Capítulo XIII

Un giro inesperado

De todos era tal sorpresa pero la mas sorprendida era sin duda la pelirosa quien tenia frente a ella al enemigo de su nación y la acusaban de ser su hija.

¿Qué rayos estaba pasando con el mundo? Su mente era una masa gelatinosa que temia fuera a salir por sus oídos en cualquier momento. No podía pensar, solo miraba al rey y luego a Tsunade con cara de espanto.

Akihiko tomó sin delicadeza a la rubia para encararla furioso.

-No puedo creer que hagan esto, hasta dónde has tenido que llegar para sabotear mi felicidad- musito dolido con sus verdes ojos rojos de una emoción desconocida.

-SALGAN- gritó el rey pocos segundos después haciendo que el principe lo mirara nuevamente.

-Esto es un sabotaje, padre-

-CALLATE- le gritó con la mirada perdida y las manos temblorosas, sin atreverse a dar un solo paso. Todos salieron despavoridos mirando intercaladamente a la mujer y al rey sin decir o comentar algo.

-¿Cómo te llamas, niña?- preguntó con la voz áspera. Mirándola como si fuera un fantasma.

-Sa..- tartamudeó- Sakura, su majestad- bajaba la mirada avergonzada y nerviosa.

-¿Solo Sakura? ¿Cuántos años tienes?-

-16- siseo –los que no tenemos padre no podemos llevar otro nombre. El rey tragó -Esto… esto es un error yo-

-No te he dicho que puedes hablar- sentenció –Tsunade- le habló a la mujer que parecía mas decidida que nadie, miró a su esposo que la observaba con cuidado desde el otro lado de la sala.

-Vas a explicarme por que vienes tan decidida a decirme esto, tú que fuiste quien atendio a mi esposa cuando dio a luz, tú que corroboraste que la niña había nacido muerta- soltó con dolor las ultimas palabras.

-La niña fue la primera en nacer mi rey…- tomó a la chica y la giró alzando el blusón exponiendo su espalda baja a la vista de todos, un lunar que parecía una mancha a simple vista se acomodaba sobre su muslo izquierdo. –El príncipe la miró en silenció, confundido- La revise y tenia esta pequeña marca a penas visible… nadie esperaba al príncipe cuando minutos después las contracciones continuaron y nació, con la misma marca que la princesa- Se los llevaron, cuando atendí a su mujer ella ya había fallecido, algo que no sorprendió a nadie, debo admitir su condición prematura de parto fue demaciado para tener gemelos…- cerró los ojos.

-Cuando fui a ver a los bebes la niña no se movia, tenia tiempo que había dejado de respirar y su pequeño cuerpo estaba frio… le dimos sepultura como usted recordara pero…-

-¿¡PERO QUE!?- gritó desesperado ya.

-El cuerpo de la bebe que enterramos no tenia la marca… creí que me había confundido… pensé que había visto mal incluso que…-se detuvo cubriendo su boca, nerviosa- no lo se…- sollozó

-Tsunade… ¿qué es lo que me estás diciendo?- gimió tembloroso mirando a la mujercita que solo abría los ojos completamente estática y muda, incluso parecía temblar ligeramente.

-Alguien cambió a la niña…- gimió - en el lapso que el príncipe nacía, señor- lo miró –he cargado con la incertidumbre por todos estos años. Aún si fuera absurdo pensar que alguien pudiera haber hecho algo así yo recordaba la marca en la niña, la misma marca de ella- la señaló. –Mire- tomó el pequeño rostro de la jovencita y la obligó a mirarlo. –es la viva imagen de su esposa- sollozó –no tengo duda alguna, ella es su primogénita-

….

El sonido de los barrotes frotados entre si comenzaron a retumbar en su cien. Su cabeza dolía y se creía incapaz de abrir los ojos hasta que estos se abrieron por sí mismos, obligándolo a parpadear constantemente para acostumbrarse a la escasa luz que entraba por el pasillo. Tragó saliva humedeciendo su garganta una y otra vez, acostumbrándose al sabor de la sangre que tenía entre los dientes.

-¿Dónde estoy?- habló a la nada. El chirrido de rejas era lo único que podía captar, haciéndolo sentir nervioso.

-¡Alguien!- Gritó confundido intentando incorporarse dejándose caer finalmente al ser aturdido por el dolor. –Aggh- gruñó llevándose las manos a la nuca donde sintió la herida palpitante.

-Despertó- Escuchó a lo lejos, inquieto busco el origen de la voz.

-¿Quién está ahí?- murmuró -¿Qué estoy haciendo aquí?- preguntó cuando escucho voces a lo lejos.

La figura de un hombre alto, pálido y de semblante arrogante lo miró con un deje de preocupación.

-¿Qué estoy haciendo aquí?- insistió.

-Estarás aquí por un buen tiempo, Capitan- respondió escuetamente.

-¿Capitan?- preguntó confundido, el intruso frunció el ceño confundido acercándose a las rejas sigilosamente sin perderle de vista.

-Si, ¿acaso no lo recuerdas?- insitio intrigado.

-No se qué estoy haciendo aquí, no recuerdo nada- Neji sonrió abiertamente, las cosas salían mucho mejor de lo que pensaba.

Sakura tenía ya un buen rato a solas en la habitación que le habían asignado, una habitación mucho más grande que su casa. Confundida, nerviosa, ansiosa y desprotegida, lejos de todo lo que conocía y con el sutil presentimiento de que jamás volvería a verlo.

¿Cómo pudo suceder todo esto? Se preguntaba una y otra vez. ¿Yo? Hija de un rey… suspiraba mientras se peinaba con desesperación.

FLASHBACK

-Naruto… -susurró, ¿Dónde estás?...

¿Me vas a decir dónde estamos?

No, no aún.

Es tarde, si mi madre sospecha que no estoy en casa tendre problemas

-Estas conmigo, no dejare que vuelva a lastimarte- le sonrió con esa energía característica en el. Sakura sintió un palpiteo nacer desde su corazón hasta sus mejillas.

-Ven…- le extendió la mano con gentileza, la niña aun con el rubor en las mejillas la tomó y se dejó llevar.

Espera un poco- le pidió mientras miraba el horizonte tupido de nieve y algún que otro pino a lo lejos, habían pocas estrellas y la luna brillaba pero por su ausencia.

-Esta muy oscuro aquí- susurró

-Sssshh, sabes que no tienes que temer cuando estoy contigo- añadió mientras seguía buscando en el cielo.

-Ahí- señaló una luz verdosa que nacía de una montaña. Sakura se acerco a el curiosa y asombrada.

-¿Qué es eso?- preguntó sin apartar la mirada.

-Son espíritus de más allá….- le susurró sin dejar de mirarla, pudo apreciar como su rostro infantil cambiaba del asombro al temor. Entonces le tomo de la mano y ella lo miró, ingenua e inocente de que el niño rubio y despeinado estaba guardando en lo profundo de su memoria cada una de sus facciones. Naruto no lo sabía, pero esa niña sería la que dirigiría su vida de ahí en adelante. Si lo hubiese sabido quizá habría tomado mejores decisiones, o no. Haría lo que fuera para protegerla, pero eso aún no lo descubría.

Poco a poco aquella luz verdosa se extendió por el cielo surcando y destellando en hermosos colores igual que el arcoíris. Iluminando el rostro pálido y asombrado de Sakura, haciéndole parecer a Naruto que aquella niña no era más ni nada menos que un hermoso ángel.

Es curioso como los niños saben amar con mayor naturalidad que los adultos, con más pureza y con menos ambición. Por desgracia el primer amor de la infancia suele ser vago y no deja gran huella, sin embargo hay casos en que ese amor crece hasta desbordarse convirtiéndose en una historia ideal o en una tragedia…

Así permanecieron hasta que la luz se extinguió casi por completo.

-Mañana ira el rey a ver el entrenamiento- Sakura lo miró, habían pasado dos años desde su primer encuentro. Sakura tembló ligeramente.

-¿Estas lista?- La pelirosa asintió.

-Esto nos puede traer muchos problemas, ¿sabes?- respondió.

-Lo se… ya lo tengo preparado pero tienes que lucirte, aprendiste mucho en poco tiempo…-

-Gracias a ti…- le interrumpió.

-Si no logro impresionar al rey y me descubre…-

-Estaré contigo…-

-¿Por qué siempre me ayudas?- lo miró confundida

-Hago esto desde hace tiempo y nunca habías preguntado el motivo…- se rascó la nuca.

-Creo que nunca me lo había preguntado…-

-No lo sé… tú…. Eres- tragó nervioso –como una hermana pequeña- Sakura sintió algo extraño en su interior al escuchar esas palabras, no lo entendía, en absoluto, pero no era algo agradable de escuchar. –Ya sabes, Itachi siempre ve por el bien de Sasuke… es lo que hacen los hermanos- Sakura sonrió melancólica.

-Si… tienes razón- sonrió abiertamente olvidando el tema.

-Te llevare a casa- le revolvió sus cabellos rosas para después encaminarse por donde habían llegado.

-Gracias Naruto….- murmuró. Por respuesta obtuvo un gesto vago del rubio que ya había avanzado algunos metros.

/

Llegaron a tientas ya de madrugada, el pequeño compartimento donde dormía la pelirosa tenía una puertezuela de madera independiente, por fortuna. Asi que a menos que alguien la buscara podían descubrir que se fugaba por las noches. Naruto avanzo junto con ella entre la nieve cuando escucharon un chirrido dentro de la casa. Ambos se pusieron alerta y se ocultaron entre la leña seca que estaba amontonada.

-¿Solo esto?- resopló la mujer.

-No tengo mas…-

-Esto no es lo que me prometiste…-

-Lo se, pero no puedo darte más-

-Por esta miseria no pienso seguir haciéndome cargo de ella-

-Podemos buscarle un nuevo hogar pero en esta época de incertidumbre nada es seguro, la gente prefiere alimentar a sus propios hijos que a bastardos-

Sakura al escuchar las últimas palabras puso más atención

Naruto consciente de lo que estaba sucediendo tanto en aquella casa como en la mente de la niña insistió en dejar de escuchar, por más que el también deseara saber.

-Creo que deberíamos irnos…- le tendió la mano.

-No… están hablando de mi Naruto…- susurró con los ojos acuosos.

-No lo creo…- mintió.

-Déjame saber la verdad… lo necesito- sollozó. Naruto odiaba verla llorar.

-No pienso dejar que te lastimes- le reprochó, pero la niña no pensaba moverse de ahí.

-Esto es todo… lo tomas o lo dejas- sentenció la voz del extraño.

Y no escucharon nada más. Cuando la puerta se abrió se movieron rápidamente a ocultarse en el pequeño cuarto de Sakura, donde Ambos apretujados se acomodaron, sus corazones parecían querer desbordarse de lo rápido que latían, por el temor de ser descubiertos.

No hubo más que silencio hasta que el ligero sollozó de la niña llego hasta el rubio.

-Hey…- levantó su mentón. –Estoy aquí- acarició sus cabellos rosados. –¿Recuerdas que te prometí que siempre estaría contigo?- Sakura asintió –No lo olvides- la abrazó envolviéndola en sus brazos de joven, casi de niño…

Pasaron varias horas cuando una línea amarillenta surco el horizonte indicando que Naruto debía volver al orfanato. Miró a la niña que se acurrucaba junto a él buscando su calor, y mucho antes de despertarla la miró por un largo instante.

-Shh… le susurró al oído –Hoy es tu gran día- Sakura abrió los ojos, la espontanea felicidad que los adornaron fue abruptamente reemplazada por un dejo de tristeza, cosa que Naruto notó.

-Trabajaste duro… no dejes que te arrebaten eso- El ojiazul había insistido muchas veces en el pasado para que Sakura olvidara su loca idea de ser parte de la guardia, pero su propia voluntad, esfuerzo y confianza habían hecho que el también abrazara la idea de verla lograrlo. La vio mover la cabeza afirmativa. –Tengo que irme- se despidió saliendo a tientas de aquel cuartucho.

FIN DEL FLASHBACK

La boda del Rey Neji y la princesa Hinata se llevó a cabo bajo una neblina de incertidumbre, con una princesa pálida y visiblemente inconforme. Frente a un rey ajeno a su propia familia y a los secretos que comenzarían a entrelazarse.

Cerró los ojos intentando traer a su memoria algún recuerdo, alguna imagen de su pasado, escarbando detrás de dolor de cabeza.

La imagen borrosa de luces en el cielo oscuro y una mata blanca sobre el suelo aparecían constantemente y el rostro de una niña en la oscuridad, después nada. Por mas que intentaba solo veía una mancha borrosa, pero a pesar de toda la confusión esa imagen era suficiente para traerle un poco de paz en ese hoyo donde se sentía metido.

-¿Qué hiciste con el?- preguntó en el balcón sosteniendo la bebida color cereza entre sus dedos que ahora adornaba un anillo de plata.

-Olvídate de él- se acercó a su espalda. Hinata tragó nerviosa.

-Es preferible desaparecerlo a que tu padre se entere de tu embarazo, ¿no crees?- Hinata lo miró con odio.

-No me mires así- sonrió -Estoy velando por el futuro de tu nación- brindo frente a ella. –Que viva el Norte- bebió sin dejar de mirarla.

Hinata no había entendido por que su primo accedió a culminar su matrimonio a pesar de tantos contratiempos y mentiras, no lo entendió hasta años más tarde cuando descubrió un secreto que se llevaría a la tumba, Neji era estéril, pero nadie, por su bien y por el de ella, debía saberlo. Su embarazo habría parecido una bendición para el, para mantener su honor como hombre y como buen patriarca de su nación, como un hombre honorable para la historia que el ganador tendría que escribir. Para su pena, solo fue recordado por pocos después de la gran batalla 15 años después.

Naruto, un pobre desgraciado que fue olvidado por el Norte tan pronto se anunció su muerte en un accidente de regreso a su hogar, no para todos, cabe destacar, Kakashi quien jamás creyó en su muerte dimitió siendo desterrado del Norte tan pronto como se pronunció en contra del reinado de Neji. Itachi por su parte, siguió con su labor de guardia junto a Orochimaru, impasible y como muchos pensaron, aceptando la muerte de su hermano en el reino del Sur. Muerte que todos creían vengaría en la gran guerra que se postergo por muchos años, tantos que confiaron en que estarían en paz por mucho más tiempo.

Lo que nadie esperaba, y estoy segura que los lectores de esta historia tampoco. Fue la repentina boda de Sakura y Sasuke, que entre necesidad y deseo se llevó a cabo, tanto para salvar la vida de su compañero como para darle paternidad al hijo que llevaba en el vientre… en mutuo acuerdo pactaron que eso haría para mantenerse a salvo en aquel mundo desconocido. Un año más tarde, producto de una noche de soledad y necesidad Sakura cayó en la cama de su antiguo compañero de batalla quedando embarazada de una niña. Lo que nadie dio crédito anteriormente fue que el primogénito de la joven pareja tuviera los cabellos más dorados que el sol y los ojos más azules que el extenso mar. El nuevo príncipe del Sur, también apodado El sol del Sur.

Fin de la primera parte.

Antes de que me digan algo, entre lineas se lee que NARUTO ESTA VIVO así que no se enojen.

Ya tenía muchas ganas de escribir! Se que uno que otro esperaba la continuación y eso es lo que me hizo finalmente sentarme a escribir, despejar un poco mi mente de tanta cosa que ha sucedido a mi alrededor y escapar a este mundo que construí en parte gracias a ustedes. De verdad les agradezco sus comentarios y su apoyo 3 espero que les haya gustado y si no pues… hago lo mejor que puedo L

Finalmente Disculpen la demora, he tenido ataques de ansiedad y depresión, por desgracia es algo que se ha salido de mi control y pues… no me da vergüenza admitir. Soy una persona alegre y sociable pero hay cosas que me cuesta mucho afrontar… espero comprendan, escribir sigue siendo mi pasión pero a veces mi mente no ayuda.

Hay muchas cosas que contar, y se que siguen habiendo muchas dudas. ¿Qué clase de fic será? Narusaku o Sasusaku… pero si les digo van a echarse a perder el final :/ Pero si de eso depende si continúan con la lectura como si no, pues pueden decirme y ya lo pongo en el siguiente capítulo. ¿les digo o no?

RESPUESTAS A LOS REVIEWS

Seishes: Así es, XD Que loco no? Gracias por seguir aquí J

Joanayagarcia: Tu eres lo máximo! Gracias por tu review, espero que te gustara el capítulo. Me encanta leerte.

Ksee: Gracias por tus animos, espero siguas la historia hasta el final.

Adrit126: Jajaja, si, sabia que ya sabias, aún así espero que disfrutes lo que sigue. Gracias por tu review. Creo que aquí aclaré muchas de tus otras dudas XD. Gracias por seguir aquí.

Niss386: Siempre lamento cuando las personas tienen momentos difíciles, espero que todo esté mejor. Ojalá este capítulo te anime más. J

Guest: Creo que aquí ya sabes lo que sucede con Sasuke XD. Espero haber aclarado muchas de tus dudas. Besitos y espero leerte.

MIL GRACIAS POR SUS MENSAJES