Todos los personajes No son mi propiedad, todos los derechos son para la creadora Rumiko Takahashi, la historia es sin fines de lucro.
La historia es una muestra de agradecimiento para la autora, por crear tan bella serie que me sacó una sonrisa en mis momentos de soledad y aun me sacan una sonrisa.
Cap. 4 Volver a enamorarte
-Akane ¿dónde vamos? –
-Vamos a ver al Doctor Tofu, si queremos saber porque has perdido parte de tu memoria él es el único que puede decirnos –
Una presión comenzó a doler en el pecho del chico combinado con cierto enojo tras oír a su prometida- "¿Qué es este dolor? ¿Por qué hacerme la idea de que mi prometida busque al doctor o cualquier hombre me enfurece?"-
-¿Qué te pasa?- la chica lo estuvo observando enseñando notó algo mal
-Nada- no la volteó a ver
-¿Qué tienes?-
-Nada- dirigió su mirada de lado opuesto a su prometida
-Dime ¿qué tienes? –
-Nada- dijo molesto alzando su voz
La pareja había llegado al consultorio, Akane decidió ignorar el comportamiento del pelinegro, dedujo que su actitud se debía a su pérdida de memoria.
-Buenos días- dijo entrando al consultorio
-Akane que alegría- dijo contento al ver a su paciente más leal- pero ¿qué haces aquí? No deberías estar en la escuela.
- Bueno solo vengo de acompañante, Ranma es quien necesita verlo- dijo señalándolo
- Hola Doctor Tofu- sonriendo a la fuerza, no le resultaba agradable la amabilidad entre ambos, enseguida dejó de pensar en ello- "¿Por qué debería estar molesto? El doctor ha sido muy amable conmigo"-
- Hola Ranma, por favor pasen al consultorio- dijo entrando a la sala de revisión- Bueno diez centavos ¿qué te pasa? –
- Bueno… yo…- chico no sabía cómo responder-
- Si dice "nada" yo misma le digo al doctor- dijo molesta a su prometido
- Esta bien, al parecer he perdido la memoria, pero solo no me acuerdo de ella- señaló a la peli azul
- oh, ya veo, al parecer ahora te tocó a ti la técnica de shiatsu, déjame ver- el doctor revisa la cabeza del joven en busca de evidencia del champú, pero nada, prosigue olfateando la cabeza del chico
- Oiga, pero ¿qué hace? - dijo asustado por el acercamiento del doctor
- Busco evidencia del shampoo N° 110 pero nada tu cabello ni siquiera huele a ese shampoo- los chicos lo observaron esperando respuesta- Lo lamento, no tengo ni idea él porque has perdido los recuerdos de Akane- colocó su mano en el hombro del chico en señal de apoyo
El pelinegro miró al doctor, luego a su prometida, para bajar la cabeza.
-Ranma ¿sigue entrenando? - dijo el doctor
- Si- alzó la cabeza para verlo
- Tengo unas vendas que te podrían servir- miró a Akane- Akane podrías ir por ellas están en el otro cuarto dentro del vitral, porfavor-
- Si claro doctor- dejó su mochila a un lado y salió del cuarto
- Ranma, enserio ¿no recuerdas nada sobre Akane? – dijo colocándose enfrente del pelinegro mirándolo a los ojos
- No nada- dijo agachando la mirada- solo sé que vivo en su casa hace más de un año y estoy comprometido con ella-
- ¿Cómo sabes eso? –
- Mis amigos me lo dijeron-
- Pues es verdad, estás comprometido con ella desde antes de su nacimiento, pero ¿qué opinas de ella? –
El pelinegro se quedó callado unos segundos hasta que se decidió hablar- bueno yo… tomó una bocanada de aire- en el momento que la vi, sentí que ya la conocía, ella es bonita, es comprensiva, inteligente me ayudó a no ser castigado y tiene una increíble fuerza losé porque hace rato me empujó hasta la pared- un tono carmín emergía de las mejillas del chico, se sintió apenado, pero a la vez libre de forma extraña como si esas palabras se estuvieron guardando por mucho tiempo
El doctor entusiasmando al escuchar al chico, pero la curiosidad lo mataba y con mucha cautela lo miró a los ojos y le dijo - ¿Te gusta? –
El pelinegro se quedó pensando – Creo que sí, pero no recordar nada de ella como cuando nos conocimos, nuestras citas, el momento en el que me enamoré de ella, nuestro compromiso, no lo sé, ¿no estamos muy chicos para casarnos? – deja salir un sonido de frustración- me molesta no recordar nada –
-Bueno si te hace sentir mejor- coloca su mano en el hombro del chico- tal vez esta sea otra oportunidad-
- Oportunidad ¿de qué? – dijo molesto
- De volver a enamorarte de ella-
El chico dio un pequeño salto de impresión y abrió sus ojos como platos- "Volver a enamorarse… ¿eso es posible?" – bajó su mirada- "Pero ¿qué tal si ella ya no quiere el compromiso? ¿no la lastimaría? Y si ella quisiera ¿ella esperaría? ¿qué tal si ya no puedo llegar a ser el mismo? Y ¿si ella ya no? ¿Quiero?" – llevo sus manos a su cabeza, sentía más angustia al hacerse más preguntas
-No te atormentes con muchas preguntas ahora- el chico miró al doctor, al parecer es muy fácil de descifrar- deja que todo vaya a su ritmo, como te dije una vez, Akane puede llegar a ser muy gentil- El sonido de la puerta abriéndose despertó al artista de sus pensamientos
- Regresé, disculpen la tardanza- entró al cuarto, cerró la puerta y dirigiéndose al doctor- aquí tiene, me tardé porque había muchas medicinas sobre las vendas
El chico dio un brinco, desvió la mirada para ocultar sus rosadas mejillas, al final esperaba que la chica no lo oyera.
-Muchas gracias- el doctor toma las vendas y se las entrega al joven- Aunque no hay evidencia de algún golpe tal vez con el tiempo logre recordar algo- dirige su mirada a Akane- Será mejor que te lo lleves a casa-
- Si doctor- ambos se dirigen a la puerta y salen del consultorio- muchas gracias doctor, nos vemos- la peli azul comenzó a andar por detrás la seguía el trenzudo
- Oye Ranma- el chico dirige la mirada al doctor- recuerda lo que hablamos- el chico asiente y finalmente se pierden de la vista del doctor
Ambos caminaban en dirección al dojo, sin pronunciar ninguna palabra, a veces sus miradas se encontraban una pequeña incomodidad inundaba rápidamente el cuerpo de ambos, por lo que devolvían sus miradas al camino, un pensamiento provocó que la peli azul se detuviera en seco, el chico la vio y se colocó al frente de ella
-Ranma, ¿recuerdas lo que hablamos ayer? - la irada de la peli azul había cambiado, había una enorme tristeza y preocupación, el chico dio un paso a ella
-No, lo lamento- no le quitaba los ojos de encima, una presión en el pecho inundó al trenzudo- "Aun no recuerdo nada de ella y ya le causa dolor… No… no me gusta verla triste"- Solo…- la chica levantó la vista para verlo a los ojos- Solo recuerdo haber hablado con alguien, recuerdo haberme sentido mal que salí a correr- al chico de pronto le asaltó una duda, que se acercó más a su prometida- Akane… acaso… ¿tú y yo ¿peleamos anoche? Colocó sus manos en los hombros de su prometida, esto a la chica le provocaba cierta vergüenza provocando el tono carmín en sus mejillas, pero al mirarlo estaba dispuesta a contarle todo, pero ese todo daba hacia su compromiso, tomó una bocanada de aire.
-Si- bajó su mirada arrepentida de haber divo una sola palabra, pero él necesitaba saberlo- si ayer peleamos-
-Pero ¿por qué? – su preocupación era de lo más sincera- Akane…- Levantó su mano acariciando la mejilla de la chica que le gustó a primera vista, sus miradas se encontraron dejando de lado su alrededor, solo el latido de su corazón y de pronto sentir la respiración. del otro contra sus rostros, acercándose más
-Ranma- un tenedor se acercó peligrosamente a ellos, provocando que ambos se separarán de inmediato- Ranma aléjate de chica violenta- dijo la cocinera desde su bicicleta
- Shampoo, deja de atacar a la gente así- dijo el trenzudo- un día podrías lastimar a alguien- se acercó a su prometida- Akane ¿estás bien? –
-Si- la chica se impactó ante tal preocupación de su prometido
-Chica gorila deberías rendirte y dejar a Ranma para irse con Shampoo- dijo la cocinera
-Ya estoy harta- la peli azul se acerca a su contrincante furiosa por el comentario- Sabes no puedes obligar a Ranma a irse contigo, ni siquiera sabes si es lo que él quiere- señaló a Ranma
-Mi Ranma no tiene opción, ser su prometida de mi Airen leyes dictan irnos a China a casarnos y tener muchos niños fuertes, por lo que chica gorila no poder molestar al fin y acabo Ranma no recordar a chica violenta- dijo la cocinera con gran orgullo
Akane se molestó mucho que su aura de combate se notaba hasta que sintió un peso en su hombro, era su prometido que estaba sujetando su hombro para cuando ella lo notara ya se encontraba entre la cocinera y ella.
-¿Cómo sabes mi pérdida de memoria? – el trenzudo se acercó de forma intimidante a la cocinera sin dejar de proteger a su verdadera prometida- Shampoo ¿Cómo sabes que no recuerdo a Akane?-
-Yo… no decir nada- la cocinera voltio su cabeza con el ceño fruncido y cruzando los brazos
-Me acabas de decir que fuiste tú, dime ¿qué hiciste? ¿Y cómo revertirlo? -
- Shampoo no saber nada- la cocinera lo miró aun con el ceño fruncido, pero dejó de hacerlo para un intento más, lo abrazó con fuerza- Ranma yo ser tu prometida, tú y yo ser muy felices, yo ser buena cocinera, yo preparar cualquier cosa, Ranma tu ser mío- la cocinera tenía un rubor y un brillo en los ojos que desaparecieron cuando Ranma lo apartó del brazo
-Shampoo, ya te lo he dicho muchas veces, no me iré contigo a ninguna parte- las dos chicas quedaron asombradas ante esa confesión- No importa cuántos platillos prepare, no me iré- dijo con determinación- ríndete de una vez y diez centavos ¿qué hiciste y cómo resolverlo? -
Una inmensa furia se apoderó de la cocinera – Yo no decir nada, serás mío de cualquier a cualquier costo, solo tengo que esperar para que te des cuenta que soy mejor que chica violenta- la cocinera echó a andar su bici alejándose de la pareja
El oji azul susspiró al no tener respuestas, como si ya fuera un día pesado ahora tendrían que enfrentar a Shampoo de nuevo, necesitaba saber cómo logró acabar con los recuerdos de su prometida, voltio a verla, la sorpresa de aquel momento se notaba en la expresión de su cara
-Nos vamos- dijo el pelinegro, la chica sintió en un rápido movimiento tomo la mano de su prometida- Vámonos hoy ha sido un día largo- "Su mano es pequeña y muy suave"-