Un impacto todopoderoso hizo que un grupo de sombras fueran erradicadas, una Frog Shooter que había visto la brutal demostración de poder giró la mirada para toparse entonces con los colmillos de un depredador, un chico que le arrancó la carne de un sólo mordisco que más bien pareció cómo si dientes de magia se hubieran cerrado sobre su masa.
En el instante siguiente la rana había sido cortada en dos para luego ver cómo Bell corría con todas sus fuerzas hacia los sobrevivientes de su poderoso ataque, cómo una vorágine brutal el chico de cabello blanco avanzó hasta las sombras que no fueron asesinadas con el primer Satanás Verion, esos monstruos que habían quedado aturdidos por el impacto del devastador sonido, en ese mismo instante Bell pasó entre ellas y con un sólo abanico las partió en dos, perdiendo el equilibrio por un momento debido al peso de su espada para que el calabozo le arrojara una emboscada de Dungeon Lizards. Casi cayó al suelo antes de levantar su mano hacia los monstruos.
—¡RUGIO! —El poder mágico de los bloques de sonido pronto se volvió luz y cómo una bomba, hizo estallar en un bombardeo mágico a los lagartos, quienes cayeron fritos o directamente hechos cenizas.
Bell jadeó mientras se impulsaba a poner de pie usando a Grattor cómo bastón.
—Buen trabajo Bell —las palabras de Zald lo hicieron sonreír mientras se llevaba a la espalda su gran espada y luego desenvainó la daga que había comprado del gremio, yendo a los cadáveres para empezar a extraer de ellos sus piedras mágicas.
Habían pasado dos semanas desde que Bell se volvió aventurero y realmente le había ido bien en este tiempo, había conseguido una asesora oficial, Eina, aunque no entraría mucho en detalle en ese momento.
Mientras tomaba la piedra de una War Shadow se sorprendió al ver un dedo de monstruo, era un Drop Item, tenía suerte.
Bell sonrió mientras levantaba el dedo y lo metía en su mochila para continuar con los lagartos, mientras tanto continuaba recordando lo que había estado pasando últimamente, había tenido un crecimiento bastante acelerado estos últimos días por lo que era apto para bajar hasta el cuarto piso, pero actualmente se encontraba en el piso sexto, era un problema, claro, había desacatado una orden pero no había mucho problema, estos monstruos no le estaban causando mucho problema.
Pese a lo que había pensado, realmente usar magia se le había vuelto un hábito, era cómo si fuera totalmente natural a la hora de hacer uso de esa capacidad y le sorprendía todavía más la enorme cantidad de mente que demostraba tener, asumió que era algo normal viniendo de su habilidad [Alme]. Pero, aún así era demasiado a su parecer.
La magia mezclada con la habilidad marcial, no esperaba que fuera a salir tan bien pero a parecer de Bell esto era por lo que Alfia le enseñó a mantener la concentración mientras lo apalizaba con una escoba, le estaba enseñando a hacer magia mientras peleaba… o sólo lo castigaba por decirle vieja.
De todas formas, usar sus habilidades y hechizos era algo que le encantaba, sentía de cierta forma que honraba a Zald y a Alfia cada que lo hacía, aunque ahora se enfrentaba a otro problema.
Grattor.
—Ahh, mi vieja espada ahora cruza sus últimas peleas.
—No pensé que estuviera en tan mal estado, esperaba que resistiera mucho más.
Fueron las palabras de Zald y Alfia, aunque no era cómo si lo dijeran porque la espada estuviera por romperse, no, realmente en su resistencia estaba en su mejor estado posible, pero el problema mayor era ese filo, cada vez se degradaba más y más aunque Bell pasara unas buenas horas semanales dándole mantenimiento.
El chico suspiró mientras acariciaba el mango de la espada y retoma su camino hacia el quinto piso, iba a tomar un descanso.
—De todas formas Bell, ¿Qué arma te gustaría tener a tí?
—Preferiría seguir usando a Grattor.
—Bell, tienes que tener tu propia arma, si bien las grandes espadas eran lo mío y para lo que te entrené, no sólo te entrené para eso, necesitas algo que se adecúe más a tí.
Bell suspiró mientras caminaba por las escaleras del sexto piso, veía las paredes de piedra verdosa con algo de confusión, tal vez debería hacerle caso a Zald, fundir a Grattor y usarla para encargar otra arma, o tal vez debería permanecer usando esa espada hasta que eventualmente no pudiera afilarla nuevamente y tuviera que cambiarla, cómo fuera, todavía tenía algo de tiempo antes de decidir.
Finalmente en el quinto piso empezó a caminar por los pasillos del lugar, Bell admiraba el corredor mientras pensaba en qué lugar sería bueno mantener un descanso. Aunque en ese proceso de pensamiento también se coló la situación sobre su arma.
—Tal vez una espada recta… No lo sé —suspiró y continuó su camino aunque por momentos sentía que algo iba mal.
¿No estaba muy tranquilo el calabozo? El ritmo de crecimiento de monstruos en este piso aumentaba bastante y lo había confirmado al bajar ahí. ¿Por qué había bajado ahí en primer lugar? Bueno, lo hizo por tres motivos principales.
Los monstruos realmente no le daban problemas, sus habilidades duramente entrenadas por ellos eran bastante superiores a los monstruos que se enfrentaba. El segundo motivo es que quería probar qué tan fuerte se había vuelto en estos días puesto que había tenido un gran aumento de sus estadísticas y el tercer motivo es algo sobre lo que su abuelo tenía ligeramente la culpa.
Quería salvar a una chica de monstruos feroces.
Idiota, si, pero era algo que su abuelo le había legado y es que aparte de mantener el buen legado de su familia, Bell quería tener un encuentro predestinado con una chica, culpa de su abuelo, sí, pero era normal en los chicos de su edad pensar sobre eso.
Aún así, no era su prioridad, y si lo decía en voz alta probablemente Alfia le daría un silencio de desapruebo, así que mejor no arriesgó.
Volvió a su tema principal, el calabozo estaba demasiado, demasiado tranquilo, normalmente en este lugar nunca se está tranquilo, desde que había bajado al quinto piso no se había quedado en total silencio cómo hasta ahora, incluso cuando no se encontraba con enemigos, usualmente escuchaba gruñidos de monstruos a la distancia.
El silencio se volvía enervante mientras Bell miraba a su alrededor, llevando su mano lentamente a su espalda para tomar con sus dedos la empuñadura de Grattor, desenvainando la espada para bajarla y casi caer al perder un poco de equilibrio por el peso, pero lo recuperó rápido y se preparó.
Sus sentidos aumentados por la bendición divina marcada en su espalda se enfocó en todo su entorno, cerrando los ojos tal cómo Alfia y sintió finalmente fuertes golpes en el suelo, cómo un andar de algo muy, muy grande.
El albino se dió la vuelta rápidamente y en el pasillo que acababa de dejar finalmente apareció un enorme hombre que supera los dos metros de altura construído poderosamente, músculos cómo piedras y una piel absurdamente gruesa. Pero lo importante era que entre sus abultados hombros estaba la cabeza de un toro furioso, mirando al chico con una furia homicida al chico.
Bell lo reconoció gracias a Eina, se trataba de un Minotauro, un monstruo del piso 17 reconocido individualmente cómo un igual a un aventurero de nivel 2, algo que pese a todo, superaba enormemente las capacidades individuales de Bell.
El chico rechinó los dientes y pateó el suelo para lanzarse hacia el monstruo, abanicando su espada rápidamente para hacerle un fuerte corte en el pecho, Bell no estaba listo para retroceder, el Monstruo recibió el golpe lanzando un fuerte grito antes de que Bell recibiera un golpe directo al estómago, lanzando al chico contra una pared.
Bell lanzó un gemido de dolor antes de levantar su mano y apuntar hacia el monstruo que había cargado en su contra.
—¡Gospel! ¡Satanás Verion! —en ese momento el minotauro fue impactado por un bloque de sonido, retrocediendo por el impacto y el daño que recibió mientras tapaba sus oídos por el dolor y la desorientación del sonido —. ¡Rugio!
El poder mágico se volvió un bombardeo, levantando polvo y haciendo una pequeña cortina, momento en el que Bell recuperó la postura al levantarse usando a Grattor y le apuntó con su arma, para que pronto de la nube de polvo saliera el Minotauro con una quemadura fresca en los hombros y brazo, pero fuera de eso estaba prácticamente intacto.
Bell gruñó, él era habilidoso, tenía magia y una gran arma, pero era débil, su cuerpo todavía no tenía el poder para poder matar a un monstruo cómo ese por sí mismo. Tal vez si lo mordiera… el foco se le había prendido, una mordida tenía que darle, comer un trozo de su carne y obtener un aumento de poder, juntaría Deus Ambrosia con Gif Blessing y tal vez podría pelear.
Bell apretó los dientes y entonces avanzó con fuerza hacia el Minotauro, saltando en el último momento para la izquierda pues un fuerte golpe del monstruo fue lanzado hacia él, Bell tuvo suerte de esquivar eso pero no iba a acabar ahí, por lo que inmediatamente avanzó para cruzar la bajada de guardia que hizo el monstruo frente a él, [Al Questa] se activó y una mordida potenciada se lanzó sobre el cuerpo del monstruo.
Pronto un trozo de carne pasó y fue tragado por el albino antes de retroceder y sonreír mientras lo miraba a los ojos, el monstruo se llevó la mano al brazo sangrante.
El monstruo se enfureció todavía más y avanzó con toda fuerza hacia él, Bell respondió envolviendo sus dedos sobre el mandoble para también avanzar y detener con su mano el puño del monstruo, haciendo que este se sorprendiera. Deus Ambrosia había hecho efecto y, junto a esa habilidad Gif Blessing había empezado a trabajar aumentando todavía más.
—Dios padre, perdóname —Bell empezó a cantar entonces, girando de lado para esquivar una cornada de parte del monstruo —. Porque voy a devorar la última cena de los Dioses.
El minotauro sintió que el aire a su alrededor se empezó a calentar e inmediatamente empezó a aumentar la fuerza de sus ataques, haciendo retroceder al chico que trataba de mantenerse al día con su embate, Bell tenía que usar el lado plano de Grattor cómo un escudo para cubrir el rápido ataque de puñetazos.
—Codicia, lengua de llama encerrada —el chico entonces giró esquivando un golpe para hacerle un corte en el muslo al minotauro, agradecía que pese a todo Grattor seguía siendo un arma de alta calidad, un arma correspondiente a su nivel no haría estos cortes —. Devoren, colmillos ardientes…
Bell entonces retrocedió mientras finalmente una llama mágica aparecía rodeando su espada fuertemente, estaba en la recta final de su encantamiento, una apuesta máxima por ganar la pelea.
—¡Rea Ambrosia! —gritó mientras abanicaba su arma y en ese instante un mar de fuego devorador abandonó el arma para cubrir el cuerpo del monstruo, comiendo su carne cómo una manada de lobos ardientes.
"VUUUUUOOOO"
El grito de dolor del monstruo se hizo evidente mientras esté retrocedía de la tormenta de fuego a la que se enfrentaba y lentamente empezaba a caer, su pierna fue la primera en ceder y pronto el resto de su cuerpo había empezado a carcomerse, haciendo que Bell respirara con cansancio mientras se apoyaba en su espada. Sabía de dónde venía el enorme agotamiento que tenía encima, recordaba lo que había leído en su hoja de estado.
[Gif Blessing].
—A cambio de mantener su Falna en el estado Limit Off todo el tiempo, ocasiona que el usuario sufra múltiples anormalidades como veneno, parálisis y disfunción al mismo tiempo cuando entra en combate. También hace que las estadísticas, la estamina y mente del usuario disminuyen continuamente de forma semi-permanente mientras está activa.
Bell tuvo que pelear para no desmayarse apagando Gif Blessing y pronto sus piernas no pudieron más, resbaló de Grattor que usaba cómo punto de apoyo y fue a dar al suelo, escuchando lo que intuyó era muy lejos, la voz de una mujer.
Lo último que vió fue a una chica corriendo hacia él…
X X X X
—¡ESCAPAN A LOS PISOS SUPERIORES!
—¡HAY UN MONTÓN DE NOVATOS EN MEDIO!
Fueron las palabras que ella había escuchado antes de emprender una carrera a toda velocidad junto a sus miembros de familia para detener una estampida de minotauros. Sus pasos fueron veloces mientras perseguía a los monstruos y estos morían, piso tras piso era una verdadera masacre de minotauros.
Sin embargo en un instante vió que Aiz se detuvo con varios minotauros que fueron por un grupo de novatos, ignorando totalmente el escape de uno más hacia los pisos superiores por lo que ella continuó su carrera hacia el Minotauro que huía, pasando por varios pisos en los que advirtió a los aventureros que se quitaran del medio.
Fue un juego de persecución hasta que finalmente perdió al monstruo en el quinto piso, no tenía idea de hacia donde había ido, o por lo menos eso pensó hasta que escuchó una explosión, girando la mirada para correr hacia el lugar de la explosión y en ese instante se encontró con un aventurero de cabello blanco portando una espada que aunque maltrecha y maltratada podía intuir que era para una clase más alta que la suya.
Ella se sorprendió sobre todo porque nunca había visto a ese chico en la ciudad, cabello blanco, ojos rojos y piel de nieve, con un abrigo marrón, coraza de hierro y equipo defensivo de novato, el chico avanzó con todas sus fuerzas y un grito claro de batalla, viendo que el minotauro realizaba un golpe extremo, pensó que el chico lo recibiría pero se sorprendió al ver el momento en el que lo esquivó.
Y entonces se sorprendió al verlo darle una mordida al monstruo.
Ese chico se alejó y tras tragar carne de minotauro empezó a cantar, algo que menos esperaba y que inmediatamente la hizo querer saltar a ayudarle, siendo sorprendida nuevamente al escucharlo cantar mientras peleaba. El canto concurrente era una habilidad complicada de obtener, incluso ella no lo había aprendido todavía, por lo que se sorprendía enormemente de las capacidades que el chico estaba demostrando.
El canto era curioso pero al sentir el aire calentarse a su alrededor sus ojos se expandieron ligeramente más puesto que, bueno, puesto que este era el poder mágico de un nivel 2 por lo menos.
—¡Rea Ambrosia!
Y el grito finalmente sentenció la vida del monstruo, vió cómo el monstruo era consumido por los colmillos de fuego hasta quedar en el suelo quemándose vivo.
Una actuación a nivel de un aventurero muy fuerte pese a tener ese poder bajo, ella realmente sorprendida miró al chico que ahora estaba mirándose realmente cansado, había intuido que puso toda su mente restante y cada gota de poder mágico en ese único ataque, un golpe de muerte segura o por lo menos eso había intentado.
Se dió cuenta de que sus piernas habían arrancado a correr hacia el albino cuando salió de su estupor por la pelea y podía ver cómo el chico caía sobre sí mismo, un Mind Zero con toda probabilidad.
Lo atrapó al instante y empezó a mirar a sus alrededores, no había aventureros cerca por lo que nadie la iba a ayudar con el chico, así que suspiró y lo cargó para colocarse en un lugar más cómodo, dejándolo en el suelo antes de sentarse al lado del chico inconsciente.
—Esa fue una buena demostración de poder, me sorprendes —dijo ella con una sonrisa mientras miraba al chico desmayado en el suelo antes de dirigir su mirada a la gran espada que seguía clavada en el suelo y al cadáver del minotauro que para este punto ya había dejado de arder, quedando muerto y con varias quemaduras fuertes en su cuerpo.
La chica estaba genuinamente sorprendida, pero por algún motivo empezó a tenerle cierta admiración al chico desmayado, aunque no conocía su nombre, ni sabía a qué familia pertenecía pero él había logrado algo que ella quería hacer desde hace tiempo; Enfrentar sus propias batallas sin depender de nadie más.
—ughn…
El chico hizo un par de sonidos con incomodidad, por lo que ella pensó que debía ser realmente molesto estar con la cabeza directamente en la piedra del suelo, tal vez había una forma de hacerlo más cómodo, si usara su regazo cómo una almohada para el chico…
Sacudió su cabeza pues era una idea bastante tonta la que le apareció, era cierto, el chico realmente le pareció bastante heróico a la hora de enfrentarse al monstruo frente a ella, era aparte un chico bastante atractivo pero no era nada de eso… ¿Ella pensó que él era atractivo?
¡Lindo! Esa era la palabra que pensaba, el chico era realmente lindo, tierno cómo una especie de conejito que podías cuidar con cariño y afecto, así que realmente no era nada malo pensar de esa forma sobre alguien que no conocía de nada y que había demostrado una gallardía y valor superior a lo que podría esperarse de alguien en sus condiciones.
Por un momento la idea de darle su regazo cómo una almohada sonó más atractiva, después de todo tal vez una pequeña recompensa por alcanzar un logro tal cómo el que había tenido el chico.
Sin embargo, mientras se debatía en esa cuestión, el chico finalmente abrió los ojos, sentándose lentamente mientras se llevaba la mano a la cabeza, mirando a sus alrededores.
—Ahh, lo logré matar… —fueron las palabras del albino mientras miraba a sus alrededores, suspirando mientras se sobaba la espalda antes de voltear la mirada para encontrarse con un rostro élfico.
—Hey… ¿Estás bien? Fue una buena pelea la que diste —fueron las palabras de la chica mientras le sonreía, levantándose del suelo para limpiarse el vestido y ofrecerle una mano.
Bell seguía mirando su rostro, para el albino estaba viendo a una mujer hermosa, una elfa que había salido de algún sueño, un rostro hermoso de belleza feérica, vistiendo una capa de roseta, una camisa blanca y un vestido de corsé rosa, cabello rubio dorado atado en una cola de caballo gruesa y sobre todo, ojos azules cómo dos joyas de aguamarina en los que Bell sintió que podría haberse perdido por un largo tiempo.
Sin embargo no le hizo el feo, pues el chico de ojos rojos aceptó la mano de la elfa con una sonrisa y se sorprendió al ser levantado por ella con total facilidad, antes de estar de pie frente a ella y darse cuenta de que era más alto que ella.
—Gracias, me llamo nombre, ¿Cuál es tu Bell? —preguntó el chico con una sonrisa antes de quedarse quieto mientras la miraba a los ojos, dándose cuenta de que había dicho una idiotez, sonrojándose lentamente por la vergüenza de haber quedado en ridículo frente a una hermosa hada.
No ayudó que ella empezara a reírse, por lo que Bell sintió el impulso de arrancar a escapar a todo lo que pudiera, aunque, claro, ella asintió mientras le extendía la mano con total calma.
—Descuida nombre, mi Bell es Lefiya —dijo riéndose un poco para seguirlo en el juego y decirle que no había necesidad de avergonzarse.
Bell sonrió finalmente y superando un poco de su vergüenza por la situación le ofreció la mano a la chica y ambos estrecharon sus manos con una sonrisa, asintiendo con total calma.
—¿De qué familia eres Bell? —ella priorizó eso sobre todo pues saber a qué familia pertenecía el albino le daba a ella la capacidad de saber dónde buscarlo si es que llegaban a hacerse buenos amigos.
—La familia Hestia, y tú?
—Loki.
Bell se sorprendió enormemente y entonces aparecieron pequeñas estrellas en sus ojos mientras la miraba.
—¿En serio? Esa familia es realmente increíble! En lo poco que llevo en Orario todos han hablado increíble de ustedes —dijo Bell mientras caminaba hacia Grattor para tomarla y sacarla del suelo antes de llevarla a su espalda.
Lefiya sonrió, inflando un poco su pecho con orgullo por las palabras del chico antes de asentir, ella presumió un poco su familia con calma antes de darse cuenta de sus palabras, "En el poco tiempo".
—¿No eres de Orario?
—No, llegué hace unas dos semanas.
—¿La familia Hestia es una familia extranjera?
—¿Uh? No, me uní recién, aún somos una familia pequeña jeje
—... ¿Qué nivel eres?
—¿Uh? Soy un novato de hecho, soy sólo nivel 1 todavía —dijo el chico con una sonrisa antes de que Lefiya se sorprendiera del todo.
—Un nivel 1… Matando a un Minotauro… ¡Eres realmente increíble! —fueron las palabras de la chica con una sonrisa bastante grande, tal vez admiración estaba en sus palabras pero realmente pensaba eso del chico.
Él por su parte sonrió enormemente y le asintió con la espada en su lugar.
—Gracias… Ahhh jeje… Y-Yo, tengo que irme
—Lo mismo digo.
—¡Espero volver a encontrarte! —fueron las palabras de ambos con una sonrisa antes de que Bell emprendiera una carrera que realmente le sorprendió.
El chico era rápido por lo que dejó el lugar bastante pronto, dejando a Lefiya con una sonrisa… hasta que escuchó la risa de un hombre lobo.
Bell estaba corriendo con felicidad por todo el camino hasta el gremio, necesitaba reportar el incidente obviamente, y obtener dinero por lo que tenía en la mochila, aunque se detuvo y giró la cabeza al sentirse observado por un momento, vió sobre un edificio y no notó nada raro por lo que continuó su camino con una enorme sonrisa. No sabía que había alguien sobre ese edificio, una elfa rubia que lo miraba avanzar con cierta saña.
De todas formas, Bell vió a lo lejos a su asesora del gremio y sonrió, levantando su mano para llamarla.
—¡Einaaaa!
La semielfa se dió la vuelta y le sonrió al verlo acercarse.
—Hola, Bell.
X X X X
Realmente fue rápido el trámite, por lo que sólo fue entrar, reportar el incidente, recibir un regaño y cambiar su oro, aunque no mencionó que fue él quién mató al Minotauro puesto que imaginaba que Eina no le iría a creer si decía algo cómo eso, totalmente normal ya que todavía era un nivel 1, así que todo quedó cómo que Lefiya Viridis, "Thousand Elf's" lo había salvado.
Bell hizo su tarea con Eina, se encargó de averiguar todo lo que fuera necesario saber sobre ella.
Era una aventurera del Nivel 3, por lo que era una aventurera de segunda clase aunque le parecía realmente impresionante que Eina le dijera que Lefiya era normalmente llevada a las expediciones de la familia Loki, una familia todopoderosa en la ciudad laberinto.
Por lo que, ella era realmente poderosa, una verdadera maga de gran calibre que ahora era una conocida y esperaba fervientemente que pronto se volviera una amiga.
De alguna forma sintió que su abuelo se sintió alegre por él, aunque también sintió que Alfia se había enojado, sin tener idea que en su estado había aparecido algo que pronto sería visto por su Diosa…
X X X X
[Bell Cranel].
[Nivel 1].
Fuerza: G 201 G 237
Resistencia: I 74 I 98
Destreza: H 148 H 167
Agilidad: G 200 G 238
Magia: G 200 G 226
[Magia].
[Rea Ambrosía].
Magia que crea llamas intensas capaces de cubrir un campo de batalla.
"Dios padre, perdóname. Pues voy a devorar la última cena de los dioses. Codicia, lengua de llama encerrada. Devoren, colmillos ardientes."
[Satanás Verion].
Magia de canto súper corto que golpea a los enemigos con bloques de sonido. También puede hacer explotar el poder mágico con su Spell Key.
"Gospel" "Rugio (Spell Key)".
[Silentium Eden].
Magia de encantamiento de canto súper corto que cubre el cuerpo del usuario con una armadura que niega la magia.
"Ataraxia".
[Genos Angelus].
Magia de aniquilación de canto súper largo, manifiesta una enorme campana sobre la cabeza del usuario que repica con todas sus fuerzas, devastando las áreas circundantes y hace un potente ruido. Una vez terminado el canto libera un poderoso impacto devastador.
"Bendición de la raíz del mal, maldición de nacimiento. Mi pecado original que devoró la mitad de mi cuerpo. No es difícil. No hay purificación. No hay salvación. La resonancia de este sonido celestial es mi pecado. La trompeta de los dioses, la lira de los espíritus. Melodía de la luz, el sello del pecado. Amada por el jardín en miniatura, mi destino está destrozado. Te odio. La compensación está aquí. Destrúyelo todo con una prueba de mi pecado. Llora, santo campanario".
[Habilidades].
[Legacy Bearer] [Legacy Formation]
—Acelera el crecimiento.
—El portador está formando su propio legado.
[Legacy of the Devourer].
—Carga con el legado del Devorador.
—Le permite al usuario usar la magia [Rea Ambrosía].
—Le otorga al usuario las habilidades [Deus Ambrosía], [Al Questa] y [Niggle Gourmet].
[Legacy of Calamitous Silence].
—Carga con el legado del Silencio.
—Le permite al usuario usar la magia [Satanás Verion], [Silentium Edén] y [Genos Angelous].
—Le otorga al usuario las habilidades [Gif Blessing], [Alme] y [Vel Ardore].
[Deus Ambrosia].
—Permite al usuario comer bestias, humanos y monstruos para aumentar sus estadísticas mientras la habilidad está activa. El aumento depende de lo que se come.
[Al Questa].
—Le permite al usuario usar mente para realizar un ataque mordedor, la potencia del ataque es suficiente para permitirle al portador comer lo que sea. Aumenta el poder del estómago del usuario para permitirle comer desde materia orgánica hasta materia inorgánica.
[Niggle Gourmet].
—Permite al usuario potenciar el efecto de sus habilidades, aumenta las habilidades básicas, recupera mente, energía y acelera la curación del cuerpo a un ritmo rápido posteriormente que el portador haya consumido alimento. También le otorga inmunidad a los encantamientos.
[Gif Blessing].
—A cambio de mantener su Falna en el estado Limit Off todo el tiempo, ocasiona que el usuario sufra múltiples anormalidades como veneno, parálisis y disfunción al mismo tiempo cuando entra en combate. También hace que las estadísticas, la estamina y mente del usuario disminuyen continuamente de forma semi-permanente mientras está activa.
[Alme].
—Fortalece el uso de la magia del portador conforme este esté peleando. Aumenta a su vez la mente del portador y su estamina de forma masiva y le permite recuperar mente de cada hechizo que sea lanzado a su alrededor.
[Vel Ardore].
—Aumenta la potencia de la magia. Aumenta todavía más mientras más fervor tenga el portador en el combate.
