InuYasha un mitad demonio que enamoró a una chica del futuro, después de tres años de espera aún seguía pensando en él. A pesar de que estaba enamorado de otra seguía teniendo sentimientos por el Hanyou, soporto todos sus encuentros con kikyo y ahora que lo reflexionaba no sabía si había hecho bien o no. No podía olvidarlo
Tres años….tres años en que, como pudo se recupero de aquella melancolía que no la dejaba en paz, cuando él desapareció e intento traspasar de nuevo, no hubo vuelta atrás. Deseaba olvidar, deseaba poder quitarse esos sentimientos que no la dejaban tranquila
Sabía desde el principio que algún día esto ocurriría pero no se imagino nunca que llegaría enamorarse de una criatura como InuYasha, eran una gran estupidez las reglas del pasado, despreciar a alguien solo por su apariencia o raza sin antes conocerlo definitivamente era una gran error y una idiotez, sabía que era una gran hombre, no solo era atractivo, sino que a pesar de lo años vividos solos como pudo sobrevivió y de ello surgió rencor. Su carácter era tan irritante al principio que cuando la confundió con la sacerdotisa muerta no le gusto nada y como tal lo trato, como a uno más, a pesar de que lo malinterpretase.
El beso de hace tres años fue un error lo sabía, ella no iba a ser plato de segunda mesa, era un amor imposible, no solo era el tiempo si no las acciones y hechos que había hecho al estar 500 años en el pasado
Ahora a sus casi 19 años iría a la universidad, conocería gente nueva y por fin podría olvidarse de inuyasha, de todo ese sufrimiento, de todos esos sentimientos que lo único que le hacían era daño y como pudiera haría olvidar todo ese pasado….
Habían pasado ya tres años, trataba y trataba de no contar los días y los años, pero no podía, no quería olvidarla. 50 años atrapado en ese árbol, por un falso amor, por una sacerdotisa que quería ser libre pero no podía por ser guardiana de la perla de Shikon, ser engañado y traicionado, alguien que lo quería como humano. Ahora lo sabía, su único y primer amor seria aquella chica que lo saco de ese sueño tan profundo, Kagome había hondado demasiado en su corazón, se había dado cuenta tarde
Sabía que ella lo aceptaba como era, no pudo valorarla y se arrepentía, pero era tarde. En esos tres años se había dado cuenta que ella era la única para su corazón, comprendió sus sentimientos muy tarde, la había lastimado con sus acciones, pues había comprendido que kikyo solo era un humano mas, confundió amor con agradecimiento, confundió el sacrificio por un acto de amor. Lo cual no era así
Le dolía demasiado, alejo a la única persona que lo quería y aceptaba sin ningún tipo de cambio, era solo a él, un Hanyou, descendiente de los demonios perro, una poderosa raza dominante y guerrera.
Tal vez ella lo hubiese olvidado y estaría con un humanos cualquiera. Su ira salió a flote, no permitiría que nadie la tocase, ella era suya y de nadie más. Sus sentimientos eran posesivos, durante sus viajes y sus encuentros con Kouga lo hacían perder la razón, la sola idea de que el Lobo dijese que era su mujer lo hacía perder los estribos y su sangre Youkai resurgiera…
No tenía derecho después de lo que hizo con kikyo, el beso de hace tres años nunca lo olvidaría pero sería su único recuerdo, si ella lo olvidaba no haría nada para impedirlo, había perdido un gran regalo que la vida le había dado y que no supo valorar
-¡inuyasha, baja un momento!- grito Miroku
Después de que hubiesen derrotado a Naraku, Sango y Miroku se habían casado y habían tenido gemelas, ahora estaban al cuidado de su tercer hijo un varoncito, deseaba porque no fuese como el padre
El peliplateado bajo del árbol cercano al pozo, en segundos apareció enfrente del monje
-¿qué es lo que quieres monje…?- Miroku enarco una ceja
-¿de mal humor otra vez inuyasha?- pregunto
-keh!, dime de una vez que quieres- dijo con exasperación
-he venido a buscarte para que vayamos hacer un exorcismo a una aldea cercana, me lo han informado hace unos momentos- el de ojos dorados se le quedo viendo y avanzo hacia el camino principal de la aldea
Miroku sabía que inuyasha estaba demasiado herido por sus propias acciones y por haber dejado ir a Kagome, pero era ya muy tarde, sango siempre decía que si el destino los quería juntos ella vendría o él mismo iría, cosa que era imposible tanto para inuyasha como para Kagome, tomando en cuenta el dolor que le había provocado
Camino detrás del Hanyou, hacerlo sería un trabajo fácil, pero el tramo era largo
Solo el tiempo diría que es lo que pasaría…
-¿estás segura Kagome?- pregunto Eri
Esa noche planeaban asistir a la fiesta de bienvenida en la universidad, por supuesto ella había rechazado ir el día en que le toco a los de nuevo ingreso, pero esta vez quería ir y poder por fin olvidar su pasado…
Sus amigas habían estado al tanto de su relación con el "chico malo" poniendo una tonta excusa en la cual poco a poco le creyeron pero hasta en ese entonces ya ni cuestionaban el porqué, sabía perfectamente que tardaria en poder olvidarse de inuyasha pero era tanto su dolor. Había dado todo por él hasta incluso su propia vida…pero muchas veces le dejo claro en acciones que kikyo valía más, que sería más que ella, prefería ser la perdedora de ese juego, dándolo todo y quedándose con poco…pues sus sentimientos se habían debilitado al punto de ser neutra consigo misma y con los demás ser la misma de siempre cuando sabia no era así
-¿Kagome, estas bien?- pregunto Yuka sacándola de sus pensamientos
Kagome se sonrojo y les sonrió
-estoy bien chicas no se preocupen, estoy segura de ir a la fiesta…-las chicas chillaron de emoción y se dispusieron a platicar sobre ropa, maquillaje y chicos
Mientras que Kagome se perdía en su mente tratando de poder entender y analizar su vida, había tomado una decisión y no se echaría para atrás…
-por cierto chicas lleven todo lo necesario, saben que habrá alcohol y no queremos lo mismo que la otra vez- Ayumi les advirtió
-¿qué paso la otra vez?- pregunto Kagome con curiosidad
- nada, es solo que varios chicos de los grados mayores hicieron una clase de juego y bueno pues ya sabes cómo terminara eso…-dijo Yuka sin preocupación- …aunque algunas chicas tuvieron que ayudarlos ir a sus casas de nuevo o a sus habitaciones, ¿por cierto se dieron cuenta que la mayoría les coqueteaba?, no me quiero imaginar lo que paso después- las chicas negaron y rieron tímidamente
Kagome se sonrojo ante lo dicho por su amiga, había ocasiones que veía a las chicas de grados mayores o populares coquetearles a los varones sin vergüenza alguna, a veces le daba risa y en otras les daba pena, obviamente ella siendo inexperta sabía lo que pasaba pero no se los haría saber a sus amigas
-bien basta de charlas y vamos que se nos hace tarde….- Kagome fue arrastrada junto con sus amigas
Miroku e inuyasha habían terminado con su trabajo como siempre, el monje no cambiaba lo estafador que era, había mejorado y más ahora que era reconocido en casi todas las aldeas
-esta vez te vi muy distraído inuyasha, ¿acaso te pasa algo?- el monje se detuvo en una roca mientras inuyasha cargaba los dos sacos de arroz que les habían dado como pago
-son ideas tuyas monje- bufo inuyasha
-ay amigo mío, no lo son… te conozco bien aunque quieras ocultarlo- Miroku se le quedo viendo e inuyasha, descargo los sacos con cuidado- ven acá te hace falta una buena charla de amigos- el Hanyou bufo y se quedo cruzado de brazos
-que quieres que diga, no me pasa nada, es todo- sentencio. Miroku negó con la cabeza
-no amigo mío, imagino a dónde vas…- Miroku exhalo y se puso serio- la señorita Kagome no querría verte así y lo sabes- el Hanyou gruño en respuesta- entiendo que tu miedo sea perderla, pero,¿ acaso no confías en sus sentimientos?, ella no es igual que kikyo inuyasha y lo más seguro es que si el pozo no se abre de nuevo ella haga su vida…- inuyasha frunció el ceño a lo que Miroku capto como una señal de posesividad- debes poner en orden tus sentimientos inuyasha, si algún día ella viniese y tu no tendrías claro tus sentimientos créeme podría devol…- pero el monje no termino por el grito de inuyasha
-¡crees que no lo sé!, cada día me pregunto cómo estará, que hará, estará bien…o….- inuyasha bajo la mirada- o habrá hecho su vida con algún macho humano, yo… se que ahora, lo que sentía por kikyo no era amor verdadero era un agradecimiento por ser la primera humana en que no me rechazo o no me golpeo y ahora estoy seguro que si ella viviese no habría funcionado- Miroku sonrió un poco al escuchar a su amigo hablar con sus sentimientos- pero también sé que cometí varios errores al no percatarme verdaderamente de Kagome y sé que si el pozo nunca se abre al menos agradeceré el que ella me haya aceptado tal y como soy desde el primer instante que la vi ella no dudo en tratarme como uno más, pero estaba tan cegado por lo de kikyo que le hice daño- el Hanyou recogió de nuevo los costales de arroz, se los acomodo nuevamente y se dispuso a caminar…
Miroku lo contemplo negando con la cabeza
-ay que ser ciegos para no saber que esto será un gran problema- Miroku avanzo despacio atrás de inuyasha despacio para poder otorgarle su espacio
