Capítulo 5

Química Oculta

Seguía sin creer que aquel personaje estuviera sentado en su sofá. Siempre pensó que jamás volverían a cruzarse y que su presencia se había convertido en un recuerdo perdido

-Hola viejo, ¿cómo va todo?-El sujeto le sonrió de oreja a oreja. Shikamaru aún estaba conmocionado

-Naruto…

-Qué gran forma de recibirme, ¿no?-Exclamó él con sarcasmo; más de lo esperado

-Creí que te quedarías a vivir allá por siempre, porque…bueno…tus padres consiguieron un trabajo mucho mejor del que tenían aquí

-Al final, esa empresa quebró. No tuvimos otra elección más que devolvernos; pero la verdad no me molesta. Me siento feliz de poder verte de nuevo. ¿Me extrañaste?-Lágrimas brotaron de los ojos del Nara. Corrió hacia su amigo y lo abrazó

-Claro que te extrañé baka-El Uzumaki sonrió y le respondió el gesto

-No has cambiado nada, sigues siendo un llorón-Se separaron-En fin, tienes mucho que contarme

-Pueden estar en la habitación de Shikamaru si quieres. Recuerda que esta siempre será tu casa

-Arigato, Yoshino. Siempre tan atenta. Si nos disculpan-Naruto agarró al vago del brazo y lo arrastró por las escaleras hasta que llegaron al cuarto. Ambos tomaron asiento en la cama

-Bueno, ¿qué quieres que te diga?

-Primero, ¿cómo están Kiba y Chouji?

-Excelente. Chouji sigue comiendo en exceso y Kiba no ha dejado de ser un pervertido-Esto último hizo reír al de ojos azules

-Esos dos tampoco han cambiado con los años; aunque prefiero que sigan siendo los de siempre, así sus esencias no se perderán

-La tuya tampoco se ha ido. Continúas siendo un loco extrovertido que no se cansa ni aunque le pongan una inyección en el trasero para que le sea inútil moverse

-Ya me conoces. Por cierto, ¿Ino sigue siendo igual de hermosa?

-Pues no podría decir que es hermosa porque nunca la he visto de esa manera; pero si te puedo confirmar que sigue siendo una problemática de primera

-Ya veo. Bueno, preferible que así sea. Si fuera una mujer relajada, me preguntaría si está enferma o se ha vuelto loca-Los dos hombres rieron. Hace tiempo que no se veían; sin embargo, el estar conversando tan amenamente, les recordaba a los viejos tiempos

-Talvez tengas razón

-Recuerda que siempre la tengo-Llamaron a la puerta

-Adelante-Yoshino abrió y entre sus manos traía una bandeja con leche y galletas, dejándolas en la mesita de noche de su hijo

-Aquí tienen. Espero que les guste. Las hice con mucho esfuerzo

-No debió haberse molestado Yoshino

-Claro que sí. Eres un invitado especial, mereces que te consientan un poco al menos

-Se lo agradezco mucho-Le sonrió a la mujer

-Será mejor que no los moleste más-Se retiró el cuarto. Naruto tomó el recipiente y se tomó todo lo que este contenía, para luego, agarrar una de las galletas y metérsela en la boca. Se saboreó los labios

-Qué delicia. Me alegra que tu madre aún no haya perdido el toque cuando se trata de cocinar

-Créeme, tampoco lo ha hecho con su furia

-Eso sería imposible, y algo extraño

-Ni que lo digas-En menos de nada, se acabaron toda la comida

-Oye, me enteré de que una chica nueva entró hace un año a nuestra escuela. Por lo que escuché, es una de las más inteligentes

-Cierto, y también una de las más fastidiosas. Se llama Sabaku No Temari

-Temari…me gusta su nombre. Y dime, ¿qué clase de relación tienes con ella?-Shikamaru intentó ocultar su pena, lo que al Uzumaki no pasó por desapercibido. Al final, el pelinegro recobró la compostura

-Nada en realidad, es denominada en toda la escuela como la nerd. La odio y no puedo tolerarla. Además, es una problemática y un intenso dolor de muelas-El rubio acercó su rostro lentamente al de su amigo, frunciendo el entrecejo-¿Qué haces?-El Nara lo miró con confusión

-Mientes-Esto lo descolocó

-No te entiendo-Se alejó de él

-No es necesario que lo hagas. Talvez puedas engañarme con tu boca; pero te será inútil lograrlo con tus ojos, y eso lo sabes a la perfección Shikamaru

-Entonces tú dime, ¿qué es lo que trato de ocultarte?-Naruto sonrió victorioso

-Lo que en realidad sientes por esa chica-Los ojos del pelinegro se abrieron tanto como sus cuencas se lo permitieron

-¿Qué cosas estás diciendo Naruto? Claro que te dije la verdad. Ella no me importa en absoluto. Nos es más que una tonta

-La tonta que conquistó tu frágil corazón, ¿verdad?

-¿Frágil corazón? ¿Desde cuándo he tenido yo un frágil corazón?

-¿En serio quieres que conteste a eso?-Shikamaru asintió-Apenas eras un niño-Sus orbes volvieron a abrirse de par en par

-¿Qué?

-Desde que naciste, muy pocas veces has recibido el amor de tus padres, ya que ellos siempre han trabajado mucho y se han esforzado por darte lo mejor. Cuando nos conocimos, pude ver que te hacía falta algo de cariño, por eso eras tan frío y vil con otros. Yo te ayudé a que no cometieras tales errores de nuevo, porque perderías a los que más querías; pero de todas formas, todavía estaba ese vacío que no te permitía avanzar

-¿Qué quieres lograr con todo esto?

-Que no vuelvas a caer-El Uzumaki suspiró-Y ahora que volví, veo que fue un error el haberte dejado solo

-Admito que cuando lo supe, me dolió tanto porque sentí que lo había perdido todo; pero luego comprendí que hay personas que se van y otras que se quedan

-Eso es más que cierto; pero ese no es el tema. A la que le llaman nerd te gusta y no puedes evitarlo

-¿Cuántas veces necesitas que te lo repita? No estoy interesado en ella. En serio, ¿qué parte de eso no te entra en el cráneo?

-Ninguna de hecho, porque sé que estás enamorado de esa mujer. Puedes decirme toda una vida que no te gusta; pero nunca voy a creerte-El Nara sonrió ladinamente en señal de resignación

-Supongo que a ti no puedo engañarte. Tarde o temprano tendría que confesarlo

-Ya que por fin decidiste ser un hombre y aceptar tu realidad, contéstame una cosa

-De acuerdo

-¿Cómo la tratas?-El hombre se atragantó con su propia saliva

-Bueno…yo…etto…-Se rascó la nuca con vergüenza

-No me digas que la has estado lastimando

-De pronto solo un poquito

-Dime qué le has hecho-Shikamaru respiró hondo y profundo y soltó todo de golpe. Al final, Naruto se quedó pasmado-Por Kami, has sido muy cruel. De verdad que eso no me lo esperaba, ¿y alguna vez le has pedido perdón?

-Solo en ciertas ocasiones

-Ya veo. Con respecto a su bicicleta, ¿has pensado en reparársela?

-No

-Entonces, esa será tu nueva misión

-Estás demente, ¿no es así? ¿Cómo esperas que recuerde en dónde dejé todas las partes de esa cosa?

-No sé. Tú fuiste el causante de eso, ahora arréglalo. Si quieres, te puedo echar una mano

-Eso sería genial, en serio.

-Excelente. Vamos a buscarla-Los dos se levantaron de la cama y salieron de la recámara. Shikamaru detuvo sus pasos en seco

-Espera, creo que ya recordé dónde está

-¿De veras? ¿Dónde?

-En el ático-El rubio no pudo evitar soltar una carcajada

-¿Y aun así insistías en que no te gustaba ella?-El Nara se sonrojó

-No lo hice por eso, solo consideré que de pronto en algún momento alguna de esas cosas me sería útil

-Sí, lo que digas. Como sea, vamos para allá

-Hai-Entraron a aquel oscuro y recóndito lugar

-¿Trajiste linterna?-Mitigó el Uzumaki

-Carajo, la olvidé abajo

-Y luego que yo soy el baka. En fin, no tenemos otra opción que usar la de mi celular-Lo sacó de su bolsillo y los alrededores fueron iluminados-Creo que es mejor que la tomes tú. Conoces cada rincón de aquí mucho mejor que yo

-Qué gallina; pero supongo que no tenemos muchas opciones-Tomó el objetó y poco a poco se fue acercando al fondo, y ahí, se hallaban los restos de la bicicleta de Temari

-Por fin. Ahora, bajemos antes de que me haga en la ropa interior-El Nara río

-Vale, vamos-Entre ambos, cargaron todo y lo bajaron hasta el cuarto del vago. Arreglaron cada pequeño detalle del transporte, hasta que finalmente, quedó como recién comprado

-Está hecho

-Sí. Espero que se ponga feliz cuando se la dé

-Claro que lo estará. Tenlo por seguro

-¿Cómo puedes saberlo si ni siquiera la conoces?

-No lo sé. De pronto sea un instinto. Como sea, tengo que irme. Descansa

-Claro. Tú igual-El sujeto se retiró de ahí. Shikamaru se recostó en su cama mirando hacia el techo, utilizando sus brazos como almohada. Sin querer, un recuerdo se hizo presente en su hilo de pensamiento

-FLASHBACK-

-¡Miren, ahí va el nerd!-Era la escuela primaria. El Nara siempre había demostrado ser uno de los más inteligentes en cada institución a la que iba. Aquel era su cuarto traslado, y las cosas seguían como si nunca se hubiera ido a otro lugar. Todo aquel que lo conocía, lo trataba como un bicho raro

-¡¿Por qué sigues aquí nerd?! ¡Lárgate! ¡No eres más que basura!-El pequeño agachó la cabeza, ocultando el llanto que se quería apoderar de él

-¡No perteneces aquí! ¡En nuestra escuela no debería permitirse el ingreso de raritos!-El pelinegro apretaba los puños tanto como podía, hasta el punto en que le llegaban a sangrar. Entró en su salón como cualquier otro día rutinario, y todos sus compañeros le lanzaron bolas de papel

-¡¿Otra vez tú?! ¡¿Qué tenemos que hacer para que te largues de una buena vez?!

-¡No vales nada! ¡Fracasado!-Trató de encarar aquella ardua situación; pero le fue imposible. Jamás se había metido con nadie, así que no tenía mucha idea de cómo debía hacerlo

-¡Ya basta! ¡Déjenlo en paz!-Un muchacho se levantó de su asiento. Corrió y se puso en frente de él

-¿¡Qué rayos haces Naruto!? ¡¿En serio piensas defenderlo?!

-¡Sí! ¡¿Qué más da si es inteligente?! ¡¿Acaso a ustedes les gustaría que los trataran mal solo por ser supuestamente diferentes al resto?!-Otros dos niños defendieron al Nara

-¡Naruto tiene razón! ¡Hay que parar con esto! ¡Ni Shikamaru ni nadie merece este trato!

-¡Estoy de acuerdo con Naruto y Kiba! ¡No les cuesta nada dejar de herirlo de este modo! ¡Si de verdad lo desprecian, entonces ignórenlo! ¡Es preferible a que actúen como tontos a que le hagan daño!

-¡Eso quiere decir que los cuatro son unos ridículos!-Los infantes continuaron con su ataque; sin embargo, ni un solo papel le cayó de nuevo al vago, ya que los otros tres lo cubrieron. Cuando la maestra llegó, el caos se detuvo. La clase prosiguió como si nada. A la hora de comer, Naruto, Kiba y Chouji se acercaron a Shikamaru

-¿Estás bien?-Preguntó el rubio

-Sí…arigato; pero, ¿por qué me ayudaron?

-Nos cansamos de verte sufrir. Ellos no comprenden tu dolor. Nosotros tampoco; pero, sentimos que necesitas cierto apoyo

-Chouji tiene razón. Para lo que sea que necesites, puedes contar con nosotros, ¿vale?

-Hai-Los cuatro se sonrieron

-FIN DEL FLASHBACK-

-Ya había olvidado que a mí también me tildaban como un nerd; pero tenía una razón para serlo, el cual era tener el orgullo de mis padres por todos mis logros; sin embargo, ellos nunca me han puesto atención debido a su trabajo. En cierto punto, a ti te ocurre lo mismo. Tu padre es quien te obliga a ser así. Recuerdo que aquellos días fueron una gran lucha. De no haber sido por Naruto, Kiba y Chouji, no estaría donde me encuentro ahora. Y tú también cargas con un apoyo; Ino y Tenten siempre están ahí cuando más las necesitas

Sin notarlo, se quedó dormido

Temari realizó su rutina de cada mañana antes de irse a la escuela. Su celular vibró y se dio cuenta de que tenía un mensaje. Era de nadie más y nadie menos que el Nara

-Hola, hoy no podré ir a recogerte. Espero que no te moleste-Ella decidió contestarle

-Está bien. De todas formas, no te esperaba hoy

-¿Por qué? ¿Tenten te llevará?

-Sí, así que no tendré que partirme los pies

-Es un alivio. Bueno, te dejo. Adiós

-Adiós-Salió de su casa y ahí ya se encontraba su amiga en su medio de transporte

-Pensé que tardarías más. En fin, ¿vamos?

-Claro-Llegaron a su destino. El timbre para entrar sonó y ambas mujeres se dirigieron a su respectiva aula. Luego de unas largas horas de estudio, llegó el descanso. La Sabaku No se dispuso a salir, y su amiga la tomó del brazo

-¿Quieres que te haga compañía?

-Hoy no Tenten. Gomen; pero…hay cosas en las que necesito pensar sola

-Muy bien. Sabes que si necesitas algo, estoy aquí

-Vale

-Sayonara-La rubia se fue. Iba caminando por la zona de deportes del lugar con la cabeza agachada y mirada pensativa. De repente, alguien se atravesó en su camino con una cicla, que era la de ella. El sujeto la observó de reojo. La mujer tenía una sonrisa en los labios

-Está reparada-Levantó la vista y se encontró con él. Su semblante cambió a indiferencia. Se encogió de hombros y tomó su vehículo para irse, observándolo con ira. Shikamaru tomó la parte trasera de la bicicleta

-Espera-Ella lo miró de reojo

-¿Qué quieres Nara?-Le sonrió ladinamente

-No me vendría mal dar una vuelta. Además, fui yo quien la arregló, merezco una pequeña recompensa, ¿no lo crees?-Temari rechistó

-Como sea. Sube-Él accedió sin problema y ella comenzó a pedalear. Ambos disfrutaban, hasta el punto en que el vago se acostó en la espalda de la rubia, sonriendo de oreja a oreja

-Esto es tan relajante

-¿Te lo parece? Para tu información, soy yo quien está haciendo todo el trabajo-Exclamó ella, fingiendo indignación

-No te quejes mujer. Tienes suerte de tener un momento así con alguien tan atractivo y único como yo

-Por Kami, estoy muriendo de la felicidad de gastar parte de mi día contigo

-¿Lo ves? Te es inútil resistirte-Dijo el vago ignorado el sarcasmo de la otra. Temari frunció el ceño. En ese instante, pasaron al frente de una cancha de baloncesto, en donde estaban, nada más y nada menos que los amigos de Shikamaru. Este al verlos, se levantó de la bici, ilustrando un poco de pánico. La Sabaku No se detuvo y observó al Nara

-¿Qué pasa?-Giró el rostro y vio a los tres sujetos, para una vez más, enfocar su mirada en el pelinegro. El sujeto sin saber qué hacer, miró en todas direcciones y se alejó corriendo de allí. Ella solo se le quedó contemplando, hasta que se perdió de su vista. La rubia dejó su vehículo en el aparcamiento y volvió a su salón. Asuma llegó

-Queridos alumnos, me es un honor anunciarles que, uno de sus compañeros está de regreso. Espero que aún no lo hayan olvidado-Miró hacia la puerta e hizo un ademán con la mano-Vamos, pasa, no seas tímido. Este siempre será un lugar al que puedes volver-El extraño sujeto entró y todos lo miraron con la boca abierta

-Hola muchachos, ¿cómo están?-Nadie podía creer a la persona que se encontraba ahí, justo frente a sus narices

-¡Naruto!-Gritaron al tiempo y corrieron para abrazarlo. Temari abrió sus ojos tanto como sus cuencas se lo permitieron

-¿Uzumaki Naruto?-Habló para sí misma-¿El amigo de Shikamaru?

-Calma, no todos al tiempo. No me vayan a ahogar, por favor-El hombre sonrió de oreja a oreja. Le encantaba estar de vuelta en el lugar en el que creció

-Ya cálmense. Déjenlo respirar. Al final del día, pueden hablar todo lo que quieran con él

-¡Hai!-Dijeron emocionados y cada quien fue a tomar su asiento

-Arigato, Asuma-sensei-Naruto se sentó y la clase continuó como si nada. A la hora de la salida, Ino fue la primera en acercársele

-Hola, me alegra tanto que hayas vuelto-El rubio le acarició la cabeza

-A mí también. Veo que sigues igual de atractiva que siempre. Eso es bueno-La Yamanaka no pudo evitar sonrojarse ante el comentario

-Hola viejo, en serio que te extrañamos mucho. Este lugar no era lo mismo sin ti-Sus dos amigos se acercaron

-Yo también los extrañé, Kiba, Chouji-Hicieron su pequeño saludo

-No lo has olvidado aún

-Claro que no. Es un recuerdo invaluable. Por cierto, veo que hay mucha gente nueva

-Cierto. Te los presento-El Inuzuka lo rodeó con el brazo por los hombros-Ellos son Hozuki Suigetsu y Yakushi Kabuto

-Es un placer conocerlos-Le estrechó la mano a cada uno

-Igualmente. Con que tú eres el famoso Uzumaki Naruto

-El original

-Aquí todo el mundo se la pasa hablando de ti

-¿En serio? Eso sí que es una noticia inesperada-Se río. Su vista fue enfocada en una castaña. Era la primera vez que la veía-Oye Kiba-Le dio un suave codazo a su amigo-¿Quién es ella?-Una cara de fastidio se formó en el rostro del castaño

-Akasuna Tenten, la rara

-¿Rara? ¿Por qué le dicen así?-El Uzumaki enarcó una ceja

-Porque lo es, así de simple

-Eso no es un argumento válido viejo. Lo sabes, ¿verdad?

-Qué más da. Ni intentes hablar con ella, sería un desperdicio de tu tiempo

-¿Y por qué? ¿Desde cuándo consideras a otras personas inferiores a ti?

-No solo es inferior a mí, lo es a todos. Además, es fea y sin gracia-El de ojos azules apretó los puños-De verdad que no vale la pena

-Cállate. ¿Acaso ya se te olvidó lo que más me irrita Kiba? Que la gente hable mal de otras personas. Puede que tengas razón en algunas cosas; pero aun así, no lo voy a tolerar

-Sigues siendo el mismo ser protector. Es bueno que no hayas cambiado

-Lástima que tú sí. Eso es más que decepcionante-Lentamente, se alejó de su grupo y se acercó a la chica-Hola, creo que todavía no nos han presentado como es debido. Mi nombre es Uzumaki Naruto, es un gusto conocerte. Oí que te llamas Tenten-Ella lo miró de pies a cabeza con confusión. Aparte de Ino, nadie se le había acercado con un semblante tan alegre

-Etto…sí…-Agachó la cabeza con algo de miedo. Él niveló la suya con la de ella

-Tranquila, no te haré nada. En serio, puedes confiar en mí-Los ojos del hombre le transmitieron una extraña sensación de seguridad y no pudo evitar sonreírle

-Está bien

-Podemos ser amigos si quieres

-Naruto, ¿qué se supone que haces?-Los tres populares fueron a detener la supuesta locura que estaba cometiendo-No debes hablar con ella. Terminarás contagiado de su rareza

-Ya te dije antes que te callaras Kiba. Qué tú la veas como una chica rara, no quiere decir que en verdad lo sea o que yo la veré igual-El castaño se acercó a la mujer

-De verdad que te las ingenias muy bien para engañar a los demás, ¿verdad Akasuna?-La tomó del cabello, jalándola hacia arriba. Ella intentó liberarse del agarre; pero el sujeto era mucho más fuerte

-¡Ay!

-¡Kiba, suéltala!

-¡Nunca!-Temari iba saliendo del salón, cuando vio lo que le hacían a su amiga. Corrió a su rescate, golpeando el brazo del otro y metiéndose en medio del pleito

-¡Ya basta! ¡Con ella no se van a meter! ¡Si tienen algún problema, resuélvanlo conmigo!-El Uzumaki tenía los ojos abiertos como platos-¡Ino!

-¿Qué pasa?-Preguntó asustada

-¡Hazte cargo de Tenten!

-Hai-Corrió hacia la Akasuna-¿Estás bien?

-Sí, tranquila-Los otros tres sonrieron victoriosos

-¿Y tú que puedes hacer al respecto Sabaku No? Si también eres ridícula. Una mujer que no es capaz de resolver sus propios asuntos por cuenta propia. No eres nada y tu familia es una completa farsa

-Viejo, ya para. No hagas que la situación se vuelva más complicada

-Solo haz silencio y escucha con atención Naruto-Se río con malicia-Esta chica no tiene nada en la vida. Sus hermanos son unos idiotas; lo que obtuvieron fue por pura suerte-La Sabaku No apretaba los puños cada vez más fuerte por cada palabra que decía el Inuzuka-Y qué decir de su padre; un pendejo que desperdicia su tiempo por tres seres que valen más muertos que vivos; pero lo más fastidioso de todo, es lo débil que fue su madre. No tuvo las fuerzas suficientes ni el coraje para hacerse cargo de los tres engendros

Al final, la chica no pudo contenerse más y explotó, agarrando por la camisa al sujeto. Lo miró con toda la ira que emanaba desde lo más profundo de su ser, sin mostrar temor alguno

-Te diré algo Inuzuka, y ojalá te entre en esa pequeña nuez que tienes en lugar de cerebro

-Temari…-Todos estaban conmocionados ante tal escena. La mayoría de los que se encontraban allí, nunca habían visto tanta rabia en la mirada de esa mujer, hasta el punto que les generaba escalofríos en la piel

-He soportado por un año todo lo que tú y tus amiguitos me han hecho; pero algo jamás te lo voy a aguantar, y es que insultes a mi familia. Mis hermanos se han esforzado mucho por llegar a donde están ahora. Todo lo que han querido, lo obtuvieron con el sudor de sus frentes. Mi padre siempre ha dado todo de sí por darnos una mejor vida, no es ningún pendejo

-¿Crees que eso me importa? Ellos no pertenecen a este lugar, y tú tampoco-Esta vez, Temari lo tomó por el cuello, apretándolo con sus uñas

-Deja que termine baka. Mi madre fue quien dio todo lo que tenía de sí para hacer que nosotros viviéramos. Su fuerza y coraje fueron los que permitieron que estemos en este mundo ¡Así que no vengas a darme un sermón cuando jamás has estado en cada uno de esos momentos complicados!-Su amiga se le acercó con miedo

-Temari, creo que es mejor que lo sueltes antes de que lo mates-La mujer reflexionó ante aquellas palabras y accedió, dejando libre al hombre

-¿Te encuentras bien?

-Sí Kabuto, no es nada-El castaño se tocó el cuello

-¡Maldita zorra! ¡¿Crees que puedes venir y lastimar a nuestro amigo?! ¡No te lo vamos a perdonar!-Suigetsu fue directo a atacarla con un puño a su abdomen, lo que para ella fue fácil de notar. Por lo tanto, no le costó nada bloquearlo

-Demasiado predecible Hozuki-Le dio un buen rodillazo en la entrepierna, logrando que el sujeto se retorciera del dolor

-¡¿En serio te crees tan audaz?! ¡No nos subestimes!-El chico de gafas también trató de herirla, y una vez más, ella salió victoriosa, dándole un cabezazo

-Otro predecible, ¿verdad Yakushi?-El Uzumaki comenzó a aplaudir. La rubia lo miró con una ceja levantada-¿Y tú qué es lo que quieres?

-Vaya, la verdad es que me sorprendes. Nunca imaginé que una mujer podría derrotar a tres hombres como si fuera lo más normal-La mujer frunció el entrecejo con desconfianza, a lo que el chico solo río-No te pongas tan a la defensiva. Yo no pienso golpearte, eso sería muy descortés de mi parte-Shikamaru llegó a la escena del ataque

-¡Kiba! ¡Kabuto! ¡Suigetsu!-Corrió hacia ellos- ¿Qué les pasó? ¿Qué les hicieron?-El Yakushi levantó con dificultad su brazo y señaló en la dirección de la rubia. El Nara levantó la mirada y se encontró con ella

-¿De verdad tú hiciste esto?-El hombre fingió sorpresa, ya que sabía que aquella mujer tenía más fuerza de la que aparentaba

-¿Y qué interesa si fui yo? Era actuar o actuar

-Ya veo-Una vez más, observó a sus amigos-De verdad que ustedes tres están dementes. ¿Cómo se les ocurre meterse con ella, sabiendo cuales van a ser las consecuencias? Subestimar a Sabaku No Temari es una trampa mortal, y ustedes lo entienden a la perfección

-Espera Shikamaru, ¿ella es la famosa Sabaku No Temari?-El pelinegro miró a los ojos a su rubio amigo, y después, enfocó su mirada en la Yamanaka

-Ino, hazme un favor y llévalos a la enfermería

-Claro. Échame una mano Tenten

-Supongo que no hay de otra-La rubia de una coleta ayudó a Kabuto y la Akasuna a Suigetsu

-Chouji, ayúdalas

-Hai-El robusto puso sobre su espalda a Kiba y los tres se retiraron

-Ahora responderé a tu pregunta Naruto-Suspiró-Sí, es ella-El Uzumaki la detalló de pies a cabeza, haciendo que la Sabaku No se sintiera incómoda

-Veo que tienes buen gusto

-¿Qué se supone que quieres decir con eso?

-Tranquila, solo digo lo que pienso. Me pregunto, ¿cómo es que una chica tan atractiva y llamativa como tú pudo fijarse en un baka como él?

-¡Oe! ¿Qué cosas dices viejo?

-¿En serio crees que me fijaría en alguien así? Por favor, ni loca-El vago se acercó lentamente a la Sabaku No con las manos en los bolsillos, quedando sus caras a escasos centímetros de distancia

-Pues debería gustarte. Muchas mujeres darían lo que fuera por estar junto a un hombre tan perfecto como lo soy yo

-¿De verdad Nara? Qué cuento tan barato. Las únicas mujeres que tú pescas tienen el cráneo más que vacío, incluso a tal punto que podrían guardar todos sus cosméticos ahí

-Les tienes envidia porque las miro por ser bellas, y a ti no. Admítelo Sabaku No, te gusto-La mujer, a pesar de sus nervios por estar tan cerca de él, mantuvo su compostura

-¿Cómo es posible que te creas una mentira de esas? Sí que eres tonto. Más bien, tú eres el que siente algo por mí

-¿Qué te hace pensar tal cosa?

-Bueno, reparaste mi bicicleta, la que tú mismo destruiste en un principio

-Tiene un punto a su favor-Intervino Naruto. El Nara rechistó

-Solo lo hice porque me diste pena. Además, mi moto ya se estaba contagiando de tus gérmenes de nerd

-Mejor, así no estará tan hueca como su dueño-Se fruncieron el entrecejo. Sabían que todo eso era simplemente ridículo; pero no podían negar que les gustaba fastidiar; aunque fuera un poquito, la vida del otro. El rubio los miró con detenimiento, viendo que a los ojos de los dos les era imposible mentir respecto a sus sentimientos

-Oigan, ¿en serio no se gustan? Parecen una pareja de recién casados. Hay una gran química entre ambos. Es imposible negarlo, ya que…-Voltearon a ver al sujeto con la misma mirada que se estaban mostrando mutuamente hace un par de segundos

-¡Tú no te metas en lo que no te incumbe!-Exclamaron al tiempo-¡No existe ninguna conexión amorosa entre los dos!

-Sí, para nada-El hombre torció los ojos

-¡Cállate!

-¡Oye, no me interrumpas! ¡Esa era mi frase!-Reclamó el pelinegro

-¡Claro que no! ¡Era la mía baka!-Encaró la rubia

-Yo creo que mejor los dejaré solos-El Uzumaki fue dando pequeños pasos para irse

-¡Tú no te muevas de ahí!-Le gritaron mientras lo señalaban, haciendo que el chico frenara en seco y una gota de sudor le escurriera por la cara

-¡Y otra vez arruinas mi frase! ¿¡Por qué intentas copiarme!?

-¡Nunca te copio! ¡De hecho eres tú quien lo hace porque no tienes mi capacidad mental!

-¡Claro que la tengo! ¡Que me dé pereza aplicarla es completamente diferente!

-¡Imbécil!

-¡Problemática!

-¡Vago!

-¡Fastidiosa!

-En serio, creo que es mejor que lo que sea por lo que están discutiendo, lo hagan a solas. Yo prefiero no meterme en algo tan complejo-Una vez más, hicieron que el pobre chico no pudiera dar un paso más al frente

-¡Te dije que no te muevas!-Dijeron una vez más al unísono

-¡Deja de decir lo que yo quiero mujer!

-¡No me quites la palabra de la boca!-En un instinto, el Nara tomó a la Sabaku No por la cintura y la aferró a él. Ella ni se inmutó ante el contacto, quedándose los dos así, sin reaccionar. Sus mentes habían dejado de actuar, ahora sus cuerpos eran los protagonistas

oooooooOOOOOOOOooooooo

Hasta aquí el capítulo. Espero que les haya gustado

¿Será que esos dos se besarán? Díganme su opinión en los comentarios

-Naru: Aquí llegué yo, Uzumaki Naruto, para salvar el día

-Yo: Arigato. En serio que hacías falta. Sé que podrás ayudar a que esos dos se den cuenta de lo que sienten el uno por el otro

-Naru: Te lo aseguro. No me rendiré hasta que se vuelvan pareja

-Ambos: Gracias por leer y nos vemos en el próximo capítulo