V
Don't call me "kid", don't call me "baby"
(O como me gusta llamarlo "El interludio")
Eadlyn 4:00 p.m
La sala de las mujeres está llena. Supongo que mamá invitó a todas nuestras amigas y aunque no es lo que tenía en mente, me pone feliz, porque ahora las necesito más que nunca.
Me reciben con alegría, mientras tomo asiento dispuesta a tomar una buena taza de té, aunque la euforia no duró mucho.
— Eadlyn, cariño— me llama mamá, delante de todas— supongo que ya pensaste en tus… ya sabes "asuntos ilícitos".
— Mamá, no creo que sea el momento— susurro.
— No te preocupes amor, ya lo hablé con todas.
¿Estará de broma? No ha pasado casi nada de tiempo desde que dejamos el estudio y ya fue por ahí a contarlo.
Le contó a Marlee y a Josie.
Y a Neena, la tía Brice, Lucy. Hasta a la tía May.
Yo no les permití que se metieran en mi vida de esta forma, pero entonces lo veo. No hay ningún tipo de reproche en sus gestos, solo apoyo. No es una broma.
Marlee me lo confirma con lo que dice después.
— Eadlyn estamos aquí para apoyarte. No quiero que pienses que no puedes hablar de esto conmigo porque soy la madre de Kile.
— Tampoco a mí me gustaría incomodarte— sostiene Josie.
— El caso es que queremos que veas el otro lado del problema— empieza mamá— sé que no es tu intención dañar a nadie pero ¿por cuánto tiempo vas a soportarlo? ¿Cuánto tiempo tomará para que te des cuenta de lo complicado que es mantener todas estas mentiras?
— No planeo mentir por más tiempo— refuto— sé que puedo para todo esto y lo haré antes de que se acabe el día. Solo es una cita.
— No puedes estar segura Eadlyn. Eso es lo que pasa con este tipo de cosas. ¿Quieres arriesgarte a vivir esta vida?¿Quieres seguir saliendo a comer con el pelo mojado? ¿o no poder ver a la cara a nadie?¿Quieres intentar llenarte de amor mil veces, en busca de dejar ir la obsesión?
»No quiero que te pase eso Eady, porque te conozco y sé que eso te dañará. Ya no pienses en Erik o en Kile. Piensa en tí nena.
— Cariño, yo sé lo que es esto— interviene Marlee, mientras me toma de las manos— . te enamoras de repente de la persona equivocada y te da tanto miedo admitirlo que por un momento piensas que es sólo un capricho. Al principio es excitante. Sólo piénsalo. Todo comienza en salones de mármol con besos robados y miradas fugaces, pero no se queda ahí.
»Pasa el tiempo y necesitan más el uno del otro. Más tiempo. Más cariño. Lo intentan conseguir en escapadas con planes elaborados y mentiras dichas a todo el mundo: "Me gusta sentarme al Sol", "Me gusta salir a correr en las mañanas". En mi caso, bueno o malo, la verdad es que nunca estaré segura, paramos a tiempo y no llegamos al punto de cansarnos del secreto. De todo lo que implica, me refiero. Pero si no nos hubieran obligado seguiriamos en un ciclo sin final.
— La verdad es que no entiendo a que quieren llegar con todo lo que me dicen.
— Eadlyn, sé que nuestro lazo sanguíneo es prácticamente nuevo— dice Lady Brice— pero todos en esta habitación te conocemos y queremos desde que eras una niña. Para mi sigues siendo una niña y no quiero que hagas tonterías buscando satisfacer a los demás. Si te quieres casera, hazlo. Si quieres abandonar la idea de la boda, por nosotras está perfecto, por eso estamos aquí. Solo tienes que tomar la decisión.
¿Que tome la decisión? Toda la mañana he estado pensando en eso, no tienen porque venir ahora a ayudarme a fingir que tengo opciones. Ahora no.
Ya no soy la que conocieron. La persona a la que están viendo ahora es la reina de Illéa y como tal debo velar por mi pueblo y mi imagen.
— No soy una niña— les respondo— y ya tomé mis decisiones. Una mujer con mi cargo no puede andar por la vida sin calcular exactamente cada paso y no puedo poner en peligro la reputación de mi pueblo. Este es mi país y debo ser el ejemplo de las acciones de los ciudadanos.
— ¿Entonces no quieres a Kile?— Me pregunta Neena. Sé que es difícil mentirle a ella especialmente, porque sabe todo lo que pasamos en la Selección.
— Claro que lo quiero — le respondo finalmente— , tanto que me duele. Pero no puedo arruinar todo esto.
— Conoces la historia de tus abuelos— me mira mamá con cierta severidad— . No quería compararla con la tuya porque sé que eres mucho mejor que Clarkson, no obstante, tienen mucho en común. Su reputación, para empezar. Los dos son severos, los dos son líderes. Y los dos tenían el poder de ser francos con la persona que los adoraba en lugar de lastimarla. Tal vez pienses que hablo de Erik, pero en realidad me refiero a Kile.
»Amberly se cortó el pelo durante la Selección para probarle a Clarkson que era sumisa ¿Lo sabías? Kile vendió su primer beso con la princesa a las portadas de las revistas para probarte que podías confiar en él. Tu abuela permitió el abuso físico y emocional a su propio hijo, sólo para que ese tipo mantuviera su imagen. Kile no ha hecho más que hablar bien de tu prometido, para que tu país empatice con él.
»No puedes lastimarlos de la misma forma Eady. Tú si eres valiente, como para admitir cuando el amor se escapa. Nosotros te criamos mejor que eso.
No me gusta que me comparen con ese tipo. Cada historia que escuchó de él es peor. Pero sé que mamá tiene razón y me estoy comportando como Clarkson.
— Me piden que tome una decisión, aunque ya lo hice. No puedo dejar que todo esto me arruine. Sé que es difícil de explicar, pero yo amo a Eikko. El país lo va aceptando al fin y no puedo decepcionarlos. Tengo que quedarme exactamente donde estoy.
La verdad es que digo todo esto al borde de las lágrimas. Josie se da cuenta y me abraza, lo que solo hace que llore de una buena vez.
No quiero quedarme donde estoy.
No quiero hacerme cargo de esto, pero tengo que hacerlo y confiar en que todo salga bien.
— A veces quedarte donde estás también es un acto de resiliencia, propio de una reina — dice Lucy.
Y yo lo sé.
No he dejado de repetirlo durante todo el día. Sin embargo, hay una vocecita dentro de mi cabeza que me dice que ya no quiere ser resiliente. Sólo quiere ser feliz.
En este capitulo intenté explicar un poco lo que piensa Eadlyn sobre todo esto, así que dejé de lado Bad Idea Right? y utilicé illicit affairs de Taylor Swift, compuesta por ella y Jack Antonoff.
Escribí este capitulo en un pequeño ataque de nervios y probablemente hay más de mí aquí que de Eady, pero en el fondo cre que es lo que ella realmente piensa en mi subconciente.
~Mund.
