Hola, que tal todos? Espero estén pasando una buena semana.

Aquí Loki con un nuevo capítulo, espero lo disfruten. Je, je...


El viento azotaba la zona, la diminuta vegetación que habitaba en aquella área nevada, ondeando al son de la brisa fría de aquellas montañas nevadas. De pronto la brisa pasa a ser una tempestad donde algunas de las plantas se desprenden del suelo y salen a volar al cielo, otra rafaga y termina por quitar la mitad de las pequeñas plantas que se aferraba al suelo, todo esto era provocado por los choques de golpes de dos individuos que invadían la zona relativamente llena de nieve.

Hasta los animales de la zona huyen despavoridos, su instinto le daba una descarga eléctrica a sus cerebros para alarmarlos de que ese lugar era peligroso. Otro estruendo y los espectadores que se encontraban en la zona se asombran. Las siluetas se separan de un brincó y el retumbar del suelo y el azote en el cielo azulado del planeta azul se detiene, finalmente la tierra da un respiro...

-E-Esto... uff es muy emocionante, sabía que pelear contigo... ¡sería divertido! - Se maravilló el saiyajin criado en la tierra.

-L-Lo mismo digo... uff... pero por lo visto no has ido en serio como lo sugeriste conmigo... - Puntualizó el muchacho, Son Goku solo rasco su mejilla izquierda con una sonrisa burlona.

-¡¿Oh?! Veo que te diste cuenta ja, ja... Bueno solo quería quizás comenzar algo suave. - Dijo sin descaro alguno el saiyajin. El muchacho no dio ningún comentario de hecho, lo tomó como algo que quizás se lo esperaba de aquel sujeto. - Pero supongo que tú tampoco has estado peleando en serio en tu estado base. - Replicó el hombre.

-Pues... déjame decirte que también pensé en tomarlo con calma. - Le dio el mismo comentario con intención de irritarlo, cosa que funcionó, el saiyajin dio quejas por aquello. ¿De que se queja? Si él mismo fue que inicio con este juego. Pensó Zac. - No te quejes, tú tampoco estabas peleando de manera justa. - Regaño el chico y le mostró una expresión molesta al saiyajin criado en la tierra.

Goku solo ríe mientras rasca su nuca. - Lo siento, lo siento. Prometo esta vez pelear en serio.

-Hump, no me subestimes... - Manifestó el saiyajin reencarnado, y separó sus pierna, seguido alzó ambos brazos y cerró sus puños, se encorvo un poco y ya el muchacho estaba más que listo para poder seguir con la lucha. - ¡¿Vamos que esperas?! Regresemos a la pelea.

A Kakarotto se le escapó una ligera risita por aquello, dio pequeños saltos en su zona, giró su cuello y luego abrió sus piernas, se encorvo un poco, colocó delante sus manos de la cual estaba entrecerradas y mostró una sonrisa ladeada a su oponente indicando que estaba listo para seguir.

El ambiente se tornó silencioso hasta los espectadores de la zona estaban ansiosos por ver si en realidad aquellos dos pelearon en serio esta vez.

¿Está esperando a que dé el primer paso? Se preguntó Zac al ver que Son Goku no ha movido un pie hacía él o ha tenido intención de iniciar un ataque. Bueno, si él no iniciará lo haré yo. El muchacho prefirió tomar la iniciativa de la pelea.

Este desapareció de la vista del saiyajin criado en la tierra cosa que sorprendió al Son, quizás no esperaba que el chico diera el primer movimiento, la verdad es que el hermano de Raditz solo estaba analizando la forma en que atacaría al chico. A pesar de la gran sorpresa el nieto de Son Gohan arrugó el entrecejo y rápidamente alzó su brazo detrás de él para detener un ataque de su oponente. Zac se sorprendió con aquello había jurado que tenía al saiyajin en su manos, pero al contrario. De manera inmediata Kakarotto tomó el tobillo del muchacho lo alzó sobre su cabeza y lo llevó directo al suelo con intenciones de que estampara su boca al suelo.

Sin embargo, Zac detuvo su caída con sus manos, y con su pierna libre la alzó para azotar la mano del saiyajin, dándole la oportunidad de alejarse dando piruetas. En cuanto estuvo de vuelta en sus posición de combate le dio una sonrisa al hombre de traje naranja. El padre de Gohan también le dio una sonrisa y esta vez son ambos que se lanzan a intercambiar golpes consecutivos y la lucha terminó por darse sobre el cielo del planeta azulado.

-¿Usted los puede ver señor Piccolo? - Indagó el infante, sus pupilas color obsidiana iban de lado a lado tratando de seguirle el movimiento a los hombres sobre el cielo, Gohan solo pudo tragar saliva con nervios al darse cuenta que aún le faltaba mucho camino que recorrer para poder llegar a ese nivel de poder e incluso no había cerrado sus labios de la impresión.

-Me gustaría decirte que sí, pero ni yo mismo sé muy bien lo que está pasando allá arriba. - Piccolo fue sincero, y arrugaba más su mirada al notar que también le faltaba por seguir subiendo de nivel. Malditos saiyajins... Dijo con rabia a sus adentros quizás se sentía opacado de ver que su rival estaba peleando a un nivel que a él se le hacía imposible llegar.

-¡Ja! Sé lo que piensas. - Expuso la voz del hermano mayor de Kakarotto, ya había notado la expresión del namekiano hace unos momentos y pudo deducir que tal vez los estaba maldiciendo. - De seguro debes pensar que los saiyajins son una raza capaz de potenciar sus poderes. - Dijo en un tono arrogante que llegó a irritar al namekiano y solo le provoca lanzarse encima de este como un león a un antílope. Pero no hizo nada al respecto, no se dejaría llevar por los comentarios del hermano de su rival.

-¿Y eso qué? - Pero aún así no iba a quedarse callado, el namekiano arrugó su nariz y cruzó sus brazos sobre su pecho. El pequeño Gohan estaba atónito al ver que posiblemente otra pelea aparte la de su padre y mentor se formaría delante de él, pero aún así no se metió en la conversación de los mayores. Raditz solo bufea ligeramente por el comentario, le alza una ceja y seguido se centra en la lucha de su pequeño hermano. Gusano rastrero. Bramo a sus adentros.

Pero la fusión de Nail y la encarnación del mal dejó de lado las acciones del hermano de su rival y prefirió centrarse en la batalla.

Mientras que los saiyajins que yacían sobre el cielo se separan rotundamente.

-Me sigues asombrando... eres muy fuerte. Eso me motiva aún más... Creo que es momento de usarlo... - El saiyajin criado en la tierra dio una pausa a su habla para darle pasó a su incremento rotundo de ki, su aura blanca que danzaba cambió a una dora, parecia que estuviese en llamas de inmediato su cabello negro como la noche se cubria de amarillo y su ojos obsidiana pasaron a ser a un color parecido al cielo que los rodeaba.

Finalmente, Son Goku había llegado a su transformación, Zac se sorprendió al verlo transformado y su sangre hirvió de la emoción, esta era quizás la primera vez que sentía el ki del saiyajin criado en la tierra con esa forma y eso si que le emocionaba a tal punto que, declara que él también iría en serio. Kakarotto sonrió como un niño cuando le dicen que irá al parque de diversiones, eso era lo que estaba esperando desde antes. Tal vez pidieron iniciar con eso, pero le quitaría la diversión total del combate, era más emocionante llevar las cosas como estaban. El muchacho finalmente llegó a su fase, le dio una sonrisa al saiyajin criado en la tierra y al Son le brillaron los ojos de la emoción.

-¡¡WUAOO!! Es como si me estuviera viendo en un espejo. - Declaro Goku acercándose al saiyajin y analizó sus características físicas para compararlas con las de Zac.

El saiyajin reencarnado alzó una ceja extrañado, pero luego Kakarotto dejó de lado eso y se centró en la pelea, le interesaba más comprobar la fuerza del chico que hacer un análisis extenso de las similitudes y semejanzas. Se separó del chico para volver a su postura. Zac no dijo nada al respecto y solo se volvió a inclinar para posicionarse, parecía que estuvieron por horas mirándose, una risita surge de ambos, sabían lo que sentían, estaban emocionados, sus corazones latian de la emoción y dejaría que aquella adrenalina salga a través de la lucha que están por establecer.

Asimismo, ambos saiyajins se lanzan sin medir la fuerza de sus puños, ambos puños chocan entre sí y una onda de viento explosiva hace desaparecer las nubes en su entorno, seguido Zac alza su rodilla y Kakarotto predice el ataque, decide contrarrestarlo y provoca que otra onda de viento se manifieste en la zona. Ahora ambos se forcejeaban entre sí como si se tratará de una pelea de sumos. El saiyajin reencarnado aprovechando que ambos tenían sus manos entrelazadas y decide usar como soporte al saiyajin para elevar sus piernas hacía el mentón del padre de Gohan.

No obstante, Goku separa sus manos del chico y se aparta como pude para esquivar el ataque y lo logra, Zac solo retrocede dando un giró al aire y halago al saiyajin por predecir su movimiento. Kakarotto solo bufea y solo decide continuar con la lucha.

Parecía que la pelea hubiese durado horas, pero la realidad es que solo llevaban unos míseros cinco minutos de batalla y solo se podía notar el choque de dos auras doradas sobre el cielo, hasta que una de las luces doradas cae como una estrella fugaz al suelo de la cual se llevó consigo un acomulado de tierra y nieve, el saiyajin terminó chocando su espalda contra una gran montaña y terminó por provocar una avalancha, la nieve cubrió el cuerpo del guerrero...

Mientras que los espectadores se asombraron ante eso y posaron su mirada al cielo para poder ver el ganador de la pelea, encontrándose con el ceño fruncido del hijo de Bardock.

-¡¿Mi papá le acaba de ganar al señor Zac?! - Se asombro Gohan al ver que su padre seguía en pie, pero nadie respondió a su comentario de hecho sus mayores solo seguían con el ceño fruncido y seguían observando a Kakarotto, posteriormente el asombró del primogénito de ChiChi se manifestó en su rostro al ver que su padre tomó la postura para lanzar su ataque más fuerte, reunió energía y esta se torno azulada. - ¡¿Por qué usará el Kamehameha?! - Cuestionó el chico, ya que, no veía necesario aquello después de todo su padre había ganado la pelea, ¿cierto?

¡HAME...!

-¡¡HA!! - El gran grito de su padre sacó al infante de sus pensamientos y vio como aquel rayo se dirigía al aculado de nieve, esta daría en llenó y sería capaz de destrozar la zona en su totalidad hasta posiblemente la tierra termine por agonizar...

-¡¡DAZZLING VIOLET!! - Aulló el muchacho y las energías púrpura y azul chocaron entre sí dando una gran combinación de colores. Esta es la primera vez que uso esta técnica desde que la cree... Cuando el muchacho no entrenaba con Vegeta, el saiyajin reencarnado experimentaba un poco con sus poderes, hasta que logró conseguir una técnica propia, pero ni él mismo sabía que pudiera haber funcionado tan bien. La verdad es que a Zac se le pasó por la cabeza tratar de desviar el ataque potente del Son con sus manos... Pero sería muy arriesgado, así que opto por esta opción.

Sin embargo, al ser su primera vez usando la técnica... Zac no llegaba a calcular cuánta potencia colocaría en el ataque, solo era un prototipo como él le llamaba, pero a pesar del poco tiempo que le dedicó era asombroso que estuviese rivalizando con el kamehameha de Goku, pero tampoco podía cantar victoria, debido a que, su ataque empezó a retroceder y su faz se arrugó al sentir la presión que ejercía el poder de Goku. Al tener esto presente Zac solo aumenta el poder en su ataque haciendo que la energía retroceda unos centímetros. El esposo de Milk no a gusto con esos aumentó más su poder, el chico se sorprendió ante eso e incluso aquella energía azulada hizo que arrastrará tierra en conjunto a su técnica.

-¡Goku, si sigues así solo provocaras que la tierra estalle! - Exclamó Piccolo al notar que la habilidad seguía descendiendo dejando el ataque de Zac más abajo.

El chico al ver que era demasiado tonto seguir aumentando la energía de la habilidad decide dejarla de lado y prefirió volver a la primera opción: desviar el gran ataque, era algo loco. Ya que, la última vez que intentó desviar la misma habilidad terminó casi muerto, pero al parecer al muchacho no le pasó esa idea por la cabeza. Es que no estaba pensando con cabeza fría...

Abrazo el ataque del saiyajin criado en la tierra, el ataque los arrastró unos cuantos pasos, apretó sus dientes y las venas de su cabeza sobresalen debido a la gran fuerza que ejercía para desviar el ataque. Sobre todo hacía todo lo posible por no dejar que el ataque tocará al planeta, si eso seguía su curso era obvio que destruiría la tierra antes de la llegada de los androides...

Mientras que Goku estaba más que preparado para desviar el ataque por si el muchacho se le complicaba, pero eso no será necesario, ya que, con gran esfuerzo el muchacho logró cambiar de dirección el rayo, la técnica salió de la atmósfera de la tierra y se perdió entre el gran espacio infinito. Zac tomó aire como pudo, había usado mucha energía para desviarla, estaba algo agotado, pero aún así alzó la mirada y le dio una sonrisa al saiyajin entre jadeos. Goku sonrió orgulloso, sabía que el muchacho podría con su técnica, confiaba en que desviará el ataque.

Posteriormente, el chico se inclinó y dio un gran salto que dejó atrás un ligero cráter, fue directo a aquel hombre y al parecer Goku pensó lo mismo porque este también bajó en picada a máxima velocidad al chico. Aquellos dos seguirán con su lucha... Lo primero que chocó fueron sus puños en la mandíbula de cada uno, tanto fue el golpe que hasta se escuchó en la zona. De la cual los dejó aturdidos, Acto seguido ambos hombres terminan por caer entre los pinos de aquel lugar nevado, al caer al suelo pierden las transformaciones de manera inmediata. Ninguno ha movido un músculo para clamar ser el vencedor de la batalla.

-¡¿ACASO ESTÁN LOCOS PUDIERON DESTRUIR LA TIERRA?! - Regaño Piccolo, pero quizás aquel gritó no iba a ser escuchado por el par de saiyajins, ya que estaban literalmente inconscientes.

Q-Qué fuerza tan bestial tienen esos dos... ¿Entonces así es un super saiyajin? Se preguntó Raditz, ahora era él que tenía la boca abierta, observó sus manos y las apretó con fuerza. Yo también puedo lograr obtener ese poder. ¡Lo quiero! Exclamó a sus adentros y decidió emprender vuelo para ir a un lugar en donde entrenar por su cuenta.

Quería conseguir aquel poder como diera de lugar. Fácilmente se lo podría pedir a Kakarotto, pero se sentiría humillado al pedirle a su pequeño hermano que lo ayude a acceder a tal poder. Era mejor hacerlo por su cuenta y demostrarle a los demás que él también puede llegar a tener dicha transformación.

-¿Se acabó? ¿Entonces quién ganó? - Preguntó el infante a su mentor, pero este solo estaba gruñendo por lo imprudente que fueron aquellos dos, literalmente estuvieron casi que al borde de que el planeta fuera tocado por aquella técnica. Mientras que Gohan no se había movido, quizás pensando que ambos seguirán la lucha.

-Grr, será mejor que vayamos a ver como están ese par de cabezas huecas. - Dijo Piccolo entre dientes y le exigió al hermano de Son Goku que lo ayudará, pero al no recibir ni siquiera quejido de este, se giró a ver el lugar en que se supone estaba y no había rastro de él. - Maldito saiyajin se esfumó como el humo y mira que dejarme para limpiar el desastre de estos... - Refunfuño. - ¡Gohan en marcha!

Una vez exigido el mandato, ambos emprendieron vuelo, y en cuanto encontraron a los dos hombres descendieron. Tanto Goku como Zac tenían las vestimentas medio destrozadas, sobre todo que dormían plácidamente. Cosa que hizo que Piccolo se molestará aún más, pero no hizo nada al respecto o bueno quería darles un gritó a ambos por lo improcedente que habían sido hace minutos.

-Será mejor que los llevemos al templo de Kami-Sama y les demos semillas senzu. - Dijo Piccolo mientras alzaba desde el brazo al saiyajin reencarnado y posteriormente lo llevó a su hombro como si fuera un saco de papas. Gohan solo cargó a su padre en su lomo y ambos guerreros emprendieron vuelo a la torre del maestro Karin.


Gotas de agua se escuchan como un tintineo de campanas al toque del agua cristalina y esto era acompañado por un ambiente sombrío, pero a su vez de luz, sobre aquella habitación semi oscura yacía lo que parece ser una ilustración del espacio, estrellas y cosmos se dibujaban en aquel techo. Como también lo acompañaba un vasto suelo repleto de agua cristalina; era un gran charco infinito de agua y este reflejaba lo que yacía arriba.

Tal vez era un lugar que no habitaba nadie, debido a lo desolado y el no tener ni siquiera una pequeña planta en la zona daba indicios de que no podía albergar vida.

No obstante, en aquella área oscura se encontraba una figura meditando, tomaba aire y luego la expulsaba desde su boca, pero más que una meditación pareciera que aquel sujeto estaba luchando internamente y aquellas gotas que caían sobre el gran suelo de agua eran los fluidos del cuerpo de aquel individuo.

Otra gota cae y esta hace eco en toda la sala y el gran charco se llena de ondas, pero aquella silueta misteriosa deja de lado su meditación y abre lentamente sus ojos.

De pronto un aplauso se escuchó en aquella zona.

-¡Muy bien, Zheng! Esta vez lo tomaste con calma. - Alentó una mujer. El discípulo a Dios de la destrucción solo agradeció inclinando su cabeza.

-"Muy bien, Zheng". - Se escucha alguien imitando la voz de la mujer. - ¿Por qué no le enseñas algo mejor que meditación? - Dijo un hombre de antifaz mientras sobrevolaba sobre la cabeza de la mujer. - Solo haces la parte aburrida.

-¿Ah, sí? ¿Y pues que sugiere el señorito? - Dijo en un tono irritado el ángel, pero aún así mantuvo su neutralidad en el asunto.

-Pues... no sé, lo que hace un Dios de la destrucción: destruir planetas, devastar lugares Algo como eso. No lecciones aburridas de cómo controlar la respiración o sus emociones como quieras llamarle. - Se burló.

-Para tu información, Gar. No todo implica destrucción sin sentido. Zheng debe aprender lo que está bien y mal. Como también debe aprender a llevar las situaciones de manera neutral y ¡no ir a lo salvaje como cierta persona! - Le dio una mirada acusadora al de antifaz y este solo ladeo la cabeza confundido por la mirada de la mujer hacia él. A pesar de poner énfasis en las últimas palabras, ella continuó hablando: - Además, aún no es un Dios de la destrucción para ir destruyendo a diestra y siniestra. Es un proceso muy largo...

-Bla, bla, bla. Eso es lo único que sale de tu boca, angel incopetente. - Al ángel le salieron incontables venas debido al insulto, aún así mantuvo su postura o quiso aparentarlo, pero al instante hizo aparecer el bastón y realizó movimientos con este para tratar de darle algún golpe, pero Gar solo esquivaba con burlas. - Usp, casi. - Dijo encima del bastón.

-¡UIIGGH, YA DEJA DE MOVERTE! ¡SOY TU MAYOR OBEDECEME! - Ruge la mujer mientras seguía dando golpes consecutivos con el bastón. La mujer estalló y dio un gran grito de furia, seguido abrió un portal y literalmente pateó al peliblanco fuera de aquella habitación. - ¡Ahora quédate acá afuera! Y espera a que acabemos. - La mujer selló el portal y se sacudió las manos como si hubiese votado la basura. - Que molestó que mi padre me ponga a cargo de ese mocoso.

Mientras que al otro lado de la habitación Gar solo refunfuño e hizo una mueca de burla hacía el ángel, pero al notar que estaba afuera sonrió de lado, quizás podría divertirse un rato, ya que su mayor no lo estaba supervisando.

En tanto dentro de aquella dimensión, espacio y tiempo...

-¡Bien, Zheng! Prosigamos con la meditación. - Solicitó la dama.

-¿Es buena idea dejarlo afuera? - Cuestionó el próximo Dios de la destrucción.

-Nah, aún no sabe como viajar por el espacio, así que, no irá a ningún lado. - Explicó la mujer. Zheng no dijo nada al respecto y el silencio rotundo de su discípulo la inquietó. - ¡Es cierto! Aunque sea un tonto siempre se sale con la suya. - Declaró la mujer y seguido abrió un portal para salir de la habitación, no habían pasado minutos cuando se escuchó el gran grito: - ¡LO VOLVIÓ HACER! - Estaba que se jalaba los cabellos al presenciar que aquel sujeto no estaba por el planeta del Dios de ese universo. - Eh... Zheng iré a buscarlo, tú solo sigue entrenando. - Solícito, pero su alumno ya estaba en la meditación y una sonrisa orgullosa se manifestó en el rostro del ángel al ver lo obediente que era aquel hombre.

Sello el portal, sacó su bastón y este se mostró como un localizador e inició una gran búsqueda por el planeta, aquel sujeto tenía la fama de hacerle jugarretas al ángel.

- Cuando encuentre a ese mocoso es que... ¡¡¡AAHHHH!!! ¡LO MACHACARE! - Exclamó mientras golpeaba el aire. Al parecer Gar era el único ser que le hacía saltar de furia al ángel...


Había pasado el año que corresponde a la llegada de los supuestos androides. Todos los guerreros estaban cerca de aquella ciudad mencionada por los viajeros del tiempo, algunos estaban impacientes, ya habían pasado algunas horas y no había rastro de los androides. Esto hizo que los guerreros se cuestionaran sobre las palabras de los viajeros del tiempo.

-No tiene sentido. - Aclaró Bulma a sus compañeros mientras se acomodaba aquel bebe de ceño fruncido en su regazo. - ¿Por qué dijeron que estarían aquí si no hay nada? Goku, Zac. ¿Están seguros que la información que les dieron es la correcta? - Cuestionó la mujer.

-Bueno ellos dijeron que era en este lugar a la diez y treinta de la mañana, pero... - Son Goku dudo si la información era buena así que decidió que Zac explicará nuevamente la información.

-¡¿Eh?! - Fue lo único que dijo Zac, ya que estaba más centrado en averiguar el porqué no han aparecido los androides. - Mmm, pues... no se como decirlo. Ellos dijeron que estarían aquí este día y hora - ¿Será que seguirá su curso? Se cuestionó en sus pensamientos. - No se que decirles... solo les dije lo que ellos nos dijeron...

-Zac dice la verdad. - Esta vez fue Piccolo quien entró a la discusión.

-Que extraño, no tiene sentido... - Dijo Tenshinhan con un aire de decepción.

-¡Lo sabía! - Todos voltearon a mirar al ex bandido. - Sabía que esos sujetos solo nos jugaron una broma pesada.

Todos se dieron una breve mirada por el comentario de aquel hombre. La verdad es que no sabía cómo tomar la situación. ¿Otro cambió en la historia? Se cuestionó el muchacho.

-Bueno... esperemos que sea solo eso. - Se consoló Krilin, aún tenía un mal presentimiento de la situación. Aunque no era el único, algunos no creían el testimonio de los viajeros y otros solo le olía mal la situación o solo se quedaba callado escuchando lo que decían los demás.

-Es posible que el futuro haya cambiado aquí. - Agregó la peliblanco segura de sí misma.

-¡Cierto! Eso sí tiene sentido, lo más seguro es que la visita de ellos haya generado un cambió en nuestra línea temporal. - Dedujo la peliazul. - Me alegra oír eso... - Suspiró de alivio.

Algunos estuvieron de acuerdo con su teoría, pero otros solo refunfuñaban. Después de entrenar hasta romperse los huesos ¿ya no valdrá la pena? O sea ¿ya no hay androides con que luchar? ¡Qué estupidez! Más de uno había pensando en eso.

Mientras que Zac, solo seguía analizando las cosas, sobre todo lo que ellos dijeron: "un posible". Básicamente era como decir un pero en una oración.

-Bueno, ya que, no habrá nada. Será mejor que me retiré, dejé a Chaoz solo en casa. - Puntualizó Ten como si su amigo fuese un niño pequeño al cual cuidar.

-Pues... - Dijo en un hilo Yamcha, mientras daba leves pasos para irse. - Yo mejor me iré, tengo una cita programada con una hermosa modelo para dentro de dos días, pero creo que la adelantare. - Presume aquel hombre a Krilin, este solo le dio una mirada de pocos amigos.

-Espero que te vuelvan a dejar. - A Yamcha se le clavaron incontables dagas al escuchar las palabras de su amigo, solo ríe nervioso y procede a marcharse.

Pocos quedaron en el área, siendo sólo: Zac, los Son, el hermano de Goku, la guardiana y Bulma junto al pequeño Trunks. Sin embargo, estas últimas terminaron marchándose de la zona y solo quedaron los guerreros de los cuales seguían observando la ciudad.

-Vaya... estaba muy emocionado por ver la fuerza de esos androides. - Dijo Goku con decepción, cruzó la mirada con su hijo y siguió el diálogo: - Gohan, será mejor que nos marchemos de seguro tu madre debe estar preocupada...

-¡Espera, Goku! - Llamó el saiyajin reencarnado, el segundo hijo de Bardock dejó de lado sus intenciones de teletransportarse y prestó atención a lo que su amigo le diría: - ¿Has tomado la medicina? - Cuestionó, quería quizás prevenir que al Son le llegará la enfermedad, a pesar del cambio que ocurrió. El muchacho tenía la ligera sospecha de que posiblemente la enfermedad siga en su sistema evolucionando lentamente...

Kakarotto le ladeo la cabeza y luego miró al cielo para poder indagar en sus pensamientos hasta que recuerda que aquella mañana antes de partir había tomado una píldora de la dichosa medicina, solo porque se sintió cansado y su esposa se lo sugirió.

-No, pero esta mañana lo hice porque ChiChi me lo pidió... - Dijo en un tono indiferente como si no le importara mucho. Quizás pensaba que su enfermedad también se había ido...

- Te recomiendo que la tomes... por lo menos cuando te sientas tan agitado. - Recomendó el chico. Claro tampoco le podía recetar tomarla día por día, él no sabía muy bien qué efectos podría tener la pildora o si era efectiva hacerlo desde antes, solo tenía la intuición que era mejor adelantar las cosas antes de lamentarse.

Aunque viéndolo ahora mismo, Goku ha estado actuando como siempre, ¿Será que la enfermedad nunca evolucionó? No. Descarta eso... es un virus puede evolucionar y mutar cuando quiera... Es bueno que le haya dicho eso. Meditó Zac. Y le sugirió al saiyajin que estuviese más atento a su salud. Son Goku se extrañó tanto por la preocupación del chico que solo le aclaró que no se preocupara tanto por él, de todos modos si llegaba a enfermar podía tomar muchas píldoras para sanarse. Lo dice como si fueran las semillas del ermitaño... El muchacho le salió una gota detrás de su nuca, pero al parecer no era el único.

Después de una breve conversación de lo que harían ahora mismo cada uno tomó su rumbo, acordaron seguir entrenando por su cuenta por si llegasen a aparecer los androides, esto fue a petición del muchacho, pero de igual forma algunos si seguirán con su entrenamiento de superación y otros como Gohan volverán a su rutina de estudios o trabajo.

-¿Y qué hará usted señor Piccolo? - Cuestionó el pequeño Gohan a su maestro, ya que este ni había dicho una palabra y solo observaba la vida cotidiana de los humanos en la ciudad.

-Yo me quedaré aquí. - Dijo en un tono ronco. - Prefiero esperar un poco más, tengo un mal presentimiento... - El namekiano sudo frío mientras daba leves gruñidos, no lograba descifrar su mal presentimiento.

Pero al parecer no era el único con ese presentimiento. - Creo que yo también me quedaré, quizás me aventure a bajar a la ciudad y ver que todo está marchando bien. - Informó el muchacho con un aire tranquilo.

Son Goku dijo un "está bien" y seguido le preguntó a su hermano mayor si quería ir con él o se quedaba también, este solo se encoge de hombros y se acerca a poner su mano sobre el hombro de su pequeño hermano, dándole la respuesta. El hijo de Kakarotto solo se aproximó al otro lado de su padre con cautela para sostenerse y posteriormente la familia desapareció frente a los dos guerreros.

Ambos se dieron una mirada y devolvieron la vista a la ciudadela. Ya parecían halcones buscando a sus presas.


Mientras que aquellos guerreros vigilaban la ciudad de los humanos, más allá de aquella civilización en un laboratorio ocultó entre unas montañas donde yace solamente la soledad...

Una figura monitorea unas pantallas delante de tres cápsulas, pulsa la pantalla para averiguar el estado de los sujetos en las grandes cápsulas y sonríe a gusto, seguido rueda su silla de escritorio y se da un gran estirón para luego tomar su café medio caliente y llevarlo a su boca seguido de un pastel pequeño a sus carnosos labios de los cuales se llenan de la crema del pastel.

-Mmm, ¡Qué rico! - Exclamó y sus ojos brillaron por lo esponjoso que era aquel dulce y luego volvió la vista a las cápsulas. - Quizás dentro de poco sean libres... solo esperen un poco más. - Informó en un tono amable la figura de textura delgada.

Pero de pronto sus facciones amables se marcharon para dar entrar a una seria y fría en cuanto giró la cabeza hacia una camilla en que estaba alguien más atado.

- En cuanto a ti... - Dijo en un hilo y seguido caminó a pasos lentos hasta la camilla, aquel hombre que estaba atado se altero al ver como aquellos azulados ojos se tornaban rojos más agregar a la sonrisa maliciosa que le dio la figura eso lo hizo sudar de miedo.

Aquel hombre trata de escaparse o alejarse, pero no puede y solo sigue a la figura delgada con su vista, aquella silueta solo dejó una pequeña mesa rodante a su lado con incontables herramientas médicas, el corazón de aquel hombre se aceleró al ver como la silueta de cabellera larga tomaba una de las herramientas.

-¿Inició con la anestesia? O ¿Prefiere que lo haga sin ella? - Dijo en un tono juguetón. - Después de todo, no es tan efectiva y quizás sienta mucho dolor al hacerle el trasplante de partes, ¿qué me dice usted, Dr. Gero? - La figura que lo amenazaba con un bisturí era nada menos que una mujer, a pesar de su contextura delgada aquella fémina era sumamente fuerte. Pero ¿qué es lo que hace? - Mmm, recuerdo muy claramente que usted cuando hacía el cambió de las partes no se molestaba en poner anestesia nuevamente. Creo que sería justo que no hiciera lo mismo... - La respiración del pobre hombre se aceleró al recibir aquella amenaza. - Ay~ no se ponga así, más bien ¡alégrese! Usted quería formar parte de los androides y será "inmortal"... Aunque... no le puedo asegurar que salga bien del todo... - Lo último lo dijo con indiferencia mientras miraba el techo del laboratorio. - Quizás muera o se vuelva una bestia sin razonamiento. Bueno, eso no importa porque si llega a fallar, yo misma me haré cargo de limpiar todo. - Dijo con una sonrisa de lado.

El Dr. Gero dio intentos por salirse de la camilla, pero le era imposible y la mujer al notar aquello, solo dejo que su risa burlona se manifestará más en la sala.

Pero ¿Quién era aquella mujer? ¿Y qué le estará haciendo a los androides? ¿Qué es lo que quiere? ¿Qué es lo qué está pasando en ambas líneas temporales?


Debido a que no había ningún indicio de los supuestos androides y sobre todo la ausencia de los guerreros del futuro, algunos se llegaron a cuestionar lo que era real o falso.

No sé qué sucedió, llegué a la conclusión que quizás esta línea temporal no tendrá a sus androides. ¿Entonces Cell si vendrá o no? Tal vez, pero sería demasiado aburrido pelear contra él en su forma imperfecta. ¿Les habrá pasado algo malo a Mirai Gohan y los demás?

¿Fueron asesinados...?

Agitó mi cabeza borrando aquellos pensamientos negativos. Debería plantearme la idea de entrenar en la habitación del tiempo, pero sería algo raro que fuera hasta la atalaya y lo pidiera así sin más, desconozco la disponibilidad de la habitación, pero tocar la puerta no es entrar, así que quizás se lo pregunte.

A pesar de que hemos cumplido el año y no se si la fecha que anunció Trunks sea la correcta para esta línea, no lo sé tengo que averiguarlo y solo falta un mes, me preocupa que no salgan.

¡Bah! ¿A quién engaño?

En realidad solo quiero encontrarlos para pelear, estoy muy decepcionado de que no hayan aparecido y siento coraje de solo saber que quizás me hayan matado en la otra línea temporal. Apreté mi puño mientras lo observaba.

-Quiero tener una buena pelea... - Dije para mi mismo y me dejé caer al césped de aquella montaña.


(Baja si quieres ver el extra)...

Ya tengo adelantado capítulos, pero... creo que estos si se tardarán un poquito o tal vez no todo depende...

(Quiero seguir adelantando y corrigiendo, son sólo borradores...)

Ahora las preguntas del día:

¿Qué habrá pasado en la línea temporal de Mirai Gohan?

¿Los androides harán su aparición en la línea del prota y cómo será?

¿Qué es lo que planea aquella mujer con el Dr. Gero y los androides?

Esto y más en próximos episodios. Espero disfruten este pequeño extra que paso con cierto personaje ja, ja.


(Esto transcurre en el día veintiuno de octubre del año 766 en el pasado, después de que los guerreros se marcharan de la ciudad predestinada al caos)...

-¡¿Dónde están los androides?! - Ruge un hombre de cabellera llameante de color dorada, mientras observaba a todos lados en aquella ciudad, parecía un maniático buscando en todos lados a los supuestos androides.

Los ciudadanos solo ignoraban al sujeto, claro después de todo ver a un tipo que ande gritando a cada rato: "¡¿Dónde están?!" "¡¿En donde se ocultan?!" "¡¡Salgan!! Yo mismo acabaré con esas chatarras". Claro que era obvio, no quería involucrarse en la psicopatía de aquel hombre.

Ya eran las tres de la tarde, pero aunque gritara no había rastro de los androides, así que, el saiyajin orgulloso posó la vista en un grupo de estudiantes de preparatoria y se aproximó a interrogarlos:

- ¡TU! ¡¿Has visto a dos sujetos sospechosos?! - Los estudiantes se dieron una mirada confundidos.

-Si, ahora mismo estamos viendo uno. - Quiso jugarle una broma al guerrero, a lo que el saiyajin le exclama un donde.

El estudiante solo lo señaló al príncipe se mira a sí mismo y después a los estudiantes, seguido las risas de los jóvenes hace que rechine sus dientes de rabia, Vegeta solo dio un grito:

-¡¡CALLENSE INSECTOS!! - Y seguido emprendió vuelo lejos de la ciudad para buscar en otra parte del planeta.

-A-Acaba de volar... posiblemente era un sujeto peligroso... - Dedujo uno de los estudiantes.

-Y tú solo saliste con tus payasadas. ¿Qué hacemos si es un asesino en serie? - Cuestionó una de las mujeres del grupo.

Es mérito que el ex mercenario no les haya hecho daño a unos simples humanos que se burlaron de él...


Hasta el próximo episodio...