Estuve ausente demasiado con esta historia, pero voy a tratar de retomarla, desarrollarla y darle el final que merece, por lo pronto espero disfruten de este capítulo.

Capítulo 20: Colapso Múltiple

Kuroko estaba paralizado por el miedo, la confirmación de saber que la reina roja se encontraba tan cerca suyo, era una de sus pesadillas convertidas en realidad. Kagami supo inmediatamente al ver su expresión, que algo estaba sucediendo, algo en verdad negativo para poner en ese estado a su compañero. Siendo consciente ahora del secreto de su amigo, supo que no podía dejar que el resto del equipo lo viera en ese momento, por lo que cuando estos comenzaron a dejar la sala, él fue y cerró la puerta, asegurándose de estar solos y que nadie estuviera cerca para escucharlos.

-Kuroko, amigo, ¿Qué ocurre? ¿Qué fue lo que paso?

-… está aquí…

-¿Ah?

-Ella está aquí.

-¿Quién? ¿Quién es ella?

-La mujer que te dije… la que volvió nuestra vida un infierno.

-¡Ah! Espera, te refieres a que.

-La reina roja está aquí. Esta en el edificio.

-Espera, ¿Estás seguro? ¿No te equivocas? ¿Cómo es que te diste cuenta?

-Haru me acaba de enviar un mensaje, él también se encuentra en el edificio. Está muy cerca de ella, yo ya los percibí con mi habilidad, no hay duda alguna. Es ella… Kagami, está aquí, en verdad lo está… tengo miedo. Kagami, en verdad tengo miedo.

-Tranquilízate amigo, no hay porque dejarse llevar por el pánico. Esa mujer está aquí, pero no los ha visto, ¿Cierto? Ella no sabe que están en este lugar, tu dijiste que lo más seguro es que piensa que todos murieron hace años.

-No sé si nos ha visto, quiero creer que no. Tienes razón en que piensa que todos morimos hace años, pero también ha seguido con sus investigaciones, eso lose muy bien. Si nos viera, si tuviera sospecha de quienes somos, es claro que comenzaría a tramar algo para atraparnos, nada la detendría hasta confirmar quienes somos y si lo hace, jamás nos dejara ir. Seria nuestro fin.

-Con calma, no pienses en ese escenario. Mira, no sé qué hace esa mujer en este lugar, pero lo descubriremos y de paso los mantendremos ocultos. ¿Qué hace esa mujer ahora?

-Se mueve, en otra dirección, por suerte se aleja de Haru.

-Vayamos con el entonces y tu mantente al pendiente, no la pierdas de vista, si viene hacia nosotros los esconderé, aunque solo sea poniéndome enfrente.

Los chicos salieron del área de vestidores, dirigiéndose hacia donde Haru debía estar, según Kuroko, este no se estaba moviendo y era lo que le preocupaba más. Cuando lo encontraron, junto a la entrada de un pasillo, notaron que el chico se encontraba muy asustado con la respiración agitada, la impresión por a ver estado tan cerca de aquella mujer y los recuerdos del pasado le habían dejado un poco en shock, siendo momentáneamente incapaz de moverse.

-Hey, amigo.

-Haru, soy yo, Tetsuya.

-¿Tetsuya?...

-Tranquilo, no esta cerca, se movió a otra área del edificio.

-Era ella, de verdad era ella.

-Lo sé, hiciste muy bien en avisarme.

-Fue Kazuma quien la vio primero, fue antes en la calle, ha estado tratando de avisarnos sin éxito, fui el primero en responder. Ahora estamos seguros de que es ella. ¿Qué vamos a hacer?

-No perder la cabeza seria un comienzo.

-Kagami, no lo alteres. Hermano, haremos lo que hemos hecho siempre, actuar como de costumbre, no podemos levantar sospechas. ¿Te has comunicado con alguien más?

-No, de momento no.

-Hay que hacerlo, hay que informar a todos, deben estar alertas ante el peligro.

-¿Y si cunde el pánico?

-Sera peor si lo ocultamos, oh si ella llega a descubrir a alguien.

-Si, tienes razón. Lo siento, es solo, estoy muy alterado.

-Guarda la calma, por ahora sigue en otra dirección. Quizá sea mejor si te retiras por ahora, yo te mantendré informado. Tu y Kazuma avisen al resto, tendremos que reunirnos en la noche si es necesario.

-De acuerdo, me iré, además, Makoto me debe estar esperando en la entrada del edificio.

-Ve con cuidado.

-Hasta pronto chicos. -se retira-.

-Kuroko, ¿Qué hacemos ahora?

-No estoy muy seguro. Preferiría que esto fuera una pesadilla.

-Esa mujer debe estar aquí por una razón, aunque dudo que sea por ustedes.

-Cierto, sea cual sea espero lo termine pronto y se retire, si nos descubre, no se ira por ningún motivo.

-…Hey amigo… ¿Quieres verla en persona?

-… ¿Eh?...

-Te encuentras muy tenso, hasta yo me doy cuenta. El saber de ella no te sentó nada bien, pero creo que podrías traerte cierta calma si la miras en directo.

-Yo… no sé, es peligroso.

-Te estaré cubriendo en todo momento, además tu poca presencia será de gran ayuda. Y quién sabe, quizá podamos averiguar algo con verla.

-Es un plan suicida para mí.

-Si no quieres hacerlo no insistiré.

-…pero hagámoslo.

-¿Qué? ¿De verdad?

-Si, tengo que enfrentarla en cierta forma. Si lo pospongo podría terminar como Haru y volverme muy evidente, no puedo permitir eso, además la posibilidad de descubrir lo que esta haciendo puede darnos información que nos ayude a mantenernos a salvo. Vayamos hacia ella.

-Eso haremos, iré al frente y tu guíame, tu sabes donde esta.

Los dos chicos comenzaron a moverse por el edificio, Kuroko indicándole a Kagami hacia donde ir en todo momento, después en la segunda planta, cerca de otra área común se detuvieron. Usando a su amigo como escudo, Kuroko se asomo cuidadosamente, notando a pocos metros de distancia a Shiori Akashi, la cual se encontraba vestida de manera que no fuera reconocible. La mujer revisaba otro programa de los partidos de basquetbol, ignorante por completo de que uno de sus preciados proyectos estuviera tan cerca. Kuroko sintió dificultad para respirar, era tanto el temor que le producía esa mujer que una parte suya deseaba salir corriendo, mantuvo la compostura con gran esfuerzo, continuando observando a la mujer, esta termino de ver el programa escrito para luego ir en dirección de ellos. Por instinto, Kuroko se ocultó aún más y cerro sus ojos con temor, a la vez que Kagami se mantenía firme, moviéndose con cuidado para dejar detrás suyo en todo momento a su compañero, no fue hasta que esta salió de su campo de visión que el mas alto pudo relajarse.

-Uff, hasta yo me sentí nervioso. Amigo, ¿Estas bien?

-…si…lo estoy, gracias.

-Tranquilo, yo te cubro.

-Se aleja, puedo sentirlo, va hacia la planta baja. Quiero ver lo que estaba revisando.

-Es solo el programa de los juegos, no es nada del otro mundo.

-Pero a ella le interesa, por eso hay que verlo.

-No puedo discutir eso.

Ambos fueron hasta la pared donde estaba pegado el cartel de los horarios de los partidos. Kagami no entendía nada de lo que veía, para el solo eran los mismos juegos de siempre, pero Kuroko con su buena memoria, noto los puntos donde parecía estar concentrada la mujer, encontrando algo que de inmediato capto su atención y que tomaba sentido cuando lo pensaba.

-Creo que ya se lo que estaba mirando.

-Entonces dime, porque yo no tengo ni idea. Aunque acabo de descubrir en que horario son los juegos de Himuro.

-Kagami, mira esos de ahí, reconoces el nombre de uno de esos equipos ¿No?

-Rakuzan, ah, claro que lo reconozco, imposible olvidarlo. Es donde están Akashi y el resto de sus compañeros. Pero, ¿Qué tiene eso de relevante?

-Amigo, hay algo que no te conté cuando me descubriste, mis hermanos lo saben y Aomine también, pero no pude decírtelo porque estaba otra persona contigo, alguien a quien no podía contarle toda la información por completo.

-¿Akashi? No lo entiendo, ¿Qué tiene que ver el?

-La reina roja, es Shiori Akashi.

-¿Qué?

-Ella es la madre de Akashi.

-Eso no puede ser, el dijo que estaba muerta.

-Porque eso es lo que ella les hizo creer.

-¿Estas seguro? ¿No puede ser una equivocación?

-Reconozco perfectamente a esa mujer y es idéntica a la fotografía que Akashi me ha mostrado, no hay lugar para las dudas. Son la misma, no pude decirle sobre eso, porque es claro la imagen que el tiene de ella, no quería causarle un conflicto.

-Comprendo. Demonios, todo esto es demasiado.

-Creo que con esto ahora tengo una teoría factible de porque dejo el laboratorio por primera vez en tantos años. Parece que ha venido a ver a Akashi.

-¿A sus partidos?

-Si, miraba los puntos donde está marcado Rakuzan. Supongo que ella también lo extraña, claro que no puede acercársele, pero de alguna manera, esta situación le proporciono una oportunidad perfecta para poder mirarlo entre la multitud sin que haya riesgo alguno de que el la vea o que sea descubierta por otra persona.

-Entonces estará pendiente de los partidos donde el este. Eso podría volverse un problema, si llegamos a enfrentarlo, entonces estará en las gradas observando todo, es posible que te descubra.

-Lo sé, es una posibilidad, pero también podríamos perder antes de que eso suceda. No es que lo quiera, pero con esta situación, no me importaría perder.

-Hey, no bajes la cabeza, es pronto para sacar conclusiones. Puede que solo este aquí poco tiempo, no necesariamente se quedara hasta el final, así que no digas que quieres rendirte ahora. Si permanece mas tiempo, idearemos un plan para mantenerte a salvo. Tanto a ti como a tu familia, ahora vámonos, no hace falta quedarnos mas en este lugar.

-Kagami, gracias por ayudarme.

-De nada, solo no te des por vencido. Ah, por cierto, será mejor que llames a Aomine y le digas que asista también a la reunión que quieres hacer.

-¿Qué? ¿Por qué el también?

-Para ponerlo al tanto de la situación y que no vaya a cometer alguna equivocación. Además, si tu y Haru se pusieron así al verla, no quiero imaginar cómo se pondrán todos, necesitare ayuda para sacarlos del shock.

-Si, creo que tienes razón, en este momento con los mensajes todos se pondrán nerviosos. Es necesario mantener la calma y las apariencias.

Durante la siguiente hora, Haruka, Kazuma, y Tetsuya, pusieron al tanto al resto de su familia, generando toda clase de reacciones, siendo el temor el predominante de ellas. Todos usaron su habilidad confirmando la información de los primeros, aquella a quien tanto temían se encontraba muy cerca de ellos, siendo mas que seguro que podrían topársela en algún momento. Tras otra serie de mensajes, acordaron verse a las nueve de la noche, a las afueras del estadio donde se jugaban los partidos de Voleibol, Kageyama permanecía junto a Shoyo pues estaba enterado por este de la situación, además de ver lo mal que se puso su amigo tras recibir la información. Kuroko llego junto con sus dos compañeros e inmediatamente trato de calmar a su hermano, uno a uno el resto comenzaron a llegar en poco tiempo, siendo Tsukushi el ultimo quien era acompañado por su amigo Kazama, ya también informado de la situación.

-(Yuri) Tiene que ser una broma, esto no puede ser de verdad.

-(Konata) Tiene razón, no puede estar sucediendo. ¡¿Qué posibilidad hay de que este pasando esto justo ahora?!

-(Mai) Estamos todos reunidos en la ciudad, así como un gran número de la población estudiantil del país, nuestra convergencia sin duda seria factible, pero sumar la presencia de ese monstruo, eso es algo que no se puede calcular.

-(Haruka) Estamos en problemas, ya no podemos confiarnos ni un segundo.

-(Kazuma) Deberíamos buscar un escondite, o dimitir de nuestras participaciones en los eventos, si ella nos ve, estaremos condenados.

-(Marcus) Seria mas sospechoso si todos renunciamos, podría correr la información y ella tendría vía libre para identificarnos a todos.

-(Tsukushi) ¡Estamos acorralados! ¡No podemos irnos y no podemos seguir! ¡¿Qué vamos a hacer?!

-(Kazama) No entrar en pánico mi pequeño amigo, podría ser una manera de empezar.

-(Tetsuya) Él tiene razón Tsukushi, de nada nos servirá pensar en lo peor, tampoco podemos dar señales que sean obvias. Aunque temo decir que tienes razón al referirte que estamos acorralados.

-(Takashi) No deberíamos ponernos de esta forma. Ya no somos los niños pequeños que éramos cuando estábamos en ese lugar. Ella ya no tiene control de nosotros, no hay que temerle, no aquí, no ahora.

-(Saya) Vaya, hablaste de forma muy madura, casi no te reconozco.

-Exacto, por eso propongo que nosotros tomemos el control de la situación ahora.

-(Nana) ¿Qué estas diciendo?

-No tiene idea de nosotros y anda de incognito por lo que entiendo, ¡Podemos atraparla nosotros, neutralizarla y si es necesario, podemos acabar con ella! ¡Cobraríamos venganza por todo lo que nos hizo ese demonio! La golpeare en la cabeza con mi bate y ya inconsciente podremos deshacernos de ella.

-(Saya) Y ya volvió a ser el mismo de siempre.

-(Tetsuya) Hermano, no podemos hacer algo como eso.

-Por favor, no finjan, todos han pensado en vengarse de la reina roja en múltiples ocasiones y también todos la quieren muerta tanto como yo.

-Eso es verdad, pero…

-Hablo en serio, podemos acabar con ella y ser libres por fin, ya no tendríamos que vivir miedo todo el tiempo. Solo miren a Shoyo, normalmente esta alegre, brillando y hablando sin detenerse y ahora el pobre esta tan afectado que sigue sentado ahí abrazándose a si mismo.

-No me metas en tus debates, Takashi. Ya tengo bastante con intentar calmarme a mi mismo.

-(Kageyama) Shoyo… en serio te pone mal todo esto, ¿Cierto?

-Solo quiero que se vaya de aquí, que se aleje.

-(Tetsuya) Igual que todos, ah. Escuchen, se que es tentador acabar con ella y terminar con nuestros problemas, pero tampoco es algo que sea simple de hacer.

-(Takashi) Pero solucionaríamos todo, hasta podríamos decirles a nuestros padres la verdad de nuestro pasado.

-(Mai) No creo que eso sea tan simple tampoco, ya tenemos aquí a cuatro personas que se enteraron hace poco, ¿Puedes imaginar el impacto que recibirán nuestras familias al saber la verdad? Y aunque nos libráramos de la reina roja en este momento, quizá alguno de ellos podría decir algo, esas palabras pueden ir de boca en boca hasta que lleguen a alguien mas en el laboratorio. Ella no trabajaba sola y seguro que alguien mas tomara el mando de las investigaciones.

-Analítica como siempre hermana, detesto esa parte de ti.

-(Haruka) Solo intenta ayuda, sabes que tiene razón. Por ahora hemos podido confiar en estos cuatro chicos, pero mientras más gente se entere estaremos en mayor riesgo. Mi amigo Makoto insistía en venir a acompañarme esta noche, me costo hacerlo desistir, una parte de mi quiere confiarle el secreto, pero también me preocupa que pueda mencionarlo a otros.

-(Aomine) Esto no nos esta llevando a nada, mas bien solo los tiene de regreso en el mismo punto.

-(Kagami) Deben tomar alguna decisión, también estar juntos en este momento puedo ponerlos en peligro.

-(Marcus) No es tan fácil chicos. Sus vidas no son las que están en riesgo.

-(Kazuma) Intenten llevar un pasado oculto durante diez años y entonces nos dicen que tan sencillo es llegar a una solución en este momento apremiante.

-(Konata) Quizá seria mejor que sigamos como de costumbre. Después de todo esa loca, no tiene idea de nosotros. Bastaría con solo tenerla vigilada, para poder mantenernos al margen y que no sospeche nada.

-(Tsukushi) Tetsuya dijo que estaba buscando a su hijo, en teoría no debería alejarse de los partidos de basquetbol. Por lo tanto, el resto deberíamos estar seguros.

-(Tetsuya) Los partidos tampoco son eternos, también debe estarse hospedando en algún lugar y aprovechar para pasear. Dudo que solo quiera estar tras Akashi las veinticuatro horas del día.

-(Saya) Con mayor razón podemos tenerla vigilada, mientras algunos están en sus competencias, otros pueden percibir donde se encuentra. De forma que podemos prevenir a los demás en caso de una emergencia.

-(Kageyama) Eso me recuerda, ¿No saben donde se encuentra en este momento? Quizá deberían empezar por ahí antes de seguir con la conversación.

-(Yuri) Cielos, es verdad, entre todo el pánico pasamos eso por alto.

-(Takashi) ¿Qué esperas Tetsuya? Hazlo.

-¿Yo?

-Eres quien mejor tiene el don, una vez que nos digas, será simple para los demás dar con ella.

-Bien, lo hare. Solo denme un minuto.

Kuroko comenzó a concentrarse buscando la presencia de aquella mujer, pensó que con la multitud de personas en los alrededores le tomaría tiempo, pero la encontró en apenas instantes, sembrando en su interior un gran terror al darse cuenta de la situación.

-¡Viene hacia acá por la calle principal!

-(Kagami) ¿Qué has dicho?

-¡Todos corran arriba! ¡Pasara frente nuestro!

-(Shoyo) ¡Detrás de ese muro! ¡Todos, deprisa, rápido!

Los hermanos corrieron de inmediato para ponerse a cubierta, siendo seguidos de los otros cuatro. Detrás del muro, ellos intentaban controlar su respiración, calmarse mutuamente y solo algunos tuvieron el valor para asomarse por encima de este. Marcus, Tetsuya, Saya y Shoyo, vieron entonces pasar por la acera a aquella mujer, la cual continuaba con su camino de frente, ignorando que su más preciada investigación estaba reunida al completo a escasa distancia suya. Shoyo se aterrorizo y volvió a esconderse mientras temblaba incontrolablemente, sorprendiendo a Kageyama que jamás imagino ver a su amigo en ese estado, sin saber como ayudarlo a calmarse. Los otros tres observaron como ella seguía su camino, alejándose del sitio y perdiéndose a la distancia, dejando que por fin pudieran respirar de alivio.

-Se fue, se ha ido, se esta alejando. Ya pueden tranquilizarse.

El resto de la familia estaba casi en el mismo estado de parálisis, pese a que los otros cuatro compañeros les hablaban, tratando de hacerlos volver en sí, no conseguían mayor efecto. Pues, aunque no la vieron, si fueron capaces de percibirla, rememorando terribles acontecimientos del pasado.

-(Kagami) Oye, Takashi, reacciona hombre, reacciona.

-Era ella… era ella…

-(Kazama) Tsukushi, ya se fue, dijeron que ya se fue.

-No quiero abrir los ojos, no quiero.

Saya y Marcus se sumaron a la ayuda, tratando de calmar el terror en su familia. Aomine se puso se pie y miro a Kuroko el cual tenía marcada la preocupación en su rostro al ver así a sus hermanos, pues en esta ocasión, habían estado en mayor riesgo que nunca, sintiendo que era su culpa por no estar atento.

-Tetsu… en verdad ella es un monstruo, ¿Cierto?

-…lo es -dejando salir una lagrima de su ojo derecho- ella lo es. Tsk… agth…

Sintiéndose rebasado por la emoción, se dejo caer de rodillas mientras ponía sus manos sobre los ojos. Su amigo se acercó a él, dándole un abrazo tratando de reconfortarlo. La mujer por su parte siguió su camino hasta llegar al hotel donde se hospedaba, mostro una amable sonrisa al personal antes de ir al restaurante de este, donde le entregaron su cena. Ella disgustaba con alegría la comida tras ver a su hijo triunfar de nuevo en los partidos, sin sospechar que, con su sola presencia, había echo colapsar a todo un grupo de jóvenes.

Continuara…

Ha sido un capitulo breve, pero creo que lo suficiente para retomar esta historia. Nos vemos en el próximo capitulo y agradezco de ante mano a cualquier lector que este por ahí dándole una oportunidad a este fanfic.