Fic para la Kyman Week 2024

Día 7-Día Libre

¡Y el fin de la Kyman Week! Con un prompt proporcionado directamente por la página de la Kyman Week en Tumblr.

Les juro que luché por mi vida con este fic, porque siempre he querido hacer uno tipo ''5 + 1'', pero es más difícil de lo que esperaba.

No conozco mucho de sus personas como héroes, y me di una lectura intensiva de todas las wikis que pude encontrar, incluida la del juego en sí. De más está decir... que complicado suena todo. ¡Oh! Y aclaro que es un AU dónde hay heroes y poderes, pero traté de mantener algunos elementos del canon del juego lo mejor posible. También, también, nadie (Excepto tal vez, Mysterion) conoce las verdaderas identidades de nadie.

¡Que disfruten!

Advertencia: No beteado (aún), crack (probablemente)


No tan sutil

O

5 veces en que el secreto de El Mapache y Cometa Humano casi es descubierto + 1 vez en que sí quedó al descubierto

1.

Es de conocimiento general que, en caso de suceder una emergencia o recibir algún llamado de auxilio, en ninguna circunstancia se podía enviar a El Mapache y Cometa Humano juntos a resolver el asunto.

No es que no pudieran colaborar.

De hecho, era el mejor dúo con el que la Liga de Héroes -anteriormente llamada Mapache y Amigos, pero luego de un no tan amigable golpe de estado, para arrebatarle su puesto de líder al Mapache, se tomó la decisión de un nombre más genérico, por muy cliché que suene-, podía contar. Demasiado bueno a veces. El problema es que, así como eran eficientes juntos, no se podían poner de acuerdo ni aunque sus vidas dependieran de ello. Más veces de las que no terminaban peleando entre ellos en lugar del delincuente o villano de turno, de temas inconsecuentes y sin sentido para los que tenían el infortunio de presenciar sus legendarias discusiones.

Sin embargo, y por más que Mysterion, líder de la Liga, intentara mantenerlos separados en las misiones, a veces tenían la mala suerte de necesitar precisamente sus habilidades combinadas.

Como esta vez, en que ambos son convocados para enfrentarse a un villano que ya habían vencido antes. Otros héroes están presentes, por supuesto, en caso de que alguien necesité separarlos si se llegara a desatar otra de sus peleas. Para sorpresa de todos, sin embargo, no es necesario. De hecho, los demás sienten que hay algo fuera de lugar con esos dos, siendo incapaces de identificar exactamente el qué.

Podría ser la forma en que, en todo momento, no se dirigen la palabra para nada más que advertir al otro de un ataque o dirigirlo en otra dirección. O podría ser como, aún con las pocas palabras intercambiadas, están teniendo un mejor rendimiento que en otras ocasiones.

O tal vez, piensan algunos, es que cuando finalmente las cosas se tranquilizan y detienen al villano, Cometa Humano palmea el hombro de El Mapache felicitándolo por su desempeño, dejando su mano apoyada allí por más tiempo del que alguna vez lo han visto tocarlo. Y, para su enorme sorpresa, El Mapache en lugar de empujarlo, o insultarlo, sonríe regresando el halago… sonrojándose.

¿Sería que estaban teniendo una alucinación colectiva? ¿Acaso esos dos habían dejado su animosidad de lado y podrían, finalmente, tener paz?

Sus esperanzas se ven destruidas al día siguiente, en la reunión bisemanal que tienen, cuando ambos héroes estallan en una acalorada discusión y los pensamientos colectivos del día anterior son lanzados a un basurero mental. Aparentemente había sido un error en la Matrix o algo similar.

Se vale soñar.

2.

—¿Qué es esto? —Toolshed[1] cierra los ojos, tomando una respiración profunda para armarse de paciencia, cuando la voz irritada de Mapache resuena en el pequeño salón de conferencias.

El hombre se había presentado hace casi una hora, dejándose caer en un asiento alejado de Toolshed alegando que debía trabajar en ''un estúpido reporte''. Toolshed, de igual forma, había estado trabajando en uno, y estuvo a punto de echarlo o levantarse y conseguir otro lugar para concentrarse, pero Mapache efectivamente se había lanzado de lleno a escribir, no haciendo más comentarios que unos cuantos murmullos de fastidio entre dientes.

Pero parece que el pacífico silencio en que estaban sumergidos llegaría a su fin.

—¿Qué parece que es, imbécil? —responde la voz de Cometa Humano, haciéndole alzar la vista por pura curiosidad y no, por supuesto, para asegurarse que no se fueran a matar… otra vez—. Comida.

—Obviamente, alienígena de pacotilla, no soy estúpido —Mapache se desliza con su asiento rodando los ojos, cruzándose de brazos petulantemente.

Bien, piensa Toolshed, no están saltando al cuello del otro inmediatamente y, por lo que puede ver desde su posición, Mapache no lleva sus armas de preferencia, las garras, en el momento. De igual forma, por si acaso, pone su comunicador a mano, por si tiene que pedir refuerzos.

—Ah, y yo pensando que finalmente te habías quedado ciego —Cometa Humano sonríe, cruzándose de brazos también.

El comentario del alíen lo hace detener todo, confundido, ahora demasiado interesado en el intercambio como para continuar con su trabajo. ¿A qué se refería, exactamente, con quedarse ciego? En los años que tienen trabajando juntos, nunca ha escuchado a Mapache quejarse de su visión, y eso viniendo del hombre que se quejaba y hacía berrinche por las cosas más pequeñas con las que pudiera sacar de quicio a sus compañeros; tampoco a notado que tuviera algún problema o dificultad, seguro de que si realmente algo estuviera mal con su vista sería peligroso dejarlo patrullar en solitario de noche. Pero, razona, el comentario debía ser algún tipo de broma interna entre ellos, referencia a algo que debió suceder en alguna de las pocas misiones que les eran asignadas.

Alguien tan metiche y crítico con todo lo que hacen, no podía tener problemas de visión ¿no?

—Entonces, ¿qué se supone que es? —parpadea, notando que se ha perdido una parte de la conversación en ese momento que estuvo perdido en sus pensamientos, regresando su atención a ambos hombres, notando que se habían acercado, Cometa Humano apoyado contra el respaldo del asiento de Mapache y este mirándolo relajadamente.

—Confórmate que saber que es mucho mejor que la basura que comes —Cometa Humano ríe—. Cocinado por mis manos, en vista de que no piensas comer apropiadamente.

¿Cocinado por él? ¿Por qué Cometa Humano prepararía comida para Mapache?

Como si no estuviera ya lo suficientemente confundido, en lugar de empujar la comida para hacer un desastre, en el peor de los casos, o rechazarla, en el mejor, Mapache asiente agradecido aceptando el empaque que Cometa Humano le ofrece. Ni siquiera hace un comentario, no se burla del contenedor que saca del empaque ni se queja del curioso aspecto de la comida o el olor que desprende cuando finalmente lo abre.

Y, por un segundo, podría jurar que le sonríe al otro en agradecimiento. Parpadea rápidamente seguro de que lo acaba de ver palmear la cadera del alien murmurando algo que no puede escuchar, pero antes de que pueda expresar en voz alta sus pensamientos toda la atención de Cometa Humano es dirigida hacia él, una sonrisa deslumbrante en sus labios y el volumen de su voz mucho más alto de lo necesario.

—¡Toolshed! ¿Almorzamos en la cafetería? —ofrece acercándose a él, tomando su brazo para arrastrarlo allí sin dejarlo responder, o siquiera procesar lo que acaba de presenciar.

Y, si no supiera mejor, juraría que Mapache se sobresalta al verlo, reconociendo finalmente que no habían estado solos todo ese tiempo.

Lo que es ridículo, porque fue él quien invadió su espacio primero.

3.

Están peleando de nuevo.

Estaban en medio de una reunión, hablando de algo pequeño e inocuo, probablemente del baile anual de Beneficencia del alcalde o algo similar, cuando Cometa Humano había hecho un comentario. A estas alturas ninguno de los presentes puede recordar exactamente lo que dijo, o si fue algo en específico, para provocar la respuesta sarcástica, y en opinión de muchos desproporcionada, de Mapache.

Una cosa llevó a la otra y ahora están gritándose, desde lados opuestos de la mesa, de algo a lo que le perdieron el hilo luego del millonésimo insulto de Mapache hacia cualquier aspecto del otro por no ser humano, pero que dudan tenga algo que ver con el punto original. Desgraciadamente Mysterion, que tenía sus formas de acallarlos con prontitud, estaba fuera en una misión en solitario y Call Girl[2] como la autoasignada líder sustituto tenía casi una hora tratando de redireccionarlos al tema central de la reunión.

Definitivamente, nadie como su líder para reagrupar el ganado o algo así.

—Dios, eres insufrible Kha… ¡Cometa! —el silencio en el que repentinamente se sumerge la sala de reuniones es ensordecedor.

Los héroes que medio se habían quedado dormidos, luego de filtrar sus gritos y usarlos como ruido de fondo, se enderezan interesados repentinamente en lo que está sucediendo. ¿Mapache estaba a punto de llamarlo por otro nombre? ¿Tenía algún significado? Debía ser importante porque de repente ambos se enderezan en su lugar, los labios fuertemente apretados y, por parte de Mapache, un sonrojo en sus mejillas.

El silencio se extiende por unos largos minutos, que los hace empezar a sentirse incomodos. A pesar de esto, nadie se atreve a intervenir, comentar o decir nada, a la expectativa de que pasaría después.

—Cometa —repite despacio, tomando una bocanada de aire. Pasa una mano por su cabello, alisa su capa y carraspea. Si no supieran mejor pensarían que está avergonzado, en lugar de nervioso.

¿O tal vez asustado? ¿Lo que estaba a punto de decir era un insulto diferente a la plétora que suele utilizar del que no sabían? ¿Algo dirigido de forma más personal que llamarlo ''patética excusa de humano-falso''?

—Eres… insufrible —dice finalmente, dejándose caer en su asiento.

—Lo mismo digo —asiente Cometa Humano sentándose lentamente.

Los presentes los observan, esperando el momento en que retomen su discusión, como suele suceder a veces, pero lo que sea que estuvo a punto de pasar ha perdido motivación. La mayoría piensa que deberían alegrarse de ello, retornarían a su aburrida reunión y los gritos finalmente se detendrían; pero… bueno, honestamente los que no se estaban quedando dormidos estaban disfrutando del entretenimiento en vivo.

No es que no les interesara la reunión, claro está, pero los pequeños detalles más allá de las responsabilidades que les corresponderían llevar a cabo para el evento son poco importantes. Nimiedades que usualmente no se les comunicaría, pero que Call Girl consideraba importante por alguna razón, como cada minúsculo detalle de su trabajo.

—Bien, si no habrá más interrupciones —la mujer, que probablemente también se había quedado esperando otra explosión de insultos, carraspea llamando la atención nuevamente a su persona—, como les iba diciendo…

El resto de la reunión pasa en silencio, interrumpido solamente por algún aporte o pregunta de los demás, que hacían simplemente para llenar el espacio normalmente ocupado por gritos. El resto del tiempo los dos buscapleitos permanecen firmemente sentados en sus lugares, sin dirigirse siquiera la mirada y probablemente sin prestarle atención a la reunión. Finalmente, cuando está satisfecha, Call Girl la da por finalizada y les permite marcharse. Mapache es el primero en abandonar la sala a paso rápido, murmurando maldiciones entre dientes de algo que solo logran identificar como ''estúpido pelirrojo'' o similar, seguido poco después por Cometa Humano que porta una expresión sombría. No murmura entre dientes, como el humano, pero la forma en que aprieta las manos y su cuerpo se tensa, probablemente signifique que continuaran la pelea en otro lado.

Solo pueden esperar que sea en la sala de entrenamiento y no en el pasillo, como la última vez.

Al resto no les queda de otra que verlos marchar, no pudiendo quitarse de encima la sensación de que algo muy raro acaba de pasar.

4.

Wonder T.[3] suspira nerviosamente terminando de vendar las heridas de Super C.[4], recriminándole con la mirada haberse puesto en la situación peligrosa que lo había llevado a él y al Cometa Humano a salir lastimados. El héroe se limita a regalarle una pequeña sonrisa, casi imperceptible, a modo de disculpa apretando su mano en agradecimiento. Wonder T. niega, incapaz de mantenerse enojado por mucho tiempo. Le repite las instrucciones que le ha dado ya un millar de veces, de permanecer quieto en cama y relajarse para permitir que los remanentes de sus poderes terminen de curarlo.

Acaricia su cabello antes de ponerse en pie y salir del cubículo en el pabellón médico que ocupa Super C. para ir a revisar el estado de Cometa Humano. De los dos fue quién recibió más daño, en vista de que se interpuso entre Super C. y el peligro; pero también, al ser un alíen, de los dos es quién se recuperara más rápido. Probablemente ya a esas alturas ni siquiera necesitaba su asistencia, sin embargo, no podía simplemente dejar las cosas al azar, no podría con la culpa si la condición de su compañero de equipo empeorara por asumir que su naturaleza no humana lo mantendría a salvo. Aparte, piensa tocando suave la puerta del otro cubículo, debe agradecerle por salvarle la vida a Super C.

Al no recibir respuesta duda de si debería entrar o no. Podría estar durmiendo, dice la parte lógica de su mente, profundamente para que su cuerpo pueda recuperarse y por eso no escuchó los golpes en la puerta. O podría estar tan adolorido que le era incapaz responder; temiendo que fuera lo segundo en lugar de lo primero, abre la puerta, en silencio por si se trataba de lo primero, pero antes de entrar se detiene en el umbral, confundido.

Cometa Humano está tal y como lo había dejado antes de ir a curar a Super C., recostado en la camilla, inconsciente, enganchado a una mascarilla de oxígeno, que probablemente ni siquiera necesitara, con nada más que su traje puesto y una manta cubriéndolo hasta el torso. Lo que lo hace pausar, sin embargo, es la compañía que no estaba allí minutos antes.

Sentado al borde de la camilla se encuentra El Mapache, su cuerpo girado casi por completo hacia el cuerpo inerte de Cometa Humano impidiéndole a Wonder T. ver su expresión; sin embargo, su sorpresa aumenta al notar como sostiene una de las manos de Cometa Humano con delicadeza, sus garras ausentes, murmurando cosas que no logra escuchar con claridad por la distancia. Si no hubiera sido testigo de la gran enemistad de los héroes, pensaría que su presencia allí es para brindarle consuelo al héroe herido.

Pensaría, por muy bizarro que fuese, que hasta le importa el bienestar de Cometa Humano.

—¿Qué haces aquí? —pregunta al salir de su estupor, con más brusquedad de la que inicialmente planeaba utilizar, la parte paranoica de su mente sugiriendo que tal vez estaba ahí para retrasar la curación de Cometa Humano, o hacerle algo peor que pudiera ser achacado a sus heridas al no tener testigos.

El héroe se sobresalta y se gira. Wonder T. retrocede un paso, genuinamente asustado por un breve momento por la mirada amenazante que le dedica Mapache antes de que el reconocimiento brille en sus ojos y sus facciones se relajan.

—Ah, solo eres tú —Mapache palmea distraídamente la mano de Cometa Humano antes de ponerse en pie, casualmente acomodando la manta que cubre al héroe—. Te dejo hacer tu trabajo.

Se sorprende por la falta de comentarios ácidos hacia sus funciones menos ''heroicas'', así como la expresión sombría que se forma en su rostro cuando le lanza una última mirada a Cometa Humano antes de caminar hacia la puerta, bordeándolo para salir.

—No… no respondiste mi pregunta —dice sosteniendo su brazo, deteniéndolo. —¿Qué hacías… hacías aquí?

—¿Qué crees que hacía rata-sobre-cafeinada? Asegurándome que mi pare… peor enemigo no se haya muerto por andar haciendo estupideces —responde con brusquedad soltándose de su agarre.

Antes de que pueda hacer más preguntas de lugar, Mapache se gira y abandona la habitación a paso rápido. No vuelve a detenerlo viéndolo marchar, una mezcla de confusión por el tono tan defensivo del hombre y tratar de entender sus palabras dejándolo paralizado. ¿Era su imaginación o estuvo a punto de decir otra palabra en lugar de ''peor enemigo''?

Bufa suave, suprimiendo una risilla nerviosa. Si no conociera mejor a Mapache, juraría que está verdaderamente preocupado.

5.

—Oye guapo, ¿vienes aquí seguido? —comenta el héroe observando al civil detenerse en su camino, mirándolo sorprendido. Una sonrisa amenaza con formarse en sus labios cuando el civil cubre su rostro para ocultar el sonrojo que se extiende por sus mejillas.

—Diría que sí, pero nunca es buena idea distraer a un héroe en su labor —responde finalmente el pelirrojo, cruzándose de brazos conteniendo lo mejor que puede la sonrisa que lucha por formarse en sus labios.

—Es una lástima, siempre es un premio tener una cara bonita cerca —el héroe ríe recargando su peso en la vaya de contención que los separa para acercarse a él, regalándole una sonrisa coqueta—. Deberías venir más seguido, tal vez me sienta caritativo y te regale una entrevista… K-y-l-e —dice despacio, arrastrando las letras leyendo su nombre en el gafete de ''Periodista[5]'' que cuelga de su camisa.

Como si no supieras mi nombre, piensa responder, divertido. Siempre que alguno de los héroes estaba envuelto en una batalla y era seguro para la prensa presentarse para tomar notas en vivo, solían enviar a Kyle, teniendo en cuenta que es el columnista principal de la sección de héroes. Que su jefe considerara mandarlo también cuando El Mapache aparecía en escena, por ser el único que aparentemente podía sacarle algo de utilidad, es algo en lo que no piensa mucho.

—Podría considerarlo si me consigues una con tu jefe, Mapache —responde en su lugar, apoyando una mano en el muro para inclinarse también hacia el héroe, sus ojos brillando con diversión.

—Yo soy mucho más interesante que Mysterion —farfulla, llevando una mano a su pecho en un gesto de indignación.

—El público no estaría de acuerdo con esa declaración —señala el periodista, sonriendo divertido. Y no se equivoca, por alguna razón el público adora a Mysterion, probablemente por el aire de misterio, aludiendo a su nombre, que lo envuelve.

—Mira nada más, una cara bonita se acaba de hacer diez veces más encantadora, casi puedo olvidarme de que estás lleno de pecas, pelirrojo —bromea el Mapache, ignorando su comentario, cambiando de posición para cruzar sus brazos en el borde del muro, mirándolo desde abajo agitando sus pestañas—. La propuesta sigue en pie Rojo.

—¿Cuál propuesta? ¿Entrevistarte o venir más seguido? —apoya su otra mano al otro lado del héroe, quedando este entre sus brazos con muy poco espacio de por medio.

—Cuidado ahí, Khal, podría creer que estás coqueteando conmigo —Mapache se alza un poco, sonriendo con picardía.

—Para tu mala suerte, no eres mi tipo —ríe Kyle, negando.

Antes de que Mapache pueda responder a eso, de forma que él aseguraría es ingeniosa, una explosión se escucha a su espalda, acompañada de gritos de los pocos civiles que se atrevieron a estar cerca del muro de contención, exceptuando los periodistas por supuesto.

—¡Mapache! ¡Trae tu gordo trasero aquí y ayuda! —vocifera Tupperware, mirando irritado en su dirección, mientras intenta evadir los ataques del villano que se supone estaban enfrentando juntos.

—¡Kyle! Deja de perder el tiempo y ponte a trabajar —grita al mismo tiempo Wendy, la compañera con la que se supone el pelirrojo debería estar cubriendo el combate en lugar de estar ahí, coqueteando con el héroe.

—Dios, ¿no puedes ver que estoy ocupado, pedazo de hojalata? —El Mapache se gira haciéndole un gesto grosero, que es recibido con otro de la misma naturaleza antes de que Tupperware despliegue un escudo, bloqueando otra explosión—. Dios, bola de inútiles todos, soy el único que hace el trabajo aquí —le comenta El Mapache al periodista mirándolo rápidamente antes de abandonar su lugar contra el muro y apresurándose a ''salvarle el trasero al inútil de su compañero''.

Kyle bufa divertido apartándose también, no fuera a resultar herido en el fuego cruzado, y regresa al lado de su compañera que lo mira con ojos entrecerrados. Le regresa la mirada sonriendo con inocencia, recuperando su cámara para continuar con su asignación de tomar fotos de la batalla.

—¿Pensé que no te agradaba Mapache? —pregunta la mujer mirándolo muy de cerca.

—En lo absoluto, es un pedazo de mierda que se cree mejor que todos —responde en automático concentrado en su trabajo.

—Claro, y por eso estabas allí coqueteando con él —señala la mujer frunciendo el ceño. Al no obtener respuesta bufa irritada, pichando su costado con su lapicero. —¿Pensé estás saliendo con Cartman?

—Estás en lo correcto —el hombre le regala una sonrisa encogiéndose de hombros, caminando hacia otra parte del muro de contención para tomar fotos desde otro ángulo, dejándola sola con sus pensamientos.

Hace unos meses, piensa, Kyle hubiera explotado en un acalorado intercambio de insultos con el Mapache, a quién todo el mundo sabe detesta siendo que al menos el cuarenta por ciento de lo que escribe del héroe en su columna es para tildarlo como poco menos que un peligro para la ciudad. En la oficina lo habían empezado a catalogar como su hater #1. De hecho, ahora que lo piensa, el odio de su compañero de trabajo rivalizaba sólo con la obvia animosidad entre Mapache y Cometa Humano que todo el público conoce, y de repente ¿estaba bien con dejarlo coquetearle descaradamente estando en una relación estable con Eric?

Eric no le caía bien per se, su personalidad era casi tan repelente como la de Mapache y más de una vez se encuentra preguntándose que veía su amigo en el millonario, pero eso no significaba que le pareciera bien el descaro de Kyle. ¡Y en público!

Ese pensamiento no abandona su mente en ningún momento y solo se redobla cuando semanas después, trabajando esta vez con Craig en algo menos emocionante que las peleas de los héroes de la ciudad, ve a lo lejos a Cometa Humano coqueteando abiertamente con Eric. Y este respondiéndole sin remordimiento alguno.

¿Qué diablos pasaba entre esos dos con esos héroes?

+1

La batalla había terminado, por fortuna con menos bajas de las que se habían predicho, pero de todas formas con más daños de los que esperaban. Siempre era así cada que Mitch Conner[6] hacía una reaparición en público, trayendo consigo una oleada de pánico y caos que era cada vez más difícil de contener. Sin embargo, está vez están seguros de que lo han detenido de una vez por todas, si su cuerpo inerte en medio de la destrucción que causó es una señal.

Todo gracias a Mapache.

Los héroes, con varios grados de heridas, se reagrupan ansioso por las ordenes de Mysterion, que estaba revisando el cuerpo de Mitch, a la espera la declaración de que la amenaza había sido efectivamente neutralizada, la señal de que podrían relajarse y celebrar. Mysterion, quién es normalmente comedido con sus palabras y enemigo de hacer discursos en público, les ofrece unas palabras de aliento, felicitándolos por su buen trabajo y dirigiéndolos para que se ayuden unos a otros a regresar a la base, revisar sus heridas y, sí, celebrar allá el fin del terror que Mitch Conner representa. Aliviados, todos empiezan a moverse hacia la nave que los llevaría a la base.

Todos excepto Cometa Humano, quién mira alrededor frenéticamente, contando cabezas una y otra vez, tanto entre ellos como los civiles a la distancia que se empiezan a aglomerar para ver el resultado de la batalla ahora que el polvo de los escombros se ha disipado.

—¿Cometa Humano? —pregunta Mysterion al verlo acercarse al centro del lugar donde la batalla finalizó.

—¿Alguien ha visto a Mapache? —pregunta en lugar de responder, moviéndose con más intención.

—¿Mapache? Está… —Mysterion se gira para señalar un lugar a su espalda, pero se detiene al notar que, efectivamente, el molesto hombre no estaba ahí.

De hecho, si se detiene a pensarlo la batalla había terminado gracias a una explosión causada por alguno de los ''juguetes'' de Mapache. Eso había causado que el cuerpo de Mitch fuera expelido por el impacto, cayendo dónde lo habían encontrado, y que el Mapache… ¿Dónde había terminado el Mapache luego del impacto?

—¡¿Mapache?! —los héroes se giran por el grito de Cometa Humano, sorprendidos por la desesperación que se empieza a filtrar en su voz mientras corre frenéticamente entre los escombros.

—¿Mapache no estaba…? —empieza a preguntar Super C., ayudando a Wonder T. a mantenerse en pie, girándose a dónde juraría haber visto al héroe. El resto empieza a murmurar, compartiendo el mismo nivel de sorpresa y preocupación.

Rápidamente, los que están en mejor condición, empiezan a buscar junto a Cometa Humano entre los escombros, llamando por su compañero tratando de no quedarse enganchados en la forma en que el alíen grita por Mapache. Lo hace con una emoción que no habían visto antes en él, desesperación tan palpable en el aire a su alrededor que empieza a ser incomodo.

—¡¿Cartman?! —el nombre les toma desprevenidos, deteniendo sus intentos de ayudar en la búsqueda y mirando a Cometa Humano que continua con lo suyo sin notar la mirada impactada de sus compañeros.

¿Cartman? Piensan, ¿por qué el nombre les es tan familiar?

—¡Cartman! —grita de nuevo, deteniéndose de pronto, para asegurarse que sus ojos no lo engañan, antes de lanzarse contra unos escombros empezando a apartarlos con rapidez, ignorando el dolor en su cuerpo. Tiene que sacarlo de ahí, tiene que asegurarse que está bien, tiene que asegurarse que aún está…

—¿Cartman? —susurra arrodillándose cuando todos los escombros están fuera del camino, revelando ante los demás, que se han acercado, el cuerpo de Mapache.

Con manos temblorosas alza el cuerpo del hombre hasta colocarlo en su regazo, sin saber por donde empezar a revisar si simplemente estaba inconsciente o… Dios, no quiere ni pensar en ello, se niega a darle forma al temor que aprisiona su corazón. Lo balancea en su regazo colocando una mano en su mejilla, acariciándola con suavidad no notando las lágrimas que se derraman por su rostro hasta que las gotas caen en el rostro del contrario.

—Cartman… por favor —susurra apretándolo contra su pecho—. Por favor, no —un sollozo se escapa de sus labios, más lágrimas corren por sus mejillas mezclándose con el polvo y la suciedad en el rostro del contrario.

—No puedes… dejarme maldito imbécil —hipa apartándose, su voz cargada de ira repentinamente, y golpea el hombro del cuerpo en sus brazos. —¿Me escuchas pedazo de mierda? No tienes derecho de… de sacrificarte por todos y dejarme así, no tienes… no te permito…

Tan pronto como la ira lo invadió, desaparece, retornando su llanto desgarrador al apoyar su frente en el pecho de Mapache, aferrándose a él con fuerza.

—Eric… por favor —susurra bajo.

¡Ah! Piensan los presentes, por eso el ''Cartman'' se les hace familiar. Eric Cartman, como el empresario. ¿Eso significa, entonces, que Mapache era…? ¿pero no era bien sabido que el hombre había hecho su relación con el periodista oficial? ¿Cómo era que se llamaba?

—Ky… Kyle —todos contienen el aliento ante el susurro, observando atentamente como Cometa Humano se endereza inmediatamente—. Estás… manchando mi… traje…

—¡Cartman! —sin pensarlo ni un segundo, sobrecogido por felicidad y alivio, Cometa Humano lo alza nuevamente plantando un beso en sus labios, arrancándole un quejido adolorido a Mapache… Eric Cartman, en el proceso.

¡Kyle! Piensan colectivamente, así era que se llamaba el periodista… oh. Oh, eso tenía sentido.

—¡No vuelvas a asustarme de esa forma, imbécil! —grita Cometa Humano cuando se aparta del beso, zarandeándolo con fuerza.

—¡Ay! ¡Khaaaal! Estoy herido, podría haber muerto ¿y lo primero en lo que piensas es lastimarme más? —bromea el hombre apoyando sus manos en los hombros contrarios para detener el movimiento, empezando a marearse—. Mejor sigue besándome, tal vez me hagas sentir mejor.

—Eres un… idiota —bufa ligeramente limpiando sus lagrimas antes de abrazarlo con fuerza—. Eres… un idiota de proporciones estratosféricas.

—Pero soy tu idiota —ríe el hombre regresando el abrazo, ignorando el dolor en favor de disfrutar de la calidez del cuerpo contrario. Suspira abriendo los ojos y, finalmente, notando la pequeña audiencia que tienen conformada por casi la mitad de sus compañeros.

—Carajo —maldice apartándose, mirando a Kyle con reproche. El hombre parpadea confundido y se gira, palideciendo al ver a sus compañeros.

—¿Oops?

—¡¿Oops?! ¿Es lo único que piensas decir luego de exponernos? —grita Eric, siendo él esta vez quien zarandea al héroe, pero con mucho menos fuerza considerando que está más lastimado que el alíen.

—Esperen —Toolshed coloca sus manos en forma de T, como pidiendo un tiempo fuera—. Esperen, ¿ustedes dos…?

—¿Todo este tiempo? —pregunta Tupperware luchando para mantener la boca cerrada, fallando miserablemente.

—Con un demonio —masculla Cartman intentando levantarse, siendo ayudado inmediatamente por Kyle, que inmediatamente lo sostiene contra él para que apoye parte de su peso contra él.

—No puedo creer que no nos hayan dicho nada —susurra Wonder T., que al curarse a si mismo se había acercado para ver si podía ayudar en algo, conectando los hechos con lo presencio meses atrás.

—¿Ustedes no se habían dado cuenta? —la pregunta de Mysterion hace que todos se giren a verlo, su líder regresándoles la mirada como si fueran las personas más estúpidas que existen. Probablemente lo eran—. No es como que esos dos sean precisamente sutiles.

Ahora que lo piensan bien, uniendo las piezas con rapidez en sus cabezas, aprovechando que aun tienen unas cuantas neuronas conectadas antes de que la adrenalina deje de hacer efecto en sus cuerpos, Mysterion tiene razón. Eso, sumado a que accidentalmente saben cuáles son sus identidades secretas, los hace sentir realmente estúpidos por no haber hecho la conexión antes. Estaba bajo sus narices todo este tiempo.

—Bueno, ya que la novela termino, ¿podemos regresar? Creo que tengo una contusión —murmura Cartman apoyándose contra Kyle, que rueda los ojos peor lo alza en brazos para empezar a caminar a la nave.

—Vamos todos, regresemos —ordena Mysterion siguiéndolos, acomodando su capa para ocultar la sonrisa divertida que se extiende por sus labios.

Probablemente ahora que se ha revelado su relación los dos le bajen a la intensidad de sus muy reales, aunque no realmente cargadas de desprecio, peleas. O tal vez, conociéndolos como los conoce, las cosas simplemente empeoren en una dirección completamente diferente ahora que no tienen que ocultarse.

Por si las dudas, piensa asegurándose que estén todos en la nave antes de cerrar y activar el piloto automático, tiene un plan de respaldo por si debe borrarle la memoria a los demás. Un pequeño favor que le debe a Cartman y que no se molestaría usarlo para esto.

Por ahora verá como progresan las cosas.


[1] Decido usar su nombre en inglés porque por más que trate de acomodarlo ''Herramientas'' o ''Cobertizo'' suena más gracioso de lo que debería.

[2] No pienso llamarla Escort, por muy que tenga otros significados, ¿qué andaban pensando en la traducción?

[3] Misma lógica que con Toolshed, suena extraño llamarlo Tweek Maravilla, que, en su defecto, bajo la lógica que quiero aquí de que no conocen sus identidades, sería T. Maravilla.

[4] Lo mismo aplicado para Super Craig: Super C. (ignoremos los chistes de doble sentido que se puede hacer tanto en español como inglés con esa C -y apuesten a que Cartman/Mapache ya los hizo en algún momento-)

[5] Sí, estoy jugando aquí con la referencia que se supone hace el alter ego de Kyle a Superman, sue me

[6] En este AU Mitchell Conner es una persona real, con su propio cuerpo y su misma mente retorcida, en lugar de un ''títere'' de mano.

¿Vieron como cada parte se hacía más larga? Yo también, se me salió de control.