Bendiciones para este lanzador de tomates

Al día siguiente, Louise se despertó y lo primero que vio fue que había otra cama en su habitación, al inicio no fue capaz de saber por qué estaba eso ahí, luego vio a aquel joven durmiendo a pierna suelta en la otra cama, con una "carpa" en la parte inferior de su cuerpo, que se erigía solemnemente como gran pilar, producto de su erección matutina.

-Estúpido familiar, se supone que el debería despertarme, ¡no al revés!- ella grito internamente antes de apuntar su barita hacia el joven durmiendo, por supuesto, desistió de usar magia, en el poco tiempo en que había conocido a su "familiar" había aprendido que, probablemente, sería contraproducente agredirlo, odiaba admitirlo, pero, su familiar era demasiado terco y orgulloso para ser un plebeyo, aun que, desde que Kazuma usa magia, eso lo calificaba para ser un noble, solo le faltaba la nobleza, dignidad y los malditos modales.

-Pero, ¡mi orgullo como noble me impide dejarlo hacer lo que quiera!- acto Seguido Louise tiro de las sabanas con todas sus fuerzas hasta hacer caer a Kazuma de la cama.


Desperté abruptamente cuando sentí que mi rostro golpeo algo duro, obviamente había caído de la cama, eso no había pasado nunca antes, así que supongo que supongo que alguien me tiro de la cama, lo cual ameritaba una venganza

-¡Sea quien sea me las pagara!- grite eso y me levante, no estaba en mi habitación, era un lugar desconocido, -Donde… ah, ya recuerdo, fui invocado a otro mundo…- mire a mis alrededores y vi a una Loli rosa durmiendo plácidamente en su cama, tal vez me caí solo, en fin, supongo que la despertare, aún es temprano pero tengo hambre.

-Oye Louise, ¡despierta!- la moví un poco hasta que ella abrió los ojos y se levanto

-¿Qué ocurre? ¿Quién eres?- ella pregunto somnolienta

-Levántate, ¡tengo hambre! ¡Y no sé dónde está la cocina o el comedor!-

-Ah, eres el plebeyo que invoque- ella dijo eso, luego me señalo hacia una armario con su nariz –Pásame algo de ropa de ahí-

En un inicio pensé en negarme, pero, no todos los días una chica te pide que metas tu mano voluntariamente en el cajón de la ropa interior, así que solo le seguí la corriente por ahora, saque unas bragas rosas y se las arroje.

-¿Qué crees que estás haciendo? ¡Se supone que debes vestirme! ¡Un noble no se viste solo cuando hay un sirviente cerca!-

Esta mocosa, voy a darle una lección, no, espera un momento, esto podría ser algo bueno después de todo, ella me señalo para que la desvistiera.

-¿Estas segura? Soy un hombre, ¿sabes?-

-¿Hombre quien?-

-¡Yo!-

-Solo eres un familiar, aunque seas humano, no podría verte como hombre-

Por un lado, ese comentario podría ser hiriente, pero, en estos momentos tenía otro objetivo más allá de simplemente defender mi orgullo, aunque siempre acudí al servicio de Súcubos, nunca tuve la oportunidad de mirar más detalladamente el cuerpo de una mujer, Darkness no cuenta, estaba oscuro.

-Oh, gran ama, ¿cómo debo proceder? - dije eso a modo de burla, pero, no es como si esperaba a que ella se diese cuenta de ello

-Hoy estas cooperando bastante- ella dijo eso mirándome con sospecha – ¿ya te entro algo de sentido común? -

No dije nada, simplemente asentí, temía que, por accidente dijera lo que realmente estaba pensando, ella me ordeno desvestirla y con mucho gusto procedí a ello, ella durmió con su uniforme, asique estaba arrugado y debía usar otro, desprendí su blusa al tiempo que sentía que mi corazón bombeaba con fuerza, echaba algo de vapor por la nariz, aun que quede algo decepcionado de que, increíblemente ella fuese más plana que Megumin, no había mucho que ver, luego le baje la falda y las bragas, me detuve fijamente en la zona de su entrepierna y la observe detalladamente de frente, luego retrocedí un poco y me puse de pie, la mire detalladamente de pies a cabezas, por supuesto, no desaproveche ni una sola oportunidad para rozar sus pezones con mis dedos, o su entrepierna tocando con mi pulgar un diminuto montículo en la parte superior, creo que ese sería el clítoris, también presione mi dedo en su abertura a través de sus bragas, ese se hundió ligeramente hacia a dentro, la sensación de calor y humedad fue grandiosa, creo que con esta experiencia, los sueños que provocan las súcubos serán aún más reales que antes.

-Que, ¿Dónde crees que etas tocando? ¿¡que tanto estas mirando!?- ella se cubrió

-Solo soy un familiar, solo ignora mi mirada, además, es normal que te toque mientras te cambio, solo es un accidente- dije eso con cara seria o al menos eso intentaba, aunque probablemente estaba haciendo alguna case de sonrisa tonta mientras movía mis dedos, pero ella no se lo trago, y comenzó a arrojarme todo lo que tenía a mano hasta que Salí de la habitación.

-idiota!- ella me grito luego de que cerré la puerta, era una lástima que probablemente no me dejara hacer eso de nuevo, aunque cumplí me objetivó de grabar su cuerpo desnudo en mi memoria, y hacer que me vea como hombre y no una mascota.


Perspectiva de Louise

-Ese estúpido y pervertido familiar- Louise se quejó para sí misma, probablemente el solo "coopero" esta mañana sabiendo que podía tomar ventaja para mirarla y tocarla, por otro lado y aunque nunca lo admitirá ella misma, se sentía un poco bien saber que era atractiva para el sexo opuesto, pero, -¿¡Por qué tiene que ser un plebeyo!?, no, ¡un mero familiar!

-Bueno, lo tire de su cama y fingí dormir, así que se lo dejare pasar esta vez-


Luego que mi "ama" se terminara de vestir, regrese a cambiar mis ropas a la habitación, solo traje un juego de ropa, probablemente, debería haber traído as, pero se darían cuenta, no, esas inutiles no se darían cuenta… en fin, traje también la máscara que compre de Vanir, no es que esté pensando hacer de ladrón caballeroso en este mundo, o al menos no por el momento, simplemente la tomé, también traje un manto negro iba a usar la próxima vez que trabajara con Big Boss.

Me pregunto si podría hacerme pasar por un noble de este mundo si lo hiciera, bueno, no perderé nada solo con probármelo.

-¿Qué demonios estás haciendo?- Louise me pregunto al verme usar el manto

-Es ropa que pensaba usar para trabajar- Fue lo que dije, claro, no es como si de verdad fuera a decirle a que trabajo me refería.

-Tal vez, si lo uso pensaran que soy un noble y no tendría que lidiar con los caprichos pretenciosos de los nobles idiotas que se sienten superior a los plebeyos-

-Si te descubren, podrían ordenar que te corten la cabeza por intentar hacerte pasar por un noble-

-Pensándolo bien, creo que mejor guardare esto para otra ocasión-

Unos minutos más tarde, entramos en un gran comedor, había tres mesas largas, llena de un banquete digno de la nobleza, aunque, no se comparaba al banquete que hubo en la capital Real Beirzeg, luego de que regresamos con Iris del país vecino, así que no estaba tan impresionado.

-Deberías estar agradecido, este es el comedor de Brimir, solo los nobles tienen permitido comer aquí, pero, gracias a una petición especial mía, se te permitirá entrar- Louise dijo en su típico tono arrogante.

-Pues, luego de comer con Iris, en el comedor real del Castillo de Beirzeg, no estoy muy impresionado- dije eso cruzando mis manos detrás de mi cabeza, pude notar que ella se puso tensa, juraría que vi una vena hincándose en su cabeza

-Tu sí que sabes cómo arruinarme el humor- ella dijo eso apretando los puños, pero camino sin detenerse hasta llegar a su lugar, pude notar las miradas de los demás estudiantes sobre nosotros, y algunas burlas, obviamente hacia mí, lo cual me hizo considerar seriamente en arruinar su desayuno, pero, como japonés y como alguien que ha pasado por la pobreza, desperdiciar comida es imperdonable. Louise se quedó parada a un lado de la silla donde iba a sentarse

-Si que eres descortés…- Ella dijo eso, intuí que esperaba a que retirara su silla para que se siente, bueno, lo cortés no quita lo valiente, así que lo hice, en ese momento me fije que había un plato en el suelo, y tuve una premonición, así que me gire para ver si habían más, y no, este era el único, entonces, repentinamente me sentí molesto, me acerque al oído de Louise.

-Solo para estar seguro, no esperaras a que coma en el suelo, ¿verdad?- Dije eso sonriendo, pero claro, mis ojos no estaban sonriendo para nada, ella se puso rígida

-y tampoco habrás pensado en darme solo un pedazo de pan duro, ¿verdad?- ella simulo silbar mientras volteaba hacia otro lado.

-Digo, siendo como soy, podría enojarme bastante por ese trato, tal vez decida hacer un espectáculo con mi "steal", me pregunto, cuantos segundos tardaría en dejarte totalmente desnuda en frente de tus compañeros-

-Cc, claro que no, yo iba, em, decirte que vayas a la cocina- Ella dijo eso con voz temblorosa, obviamente estaba mintiendo, aunque, no me molestaría tomar venganza por este trato, eso retrasaría mi desayuno, así que lo dejare pasar por ahora.

Decidí irme a la cocina, tal vez me encuentra a Siesta y pueda conversar un poco con ella, cuando me disponía a salir tropecé con un noble de pelo castaño, o más bien, el tropezó con mi espada

-Que plebeyo más mal educado, ¡encima que esta en este lugar sagrado! ¡Osa traer algo tan sucio y vulgar como una espada!-

-oh, lo siento, me siento desnudo si no la llevo conmigo- dije eso para intentar evitar un conflicto inútil y poder seguir mi camino

-¿Que eso? ¿Acaso no piensas pedir perdón, suplicando de rodillas como se debe?-

Este maldito…

-Louise, deberías enseñarle modales a su familiar- Esta vez lo dijo el rubio de la noche anterior

-veo que no solo eres Zero en la magia, si no también Zero en educación- esta vez hablo una pelirroja morena con unos pechos más impresionantes que los de Darkness

-¡Por algo es Louise la Zero!- alguien más agrego y estallaron las carcajadas, por otro lado, la mencionada estaba con la cabeza agachada totalmente roja, no estaba seguro si ella explotaría y usaría magia explosiva en el comedor o solo se quedaría ahí recibiendo los insultos.

Sentí una comezón en mi mano izquierda, y comencé a sentirme muy enojado, no me extrañaría si Louise se volviera un hikikomori, supongo que le daré una lección

Tome un pedazo de pan de una de las mesas y se lo metí en la boca, preciándolo hasta su garganta, el comenzó a retorcerse esforzándose por respirar

-¡Hmmm!-

-Cierra esa maldita boca, ¿acaso no tienes modales? estás molestando a los demás- lo sermonee burlándome y seguí caminando.

Por supuesto, mi acción causo diversas reacciones, desde carcajadas, hasta indignación, decidí no prestar atención y continuar mi camino hacia la cocina

-Tu, plebeyo… ¿¡Como te atreves!?- ese noble idiota grito cuando estaba por marcharme, me di vuelta y el me apunto con su barita

-Mierda-

-¡Te desafío a un duelo!-

-okay- sin decir nada más tome otro pan y le di en la boca con [snipe]

-¡hmmm!

-¡Yo gano!-

El público estallo en carcajadas, eso me hizo sentir bastante bien.

Aparentemente me había ganado a la mayor parte de los presentes, o eso creí

-¡Escoria!-

-¿¡Como te atreves a hacerle eso a Albert-sama!?

-¿¡Porque no peleas en un duelo justo!?-

-¡Cierto! Albert-sama solo estaba retándote, ¡no estaba listo para el duelo aun!-

Un grupo de chicas salió en su defensa, pero no tengo por qué escucharlas, así que continuaré mi camino a la cocina.

Entonces una mano se posó en mis hombros y me detuvo

-entonces, ¿piensas huir?- es el rubio de la noche anterior, creo que le llamaron Guiche o algo así.

-No tengo por qué pelear de nuevo, no hay ninguna recompensa para mí si lo derroto- dije eso y aparte su mano.

-¿Y si hubiese un premio?-

-Soy rico de todas formas, es más, soy tan asquerosamente rico que le presto dinero a los nobles- dije eso con confianza, incluso podría comprar un pequeño país, eso último fue una exageración, pero la mayor parte era cierto, aunque probablemente nadie creyó mi declaración.

Antes de que alguien intentara desmentirme, aproveche que una sirvienta estaba cerca y la llame.

-Kazuma-san, ¿necesitas algo?- Siesta me saludo haciendo una reverencia

-Quería agradecerte por ayudarme a conseguir la cama ayer- dije eso y saque una bolsa de cinturón y se la coloque en sus manos

-¿Qué es esto?-

-Es solo una forma de agradecerte por tu ayuda ayer, no son monedas de este país, pero estoy seguro de que valen algo-

Siesta reviso el contenido.

-Son monedas…¿¡de oro!?- ella estaba muy sorprendida –Aunque nunca he visto este diseño antes, de hecho nunca vi una moneda de oro de este país de cerca antes-

-Bueno, son de mi país, son de 24 quilates así que deben de valer algo-

-ve, ¿¡veinticuatro quilates!? ¡Pero hay al menos veinte monedas aquí! ¡La cama no valía tanto! No puedo aceptar es-

-Shhh- coloque un dedo en sus labios, ella obviamente se sonrojo –no te preocupes, es solo una pequeña muestra de mi aprecio, además, estoy esperando a que puedas guiarme a la cocina, aún no he desayunado-

Siesta asintió con la cabeza, entonces quite la mano de Guiche de mi hombro.

-Si me disculpas, tengo cosas que hacer-

El abrió su boca, luego la cerró nuevamente, repitió eso un par de veces hasta que se rindió y regreso a su lugar.


++Perspectiva de Louise+++

Louise presenció todo que había hecho su familiar, en un principio se sintió avergonzada y molesta por las burlas de sus compañeros, y de aquel idiota de Albert, pero luego de que vio como su familiar lo hizo callar con un pedazo de pan dos veces, sintió una extraña satisfacción, no es que estuviese agradecida con su familiar o que repentinamente le agrade más, no, ella sentía que su Familiar era la escoria de la escoria, pero, él no era falso, el definitivamente mostraba sus verdaderos colores sin tapujos, un plebeyo, no algo peor, alguien que golpearía a una mujer si la situación lo amerita, él era basura.

"Tal vez debería llamarlo bazuma"

Louise rio internamente ante eso, luego sigo disfrutando su desayuno, ignorando los murmullos de los demás estudiantes en el comedor.


Más tarde

Crei que las cosas se calmarían un poco para la tarde, lamentablemente no fue así, el dia de Hoy, Louise no tenía clases, todos los de segundo debían pasar la tarde con sus familiares para "reforzar vínculos"

En otras palabas.

Una mierda.

Bueno, no es como si quisiera estar en una clase aburrida de todos modos, pero tampoco es que esta situación me agrade del todo.

Albert, había hostigado a Siesta para molestarme, realmente los nobles son basura, aunque, no es que yo sea mejor.

Normalmente no me molestaría en preocuparme por otros, pero, Siesta había sido amable conmigo y ella se convirtió en objetivo debido a que me llevaba bien con ella, así que acepte el duelo.

Albert estaba a unos diez metros de mí, y había varias chicas apoyándolo, eso me molesta así que lo derrotare rápido y sin dejarle hacer nada.

Por supuesto, Louise protesto.

-¿¡En qué demonios estás pensando!?- ella me grito en un lugar apartado de la academia que no era casi frecuentado por nadie.

-Ese sujeto hizo que Siesta tropezara apropósito, uso magia para hacerla caer en mas de una ocasión, definitivamente no puedo perdonarlo-

-Es cierto que Albert es basura, ¡pero sigue siendo un noble! ¡Ademas es un mago triangular!-

-¿triangu que?-

-Significa que puede combinar tres elementos, ¡podría decirse que es un prodigio!-

-Solo tengo que tomar su barita con mi Steal y todo estará acabado-

-Ese truco "steal" me digiste que roba algo aleatorio, ¿que pasa si no logras obtener su barita?-

-oye, mi profesión es de aventurero, pero también se usar magia avanzada, ¡definitivamente no voy a perder-

-oh, ¿con que magia avanzada? ¿estás seguro que no lo soñaste? Digo, que uses magia sin barita es increíble y todo, pero, todo lo demás suena absurdo-

-…..-

-Supongo que debo mostrarte para que me creas-

Hice que una sirvienta me traiga una Sandia grande, normalmente son caras y solo esta destinada para los nobles, pero le di 2 monedas de oro para que permita quedármela.

-gracias realmente me has salvado-

-No hay de que, Kazuma-sama es un placer hacer negocios contigo- ella dijo sonriéndome, esta chica se llamaba Alexandra, al igual que Siesta también tiene el elo negro y grandes pechos, ¡me pregunto si será mitad japonesa? En fin, se lo preguntare en otro momento.

Luego de que Alexandra se retiró coloque la sandía sobre una roca.

-¿qué piensas hacer con esa cosa?- Louise me pregunto

-Te mostrare una magia verdaderamente impresionante- Realmente me gustaría poder usar Explosion pero no soy tan irracional como Megumin, asi que usare algo que aprendí de Yun Yun.

Debido a que mi profesión no es de "mago o archi-mago" no puedo simplemente mejorar la magia que aprendo, así que cosas como "conjuracion rapida" o aumentar la potencia de la magia es más complicado, si quiero que el hechizo sea más fuerte debo poner más mana en él, mientras que si fuera un arch-imago, la magia seria más fuerte sin necesidad de que yo invierta mana de forma consiente.

[Light of Saber]

Un relámpago blanco salió de mis manos y cortó la Sandía a la mitad, por supuesto, también partió la roca y parte del suelo.

-¿¡Que demonios fue eso!?-

-Es magia avanzada, se supone que es para matar monstruos fuertes-

-Si usas eso, ¡definitivamente lo mataras! ¡lo prohíbo!-

-pero…-

-¡Nada de peros!-

-….-


Es por eso que tuve que cambia mi estrategia, antes de venir aquí, aproveche cuando nadie me veía para utilizar (Blessing) para mejorar mi ya buena suerte, y (Buff) para mejorar mis atributos físicos, claro, podría utilizar magia avanzada y acabar rápido esto, pero, incluso si la uso solo para intimidar, no quisiera decapitar a alguien erróneamente por usar [Light of Saber] claro, esa no era la única razón, tenía un plan para humillar a este chico.

-¿realmente piensan hacer esto?- Louise pregunto parándose entre él y yo.

-Bueno, no es como si yo hubiese iniciado esto- me encogí de hombros –el ataco a Siesta sin razón-

-Es por que no le enseñaste modales a tu plebeyo- Albert rugió, a lo que una vena se hincho en la cabeza de Louise, pero no dijo nada, en cambio Albert siguió. –Si tanto te preocupa tú plebeyo, deberías haberlo educado mejor- el continuo.

-ah~- Louise suspiro luego me miro –por favor, no mates a este tonto- ella dijo eso.

-No lo matare si me suplica de rodillas- Albert dijo, a lo que Louise hizo una cara de confusión, claro, ella no explico nada y simplemente se retiró.

¡Comiencen!

EL noble idiota inmediatamente saco su varita, justo como había previsto, iba a conjurar un hechizo.

[Snipe]

Arroje un tomate podrido a su rostro antes de que lograr conjurar su hechizo.

-Que, ¿qué demonios estás haciendo?- él se quejó con el rostro furioso en medio de las carcajadas de los demás estudiantes.

-Los nobles usan magia, es obvio que yo, que no puedo (no me dejaron) utilice lo que está a mi disposición- dije eso

-Tiene sentido con lo que dice- dijo uno de sus compañeros.

-vamos, no seas mezquino, deja que los use-

-¿Pero porque tomates podridos?-

-Tal vez ustedes los nobles no lo sepan, pero es malo desperdiciar comida- dije eso y arroje otro tomate certero a su rostro con (snipe)

-Deja de hacer eso, ¡cobarde!- él dijo eso e intento conjurar de nuevo, pero recibió otro tomatazo en la cara.

-¡Eso es ruin!- dijo repentinamente una de sus admiradoras.

-¡Pelea justo! ¡cobarde!- dijo otra chica

-¿acaso no tienes honor?-

-¡Escúchenme bien mocosas! ¡Estoy siendo piadoso con él! -

Ellas comenzaron a insultarme y me vi tentado a utilizar "créate wáter" y "freeze" sobre ellas, o quizás solo el "Steal", pero dejare eso para más tarde.

-Pensaba ir suave contigo, pero, si quieres que use mi espada en lugar de tomates- dije eso y desenvaine mi espada.

El sonrió, claro, él tenía la ventaja de rango ahora, en teoría el podría conjurar algo antes de que yo logre alcanzarlo.

Por supuesto, yo sonreí con malicia e hice un amague, como si fuese a arrojársela a la cara, y él se cubrió instintivamente, fue extraño, en ese momento sentí mi cuerpo extremadamente ligero, incluso más que cuando utilice "buff", cerré la distancia entre nosotros en unos segundos y golpee su plexo solar con la empuñadura, el gimió abriendo la boca perdiendo el aliento, luego cayó al suelo.

¡Albert-sama! Sus admiradoras chillaron, pero, obviamente no me importo, y por supuesto, no me detuve ahí, metí el resto de tomates podridos que me quedaban dentro de sus pantalones y los aplaste.

-dime, ¿quién ahora es el inútil?- me burle de él, y obviamente, el resto de estudiantes estallo en carcajadas.

-La próxima vez, piénsalo dos veces antes de subestimar a un "plebeyo" -

Louise se acercó a Albert y lo miro hacia abajo

-por eso te dije que no lo hicieras- ella dijo eso con una sonrisa, claro, ella internamente estaba riéndose de él, probablemente.

-¡Eso fue trampa!-

-¡Si! ¡Albert-sama no perdería con alguien como tú!

-¡Cobarde!-

-¡Escúchenme muy bien! ¡Con mucho gusto también peleare con ustedes! - dije eso y ellas endurecieron la mirada –Como defensor de la igualdad de género, no me contendré con ustedes solo por ser mujeres-

-realmente eres escoria, ¡como era de esperarse de Louise la Zero! ¡Ni siquiera puede educar a su familiar!

-Cierto, es cero en magia, cero en ¡educación y también cero en pechos!- cuando una da las chicas dijo eso, sentí un aire frio a mi espalda, era Louise, voltee a verla y ella me sonrió brillantemente.

-Nee, Nee, Kazuma, Kazuma-

-Si, soy Kazuma-

-¿Podrías matar a esa perra? No, mejor usa tu espada y corta esas dos inútiles masas de grasa que tiene por pechos-

-Claro, será un placer- desenvaine mi espada y camine hacia ella, por supuesto, ellas intentaron usar magia, pero cerré la distancia en un instante y partí sus baritas con mi espada, ellas retrocedieron y cayeron al suelo por el susto, me acerque haciendo la sonrisa más siniestra que pude, las tres se desmayaron y comenzaron a echar espuma por la boca-

-Supongo que eso fue todo- dije guardando mi espada.

-Oye estúpido familiar, te dije que les cortes esas inútiles bolas de gasa- Louise se quejó.

-¿Espera que eso no era una broma?-

-¿Acaso me estoy riendo?-

-….-

Nota mental, nunca decirle pechos planos.

Me acaricie las sienes -Incluso yo no sería capaz de algo así- dije eso y respire profundamente, pensé en darle un sermón a Louise, pero un profesor llego rápidamente a calmar las cosas, y todos regresamos a "nuestras habitaciones".


Más tarde esa noche, Siesta me abrazo y me dio un beso en la mejilla, los demás sirvientes me felicitaron por darle una lección a esos nobles engreídos, no solo eso, incluso me invitaron una de las comidas más deliciosas que probé desde que llegue aquí, dijeron que la hicieron con las sobras de los nobles, pero, no me importo.

Siesta estaba sentada en la misma mesa que yo y me miraba con esos enormes ojos negros, ella me sonrisa, su sonrisa me purificaba el alma, no recuerdo que alguien, a parte de mi Hermanita Iris, me viera con esos ojos.

-Gacias por la comida- dije eso cuando me sirvieron otro plato.

-oh, no hay problema, después de todo defendiste a nuestra Siesta, le diste una lección a ese noble idiota y mostraste que los plebeyos no somos menos que los nobles- El chef dijo eso, luego se puso algo cariñoso conmigo, -¡tú eres nuestra espada!-

-Tengo que admitir que eso me hace un poco feliz, también avergonzado-

-encima eres modesto, Por favor, ¡déjame besarte!-

-Me rehusó rotundamente- aparte al chef con una mano

-Kazuma, ¿Dónde aprendiste a pelear asi?- Siesta pregunto

-Bueno, antes de ser invocado, yo era un aventurero-

-¿Un aventurero?-

-Supongo que no existen en este mundo, son gente que trabaja arriesgando sus vidas para eliminar monstros, o deshacerse de bandidos, explorar mazmorras, o enfrentarse al rey demonio-

-¿Rey demonio? ¿¡te estas burlando de mí!?- ella parecía ofendida

-¡Por supuesto que no! Vengo de un mundo diferente, aunque en mi mundo de origen no existían ni los aventureros ni los magos, luego de morir, reencarne en mi mundo anterior-

Ella me miro como si estuviera viendo a una basura mentirosa, entonces saque mi tarjeta de aventurero y se la mostré.

-¿Que es esto?¡no entiendo estas letras!-

-Es mi tarjeta de aventurero, sirve aprender las habilidades ya sea de espadachín o magia, no sé cómo funciona exactamente, pero gracias a eso pude aprender a usar magia.

Ella me miro inquisitiva mente, así que le mostré, apunte mi mano a un vaso que previamente tenia vino [CreateWater]

El vaso se llenó de agua y ella retrocedió, -¡eres un noble!-

-¿conoces a un noble que haya vivido en los establos o que haya trabajado como albañil?- dije eso mostrando mis manos llenas de cayos.

-pase mucho tiempo apenas sobreviviendo, es mas, ¡pase una semana sin comer adecuadamente para comprar esta espada barata!-

-Eso debió ser duro…-

-¡Por supuesto que lo fue! Tenia a una archipriest inútil como compañera que solo sabía arruinarlo todo, una maga de mierda que solo podía usar magia una vez al dia, y una señorita noble masoquista-

-….-

-Bueno, no es como si todo haya sido malo, luego de un tiempo logre comprar una mansión y convertirme en un exitoso comerciante-

-Suena a que te divertias-

-No voy a negar nada de eso, pero, en fin, ahora nada de eso importa, estoy atrapado en este mundo-

-Bueno, no puede ser tan malo, quizás encuentres el amor aquí- ella dijo eso de forma sugerente, claro, seré un virgen de mierda, pero, no voy a fingir que no sé a qué se refiere.

Tome sus manos y la mire a los ojos –Si fueras tú, yo podría…-

-¿¡Con que aquí estabas!?- Louise grito repentinamente, y me arrastró de la oreja -¡He estado buscándote por dos horas!-

-¿Oye que paso con eso de dejarme tener mi vida privada? ¿No me vas a decir que ahora te enamoraste de mí y esta celosa?

-¿Quién demonios podría amarte? ¡El director nos mandó a llamar!- ella grito con la cara enrojecida y continuo arrastrándome fuera de la cocina.

Fin del capitulo.

Tenia esto semi preparado ahce dos semanas, pero no termine de convencerme, asi que lo reescribi varias veces hasta que me quedo, mas o menos acorde a la actitud de cada personaje.

No, Kazuma no se dejara mangonear todo el tiempo por Louise, no he decidido parejas, pero, tengo pensado en que almenos la "relación" de Louise y Kazuma esté basada en insultos y agresiones mutuas, orgullo e intimidación, Kazuma no es un imbécil todo el tiempo, asi que en ocaciones sedera, pero, tampoco se dejara pisotear, y citando sus palabas "no se dejara golpear por una mujer celosa que no admite sus sentimientos-

Louise, bueno, ella es orgullosa, y si, ella le tiene algo de miedo a Kazuma, pero, su orgullo le obliga a no dejar que se salga con la suya todo el tiempo.