Prólogo

Desperté.

Los recuerdos volvieron como todas las mañanas. Policía, miedo. Hospital, desesperación. Funeral, vacío.

Un profundo vacío que jamás se fue.

Respire tratando de llenarlo, de evitar que ese agujero en mi interior me consumiera de nuevo.

Me preparé para mi día sabiendo que mañana sería igual, y el día siguiente, y el siguiente.

Ya no había esperanza en mi, solo vacío.