Hermione lo miró perpleja, observó el anillo que Draco le ofrecía, después llevó su vista de vuelta a él y empezó a negar ligeramente con la cabeza, el muchacho al ver ésto, inclinó su cabeza al suelo, entristecido, la chica tomó el rostro de su novio entre sus manos y lo miró fijamente con lágrimas en los ojos

-No aceptaré si tenemos que volver al mundo mágico, no quiero perderte- le hizo saber con voz temblorosa

-Sabes bien que no puedo casarme contigo aquí, Jason Smith no existe- puntualizó

-Sólo quiero estar contigo- lo besó- no importa el mundo en que estemos mientras no me aparten de ti- mencionó con voz entrecortada

-Quiero sellar éste compromiso contigo, que nuestro amor sea eternizado- pidió

-Ya lo está- lo volvió a besar, la muchacha lo miró sonriendo y extendió su mano izquierda, el rubio le colocó el anillo en su dedo anular, se puso de pie y besó a su novia alzándola en el aire, la jóven abrazó sus piernas a la cintura de él.

Hermione le explicó a Draco que llevaría acabo una investigación para terminar con los negocios ilícitos de Fáderick y su familia, el rubio intentó convencerla de lo contrario ya que podría ponerse en peligro, pero ella estaba determinada a impedir que el tipo volviera a hacerle daño a su novio, el Slytherin estuvo dispuesto a colaborar, así que con ayuda de las autoridades y de la mano de los abogados del bufete del que ella estaba a cargo, se dispusieron a trabajar en el caso.

Habían pasado varios días de que se había vencido el plazo que Fáderick le había dado a Draco para pagar la deuda, el muchacho desde entonces no podía dormir del nerviosismo, pese a que la castaña ya llevaba avanzada la investigación y se habían encontrado pruebas irrefutables de que el jóven había llevado a cabo negociaciones ilegales, debían ser cautelosos, ya que Fáderick tenía de su lado a muchas personas poderosas.

Una tarde, Hermione salió de trabajar y Draco estaba aún en turno, por lo cual le fue imposible salir a recogerla, la muchacha tuvo que tomar un taxi ya que su compañera estaba en un viaje de comisión, casi para llegar a la calle Brick Lane, donde se encontraba el condominio de los dos, el taxi fue interceptado por un auto negro, del cual descendieron unos hombres armados, la Gryffindor sintió un vuelco en el pecho, intentó sacar su varita pero ya era tarde, los tipos abrieron la puerta del piloto y asesinaron al chófer del taxi, ante la mirada aterrada de la jóven, el lugar en que se encontraban estaba casi desalojado y las personas cercanas huyeron al escuchar las detonaciones, lo único que se cruzó por la mente de la jóven fue oprimir el botón de marcación rápida en su celular que llevaba en la mano, el cual llamaba directamente a Draco y meterlo en su bolsa, los hombres abrieron la puerta de la muchacha y bajaron violentamente a la bruja del vehículo para trasladarla al automóvil negro en que ellos se transportaban.

-Se lo advertimos a tu noviecito, ahora tendrás que pagar por él- mencionó burlón uno de los hombres encapuchados, la chica lloraba de miedo

-¡Ayúdenme!, ¡Auxilio, por favor!- gritaba desesperada e inútilmente a la nada, pues aunque alguien la hubiese escuchado, no se atreverían a ayudarla

El teléfono de Draco comenzó a sonar en el bolsillo de su bata de doctor, pero él estaba ocupado realizando unos estudios a un paciente, la llamada se perdió, unos breves minutos después, terminó de atenderle y revisó su celular para devolverle la llamada a su chica, intentó en varias ocasiones pero fue imposible contactarla, se quedó pensando un momento y decidió llamar al encargado del edificio de su departamento para preguntarle si había visto a su novia llegar, pero recibió una negativa, comenzaba a preocuparse cuando recibió una llamada del teléfono de Hermione, se sintió aliviado.

-Mi amor, que bueno que llamas, me tenias preocupado, ¿Dónde estás?-

-Te aseguro que la tengo bien vigilada, mi querido amigo Smith- respondió Fáderick con frialdad, el rubio sintió un vuelco en su pecho

-¡No te atrevas a tocarla!- advirtió amenazante

-Me parece que no estás en condiciones de exigir absolutamente nada, tu tomaste la decisión después de todo, si quieres recuperarla, sabes dónde estoy, aunque no te aseguro que la encuentres siendo la misma de antes, te advierto que no se te ocurra hacer ninguna estupidez, de otro modo, tu hermosa novia tendrá que pagar las consecuencias, ¡otra vez!- colgó la llamada

El muchacho empezó a temblar y salió corriendo de la clínica sin importarle dejar botado el trabajo, mientras iba de camino, llamó a las autoridades y al personal que los estaba apoyando para llevar acabo la captura de Fáderick, el plan se había adelantado y no podían dar pie a ninguna falla, cualquier error les podría costar la vida a ambos.

Hermione estaba sentada con manos y ojos vendados, no se molestaron en cubrir su boca puesto que no había personas aledañas a ese sitio que lograran oírla

-¡Vaya, vaya!, Hermione, eres mucho más bonita en persona que en las fotografías- mencionó Fáderick mirándola de arriba a abajo

-¿Quién eres, que quieres de mi?- cuestionó ella entre sollozos muy asustada, el chico se acercó y le quitó la venda de los ojos, la castaña lo miró

-Quiero absolutamente todo de ti- se inclinó y se acercó a su rostro, le acarició la mejilla, la jóven se apartó, negándose al contacto de él, sobre su mismo asiento, el muchacho sonrió y se incorporó comenzando a caminar de un lado a otro -Créeme que no quería llegar a ésto, pero no me quedó otra opción, Jason debe saber que es lo que le pasa a la gente que traiciona mi confianza- la bruja buscaba discretamente el modo de soltarse, observó lo que tenía cerca para poder hacerlo, pero su bolso estaba tirado en el suelo y los objetos que tenía adentro regados a unos pasos de donde se encontraba sentada, entre ellos, su varita -Le llamé a tu novio hace diez minutos, ¿Cuánto tiempo crees que tarde en llagar?- preguntó sarcástico -¿Apostamos a ver cuánto le importas?- le sonrió burlón

-No le hagan daño, por favor- suplicó llorando

-Eso no dependerá de mi, sino de la respuesta que él me dé a la propuesta que le haré- le informó fingiendo sentir lástima en tono burlesco, en eso, dos de los hombres que trajeron a Hermione, subieron con Draco, el rubio estaba alterado

-¿Dónde está, dónde la tienen?- preguntaba a gritos enfurecido mientras los tipos lo sujetaban

-Tranquilo, Jason, aquí está tu princesa- reía el jóven y señaló con sus manos a la castaña, su novio la miró preocupado

-Déjala ir, ella no tiene nada que ver con ésto- exigió entre dientes mirando al chico

-Bueno, tu la hiciste parte de ésto cuando elegiste no hacer caso a mis advertencias- se acercó al Slytherin -Pero mira, te haré una última propuesta, para que veas que no soy un monstruo, de nuevo, solo quiero que trabajes para mi, algunos de mis hombres, llegan mal heridos de...- pensó un momento -algunas misiones, por decirlo así y como no podemos atenderlos tenemos que terminar con su sufrimiento, si sabes a lo que me refiero- expresó fríamente -Y tu aportación como médico nos sería muy útil, la influencia que tu novia tiene en ese bufete también nos vendría bien, incluso podríamos ser socios- sonrió -No te estoy pidiendo mucho y pueden salir muy beneficiados los dos, tendrán todo lo que siempre han querido y seguirán compartiendo su amor- hizo un ademán burlesco abrazándose a si mismo -De todas formas solo hay lugar para una respuesta, sino, tendré que acabar con ustedes de una vez por todas, no tienes opción, Smith- le hizo saber

-Fáderick, por favor, podemos llegar a un acuerdo- pidió él

-Ya tuvimos ésta conversación antes y mira a lo que me hiciste llegar- extendió sus brazos -Pero, si quieres, podríamos hacer algo más y así quedará zanjada la deuda- sugirió

-¿Qué cosa?- quiso saber Draco

-Que sea tu novia quien me pague- miró a Hermione maliciosamente, la chica le devolvió la mirada asustada y negó con la cabeza

-¡No se te ocurra tocarla!- advirtió forcejeando para soltarse de los hombres

-De hecho, ya que lo pienso, me parece una mejor forma de hacer mi ajuste de cuentas y quiero que seas testigo de cómo la hago llegar muy pronto, toma asiento, por favor - sonrió y se acercó a Hermione, los tipos sentaron a Draco en una silla y lo sujetaron con fuerza para evitar que impidiera los planes que Fáderick tenía con Granger, el tipo recostó a la leona sobre el sillón y comenzó a tocarla de una manera muy inapropiada

-¡No, suéltala, maldito infeliz!- gritaba el chico desesperado tratando de safarse del agarre

-¡Aléjate de mi, no me toques, ¡No!- exigía a gritos la muchacha completamente aterrada, intentando impedir que el chico la tocara pero al estar atada de manos, era inevitable, comenzó a besar el cuello y tocar los pechos de la Gryffindor -¡No, por favor déjame ya!- imploraba llorando a gritos

-¡Suéltalaaa!- gritó con todas sus fuerzas, de pronto, una especie de descarga eléctrica emanó del cuerpo del chico, por lo que fue imposible para los dos hombres seguir sujetándole, el muchacho cayó de la silla al suelo, alcanzando la varita de Hermione, sin un atisbo de duda, la tomó y apuntó en dirección a los hombres que ya estaban sacando sus armas para matar a Draco

-¡"Desmaius"!- la varita no lanzó el hechizo, más bien lo disparó como si fuera un cañón, la luz fue tan grande que alcanzó a los dos hombres que se encontraban de pie uno junto al otro y los aturdió, saliendo disparados casi dos metros de donde se encontraban parados impactándose en el suelo, al ver todo eso, Fáderick se incorporó de un salto y miró aterrado a Draco, el rubio sentía como si le hubiesen inyectado adrenalina, todo su cuerpo temblaba y sentía una vibración que salía de la mano en que sujetaba la varita de la jóven y se esparcía por todo su cuerpo, su corazón latía con fuerza, estaba completamente extasiado, le apuntó con la varita al muchacho y lo miró fijamente con profundo odio, éste intentó tomar su arma de la mesa para defenderse pero la serpiente se lo impidió

-¡"Expelliarmus"!- la pistola voló lejos de él

-Smith, ¿Qué diablos eres?- cuestionó con voz temblorosa asustado

-Mi nombre es Malfoy, Draco Malfoy y quiero que seas testigo de cómo yo hago mi ajuste de cuentas, maldito perro bastardo- le apuntó -¡"Crucio"!- Fáderick cayó al suelo y empezó a gritar y retorcerse, Hermione miraba todo eso llorando muerta de miedo -¡"Crucio"!- volvió a repetir empeñado en hacerle el peor de los daños a el tipo, el cual se arañaba la cara con desesperación como si quisiera arrancarse la vida él mismo -Voy a acabar contigo, perro infeliz- se acercó a él

-¡No!- gritó Hermione aterrada -¡Ya basta, tu no eres así, por favor, detente- pidió entre sollozos sin mirarle, el chico le miró y su gesto de odio cambió, volvió a mirar a Fáderick que temblaba con la mirada perdida y después de nuevo a Hermione, se acercó a ella y se inclinó de rodillas para mirarla de frente

-Perdóname, perdón, no quería que vieras ésto, no quería asustarte, no podía permitir que te hicieran daño, perdóname por ponerte en ésta situación- su labio inferior tembló y con un movimiento de varita cortó las cuerdas que sujetaban a Hermione de las manos, la chica lo tomó de las mejillas y lo miró

-No olvides tu verdadera esencia nunca- le pidió, el muchacho asintió y se besaron, de pronto escucharon un enorme estruendo que los hizo dar un sobresalto

"Petrificus totalus"!- Harry inhabilitó a Fáderick quien se encontraba de pie sujetando un arma y apuntando hacia la pareja, dispuesto a disparar, al parecer en un descuido de los jóvenes, el chico volvió a incorporarse, el tipo cayó de espaldas nuevamente al suelo completamente inmóvil, la pareja al ver todo eso, voltearon en dirección hacia donde se había escuchado la aparición y vieron que Harry no venía solo

-¡"Expelliarmus"!- Neville se encargó de desarmar a Draco, la chica sintió un vuelco en su estómago y en su pecho, miró a su rubio, quien sólo se limitó a darle una media sonrisa y a asentir con resignación, la muchacha comenzó a llorar y lo tomó del rostro para acercar su frente a la de él, ante la mirada atónita de Ron.