Ni Glee ni sus personajes me pertenece, solo esta historia.

Advertencia Rachel G!P.


Caso 1425 DE LA FISCALÍA.

Nombre de nacimiento: Brittany S. Pierce.

Género: Femenino

Edad: 28

Fecha de nacimiento: 16 de abril de 1987.

Altura : 1.73

Lugar de origen: Thousand Oaks, California.

Nacionalidad : Estadounidense.

Fecha de ingreso: 25 de abril de 2014.

Delito: Homicidio.

Declarado (a) por el (ella) mismo : Inocente.

Declarado (a) legalmente: Culpable.

Abogado defensor: Mike Chang.

Pena o condena a cumplir: 8 años 6 meses.

Fecha de liberación: 23 de abril de 2022.


Prisión Estatal De Folsom.

No pareces muy feliz por tu visita rubia — comentó Annie mirando fugazmente a Brittany, la rubia solo alzó los hombros — mira rubia, como ya sabrás, yo tengo muchos amigos en los juzgados, y por ahí me enteré, que están preparando una liberación para este reclusorio, o sea, no me quiero adelantar a los hechos pero, tal vez sea tu liberación — Brittany la miró en seguida.

¿Tú crees? Pero hay muchas reclusas aquí, tal vez se trate de alguien más — dijo resignada.

El único abogado que ha estado apelando el veredicto del juez es Mike Chang, nadie más.

La rubia no dijo más, llegaron a la sala y se acercaron a la mesa donde se encontraba el abogado.

¡Que felicidad me da verte rubia! — habló el chico emocionado — cada vez te ves más linda — esto sonrojó a Brittany.

¡Hola Mike! — lo abrazó — ¿Como están todos? ¿Tina, tus hijos? — trató de no mencionar a su propia familia.

Ellos están muy bien rubia ¿Tú cómo estás?

Bien, no es tan malo el lugar, además, tengo muchas amigas aquí adentro — sonrió — bueno, si hay algo malo, la comida — susurró acercándose a él — es horrible.

Bueno pues déjame decirte algo rubia, en un mes ya no tendrás que comer eso — dijo esperando una reacción por parte de la rubia.

¿Vendrás a traerme comida todos los días? — preguntó dudosa.

El chico rió.

No Brittany, gané el caso, ¡en un mes serás libre!

Ay por dios es una ¿broma? — se levantó sorprendida — Chang si esto es una broma te golpeo ¡Lo juro!

No estoy bromeando rubia, por fin logré que el hotel entregara los vídeos de las cámaras, que la familia había mandado a quitar, así que, no hay mejor prueba que un vídeo ¿Cierto?

Entonces ¿Soy libre? — preguntó apunto de llorar.

Aún no, pero este lunes, tendrás un llamado de la corte, dónde se mostrarán de nuevo las pruebas, y el vídeo dónde se muestra que eres inocente.

¿Tendré que enfrentar un juicio de nuevo?

Me temo que si Brittany, pero con la diferencia, de que ya no serás juzgada, te darán la fecha de liberación, que yo calculo, será en menos de un mes.

¿Y ya? ¿Eso es todo? — cuestionó.

Bueno, lo más probable es que tu libertad sea condicionada por unos cuantos meses, pero eso es lo de menos.

¿Por qué siento que hay algo que no me estás contando Mike? ¿Pasó algo más con mi caso? — Mike la miró con culpa, nervioso aflojó un poco su corbata.

Tu caso está muy bien Brittany, prácticamente está resuelto.

¿Y qué es lo que no me estás diciendo? — comenzaba a angustiarse — ¡habla Mike!

Dios Brittany, no sé cómo decirlo — respiró profundo — es sobre el otro caso.

¿Que pasa con el? — la rubia se sintió asfixiada.

Pues, cuando supo que había ganado la apelación, y se habló de semanas para una posible liberación, decidió continuar con la demanda, la cual la ganó en una semana, aparte puso una orden de alejamiento en tu contra.

no puede ser — susurró sin poder creer lo que escuchaba, en seguida se llenó de ira — te juro que la mato.

Caminó a la salida tumbando todo a su paso, iba hecha una fiera.

¡Brittany detente! — quiso detenerla pero se topó con Annie.

Abogado usted no puede entrar, no es seguro — dijo deteniendo al chico con algo de fuerza.

Debo detenerla o cometerá una locura — su rostro reflejaba pánico — La subdirectora — dijo de repente — quiero verla, es urgente.

Ella está en su oficina, pero no creo que pueda recibirlo sin cita previa.

Por favor señorita, tengo que ir con ella antes de que ocurra una tragedia — habló desesperado — por favor.

De acuerdo venga conmigo — caminó por delante a pasos agigantados, sabía que algo andaba mal — solo espero que no se niegue a recibirlo.

Llegaron casi corriendo a la subdirección, a la celadora no le importó nada y abrió de golpe sin avisar, total, después recibiría su acta.

Quinn quien leía unas hojas se asustó por la entrada de los chicos.

¿Que demonios Annie? — dijo al ver entrar a la celadora — ¿Mike?

Perdón subdirectora, pero es algo urgente, el abogado quiere hablar con usted — se giró para mirarlo.

Ambas esperaron a que el chico recuperara el aliento.

Quinn tienes que detenerla — dijo con trabajo — iba furiosa, y se que algo malo va a pasar.

La rubia no preguntó más y salió de inmediato, Mike miró a la celadora preocupado quien también se fue detrás de la rubia.


Patio de la prisión…

Era un día tranquilo en el patio, la mayoría de reclusas se encontraba en la sala de visitas, sólo había unas cuantas jugando baloncesto y otras más se encontraban conversando en una de las mesas de concreto, entre ellas estaba, Rachel, Danielle y Mercedes, quienes reían por las anécdotas que escuchaban en el grupo.

Más al fondo en otro grupito, se encontraba la oficial Santana López junto a dos celadora más, quienes hablaban de trabajo, las demás celadoras estaban adentro, encargándose de las visitas.

Todo pasó tan rápido.

Nadie se percató de cierta rubia que llegó roja de coraje.

En cuestión de segundos la espalda de la oficial López fue estampada contra la malla con la que estaba cercado el patio.

¡Eres una hija de perra Santana López! — gritó viendo como la oficial se recuperaba del empujón — Eres la persona más despreciable que he conocido en mi vida López.

En seguida se fueron acercando las reclusas y se pusieron alrededor para ver el espectáculo.

Danielle fue la primera en llegar a la rubia para acercarse pero la celadoras se fueron encima de la rubia, tratando de someterla.

¡No me toquen!— las empujó — o no respondo de mí — todas miraban sorprendidas a la rubia, esa chica no parecía ser Brittany — ¿Como te atreviste a hacerlo?

Brittany tranquila, será mejor que nos vayamos de aquí — dijo Mercedes quien junto a Rachel ya estaban a lado de las otras dos.

De ninguna manera Mercedes, es hora de que esta mujer y yo aclaremos unas cosas — no le quitaba la mirada de encima, una mirada cargada de odio.

Rubia no es el momento ni mucho menos el lugar, vámonos — esta vez fue Danielle la que trató de persuadirla.

Eso Pierce, mejor obedece a tu amorcito — escupió con rabia la oficial.

Danielle se le echó encima pero una de las celadoras se puso en medio.

No Danny, no vale la pena que te metas con una mujer como esta — Brittany tomó a Danielle del brazo.

Esto enfureció a Santana López.

¿Una mujer como esta? — preguntó sarcástica la latina — dinos Pierce ¿Como es una mujer como esta? — la provocó — O mejor aún, dinos cómo es una mujer como tú — se paró a centímetros de la rubia pero esta no dijo nada — ¿Que pasa? ¿Ya se acabó tu momento de valentía? Muy bien, pues entonces seré yo la que les diga a estas personas, como es una mujer como tú — sonrió.

No se atreva oficial — Danny quería golpearla en ese momento, y estaba segura que lo haría si la oficial decía algo que perjudicara a Brittany — No diga cosas de las cual se vaya arrepentir.

¿Arrepentir? — rió — la que se va arrepentir, será otra — no dejaba de ver a la rubia — Porqué no nos cuenta reclusa la razón del porqué está aquí, cuéntenos qué hizo para ser detenida — la rubia agachó la cabeza — ¿Nada? Bueno, entonces lo diré yo.

Santana — lo que la latina vio en la mirada de Brittany fue súplica.

Sabía que se iba a arrepentir, pero estaba cegada por el coraje.

La señorita Pierce fue detenida después de que acabara con la vida de quien fuera su amante — prácticamente lo gritó pero sin mirar a Brittany, ya había dado ese paso, ya lo había arruinado — Diles Brittany, diles como después de revolcarte con tu amante lo asesinaste para que no te echará de cabeza.

Rachel y Mercedes se miraron, ese era el secreto de Brittany, pero no entendían que tenía que ver ahí la oficial

Comenzaron los murmullos entre las presentes y Brittany las miró, con vergüenza.

Yo no lo maté Santana — comenzó a llorar.

La oficial se sintió ablandarse.

Ah claro ¿me vas a decir que tampoco te acostaste con el? — preguntó

Es suficiente oficial — la subdirectora apareció junto a Annie, pero sentía que había llegado muy tarde — la quiero en mi oficina ya mismo — ordenó.

Aún no termino Fabray — los murmullos se hicieron más fuertes.

Rachel se acercó a la rubia con súplica, sí definitivamente había llegado muy tarde.

Le repito oficial, es una orden.

Responde Brittany — siguió Santana ignorando a la rubia — ¿me vas a negar que mientras estabas casada conmigo y yo trabajaba para darte lo mejor, tu te revolcabas con ese imbécil? ¿me vas a negar que te convertiste en su puta? — lo que no vió venir la latina, fué la cachetada que Brittany le propinó.

Sobaba su mejilla incrédula.

Por inercia y conociendo a la oficial, Annie se puso en medio de la pareja para evitar una reacción de su jefa en contra de Brittany.

No es necesario eso Annie — esta vez fue Quinn la que habló — No creo que la oficial se atreva a pegarle a la madre de su hija ¿o si oficial? — todas abrieron la boca sorprendidas.

Ella no se merece ser madre — escupió con coraje y soberbia Santana.

Y no, esta vez no fue Brittany, esta vez fue la misma Quinn Fabray la que azotó la mejilla de Santana.

Lárgate Santana, y espero que nunca te arrepientas de lo que acabas de hacer — las miradas de estas dos echaban chispas

Dándole una última mirada a una Brittany destrozada, se fue sin mirar atrás.

Quinn trató de acercarse a Brittany, pero Danny llegó primero y la alejó de ahí.

Rachel quien estaba a su lado rozó su mano con la suya y la rubia se percató de la acción.

Ve con ella Rachel y no la dejes sola ni un momento, hazlo por mí — la morena sólo asintió y se fue tras las chicas — Annie, estaré en mi oficina pero no quiero ser molestada por nada ni por nadie ¿Puedes encargarte de eso?

Si señora, pero ¿Que va a pasar con la oficial? — preguntó.

No te preocupes, de esa me encargo yo — se fue con una sola intención.

Patear el trasero de su mejor amiga.


Celda de Danielle…

Ninguna de las chicas decía nada, se miraban unas a otras sin hablar.

La rubia lloraba sentada en el piso abrazando sus piernas.

Rachel y Mercedes estaban de pie cerca de ella.

Danielle optó por quedarse en la puerta, esperando a Annie, quien no se había aparecido por ahí.

¿Alguien puede decir algo? — preguntó Danny — tanto silencio me pone nerviosa — las chicas la miraron, excepto Brittany, quien no se atrevía a levantar la cara.

Entonces… ¿Tienes una hija? — preguntó la pequeña morena, le parecía increíble el hecho de que su compañera fuera mamá.

Brittany sonrió y Danielle también lo hizo.

Así es Richie, tengo una hija — respondió limpiando su cara.

se llama Susan, como ella — agregó Danny al ver que su amiga no dijo más nada — la oficial escogió el nombre.

Rubia, no quiero abrumarte con mil preguntas pero — se acercó Mercedes y se sentó a su lado — ¿Cómo es que alguien como tú, terminó casada con alguien como la oficial López?

Ay Mercedes, yo también me hago la misma pregunta — comentó divertida Danielle.

¿Por qué no nos hablaste de ello? — Rachel iba aprovechar el momento para saber más de la rubia.

Fue un acuerdo que hizo mi abogado con la fiscalía, yo no tenía que estar aquí Rachel, sino en un reclusorio de máxima seguridad, al igual que tú — dijo alzando los hombros — no sé qué pasó ahí exactamente, pero mi abogado logró evitar que me llevarán a ese lugar, pagaría mi condena aquí, pero no podía decir que estuve casada con la oficial.

¿Estuviste rubia?

Si Mercedes, Santana López y yo ya estamos divorciadas, por ley, no pude negarme a firmar el divorcio, aunque en realidad, fui yo quien lo pidió.

Creo que ellas necesitan saber más que eso Britt, se lo merecen — comentó Danny.

Brittany miró a sus amigas, y suspiró.

Tienes razón, merecen saber toda la historia, y juzguen si es que he pecado — Brittany se paró y se puso frente a las tres chicas, Annie llegó y se agregó al momento — Cuando tenía ocho años junto con mis padres nos mudamos a Los Ángeles, el mejor amigo de papá le había ofrecido un buen empleo, mucho mejor que el que tenía, a pesar de que nos mudamos , no los hicimos tan cerca de él y su familia, me tocó iniciar en otro colegio, y ahí conocí a Santana, desde el primer momento se volvió mi mejor amiga, ella cuidaba de mí, me protegía, no entendía cómo alguien tan ruda y popular como ella quería ser amiga de alguien tan tonta como yo, pero lo éramos, crecimos juntas, nos volvimos inseparables, y me enamoré de ella, así como ella se enamoró de mi, solo que, ella no se atrevía a aceptarlo, tenía mucho miedo, pero con el tiempo, ese miedo desapareció, nos hicimos novias, y fuimos a la universidad juntas, aunque distintas carreras.

Todo era increíble, su familia había aceptado su orientación sexual, y prácticamente vivíamos juntas, un día su hermano Santiago, fue a visitarnos, pero llevaba una chica que había conocido minutos antes, eso molestó a Santana, pues Santiago tenía novia, o según eso era lo que nos había contado su mamá días atrás.

El aseguraba que se trataba de la misma chica pero parecían desconocidos, esa noche la chica durmió en nuestro apartamento, y al día siguiente apareció otra chica, quien decía ser la novia de Santiago y quería darle una sorpresa, pobre, la sorpresa se la llevó ella cuando vio salir a Santiago de la regadera con aquella morena, fue un caos aquel momento, Santana terminó corriendo a Santiago y a la conquista, y solo se quedó la novia, pero estaba muy mal, Santana no la dejó irse en ese estado, se veía tan mal, y tan perdida, desde ese instante nos volvimos amigas las tres, inseparables más bien.

¿Por qué no nos dices el nombre de esa chica Britt? Creo que a alguien le va a interesar — dijo Danny.

Quinn Fabray, esa chica es Quinn Fabray — soltó mirando a Rachel quien estaba muy metida en lo que contaba la rubia — Tiempo después Santana me propuso matrimonio, ella estudiaba leyes y yo danza, a pesar de lo difícil que pudiera llegar a ser, ambas nos esforzamos por sacar adelante nuestra relación, de repente ella perdió el camino, se metió tanto en su papel de hermana mayor y sobreprotectora que comenzó a descuidar nuestra relación.

En la familia de Quinn ha habido muchos fiscales, y ella quería ser uno más, la primera mujer fiscal en la familia, entonces uno de sus tíos, le habló de este lugar, le dijo que sería un buen comienzo y que así subiría más pronto, que la política del lugar también la ayudaría, y aceptó, se vino al condado y comenzó a trabajar aquí, como la subdirectora, nos veíamos poco por la distancia y nuestros trabajos, entonces le comentó a Santana de una vacante como celadora, y como estaba sola aquí, Santana no lo pensó dos veces y aceptó el empleo, sin siquiera preguntarme si era esto lo que yo quería , y no me mal intérpretes Rachel, yo adoro a Quinn, pero yo también tenía mis sueños por cumplir, y los dejé por seguirlas — agregó al ver a Rachel un poco confundida — cuando nos mudamos, fue peor, se dedicó a ganarse el puesto que tiene ahora, ya que en aquel entonces, la oficial a cargo estaba apunto de jubilarse.

Yo por mi parte, conseguí un buen empleo como maestra de baile en un colegio privado, me pagaban bien, a ambas, aunque a mí me iba mucho mejor, pero seguía sola, el estar en el colegio se despertó mi instinto maternal, y le dije a Sany que quería ser mamá, al inicio se negó, dijo que no teníamos mucho tiempo para una responsabilidad así, y solo recibía negativas, hasta que un día la convencí, durante el embarazo estuvo al pendiente, fue amorosa, y no me descuidó, pero en cuanto nació Susan, todo empeoró.

Cuando mi permiso de maternidad concluyó, volví al colegio, una semana después apareció Danielle con un amigo, nos presentó y el chico quería prender a bailar, por lo que me pidió unas clases y no Vi nada malo en ello — en todo lo que había contado la rubia, nunca había mencionado a Danielle, hasta ese momento, lo que les intrigó más — me citaba en el hotel que era de sus padres, su familia tenía una línea hotelera, por lo cual no me pareció tan descabellado el hecho de que me citara en su hotel.

De repente el chico comenzaba a ser coqueto, más en los mensajes, yo trataba de no seguir su juego, el chico era lindo, pero yo estaba muy enamorada, aunque mi esposa ni siquiera se daba cuenta que existía.

La buscaba por las noches y solo recibía un "estoy agotada" "mañana toca madrugar" y cosas así, el chico comenzó a cortejarme, me regalaba flores, se preocupaba por mi , me invitaba a salir.

¿Y por qué lo hacía si estabas casada? Eras una señora, tenía que respetar — preguntó Mercedes.

Yo nunca aclaré ese punto Mercedes, pensé que siendo amigo de Saunders ya estaba enterado, pero no era así, además, el hecho de saberme atractiva y sexy para alguien me gustaba, aunque no fuera la persona que yo quería.

Me propuso tantas cosas, y a todas me negué, llegó mi cumpleaños y pensé que mi esposa me daría una sorpresa, creí que no iba a trabajar para estar juntas todo el día, como solíamos hacerlo cada que alguna de las dos cumplía años, pero no fue así, ella no recordó mi cumpleaños, ella no mencionó nada, ni ese día, ni dos días después.

Me di cuenta que había perdido a mi esposa, que ya no había interés en ella, y eso me mataba, así que, decidí aceptar la propuesta del chico, y me citó de nuevo en su hotel, pero esta vez era diferente, esta vez yo iba decidida a entregarme a él, compré lencería y algunas cosas más, cuando llegué al lugar, él me esperaba, pero se veía diferente, parecía preocupado, le pregunté si le ocurría algo, y me dijo que no, se acercó a mí y comenzó a besar mi cuello, inmediatamente percibir su aliento alcoholizado, y quise detenerlo, le dije que en ese estado no quería hacer nada, eso lo molestó y quiso forzarme, como pude tomé una figura que estaba cerca y se la estampé en la cabeza, cayó al suelo pero estaba bien, comenzó a revisar su herida y yo salí corriendo, al día siguiente unos oficiales llegaron a mi casa y me arrestaron por el asesinato de ese chico.

Pero tú viste que el estaba bien — comentó Rachel

Pero nadie me creyó Rachel, varios de los trabajadores del hotel atestiguaron en mi contra, alegaron que me habían visto salir muy tarde de ahí y que iba muy alterada.

¿Y la oficial López estaba presente cuando fueron a detenerte?

Si, justo le estaba pidiendo el divorcio cuando ellos llegaron.

Flashback.

Viernes 18 de abril de 2014.

Brittany daba vueltas de un lado a otro preparando el desayuno, su esposa descansaba ese día, y ella tenía que hablar sobre muchas cosas.

Ese era el momento.

Buenos días amor ¿Susan ya despertó? — apareció Santana en la cocina, y por si fuera poco, el hecho de que su esposa ni siquiera la mirara para darle los buenos días era lo que faltaba, ahora sí, ya no tenía dudas de lo que iba a hacer.

No, aún no, despierta un poco más tarde, hoy es tu día libre ¿Tienes algo que hacer? — preguntó dejando un plato en la mesa con un sándwich para ella.

Quedé de ayudar a Quinn con un traspaso ¿Por qué? — la rubia suspiró cansada — ¿Necesitas algo?.

Si , quiero que hablemos de algo importante — la latina ignoró el comentario y salió en busca de su periódico, volvió y no le prestó atención — Es algo importante Santana — ahora sí llamó su atención, no le dijo Sany con cariño o amor cómo acostumbraba, algo pasaba.

¿Que sucede?

necesito saber si aún me amas Santana — la chica casi escupió el café que estaba tomando en el momento.

Por dios Brittany, ¿que pregunta es esa? Claro que te amo.

¿Entonces por qué ya no lo siento? Ya no me demuestras tu amor, ya no me tocas, ya no me hablas bonito como cuando estábamos en la universidad.

Brittany ya no somos unas adolescentes ahora tenemos más responsabilidades, tenemos una hija, y yo no quiero que les falte nada, es mucho trabajo el que tengo ahora que me han ascendido, créeme, llego muerta prácticamente.

Yo también trabajo Santana, yo también aporto a esta casa, también llego cansada, muy cansada, pero te necesito, necesito que me ames, necesito que me toques, pero ya no lo haces, la gran Santana López ya no tiene sexo porque llega cansada ¿Te imaginas lo que se estarían riendo nuestros amigos?

Deja la bobada ¿Quieres? Hay problemas más grandes en el mundo que esas tonteras, y sabes que, mejor dejemos el tema ya, debo ir al reclusorio — se levantó de la mesa y encaminó a la salida.

Brittany se sentía derrotada, no, definitivamente ya no había solución.

Quiero el divorcio Santana — dijo antes de que terminara de salir.

La latina se detuvo, se dio la vuelta y Brittany ya la estaba mirando, esperó a que dijera que era una broma, pero no lo hizo.

¿Estás hablando enserio?

Si, lo intenté, de verdad lo intenté, pero veo que ya no te importa nada, solo tú trabajo.

Brittany — su teléfono sonó , era el reclusorio — debo irme, pero, dejemos esto para cuando vuelva ¿Si? Hablemos cuando vuelva — se escuchaba desesperada.

Ya no hay nada que hablar Sanny — Santana supo que no — ve a ayudar a Quinny, yo llevaré a Susan a recoger a mis padres, hoy llegaban ¿Recuerdas?

La latina se golpeó la frente ¿Como pudo olvidarlo?

Te prometo que llegaré temprano para ir con ustedes, lo prometo.

Ya no creo en tus promesas Santana, nunca las cumples, ve, te esperan.

El timbre de la casa sonó y fue Santana la que atendió, dándole una mirada a su esposa.

Llegó a la puerta y abrió.

Había dos policías.

¿Si? ¿En qué puedo ayudarles?

Hola señorita, perdón, estamos buscando a la señorita Brittany Pierce, nos dijeron que aquí vivía.

Brittany López — corrigió Santana — es mi esposa, y si, aquí vive Los policías se miraron — ¿Puedo saber para que la necesitan?

Brittany apareció por detrás de la latina.

¿Sucede algo? — preguntó mirando a los oficiales.

¿Es usted Brittany Pierce? — preguntó el policía más alto.

Si, yo soy Brittany Pierce.

Señorita Pierce o López queda usted detenida por el homicidio del señor Spencer Porter — el policía se acercó con las esposas pero Santana se interpuso.

Un momento oficial, esto debe ser un error, mi esposa no es una asesina, y tampoco conoce a ningún Spencer Porter ¿Cierto cariño? — miró a la rubia quien estaba pálida, en shock — ¿Brittany?

¿Spencer está muerto? — la latina no entendía nada — eso no es posible.

Lo está señora, fue encontrado el día de ayer en la habitación de su hotel, y según trabajadores del lugar, usted fue la última persona que estuvo con el.

¿Qué? Brittany ¿Qué carajos está pasando? ¿Quien demonios es Spencer? — cuestionó Santana.

El señor Spencer Porter y la señorita Pierce mantenían una relación amorosa — dijo con malicia el oficial que hasta el momento se había mantenido callado, su compañero lo miró de mala manera.

¡Eso no es verdad! Si lo conocía, pero no teníamos una relación.

Señorita tiene que acompañarnos, si sigue hablando lo usaremos en su contra.

Usted no la toca ¿Me entendió? — Santana estaba a punto de echarse encima del tipo.

Por favor señora López, nosotros solo cumplimos con nuestro trabajo, no haga esto difícil y mejor consiga un buen abogado, su esposa lo necesitará — dijo preocupado el chico alto.

Tranquila Sany, esto es un error ya lo verás.

Llamaré a Mike y nos vemos allá ¿de acuerdo? No voy a dejarte sola, lo prometo.

Fin flashback.

Otra promesa que no te cumplió — comentó Danny.

¿Por qué dices eso? Mercedes estaba impactada con todo lo sucedido.

Porque en cuanto Santana supo todo lo que había pasado con Spencer, le quitó todo su apoyo, prácticamente la abandonó.

Hay algo que no entiendo aún — siguió la pequeña morena — si era un acuerdo el que nadie se enterara de la relación que hubo entre ustedes ¿Porque llegaste así al patio? ¿Que era lo que reclamabas?

Hace unos meses inició un juicio en mi contra, para quitarme la custodia de Susan, pero se detuvo, me amenazó con eso por mucho tiempo, prácticamente trabaje para ella aquí adentro — Danielle la miró, eso no lo sabía — pero mi abogado siguió apelando la decisión del juez, buscó las pruebas necesarias para liberarme, y lo consiguió, entonces Santana al saberlo, decidió continuar con el juicio, y lo ganó, me quitó todos los derechos con mi hija.

¡Es una perra! — Danny se acercó a la rubia, y se agachó para que la mirara — no lo voy a permitir rubia, vamos a luchar por tu hija, lo prometo — Brittany asintió

y a todo esto ¿Cómo se conocieron ustedes? Sigo con esa duda — las chicas se sonrieron.

El primer esposo de mi madre y el papá de Brittany eran mejores amigos, y cuando se mudaron a los ángeles nos conocimos, todos los fines de semana pasaban las tardes en mi casa, y nos volvimos amigas, también a los ocho años, pero íbamos en colegios diferentes, por eso Santana nunca me conoció.

Ahora si cuadra todo — se burló Mercedes.

La oficial López siguió con el juicio porque tú abogado ganó el caso ¿eso quiere decir que saldrás libre? — la morena había captado la razón de todo aquél caos, una buena noticia.

Las chicas miraron a la rubia, Annie quien ya sabía la verdad sólo sonrió.

¡Si! Quizás antes del mes yo esté fuera de acá — emocionada recibió el abrazo de sus amigas — Muy pronto veré a mi hija de nuevo, y comenzaré de nuevo.

Así será rubia, así será — de nuevo se abrazaron, no todo era malo al fin y al cabo.


Subdirección…

Santana sintió como azotaron la puerta, sabía lo que eso significaba.

Escucha Santana — la latina no la dejó continuar.

No, tú escucha, mañana presentaré mi carta de renuncia — dijo mirando por la enorme ventana.

Por mi puedes hacer lo que quieras Santana ¿Quieres tú cambio? Bien, firmó tú cambio, pero ahora, te vas a callar y me vas a escuchar — la rubia comenzó a marearse — no es buen momento — pensó — Por mucho tiempo me he mantenido al margen Santana, no he dicho ni hecho nada para no molestarte ¿pero sabes que? Ya no más, ya es hora de que alguien te baje los humos, y lamento ser yo, pero no queda de otra — Santana supo lo que venía, se sentó en el enorme sillón y se dedicó a escucharla — Me prohibiste ayudarla, me prohibiste hablarle, consolarla, me dejaste fuera de su vida Santana, y ella también es mi mejor amiga, lo peor es que no hice nada para evitarlo, por apoyarte a ti, le di la espalda a ella, cuando era Brittany la que necesitaba de mi, no tu.

Yo también necesitaba de ti Fabray.

¿Y qué hay de ella? — la encaró — ¿Crees que no me necesitó cuando la declararon culpable? ¿O cuando le arrebataron a Susan de sus brazos?

¿Acaso la estás defendiendo Fabray? ¿Estás defendiendo lo que me hizo? ¿A una asesina? — se sentía ofendida.

¿Defenderla? ¿Cómo? Si nunca me dejaste escuchar su versión de los hechos ¿no me dejaste a cargo de mi sobrina para mantenerla alejada de todo? La dejaste mal parada con todos Santana, ni siquiera le permitiste defenderse ante sus padres, lograste que todos le dieran la espalda.

No se puede defender lo indefendible Quinn, me fué infiel, se fue a revolcar con el primer imbécil que se le pasó por el frente, no le bastó lo que yo le daba.

Y eso la hace culpable ¿cierto? — preguntó en tono sarcástico, Santana supo que su amiga estaba reservando lo mejor para el final — Pues yo te declaro culpable a ti Santana López, te declaro culpable de abandono, te culpo por alejarla y por llevarla a tomar la decisión que la metió en todo esto, te culpo por todas esas noches que llegaste tarde y sin avisar, te culpo por dejar de decirle lo mucho que la amabas, si es que la amabas — la rubia sabía perfectamente que botones tocar — te culpo por ignorar a la mujer que te dió el regalo más hermoso, tu hija, te declaro culpable de haber olvidado su último cumpleaños — la latina abrió los ojos, pensó en ese día, era verdad, había olvidado el cumpleaños de su esposa, ella jamás lo había hecho — tú eres culpable Santana, culpable de que ella le permitiera a alguien más entrar a su vida.

Tu mejor que nadie sabe que me mataba trabajando para darles lo mejor, sabes que todo eso lo hice por ellas, nunca le falté, no estaba con nadie más, estaba trabajando para bajarles el cielo, la luna y las estrellas, lo sabes Quinn.

Cuando te hablé del puesto aquí en el condado, me dijiste que Brittany había estado de acuerdo, que ella también quería venir, y no fue así, ella vino porque no tuvo de otra, porque no le diste otra opción, porque te amaba y pensó que era su deber de esposa, pero por su deber de esposa, olvidó sus sueños, se dedicó a su hija y a una mujer que no la valoró, y entonces ¿Qué hay de tu deber de esposa Santana López? ¿Qué hiciste tú por ella?

Mató a un hombre Quinn — no tenía más que decir, su amiga la había desarmado por completo.

Eso dijo la policía, pero no ella.

No solo la policía Fabray, hubo testigos, un jurado y un juez que coincidieron.

¿Ella que te dijo? — se acercó a su amiga y se sentó a su lado.

Después de que la detuvieron, ya no pudimos hablar a solas, siempre había alguien más.

¿O sea que tú tampoco has escuchado su versión? — Quinn sentía pena por su amiga.

No, y tampoco quise escucharla — se cubrió la cara con sus manos — por dios santo Quinn ¿Que hice?

Ambas cometieron errores Santana, pero tú la abandonaste, yo también lo hice, cuando más necesitaba a sus amigas — le dió un apretón en la pierna — Pero yo pienso cambiar eso, yo si quiero escucharla, yo sí quiero saber lo que pasó, ¿y sabes que? Sé que es inocente.

Perdóname por haberte puesto en medio de todo esto, y por ponerte a elegir entre las dos.

¿Por qué reaccionó así? ¿Qué pasó?

Mike ganó el caso, en tres semanas será liberada.

¡Oh por dios! — la rubia prácticamente saltó de felicidad — esa es la mejor noticia que me han dado en mucho tiempo — Santana no parecía tan contenta — ¿De verdad no te da gusto que sea liberada? — preguntó tristemente.

Me da muchísimo gusto rubia, por supuesto pero — de nuevo se cubrió la cara, esta vez por vergüenza — Hice una estupidez.

¿Qué hiciste Santana? — se preocupó

Me vas a odiar Quinn.

Habla López.

Seguí con la demanda por la custodia, y gané, el juez le quitó todos los derechos sobre Susan.

A lo largo de su vida, ninguna persona había tocado a la temible Santana López, y quien se atrevía a hacerlo, no vivía para contarlo.

Por tercera vez en el día, su cara ardió por la fuerza con la que Quinn estrelló su mano.

Esta vez ni siquiera se cubrió, no sobó la zona golpeada, sabía que se lo merecía.


¡Hola! Espero que hayan disfrutado el capítulo.

Capítulo dedicado completamente a Brittany, ya quedó resuelto el misterio con el caso de la rubia.

A lo mucho solo le quedan tres capítulos a esta historia, no más.

Espero sus hermosos comentarios.

¡Nos leemos pronto!