humano reino y desde ese punto de entrada el único sonido que gobernaba era el de metal contra metal. El chico era bueno con la espada y las contusiones de Sakura y su accidente reciente no ayudaban tampoco. Se apartaron al mismo tiempo después de un ataque. Sakura se irguió recordándose a sí misma que aún había posibilidad de que los dejaran ir, pero no tenía que matarlo, solo dejarlo malherido. Se sacó el enorme abrigo que no le permitía moverse con facilidad quedando con las vendas interiores.
-Te pones seria florecita- intentaba sonar seguro pero la falta de aire al pronunciar estas palabras mostraban que estaba cansado.
-Esto apenas comienza- respondió corriendo hacia el blandiendo su espada directo a su cabeza, y él en un rápido y posiblemente no planeado movimiento lo detuvo a duras penas en el aire lanzándola a lo que ella aterrizó con la gracia de una artista marcial. Sakura volvió a atacar haciéndolo tambalear, Sasuke y Sai contuvieron la respiración cuando lo tuvo debajo de ella inmóvil, soltó la espada y cuando alzó su puño para golpearlo recibió un flechazo en el mismo proveniente de un soldado deteniendo así su ataque. Un grito desgarrador inundo el lugar. El príncipe aprovechó y la empujo quitándola de encima.
-Maldito canalla- gritó Sasuke quien fue detenido por 4 hombres cuando se dirigía hacia él, golpeando a dos de ellos otros 2 se acercaron a apoyar hasta que lo inmovilizaron
-¡Sakura¡- gritó Naruto quien venia llegando a galope, uno de los guardias lanzó una flecha que dio en el pecho del caballo haciandolo caer, Naruto dio un brinco por suerte cayendo sin hacerse daño. El príncipe se puso de pie con orgullo inmerecido mirando con recelo a su guardia y al recién llegado que se acercaba amenazante.
Otros 4 soldados apresaron a Naruto recibiendo la misma suerte que los 2 que intentaron retener a Sasuke, logrando así que los golpearan al punto de no tener fuerza para moverse. Sai le imitó dejando malheridos a dos hombres pero lo inmovilizaron con un golpe certero sacándole el aire.
- Soy un hombre de palabra- dijo el ojiverde mientras se acercaba a Sakura que se mantenía hincada sosteniendo su brazo. Tomo la punta de la flecha y la rompió, seguido deslizo rápidamente la parte posterior de la flecha por la palma de su mano. Sakura se tragó el dolor presionando los dientes. Lo miró con rabia y le escupió a la cara.
-Tramposo de mierda- le gruñó. El joven sonrió escuetamente mientras se limpiaba la mejilla.
-Creo hermosa, que te cause una mala impresión… - miró a los soldados –Sueltenlos- Naruto, Sasuke y Sai malheridos no eran suficientes para vencerlos y lo sabían, así que no hicieron por poner en riesgo sus vidas estúpidamente en el estado que se encontraban. Los guardias confiados se alejaron al verlos incapaces de ponerse en pie.
-Déjenlos ir- añadió, los tres se miraron desconfiados. –Tú- señalo a Sakura, quien se había puesto de pie y ahora presionaba su brazo para no perder sangre -te vienes conmigo-
Naruto al escucharlo se puso de pie, irguiéndose con todas sus fuerzas,–No ira contigo a ningún lado- los guardias hicieron por acercarse a él pero al ver que no se acercaba no quisieron arriesgarse a morir ahí mismo, simplemente lo rodearon apuntándolo con sus espadas.
-No te preocupes rubiecito, estará en buenas manos…- se burló. –me gusta… y mucho- a Sakura la rodearon 3 hombres.
-Sakura…- le habló a lo lejos. –te traeré de vuelta-
-Naruto, ¡ya basta!- le grito -Sabes que tarde o temprano me iría- sonrió melancólica, su tono de voz despectivo habría hecho creer a cualquiera sus palabras, quizá porque tenían algo de verdad - váyanse y no me busquen más- Se encaminó con la frente en alto dejando un hilo de sangre por su paso, guiada por los hombres del príncipe.
-Esto no se quedara así- agregó Sasuke
-No hagan nada estúpido- rogó Sai –Son más de 30 hombres… vivos podemos hacer más que muertos- Los hombres los ataron al muelle donde habían estado antes.
Despues de mas de 10 minutos de completo silenció habló el capitán con la vista perdida en el horizonte invisible -¿Quién era?- Refiriendose al personaje principal de la pelea.
-Era el principe del Sur…- respondió Sai con un poco menos de pesimismo.
-¿Dónde dejaste a Hinata?- preguntó Sasuke, parecía que todos confiaban ciegamente en Naruto ya que eso no les preocupaba si al rubio tampoco.
-¿Qué carajo estaba haciendo aquí?- añadió ignorando su pregunta.
-No lo sé… pero no creo que se arriesgara a venir a tomar a la princesa para terminar llevándose a Sakura-
-Quizá no sabía que la princesa estaría aquí-suspiró recordando su conversación.
-¿Crees que se haya filtrado información de la misión?- interrogo Sai preocupado.
-No lo sé… y si así hubiera sido- frunció el ceño –esto sigue sin tener sentido.
El palido corchero se revolvió inquieto por milésima vez –La princesa está a salvo, quiero pensar- soltó un bufido cuando supo que no lograría librarse.
-Si... está a salvo, nos espera…- murmuró Naruto
-Naruto…- le habló Sasuke –Sakura estará bien- hizo una pausa.
-Se que no te gustara lo que te diré pero en el fondo te tranquilizara de alguna forma…-tragó -El príncipe no la matara, al menos no si ella no da problemas- Naruto lo miró hasta donde su posición le permitía –al príncipe le gustó Sakura, es probable que la quiera tener de amante- El ojiazul ya no cabía en si. Cerró los ojos queriendo evitar las imágenes de su mujer siendo tocada por otro hombre, pero era inevitable, el filtro de positivismo que mantenía en su mente constantemente y no le permitía ver el lado malo de las cosas estaba hecho añicos en ese momento y las imágenes danzaban como con vida propia dentro de su imaginación.
Gruñó intentando soltarse
-Joder que me estas enterrando el codo en la costilla- gritó Sai, adolorido por los golpes que recibieron.
Y ahí permanecieron un largo rato hasta que el oleaje les alerto de una pequeña barcaza que ataban a la madera negrusca.
Un hombre regordete y bajo de estatura se acercó apresurado a ellos, los observo detalladamente…
-¿Y la princesa?- preguntó mirando a todos lados
-Ella está a salvo…- respondió Naruto sin siquiera mirarlo, el hombre los soltó cortando el hilo.
-Por fortuna de ustedes, el rey los abría mandado a ejecutar sin duda, ¿qué diantres les paso?-
-El príncipe del sur, eso paso- dijo el moreno limpiándose la sangre de la ceja.
-Ese mujeriego… tiene su fama pero no es un hombre malo, aun así no comprendo por qué no los mato-
-Por qué se llevó a nuestra compañera a cambio…- soltó Sai mientras se ponía de pie junto a Naruto quien estaba como alma que se llevaba el diablo y sin pensarlo se acercó al pequeño navío -Voy a necesitar tu barca- el hombrecillo lo vio confundido.
-Heey heey,- se acercó a él evitando que soltara el amarre- ¿pero qué diantres crees que haces? – necesitamos llevar a la princesa.
-Se llevaron a nuestra compañera, ¿estas sordo viejo?- Naruto no podía ocultar más su coraje desquitándose indebidamente con el pobre hombre.
-además ¿Por qué diantres llegas tan tarde?- lo miró sospechoso
-Esta es la hora en que me indicaron-
-Y lamento escuchar lo de su compañera- lo miró y después a sus compañeros buscando apoyo- yo diría que les fue bien, siempre se tienen que hacer algunos sacrificios-
-Creo que no he sido claro- amenazó el rubio mientras se acercaba intimidandolo.
-Naruto basta- gritó Sasuke –Yo iré por ella tu termina la misión, si empeoras las cosas nos mataran a los tres, deja de actuar como si fueras el único que se preocupa por Sakura- mientras hablaba se acercaba a ellos -Tienes que cruzarme antes de llevarlos a ellos, es lo único que te pedimos- el anciano desconcertado los miraba intercaladamente, no sabía que era más estúpido, si hacer lo que le pedían o no. En ambas situaciones solo ponía en riesgo su vida al negarse. Así que accedió.
Sasuke conocía bien a Naruto pero le sorprendió el hecho de que no volvió a insistir en ir él, sabiendo que no había nada que le importase más.
El por su parte no podía seguir negando su realidad, era el amante de la princesa e iban a tener un hijo… un hijo… como podía dejar a Hinata sola e ir a buscar a Sakura, quien cuando lo supiera no querría volver a verlo. Un dolor desgarrador lo quemaba por dentro en silencio. Su vida estaba terminando de manera miserable y la maldita cereza del pastel es haber perdido a Sakura en sus narices y no haber podido hacer nada. La diferencia era que la vida de la morena no estaba en peligro, pero si el abandonaba la misión sería considerado traición. Sasuke era su única alternativa, tenía que pensar con la cabeza fría, y eso se estaba volviendo casi imposible…
…
La barca tenía espacio suficiente para los 5, Sai tuvo que cambiar sus planes y acompañar a Naruto hasta terminar la misión a falta de Sasuke. Cuando cruzaron la nube de niebla que no permitía apreciar el horizonte, un rayo dorado los encegueció, sus ojos poco acostumbrados a la luz del sol calaban, cuando finalmente enfocaron su vista al saludo del sol un espectáculo maravilló sus pupilas, la laguna se pintó de colores vibrantes, azul celeste, turquesa, verde agua, los peces de mil colores bailaban alrededor… magia pura. El aire era ligero y fresco, a la orilla se refugiaban doncellas que lavaban y pequeñas embarcaciones atadas a los muelles danzaban cual plumas con la corriente. Las mujeres todas de cuerpos menudos y cálidos les miraban extrañadas y con cierto recelo.
-Este es el lado más seguro de Konoha del Sur, sin embargo tienes que estar alerta, pasar desapercibido- señaló sus ropas. –Busca ropa nueva, no tardara en correr el rumor de que hay un extraño en tierras ajenas…-
-si el rey Neji se entera de que arriesgamos a la princesa de esta forma estamos muertos- murmuraba para si el hombrecillo.
-No sucederá- Hinata miró a Naruto con tristeza.
-Tráela de vuelta- pidió Naruto con las manos atadas pero el dolor en los ojos que parecían de un azul más profundo, opacos.
-Esa es la idea…-se bajó de un brinco, le tendió la mano despidiéndose, sonrió y se fue.
Naruto lo miró perderse, poniendo sus esperanzas en él, no había nadie en quien confiara más.
No lo sabían, ¿Cómo podrían? Pero esa fue la última vez que se verían a la cara como amigos… y quizá el error más grande de Naruto fue pensar que Hinata lo necesitaba más.
Las mujeres de cabellos claros miraban con desconfianza pero cierta atracción al moreno de piel de porcelana mientras avanzaba intentando pasar desapercibido inútilmente, su estatura y su porte no eran de la región a pesar de haber dejado su abrigo de piel característico de su tierra, era sin duda algo nunca antes visto para ellas. Sasuke avanzó con cautela, cierta rapidez y destreza por los callejones nacarados. Conforme pasaba el tiempo las pocas ropas comenzaban a pesar y a estar insoportablemente calientes. Por fortuna la gente sureña era más confiada de lo que aparentaba, solo pescadores y mujeres campiranas se paseaban por aquel lugar.
Ensimismado miraba atento cada rincón de aquel extraño lugar y se sorprendía de lo parecido que era al norte, reafirmando el hecho de que los 4 reinos habían sido uno mismo muchos años atrás… si quitabas el hielo grueso de las calles y techos, el eterno cielo gris y el frio devastador estarías viendo las mismas calles que ahora se abrían paso hacia él, lo que le daba la confianza de que su estructura tanto externa, interna y subterránea habían sido diseñadas por la misma persona. Buscó un callejón, robó ropas claras y se las acomodo mientras ataba sus viejas vestimentas a una roca que después lanzaría al mar.
Oficialmente la misión de rescatar a Sakura iniciaba.
Tenía que estar atento al muelle que es donde llegaría el barco donde traerían a la pelirosa.
…
-Hemos llegado…- índico el anciano mientras ataba la barca, obviando la situación.
Sin embargo Naruto no podía quitar la expresión de muerto viviente que se había plasmado en su rostro, y razones tenia de sobra, su vida parecía ir en picada destruyendo la imagen de un futuro feliz con la mujer de su vida. ¿Qué pasaría con él cuándo supieran lo de Hinata? ¿Lo matarían? ¿Lo obligarían a casarse con ella? No es que odiara a Hinata, era la princesa a quien debía servir, pero todo cambio cuando le obligo a estar con ella por un favor que ahora ya no tenía sentido. Un favor por el que habría dado su vida a cambio, lo que tuvo que hacer no era tan trágico, definitivamente, pero tampoco lo hacía sentir como un verdadero hombre… se sentía utilizado y ahora todo se había volcado contra suya… ¿Hinata querría tener a su hijo? Pensaba con tristeza sin saber realmente que sentir al respecto mientras llegaba finalmente al castillo donde el príncipe Neji los recibía amablemente.
-¿Qué tal el viaje?- pronunció para después besar la mano de su prima, despidió a sus guardias que los habían esperado en el muelle y traído al castillo.
-Su majestad- saludó el capitán. -No tan bien como esperábamos- habló con amargura en su voz, Neji los miró a ambos con golpes y manchas de sangre.
-Capitán- se dirigió al rubio -me informaron que la escolta estaba conformada por…-
-nos interceptaron en el lago- cortó con educada indiferencia manteniendo su porte.
-¿bajas?-
-aún no lo sabemos, dos de nuestros compañeros son prisioneros- respondió. Estaba haciendo uso de toda su cordura para no salir corriendo de ahí, nada de lo que realmente le importaba estaba en ese lugar… súbitamente recordó a su "hijo" y un peso que se quitó de encima durante el trayecto le cayó aún más pesado… el conocía bien lo que era no ser querido por tus padres, ser un huérfano, ¿así se sintieron sus padres sobre él? La culpa le dolía, pero más le dolía no poder amar de todo corazón a su próximo hijo, dadas las circunstancias. Había un plan, su aventura no tendría que durar hasta su matrimonio, después de la guerra sería libre de estar con Sakura, ese era el puto plan… mismo que se había ido a la mierda en menos de 24 horas. Era patético siquiera pensarlo, pero nunca deseo llorar con tantas ganas como en ese preciso momento, mientras entregaba a Hinata al próximo rey, mientras sus camaradas estaban expuestos en una tierra desconocida.
…
-¡Mango!, ¡mango dulce!- gritaba una mujer de cabello castaño, contoneándose. Sasuke la miró, no se acostumbraba a ver tantas mujeres con tan poca ropa, acaloradas y despreocupadas. No le desagradaba, pero no era momento de perderse en esas caderas. Estaba en nivel, por poco tan preocupado como Naruto. Se ató una pañoleta como la mayoría de los pescadores ocultando el negro azabache de su cabello, cubierto casi por completo seguía sin pasar desapercibido del todo. No había más que hacer, era cuestión de que nadie preguntara demasiado.
…
-¿Tienes que atarme como un animal?- gruño la mujer atada de pies y manos. Su muñeca levemente tratada manchaba la venda que cubría su pálida palma.
El ojiverde sonrió –Parecias uno en el combate- se acercó a revisar su mano.
-¿Qué haces?- se alejó
-Eres muy terca- se retiró y se dejó caer en una silla frente a ella. Observandola
-Me encantan tus ojos- pronunció con asombro no fingido mientras sus manos expertas pelaban una naranja. El estómago de Sakura gruñó.
-¿A que ibas realmente? Buscabas algo, ¿verdad?- preguntó
El alzó la ceja confundido.
-Pisaste nuestras tierras… eso está prohibido, a menos que estuvieras buscando algo- el chico sonrió.
-Eres más lista que muchas mujeres- siguió con su tarea.
-¿Quién te dijo que estaríamos ahí?- lo miró fijamente. El siguió sonriendo.
-Nadie me dijo nada… íbamos pasando y supimos de un altercado con un barco del oeste que se había adentrado a sus dominios- la miró- solo fuimos a apoyar.
-¿Tú? ¿El príncipe?- se burló –No te creo-
-Pues habrá mucho tiempo para que comiences a hacerlo- se acercó nuevamente tendiéndole un gajo de naranja. ¿Cuáles eran las verdaderas intenciones de ese hombre?. Sakura miró el dulce manjar y luego lo miró a él. Nunca había probado una naranja. Su estómago rugió nuevamente. Pero por más hambrienta que estuviera jamás se doblegaría ante él. El ojiverde dejó la fruta en el piso y se marchó.
…
Se dejó caer cuando se supo solo en un callejón ocultándose entre cajas vacías de los mercaderes. ¿Por qué tarda tanto en llegar el maldito barco? Pensaba en ese instante. Pasaron 2 horas cuando el sol comenzó a perder fuerza, a su derecha vio pasar gente corriendo emocionada y unas ligeras campanadas anunciaban la llegada de una embarcación. Se puso de pie y se perdió, si eso era posible, entre la muchedumbre que se conglomeraba en el muelle.
-El príncipe- chillaba una mujer a su lado –vuelve del oeste- cuchicheaban por otro lado –dicen que fue a buscar esposa- Sasuke frunció el ceño. "Buscando aliados, seguramente" pensó. Se acercó a unos pescadores que estaban distraídos fumando. Se acomodó junto a ellos esperando.
-Ese príncipe las vuelve locas, míralas- Sasuke lo hizo, no era novedad puesto que ya lo había escuchado el mismo.
-Serio he, ¿no serás igual de estirado que el?- le dio una ojeada, Sasuke incomodo se giró.
-No tengo nada que decir al respecto- los hombres se miraron entre ellos.
-¿Entonces vienes a descargar el barco? ¿No eres de por aquí he?- dio otro chupete a su pipa.
-Algo así…- musitó viendo a lo lejos al hombre que había sido sometido por la pelirosa. Ella no estaba. Lo vio perderse entre la gente mientras avanzaba con esa sonrisa estúpida en la cara. ¿Qué tan demente sería ir por el príncipe y amenazarlo frente a toda su gente? Suicida, sin pensarlo demasiado lo descartó. Su prioridad era Sakura. Tenía que encontrarla. No habría sido muy inteligente llevársela solo para matarla en el camino. Y por más que pensara en ello, le desagradaba el hecho de que no creía a ese hombre capaz de matarla, y no por que lo quisiera, no, fue que había visto claro interés en ella.
Sin pena ni gloria se despidió con un gesto típico suyo levantando la mano. No había mucho que hacer ahí ya.
Cuando la mayoría de las personas se fueron se encaminó a las bodegas hacia donde descargaron la mercancía del barco. Se ocultó entre las mismas hasta escuchar el ruido metálico de las puertas al cerrarse. Todo quedo en silencio y completa oscuridad. Espero unos minutos a que solo el ruido de las olas chocando contra las barcazas fuese lo que inundara el ambiente y comenzó a revisar las cajas agradeciendo su vista nocturna. No tenía mucho tiempo para estar ahí antes de que alguien volviera. Se escabullo hacia unas cajas más viejas y cuando la abrió la encontró inconsciente, el susto de creerla muerta lo invadió. Solo estaba dormida. La levanto y la sacudió levemente haciéndola abrir los ojos. ¿Naruto? Soltaron sus labios.
-Soy yo- susurró –no hables-
-Sasuke esto debe ser una trampa- tragó - me drogaron-se puso de pie –esto es una trampa, debes irte, no me hará daño, lo sé- le pidió
-No me iré de aquí sin ti- la apretó de los brazos –se lo prometí a Naruto- escuchar su nombre le erizo la piel.
-Fue mi culpa, todo esto fue culpa mía no puedo seguir arrastrando conmigo- le pidió sujetándose de sus antebrazos mirándolo fijamente.
-¿Arrastrarnos?- se desesperó –no hay tiempo para hablar, vámonos de aquí.
-Sasuke… no podría perdonarme que te hicieran daño por venir-
-Sakura, no te subestimes tanto, para nosotros eres más importante de lo que piensas, y si no vienes por voluntad te noqueare y te llevare arrastrando- ella sabía que hablaba enserio.
-Está bien- se froto los brazos entumecidos- no tengo idea de este lugar- miró alrededor.
-¿Cómo sigue tu mano?- la revisó
-Bien-dijo insegura, el asintió.
-Vamos, la puerta está cerrada por fuera- miró las ventanillas del techo –Es la única salida- señaló.
Sasuke la miró de reojo. –Te miras fatal- se enfocó en sus vendajes sucios y su cabello enmarañado. Comenzó a escalar ayudándola a subir.
-Y a ti esa cosa en la cabeza te hace ver ridículo- se burlo
-No es tiempo para bromas-
-tú comenzaste-
A pesar del alivio que sintió al ver a su compañero era claro que no lo esperaba a él, intentaba actuar normal a pesar de la situación en que se encontraban pero una vocecilla en su mente le gritaba que algo no estaba bien.
Llegaron fácilmente a la ventana, la atravesaron con la misma agilidad y en menos de un segundo ya estaban fuera, solo la playa embelesadora se mecía frente a ellos, su escape.
-Vamos- indicó, dispuesto a avanzar sobre el suelo blando y arenoso cuando una voz rompió el aire.
-No esperaba que vinieran tan pronto- ambos se giraron desechando la idea de lanzarse al mar. Eran fuertes y agiles, pero no eran los mejores nadadores, al contrario de su acompañante quien se veía rodeado de 20 hombres más. -¿Dónde está el rubio?- se cruzó de brazos elegante –por la cara de psicópata que puso al arrebatarles a la mujer creí que era su pareja- se inclinó despreocupado, seguro tras las espadas y arcos de sus lacayos.
Sakura se mantuvo en silencio, el hombre jugaba de una forma desesperante, sus habilidades de lucha no servirían de nada ahora, solo pedía que no los mataran antes de intentar escapar nuevamente si es que los apresaban. Sería demasiado bueno pero muy poco probable. Lo más seguro era que los torturarían para obtener información. Miles de situaciones se arremolinaban en su cabeza, Sasuke no tenía que haber ido por ella.
Sonrió acercándose –ustedes no hablan mucho, ¿verdad?.
-Su majestad- titubeó a voz de un hombre –No se acerque demasiado- el guardia había acompañado al príncipe en su primer encuentro y la salvaje imagen de la guerrera se había grabado en su pupila.
Sasuke quien desde el principio los barrió con la mirada se mantenía callado.
-No pienses nada estúpido- le indicó el ojiverde rodeándolos.
Sakura rendida se dejó caer en la arena de rodillas
-Por favor- rogó –déjalo ir-
Sasuke la miró conmovido pero no mostró debilidad.
-Sakura- le gruñó- un guerrero del norte no se arrodilla, ni pide perdón, la sangre que se derrama por nuestro honor se mantiene-
-Ya basta Sasuke…- gruño la pelirosa –fui yo quien te metió en esto-
El ojiverde los miró detenidamente un momento -Por suerte para ti no me interesas- le habló a Sasuke- me interesa la mujer, pero- hizo énfasis en la última palabra –no soy tan estúpido como para dejarte ir.
Continuara...
Es el capítulo más largo hasta ahora D: y uno de mis capitulos favoritos junto al de la pelea con Pain. No se porque...
¿Qué tal?
La verdad esta historia me gusta mucho, Sasuke es demaciado lindo jaja que hasta dan ganas de dejarla con el... muajaja ¿Con quien se quedara? Es un misterio. Mas adelante hablaré del pasado de Sakura, Sasuke y Naruto, de como se conocieron y que relación tenian, Naruto hasta el momento ha tenido muchas cargas emocionales y amorosas, por eso siempre se le ve triste o desesperado ¿cómo no? cuando relaté historias cortas de su pasado con Sakura se entendera como se enamoraron los dos...
¿Saben? La historia de donde saco algunos escenarios de este fic tambien tenia dos protagonistas hombres, y era imposible no amar a ambos, creo que es lo que va a suceder aquí. Al menos a si me esta pasando XD.
El fandom Narusaku habia estado muy olvidado ultimamente, me alegra ver muchos nuevos fics de mis autores favoritos :)
-Respuestas a los Reviews-(mil gracias por tomarse el tiempo de poner una sonrisa en mi)
Adrit126... Lamento mucho esa puñalada en tu corazón u_u la historia tiene que seguir así, me encanta el drama, creo que eso hace a las historias mucho mas interesantes y cuando llegas al final es como un alivio para el alma, cuando todo tiene el final que merece. Gracias por comentar todos mis capítulos :)
joanayagarcia: Tienes un buen punto en mano! Si, ¿quien no se enamoraria de una mujer tan perfecta y hermosa? jajaja. Gracias por tu review! espero leerte mas adelante. Gracias por seguir la historia. :*
Niss386: Pues así es... en esa epoca existian metodos anticonceptivos en forma de medicina, pero si los actuales fallan imaginate! Es horrible, lo se, mi Naruto con Hinata T.T pero así es como imagine esta historia y quiero respetarla tal cual. Gracias por tu review :) por tomarte el tiempo de comentar, enserio. Ojala te guste el cap.
Merry Breaker Fractale: UUUUUF me ha sucedido con algunas historias, es un tremendo alago de tu parteee, gracias por tu interes y por leerme, y por tomarte el tiempo de mandarme un review :3
Nos leemos el proximo viernes ;D
Mata Ne