Prólogo: Un reino caído.

Hace mucho tiempo, había un bello y próspero reino, cuyo castillo se hallaba majestuoso con hermosos jardines que irradiaban alegría. A los pies del castillo una hermosa ciudadela, donde toda persona que habitaba ahí tenía un corazón puro y bondadoso, se podía decir que era un paraíso sin preocupaciones ni odio, un lugar donde la luz y oscuridad convivían en armonía donde el sol iluminaba con gran esplendor el reino llenando de esperanza a los ciudadanos de que un nuevo día llegaría para ellos. Sin embargo, ese momento terminaría para siempre, un fatídico día la oscuridad emergió de las profundidades del reino y de ella brotaron unas tenebrosas criaturas llamadas sincorazón. Estas criaturas de la oscuridad comenzaron a atacar a los habitantes del reino arrebatándoles sus corazones provocando que nacieran más, consumiendo el reino casi en su totalidad.

La última esperanza que tenía el reino eran los guerreros de la llave espada, poseedores de un corazón fuerte elegidos para portar unas poderosas armas que son las únicas que podían hacerles frente a los sincorazón, así la lucha había comenzado.

La batalla parecía no tener fin, pese a los esfuerzos no se pudo evitar las pérdidas de los guerreros, parecía que la oscuridad se prolongaría a otros reinos, a otros mundos, aun así con un último esfuerzo una luz salió de ese manto de sombras y logro sellar aquel reino que desgraciadamente pereció ante la oscuridad quedando totalmente vacío...al pasar los años la caída del reino se convirtió en leyenda...una historia que se fue transmitiendo a otros mundos...desde ese momento aquel reino se conocería con un nombre, un nombre que al que se bautiza aquellos reinos que perecen ante el reino de las sombras...

"Bastión Hueco"