-¿Cuantas veces debo hacer esto?- Un pequeño niño de al menos seis años bailaba ballet tomando como compañera a su mejor amiga.
Sasuke Uchiha, era el segundo hijo de la familia Uchiha. También el mejor amigo de Hyuga Hinata. La primogénita de la familia Hyuga.
-Hasta que Hinata logre ese paso, tú eres muy hábil Sasuke, pero ella debe desarrollar aún más su movilidad, además de que es más pequeña que tú. No la apresures.
-Hmp, vamos Hina, intentemos de nuevo.
Al terminar Hinata sacó de su bolsa una pequeña caja, se la entregó a Sasuke. Él sonrió como agradecimiento, eran sus chocolates favoritos, amargos.
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-Veo que han mejorado estos diez años, ahora son la mejor pareja de danza de ballet.
-Hmp, Hina es la mejor- le puso en sus manos una caja pequeña.
-G-gracias Sasuke-kun- le ofreció una sonrisa tímida, por el cumplido y por el regalo, era su postre favorito, rollos de canela -Gracias a ti hemos llegado hasta aquí.
-Hinata-sama, debemos irnos, su padre la espera- Hinata tomó la mano de Ko, su cuidador, para dirigirse hacia su hogar.
-Nos vemos mañana Sasuke-kun- Sasuke asintió. Sin saber que esa sería la última vez que se verían por mucho tiempo.
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-Hina aún no ha llegado- Sasuke estaba impaciente, el día anterior habían ganado la competencia mundial y quería festejar con ella. Pero se la habían llegado.
-No vendrá Sasuke- Mikoto su madre entro al salón, con esa noticia.
-¿Por qué?¿se enfermó?- Su rostro mostraba su preocupación.
-Sasuke, Hina ayer tuvo un accidente, el auto en el que viajaba se volcó, su padre se la llevó al extranjero. Creo que le harán una cirugía de emergencia, al parecer entró en estado crítico.
Sasuke no podía creer lo que estaba escuchando, su mejor amiga estaba en peligro y el no estaba a su lado para ayudarla.
-Llevame con ella madre. Por favor- Sasuke le suplicaba a su madre desesperado.
-Lo siento Sasuke, Hiashi nos pidió que no vayamos, por el bien de Hina.
Sasuke estaba colérico, quería ver a su amiga y se lo impedían. Salió corriendo de ahí y se dirigió hacia la casa de Hinata, tal vez estaría ahí y todo sería una mentira.
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Habían pasado diez años desde la última vez que había visto a su amiga. No había tenido ninguna noticia desde entonces, por más que le preguntaba a su madre ella no le decía nada.
Se había alejado totalmente del ballet, ahora se dedicaba a ayudar empresas a punto de ser embargadas.
Algo que a él no le importaba mucho pero era demasiado bueno.
-Sasuke, ¿Qué te parece si hoy nos vamos de fiesta? van a ir todos, tal vez puedas divertirte con alguien
-Me niego, hoy me ocuparé.
-Es cierto, hoy es la final mundial de ballet ¿verdad?, está bien, te acompaño.
-No es necesario
-¡Claro que sí! Es más, invitaré a los chicos.
Sasuke suspiró cansado, no quería discutir con su amigo.
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Llegaron a aquel teatro gigantesco. Todos su amigos estaban impresionados.
-Es imposible pensar que Sasuke fue el campeón algún vez. Él nivel de estas parejas es simplemente alto.
-Hmp, no es como si fuera difícil para mí.
Todos rieron.
Sasuke estaba embelesado al ver a todas esas parejas disfrutando. Tenía muchas ganas de volver a bailar, pero anhelaba hacerlo con su mejor amiga.
Se dió la vuelta cuando anunciaron a la pareja ganadora, le pareció ver a una chica con el mismo tono de color que el de Hinata. Creyó que solo estaba alucinando. Se dirigió a la salida seguido de sus amigos.
Estaban a punto de salir cuando escucharon a una mujer gritar seguido de un hombre. Toda la atención se concentro en aquella parte del lugar donde empezaba un alboroto. Justo en frente de ellos.
-¡¿Acaso estás ciega?! No sabes cuánto cuesta está vestido. Eres una idiota.
-L-lo siento mucho- Una mujer delgada estaba en el suelo intentando ofrecer disculpas.
-¡Hinata-sama! ¿Está bien?
Sasuke estaba atónito. Era ella...
-¿Acaso tú eres su cuidador? cuida mejor a esa esco...
-Ni siquiera no intentes- Todos vieron como Sasuke tomaba el brazo de aquel hombre.
-¿Eh?- el hombre solo pudo alejar su brazo y se alejó con aquella mujer.
Sasuke se acercó a Hinata y a Neji, su primo.
-Hinata- logró detener su brazo.
-Gracias- Fue lo que le dijo Neji -¿Acaso conoce a Hinata?
-¿Sasuke?- escuchó la voz de Hinata -¿eres tú?- Hinata intentó acercarse a él. Sasuke le hizo todo más fácil, se acercó y por fin tomó sus manos. Tan pequeñas como antes.
-Si, soy yo- Hinata se lanzó y lo abrazó.
-¿Qué te pasó? - Sasuke se refería a su desaparición.
-¿Podemos hablar en otro sitio?- Sasuke podía ver qué su mirada estaba distante. No lo veía a él fijamente.
-Claro.
Todos salieron, sus amigos estaban confundidos, preguntándose sobre aquella hermosa chica.
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Sasuke iba conduciendo, Hinata estaba a su lado, habían convencido a Neji de que los dejara solos. Sasuke la llevó a un parque. Ambos se sentaron en una banca. Podían sentir el aire fresco de la noche.
-Lamento no haberte contactado antes.
-Quiero saber que pasó.
-Ko y yo tuvimos un accidente, por lo que me explicó padre fue grave, afortunadamente Ko está bien, padre nos llevo a Estados Unidos para una operación, lo que me llevó a secuelas como ceguera permanente y tuve parálisis en las piernas por ocho años, ahora estoy aquí, buscando a mi mejor amigo, parece que ya no debo buscar tanto.- sonrió como cuando era pequeña.
Tomó su bolsa y de ella sacó una cajita.
-Toma, es tuya- Sasuke salió de su trance al sentir la cajita en su mano. Cuando la abrió vió esos chocolates que tanto le gustaban y eran especiales.
-Hinata, lamento mucho no haber estado ahí.
-Tranquilo, fue mi culpa por no poder contactarte y...
Sasuke no pudo más y la abrazó, se separó de ella y la miró a los ojos. Esas dos lunas hermosas que tanto la gustaban.
-Hina, tengo algo que decirte, es algo que siento desde que éramos niños, Te amo Hinata, por favor no vuelvas a separarte de mi. Sé mi esposa.
Hinata se sorprendió por aquella confesión, su rostro se sentía caliente. Podía escuchar la respiración agitada de Sasuke al igual que la de ella. Sonrió y se acercó lentamente más al rostro de Sasuke.
-Y-yo también estoy... Enamorada de ti Sasuke...
Sasuke tomó sus labios en un beso tierno.
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Veía a Hinata mover sus piernas de una manera elegante, habían practicado demasiado para poder volver a bailar ballet juntos.
Hacía cinco años que se habían casado, ahora eran felices.
-Es hora de un descanso- Sasuke tomó a Hinata de la mano y la dirigió hacía una esquina de aquel espacioso salón.
Le tendió una cajita en sus manos, Hinata también hizo lo mismo con Sasuke.
-Amargo..
-Dulce
Ambos dijieron al mismo tiempo. Terminando en carcajadas.
